Time Travellers capitulo cuatro

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Acabo de enterarme de una bomba, ya sé el motivo del mal humor de Piero. Tenía sed y me he levantado a beber algo, entonces he oído como Judith y Daniel cuchicheaban algo en la cocina. Primero pensaba que era sobre la nave, por eso no he hecho ruido y me he quedado escuchando a escondidas. Sí, sé que está mal. Denunciadme. Resulta que ayer Judith pilló a Lisa y a Pikelton besándose, y no en plan beso de amiguitos, sino del rollo pasional. Pensé que Lisa salía con Arthur. Arthur es un capullo, entre Arthur y Pikelton, me quedo con Pikelton, no es que sea muy simpático pero no parece estar encantado de haberse conocido así mismo como lo está Arthur.

Supongo que Judith se lo contó a Piero. Aún no sé porque Judith se lo cuenta todo a Piero, si sabe que después se pone hecho una fiera. Así que esa es la razón porque saltara con Lisa. No le ha hecho gracia que se besara con Pikelton. La verdad no lo entiendo. Lisa es bien libre de besar a quien quiera es mayorcita. Y después de besar a Arthur hasta besar a un sapo sería mejor.

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Salto, estamos en el siglo XXI otra vez, pero diferente año y diferente país. Yo creo que acabaremos dando con ello, pero en el proceso nos vamos a volver locos, al menos ya no estamos en 1952.

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2005 Tokio, me gusta, no está mal, comparado con Austin 1952 esto es el paraíso. Judith y Chen están conmigo.

Judith es traductora y Piero hace diseñador de páginas web. Ambos pueden trabajar desde casa y solo van dos días a las oficinas de la empresa para la que se supone que trabajan. Así pueden dedicar más tiempo a reparar la nave. Por supuesto Daniel, escritor investigando para su novela.

Piero ha empezado a vigilar a Pikelton como un perro de presa. Es incomodo hasta para mí. Lisa y Pikelton actúan como si no se dieran cuenta de las paranoias de Piero, pero es imposible que alguien se pueda sentir cómodo siendo observado y vigilado casi las 24 horas del día. Cuando no es uno, es él otro, y jamás los deja a solas. ¿Acaso Piero creerá que Lisa aún es virgen?

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¿He comentado ya alguna vez lo capullo que es Piero? Pues si no lo hecho, lo hago ahora. Piero es el capullo más capullo del mundo mundial.

Chen y yo estábamos solos, y nos aburríamos un montón, así que decidimos salir a dar una vuelta, básicamente a recabar información sobre la cultura japonesa de principios del siglo XXI. Y no hay nada como un centro comercial, para recabar información sobre los jóvenes de una sociedad. No tenemos la culpa que estos jóvenes, sean aficionados a los juegos. No es culpa de Chen ni mía, son ellos. Nosotros solo hacíamos lo que el protocolo manda, actuar como la mayoría y no llamar la atención.

El hecho es que se nos echó el tiempo encima, pero aún así estábamos mucho antes del toque de queda en casa. Eran las siete cuando entrábamos en casa y Judith fue a abrazar y besuquear a Chen como una loca. Yo en cambio me llevé un bofetón de Piero.

En principio, solo íbamos a salir un ratito, íbamos a volver antes que ellos, así que pensamos que no era necesario avisar que habíamos salido y donde estábamos. Sí, lo sé, el protocolo también establece que no podemos salir solos y que debemos comunicar nuestro paradero siempre. No soy idiota, solo que…se me olvidó.

Cuando Judith acabó de llorar, besar, abrazar a su bebé. Chen ya tiene 10, alguien debería decirle que es hora que dije de tratarlo como a su bebé. Empezaron los reproches, y de repente todos se giraron hacía mí, como si hubiera raptado a Chen. Que conste que la idea fue de Chen. Yo le acompañé porque aún le falta horas de experiencia para ir solo. Vale, también me apetecía ir. Pero la idea sigue siendo de él. Y todos allí estaban dispuestos a colgarme sin ser ni siquiera juzgado. ¡Qué digo! ¡Sin ser ni siquiera escuchado! Menos mal que Chen empezó a habla, y a Chen sí que lo escucha todo el mundo. Y menos mal que Chen es legal y les contó la verdad, que había sido idea suya y que yo solo le acompañé. Bueno, eso último no era del todo cierto, yo me lo pasé pipa también, pero Chen me echó ese cable, porque Piero ya tenía la correa en la mano.

Vale, su discurso no me libró de la correa de Piero, pero sí que me libró de que me sacara la piel a tiras, sé que planeaba hacerlo. Lo malo, es que su discurso le valió una buena zurra. No fue Piero, fue Judith, y fue solo con la mano. Pero no miento cuando digo que Chen el pobre se llevó una buena zurra también. La mano de Judith es temible, lo sé, cuando éramos más pequeños a Gabriel y a mi solía darnos alguna que otra zurra y no era moco de pavo.

Así que aquí estamos Chen y yo con el culo más rojo que un mandril y confinados en la habitación hasta nueva orden.

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¡Pillada monumental! Ayer a la noche hubo corredizas por los pasillos. Piero en una de sus ahora “habituales rondas” pilló a Lisa intentando entrar de la habitación de Piero. Después de lo que claramente sonaron como 6 palmadas, mandó a Lisa a su habitación. Al cabo de una hora y media, Piero hacía su propia incursión a la habitación de Lisa, pero Piero se había apostado en el pasillo y cuando Pikelton giró la esquina y se encontró a Piero de pie, de brazos cruzados y con cara de pocos amigos (sé muy bien cómo es mi padre, no necesito verlo para saber cómo estaba) tragó saliva e inventó una excusa barata para justifica que hacía ahí a esas horas. Piero ni lo escuchó solo le indicó con el dedo que regresara a su dormitorio.

Si pensáis que la cosa acabó aquí, os equivocáis esta mañana a las cinco menos diez, Lisa intentó una nueva incursión. Que acabó justamente como la primera con Piero cabreado y con Lisa con 5 palmadas más.

Así que esta mañana durante el desayuno, se ha instaurado una nueva norma. No está permitido las visitas nocturnas de ningún tipo. Y las puertas de las habitaciones deben permanecer abiertas siempre. Gracias hermanita, de verdad, gracias. Ya es duro compartir la habitación con un mocoso de 10 años, pero ahora con las puertas abiertas, nadie tendrá ningún tipo de intimidad. ¡Ah, sí! las puertas de Judith, Piero y Daniel esas sí que pueden estar cerradas, ¡Cómo no!

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Sabotaje

Esa es la palabra del día. La nave ha sufrido sabotaje. Chen me lo ha dicho en secreto esta mañana. Él sabe que yo no he sido. Bueno según él requiere unos conocimientos muy avanzados. Que por supuesto el bobo de su hermano Wendolin no tiene. Pero dejando mi pobre ego a aparte. Hay un saboteador entre nosotros, vale no somos ni Gabriel ni yo, ambos somos “tontos”, Chen tampoco, no me lo habría contado sino, además es Chen. Es Pikelton, tiene que ser él, nadie del clan sabotearía nuestra propia nave. No estando pendientes unas vacaciones tan largas, como lo estaban.

Me tengo que ir a la escuela después me conecto.

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Bueno ahora que sabemos que todo ha sido cuestión de un saboteador, también sabemos que hay que hacer para hacer que la nave acabe de funcionar bien. Chen nos dio la pista con la fuente de energía. Pero no era la fuente, sino la energía en sí. La energía ha estado siendo corrompida desde que intentamos la primera vez regresar a casa. Como explicarlo, es como si te compras un coche super chulo, con un motor muy potente y que va super bien, y en vez de gasolina para que haga la mezcla que de la chispa que enciende el motor, le metieras carbón. Si el carbón produce energía, pero no en un coche que va a gasolina. La metáfora es muy bestia, y sé que no es exactamente así de sencillo, pero Chen me lo ha explicado así. Y si yo lo entendido, seguro que vosotros también.

Así que mientras Judith, Daniel y él miraban cada componente de la nave al milímetro y lo probaban y lo volvían a probar. El problema no estaba realmente allí, sino en la energía que alimenta la nave. Ahora se ve muy lógico, pero no lo debía de ser tanto cuando ninguno calló en ello.

Por cierto después de esta clase didáctica sobre funcionamiento de naves del espacio/tiempo. Solo queda decirme que ahora todos somos sospechosos. Lo peor es que sé que nadie sospecha de mí. Es un poco insultante ¿Sabéis? Porque sé que si nadie sospecha de mí no es por mi pocas horas de experiencia, ni por que sea un tipo bueno y legal, sino porque nadie me cree tan listo como para poder sabotear de esa manera una nave. Una cosa es dejarse una pizza olvidad y otra bien distinta es ingeniase una forma de sabotear una nave sin que se den cuenta que se trata de un sabotaje.

Me voy a dormir.

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Son las dos y no puedo pegar ojo. Tranquilos ya se me pasó la tontería de “no valgo para anda, nadie me quiere”. He estado dándole vueltas todo el rato. No entiendo porque sigue la ley del silencio. Es obvio que el saboteador es Pikelton. Repasemos. Chen no es, es el tipo más legal de todos los tiempos y de todos los lugares. Y tenias que ver lo excitado que se puso cuando descubrieron que se trataba de un sabotaje y no de un fallo propio de la nave. Gabriel, como decirlo de una forma suave, utiliza todos sus músculos menos el del cerebro. Ese lo tiene intacto, nuevecito, a estrenar, kilómetro cero, ¿No sé qué más deciros para que os hagáis a la idea? Diría que es incluso más tonto que yo, vaya. Además es muy bruto, él le hubiera dado un cabezazo o le hubiera disparado o hubiera arrancado unos cables, no sé, ese grado de sofisticación no es propio de Gabriel.

Después vengo yo, yo no he sido, eso es fácil. Después viene Lisa. Lo cierto es que Lisa sí que es tan lista como para planear algo así de ingenioso. Y Lisa no es tan legal como lo es Chen. Es buena, es mi hermana, pero en el pasado no le había importado que Piero nos endosase sus marrones para que ella pudiera hacer lo que quería. Pero aún así, me cuesta imaginarme a Lisa saboteando nuestra nave. Claro que ¿quizás no quería regresar a casa para no encontrarse con el arrogante de Arthur? Es una buena razón, yo lo haría. Pero es Lisa, no, no puede ser ella.

Después viene Daniel. Daniel no puede ser tampoco. Es un caradura, un vividor, un mujeriego, un “viva la virgen” y vale no es mucho de fiar si hay dinero de por medio y no tiene muchos valores. Pero precisamente el clan es uno de los pocos valores que sé que tiene. Jamás haría nada que pudieran perjudicar lo más mínimo a Judith. Lo que nos lleva a Judith, la nave es su bebé, bueno Chen es su bebé, pero la nave es su bebé. Yo ya me entiendo. Preferiría que le cortasen un brazo a que alguien le hiciera el más mínimo daño a su nave.

Para Judith la nave es nuestro hogar, al fin y al cabo somos el clan que somos gracias a esta nave. La nave es lo que empezó todo. Si Judith no se hubiera presentado voluntaria para ser un time-traveller y no hubiera obtenido las cualificaciones más altas jamás alcanzadas en la academia, y no le habrían dado jamás esta nave. Habría pasado ser el segundo de abordo u oficial científico de cualquier otra nave. Pero no esta nave es un reflejo de lo que es Judith. Judith y la nave son lo mismo, eso lo sabemos todos.

Piero, Piero es un capullo, pero es un capillo romántico. Gracias a la nave conoció a Judith, Y él también ve a la nave como nuestro hogar. Es el lugar donde hemos nacido tres de nosotros. Y ya he dicho que es un capullo romántico. Pero sobre todo sabe que si dañara adrede la nave, Judith jamás se lo perdonaría. Y a diferencia de Judith, es obvio que Piero no sobreviviría sin Judith, acabaría haciéndose matar en alguna misión. Así que ni en broma pondría en riesgo eso. Piero tampoco ha sido.

Lo que nos lleva a Pikelton. Y nos lleva a él por exclusión, Y porque tiene que ser él. No puede ser alguien del clan. Ninguno de nosotros sabotearíamos nuestra nave. No aposta.

Apago, Piero debe de estar a punto de pasar en su ronda “ahora habitual” jajaja

Al menos hay cosas que no cambian,

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Otra vez corredizas en los pasillos. Lisa no aprende, de verdad tan lista para algunas cosas y para otras… tan tonta. Está claro que las mujeres de este clan cuando se trata de hombres se les apagan el cerebro.

Mañana no voy a poder levantarme

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