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martes, 25 de febrero de 2014

Todos somos culpables (Feliz Cumpleaños Fanny)



Todos somos culpables (Feliz Cumpleaños Fanny)

Hace 26 años atrás…                          
Era un sábado como cualquier otro, los Hoffman pasarían la tarde en el C. Comercial, pero Sara de repente se sintió muy mal, y tuvo que ser llevada de emergencia a la clínica por un cólico nefrítico, con toda la tropa: Luis (14), Mario (13), Edward (11), Mark (10) y Max de (2 y medio).
Después de un par de horas de espera, tras examinarla, y darle tratamiento, y un calmante a Sara, le indicaron a Samuel que podía pasar a ver a su esposa. Y así, lo hizo, no sin antes encomendar a los chicos, en especial a Luis, de estar pendiente de los más pequeños sobre todo de Max.
Samuel: Luis, por favor pendientes de tus hermanos.
Luis: Pero papaaaa.
Samuel: ¡PAPÁ, NADA!… necesito me hagas caso LUIS, y por favor, no le quites el ojo a Max.
Luis: Papaaa, ¡llévate por lo menos al peque!.
Samuel: Hijo, tu mamá le dieron un sedante, seguro está dormida, conoces a Max… por favor hijo.
Chicos, sin separarse de Luis, los abuelos, están en una tranca, en lo que lleguen nos iremos a casa.
Edward: Papá yo quiero ver a mi mamá.      Mark: Y yoooo.
Mario: Si, papi de aquí NO, nos vamos sin ver a mamá.
Max: ¿Y ma mi? Pregunto el peque con una bella carita, y su osito abrazado.

Samuel: Mami, está enfermita mi peque, así que necesito que te portes muy bien, y le hagas caso a tus hermanitos, sobre todo a Luis. ¿Si?
Max: ¡Chi! Casho a Yuis.
Mark: Papi, tengo hambre.
Samuel: Ahh.. mis amores, lo siento. ¡Es verdad!, tomen dinero compren algo, pero necesito que no vayan todos, por sí sus abuelos llegan.
Mario: Yo, voy papi              Edward: Yo lo acompaño.
Les dio dinero y entro a la habitación, Luis tenía a su hermanito cargado, pero este quiso que lo bajara, en ese momento pasaron varias enfermeras y un médico corriendo a una habitación cercana, Mark vio como atendían a una persona mayor, prácticamente como le salvaban la vida con resucitación, y se dispersó maravillado por toda la escena, los equipos y la felicidad de los familiares, después del susto, etc….y se quedó viendo todo.
En unos segundos llegaron más familiares entre esos, una amiguita de Luis, llamada Ada al verse fue inevitable no ponerse a conversar, sobre todo, de porque están allí. Max se tomó de la mano de Edward, al ver que Luis no le paró más.
Mario y Edward, decidieron ir al segundo piso al cafetín de la clínica, se llevarían a Max, pero al llegar al ascensor, el peque decidió ir con Luis, soltando a Edward.
Mario: Max, quieres quedarte con Luis.                  Max: ¡Chi! Yuis
Edward: ¡LUIS!     Mario: Ed, SHHH…no grites, nos van a regañar.
Luis, miro a sus hermanos, desde la punta del pasillo, y vio como le hacían señas señalando a Max, inmerso con la conversación con Ada, el entendió que ellos se llevarían al peque, y no que el peque se quedaría con él. Max, dio unos pasos hacia Luis. Mario y Edward, se montaron en el ascensor, despidiéndose de su hermanito, hasta que se cerró. Max…abrió los ojos, y llamo a Luis, pero este ni lo escucho, hizo un puchero de enojo, en ese instante el otro ascensor se abrió, y Max decidió ir tras sus hermanos. El ascensor venia vacío, así que termino en PB de la clínica, caminando directo a la salida de la misma.
Fanny se despidió de Luis, y este miro a su alrededor buscando a Mark, inmediatamente se angustio al no verlo, Mark debía estar sentado a su lado… ¿Dónde coño estaba? pensó … ¡Lo mato!, Y estaba… a punto de colapso cuando lo vio, que regresaba del ala este.
Luis: Grrrr, PAPÁ DIJO, QUE NO TE SEPARARAS… ¡Se lo voy a decir!
Mark: ¡DILE!… y yo le dijo, que ni cuentas te distes porque estabas hablando con una niña. ¡Estúpido!.
Luis: Siéntate…         
Mark: ¡NO! Y camino otra vez al pasillo, pero sin alegarse demasiado.
Cuando Mario y Edward, llegaron con chucherías para todos, vieron a Luis sentado molesto y aburrido, mientras Mark caminaba por todo el largo pasillo viendo las habitaciones que estaban semi abiertas. 
Luis, inmediatamente vio que no tenían a Max, y se levantó como un resorte de la silla con el corazón en la boca.
Luis: ¿Y MAX?
Mario: Como… ¿qué y Max?…. Lo dejamos contigo.
Luis: No…no…NO, ustedes se lo llevaron.
Edward: ¡NO!, yo te llame y Mario te hizo señas que se quedaba contigo.
Luis: AYY DIOS… yo les entendí que se lo llevaban… PAPA ME VA A MATAR…NOS VA A MATAR
Mark: ¿Qué pasa? Corrió a donde sus hermanos.
Mario: Que Luis, descuido a Max, y ahora no sabemos dónde está…Papá nos va a matar.
Edward: Eyyy habla en singular, yo aún…. no me recupero de ayer.
Luis: ¡Rápido!, busquemos por todos lados, debe estar en este piso.
Los chicos soltaron las chucherías y bebidas sobre las sillas y comenzaron a buscar a su hermanito por todos lados.
Mark, comenzó a llorar y Edward estaba a punto.
Mario: Ahh, NO… no se pongan a llorar.... sigamos buscando.
Mark: buuuuaaa y sí, se lo llevo a alguien….
Edward: ¡Luis!, avisémosle a papá, el sabrá que hacer….ish ish.
Luis: ¿QUÉ?, NOOO… sigamos buscando.
Mario: Y ¿sí comenzamos a preguntarle a las enfermeras o a la gente si lo ha visto?.
Luis: Si, hagamos eso…
En eso escucharon el sonido característico del ascensor “PLIM”… y todos se vieron pensando que su hermanito se había montado en él.
JODER, era una de las clínicas más grandes de la ciudad…estaban fritos.
EN PB
El peque caminaba directo a la salida, cuando un vigilante lo paro sin brusquedad, más bien con cariño, esperando que los padres del pequeño estuviesen cerca.
Vigilante: Hola bebe… ¿Cómo te llamas?        Max: Mass Osma.
Vigilante:¿Cómo?       Max: MASS OSMA.
Vigilante: ¿Max?       Max: Chi, le dijo sonriendo.
El pobre vigilante no le entendía el apellido, y se percató que el niño, estaba solo.
Vigilante: ¿Qué edad tienes Max?      
Max: Achi… y mostro sus dos deditos
Vigilante: Waoooo, que grande ¿Y tú mami o papi?     
Max: Mami, femita…papi allá… señalo con su dedito.
Vigilante: Y si tu papi esta allá con tu mami, ¿por qué vas para allá? Le pregunto para distraerlo mientras lo acercaba despacio a la recepción.
Max: Edu … Maio… e´manitos.
Vigilante: jaja buscas a tus hermanitos.. ya.. ¡Oye! Si te dejas subir, le dijo señalando el escritorio de la recepción de la clínica. Llamamos a tu papi y hermanitos ¿Si?
Max: ¡CHIII!
ARRIBA EN EL PISO 4
Los chicos iban a correr al ascensor a comenzar a buscar por todos los pisos, cuando Samuel salió de la habitación.
Samuel: ¡Eyyy ¿QUÉ PASA?.... ¿Y MAX? Grito mirando alrededor de los chicos hasta giro en su propio eje, los cuatro niños voltearon con una cara de terror. Mark, llorando, Edward lloriqueando, Mario asustado y Luis, más pálido entre miedo por su hermanito como por el miedo de su padre.
Samuel, apresuro el paso hacia Luis.... el chico estaba aterrado.
Luis: Papi… lo perdí…. Lo siento, ish ish no sabemos dónde está, ish ish lo hemos buscado por todos lados, en este piso no esta….ish ish… lo siento… Corrieron las lágrimas de Luis.
Samuel: ¡LUIS ENRIQUE….! TE DIJE QUE NO LE QUITARAS LOS OJOS DE ENCIMA… le dijo levantándole la mano, Luis, solo cerro los ojos encogiéndose de los hombros, esperando …tal vez que su padre le volteara la cara, pero Samuel, no sería capaz de ello. Respiro profundo y lo abrazo fuerte contra su pecho, necesita un segundo para pensar, a pesar de lo aterrado que estaba.
Samuel: Luis, hablaremos de esto luego, Quédate, con Mark y Edward, los cuales ya lloraban también, y dijeron un lo siento en coro.
Edward/Mark: Lo sentimos…buaaa buaaa
Samuel: Lo encontraremos niños, le murmuro con una zozobra  que lo estaba matando. Mario, ven conmigo.
Mario: Si, papá. Dijo tragando grueso.
Corrieron y bajaron por el ascensor, esos 4 pisos se hicieron interminables.
Mario: Papá todos somos culpables… no solo Luis. Dijo, mirando a su padre, quien tenía una mirada ida, una respiración entrecortada, se pasaba la mano, por la cabeza y por la boca. Samuel, solo vio a su hijo con angustia.
Cuando abrió el ascensor corrieron a la recepción a preguntar dónde podían dar aviso a la vigilancia, y ahí estaba Max, sentado en encima del escritorio, haciendo reír a la recepcionista y al vigilante, la chica estaba a punto de anunciar por micrófono, que tenían a un niño en la recepción, cuando….
Max: PAPIIIIIII… MAIOOO se escuchó por los parlantes de toda la clínica. Pues, Max le había quitado el micrófono justo unos segundos antes a la recepcionista, y justo antes de ver a Samuel.
En el piso 4, Luis, Edward y Mark respiraron, mirando el parlante del pasillo como si hubiese sido un televisor, habían reconocido la voz de su hermanito.
Luis/Edward/Mark:  ¡MAX…! Dijeron en coro, con alivio.
Samuel: ¡Maxwell! Que susto me has dado peque. Corrió a abrazarlo, y darle besos. El enano, lo abrazo fuerte, y le dijo: ¡Te amo!
Samuel: ¡Debería darte pao pao Max!, por escaparte de Luis.
Max: Ahh bebe no…a  Yuis, Edu, Maky y ete.      
Mario: Eyyy, yo Mario…como que este.
Samuel: JAJAJA…. Es verdad mi peque, a tus hermanos, le voy a dar pao pao, por no cuidarte. Después de agradecer a los trabajadores de la clínica, por encontrarlo y cuidar al enano, se dirigieron al 4to piso.
Subieron, y los chicos corrieron a abrazar a Max, sus caras de angustia se habían borrado, ahora todos alegres por ver que él bebe estaba perfecto, es más, él nunca se sintió en peligro.
Luis: ¡perdón!, ¡hermanito… perdón…! ¡sabes! Estoy bravo contigo, por escaparte, eres terrible. Dijo Luis, pensando que la podría colar a sabiendas de que el enano, no se expresaba muy bien, y a veces no se le entendía.
Max: Yo Mass no terri, Yo bavo… tú con chacha,… no con bebe. Dijo, cruzando sus bracitos. Le dijo, condenándole el trasero a su hermano mayor.
Luis, abrió los ojos… pero trato de hacerse el loco.
Samuel: No le paraste a tu hermanito, por una muchacha. ¿Cuál muchacha LUIS ENRIQUE?
Luis: Una…. del ….colegio, papá dijo bajando la cabeza.
Samuel: En casa me contaran “TODO” SEÑORITOS. Pero ahora, vamos a ver a su mamá. Todos asintieron con la cabeza, con una punzada en el estómago.
Una vez a dentro… los chicos corrieron a la cama de su madre.
Samuel: Cuidado niños, con cuidado.
Sara: Mis amores, ¿por qué esas caritas?
Chicos: ¡Nada! Murmuraron aun asustados, el único feliz era Max, a quien Samuel, alzo sentándolo con mucho cuidado al lado de Sara.
Max: Mami… femita. Le dijo colocándole una manito en la cara de Sara.
Sara: Ya, mejor bebe, le dijo devolviéndole el gesto. Y … se puede saber…. que hacia mi angelito, hablando por los parlantes de la clínica…. ¿Samuel?
Samuel: Un cuento de terror que tuvo un final feliz, casi que  colocan una cama a tu lado, por el infarto que casi sufro, los detalles los desconozco aun, pero los aclarare cuando lleguemos a casa amor.
Sara: En casa no, mejor aquí… ¿Luiiiiiis? Le dijo mirándolo, imaginándose lo sucedido. Luis se acercó a su madre, muy asustado.
Luis: Lo siento mamá, te juro que no volverá, a pasar…. ¡en serio, mamita!
Sara: ¿Que paso cariño?
Luis, procedió a contar todo, que se había entretenido con su amiga y que le había entendido que sus hermanos se llevarían a Max, que también había perdido a Mark unos minutos, y que por miedo no había avisado a su padre a pesar de que Edward, lo había indicado.
Samuel, frunció el ceño, y se acercó peligrosamente.
Los demás chicos, tragaron grueso. Eso seguro los salpicaba a todos, a Mark por alegarse, a Mario y Edward, por no entregar al peque en las manos de Luis…. Y a todos por ocultarlo, habían perdido minutos preciosos.
Samuel: Cuando lleguemos a casa, mi mano tendrá una seria conversación con tu trasero, sobre la obediencia y la responsabilidad. Le dijo, muy serio, Luis coloco su peor carita de miserable, que podía. Sin embargo, Samuel lo giró y le dio unos azotes fuertes, un pequeñito preaviso, de lo que le esperaba en casa.
ZAS, Auu ZAS Ayyy ZAS papá aquí no… Ayy  ZAS en casa…ish ish ZAS Auuuuu.
Luis, se sentó en la silla que estaba al lado de su mamá y coloco su cabeza, en la cama, y se puso a llorar bajito, Sara le acaricio el cabello.
Samuel: ¡Mark! Ven acá… ¡Sabias perfectamente, que no debías alegarte de tu hermano!.
Mark: Papiiii….yo…yo… estaba viendo… a…ish ish a los médicos….
Sara: ¡Samuel! Amor…le dijo mientras aun mimaba a Luis, quien lloriqueaba por lo que le esperaba en casa.
Samuel: prefiero cobrar las pequeñas faltas delante tuyo, para que los consueles.
Samuel: ¡MARK! No te vuelvo a llamar.
Mark: ¡NOOO!    Sara: Marky, has caso mi cielo… Pero Mark, nada.
Samuel, se acercó lo tomo del brazo, pensaba solo darle una buena nalgada pero por desobediente le dieron tres.
ZAS….Ayyyy te dije sin separarte de tu hermano.
 ZAS, ZAS…buaaaa buuaaa, cuando te llamo me obedeces ¿Entendido? …Si… papi…buuuaaaa buuaa.
Samuel: Shhh Shhh, ya, Marky ya…no fue para tanto. Y el niño corrió a donde su madre, buscando el consuelo.
La pobre Sara, tenía a Max apoyado en su hombro ya casi dormido chupándose el dedito, con su osito abrazado. Luis, lloriqueando con la cabeza en la cama, del mismo brazo en que Max estaba dormido.  Y ahora Mark del otro lado, buscando mimos con la mano que le quedaba libre a mamá.
Samuel decidió quitarle al peque, para acostarlo en la cama de acompañante. Y al moverlo, este le pidió tetero más dormido que despierto.
Max: ¡Tete!                
Samuel: En casita tomas tete bebé shhh shh. Lo acurruco, le dio un beso  y lo acostó.
Edward estaba pegado a Mario, ambos esperando el pedazo de pastel que seguro les tocaba, 2 o 3 nalgadas como sus hermanos, Edward, estaba nervioso el día anterior su padre por primera vez le había castigado con la regla por pelearse en el colegio, su trasero aún estaba resentido, le dolía al sentarse, así que… lo menos que deseaba era que le dieran unas palmadas.
Luego de acostar al bebe, dirigió su atención al par que faltaba.
Samuel: LA PRÓXIMA VEZ, se aseguran que su hermanito este tomado de la mano de Luis, ¿ENTENDIDO?
Mario/Edward: ¡Si, señor!. Dijeron bajito. 
Samuel les hizo, un gesto de que se acercaran.
Edward, dejo correr unas lágrimas, que no pasaron desapercibidas por Mario.
Mario: Papá… el castigo de Edward, lo recibo yo... ¿Siii?...aun le duele…papi. Además el sugirió avisarte, y nosotros no le hicimos caso. Edward, frunció el ceño en desacuerdo, pero no le salió vocablo alguno.
Luis: Es verdad papá….ish ish el no hizo, nada malo… ish ish ni Mario. Dijo levantando la cabeza limpiándose las lágrimas con su mano.
Samuel, recordó el castigo que él, le había dado a Edward, y entendió a qué hacían referencia.
Samuel: ¡Ven, Edward! ¿Aun te duele pequeño? Le dijo con cariño para él. A lo que el chico solo se limitó a decir… “un poco”…solo que era un poco bastante. Una cosa decía sus palabras pero otra su mirada, sus ojos que intentaban contener unas lágrimas. Samuel, lo miro, y luego de un suspiro lo volteo inclinándolo un poco, para dar unos azotes, sin embargo antes tuvo hacer un gesto de “alto” con su dedo índice, parando en seco el reclamo de Luis y Mario. Seguido, dejo caer tres nalgadas flojas a Edward, las cuales sintió no sin evitar el movimiento rítmico de su cuerpo con las palmadas.
ZAS, ZAS, au ZAS ay.
Samuel: ¡Ya mi vaquero! Ya paso…le dijo dándole un beso y un abrazo. Seguido de eso, llamo a Mario, y le dio los tres azotes correspondientes, pero a él si fuertes.
ZAS, Ayyy ZAS…Auuu ZAS Auuu papi. Mario, recibido su respectivo abrazo y beso, y lo felicito por estar dispuesto a recibir el castigo por su hermano. Samuel se sentó, en la cama del acompañante, llamo a Luis y a Mark, para sentárselos en sus piernas, y dejar que Edward y Mario, compartieran con su mamá antes de que los abuelos llegaran.
Samuel: Se, que Max, es mucho más pequeño que ustedes, y al parecer va a ser más osado y terrible también,  por eso no deben quitarle el ojo.
Luis: Papi, no es justo que me castigues por lo que pasó. Ustedes dos a veces no pueden con nosotros 5, y usted esperaba que yo pudiera con 4 solo, y con tan poca experiencia….. Además, no crees que con todo lo sufrido en el día de  hoy, no fue ya suficiente castigo, el stress de lo que le paso a mami, Mark, Max…y de pasó 5 azotes. Dijo colocando una vocecita y haciéndole ojitos a su padre. Sara, miro a su esposo y se sonrió.
Sara: Creo que Luis tiene un muy buen punto, Samy.
Samuel: ¡Caramba, hijo! Como abogado defensor, ¡no te iría nada mal!. Le dijo después de darle un beso en la frente.
Luis: Eso quiere decir… que me escape ¿de la tunda?. Le dijo poniéndose pequeñito.
Samuel: JAJAJA… por esta vez…Luis, solo por esta vez.
Luis: ¡SIIIII! Gracias papi, le dijo abrazándolo fuerte.
Max, abrió los ojitos por el grito de su hermano, y se sentó algo molesto.
Max: Shhh Terri…QUEDE DORMI.
Sara: ¿Terri?        Max: Yo, Terri Papi y Maio dice.      
Samuel: Si, amor conoce a nuestro adorado “Terri”…ble.

Todos: JAJAJA. 

8 comentarios:

  1. Fanny ante todo Feliz cumpleaños… espero haberte complacido amiguita con el regalo… :P

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  2. La defensa de Luis .. muy buena muy buena
    Me gusto mucho leer a todos los Hoffman juntos :D

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  3. Waaaaaa gracias gracias gracias que si me ha gustado me ha fascinado gracias por el regalo

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  4. Jaja me encanto . O . O pero yo quiero saber por que castigaron a Edward.
    Mary

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  5. Hola me gustaria mucho leer un relato de edwuar ya adulto casado con addy siendo castigado por su padre samuel

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    1. Hola Kar77....jajaja, vale no anotare...para complacerte.

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  6. primero feliz cumpleaños fanny. Y segundo me encanto la historia. Aunque quiero saber lo de la pelea y castigo de Edwatd n_n
    Mary

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