La Historia de André Cap. VII

La Historia de André Cap. VII

Hola, les cuento que ya empezamos clases y mi nuevo colegio no está nada mal, resultó que Juanjo es el nuevo capitán del equipo y yo califiqué también, papá nos llevó a todos a comer fuera y al cine como premio.

Pero bueno como nada puede durar para siempre, una tarde al regresar a casa el Fer estaba bastante callado, algo muy raro en él, y Juanjo le preguntó

-Que pasa Fer estás muy callado

-Olvidé traer la maqueta del parque-

-La que hiciste con papá?

-Si

-habla con el profe y pídele que te la reciba mañana aunque sea sobre menos- le sugerí de inmediato

-Ya lo hice, tenía que entregarla hoy, así que me puso un cero y como ya van dos mandó una nota para papá

-Dos ceros? Y el otro de qué

-No entregué el deber sobre reciclaje

-Pero que te pasa Fer? Ese deber lo hiciste con mamá, por qué no lo entregaste?

-Y yo se que lo trajiste Fer, que pasó?- pregunté también

- Unos idiotas me lo rompieron

-QUE?..POR QUE NO NOS LO DIJISTE?- preguntó furioso Juanjo

-QUIENES SON?- quería saber quiénes eran esos tipejos

-Esos tres imbéciles que están allá molestando a esa niña –

Eran tres chicos de último año, le habían quitado su mochila a una niña de lentes que debía tener unos 12  años o menos, y se la lanzaban entre ellos mientras la pobre pedía que se la devolvieran.

-Entrégale la mochila- dijo Juanjo muy decidido

-Y si no quiero? – respondió Darío muy gallito

-Pues te obligaré a hacerlo-le contestó Juanjo en el mismo tono

-Toma cuatro ojos, no vales la pena-le dijo a la pequeña y le arrojo la mochila a la cara, por suerte pude meter la mano y desviarla, eso me puso furioso como podían ser tan abusivos.

- No quiero enterarme de que la vuelven a molestarla ni a ella ni a mi hermano está claro?- les dije, conteniéndome de lanzarle un puñetazo al tal Dario, pero quien me respondió fue Roger, dándome un empujón

-Qué muy gallito?...

- No, yo soy un hombre, el animal eres tú- le respondí con desprecio y me lanzo un puñetazo que esquive fácilmente y la bronca se armó, en eso llegaron los motorizados que custodian el parque y nos arrestaron a todos, nos llevaron hasta una delegación como a dos cuadras de ahí. Pidieron nuestros nombres y lo números de teléfono de nuestros padres, pero ninguno abrió la boca, así que como estábamos todos con el uniforme del colegio, pues los muy …….. brillantes policías llamaron al Rector del colegio que llegó en menos de cinco minutos, y luego de firmar unos documentos nos llevo de regreso al cole, directamente a su despacho.

- Bien díganme que fue lo que pasó

Silencio absoluto nadie respondió, los seis mirábamos fijamente al piso.

-No van a hablar

Más silencio. Así que apretó su intercom y dijo

-Amanda por favor tráigame una lista con los nombres y los números de teléfono de los representantes de los señores que están en mi despacho

-De inmediato señor

Después de dos minutos entró la secretaria y le entregó la lista a al director y salió del despacho no sin antes mirarnos con compasión. Estábamos muertos.

Delante de nosotros marcó primero a nuestro padre

-Señor Villarroel, buenas tardes, soy Patricio Lara, rector del colegio de sus hijos, necesito que venga de inmediato al plantel, tenemos que hablar urgente de lo que acaban de hacer sus hijos. … 15 minutos? De acuerdo. Hasta luego.

Así fue con cada uno de los representantes, a los 10 minutos empezaron a llegar nuestros padres, pero el rector pidió esperar a que estén todos a quienes había citado. Nadie decía nada, los padres tenían miradas asesinas y nosotros la vista clavada en el piso. Cuando estuvieron todos, el rector empezó su discurso.

-Señores padres de familia, es muy penoso para mí tener que llamarlos a esta hora, pero lo que sucede es que hace como una hora recibí una llamada de la estación de policía que está cerca del parque para que fuera a recoger a unos estudiantes del colegio a los que los motorizados arrestaron por encontrarlos una pelea callejera. A pesar de que he preguntado ninguno de sus hijos ha querido responderme, pero debo dejar claro que sean cuales sean los argumentos que se expongan en esta reunión nada justifica el hecho de que se comporten como pandilleros, y menos portando el uniforme de esta prestigiosa institución. Por lo tanto deseo conocer al igual que ustedes, cuáles fueron los motivos que les orillaron a realizar un acto tan deplorable, para proceder a impartir las sanciones institucionales respectivas. Voy a volver a preguntar a cada uno de sus hijos y espero que esta vez no se nieguen a hablar.- Darío por favor, dime qué fue lo que pasó

-Darío respóndele señor director- le pidió su padre, a leguas se notaba que apenas podía controlar su enojo-…Darío….HABLA O TE HAGO HABLAR- y se desabrochó la hebilla del cinturón. Juanjo se sobresaltó y yo me estremecí ante ese sonido aterrador. Darío estaba llorando sin dejar de mirar al piso.

-Señor director yo le contaré lo que sucedió- dijo tímidamente el Fer, todos nos volteamos a verlo

-Te escuchamos – le dijo el director

Entonces el Fer comenzó a contarles que Roger, Darío y Edgar, le rompieron sus tareas y no solo a él sino también a otros chicos y chicas de otros cursos, que a veces les quitaban su dinero y que como el profe de ciencias le envió una nota a su padre porque tenía ya dos ceros por no entregar las tareas, ya que la ultima no la trajo a pesar de la oportunidad que le dio el profe de entregarla ahora, si total esos chicos seguro se la romperían, pues se los comentó a sus hermanos cuando iban a casa y los encontraron en el parque haciendo burla de una niña que es de octavo de básica, que empezaron los reclamos y terminó en una la palea, pero casi de inmediato llegó la policía.

-Pero como que mi hijo…

-Por favor Sr Hernández cálmese- le pidió el Rector al padre de Roger- Vamos por partes señores. Darío, Roger, Edgar, es verdad lo que dice Fernando, piensen bien antes de responder porque mañana mismo haré las investigaciones del caso y si mienten serán expulsados de manera inmediata.

Dario no dejaba de llorar, Roger no levantaba la vista del piso y Edgar estaba a punto de romper en llanto.

-Respondan por favor- pidió el rector

-Responde de una maldita vez Edgar- le dijo el Sr Vallejo, prácticamente escupió las palabras

-Si…..si señor……es verdad- y rompió en llanto

- Edgar, Roger y Darío suspendidos por tres semanas. André, Juan José y Fernando una semana de suspensión. Ahora deseo mantener una conversación privada exclusivamente con sus padres, esperen afuera.

Los seis salimos de inmediato, a esperar a nuestros verdugos, si bien es cierto que lo que hicimos fue con buenos motivos y realmente pusimos freno a un problema, pues papá nos pasaría la factura a los tres, eso era seguro. Cuando salimos el Fer se puso a llorar.

-Lo siento chicos, yo no quería que esto pasara, por eso no se los dije antes, ahora papá nos matará a los tres.

-Tranquilo Fer, que lo haría de nuevo y con mucho gusto- le dije

-También yo- le dijo Juanjo

La puerta del despacho se abrió y papá fue el único que salió, se veía molesto

-Vámonos- ordenó sin ni siquiera mirarnos y los tres lo seguimos hasta el estacionamiento y nos sentamos en el asiento de atrás, no queríamos estar cerca de él ni por error, antes de arrancar se volteó y dijo- No quiero escuchar ni una sola palabra, en casa hablaremos – y esa frase firmo nuestra sentencia.

El trayecto se hizo en absoluto silencio, Fer lloró durante todo el trayecto yo lo tomé de la mano y Juanjo le pasó un brazo por los hombros, pero ninguno nos atrevimos a decir ni pío. Al llegar a casa papá se bajo del auto y abrió la puerta de atrás

-Bajen, los quiero a los tres en la sala- obedecimos de inmediato, así que al entrar los tres nos sentamos en el sofá de los castigos. El Fer había dejado de llorar. Papá como de costumbre empezó a pasearse de un lado para el otro sin pronunciar palabra, creo que lo hace para torturarnos, la espera realmente es angustiosa.

- Entiendo las razones por las que lo hicieron, trataban de defender a su hermano y casualmente terminaron ayudando a otros chicos que  pasan por lo mismo, pero el liarse a golpes no da solución a nada, Juanjo, André la elección que tomaron no fue la más acertada, debían haber hablado conmigo y yo habría ido a hablar con el Rector y ponerlo en antecedentes, solicitando una investigación y reserva del caso. En distintas ocasiones hemos discutido con cada uno de ustedes de manera individual  este comportamiento y les había dicho claramente lo que sucedería de volver a pasar. Primero arreglaré las cosas con Fernando, los dos suban y esperen mi llamada.

-Papá considera todo lo que tuvo que pasar el Fer, él debió decirte lo pasaba, los tres debimos hacerlo pero por fa papi, no seas muy duro con él ni con André yo fui quien fue a reclamar a esos chicos André solo me acolitó papi.

-No papá, es verdad que Juanjo se adelantó y fue el primero en reclamar, pero yo lo haría hecho de todas formas, es más no me arrepiento de nada de lo que hice, el Fer es mi hermano y  si vuelve a pasar lo vuelvo a hacer aunque después me mates a palos.

-Basta André Sebastián

-Yo tampoco me arrepiento de nada papá, también lo volvería a hacer y con mucho gusto, nadie se mete con ninguno de mis hermanos- aseguró Juanjo, yo sabía que él haría lo mismo por mí pero escúchaselo decir realmente me arrancó una pequeña sonrisa.

-He dicho que basta Juan José. Lindo ejemplo para su hermanito, pelear en la calle como pandilleros, ser arrestados por la policía, suspendidos en el colegio.

-Y qué querías que hiciéramos? que les pidamos de favor que no molesten más al querubín, papá el mundo no funciona así.

-No seas irrespetuoso Juan José.

Juanjo iba a responder pero una vocecita se le adelanto.

-Yo si me arrepiento y mucho por haber metido a mis hermanos en este lío- dijo tímidamente el Fer- debí hablar las cosas directamente con papá. No meterlos a ustedes en mis problemas, lo siento mucho- y se puso a llorar……otra vez.

PD. lo completo en esta semana lo prometo