La Historia de André Cap. XI

La Historia de André Cap. XI

Hola, les cuento que una vez finalizado el campeonato, no se me salía de la cabeza lo que decía la carta de mamá, no podía concentrarme en nada y los exámenes están bastante cerca. No sé qué hacer, no quiero hablar con nadie sobre eso pero necesito hacerlo, trate de tocarle el tema a mi Tía pero me di cuenta que sería hacerla sufrir por gusto, era su hermana y estaban muy unidas, no quiero que sufra o que piense mal de mamá, así que desistí de la idea.

Me pelee con mis hermanos por un estúpido partido de Fútbol, papá lo no sabe pero algo sospecha, ya que no salgo de mi habitación  y no hablo con nadie, al terminar de comer o hacer mis tareas de la casa de inmediato me encierro en mi cuarto, quiero estar solo, no quiero ver a nadie. Papá me ha preguntado en varias ocasiones que es lo que me pasa, incluso Estela está preocupada. No he entregado algunas tareas y tampoco salí bien en las pruebas intermedias, no tengo cabeza para nada, la verdad estudiar es lo que menos me importa. Mi promedio esta por el piso y las notificaciones que envían para mi padre no se las he dado. Hoy falte a clases pero no hice nada malo, solo regrese a casa, no quiero más preguntas de mis amigos y mis profesores, se que esta situación explotará de un momento a otro.

-ANDRE BAJA INMEDIATAMENTE- rugió mi padre y claro bajé de inmediato, segurito ya se entero.

Al llegar a la sala Juanjo estaba con papá, el Fer llegaría más tarde ya que tenía clases remediales de matemáticas y Estela tenía una reunión en el consorcio.

-Que significa esto André?- pregunto mientras agitaba un papel en su mano.

-No lo sé, no soy brujo

-No estoy para insolencias André. Así que no te hagas el gracioso y responde

-Ya te dije que NO LO SE

Sin más papa me tomo del brazo me giro y me dio cinco nalgadas superfuertes. Me mordí los labios para no gritar mientras sentía como las lágrimas acudían de inmediato a mis ojos, pero no lloraría no le daría el gusto, además no era justo yo de verdad no sabía que era el maldito papel.

-Vas a comportarte?

-Vas a seguir haciendo peguntas estúpidas?- no sé que me paso solo puedo alegar lapsus brutus y mas brutus que lapsus. Papá se puso rojo de furia vi claramente como se le hinchaban las venas de la frente y de inmediato se llevo las manos a desabrochar la correa, se la saco en menos de un segundo, la doblo en dos y me tomo del brazo…. por segunda vez, cerré los ojos con fuerza consciente de que me lo había ganado, pero el correazo nunca llego.

-No papá, no lo hagas- decía Juanjo mientras sostenía la mano de papa en el aire

-No te metas Juan José no te metas, no voy a dejar que este mocoso me hable con una total falta de respeto

-Solo cálmate un poco papi, estas muy alterado, por favor papito por favor lo puedes lastimar- rogo Juanjo sin soltar el agarre de la mano de papá.

-Está bien hijo, tienes razón. Ve a tu habitación André Sebastián subo en 20 minutos te quiero en una esquina mirando la pared y en pijama entendido? –y me zarandeó fuertemente del brazo.

-Si papá- sentí que papa aflojaba el agarre y corrí de inmediato a mi habitación, me lace boca abajo a mi cama a llorar mientras abrazaba mi almohada, papá iba a matarme. Trate de calmarme solo tenía veinte minutos y no quería que papa me encontrara tirado en la cama así que me pase la mano por los ojos, me puse la pijama y ubique en un rincón mirando la pared como había indicado. Pasaron unos pocos minutos y la puerta se abrió, me estremecí y empecé a respirar agitadamente, tenía miedo.

-Tranquilo hermanito soy yo- dijo suavemente Juanjo, me voltee de inmediato

-Gracias Juanjo…por defenderme de papá

-No tienes que agradecerlo, mejor dime que fue todo eso?

- No lo se

-Si no me dices no podre ayudarte mas

-De verdad Juanjo no sé que me paso-le respondí mientras dos gruesas lagrimas rodaban por mis mejillas

-Ya ya tranquilo hermanito- me dijo mientras me abrazaba, eso me reconfortó cantidad- cálmate si..cálmate.

-Papá va a matarme-solloce

-Sí, bueno… ay André,  no sé si admirarte por  las pelotas que tienes o compadecerte por tus instintos suicidas- jajajaja- nunca olvidare la cara de papá- jajaja-y me uní a su risa, de verdad fue cómico, pero de inmediato recordé que estaba a punto de pagarlo y bien caro.

-Te ríes por que no es tu trasero el que estará en la línea de fuego- le dije con tono de reproche

-Lo siento

-Sabes que es ese papel que tiene papá?

-Si hermanito es una nota del director me a entrego a mí para que se la de

-Traidor…eres un soplón- y le di un empujón en el pecho- vete de mi cuarto, estarás feliz no?…papá va a pegarme por tu culpa.

Antes de que Juanjo pudiera responder, papá entro en la habitación

-No André, tu solito te pusiste en esta posición hijo, tu solito. Juanjo déjanos solos por favor.

-Papá….- dijo Juanjo

-Tranquilo hijo…. tu hermanito va a estar bien…. no te preocupes  mejor ve al parque a encestar un rato si?

-Claro!…premia al traidor hipócrita.

-André yo….

-BASTA. Juanjo por favor hijo haz lo que dije

- Si papá- y sin más nos dejo solos.

Permanecimos en silencio yo con la mirada al piso escuchando como mi hermano bajaba las escaleras y salía de la casa.

-Y bien…quieres decirme que es lo te pasa?

-Nada

-No me vengas con que nada. Últimamente has estado muy irritable, te enojas por todo, siempre andas con mala cara, no hablas con nadie, ya ni siquiera regresas a casa con tus hermanos, te encierras en tu habitación con el pretexto de que tienes muchas tareas, y hoy el Director me llamo para decirme que varios de tus maestros han enviado notificaciones para una reunión y no han recibido respuesta por lo que me dijo que le había entregado a Juanjo un recordatorio de los motivos de la junta que por cierto es para mañana, y que no te la pudo dar personalmente por que hoy no asististe a clase. Para colmo de mi paciencia te pones insolente, grosero e irrespetuoso. He tratado de hablar contigo varias veces ya y siempre me sales con la misma cancioncita, así que se acabó André Sebastián Villarroel, quiero la verdad y la quiero ahora.

Yo estaba llorando ya, pero no me atrevía a levantar la mirada del piso. Papá se acercó a mí y me tomo del mentón obligándome a mirarlo.

-Respóndeme muchachito que ya llegaste al límite de mi paciencia- advirtió papa muy en serio, no dije nada, solo seguía llorando en silencio.

-No vas a hablar?...........-no dije nada, solo seguía llorando, papá empezó a quitarse la correa, yo solo llore más fuerte, iba a matarme eso era seguro, me quede en mis sitio estaba demasiado asustado para moverme, me tomo con fuerza por el brazo y me inclino sobre el respaldo de la silla junto al escritorio.

El primer correazo llego con fuerza, grite, grite fuerte, me dio como quince antes de detenerse, sentía fuego en mi trasero. Me tomo del brazo y me levantó.

-Vas a hablar?

-Ay no- pensé- esto es para que hable, ni siquiera ha empezado a castigarme por mis pecados.

-Papi….papi..yo….yo….-balbuceé entre sollozos, pero no quería decirle de la carta, que se supone que le diría, se que mamáte puso los cuernos y que por eso se separaron,  aun no estaba listo para hablar de eso y no lo hablaría aunque me quedara sin trasero. Así que negué con la cabeza y de inmediato volvió a ponerme sobre el respaldo de la maldita silla y me dio diez correazos más, sentí morir, dolió mucho, nunca me había pegado tanto, estaba asustado, creí que no se detendría papá de verdad estaba furioso. De pronto se detuvo pero yo mantuve mi posición solo llorada desconsoladamente, sentí que me levantaban con cuidado y me envolvían en un abrazo cálido y confortable.

-Mamá, mamá- dije de inmediato, aferrándome con fuerza a ella llorando con más angustia y desesperación.