EL 1.000.000 DE CARAS DE JOAQUIN

EL 1.000.000 DE CARAS DE JOAQUIN

Escrita por: Lady Schumi, Karliee, Miranda, Marambra, Anónimo, Mery, Estrella, Sanha, Tali, Gloria, Luna, Fanny, Andy, Itzangabye, Cathblured, Cassy, Mouse, Carla, Lilith, Naty.

CAPITULO 1 Un hijo nunca viene solo

El lugar era frío, sucio y maloliente, se podría decir que muy semejante a un canal tapado y oscuro como el hueco de un ratón, pero toda esa descripción no había sido asimilada por el simpático y ultra-nervioso jovencito que quería desvanecerse de ése lugar, claro, había llegado papá y seguro ya sabía de todas sus diabluras, Joaquín no paró de pensar:

Estoy tan asustado, sabía que iba a estar en problemas pero no creí que tantos y tan luego, pero la cara de papá lo decía todo… era un adolecente muerto y que jamás llegaría a ser un adulto de bien, como esperaba mi madre, a veces me preguntaba porque hacía cosas que me metían en problemas, en realidad jamás me había gustado que me pegaran, y parecía que sí porque me metía en problema tras problema… y a veces me podía zafar… pero ahora la cara de papá me decía que no. ¡Demonios!

-"¿En qué estabas pensando?!"- me grito papá acercándose a los barrotes.

-“Gracias barrotes”- susurre, porque era lo único que impedía que mi papá me diera una muerte lenta y dolorosa-“Yo... Bueno, es que no sé...” -titubeé y mejor! me hice el tonto.

"Robarte una patrulla Joaquín, esto es el colmo hasta para ti"- me gritó furioso- "debería dejarte aquí".

Ése comentario me molestó, aunque, ya sé ya sé eso era descarado de mi parte.

-“Pues vete si quieres”.

-“Perdón!!!...QUE ME ACABAS DE DECIR JOAQUIN MAXIMILIANO ENRIQUE?… ¡soy tu padre a mí no me vengas a faltar el respeto!”.

Mi padre se abalanzó contra los barrotes... como si quisiera sacarme a través de ellos, realmente me asustó, nunca lo había visto tan enojado ni siquiera cuando aparecí en su puerta dos meses atrás con una carta de mamá y diciéndole que se había hartado de mí, claro que esa vez yo no era el motivo de su ira.

-“Ven acá mocoso endemoniado pégate a los barrotes que ya verás, Joaquín te lo advierto, si desobedeces te va peor y mira niñito que lo que menos tengo es paciencia en estos momentos”.

-“No dijiste que te ibas"- dije apegándome a la pared contraria.

Si, si, ya sé que mis palabras eran como un suicidio lento y doloroso pero carajo! papá enfadado es como el abominable hombre de las nieves y en mi defensa él dijo que debería dejarme ahí.

-"Ven aquí o te zurro aquí mismo JOAQUIN MAXIMILIANO ENRIQUE CASABLANCA RISOPATRON"

Madre mía! mis tres nombres y dos apellidos estoy más que muerto.

-“Joven Joaquín Maximiliano Enrique Casablanca queda usted en libertad”.

Ya iba con papá a los barrotes y el oficial me salvó o mejor dicho me condenó por que ahora ya no hay barrotes que separen a mi enojado padre de mí y eso es peor para mis nalguitas.

Papá simplemente esperó a que abrieran la puerta de mi calabozo y me agarro de un brazo Y EL MUY DESGRACIADO ESTAMPÓ SU MANOTA EN MI TRASERO!!!

-“¿Por qué me pegas?”-Gruñí muy molesto.

-"Que porque te pego?"- me gruño él... de pronto pareció que toda su ira se esfumó- “Porque te amo y pudiste haber muerto si el airbag no se abre todo por una travesura". Dijo abrazándome.

-“Ya papá, me da pena”- Lo medio empuje.

-“Hay mocoso que no te de pena porque soy tu padre, además no niegues que me prefieres así, o acaso quieres verme como antes?, venga vamos para la casa que debes una muy buena charla jovencito”.

-“Ayy... pero en ese caso mejor me quedo aquí”.-Respondí cruzando los brazos.

-"No me tientes a hacerlo aquí, mira que estas en tantos problemas"- dijo comenzando a enojarse de nuevo.

-"Pero papiiii, no te enojes conmigo, recuerda que casi me muero hoy, si hasta vi la luz del túnel y un mechón de cabello de San Pedro, ¿Qué no es ese suficiente castigo?!"

Le dije colocando los ojitos vidriosos y hasta un puchero bien pronunciado, esas eran mis mejores armas de manipulación!.

Mi padre me miró fijamente, yo solté una lagrimita y pude ver como se estaba ablandando, incluso su ceño fruncido desapareció!..umm...estimo que con unas tres lagrimitas más me lo hecho a la bolsa y me libro de la paliza del siglo!!

Estaba a punto de soltar el llanto y los mocos cuando el policía metiche me preguntó:

-"¿Seguro que a quien viste fue a San Pedro? porque además de robarte la patrulla, tu examen de alcoholemia y estimulantes dio por sobre el límite permitido". 

Ok, fue un placer conocerles a todos y yo aquí me despido porque después de escuchar a ese tonto policía hablar, dudo mucho que mi padre me deje vivir hasta el final de la historia!!

Y se podría decir que Joaquín coincidió sólo en sus últimos pensamientos con los de su padre, bueno, pero eso no lo admitiría nunca, a pesar de que le daban unas ganas terribles de arrancarle el cerebro que no usaba de la cabeza de su hijo, Maximiliano trató de calmarse, pensando:

Este muchacho me va a sacar canas de todos colores y eso que solo lleva 2 meses viviendo conmigo!!!

Bueno, Max trataba de calmarse pero inmediatamente se le venían a la cabeza todas las tonteras que había hecho Joaquín y eso sí se lo reclamaría a voz alta y a todo pulmón!

-“¿Alcohol? ¿Estimulantes? En que mierda estabas pensando Joaquín!! Deja de hacer el payaso y camina por que no respondo”

El padre del chico había gritado alto, fuerte y claro…tanto…que hizo que Joaquín orbitara sus ojos y apresurara sus pasos, Max no pudo evitar pensar:

Puedo ver en Joaquín unas lágrimas de frustración, enojo, miedo, no lo sé, pero me parten el alma, así que pase mi brazo por su hombro con todo el amor que puedo sentir. 

-“Anda hijo vamos a casa, te amo tesoro y me importas por eso desde ya te digo que de esta nadie te salva pero después todo estaría bien”.

Joaquín se sorprendió por el repentino cambio de actitud de su padre así que tampoco pudo evitar pensar:

Y cree que con eso me hacía sentir mejor?! Tal vez si merecía un castigo - dije TAL VEZ- pero eso no significa que lo acepte y menos como pinta el futuro para mi pobre trasero y todo por ese policía metiche! si mi papá ya estaba cayendo con mi espectacular actuación y mis lagrimitas pero NO ahora sí que mi carrera de actor ha terminado ya que nada será actuado, mi papá me dará una de aquellas!...mejor me olvido desde ya sentarme cómodamente por un rato.

Pero eso no es lo que más me preocupa, temo que se harte de mí como lo hizo mamá y todo lo que tengo es él, no sé porque hago cosas como esto, tal vez es porque necesito saber que él no se dará por vencido...si lo sé es absurdo...pero no puedo evitarlo, tal vez hay algo mal conmigo, sé que excedí esta vez, pero bueno papá dijo que todo estaría bien. Estoy asustado y tengo miedo pero sé que merezco lo que papá decida y que todo estará bien.

No me di cuenta del tiempo en que tardamos en llegar, sólo sé que me habíamos llegado un abrir y cerrar de ojos el darme cuenta que estábamos frente a la casa y yo no podía dejar de pensar en todas las que le había hecho pasar a papá desde que mamá me trajo con él, sí definitivamente me gané el castigo.

-“Joaquín vamos adentro hijo que ya es tarde......”

-"Tarde... tienes razón se me hace tarde quede con los chicos para jugar unas carreras" -dije mientras salí corriendo.

Qué demonios pasaba conmigo? Una parte de mi sabía que merecía el castigo y que debía tratar de no meterme en tanto lío pero mi parte insolente me dice que rete a mi padre, que lo mida a ver hasta donde es capaz de llegar y de hacer por mí… a lo mejor creen que estoy loco pero estoy enfadado con la vida o algo así, compréndanme, cómo creer en la gente y en el amor de mi padre si la mujer que se supone debía amarme toda la vida se hartó de mí?, creo que por eso soy como soy con papá para ver hasta llega su amor por mí y joder! Que necesito hechos no palabras. Ouu demonios papá viene tras de mí, debo ser más rápido.

-Ven para acá! muchacho travieso!!! que ya hemos tenido suficiente por hoy!.

Ni loco!, quería gritarle, me llega a agarrar y me mata! Mejor espero que se le pase el enojo... sí eso es…le pido a Juanpi que me reciba en su casa por unos días hasta que a papá se le pase, me extrañe, que piense que me he fugado, le agarra ataque de consciencia por haberme hecho huir y pide llorando que vuelva a casa, promete no pegarme…siiiii pero que buena idea has tenido Joaquín!!!

-"JOAQUIIIIIIIIINNNNNNNNN"

Escuché gritar a papá para luego sentir que me tomaban de la pretina del pantalón, era mi papá que me había dado alcance... Gruuu porque mi papá tenía que ser un atleta profesional... mamá no se podía echar una canita al aire con un ingeniero... no la muy... muy grupy tenía que hacer al bebé con un aironman...
mis ideas se acabaron cuando sentí la manota de papá en mi precioso trasero... como duele... aun no me acostumbro a estos castigos... bueno aun no me acostumbro a que mamá me haya dejado con un completo desconocido para irse a su viaje espiritual... llámese... vivir la vida loca sin un hijo desobediente a cuesta.

Sin embargo había o estaba aprendiendo a quererlo a convivir con él día a día, era mi padre y mi madre nos había negado a ambos el poder conocernos y a mí el crecer junto a él por andar con eso del espíritu libre claro hasta que se hartó de mí y al siguiente momento estaba en la puerta de este hombre sin saber qué hacer y por su cara él estaba igual o peor pues de la nada le sale un adolescente haciendo un giro completo a su vida demonios!! pero de que rayos estaban hechas las manos de este hombre que duele tanto Grrr! definitivamente jamás me podré acostumbrar a este tipo de castigo Auch! y lo que me falta!

Papá me llevó a casa de nuevo pero al llegar al porche eche a correr al baño de arriba , estaba asustado, ya antes papá me había castigado con nalgadas, en realidad se la pasaba el día nalgueándome, pero nunca la había cagado tanto, me encerré en el baño rezando porque papá no tirara la puerta antes de poder llamarle a mi hermano, en realidad Marco es mi medio hermano, el primer error de mamá, Marco era un ciudadano modelo, tenía un excelente trabajo como modelo de ropa masculina, era súper atractivo y en fin… un miembro muy funcional de la sociedad… pero nada de esto le sirvió ante mamá hace tres años cuando decidió declararse gay, ella lo corrió de casa, le dio una hora para empacar todas sus cosas y luego se salió a su clase de yoga espiritual.

Marco lloraba mientras guardaba toda su ropa y cosas en varias maletas y mochilas, al verme en la puerta de su cuarto se acercó a mí y me abrazó, dijo que siempre podría contar con él para lo que necesitara, no me dejaría solo con mamá, él nunca me dejaría solo, oigo a papá golpear la puerta, pero yo necesito oír la voz de mi hermano, quiero a mi hermanito.

Recordé que traía el móvil en el bolsillo del pantalón y preso del miedo comencé a marcar el número de Marco, se tardaba en contestar y eso solo aumentaba el miedo que sentía y vamos! papá no me haría daño o si? Pero esta vez la cague como nunca antes, mi padre tenía razón era mucho hasta para mí. Tenía miedo o ansiedad por lo que fuera a pasar conmigo y es que si quizá y recuerden que dije solo tal vez merezca un castigo no que lo quisiera y ver a papá como un auténtico basilisco no era nada agradable.

-“Aló?”
-“Marco, Marco soy yo Joaquín snif snif” 

-“Hermanito que tienes? Me asustas hombre” 

-“No me dejes por favor tu no!” (Mendigas lágrimas traicioneras salían solas) 

-“Joa nunca te dejare enano pero que paso? Y tu padre?”

-“Buuua papá está enfadado buua va a golpearme”. 

-“Que?!!! Como que a golpearte? Ah no tu quédate donde estés enano yo salgo de inmediato para allá”. 

Genial alguien que me defienda aunque no sé porque presiento que mi hermano piensa que papá me golpeara brutalmente y no que me castigara, upps! ojala y me ayude y ahora no tenga un 2 contra 1.

En cuanto corte papá abrió la puerta con una de las herramientas de saco de su cortapluma, que aparte de súper aironman fue ladrón profesional?… o qué?...del susto que me di cuando papá entro y me agarro del brazo se me cayó el cel...

-“AUU! Me duele! Papáa!”- seguro que ahora si me echa de una patada! Mejor le digo que no me tiene que decir nada... Yo me voy, las lágrimas se me comenzaron a salir. 

-“Ah no! ya no te salvaras de ninguna con esas lágrimas”.

Escuché bien, me dijo que no me salvaba…pero su mirada no decía lo mismo…sé que papá vio que mis lágrimas eran verdaderas, y mi miedo también, sentí como empezaba a replantearse el asunto, eso era bueno no?

Pero no! falsa esperanza, llegamos al living porque me había medio arrastrado hasta allí y vi el maldito sillón, sí era un maldito sillón en el que yo jamás jamás jamás me sentaba, no señor, no sabía si era cómodo o no todo lo que yo sabía de ese sillón era que a la base tenía unos arañazos de algún gato que alguna vez vivió por aquí…claro siempre estuve boca abajo en las rodillas de papá desde que llegue!.. así que mucho de comodidad de este sillón no sé. 

-“Lo siento”- dije ya medio hipando y no piensen que exagero yo lloraba en anticipación desde hacía un rato, papá me miro y para mi eterna vergüenza me llevo a una esquina, ya dije que odio las esquinas?... pues las ODIO!!!

-“Quiero que pienses en lo q hiciste - me dijo - de paso nos calmamos los dos”.

No dije nada me quede allí mirando la pared, hacía cuanto que no estaba en un rincón? desde kínder!!! igual no tuve mucho tiempo ni para pensar ni para olvidar mi absoluta vergüenza porque sentí que tocaban la puerta, más bien aporreaban la puerta… oh Dios!... ése debe ser Marco.

Papá abrió la puerta y mi hermano se abalanzo sobre él ... "no te atrevas a golpear a mi hermano"... Marco estaba como un loco, nunca lo vi así.

Sonrío desde mi esquina, siempre lo he hecho al escuchar la voz de mi hermano y ensancho más mi sonrisa si pasa mucho tiempo en que no lo veo, no pasaba de  dos semanas cuando vivía con mamá y estaba en sus viajes espirituales (es decir colocada desde el pelo hasta la punta de los pies).

Ahora ha pasado más tiempo en no verlo, prácticamente desde que me mude con papá…y eso es lo malo… es que a papá nunca le hable de Marco, temo que sea como mamá y lo quiera apartar de mi lado. Los gritos de Marco me sacaron de mis pensamientos:

"A mi hermano no lo golpeas"

Yo estaba un poco asustado, porque Marco es totalmente anti violencia… já!  pero yo soy su pequeñito, su hermanito menor!... y eso que solo me saca dos años.

Mientras un hermano estaba raspándose la garganta gritando el otro se mareaba en pensamientos…igual que Maximiliano.

Este adolescente me dejó con el ojo cuadrado y es que parecía referirse a mi hijo como hermano y de pasó me hizo sentir como el peor padre del mundo, vale que le quería dar una tanda de buenas palmadas a mi mocoso, pero golpearlo? eso sonaba muy agresivo y brutal y jamás lo haría, que rayos! yo moriría por Joaquín.

-"A mi hermano no lo golpeas"

-“Hey muchacho tranquilo no me grites, pasa y explícame de qué diantres hablas y desde ya te digo que no golpeare a nadie, al menos no como tu imaginas, anda pasa al sillón a explicarme” -me dirigí a mí a hijo -“Joaquín tú también al sillón mocosito y dime quién es y de qué demonios habla este joven”.

Los 2 adolescentes pusieron una expresión que no podía descifrar y por mi propio bien espero que aquel muchacho acepte dialogar porque por el enojo inicial se ve que es capaz de darme pelea y eso que yo no soy débil, pero nunca, nunca  lastimaría a un niño que bien podría ser mi hijo.

El adolescente parecía no escucharme, si no por el contrario, corrió donde mi hijo y lo abrazó con fuerza.

"Ya no llores Joaco ya estoy aquí, hermanito sabes que no dejare que nadie te haga daño... vamos bebé…una sonrisita"

Le habla con cariño y preocupación... es que acaso eran hermanos?... cuando tuve otro hijo y no me entere!!!

Vi como el chico que me había amenazado tomaba con suavidad la barbilla de mi hijo y le dijo:

-"Que pasa hermanito?... sabes que puedes decirme"

Lo acercó a su pecho para abrazarlo y consoló a mi bebé, la escena era muy tierna, pero yo necesitaba saber que pasaba ahí, si ese chico era hermano de mi hijo, entonces teníamos muchas cosas que aclarar.

-"Que pasa hermanito?... sabes que puedes decirme"

Max estaba callado tratando de adivinar quién era ese joven, pasó la mirada a Joaquín y su hijo parecía estar en una batalla dentro su cabeza. 

Escuchaba la pregunta de mi hermano como eco en mi cabeza pero yo no me atreví a contestar ahora sabía que ya estaba en muchos más problemas.

-"Que pasa hermanito?... sabes que puedes decirme"

Además me sentí la peor persona del mundo no quería presentarle a papá como la peor persona del mundo que me iba a golpear, así que solo vi para abajo medio arrepentido como si supiera que no había estado bien, bueno ya, lo sabía.

-"Soy Maximiliano el papá de Joaquín no nos han presentado"

Papá habló y le extendió la mano a mi hermano y Marco…seguro que quería hacer todo pero menos estrechársela…me pregunto que estará pensando Marco?

Marco pensaba:

Yo le di una mirada de desconfianza a Maximiliano, aún estaba muy molesto por el estado en que me llamo mi hermanito, pero una segunda mirada al lugar me hizo sentir que no estaba en ningún peligro y un mirada más a mi querido Joaquín me hizo notar que realmente no estaba lastimado, le di una última mirada a la casa...y pues… no había signos de lucha que yo pudiera ver así que en un tono poco amistoso le conteste pero sin tomarle la mano...no sabía si tendríamos que salir corriendo de allí.

-"Mi nombre es Marco y quiero saber porque mi hermano me llamo llorando y diciendo que usted lo iba a golpear?"- le dije poniendo a Joaquín detrás de mío- "Mire que ya llame a la policía!" -eso era mentira, la verdad es que del susto ni se me había ocurrido! yo solo quería ver a mi hermanito.

En cuanto Max escuchó con convicción lo que decía el hermano de Joaquín se le vinieron preguntas a la cabeza.

Tan mal padre soy? como para aterrar a mi hijo y que llame pidiendo ayuda? Tengo que hablar con mi niño antes de que realmente me tenga miedo y no respeto…no…definitivamente tengo que aclarar las cosas.

-“Hola Marco, veras tu hermanito hizo algunas trastadas un tanto subiditas de tono y no te voy a mentir cuando fui a recogerlo estaba enojado a la enésima potencia, tampoco negare que le estampe 2 buenas palmadas en ese trasero revoltoso que tiene y Marco perdona que lo diga pero Joaquín es mi hijo y aunque me duela esta vez se merece unas buenas palmadas pero ten por seguro que jamás lo lastimaría y menos como tú te imaginas, puedes creerme o no esa es tu decisión pero Joaquín enfrente de tu hermano te lo digo hijo, mi intención nunca fue aterrarte ni mucho menos y jovencito estas en muchos problemas pero eso no significa que debes tenerme miedo eso nunca Joaco yo solo pido tu respeto y en estos momentos una explicación, de donde salió Marco y por qué no sabía de él?”.

Max termino de hablar y deseó con todas sus fuerzas que Marco le haya creído, por su parte Marco sí estaba casi, casi convencido.

Pues yo me considero bueno leyendo a las personas y el señor éste no se veía tan mala gente...lo que pasa es que cuando está involucrado Joaquín el sexto sentido como que me falla, giré mi cabeza un poco hacia mi hermanito pero sin dejar de ver por completo a Maximiliano, "Joaquín, eso es cierto?, dime que quieres hacer" le pregunte preocupado "Dime si quieres que te saque de aquí o quieres hablar con él ?" fuera lo que fuera mi primer instinto siempre es protegerlo, este señor podía decir lo que quisiera, además cualquiera que fuera la travesura que hizo a mi no me parece que lo asustara tanto, aunque la verdad que no sé como nos las íbamos a arreglar solos los dos desde que mamá me echo de la casa las cosas estaban difíciles, pero encontrare una manera de arreglárnoslas ,total, no me va mal como modelo, pero entre el arriendo y la universidad a veces no me queda ni para comer... oh, no, si Joaco se viene a vivir conmigo tendré que dejar la uni con lo mucho que soñaba con ser médico... pero por mi hermanito todo... es mi única familia... después que mamá me echo de casa y que Antonio se marchó con un actor… ese fue un duro golpe.

Lo pensé seriamente por un segundo más... y decidí darle una oportunidad al fulano que estaba enfrente mío, no perdía nada con escucharlo si la cosa iba mal pues tomaba a mi hermanito y lo sacaba rápido de esa casa, además desde que llegue Joaco, quedo mudo no dejaba de mirar al suelo... y eso no pintaba... lo conocía y muy bien...mi hermanito podía ser insufrible cuando quería..

-¡Hablemos! -le dije- Me llamo Marco Aurelio y soy hermano Joaco... y quiero saber porque le ibas a pegar?.

Joaquín intento hacerse pulga porque sabía que nada bueno traería contar lo que hizo a su hermano.

JODER... que cuando papá le cuente a Marco lo que había pasado... mis pequeñitas travesuras... pueees... Marco me iba a montar la bronca del año... y cuando le dijera del alcohol... hasta un coscorrón seguro me soltaba... Ayyy Diooos, que como que de esta no salgo...vivo...

"Joaco me dirás tu o lo hará tu papá" mi hermano me regañó un poco.

-“Eeehh yo... este… nada hermanito... en serio...solo que...”

-“JOAQUIIIIIN CASABLANCA.... ¡Habla...YA!”

-“Yo, te resumiré... se robó una patrulla, la estrello ...después de que bebió por supuesto... y luego te llamo... culpándome de que lo iba a golpear... cuando lo que yo iba a hacer era darle LA TUNDA, que se merece”

Bueno papá me interrumpió justo cuando iba abrir la boca.

-“¿QUEEEE?” ….Plack.... Auuuuuu –

Y como era de esperarse mi hermano me soltó el coscorrón del año...

-“Sabe Sr. Maximiliano... puede que yo lo sostenga mientras usted le castiga...”

Traición! Y de parte de mi hermano!!!

-“QUEEEEEEEEEEEE... Marco, pero que dices....”

-"Lo que oíste mocoso como se te ocurre, no tienes edad para siquiera probar un trago... y robarte un patrulla Joaquín que yo mismo te daría una zurra.

En la torre! Ahora si estoy más que muerto y es que esto debe ser el fin del mundo porque mi hermanito que siempre aboga por el dialogo apoyando a papá en estos castigos tan tan...ustedes entienden, creo que no queda de otra que jugar mi última carta…la de corderito arrepentido que acepta públicamente todos sus errores y cuando estaba a punto de pedir disculpas fue cuando papá me saco de mis pensamientos.

-Gracias Mark te puedo llamar así verdad? no sabes cómo me reconforta que entiendas pero bueno, bueno, jovencitos, de la tunda merecida hablamos después, ahora explíquenme porque no sabía de la existencia de Marco y ustedes son hermanos de sangre? Mark con quién diablos vives? Mira que a leguas se ve que solo eres un par de años mayor que mi mocoso.

-"Bueno... yo... bueno"- no sabía cómo decirle... y si me apartaba de mi hermano igual que mamá, por otro lado era mejor que supiera ahora, así sabría si tenía que tomar a mi hermanito y salir de ahí -"Arriendo un cuarto... mamá me hecho de casa cuando le conté que era gay"

Se sintió extraño que alguien le preguntara por su vida,...por un momento pensó que revivir los miedos e inseguridades vividos desde que su madre le expulsó de su hogar, le harían débil ante los ojos de este señor pero...al mirarle directamente a los ojos, decidió ser franco y sin la más mínima gota de auto-compasión, le contó su historia, sin omitir su inclinación sexual y su proyecto de llegar a ser un médico.

-"Eres un traidor!"

Joaquín le gritó a Marco porque sinceramente era mejor concentrarse en eso que en sus propias travesuras.

-"Y tu eres un tarado!

-Como se te ocurre Joaquín!! Ojalá tu papá te dé bien duro!"

Ninguno le estaba prestando mucha atención a Max...

Los ojos de Joaquín se hicieron enormes y por un instante Marco parecía culpable por decirle eso, hasta que Joaquín lo empujo y Marco lo empujo de vuelta y los dos niños terminaron jalándose de los pelos en el piso mientras Maximiliano les decía que se detuvieran, en realidad no parecía que se quisieran hacer mucho daño y tampoco parecía que fuera la primera que peleaban así, Maximiliano se fue a separarlos, por más que Maximiliano grito "basta" los chicos seguían en el suelo así que uso su mejor arma y les dio 2 palmazos a cada uno, por un momento la paz volvió a reinar.

Joaquín lloroso e indignado se pasaba su mano por su trasero, mientras que Marco se quedo helado nunca nadie lo había castigado de esa forma.

Antes de que pudieran decir nada Maximiliano los tomo y los dejo sentaditos en el sofá

-“No quiero más peleas entre ustedes”

Fue curioso lo que sintió Maximiliano en ese instante, fue como si de un momento a otro en vez de un chico con el cual tenía que ajustar cuentas, fueran dos, los miró y ambos se veían pequeños y vulnerables, dentro de su corazón nació una inmensa necesidad de cuidarlos y protegerlos.

Pero, sabía que tendría que escoger muy bien las palabras para proponer a Marco sus intenciones, ya que se notaba que el jovencito era de carácter y si había sido capaz de salir adelante pese al abandono de la madre y aún así seguir siendo protector y defensor de su hermano menor, ...todo esto hacía crecer en Max los deseos de convertirse en padre de tan valiente y noble muchacho.

Marco, pese a su tranquilidad estaba impactado, nunca nadie se había atrevido a darle un par de palmazos en el trasero y a pesar de que aún sentía el cosquilleo en sus nalgas ya que los manotazos habían sido impartidos con bastante firmeza, le daba vergüenza el verse tratado como a un crío pero por otro lado no pudo dejar de darse cuenta de la facilidad con que el padre de su hermanito los había dominado, eso lo hacía parecer más grandote de lo que le había parecido al llegar y no pudo evitar sentirse pequeñito a su lado y por primera vez en mucho, mucho tiempo, ya no tuvo que ser el adulto ante Joaquín.

Para Joaquín la cosa estaba aún más clara, tristemente ¡hasta aquí llegó su defensor numero uno!, sí, papá los nalgueó a los dos sin problema evidente era que nadie le salvaría de que su pobre trasero pagara el precio de sus acciones.

-“Viste Joaco ya lo enfadaste"- dijo Marco al salir del asombro.

Maximiliano estaba viendo a los dos chicos sentados en el sillón mientras se masajeaba la frente, la expresión de Marco era casi divertida tenía los ojos enormes, Joaquín se veía culpable…con un último respiro Max decidió que era momento de recobrar el control de las cosas.

-"No los quiero ver pelear más"

Ambos chicos abrieron la boca para quejarse al mismo tiempo.

Max los detuvo sacudiendo la cabeza

-"Tú”- le dijo apuntando a Marco- “Te vas arriba al cuarto de huéspedes por qué es tarde y a esta hora no vas para ningún lado".

-"Y tú te vas a tu cuarto por qué te voy a nalguear te has portado muy mal hoy y luego va a ser directo a dormir”.

Como si fuesen uno mismo los 2 adolescentes se quejaron al unísono.

-“Pero Sr. Max yo puedo irme a casa”.

-“Papá pero ya aprendí la lección”.

-“Sin peros jovencitos a papá se le obedece estamos claros o necesitan más incentivos de mi mano?”

-“La habitación de huéspedes es perfecta para mí”.

-“Papito? Puedo ir con Marco a su cuarto, anda di que sí, por favor aunque sea un momento en lo que subes… anda papá que ya estoy condenado, que te cuesta cumplir mi último  deseo?”.

Pero que mocoso más dramático y descarado tengo por hijo!- Max pensó y al ver al muchacho tan insistente y con los ojitos esperanzados para una afirmativa a su petición, dijo:

-“Está bien ve al cuarto de tu hermano y en un rato más subo por ti”

Después de decirle eso a Joaquín mandé a ambos chicos arriba con un beso en la frente a cada uno y una sensación extraña me envolvió en ese momento y es que parecía como si Marco siempre hubiera estado conmigo, solo con verlo quise protegerlo y quiero darle un padre, pues qué más da si lleva o no mi sangre.

A Max no se le salía de la cabeza la idea que en su corazón rápidamente se había formado.

Es familia de Joaquín y eso lo convierte en mi familia, ahora falta ver que él quiera y espero que ese par haga las paces mientras subo porque si siguen peleando grrr no por favor!, me pregunto que estará pensando Marco…

Y lo que Marco pensaba…Me sentía muy raro, ese señor me había castigado, regañado y besado, me sentía muy pequeño como si ya no tuviera que ser un adulto y de nuevo podía ser un niño, así que subí al cuarto muy confundido y con mil preguntas en mi hermosa y estética cabeza ¿Por qué lo hacía? ¿Por qué me trataba como...como un padre?

Ya arriba en el cuarto Joaquín no dejaba de verme.

-"Estas enojado conmigo Marco?"

-"Todavía tienes que preguntar, claro que estoy enojado contigo!"

Me crucé de brazos haciéndome el duro pero Joaquín empezó a llorar y bueno no soy de piedra de inmediato lo abrace

-"No llores tu sabes que te perdono a pesar de que me engañaste para que viniera hasta acá, Joaquín casi me matas del susto"

-"Papá me va a castigar" -le dijo Joaquín miserablemente.

-"Tú te lo mereces" -El niño siguió llorando.

-"Ya enano, de unas nalgadas nadie se ha muerto"

-"Y tú qué sabes!" -Joaquín se apartó de su hermano- "Mamá nunca nos castigó así!"-después de un segundo Joaquín recordó- "papá te pego abajo!" -le dijo sonriendo y Marco se puso colorado -"mira que cuando me pasa a mi ahí si le encuentras gracioso!"

En ese momento también me dí cuenta que mi hermanito acababa de decir “Papá” como si fuera de los dos, estaría el dispuesto a compartirlo conmigo, yo no me quiero hacer ilusiones, con ése hombre, que tal si nada más lo hizo por quedar bien con Joaquín…sí eso debió de ser…oh pero si hay que reconocer que tiene la mano un poco pesada, lo mejor será que cuando lleve a mi hermanito a su habitación yo me vaya a mi casa y así le evito la pena de correrme.

Además me acorde que hay una fiesta, así que ahí puedo ganar un par de pesos para comprar los materiales que me hacen falta para la universidad, pero no conozco el barrio espero que alguien me lleve, pues me gaste lo ultimo pagando el taxi que me trajo.

-"Niños?"

La voz de Max hizo saltar a los dos y el enseguida abrió la puerta.

-"Joaquín yo creo que esto ya lo pospusimos bastante vamos anda a tu cuarto y ya te sigo"

Joaco salió del cuarto pero hasta que Marco lo empujo con gentileza en la dirección de la puerta.

-"Marco espero que sepas que no le voy a hacer daño"-el chico asistió-“Me voy a ocupar de él y tu por mientras puedes ir acomodándote ten"- Max le dio unas frazadas mas limpias y frescas que las que ya tenía la cama -"Después de hablar con Joaquín te traigo algo para que te puedas cambiar para dormir, y mañana más calmados podemos seguir conversando" -El chico de nuevo solo asintió y Maximiliano se fue hacia el cuarto de Joaquín.

-“Papá podemos hablar antes del castigo? Te prometo que ya no estoy intentando que no me castigues en parte se que lo merezco, solo quiero hablar de Marco.

-“Está bien Joaco te escucho, porque no me habías dicho nada de tu hermano?

-“Papá es que tenía miedo más bien tengo miedo de que lo alejes de mi por... por... (Joaco dejo caer unas lágrimas)… por su orientación sexual, papi mi hermano no está enfermo ni nada es solo que a él le gustan los chicos y eso no tiene nada de malo, nuestra madre lo echo de casa cuando se enteró y solo tenía 15 años y unos pocos trabajos como modelo… puedes imaginarte eso? Que tu propia madre te eche por algo tan natural como tu orientación sexual, papá por favor tu no me alejes de él”.

-“Hijo, yo jamás te alejaría de Marco no podría no tengo ningún derecho, si le gustan chicas o chicos es su decisión yo no tengo problema con ello como bien dices es algo natural y dejando aclarado el punto te gustaría que Marco viviera aquí?... es tu hermano y a mí me gustaría que viviera aquí seria mi hijo también pero antes de proponérselo quiero saber qué opinas, Joaco estás de acuerdo?”

-“Claro que sí papá yo sería el más feliz! Gracias, gracias eres el mejor!, mi hermanito es una gran persona y se merece una familia”.

-“Muy bien hijo pues mañana le planteamos la posibilidad a Marco, te parece? pero bien mocosito ahora si a lo que nos trajo a esta charla...Quítate el pantalón, bájate el bóxer y ponte sobre mi regazo”.

Joaco lo miro con ojos de borrego a medio morir pero ante la mirada dura de su padre, no quedó más que obedecer. Una vez acomodado su padre acarició su espalda y sus nalgas para que se relajara y entonces sí, sonó el primer azote que dejo una marca roja en el traserito de Joaco, quien dio el primer respingo y soltó el primer ayyy de muchos que van a caer.

Para Joaquín el tiempo y el castigo de su padre se hacía eterno y pensaba que las secuelas de esta paliza le durarían por semanas y sufriría la pena con que tendría que vivir de ahí en adelante... (adolescentes, siempre pensando que su dolor, pena y problemas eran sublimes e incomparables).

Mientras que en otra habitación Marco se planteaba que rayos estaba haciendo ahí, se daba cuenta felizmente que su hermanito ya tenía un hogar y un padre que le amaba y cuidaba y ante eso él nada podía objetar, más bien, tranquilidad era lo que inundaba su corazón de saber que su hermano era protegido.

Solo no contó con que ésta situación le hiciera sentir que por primera vez en su vida estaba realmente solo…ya Joaquín no le necesitaba para cuidarlo y defenderlo, por lo que había llegado el momento de salir de ahí... del hogar de Max y su hijo. Sin hacer el más leve sonido y con el corazón algo dolorido bajó las escaleras, paseó su vista por la casa nuevamente y se sumergió en la oscuridad de la noche y esas calles que apenas conocía.

Los sonidos de la paliza se terminaron, Max consolaba a su hijo y Joaquín se quejaba dentro suyo:

-“Ya, ya, chiquito ya se acabó”.

Susurraba papá en mi oído mientras me mecía en su regazo, mi colita me dolía mucho papá me había dado muy duro con el cepillo

-“Papi te tiene ya no llores bebito que me haces sentir como el peor padre del mundo”.

-“Eres el peor papá me dejaste doliendo mucho mi colita buaa”

-No digas eso hijito que yo te quiero mucho y sé que tu también me quieres mucho a mí, verdad que sí?- dijo haciendo cosquillas en mi panza

-“Dí que soy el mejor papá o no paro”.

-“Para papi me voy a hacer y tú limpias”.

-“Di que soy el mejor papá”.

-“Eres el mejor”.

-“Di que soy el más guapo”.

-“Lo eres! lo eres!”

-“Di que soy el más listo”.

-“De eso tengo dudas”- dije saltando del regazo de papá y corriendo hacia el piso de abajo.

-“Muchacho ven aquí”.

Papá salió tras de mí y me pescó antes de que pudiera tumbarme en el sillón, en estos momentos era cuando mas odiaba a mi madre por robarme una vida con papá.

-“Bueno ya basta de juegos, ve por tu hermano que ya me acorde que no cenamos”.

-“Si papi, pero me siento contigo porque me dejaste tan rojo el trasero que no puedo sentarme yo solo”

-“Serás descarado, anda ya por tu hermano”

Subí corriendo las escaleras para avisar a Marco de la cena pero él ya no estaba en su cuarto, así que fui a ver al baño pero tampoco estaba allí.

-“PAPÁ MARCO NO ESTA”.

-"Qué? Como que no está?"- Max subió a revisar- "Tienes idea de cómo llegó tu hermano aquí? Traía auto? Sabes a donde pudo ir? Dame su número para llamarlo!... grrr! Niño! como se va sin avisarnos!”.

Max no quería perder los estribos así que dentro su cabeza trato de calmarse.

Mi hijo me dio su teléfono así que lo llame de ahí. Marco contestó en seguida se notaba angustiado...

-"Lo siento hermanito... pero tú ya tienes a tu papá ya no necesitas de mi... Max se ve un buen padre... sé que no va a querer que yo esté cerca..."

Que no quería que estuviera cerca? Yo mato a ese mocoso, va a correr con la misma suerte que Joaquín pero bueno primero hacer que vuelva a casa y si dije su casa! Que MI HIJO de aquí no sale más.

-“Marco Aurelio Casablanca (juró que decirle por mi apellido me salió del alma) claro que te quiero cerca de tu hermano, te quiero como mi hijo así que jovencito dime donde estas que voy por ti y ni se te ocurra escapar por que ya estas metido en un buen lio!”

Joaquín me miraba sorprendido y preocupado por su hermano pero al oírme decir que lo quería en casa me lanzo la más tierna mirada de amor que alguien pueda tener, ahora solo espero que Marco me dé su dirección y no haga esto más grande pero quien sabe verdad? Al fin y al cabo mi niño grande es un adolescente y si es como Joaquín… espero por mi bien que no!

-“Marco contesta hijo dame tu dirección”.

Lo dicho! es tan testarudo como Joaquín…grrr!!!... pero me dará la dirección quiera o no quiera.

-“MARCO AURELIO... dime ahora mismo DONDE ESTAS? Te dije claramente muchachito que me esperaras en la habitación...Estas metido en grande problemas.. grrrr..”

-“Upsss... Max... yo, no quiero molestar... ¡EN SERIO!...

-“Lo que te va molestar es el trasero... si no me dices... donde estás?”

-“La verdad no lo sé... caminé unas calles... estoy pasando por una gasolinera.. yo... AAYYYYY....”

-“Marco?... Marco??? ALOOO... DIOS!!!!!!...”

Maximiliano cogió sus llaves del carro y salió corriendo de casa... el chico iba a pie... por lo que ya tenía una idea de qué gasolinera estaba hablando..

-“Papáaa voy contigo..”

-“NOOO... tú te me quedas quietecito aquí voy por tu hermano... JOACO... será mejor que me hagas caso...ENTENDIDO?..”

-“Si... papá... pero por favor trae a mi hermanito... por favooooor”.

-“Tranquilo hijo... lo traeré...”

Dejé a Joaco y salí corriendo hacia la gasolinera... solo espero que Joaco obedezca cuando le dije que se quede quietecito, porque sabía que algo le había pasado a mi hijo, y por hijo me refiero a Marco, sí, ya lo quería como a un hijo y conocía como eran las calles en la noche, por eso le dije que se quedara pero este mocoso no me hizo caso ¡Diablos! Todo se está mezclando… preocupación por Marco, frustración de no tenerlo cerca, enfado por no obedecerme, tristeza porque tal vez NO quería quedarse conmigo... miles de sentimientos hacen que corra más rápido para llegar a esa gasolinera...

No podía entender cómo pero Marco podía reconocer el lugar en el que se encontraba actualmente.

Sin querer estaba ahí, por primera vez, estaba por primera vez en una casa pero como en casa... el padre de mi hermano, Maximiliano dio conmigo justo cuando el dolor de mi pierna me mataba acababa de hacerme un señor esguince y no podía tenerme en pie; no sé como sucedió pero estaba de ida ya al hospital, con lo que odio esos asquerosos lugares que huelen a medicamentos y te pinchan y te tocan y te hacen sufrir, él debió adivinar mi nerviosismo porque se acerco al oído y me dijo sin dejar a darme achuchones:

-“Da por hecho que aquí lo único que harán será aliviarte el dolor de la pierna, ha!, pero te aseguro que yo te pondré un nuevo dolor en el trasero cuando lleguemos a casa, señorcito!, que a mí nadie me desobedece y no sufre las consecuencias de una buena paliza”.

Yo trague saliva, no pude replicar nada porque en ese momento me llevaron a la sala de rayos X, todo era irreal para mi, solo tenía una cosa rondando en mi cabeza que alguien iba a quitarme le pantalón, y no precisamente como yo quisiera.

Después me llevaron a una habitación del hospital para esperar los resultados de los exámenes y radiografías, estaba demasiado nervioso no sólo por estar en ese terrorífico lugar, sino también porque sé que recibiría una buena tunda cuando llegue a casa con el papá de Joaco.... Y hablando de él… él estuvo a mi lado en todo momento dentro del hospital eso me daba cierta seguridad, pero miedo a la vez... en eso llegó una enfermera interrumpiendo mis pensamientos...

-“Bueno los resultados arrojan de que es un esguince de grado I, por el momento solo le aplicaremos una inyección de ibuprofeno para aliviar el dolor y ...”

-“Nooooo!!!”

Grité sin dejarla terminar de hablar y bajé de la camilla para salir corriendo... Inyecciones no!

- “¡Marco te vas a lastimar! “

Escuché que gritó Maximiliano y antes de poder asentar mi pie con el piso Maximiliano me cogió de la cintura y me dio una fuerte palmada que les juro que me dolió mucho.

-“¡ZAS!”

-“AYYyyyyyy”- grité y se me salieron unas lágrimas.

-“ESTAS LASTIMADO Y SE TE OCURRE ESCAPARTE ASÍ” - me gritó y me hizo sentir peor ¡ZAS! ¡ZAS! otras dos cayeron sobre mi trasero y yo sollozaba bajito

-“AHORA VOLTÉATE Y QUEDATE QUIETO PARA QUE PUEDAN INYECTARTE” - me dijo Maximiliano pero yo estaba demasiado nervioso y no hacía caso en ese momento me sentí realmente como un niño pequeño...

-“Joven HAGALE CASO A SU PAPÁ, si se mueve puedo hacerle daño....me dijo la enfermera... claro después de ver que me dio esos azotes... era lógico que pensara que era mi papá”.

-“Pero es... que ..No..” -Intente decir, pero Maximiliano no me dio chance de nada..

-“ES QUE NADA HIJO”- Y rápidamente... me coloco en posición para ser inyectado...

-“NOOOO.... ¡ZAS!... Auuu... AYYYYYYYYYY...” -Esa enfermera...hijita de su mamá me coloco la inyección a traición..... la muuuuyy....iba a decirlo en voz alta, cuando...

-“Ya... Marquito ya... shhhh, veras como se te pasa el dolor...” -Y por unos segundos... me sentí...tan bien...

Que quise estar todo el tiempo abrazado, alrededor de tanta ternura, Maximiliano me hacía sentir tan bien, era como si tuviera a un padre a mi lado que me llenara de amor sin restricciones ni condiciones, cuando veo a Max preocuparse por mi y llamarme hijo me da un poco de rabia con mamá y es que por que nunca fue una madre presente… por qué?... No se dio cuenta cuanta falta nos hizo? Y ahora Max velando por mi mientras me curan la pierna esto es mucho que asimilar para mi hermosa cabeza… y aun falta lo que este Señor quiere hacer con mi bello trasero, solo espero que Joaco no esté enfadado y puede que sea iluso pero ojala quiera compartir a su papá conmigo.

-"Y entonces señorita ya me lo puedo llevar?"

Max le preguntó a la enfermera que le había puesto una férula en el pie para que no lo moviera mucho y se hiciera más daño.

-"Si señor nada más tráigalo en una semana para ver como sigue, aquí tiene una silla"

La enfermera señaló una silla de ruedas que Marcó estaba viendo con horror.

-"Yo no me voy a sub..."

Max no le dio más tiempo de decir nada lo alzó de debajo de los brazos y lo plantó en la silla el chico era bastante ligero y el puchero en su rostro era tierno al mismo tiempo que algo desesperante.

-"No empieces Marco que es sólo para salir del hospital y ya te dijo el doctor y la enfermera que no apoyes el pie"

Maximiliano ayudó con mucho cuidado a Marco a subir al coche, Marco se sentía confundido, dolorido y muy cansado por lo que decidió ser claro con Max.

-“Señor Casablanca, antes que todo agradezco lo amable que ha sido con prestarme ayuda en todo lo que ha ocurrido, y quiero que sepa que soy muy feliz de saber que mi hermanito cuenta con alguien que le ama y velará por él en todo momento, es verdad que Joaquín es un chico difícil en ocasiones pero le aseguro que en el fondo todo es gracias a las inseguridades que ocasionó nuestra madre en nuestras vidas, y el es un chico grandioso, es muy dulce, bueno y le aseguro que nunca se arrepentirá de haberle llevado a su vida, reconozco que en un principio me asusté pero...ahora me doy cuenta de que todo está y estará bien, ...gracias por todo lo que ha hecho por mí y ahora le agradecería un aventón a mi departamento, pues tengo que organizar mis actividades y con esto del pié, bueno, tendré que reorganizar todo nuevamente y mañana me espera un duro día de trabajo”.

Max escuchó al muchachito sin interrumpirlo, pero cuando escuchó aquello levantó las manos haciendo un gesto de "momento"

-“Bueno Marco, te aseguro que he escuchado muy bien lo que me has dicho pero ahora te ruego que me escuches con mucha atención: Numero uno: tienes toda la razón jamás me arrepentiré de traer a Joaquín conmigo, es mi hijo y lo amo más que a nada. Número dos: yo sé lo que su madre causo en ustedes y si Marco escuchaste bien dije ustedes, eres un gran chico y yo quiero estar contigo en el camino que has de recorrer, yo quiero ser tu padre Marco quiero estar para ti y para Joaco, por favor deja tus propias inseguridades de lado y permítete ser el adolescente que eres que yo te cuidare y veré por ti hijo.  Número tres: no me importa qué decisión tomes el único lugar al que te daré aventón será a casa, mi casa, TU casa y mientras tengas la pierna lastimada de ahí no sales aunque hijo a mi me gustaría que ya no te mudaras, que vivieras con tu hermano y conmigo, anda Marco dame la oportunidad de mostrarte lo que es un padre y date ahí la oportunidad de tener una familia…Qué dices pequeño?”

Marco le miraba con enormes ojos brillantes cuajados de lagrimas, llevaba en esa mirada una ilusión tan, tan grande que dolía, verdaderamente eran muchas las emociones que cruzaban por su corazón y se vislumbraban en aquella triste y hermosa mirada. En su interior sentía que un gigantesco peso poco a poco se deslizaba de su ser con aquel increíble ofrecimiento.

-“De, de verdad quiere que yo viva con ustedes?...yo… yo… no sé qué decir”.

Marco jamás pensó que Max le diera una oportunidad tan rápido, pensó:

Lágrimas se me bajaron por el rostro, no puedo creer que me pase esto, es realmente increíble, si no fuera porque me duele el trasero de las nalgadas que me dio en el hospital diría que estoy viviendo un sueño.

-“Gracias señor Maximiliano”.

-“No gracias a ti por darme la oportunidad de estar contigo”.

Max no podía creer como daba vueltas la vida, hace un par de meses estaba solo y ahora era papá de dos maravillosos chicos.

Cuando llegaron a casa, Joaco salió corriendo y abrazó a su hermano y ya le iba a reclamar cuando Max le dijo:

-“A dormir señorito, mañana aclaras las cosas con tu hermano que él y yo tenemos una charla muy larga y no quiero demorarla más”.

Un enorme y bello puchero se formo en los labios de Joaco, pero un dolorcito en cierta parte de su cuerpo le recordó que debía obedecer a papá.

Max tomó en brazos a Marco y lo subió a su propia habitación, le puso sobre sus rodillas, le bajo el pantalón y el bóxer…observó las blancas y tensas nalgas del crio,… suspiró con resignación, debía castigarlo.

Le acarició un poco la espalda, alzó la mano y le dijo al chico:

-“No quiero que te asustes por eso te diere que voy hacer, te voy a dar unas nalgadas con la mano por tus desobediencias de hoy y voy a finalizar el castigo con el cepillo para que nunca más se te ocurra huir de casa, tendré cuidado de no castigarte cerca de donde te pusieron al inyección”. Dijo acariciando el parchecito de adornaba el trasero de su hijo.

Y ahí comenzó:

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!

“Aaaahhhh no lo hago más” ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! “Max me portare bien lo juro”  ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! “Marquitos mi niño se que te portaras bien pero este castigo es porque lo que hiciste no por lo que vas hacer” ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! “ya, ya, ya, por favor me duele mucho bua buaaaaa. El culito de marco estaba muy muy rojo, pero Max quería que la lección quedara muy bien grabada, así que lo azotes cepillo, y dejo caer unos buenos azotes en la parte baja del trasero para que muchacho recordara no huir de casa cada vez que se sentara. ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack! ¡crack!! ¡crack!! ¡crack! Ya, ya, ya, bua, bua, bua.

Max paro, le subió el bóxer lo volteo y lo abrazo para consolarlo...

-“Shshshs ya bebé papá te tiene, ya nunca más estarás solo...”

Max mecía en su regazo a Marco y le susurraba palabras de consuelo.

-“Ya mi niño grande, papá te tiene, papá te ama nunca vuelvas a huir de casa, mi cielo esta es tu casa y ahora tienes una familia Joaco y yo te amamos, ya bebé a ver una sonrisita para papi?”

-“Buuua me duele mi colita buuua también los amo papi buuuua perdón, perdón”. El chico no se dio ni cuenta que le había dicho papi al papá de su hermano

-“Perdón por que mi niño?”

-“Por decirle papi, yo sé que no tengo derecho de Auch! Y eso por qué?”

Max había soltado un ligero ¡Zass! a la colita de su hijo pero con la tunda recibida le dolió mucho ¡Auuu!.

-“Claro que tienes el derecho, Marco eres mi hijo, bueno? puedes decirme papá o papi o como gustes, eres parte de la familia y como tal te trataré aunque implique un poco de amor salvaje jajaja… así le dice el exagerado de tu hermano cuando le doy unas palmaditas, ya Marky sonríe, anda bebé”.

-“Noo! Me duele la colita y no quiero sonreír”.

-“Ah no? Pues creo que tendré que hacer lo mismo que con Joaco cuando no quiere sonreír”.

Max comenzó a hacer cosquillas a Marco.

-“Ya papi para, yaaa que me voy a hacer pis”.

-“Jajaja no que no sonreirías bebé?”

-“Ya papi te voy a acusar con Joaco jajaja eres el mejor del mundo!”

-“Oh hijo ven aquí (se abrazaron intensamente) pequeño quieres dormir conmigo? Iré por Joaco que ha de estar esperando a que vayas a tu habitación, ve acomodándote ya vuelvo”.

Max apresuró sus pasos hacia la habitación de Marco y luego con una sonrisota en la cara volvió a la habitación de Joaquín.

-“Joaco arriba bebé, ni te hagas el dormido que bien que te conozco, anda hijo arriba vamos a mi habitación a dormir”.

-“Los 3 juntos papi?”.

-“Si mis 2 hijos y yo”.

-“Wiii eres el mejor”.

-“Descansen hijos que fue una noche muy larga, mañana charlaremos de acuerdo? Dulces sueños pequeños los amo”

Por la noche Joaco no podía dormir bien, se estaba moviendo con constante desesperación y todo gracias al Sr. Conciencia que lo torturaba en estos momentos y lo peor era que no la podía callar. 

Gracias a algún Santo logró que su papá no lo descubriera...Max le había dicho a Joaco cuando se fue que no se saliera de la casa... Pero era su hermano y seguro que se había ido por sus inseguridades y ya no lo quería ver, él quería con todas sus ganas que su hermano viviera de nuevo con él, pero si él no quería?

Tomó una decisión, iría a buscar a su hermanito y lo traería a casa antes que su papá!... oyó a Max decir algo de una gasolinera y así salió disparado pero no contó con qué sería a la otra gasolinera del lado opuesto y que se perdería!... apenas y llegó a casa un minuto antes de que llegara su papá.

Y cuando vio el pie de Marco y supo el porqué de su tardanza, si no, ya estuviera con el trasero más rojo que el de su hermano, quizás fuera por eso que no podía dormir pasadas de las 3 am.

Después de la millonésima vuelta de Joaquín, Max preguntó a Joaco:

-“Hjito que ocurre, no puedes dormir? Habla con papá corazón”.

-“Es que Papi si te digo me vas a pegar”.

Eso encendió las alarmas de Max.

-“Hijo que hiciste..”- Y ante el silencio de Joaco insistió un poco más- “Hijo es mejor que me digas” y ahí entre lágrimas Joaco le contó todo a su papá.

-“Cariño ya te había advertido” Max tomo a su hijo y le bajo el pijama le dios dieciséis fuertes nalgadas que reavivaron el dolor que sus nalguitas ya sentían y lo metió a la cama, lo abrazo con dulzura y Joaquín se durmió enseguida.