Dylan

Las cosas en el Zoo estaban geniales al igual que en casa… Lily había accedido a pololear con Dylan y para celebrar el primer mes juntos Dy se propuso hacer un reto de amor… entrar a la jaula del León y poner un lienzo que dijera

“Lily te amo Dylan”

Vamos que estamos claros que no era la idea más genial del mundo pero era lo único que se ocurrió y gracias a las cosas del destino Benjamín paseaba con Kelly cuando vio a su hijo intentar entrar a la jaula… corrió como un loco y lo alejó de la reja y ahí en medio de Zoo Benjamín le bajo los pantalones y calzoncillos a su hijo y lo castigo

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!

“en que pensabas Dylan…”

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!

“papá en casa en casa… puede venir alguien”

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS!

“que acaso te preocupa más que te vean recibiendo unos azotes  a que te vean siendo devorado por un León” le grito y castigo mas fuerte.

¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! Entrego la últimas nalgadas terminado así el castigo le acomodo la ropa a su hijo, lo abrazo con fuerza y beso los ojos…mientras decía.

“Kelly por favor disculpa a Dylan con Lily y dile que está castigado no la podrá ver en una semana”

“Claro”.-  dijo un tanto incomoda por la situación vivida… Dylan se quería morir de vergüenza… oculto su cara en el cuello de su padre… y se dejo guiar a su habitación.

A las horas de estar encerrado pudo ver por la ventana su lienzo y uno que decía Dylan te amo Lily y a su polola haciéndole señas…

“anda corre tienes una hora” le dijo Benja a su hijo desde la puerta.