KEVIN

KEVIN

Kevin cenaba con su papá  en casa de su padrino  y su madrina, era la cena de noche buena y su padrino le tenía un mego regalo a su adorado diablillo. Le había comprado la patineta de sus sueños  y por condición de su papá con todo el equipo de protección. Al recibir el regalo Kevin alucinaba de felicidad aunque arrugo un poco la cara cuando su papá le hizo prometer que usaría siempre casco  y los demás accesorios para su protección a lo cual Kevin acepto con tal de que le permitirán usarla. A la mañana siguiente a la primera oportunidad que tuvo de probar su nuevo regalo lo hizo pero sin usar nada ni siquiera su casco y a la primera acrobacia fue a dar al piso con tan mala suerte que su papá  lo vio todo, al llegar  su papá y luego de asegurarse de que estaba bien don Carlos le soltó allí mismo  seis correazos que le   hicieron ver hasta estrellitas de colores al pobre chico sin mencionar la vergüenza de que todos lo vieran.