Páginas Amigas

jueves, 21 de enero de 2016

ESTA VEZ SERE YO Capítulo diecisiete




ESTA VEZ SERE YO
Capítulo diecisiete
Matt: Papá, Mario y los chicos van a Mérida ¿puedo ir con ellos? Dile a mi hermano que me inviteee papiiiii ¿siiii?
Mario: toma mi teléfono Nando que sea la última vez que le usas el de tu hermano sin permiso, Rena claro que iras con nosotros. 
Phillips: lista las copitas dijo repartiéndoles a todos y dejando una para él y para Samantha, y a los peques les dio nórdica para que brindarán.
Nando: Si, papá gracias. Luego me las pagas chismoso. Le murmuró a Chucho.
Samuel: Matt puede ir si se regresan el domingo el lunes tienes clase, y no puede faltar. Dijo contundente.
Matt: Paa por un diiita, no pasa nada.
Mario: volvemos el domingo papá, Nando no amenaces a tu hermano o te vas a ir calentito a dormir, Samantha y Phillips preferiría que brindarán con nórdica.
Phillips: pero tío Mario un poquito, por fi por fi. Dijo olvidando el castigo impuesto por su padre, donde le tenía más que prohibido tomar una gota de alcohol.
Gerard: Phillips II Chanpentier, obedece o quieres un recordatorio… aquí y ahora. Dijo más que serio.
Phillips: ahg que pesado papá ya soy grande.
PLAS Auaua... Pesada lo que tengo es la mano, y ya deberías saberlo.
Nando: Todos los papás son iguales, que lata más grande. Claro como Chucho es el consentido...grrrrrrr...
Phillips: papá te pasas esta mi novia y mis cuñis.
Gerard: El pasado aquí eres tú, que se busca la cosa. Sabes perfectamente lo que tenemos conversado del alcohol.
Mario: Acá también es un tema delicado para los hijos, por eso necesito evitarlo, Samantha sabe de qué hablamos.
Samantha: Sabes que yo no tomo papá.
Mario: Lo sé princesa, y entiendo que un brindis no es nada, pero prometieron ser solidarios con su hermano.
Samantha: no iba a tomar, papi no me gusta. Le dijo con un puchero. Sólo era para el brindis. Mario, abrazó a su hija y le dio un beso en la frente.
Phillips: Ahggg… toda la razón Nando los padres son una lata.
Gerard: Sigue Phillips, y el paseito de mañana quedará en veremos.
Mario: No digas eso Gerard, mejor dile que lo que va a pasar es que viajen calentitos, y las horas en el avión sean inolvidables. Le dijo mirando a Nando.
Phillips: Gruuuu se pasan, de calentitos nada, ya soy grande, papá córtala que me haces pasar vergüenza. Le dijo con zapateo incluido, al sinvergüenza no le importaba nada los espectadores ya que estaba acostumbrado a los berrinches públicos.
Gerard: Mi hijito siempre aprendiendo por las malas. ¿Qué voy a hacer contigo?
Mario: En el estudio en la segunda gaveta del escritorio en la ala derecha. Hay algo que puede serte útil Gerard. Mario, odiaba los berrinches en público.
Phillips: Gruuu y para que quiere unos papeles. Dijo iluso pensando que lo pondría a escribir.
Gerard, quedó curioso y pescó a su príncipe de la oreja nuevamente y de arrastra se lo llevó.
Phillips: sueltaaa papi ya me porto bien. Le tomó la mano y su orejita para evitar que tirara. Suelta mi orejita.
Gerard: ¿Ya me porto bien? no la cosa no es así… no cuando te conviene Phillips. Entraron al estudio y cerró la puerta, se encaminó cerca del mueble del estudio, sin soltarlo de la oreja y con la mano libre encontró el instrumento que Mario le había insinuado. Sin dejar que Phillips lo viera se sentó en la silla y colocó a su retoño nuevamente sobre sus rodillas, claro antes pantalón y calzoncillo fueron a caer abajo… mucho forcejeo claro porque Phillips no estaba para nada de acuerdo de quedar otra vez en esa posición, aún tenía algo rosado su bello trasero.
Vamos a ver si ahora no vas a hacer caso Phillips II Plack, Plack, Plack tres reglazos seguiditos le cayeron al pobre potito sin previo aviso.
Phillips: Aaaaaaaaaaaaa papito papito noooo me estas matando.
NO más berrinches en público Phillips, no estoy bromeando Plack Plack Plack ¿Entendido?
Phillips: porqueeeeeeeeee se quejó. Para él eso era la forma segura de lograr lo que quería.
Plack No Plak Mas Plack Berrinches… ¿Entendido? El chico rebotaba con cada reglazo, el pobre que día… o noche: la correa, la mano y ahora la famosa regla Hoffman que Phillips jamás había probado en la vida.
Phillips: nooo papi me dueleee papito no más me duele muchito.
Gerard: Entonces di, que no habrá más berrinches y paramos el castigo. ¿Philliiiiips?
Phillips: no más berrinches papito no más berrinches. Dijo sollozando.
Gerard: Shhh ya pasó… ya pasó bebé. Le dijo sobándole la espaldita, el chico se rindió en las piernas de su padre, agotado. Así que Gerard luego de vestirlo, lo arrulló como si fuera un pequeñito. Shhh ya campeón, ves lo que consigues con ese comportamiento. Le decía mientras le besaba la frente.
Afuera, unos segundos antes tras ver aquella escena.
Nando: PAPAAA te pasas como le dices al papá de Phillips que lo castigue con la regla… eres de lo último papá… de lo último...grrrr.
Mario: ¿Estás haciendo mérito para ocupar el puesto de Phillips?
Nando: No... papi. Dijo cayendo en cuenta en la que se estaba metiendo.
Chucho: ¿Arrugando? Le dijo en forma de burla.
Nando: Vamos a jugar play mejor. Dijo sujetando del brazo a Chucho
Mario: A jugar un carajo, se me empijaman y a la cama. ¡Vamos! Dijo molesto.
Chucho: que carácter vamos Nando.
Mario: Samantha tú también, deja que padre e hijo terminen de solucionar sus cosas solos.
Samantha: estoy furiosa contigo.
Mario: Princesa cuando seas madre lo entenderás, Gerard hizo lo que cualquier padre, y por cómo iba la cosa, lo único que hice es que no le cayeran más correazos a tu novio.
Samantha: pero mi pobre Pipe… le dijo con un puchero su padre. Además tú lo conoces papi él es berrinchudo pero es buen chico.
Mario: Si mi amor, pero ya tiene 19 los berrinches debieron pasar a la historia hace ya bastante tiempo. Vamos a dormir, mañana lo mimas, mira que necesitara valor para permanecer sentado.
Samantha: te diviertes papá. Lo regaño. Te  gusta tener a tu amiguito en casa.
Mario: jajaja no me burló del trasero ajeno eso es malo, pero no te niego que me gusta que mi amigo este, y que no somos los únicos que usamos esos métodos de persuasión.
Samantha: es que Pipe, Nando y Chucho son como trillizos.  
Gerard como pudo tomó a su hijo, Phillips caminaba pegado a su padre, al salir Mario le indico que fueran a su habitación.
Mario: cuando lo dejes te muestro tu cuarto.
Gerard: no te preocupes me quedo con mi principito. Después de acosarlo fue a buscar su maleta. Luego decidió tomarse un whisky con Mario. Le ha tocado muy duro hoy a mi hijo.
Mario: Es que sus pataletas eran adorables cuando era un pequeño, cuando crecen ya no tanto.
Gerard: Sip pero no quiero que nunca cambie, lo amo tal cuales.
Mario: y tú sabías que los chicos tenían planes de irse a vivir juntos.
Gerard: la verdad no sabía que Phillips tenía novia, fue un alivio saber que era Samanthita.
Mario: lo mismo dijo, casi me dio un infarto cuando mi niñita me gritó que tenía todo listo para irse a vivir con su novio.
Gerard: que se creen, tan agrandados el parcito es bien fácil hacer vida de pareja con la plata de los papás.
Mario: eso mismo digo.
Gerard: pero bueno nos matamos trabajando para que no les falte nada, en todo caso lo único que me quedó claro es que mi bello pataletero no está en condiciones de vivir solo, o sea viste la mega pataleta. Dios mi padre me hubiese cruzado la cara de haber sido yo y hace que no me queden más ganas de decir que no.
Mario: jajaja y al otro, si cuando me levanta la voz a esta edad sudo frío...jajaja.
Gerard: ¿y esa regla del terror?
Mario: De mi padre, es la que quita lo malo y pone lo bueno… así la define papá, y bueno en casa todo hijo tiene una... algo que heredamos del abuelito Enrique.
Gerard: y después de sufrirla la ocupas yo no podría, bueno mi padre era un bestia también.
Mario: Papá solo se limitó a castigarnos pero nunca ha sido excesivo incapaz de hacernos daño, igual que nosotros y tú, son nuestros hijitos.
Gerard: es la luz de mis ojos, todo lo que pelee para tenerlo conmigo fue sangre sudor y lágrimas pero está a mi lado y no lo cambiaría por nada del mundo.
Mario: Me alegro amigo, me alegro… sé lo que te refieres, no cambiaría mi vida, mis hijos son lo mejor que me ha pasado y ahora esperando otra vez, jajaja otra vez pañales, teteros y estranochos.
Gerard: no te envidio, no sé cómo lo haces yo con uno tengo las manos llenas.
Mario: No te diré que es fácil, pero con amor todo se puede, aunque he metido la pata hasta el fondo más de una vez. Y ya viste, mis fotocopias son adorables pero a veces solo deciden pelearse como si tuvieran 8 años, claro que ya no por los carritos de juguetes, sino por el celu, lapto, tablet, etc.
Gerard: Son geniales, siempre quise darle hermanos a Phillips pero las cosas no se dieron, aunque he de confesar que fue por miedo a pasar por lo mismo, no saber de tu hijo es lo peor que un padre puede vivir, vieras lo que me costó dejarlo irse a su departamento.
Mario: Pues no es para menos… una vez estando los gemelitos peques Nandito se separó detrás de un perrito, y fueron los peores 15 minutos de nuestra vidas, no puedo  imaginar que se vayan por mucho tiempo.
Gerard: Te creo yo al menos sabía que estaba con su madre.
Mientras los padres conversaban amenamente, los gemelitos en cuestión comenzaron una discusión que alertó a Mario.
Chucho: AUAUAUA… sueltame PAPAAAAAA Auxiliooooo...
Nando: Cállate imbécil… cállate.
Mario: ¿qué rayos está pasando aquí’, me dicen ya mismo.
Chucho: Papiii Nando...
Plack Auauau… sonó un golpe que le soltó para que no dijera nada.
Mario tomó a Nando de un brazo.
Nando: Sueltameeeee… papaaa, todo es mentira lo que quiera decirte Chucho es mentiraaa... nooo...nooo... papiii no porfaaa.
Mario: Lo has pedido a gritos. PLAS PLAS. Pregunte que paso me dicen ya mismo o voy por la regla.
Nando: Nadaaa no pasa nada papaaa. Dijo sobándose su trasero.
Mario: Uno.
Chucho: Nando me daño mi Mp3, lo rompió porque no quise prestárselo. Mira...grrrr y de paso me golpea.
Mario: Chucho mañana te compro otro hijito ahora ve a la cama. Nando ven conmigo.
Nando: Eso es todo y de una le crees… ¿ves cómo él es tu preferido? ni siquiera me preguntaste si es verdad… Claro el alcohólico tiene la culpa de todo...
Mario: primero les pregunté a los dos tu no quisiste decirme nada, ahora hijo hazle caso a papá, ven.
Nando: NOOOO… no quiero, él es un egoísta yo si le doy mis cosas, y si las daña yo no voy de nenaza a acusarte contigo… ahhh pero él...grrrrr. Nando la falta de bebida en su organismo estaba pasando factura susceptible... depre, de paso ver a sus hermanos con parejas y verse solo, era terrible para él.
Mario se armó de paciencia lo tomó en brazo y lo sacó de ahí. Vamos mi niño lindo,
Nando: NOOOO no me pegues papiii… buaaaaaaaa buaaaaaaaa….
Mario: no te voy a pegar mi gatico hermoso.
Nando: siiii… lo vas a hacer, porque soy malo, por eso estoy solo.
Mario: mi principito maravilloso, tú no eres malo mi niño estás luchando muy duro y eso hace que las cosas te molesten más, recuerda que el médico dijo que esto podía pasar, pero mi sol papi está a tu lado y te ayudará a pasar por todo este mal rato y mi gatico ya encontraras a una bella gatica… pero en qué momento a mi bebito le empezaron a gustar las chicas.
Nando: papito… ish ish me da rabia, y no sé porque, soy malo debería alegrarme por mis hermanos y en vez de eso siento celos, envidia...buaaaaa buaaaa no te canses de mi papiii por favor, que si no yo me muero. Nando se guindo del cuello de Mario, a llorar con sentimiento, sentía un cúmulo de sentimientos encontrados.
Mario: eso jamás hijo, tu eres mi vida, daría todo para poder quitarte ese dolor amor, pero no puedo mi niño valiente estás luchando tan duro, estoy tan orgulloso de ti, de tu fortaleza, de tu entereza en enfrentar la vida, sentir celos no te hace mala persona te hace humano, mi vida, ya vamos avanzando mucho con tu tratamiento, le has puesto mucho empeño pero te has encerrado mi niño y eso no es bueno ¿te parece si el lunes buscamos alguna actividad que te guste hacer? le decía mientras le daba besitos en su frente y cabeza.
El chico solo se encogió de hombros, él era un genio las actividades deportivas no eran su fortaleza. Perdóname papito, no quise romperle intencionalmente el Mp3 a Chucho, quise devolvérselo porque no me lo quiso prestar y lo estrellé contra el piso, lo lance a la cama pero rebotó con la colcha.
Mario: los accidentes pasan Nandito, y bebe ¿qué paso con tu Mp3?
Nando: Se quedó en Italia.
Mario: que horror porque no me lo dijiste antes, mañana te compramos uno para ti también y Nandito vamos a tener que poner más saldo en los teléfonos, pero hijo si se te acaba me pides el teléfono a mí, no le sacas el de tu hermano, ¿tenemos un trato?
Nando: ¿Me devolverás mi celu, papiii? Dijo con una sonrisa, a Mario se le había olvidado que el celu de Nando, estaba decomisado.
Mario: quedan dos días, pero yo te prestaré el mío.
Nando: Graciaaaas, porque eres tan bueno conmigo, si no me lo merezco.
Mario: porque  tú te mereces lo mejor hijo, mis hijos son lo mejor de mi vida, y Nando vamos a salir adelante, te lo prometí y lo voy a cumplir. Y Fernando lo dije en serio estoy muy orgulloso de ti.
Nando sonrió y abrazó a su padre muy fuerte, no quería soltarlo, porque pensaba que esa paz se podía desvanecer.
Mario: ¿mi gatico loco quiere una lechecita antes de dormir?
Nando: ¿Con choco? ¿siiiiii?
Mario: Había pensado con naranja pero si prefieres con choco así será.
Nando: ¿Con naranja? nooo acá son ácidas y si mezclas ácido con leche, a esta hora me puede dolor la barriga papaaa.
Mario: Es con la cáscara, sirve para dormir, es muy rica a ti te gustaba cuando pequeñito.
Nando: Aaahhh… prefiero con choco. Le dijo sonriente.
Mario siempre manteniendo a su niño abrazado fue a la cocina, sentó a Nando en una silla mientras calentaba la leche preparó dos tazones y se sentó al frente de su hombrecito.
Mario: ¿cómo me quedó la leche?
Nando: deliciosa pa... Dijo sin dejar de tomar. ¿Papi? ya han pensado los nombres de mi hermanitos?
Mario: aún no sabemos que serán, salieron pudorosos y no se dejan ver. Dijo con un puchero. Se nos ocurren varios pero tú ¿has pesado en algunos?
Nando: No he pensado, pero no está bien decirle bebés, lo correcto es que vayan escuchando su nombre, hay un estudio que indica que la estimulación es lo mejor.
Mario: gracias a Dios mi hijo es un genio porque si no estaría muy perdido, te prometo que en cuanto sepamos que serán les pondremos nombres. Sabes con ustedes supimos enseguida que serían mis principitos.
Al terminarse la leche con chocolate Mario dejó todo lavado.
Mario: ahora a la cama, esta noche te acostarás con los papás. Dijo dirigiendo a su niño a su cuarto, luego de acostarlo, dejarlo dormido abrazado con su madre fue a ver como estaba Chucho y Samantha él les daría el tiempo a cada uno de sus hijos aunque eso signifique tomarse 3 vasos de leche con chocolate.
Chucho: Papi ¿no fuiste muy duro con mi hermanito, verdad? Ya mi Mp3 estaba algo golpeado. Dijo en modo de justificación, siempre era lo mismo con Chucho, siempre se quejaba y luego se arrepentía de meter en problemas a su hermano.
Mario: lo que pase con tu hermano es entre él y yo, ahora a dormir bebe ¿o quieres una lechita?
Chucho: ahh es que no me gusta cuando lo castigas por pelear conmigo papiiii, y no, no quiero nada gracias. Dijo dándole la espalda en la cama., algo triste, si su hermano no dormiría en el cuarto con él, era que seguro lo habían castigado.
Mario: tu hermanito está luchando mucho hay que apoyarlo y ser paciente con él, superar el alcoholismo no es algo de un día para otro es muy doloroso el proceso y tu hermano está poniendo un 500% para recuperarse, hijito lindo tienes que aprender a compartir sé que nunca has tenido que hacerlo porque siempre es Nando el que comparte lo suyo contigo por ser su hermanito menor pero ya eres un jovencito y debes poner de tu parte y ser más empático con los demás sobre todo con tu gemelo que tanto te necesita.
Chucho: Nando siempre hace todo dando su mejor esfuerzo, hasta para beber se fue al límite sin dejar de ser el mejor estudiante, sin abandonar lo que hace, así que su recuperación será igual, él no me necesita…. ya tiene toda tu atención que era lo que quería, yo siempre estaré demás como el mediocre que soy.
Mario le dio tres nalgadas. Cuidadito que es de mi maravilloso hijo del que estás hablando. Tú no eres mediocre mi amor he visto como este mes has subido mucho las notas más de lo que te comprometiste estoy muy orgulloso de ti y he de confesar que vi los hermosos diseños que haces para el libro de mamá, perdón por espiar no pude resistirme, y cuando hable con tus profesores te llenaron de alabanzas me dicen que se nota un cambio en ti desde que partiste la academia y tengo una sorpresa para ti pero debes esperar un mes. En cuanto a Fernando te necesita él está más mal de lo que piensas y necesita a su mitad que le de fuerza y que le tengas paciencia, eso no quiere decir que pueda tratarte mal eso jamás  siempre que lo haga terminará con el trasero calentito pero yo no puedo castigarlo por cosas que no puede controlar... y por último de la próxima semana buscaremos ayuda para esa inseguridad que te carcome el corazón, y no me pongas esa cara sí solo no partimos el lunes porque está Karla, ahora vamos a la cama el papi te vino a buscar para tener a sus fotocopias juntitas.
Auuu que cariñoso… grrr, yo no necesito ayuda, se perfectamente lo que soy y no lo niego, nunca ha sido inseguridad. Y ahora no quiero dormir con ustedes, quiero quédame en mi cuarto solo respeta mi espacio.
Mario le bajó el pijama y le dio tres fuertes nalgadas. Te prohíbo que te refieras a ti en esos términos Jesús Enrique.
AYYY paaa… ¿Por queeee?
Mario: Porque no es verdad y lo sabes y si lo quieres olvidar mi mano te lo va a recordar.
Chucho: Grrr… porque no lo aceptas, no ganas nada engañándote.
Mario tomó a su hijo se sentó en la cama le desnudó el trasero y lo acomodo en su regazo. Si quieres seguir en esa actitud estaremos un buen tiempo aquí, solo te recuerdo que  mañana tenemos un largo viaje y no creo que para ti sea muy cómodo.
Chucho: NOooooo no papiiiii por favooooor ya noooo, papiiii perdón perdón no te lo vuelvo a decir te lo juro. Decía mientras pataleaba y se tapaba con las manos su traserito.
Mario le corrió las manos Plas plas plas es a ti a quien debes pedir perdón  AYYYY noooooo... ya papiiii, yaaaa.
Plas plas plas quien eres tu Jesús Enrique. Auauau Ayy lo que tú quieras que diga buaaaaa…
Plas plas quien eres amor. Buaaa… el segundooo para todo buaaa...
Plas plas AYayaya eres un joven maravilloso. Repite con papá soy maravilloso. Plas pla…. Soy...auaua... no puedoooo...no es verdaaad no debo mentir lo recuerdas.
Plas plas plas plas estoy esperando Jesús. PUES TE MORIRÁS DE CANSANCIO… QUE LO SEPAS... Y de un tirón, cayó al suelo, se subió el pijama como pudo y echó a correr escaleras abajo.
Mario alcanzo a Jesús y se lo echo al hombro con una facilidad impresionante, pero no lo dirigió a la pieza si no al despacho y cerró con llave tomó la famosa regla que jamás pensó que aplicaría con su Chuchito pues por lo general se comportaba de maravillas.
Mario: no me moriré hasta saber que mis niños están bien y Jesús no voy a permitir que te hagas daño, prefiero que esta noche termines con el trasero adolorido pero no con el corazón roto te amo demasiado para permitirlo. Dicho eso volvió a desnudarle el trasero y a dejarlo sobre su regazo. ¿Quién eres Jesús? Dijo antes de dejar caer la regla.
Chucho: Soy tu hijito, que dices que amas mucho así que no me pegues con eso tan feo papitoooo por favor, te juro que seré buenito, pero con eso no papi te lo suplico buaaaaaaaa.
Mario tiró lejos la regla y lo abrazo con todas sus fuerzas. Te amo tanto hijito, Mario estaba destruido. Te amo y eres lo más valioso en mi vida, ¿me crees verdad?
Chucho: sip...ish ish... lo siento, lo siento tanto.
Mario: desde el lunes quiero que todos los días te sientes en ese escritorio y me escribas o dibujes sobre la maravillosa persona que eres.
Chucho: ¿Todos los días? papiiiiiii por cuánto tiempo.
Mario: todos los días y si no cumples te daré un fuerte reglazo en ese pequeño traserito travieso es un trato. Dijo besándole la nariz
Chucho: ¿Que trato es ese papiii? No hay nada que me favorezca.
Mario: eso es lo que tú crees, pronto te darás cuenta que todo esto es por tu bien, luego le habló al oído a pesar que estaban solos era una forma de contarle un secreto muy íntimo. Papi también lo hace, al principio lo encontré tonto y sin sentido ahora veo como me ha ayudado a salir adelante, aprendí a verme como el resto me ve y no como creí que era.
Chucho: Tú eres super especial papi, no hay otra forma de verte. Le dijo abrazándolo muy fuerte.
Mario: yo no lo hacía, yo pensaba que yo no merecía la pena vivir que ustedes estarían mejor sin mí.
Chucho: noooo papi sin ti, Nando se hubiera ahogado en el alcohol, Sammy se hubiera ido lejos con su novio, mami tal vez estaría tan triste y sin mis futuros hermanitos y yo… yo. No pudo decir más solo le corrieron unas lágrimas cayeron, sin cesar.
Mario: y tú que mi amor, mi Chuchito cuenta, mi vida hermoso tu eres tan importante como tus 4 hermanos, todos mis hijos lo son aunque sus necesidades sean diferentes todos mis hijos son lo primero y seré el mejor padre que pueda para cada uno en la forma que cada uno lo necesite.
Chucho: Yo me hubiese ido tras tuyo, de la misma forma seguiría tus pasos. Dijo muy bajito.
Mario: por eso hijito necesitamos ayuda y que empieces a verte como yo lo te veo es lo primero por eso es el trato. Dijo besándole los ojos. Te juro hijo que no me vas a perder y si llega a pasar no será por mi voluntad porque yo me aferrare a la vida con todas mis fuerzas para ver crecer a mis hijos, para ver a mis nietos y estar ahí para cada paso que den en la vida.
Chucho: Y yo seguiré tus pasos. Le dijo abrazándolo fuerte, y se dejó mimar por su padre.
Mario: entonces ¿quién es mi Chucho maravilloso?
Chucho: Tu hijo, por ende un chico maravilloso como mi papá.
Mario lo dio vuelta y le dio un besito en el culito. De la que nos salvamos culito lindo de mi hijito. Le dijo antes de volver a vestirlo.
Chucho: Papaaaaaaaaa… que pena, ya estoy muy grande para eso. Dijo algo abochornado por ese gesto.
Mario: que pena ni que nada, yo te cambiaba los paños.
Chucho: Pero cuando era bebeeee no a esta edad grrrr… no le vayas a decir a nadie sobre esto grrrr.
Mario le dio otro beso. A nadie, los temas que yo trate con mi príncipe son solo entre mi príncipe y yo eso incluye premios y castigos.
Chucho: Pues a ver si incluyes solo premios. Si Karla se entera de esto me muero de la vergüenza.
Mario: si son premios depende solo de ti. Por mi no aplicaría ni una sola nalgada en ese culito. Desde el lunes todos los días antes de la merienda quiero lo que te pedí.
Chucho: Esta biiiien papi
Mario: solo para quedar claros ¿qué va a pasar si no cumples?
Chucho: Me darás ¿un beso en el culito? Dijo pícaro.
Mario: si un beso después que la regla te bese el culito porfiado.
Chucho: Ouch paaa nunca me has pegado con esa cosa. Y como hoy segurito no lo harás. Dijo cruzando los brazos odiaba que lo amenazaran.
Mario: ¿quieres saber que tan serio soy es eso?
Chucho: AAAhh papá ni que fuera masoquista. Jooodeer. Dijo torciendo los ojos.
Mario: hice una pregunta, si crees que el lunes no cumples y yo no voy a cumplir estas muy equivocado.
Chucho: Bueno esperemos al lunes entonces, ya que vete a dormir con tu mujer y tu otro hijo.
Mario agarró la regla y Chucho nuevamente estuvo con el poto al aire. 
Noooo papiiii, si me pegas no te lo voy a perdonar… oisteeee
Mario le dio un solo reglazo PLACK AAAAAAYYY BUAAAAAAAA. Basta de esta actitud Jesús querías comprobar que sentirías bueno esta es la dichosa regla que jamás creí tener que usar contigo, ahora bebe dime papá ya sació tu curiosidad ¿o quieres otro?
BUUAAAAAAAA… creía que jamás BUUUUAAA lo usarías conmigo…
Mario: y yo pero mi bebe estaba muy ansioso por conocerla que no espero hasta el lunes.
Chucho: ¿Tú cumples tus promesas?
Mario: con mis hijos sí, así que ya sabes si no cumples con tu parte un reglazo en el potito y luego a cumplir con la tarea.
Chucho: Pues, entonces yo también… te dije que si me pegabas con eso no te lo iba a perdonar… y no lo haré. Chucho corrió a la puerta, y se frustró al ver que estaba cerrada, comenzó a darle golpes a la puerta y a gritar.
Chucho: MAMAAAA, ABUELOOOO SAQUENME DE AQUIIIII AUXILIOOOO.
Mario lo tomó nuevamente le dio cinco nalgadas bien fuertes y lo dejó en el rincón a poto pelado. En silencio y te quedas ahí 17 minutos.
Chucho: BUAAAAA BUAAAAA…. eres malo, maloo buaaaaaaaaa.
Mario: no lo soy, solo soy tu padre que te está educando.
Chucho: A golpe...buaaaaaa
Mario: a como mi hijo lo necesite, ya sea con un abrazo o una nalgada. Sé que estás enojado conmigo pero que sepas que te amo.
Chucho: Buaaaaa… estoy enojado...siii muy enojado... buaaaaa ojala fuera Nando, para poder irme lejos como él, porque finalizó la escuela y las uni de todos lados lo llamaran… buaaaaaa
Mario: Mi Jesús va a estudiar en la universidad que él elija, me escuchaste
Jesús tu futuro está en tus manos, serás en la vida lo que tú quieras y yo estaré ahí para ver con orgullo a mi hijo cumplir sus metas eso no lo dudo ni por un segundo, así que si quieres estudiar en la China comienza a estudiar chino mandarín porque tú irás donde tú quieras ir aunque se me parta el alma no verte todos los días tu harás en tu vida todo lo que te propongas.
Jesús: Por ahora solo quiero salir de este estúpido rincón e irme a mi cuarto, déjame salir papá.
Mario: los 17 minutos comienzan desde que te quedes callado.
Chucho le lanzó una mirada de puro odio, y se volteo para mirar la pared, hervía de rabia, comenzó a respirar profundo para no llorar y entretenerse en otra cosa a fin de no pensar en nada y que los minutos se pasaran rápido, y en eso se fijó en un envoltorio, debía ser un cuadro, pudo ver que en la esquina el papel estaba roto y se veía un marco hermoso debía ser una obra de arte maravillosa para ser digna de tal perfecto marco y se concentró en eso los 17 minutos que estuvo parado en el rincón.
Mario: ya puedes salir Jesús.
Chucho, molestó se vistió. Iba a salir pero no aguanto las ganas de ver un pedacito aquel cuadro, seguro era de su abuelo, ambos le encantaban las obras de artes y las beneficencias.
Mario: Es mío. Dijo como leyéndole la mente. Es la opera prima de un gran artista y yo creo en él.
Chucho volvió a mirar a su padre con odio reflejado en sus ojos, y salió corriendo cuando Mario abrió la puerta. Más tarde vería el cuadro, cuando nadie lo viera.
Mario fue a la recamara de su hijo. Te amo bebe trata de dormir, sé que en este momento me odias pero yo nos querré por los dos. Y le beso la frente. Luego hizo lo mismo con Samantha que dormida no se había enterado de nada.
Chucho no podía dejar de llorar, por ende dormir no fue posible, de vez en cuando miraba el reloj, hasta considero que ya no se escuchaba nada en aquella casa, y por su mente otra vez aquel cuadro… y las palabras de su padre el gran artista en el que creo… grrrrrrrrr. Nunca le llamó la atención el arte, es que de paso quería hacerlo sentir mal con eso.
Bajo descalzo para no hacer ruido, y entro sigiloso al estudio del abuelo, cerró la puerta y encendió la luz, con mucho cuidado trataba de ver el cuadro pero solo lograba ver el marco, era taaan bello.
Chucho: Grrrrrr si pudiera abrirlo un poquito… pero si lo hago papá se dará cuenta. Se sentó en el piso, y de vez en cuanto casi tocaba el papel pero volvía a sacar la mano como si picará.
Mario rompió el silencio, él estaba sentado en el sillón todo ese tiempo y Chucho no se había dado cuenta. Si quieres ábrelo, sabes que todo lo mío es de ustedes
Chucho pego un brinco de muerte. Eso siempre dices, pero temprano dijiste que era tuyo, y la forma como lo dijiste me diste a entender que no debía verlo. Sabes, no importa… permiso.
Mario: Lo dije así porque es mi posesión más preciada, rompe el papel Jesús, es solo papel de envolver lo de adentro es lo que importa.
Chucho lo miró la curiosidad lo mataba pero por otro lado estaba tan molestó. Luchaba internamente si abrir o no de quitar el envoltorio.
Mario: si quieres me voy Jesús. Dijo abriendo la puerta.
Chucho: No, el que se va soy yo.
Mario: viniste a algo Jesús. Dijo saliendo y cerrando la puerta. Luego se sentó en el piso, estaba agotado emocionalmente pero debía ser fuerte.
Chucho caminó de nuevo al cuadro y rompió un pedacito del envoltorio, y luego más y más hasta que finalmente lo quitó todo. Quedo mudo, no podía creer lo que veía… era su primer cuadro pintado con los óleos que le regalo Nandito. Y no pudo evitar sentir una emoción y culpa a la vez, lloro de emoción, y salió corriendo necesitaba abrazar a su padre.
Mario se puso de pie. Quien es capaz de hacer eso jamás será mediocre, yo creo en ti hijo y te amo por los dos. Dijo besándole la frente.
Te amoo papiiii, y mucho lo siento, siento lo que te dije antes… perdóname perdóname...
Mario: mi sol no hay nada que perdonar mi vida… te amo tanto mi amor te amo mi hijito maravilloso y estoy tan orgulloso de ti solo quiero que te veas a través de mis ojos para que puedas ver tu grandeza.
Chucho: El cuadro con ese marco se ve maravilloso papi, gracias… muchas gracias. ¿Creo que arruine la sorpresa que me tenías noo? Dijo algo avergonzado.
Mario: esa no es la sorpresa cariño.
Chucho: ¿nooo? pues para mí ha sido el mejor regalo que he recibido en mucho tiempo. Si, se ve como si fuera de un gran artista, un sueño hecho realidad.
Mario: es de un gran artista.
Chucho: Papiii apenas estoy aprendiendo, el abuelito me dijo eso una vez, que yo sería un artista grandioso, que todos escucharan mi nombre. Pero creo que ustedes lo dicen porque me aman mucho. Se sonrió. Tengo muchas técnicas que aprender, pero sabes pondré todo de mí, para serlo, y que estén super orgullosos de Chuchito.
Mario: ya lo estamos y por eso hoy te inscribí en la academia, hice tu prueba con ese cuadro. Dijo besándole la frente. Ahora a dormir ya es tarde y viajamos en tres horas. Y ni creas que te separaras de papi.  Dijo echándoselo al hombro y dándole un besito en el trasero. ¿Aun duele la colita mi artista?
Chucho: Siii… y mucho, eso no se hace sabes. Le dijo con un puchero mimoso. Papi gracias por creer en mí, lo de la academia es lo máximo veras que no los voy a defraudar.
Mario: grábatelo en tu cabecita jamás podrías aunque quisieras decepcionar a los papás. Luego fue por un ice pack acostó a su hijo al lado de Nando le puso la compresa en el trasero apagó la luz y se dispuso a dormir unas dos horitas.
El despertador sonó sin piedad y no solo los chicos no querían despertarse el pobre Mario, se negaba se colocó la almohada encima de la en cabeza, al mismo tiempo que negaba. Bea lo veía divertida.
Beatriz: Caramba y yo que creía que solo tenía dos adolescentes varones... jajaja… Arriba cariño, eso te pasa por acostarte taaaan tarde.
Mario: Beaaaaaaa...
Bea: de Bea nada. El que no esté en la ducha en 5 minutos se va a ir al paseo con mi mano estampada en poto.
Los gemelos se miraron Nando corrió al baño de su pieza y Chucho al de Mario.
Mario: gracias hijos. Dijo yéndose al baño de sus papás.
Ya por fin todos en los autos rumbo a Mérida.
Phillips estaba con un humor de perros porque le dolía su potito.
Phillips: ya correte papá me aplastas. Le gritó dándole un pequeño empujón para levantarlo de su chaqueta.
Gerard: Huum alguien al parecer se levantó con el pie izquierdo. Hijito, mejor cambia de actitud, porque te aseguro que no te conviene para nada, me vuelves a levantar la voz o empujarme y acá mismo recibes una buena, y avivamos el dolorcito en tu trasero.
Phillips: eres insoportable ya vete a trabajar de una buena vez. Le dijo amurrado.
Gerard: Phill hijo en serio hoy quisiera pasar un día agradable hace mucho que no me tomo unos días libres siempre ando trabajando como loco. Yo sé porque andas molesto, y tu solito te lo buscaste. Si quieres acuéstate de ladito, y te apoyas en mi... ¡Anda campeón!. Gerard realmente, no quería castigar a su pequeño, pero paciencia no era una de sus virtudes, además veía a Mario tan sonriente con sus gemelitos, que él deseaba eso mismo con su hijo.
Phillips: perdón papá... es que me duele un poquito.  Le dijo mientras se acomodaba como le había indicado papá. Te quiero y me encanta que estés aquí. Mientras le tomaba la mano para obligarlo hacerle cariño en el rostro. El resto del viaje no tuvo incidentes.
Mérida está tan bonita como siempre con el clima frío perfecto, se hospedaron en unas bellas cabañas, con vista a la montaña. Los chicos no veían el momento de subir por el teleférico y subir al pico más alto y tocar la nieve. Mario no estaba muy convencido de que Bea, fuera muchos sufrían del mal del páramo a mitad de camino. Karla le daba miedo algo la altura, así que acordaron que ellas se quedaran en la estación anterior a la última, tomando fotos y tomando un rico chocolate caliente. Matt, había visto que alquilaban tablas para snowboard, pero Mario no les dio permiso, para eso primero debían recibir la instrucción debida, y no daba chance, ya había pasado con algo parecido con Max, y ese susto no lo iba a volver a pasar, además “una tabla” después de lo sucedido con Ed, ni loco su padre como mínimo lo despellejaba vivo.
Pero eso a Matt no le importó total sus papás no estaban ahí y aprovechó que Mario y Gerard estaban comprando los pedidos de comida para hacer de las suyas, arrendó la tabla se montó en ella y se fue de boca al piso a 5 metros de iniciado el trayecto, Mario con el bullicio dejo todo tirado y corrió a ver al peque que se había caído.
Mario: chiquito ¿estás bien? Matty te duele algo.
Matt: Pues aparte del orgullo, pues nada hermano. Madre matada jajajaja menos mal que cae uno en nieve, que si no. Estoy bien Mario, quita esa cara de susto, no me pasó nadita, vale. Dijo levantándose sacudiéndose la nieve como podía.
Mario: ¿Gerard puedes ver a los chicos?
Gerard: claro.
Mario: camina a mi lado Matthew si sabes lo que te conviene.
Matt: ¡O vamos hermano, no te enojes conmigo vale! Admito, que te desobedecí pero dime, cuándo podría yo regresar acá a hacer snowboard, si lo que me contaste de Ed, papá nunca me dejará. Le dijo haciéndole ojitos a su hermano, pero caminando a su lado.
Mario entregó la tabla y arrendó una habitación por unas horas. ADENTRO MATTHEW. Le gruño.
Matt: Ahhh Mario, que va a pensar el dependiente que somos parejas o algo así que horror… alquilar una habitación por unas horas, te pasas. sabes...
Mario: si eso te preocupa no tengo problema en aclarar lo que pasara en esa habitación.  Señor mi hermanito se va a llevar señora zurra por desobediente, me imagino que será algo habitual por aquí jóvenes y tentaciones.
Matt: MARIOOOO grrrrrrrr… Grito, más rojo que un tomate ante aquellas palabras de su hermano. El dependiente solo hizo un gesto, de “Si esto es pan nuestro de cada día”. TU NO ERES MI PAPÁ PARA CASTIGARME… ¿QUIEN TE HAS CREÍDO?.Le gritó una vez que Mario, lo llevó a la habitación.
Mario: soy tu hermano y estoy a cargo tuyo. Y sin más lo dejó sobre sus rodillas. Zas zas zas si te dijo que no es no. Zas zas
Matt: déjame Mario me duele.
Mario le bajó el pantalón y dejó caer su pesada mano. ZAS ZAS ZAS. No vuelvas a cometer una imprudencia así. Le dijo bajándole el calzoncillo ZAS ZAS ZAS. Tu vida es demasiado importante hermanito para perderte por una tontería ZAS ZAS ZAS luego a pesar de sus protestas Mario lo abrazó. Mi bello pequeño si quieres aprender snowboard yo hablaré con papá para quedarnos más días y tomarás clases pero nunca más hacer algo así mi bonito mira que yo me muero si te pasa algo y como quedan mis 5 hijitos.  Ya mi Matty no llores que me vas a hacer llorar a mí.
Buaaaaaa es que me dueleee me pegaste muy duro buaaa… te acusare con papaaaaaa… buaaaaaa, me bajaste el calzoncillo, no se vale...eres mi hermano, no mi papá… solo tengo un solo papá buaaaaaaa…
Mario: Tranquilito mi chiquito, sé que mi peque tiene un papá. Pero tienes que entender que lo que hiciste fue muy peligroso.
Matt: Pero si no me paso nada… buaaa. Decía sin soltar el abrazo de Mario, más que las nalgadas a Matt le dolía que su hermano lo hubiese castigado, es que creía ser inmune a eso con sus hermanos.
Mario, lo mimaba le acariciaba la espalda como hacía con sus hijos, shhh shhh ya Matty... ya pasó.
Matt: ¿Mario? ¿Deberás nos quedaríamos más tiempo, si quisiera tomar clases? el papá dijo que no puedo faltar a clases el lunes, puso como condición para venir que regresaremos el domingo. Le hablaba mirándolo intensamente, para descubrir si su hermano hablaba en serio.
Mario: del papá me encargo yo Rena. Dijo revolviéndole el cabello.
Matt: Pues si tú te haces cargo del papá, pues yo quiero Mario, yo quiero aprender snowboard...graaaacias, esto de tener hermanos mayores, es super cool. Le dijo abrazándolo fuerte.
Mario: una condición si el papá pregunta tú no sabes nada y me dijiste que teníamos que volver.
Matt sonrió moviendo la cabeza afirmativamente. Eso sonaba mucho mejor.
Mario: ahora ve a jugar con tus sobrinos yo arreglo las clases para mañana por hoy castigado Rena. Cuando su hermano salió llamó a su madre. Mami... si mami estamos todos bien maaa es que bueno te cuento nos quedaremos unos días más te amo., cuéntale al papá. Cortando
Sara: ¡Aloo! ¡Aloo! Pero habrase visto que descaro más grande. Dijo entre enfado y divertida.
Samuel: ¿Quién es descarado? Terry segurito ¿Y ahora que te dijo el loco ese o fue Leito? Pregunto Samuel, divertido, algo que si hacía Max, a diferencias de sus otros hijos era llamar a su madre todos los días, y era que Leito a veces demandaba esa atención.
Sara: tu favorito pues Samuel. Sara sabía el especial cariño que Samuel le tenía a Mario, no sólo era el hijo de la reconciliación, si no que al ser el más enfermizo siempre estaba en los brazos de su padre arrancado de su madre que lo perseguía para darle la medicación.
Samuel: ¿Te llamó Mario? ¿Todo bien verdad?
Sara: todo fantástico, tanto así que no vuelven mañana.
Samuel: ¡QUE NO VUELVEN MAÑANA! Pero si fue lo primero que les dije, Matt no puede faltar a clases, está iniciando una nueva escuela, tenía casi el año perdido, se está poniendo al corriente maravillosamente, para que ahora se vuelva a atrasar… grrrrrrrrrrr… me va a oír Mario Enrique me va a oír.
Sara: Es tu hijo, arréglatelas con él, claro si entre Mario y tú hacen zamba y canuta y después se quejan. Le dijo levantando las manos como diciéndole dile algo haber si te atreves.
Samuel tomó su celular y comenzó a llamar incesantemente.
Mario: aloooo aloooo no se escucha.
Samuel: NO ¿SE ESCUCHA? Ahh pero que buena suerte tiene mi hijo, este mensaje es para MARIO ENRIQUE HOFFMAN, para informarle que cuando pise un pie en casa ES NIÑO MUERTO,... nooo corrijo TRASERO MUERTO… GRRRR déjate de payasada Mario Enrique, y devuélvanse, perdón manda a Matt en el primer vuelo del domingo.
Mario: no voy a mandar a Matt sólo ni pensarlo, estamos bien lo está pasando bien y tú me amas muchooo muchoooo y me vas a dejar disfrutar con mis niños y mi hermanito verdad papito hermoso de mi corazón.
Samuel: Mario en qué cabeza cabe hijo, tu hermanito estaba por perder el año, esta nuevo en todo, adaptación, profesores, exigencias, y tú quieres que después que se ha puesto al día se retrase de nuevo. ¡Sinceramente Mario Enrique! no parecen cosas tuyas.
Mario: Paaa si vino con su profesor particular te juro papito que si me mandas la materia de las clases llegará con todo aprendido, papi por fa no te enojes conmigo.
Samuel: AHH es que dé pasó yo debo averiguar que han dado escanearlo y enviártelo… PERO MARIOOO... no quieres que le haga las tareas también. Grrrrrrr…
Mario: ahg paaaaaaaaaa como si no lo hubieras hecho nunca con nosotros.
Samuel. Claro pero porque están enfermos no por estar de farra de viaje por ahí. Mario te lo dije claro, le di permiso a Matt si regresaban el domingo, sabía que esto iba a pasar, pero ni sueñes que hay una próxima vez.
Mario: No le he dicho nada a Matt para no ilusionarlo pero papiiii porfa papito dos diitas nada más… no me digas eso, no fue planeado.
Samuel: uffffff Mario Enrique eres EL ÚNICO RESPONSABLE, porque Matt, no se retrase en clases, no le quites el ojo hijo, que Matty cuando agarra confianza es de cuidado. ¿Me estas escuchando?
Mario: gracias gracias gracias papito eres el mejor papá del mundo.
Samuel: Si… claro el mejor papá… recuérdalo cuando nos veamos, que ni creas que sales tan bien librado de esta, planeado no planeado me diste tu palabra e incumpliste.
Mario: paaaaaaaaaa no me digas eso si te estoy pidiendo permiso para quedarnosss.
Samuel: Un permiso a sabiendas que se iban a quedar… que permiso es ese... ¿a Ver?
Mario: que no fue planeado, pero los chicos querían hacer actividades y no podíamos en tan poco tiempo y me lo pasé toda la mañana diciendo que noooo.
Samuel: ya ya ya el lunes llamó al colegio, e informó que Matt no asistirá, Mario cuidadito con Matt, que tiene cara de ser más inventador que Max, Mark y Ed, juntos. Y te recuerdo tú serás el único responsable.
Mario: lo tengo claro papi, pero si no hace caso le llega igual que a mis fotocopias.
Samuel: Eso espero… Bueno pásenla chévere, cuídense los quiero muchísimo.
Mario: yo también… papi ¿por qué no se vienen con la mamá y la pasamos en familia?
Samuel: Me encantaría no sabes cuánto pero tengo reuniones en el consorcio que no puedo posponer hijo, en otra ocasión.
Mario: te tomó la palabra papá, sabes que me gusta estar contigo. Le dijo poniéndose un poco melancólico. ¿Seguro que Ed no se puede hacer cargo de esas reuniones?
Samuel: Y a mí, pero no, Ed ya tiene que hacer muchas cosas con Max, y su proyecto de Turismo, yo debo seguir con el negocio. A veces, los inversionistas les gusta sentirse seguros cuando es el dueño quien los atiende, cariño. No dudes nunca que no quisiera estar allá con ustedes.
Mario: lo sé papito, sólo es que te extraño. Pero bueno, prometo volver con toda la tropa intacta, aunque no aseguro sus traseros.
Samuel: jajaja sip eso de seguro llegan algo rojitos, que te llevaste un clan adolescente por suerte no vas solo.
Mario: Una suerte, bueno papá hablamos a la noche.
Samuel: hasta la noche hijito.
Mario finalmente salió de la habitación. ¿Cómo se portaron? Le pregunto a Gerard.
Gerard: como unos ángeles.
Mario: jaja eso no lo creo, mejor bajemos para ir a ver a Bea y Karla, hable con mi papá y nos quedaremos hasta el martes, para que los niños tomen clases de snowboard.
Gerard: me parece perfecto, pero no creo que ellas nos extrañen mucho.
Mario: jaja nada que hacer frente a los masajes. Se rieron.
El resto del día fue de relajación, pero los chicos insistieron en comenzar las instrucciones para poder disfrutar al día siguiente y Mario cedió antes sus peticiones.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario