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jueves, 4 de febrero de 2016

CATWOMAN




CATWOMAN

Cada vez que una persona se enfrenta a algún acontecimiento que cambiara su vida radicalmente tiende a hacer mentalmente un resumen de los hechos que lo llevaron a ese momento, para bien o para mal.

Eso era lo que pensaba Selina Kyle en este preciso momento mientras se ponía un vestido que jamás había pensado en usar.
Rememorando sus años de chica huérfana, pero no se imaginen a una chica abatida por la vida, al revés Selina era una chica de carácter fuerte y decidido era la única forma de sobrevivir a las calles de Gotham su ciudad natal.
Nunca dejo que Servicios sociales la atraparan ni mucho menos vivir en algún hogar de acogida, ella decidió vivir en la calle, esa fue su escuela  y donde conoció a los chicos que ahora recordaba con cariño que llegaron a ser su familia, o algo así.
Selina pasaba los días oculta de la mirada de las personas que transitaban por las calles siempre corriendo por el día, pero las noches eran de ellos los marginados a los que nadie quería ver los chicos callejeros, ladrones y por sobre todo las familias que gobernaban Gotham eran las que controlaban el narcotráfico, Selina aprendió de muy pequeña que era mejor no mezclarse con los hombres de la mafia.
Vivir en Gotham era duro pero también tenía su lado bueno ella podía ir y venir sin que nadie le dijera nada, aprendió a defenderse y era muy buena en eso, Jimmy un chico mucho mayor fue quien le enseño a pelear, el padre de Jimmy había sido boxeador.
También aprendió a ganarse la vida de la única manera que podía, robando billeteras a los distraídos transeúntes que paseaban en las calles por la noche, buscando alguna prostituta o  droga.
De esa fase de su vida solo una cosa pasó que fue el principio de algo, aunque en ese momento no supo la magnitud de ese encuentro, ni cómo iba a cambiar su vida, conoció a un chico, no a cualquier chico conoció a Bruce Wayne.
Fue un accidente, el destino pueden llamarlo como quieran pero el hecho era que Selina conoció al heredero de la fortuna Wayne y no solo eso sino que fue a él a quien le dio su primer beso, lástima que su mayordomo rompiera el hechizo y Selina tuviera que salir corriendo por las azoteas de Gotham, pero esa noche supo algo, ella era bonita, si Selina Kayle  era una chica muy bonita oculta en ropas viejas y desaliñada pero ahí estaba lo pudo ver en un espejo cuando paso por un escaparate de una tienda.
Conocer a Bruce Wayne también despertó su curiosidad, ella siempre había vivido en una parte de Gotham nunca se había aventurado más allá esta vez se aventuró hasta la mismísima mansión Wayne, una verdadera fortaleza Selina se lo tomó como su primer reto, desafiar la seguridad  no le fue fácil pero después de un mes de ir y venir pudo por fin entrar en la mansión sin ser vista.
Selina nunca había estado en un lugar como ese, ella nunca le importó mucho el dinero, era solo un modo de obtener comida, pero jamás pensó lo que era vivir con mucho dinero, las cosas eran tan diferentes.
Bruce la encontró mirando un antiguo jarrón – Es un Jarrón de la dinastía Ming – dijo el chico mientras le ofrecía una sonrisa.
Selina casi se cae junto con el Jarrón, cosa que hizo que Bruce corriera a su lado y la tomara para que ambos terminaran en el suelo.
Bruce dejaba a Selina sin saber muy bien que hacer, ahora que estaba a su lado se sentía tan tonta y fuera de lugar.
Pero de a poco se acostumbró a sentirse así al lado de Bruce, él era un chico totalmente diferente a cualquiera que conocía, ahora que podía hacer  un balance de su vida.
A pesar de la mala cara que puso Alfred  al principio, Selina kyle fue aceptada en la mansión Wayne y los veranos los chicos la pasaban en la piscina  tomando Té helado y comiendo las mejores galletas de Gotham, horneadas por el mismísimo Alfred.

Pero el tiempo pasaba muy rápido y si había algo que  Selina sabía era que ningún niño criado en las calles de Gotham llegaba a adulto sin haber tomado un bando o buscar protección en algunas de las mafias, para las niñas su destino era aún peor,  deambular por las calles de Gotham abusadas por un proxeneta.
Las historias de las chicas eran  muy conocidas y no tardó mucho en llegar a Selina un enviado de Fish Mooney la jefa que reinaba en el barrio en que solía vivir.
No tuvo elección nadie se negaba a una invitación de Fish.
Selina se sorprendió al ver a la mismísima Fish Mooney, pensó que se iba a encontrar con alguno de sus secuaces, después de todo quien era ella?
Pero se equivocó y si algo aprendió esa noche fue que nada se movía sin que Fish Mooney lo supiera.
- Realmente eres muy bonita, Selina – la mujer se paseó alrededor de ella mirándola como si fuera un animal – Tienes mucho que aprender si quieres seguir viviendo en este lugar.
Selina no sabía muy bien que iba a ser de su vida pero si sabía perfectamente que no iba a ser y ella no se iba a prostituir.
Inmediatamente Fish sintió la tensión en el cuerpo de la chica, lanzó una carcajada – además eres muy valiente o muy tonta niña, aquí tienes muy pocas opciones – Fish le agarro la cara para que la mirara – pero calma, primero escucha lo que tengo que decir y después decides si quieres vivir o desaparecer de Gotham.
Fish solo dijo lo que Selina ya sabía, ella era mayor como para pasar desapercibida y eso era lo primordial para vivir de pequeños robos, nadie veía a un niño pero Selina  llamaba la atención no solo por ser un poco mayor sino porque era muy bonita, sus días en la calle estaban por llegar a su fin.
Por otro lado Fish controlaba un club nocturno que incluía un prostíbulo, siempre buscaban chicas para ese lugar entre más jóvenes mejor, pero ella le estaba ofreciendo ser parte de las chicas que solo estaban destinadas a los jefes de la mafia y eso le daba un status diferente, era una buena oferta para cualquier chica callejera significaba que tendría techo, comida y se salvaba de las golpizas que usualmente recibían las otras chicas.
- NO!! – Fue la respuesta a la proposición de Fish – No voy a convertirme en una prostituta.
- No tienes muchas opciones, niña por más bonita que seas hay muchas como tú por ahí, que aceptarían mi propuesta más que felices.
- Yo no soy como otras – dijo Selina muy segura.
- Me gustas chica, sé que eres inteligente no solo una cara bonita – ¡¡Salgan todos de aquí!! – dijo Fish y todos los hombres a su cargo abandonaron el lugar.
Selina pensó que Fish la iba a matar con sus propias manos – No te asustes pequeña gatita tengo otra cosa que ofrecerte, que puede te guste más que mi otra propuesta.
Ella sabía que frecuentaba la mansión Wayne y que era la amiguita de Bruce Wayne y eso le había llamado la atención.
Eres muy buena robando Selina tienes un don pero también tienes mucho por aprender y yo puedo darte las armas que necesitas, ya no puedes seguir viviendo en la calle y me dejaste muy en claro que tampoco quieres trabajar aquí, pero tengo pensado algo que te puede interesar.
No sería nada que ya no hayas hecho solo que a otro nivel,  hay otra forma de robar Selina, no solo cosas que puedes vender hay cosas que valen más, como la información, si aceptas yo te puedo entrenar convertirte en una mujer muy interesante con tu belleza podrás conquistar a los hombres más ricos de Gotham y robarles no solo su dinero sino que cosas más valiosas.
- Trabajarías para mí, no le rendirías cuentas a nadie más -  Selina debía admitir que la oferta era más que razonable.
- Vete ahora, tienes  solo dos días para darme una respuesta, ve a ver a tu amigo.
Selina salió de ese lugar, sabiendo lo que tenía que hacer, borrar sus pasos en el callejón y despedirse de sus pocos amigos, es cierto que Selina no tenía nada material pero si tenía algo que no pensaba entregar a cualquiera y se dirigió a la Academia Gotham, ya no volvería a pasar por la mansión.
A  pesar de no estar en su mejor momento en su amistad, la última vez  que estuvieron juntos Bruce le había ofrecido a Selina  pagarle un mesada, ella sabía que lo hacía porque quería ayudarla pero ella era muy orgullosa para aceptar algo de Bruce Wayne.

Pero esta vez ella quería  ver a Bruce, quería entregarle lo único que tenía que era de ella por eso lo fue a buscar a la Academia para localizarlo antes de que Alfred fuera por él. No fue difícil convencerlo de encontrarse en las calles de Gotham donde Selina tenía algo así como un refugio dentro del galpón, era una de las ventajas de ser una de las más antiguas viviendo ahí.

Bruce era puntual por eso Selina la esperaba lista, estaba nerviosa y Bruce se dio cuenta en cuanto la abrazo, él también estaba nervioso aunque no sabía muy bien porque, pero estar cerca de Selina siempre le ocasionaba algo que no podía controlar.
- Selina tengo poco tiempo, te pasa algo? – Bruce estaba preocupado pero al ver a Selina, la vio diferente.
La poca experiencia de Selina junto con su nerviosismo hizo que se tirara prácticamente sobre Bruce, ambos cayeron al raído sofá que hacía de cama, antes de que Bruce pudiera hablar Selina se había sacado la polera quedando en ropa interior.
Bruce por primera vez en su vida no supo qué hacer ni que decir estaba paralizado – Selina que haces? – pudo balbucear.
Más decidida que nunca Selina se desabrocha el sostén, inmediatamente el cuerpo de Bruce reacciona por su propia cuenta, ya nada puede hacer esta perdido en el cuerpo de Selina, como más de una vez había soñado en la intimidad de su habitación, rogando para que Alfred no se diera cuenta de que ya no controlaba su cuerpo.
Selina estaba arriba de Bruce mirándolo, intentaba parecer segura pero la verdad es que moría de miedo, Bruce hubiera preferido tener algo de práctica pero la verdad es que no tenía, solo el instinto hizo que tomara a Selina de las caderas y dejarla esta vez abajo con un movimiento brusco que hizo que la chica azotara la cabeza.
- Ouch
- Disculpa te dolió? – Bruce quería enterrarse vivo.
- No voy a morir – dijo Selina y aprovecho el desconcierto de Bruce para desabrochar el pantalón ya no había vuelta atrás, torpemente ambos adolescentes quedaron desnudos jadeantes  y presas de sus hormonas.
Selina gritó de dolor al sentir a Bruce dentro de ella, era tan extraño y a pesar del dolor no quería que acabara,  mientras Bruce estaba en el cielo solo rogaba poder mantener su placer por más tiempo, intentaba controlarse y que esto no acabara nunca.
Pero todo termino en una explosión que unió a ambos chicos para siempre y luego quedaron tirados descansando del éxtasis.
Selina fue la primera en hablar -  Esta es la última vez que nos vemos.
Puede que Bruce haya sido un adolescente pero ni aún en esos primeros años de su vida le gustaban las sorpresas – Me puedes explicar que significa todo esto Selina?
- Pensé que estaba claro, Bruce.
- Que!!, que tendríamos sexo y luego te irías? – Bruce mostraba toda su molestia, es que por más extraño que parezca el joven Bruce Wayne no pensaba en perder su virginidad de esa forma tan abrupta.
Pero Selina no le dio tiempo a reaccionar tomo sus cosas y no miró atrás, no porque no quisiera sino que volver a ver a Bruce iba a ser muy doloroso, ella ya sabía que lo que sentía por Bruce Wayne era algo más que una amistad de niños, ella se había enamorado y en su interior también sabía que eso era imposible.
Bruce Wayne era el heredero de una fortuna, pronto iría a la universidad, estudiaría y se haría cargo de las empresas de su familia, se casaría con alguna chica rubia cabeza hueca que lo llenaría de niños y Selina no sería capaz de ver eso.
Así que usando todo el valor que tenía se fue a ver a Fish Mooney y acepto su oferta. Todo paso tan rápido en su vida, Fish se encargó de darle educación, le enseño modales, le enseño a vestir y a sacarse el mejor partido y le dio a Selina el mundo.
Cuando su aprendizaje básico estuvo listo la envío a Europa, fue solo cuestión de tiempo para que alguien se fijara en ella una fotografía enviada a las personas correctas y Selina pronto se convirtió en la portada de algunas revistas, gano dinero modelando y se hizo amigos influyente, chicos ricos que no se parecían nada a Bruce pero que la adulaban.
Un día lista para salir a una fiesta se miró al espejo y no se reconoció, esa chica no era Selina Kyle, y se preguntó por primera vez que opinaría Bruce de esto, la despreciaría por el camino que tomo?.
No tuvo mucho tiempo cuestionándose esa misma noche recibió una llamada de Gotham, Fish la quería de vuelta en la ciudad, debía empezar a pagar toda la inversión.
Selina pisó Gotham feliz, ya estaba aburrida de loa europeos y Gotham era su casa, Fish le había arrendado un pequeño departamento en un lugar muy exclusivo de Gotham, era realmente acogedor.









 


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