APRENDIENDO LAS LETRAS

APRENDIENDO LAS LETRAS

Corto de Año Nuevo

Era navidad y Samuel se había auto-regalado para él una Lapto con la intención de trabajar en casa, así evitaba salir tan tarde de la oficina, y podía estar con sus hijos, sobre todo disfrutar de la infancia de Max, se había perdido muchas cosas con los grandes por el trabajo y de alguna forma quería compensar aquello, además ahora tenía holgura para ello, como por ejemplo el aprendizaje de las letras de sus hijos.

Sara desde que Luis pudo caminar compro letras para la nevera, esas que tienen imán por detrás para que los niños aprenden y formen palabras. Total pasaba más tiempo en la cocina que en cualquier otro lado, y los niños con ella.

Todos aprendieron sus letras de la misma forma, solo que a medida que nacían los niños quienes ayudaron en el aprendizaje fueron los hermanos mayores. Así que adivinen quien le enseño las letras a Max, pues Marky quien seguía la línea jerárquica.

Marky: A… repite Max A.

Max: A

Marky: Muuuuy bien, la sacamos de aquí y la ponemos acá. Ahora, esta es la E tiene paticas veees.

Max: Ajaaa…. E.

Marky: Excelenteeee.

Así sucesivamente Marky le enseñaba al bebé de la casa, las letras. El Enano repetía y sacaba las letras. A veces solo las quitaba y las ponía en el suelo repitiendo como sonaban las mismas, aunque no siempre decía las correctas era demasiado pequeño para memorizar el abecedario… sin embargo era muy cómico escucharlo repitiendo o inventando letras. A veces sacaba las letras de la cocina y las dejaba regada por toda la casa, gritando las letras como loquito, a Samuel eso lo derretía y le decía a su mujer que lo dejara que su bebé solo estaba aprendiendo las letras, mientras Sara le decía que las letras se debían quedar en su sitio.

Era casi la hora de la cena, Samuel estaba atendiendo una llamada, le había dicho a Mario que por favor no le quitaran el ojo al enano sobre todo con las escaleras, para evitar la tentación se pusieron a jugar un juego de mesa, al pie de las mismas para cerrarle el paso al enano, Max, se acercaba y quería tomar las piezas del juego pero no lo dejaban.

Marky: Enanooo ahora no, busca a mami.

Edy: Si busca tus letras.

Max: A…E…M… Salió gritando. Sin embargo el enano no se fue muy lejos… se escuchaban sus gritos demasiado cerca.

Mario: Maaaax, ya plis.

Luis: Alguien que le dé el chupón, por favoooor. Dijo bajando las escaleras.

Marky: Grrrr yo vooooy …toma Max, ¡AAAY MADRE MIA!. Luiiiis.

Luis: ¿Qué pasa? Dijo caminando al medio de la sala. Y lo mismo hizo el resto del clan.

Mario: Ohoh.. papá me mata.

Luis: Te ¿dejo a cargo? Eres niño muerto… ¡pero enano!.

Edy: Pero si no ha subido por las escaleras. Papá solo dijo que no lo dejaras subir por las escaleras.

Samuel: PERO ¿QUÉ HA PASADO ACÁ? No pudo evitar de pegar un grito al ver su adorada Lapto en esas condiciones, Sara corrió de la cocina hacia la sala, para ver esa escena encantadora.

Sara: Déjalo amor, tu bebé solo está aprendiendo las letras. Además a quien se le ocurre dejar la misma a la altura de Max.

Mario: Es verdad papi la culpa es toda tuya. Dijo haciendo una mueca.

Samuel: Pero serás caradura tu… Dijo pero al volver a mirar a su enano no pudo evitar la carcajada.

JAJAJAJA aprendiendo las letras, ven acá mi Terry.