Capítulo 34

Capítulo 34

La finca de nuestros abuelos

Creo que estuve cerca de 4 horas llorando, la frase de Edgar me había impactado, sé que suena estúpido pero mi papá siempre decía que el hecho de vivir en Medellín lo ponía sensible, me puse a recordar algunas de las veces en las que me dijo eso y se me fue prácticamente toda la noche.

-Camilo, despierta -Dijo Edgar tocándome el hombro suavemente. -Ven a desayunar.

-Ahhh ya, ya voy -Dije medio dormido.

Baje las escaleras sintiéndome terrible, quería dormir más, incluso los párpados se me cerraban. Salude a Patrick, Edgar y a Orlando, el cual hizo la pregunta que no esperaba que me hicieran.

-Cami, loco ¿Estuviste llorando anoche? -Patrick me miró asustado, lo mismo que Edgar.

-No que va -Soné falso pero aun así no preguntaron más, todo estaba normal hasta que Edgar preocupado me tomó del brazo.

-¿Te pegué muy fuerte? -Negué con la cabeza pero eso lo puso peor. -De verdad Camilo, dime… disculpa en serio, pero pensé que incluso había sido suave. -Por un momento pensé que podía hacerme la víctima, pero después volví a la realidad y traté de explicarme.

-No tío… en serio, fue porque estar acá me trae muchos recuerdos y bueno, no quiero hablar de eso. -Edgar me miró algo intrigado.

-¿Es por lo del incendio? tengo entendido que no fue aquí donde ocurrió, mira tu puedes contarme lo que… -Iba a continuar pero lo frené.

-Fue donde mi tía y es mejor no hablar de eso por favor.... solo te quería pedir si podemos ir hoy a la finca de mis abuelos… o bueno  nuestros abuelos -Dije señalando a Patrick y tratando de sonreír.

-Claro Camilo -Dijo Edgar suspirando… sé que quería escuchar la historia, pero simplemente no estoy listo para que me odien. -Báñate y salimos.

Decidimos que yo iba a manejar por ser el único que sabe exactamente donde queda la finca, a Patrick le impresionaba algo el paisaje y eso se me hizo extraño.

-C´est tres jolie (Es muy lindo) -Dijo Patrick.

-Ajá -Dije restándole importancia al comentario.

Cuando al fin llegamos los perros se me lanzaron encima y el cuidador se impresionó de que llegara, supongo que no se imaginaba verme en años.

-Camilo tiempo sin verte… deja el carro debajo de ese árbol -Dijo señalandome donde tenía que parquear.

Nos bajamos y sentí el aire puro… a cada sitio que miraba recordaba una historia de mi infancia. Edgar parecía igual que yo, probablemente él también conocía la finca. 

-Sabes cuando era niño con tu mamá trepábamos ese árbol y nos poníamos a bajar todas las guayabas pintonas que encontrábamos. -Sonreí, yo solía hacer exactamente lo mismo con mis primos.

-¿Qué significa? -Preguntó Patrick. Edgar como pudo le tradujo aunque seguía sin entender el concepto de guayaba.

-Ok ya te muestro -Dije antes de correr al árbol, subir un poco y lanzarle una de las frutas. -Prueba

-Primero hay que lavarla -Dijo Edgar, con mis primos jamás hacíamos eso pero bueno…

A Patrick pareció gustarle demasiado, incluso quería ir por más.

-¿Puedes bajarme más? -Preguntó, me gustaba que hablara en español aunque igual me pareció estúpido lo que dijo.

-Hazlo tu mismo… no pasa nada. -Patrick me vió como si estuviera loco.

-Yo no saber cómo escalar trees -No pude disimular la risa, esa forma de mezclar idiomas y tiempos en Patrick era divertido.

-¿No lo haz hecho? -Patrick negó con la cabeza y después de reírme un rato más le mostré cómo hacerlo.

Patrick se puso como si volviera a tener 7 años, no solo trepó el árbol de guayabas sino también los otros que había. Me pregunté cómo había sido su infancia, sé que no fue mala pero no me esperaba que nunca hubiera trepado un árbol, seguro que fue más aburrida que la mía.

Le seguí mostrando el lugar, la piscina, los caballos y lo más importante, el lago.

Diálogo en francés:

-Ahí se puede pescar, aunque a veces usabámos jet ski… con mis primos pensábamos que este lago era lo mejor de la finca.

-¿Primos? -Sólo al decir esa palabra entendí que quería saber más de ellos.

-Si bueno… tu papá no era hijo único, aunque igual él terminó siendo el que más hijos tuvo. Los mayores igual siguen siendo tus hermanos, Emma y Noah… sé que si nos hubiéramos conocido antes, todos seríamos como hermanos. 

-Seguramente -Dijo Patrick -Pero bueno, tú y yo nos hemos vuelto como hermanos. -Me pareció muy cursi lo que dijo pero me hice el loco.

-Después estaba Juliana, tenía 18 y era la voz de la razón jajaja si me entiendes. Nunca nos dejaba divertirnos, ella al igual que yo era hija única. Después irías tú junto con Miguel… que para resumirte es una mezcla entre Noah y Santiago.

-Jajajaja no sé si me habría gustado conocer alguien con semejante mezcla -Ambos nos reímos.

-Bueno él tenía un hermano menor, el pequeño de la familia Whole, Andrés… él estaba tan loco que ni sé cómo describirlo, era una especie de genio. Creo que yo era el más calmado. -En el fondo si es cierto.

-Woow entonces mis hermanos y yo habríamos sido los ángeles de la familia jajaja.

-Jajajaja mira, en ese lago una vez estábamos haciendo competencias, Andrés iba ganando pero por ponerse a presumir se chocó con una piedra y voló de una forma tan graciosa que no te imaginas… al principio nos asustamos, pero solo se ensució.

-Cuando me cuentas cosas de cómo vivías antes me haces preguntarme cómo habría sido mi vida si hubiese crecido acá y no en Bélgica -Trate de imaginarme lo mismo pero no pude…

-Tal vez serías menos serio… pero no puedo imaginarme eso jajaja tu versión colombiana... tus hermanos y tu son demasiado europeos.

-Lo sé… la verdad antes ni sabía de dónde era mi papá, por el acento sonaba algo extranjero pero sabes, me imaginaba que era inglés. -Abrí los ojos.

-Ehh pero el acento no es para nada inglés… jajajaja pero igual me parece increíble que nunca les haya hablado de Colombia.

-A mi igual, cuando llegó a decirnos que te iba a llevar a la casa juraba que estaba bromeando… me parecía increíble que su familia “muerta” hubiera revivido para que después tu quedaras siendo el único.

-Creeme para mi tampoco fue normal escuchar que mi tío de Bélgica había llegado… porque jamás me mencionaron su existencia en toda mi vida. -Ahora que lo pienso nos mintieron a todos.

-Es verdad pero, pero tampoco estuvo tan mal conocernos… -Dijo, y hasta cierto punto si era verdad, pero aun así extraño a mi familia,

-¿Quieres hacer una competencia con las jet ski? -Pregunte esperando que no saliera con que jamás había usado una.

-Claro, aunque no sé si aun me acuerde como se manejan… la última vez que usé una fue en España. -Señale el lugar donde están y ambos corrimos hasta ahí.

-Manejar esto es de las cosas que no se olvidan, además yo siempre fui malo para esas carreras -Al menos con mis primos siempre perdía.

Estuvimos por más de una hora haciendo carreras, hasta que nos cansamos y fuimos a tomar algo. En un momento Patrick me lanzó agua y yo le seguí el juego, aunque se me hacía extraño actuar de forma tan infantil.

Seguimos con eso hasta que para evitar que lo siguiera mojando Patrick me empujó, como el piso estaba mojado yo me resbalé y me golpeé la espalda con la barra.

-AU mierda -Dije cerrando los ojos, en serio me había dolido.

-Perdón -Trató de decirme Patrick antes de que Edgar apareciera de la nada.

-Patrick tu ne peut pas pousser votre cousine (Patrick no puedes empujar a tu primo) -Dijo Edgar quitándose la correa, dejándonos atónitos a todos.

-S'il vous plaît papa non (Por favor no papá) -Edgar tomó a Patrick del brazo.

ZAS MMMG ZAS AUU ZAS

-Edgar no, Patrick no hizo nada… yo me resbalé por tonto, no más -Grité algo asustado, olvidando mi propio dolor.

-No Camilo, ustedes saben perfectamente que no pueden jugar de esa forma. -Dijo mientras continuaba.

ZAS AUUU ZAS ZAS AUU ZAS ZAS BUAA ZAS

-A ti no te hago lo mismo porque sé que ya te dolió lo suficiente el golpe. -Dijo mientras me ayudaba a ponerme de pie.

-No pues, entonces gracias -Dije molesto… Edgar exageró mucho la situación.

Edgar abrazó a Patrick antes de irse a otra habitación, sentí que debía perdirle disculpas pero al final él no aceptó. El resto de la tarde estuve evitando a mi tío, incluso cuando ya habíamos vuelto a mi casa.