CAPITULO 37: el castigo del abuelo

CAPITULO 37: el castigo del abuelo

Dos días después, al ser dado de alta, Susan tomo la decisión de no llevarlo al instituto por espacio de una semana, su hijo necesitaba relajarse y ganar peso, algo que fue secundado por Edward, solicitando un permiso y todas las tareas atrasadas al instituto.

Aunque habían alcanzado gran mejoría en el tratamiento, aún tenían que rogarle y vigilarle a la hora de la comida, algo realmente gratificante pues ya había logrado subir a los 45 kilos en solo  tres semanas.

De vuelta al colegio se enfrentaba a semana de exámenes, sin embargo, debido a la incapacidad presentara por los padres, Ariel no presentaría exámenes de forma regular, sino que presentaría trabajos de investigación, así como un solo examen con una guía de estudio para realizarle.

Edward: muy bien enano,  investiga sobre estos temas y yo te ayudare a realizar la guía

Ariel: tengo sueño papi

Edward: Terminamos de estudiar y a dormir

Ariel: mejor a dormir y nada de estudiar….

Edward: enano, tienes exámenes a partir del miércoles, necesito de tu esfuerzo, estuviste tres semanas sin ir al colegio y eso es un gran atraso, pero no estarás solo, yo estudiare contigo

Ariel: ¿tú te sabes los temas?

Edward: todos

Ariel: ¿y si presentas el examen por mí?

Edward: jajaja….ay enano, me haces reir¡¡¡  vamos, concéntrate en el estudio, en una semana son las vacaciones, te llevare a Andorra y si gustas, te dejare tener una mascota

Ariel: ¿mascota? Ash ya tengo suficiente con Miranda

Edward: ella es tu hermanita…. (suspiro) vamos, concéntrate ya en estudiar.

Ariel: ¿necesito saber historia para trabajar?

Edward: no hijo, pero si alimentas tu acervo cultural

Ariel: ya ves, o sea, no digo que no alimentare al siervo cultural, pero no necesito aprenderla para trabajar

Edward: acervo cultural enano¡¡¡

Ariel: ash…pues no hay nada en el mundo mundial que necesite al siervo o acervoooo

Edward: a este paso, no me extrañaría que terminaras reprobando el bimestre

Ariel: a ver, no te distraigas papi, a estudiar, vamos, la guía te espera.

Para fortuna del chico, logro presentar las investigaciones completas y alcanzo un  10 limpio en el examen, una calificación muy buena contado sus antecedes, sin embargo, en su conducta, nuevamente apareció una R (mala conducta), manchando de esta forma la calificación. Las primeras vacaciones comenzaban, era tiempo de viajar.

Edward: Ariel, explícame esa R en la calificación de tu conducta.

Ariel: ahh este…¿la R dices tú?….mmhh…(pensativo)….es por…..¿recuerdas algo papi?…pero prometo que ya me voy a portar bien a partir del próximo año.

Edward: eso es en tiempo futuro

Ariel: pues la R es en tiempo pasado¡¡¡¡

Edward: ¿te estas burlando de mí? Acaso…..

Ariel: técnicamente te estoy aclarando los tiempos papi

Edward: ¿Qué nunca vas a guardar silencio cuando yo esté hablando? Yo….

Ariel: bla bla bla bla bla

Edward: vete a tu cuarto ahora mismo y …..

Ariel: ash ¡¡¡ pues ya me iba, no me lo tienes que recordar ¡¡¡

Edward: guarda silencio cuando yo esté hablando¡¡¡

Ariel: bla bla bla bla bla

Ariel se retiró corriendo a su habitación, mientras Edward se refugiaba en su despacho, si bien, su hijo había obtenido excelente calificación, era su conducta lo que nuevamente le preocupaba, reflexionaba en ser demasiado exigente con el chico, en conducirle a la anorexia inconscientemente, comprendía que no le podía exigir demasiado al chico,  había estado hospitalizado tres semanas, justificadamente su rebeldía era producto de su crecimiento, así que arrepentido fue a la recamara de su hijo, al entrar le vio recostado bocabajo, le movió para comprobar que no estuviese dormido.

Edward: perdón hijo, ¿te desperté?

Ariel: no papi

Edward: lo pensé muy bien, es justo que por tus buenas calificaciones tengas un premio

Ariel: wooowww ¡¡¡ quiero ir al cine¡¡¡

Edward: claro hijo, a donde quieras

Al día siguiente partió toda la familia a Andorra, junto a nany y la enfermera de cabecera, tenían que ser unas vacaciones sumamente relajantes para toda la familia, y en ese país podrían encontrar la paz lejos de sus trabajos., al llegar a su residencia, se alistaron para un gran recibimiento, tendrían una barbacoa junto a toda la familia en casa del abuelo, era un evento anual mucho muy esperado, pues la familia conocería a Miranda y verían nuevamente a su amado sobrino.

Durante la velada Ariel se divertía con los primos corriendo por toda la mansión, algo que alarmo a Susan quien les advirtió correr en el exterior previniendo un accidente, algo que por completo fue ignorado por los chicos, en cierto momento, Ariel aventó a su primo hacia el monumento de un ángel que lucía en el recibidor principal, y por más que le pobre chico intento detenerse, simplemente no lo consiguió y termino desplomado junto con la estatua, provocando la ira de su abuelo y la angustia en sus padres.

Abuelo: por andar corriendo como chivas locas han tirado una estatua del siglo XVIII, la cual tiene un valor invaluable para la familia, se ha heredado de generación en generación, y ustedes por no obedecer han provocado una desgracia

Ariel: ash abuelo, agarra la onda,  o sea, era una estatua muy viejita, y pues como que es hora de cambiar de herencia

Abuelo: NO ME CONTESTES ARIEL

Ariel: técnicamente fue un accidente

Primo: Ariel, mejor cállate

Ariel: ¡ah¡ y dejar que me regañen porque tumbaste una estatua vieja

Primo: TU ME EMPUJASTE

Ariel: tú te me atravesaste, además, agarra la onda, era un Ángel más viejito que el abuelo¡¡¡

Abuelo: ¡PERO QUE INSOLENCIA¡ aparte de interrumpirme me llamas viejo y…

Ariel: moment avi…. fue un lamentable accidente, además, técnicamente se cayó solo, mi primo no metió las manos para que se callera y…

Abuelo: GUARDA SILENCIO ARIEL, MUESTRAME RESPETO

Ariel: TENGO DERECHO A DEFENDERME¡¡¡¡

Abuelo: NO ME LEVANTES LA VOZ

Ariel: PUES USTED NO ME GRITEEE¡¡¡¡

Para su mala suerte, Edward iba entrando a la habitación, y con una firme mirada provoco que Ariel guardara silencio, comprendía que estaba cometiendo un error, detrás de este entraron sus tíos, ellos también venían por su primo.

Abuelo: antes de que se lleven a estos traviesos, les daré mi castigo

El abuelo se dirigió a su escritorio y tomo una especie de látigo de cuero con tres lazos, al verle Ariel comenzó a temblar y corrió a los brazos protectores de su papi, quien se limitó en detenerle, escucho el llanto de lamento de su primo y comenzó a temblar, el abuelo nunca lo había azotado, quería salir corriendo, mas fue detenido firmemente por su padre, al ver pasar llorando inconsolablemente a su primo, le siguió hasta que llego a sus padres, escucho la voz del abuelo, y comenzó a sollozar y temblar sin poderlo evitar

Ariel: sniff sniff ay no sniff no abuelito sniff  papi te compra otro ángel sniff sniff

Abuelo: a ti te azotare 15 veces por desobedecer a tu madre cuando te dijo que no corrieras dentro de la casa, por haber lanzado a tu primo y haber roto el ángel, haberme gritado y faltarme al respeto, así que recárgate en el escritorio

Ariel: sniff papiii sniff no lo dejes papi sniff

Edward: Es una orden de tu abuelo y debes obedecer, ya después me las arreglare contigo

Ariel sintió la fuerte palmada de su padre, comprendió que no le defendería, comenzó a sollozar con fuerza.

PLASS aaayyyy sniff sniff

Edward: ve con tu abuelo…AHORA¡¡¡

Temblando como gelatina, Ariel camino hacia el escritorio y se recostó, lloraba ya a mares, era una experiencia nueva, al sentir el primer azote, por impulso se paró y se apartó del escritorio sobándose las sentaderas, había dolido muchísimo ese látigo

ZASS aaaayyy  duele muchoooo sniff sniff sniff

Abuelo: vuélve a reclinarte sobre el escritorio o iré hasta donde estas y ese azote no contara

Ariel: aaaaaahhhh duele muchoooo aaaaahhh ya no abue sniff ya nooooo

Abuelo: última advertencia

Ariel: aaaahhhggg no avi si us plau (no abuelito por favor)  aaaaahhhhh

Edward observaba con dolor la escena, quería correr y proteger a su retoño, abrazarlo y sacarlo de ese lugar, más reconocía que eso sería restarle autoridad a su suegro, además de que estaba muy bien justificado este castigo. El abuelo avanzo hacia el lugar de Ariel, lo tomo y recostó sobre su costado, comenzando una serie de azotes nada fuertes, y aun así hacían gritar al pobre chico

ZASS aaaaaayyyy ZASS aaaaayyy ZASS dueleee ZASS aaaahhhgggg ZASS aaaahhhhhhhggg ZASS aaaaahhhhgg ZASS aaaaaaahhhh ZASS aaaaaaahhhhhhh ZASS aaaaaaahhhh ZASS aaaaaahhhhhhh ZASS  aaaaaahhhhggg ZASS ya nooogggg ZASS aaaaaahhhhggg ZASS aaaaaahhhhh ZASS aaaaaaaahhhhggg aaaaaaaahhhhgggg

Al ser soltado por su abuelo, Ariel corrió hacia su papá con las manos en las sentaderas, lloraba desesperadamente, la lección había sido dura, Edward cargo a su hijo como canguro, le sostuvo la espalda con la mano, y pidió una sincera disculpa a su suegro

Edward: suegro, le ofrezco una sincera disculpa por la conducta de mi hijo, no sé cómo remediar el daño, consiente estoy de que es invaluable…

Abuelo: se más firme con ese chiquillo, y gracias por respetar mi disciplina, yo mantengo el orden en esta casa con mano dura, ni un chiquillo me desobedece ni hace un solo berrinche, aun así son niños felices, reconocen sus errores y sus triunfos, Ariel crece lejos de mi educación, confío  en ustedes que eduquen un hombre de bien, está creciendo, necesitas respetar límites.

Edward: (suspiro) estoy seguro de ello, siento mucho lo sucedido, seré más cuidadoso con mi hijo.

Ariel lloraba inconsolable en los brazos de su acongojado padre, Edward se dirigió a una de las habitaciones  y le bajo los pantalones a Ariel, tenía las sentaderas marcadas por el látigo, así que le cambio el pantalón por otro más cómodo, él no le castigaría, era suficiente con el castigo del abuelo, se limitó a recostarle bocabajo y acariciarle la cabecita, en eso entro su esposa angustiada

Susan: me supongo que continua llorando, así que le traje un ungüento, después de todo, le toco un  duro castigo por desobediente y está de vacaciones.

Edward: si, pobre del enano, después de todo él se lo busco.

Con delicadeza, Susan le descubrió los glúteos a pesar de las negativas de Ariel, comenzó a frotarle  suavemente el ungüento mientras Edward le sostenía las manos en la espalda, de esta forma inmovilizándolo,  Ariel comenzó  a llorar con fuerza, le dolía que su mami le tocara, sin embargo, pasados unos minutos el cansancio pudo más que el dolor, y termino profundamente dormido, a pesar del mal rato, sus padres estaban contentos, ese día Ariel había aceptado comer un platillo completo y había jugado con sus primos, para no dejarle solo, Edward le volvió a cargar como bebe koala pues no quería que su hijo despertara asustado por no reconocer la casa, con su hijo en brazos se reunió con sus familiares en la planta baja, se sentó en el cómodo sillón y acomodo a su hijo de lado, con las piernas dobladas sobre él,  sería una agradable velada.