♥ ♥ Capitulo 52.

♥ ♥  Capitulo 52.

Los chicos había regresado dos semanas antes de sus vacaciones, todo se debía al incidente de las carreras clandestinas en las que se vieron involucrados Gaspar, Dante, Daniel y su primo Fabián , la decisión de regresar la había tomado Darío y de eso ya habían pasado cuatro días , en casa de los Aldunate solo estaba Darío y los chicos... Sus padres y hermana estaban de viaje en un tour por Europa y regresarían en dos semanas.

La mañana del cuarto día, Darío se despertó más temprano que el resto de la casa, se dirigió a sus habitaciones y contemplo a sus chicos dormidos desde el marco de la puerta, Dante, Gaspar y Noah durante las vacaciones habían ganado centímetros, si bien ninguno alcanzaba en altura a Dante, Gaspar destacaba más; ya que de los tres era él que más altura había ganado. Darío por el crecimiento de sus pequeños se sentía asustado y molesto a la vez ya que no podía detener que sus cachorros crecieran, luego de contemplarlos se dirigió a la cocina y se puso a preparar un desayuno variado sabiendo el gusto de cada uno de sus hijos.

Los chicos en sus habitaciones fueron despertando a medida que el sol fue iluminando cada habitación; El primero en despertar fue Dante luego de desperezarse cogió su neceser, toalla y dirigió a la habitación de su padre para ducharse, había tenido una mala noche ya que no lograba dormir todo lo que necesitaba y esto se debía a una conversación con Andrés y Daniel días anteriores

El segundo en despertar fue Gaspar, él sí que había dormido de tirón a diferencia de su hermano mayor, apenas abrió los ojos se levantó y sigilosamente fue al baño del pasillo. Después de unos minutos alguien toco a la puerta y antes de preguntar sintió desde el exterior el sonido de un bostezo.

- Noah: ¿Quién está?.. Necesito orinar.- Dijo aún entre bostezo, Gaspar bufo y salió al pasillo sin siquiera mirarlo.- Buen día...- Murmuro tristemente luego de que Gaspar continuara con su plan de ignorarlo por completo.

- Buenos días, padre. - Dijo Gaspar apenas entro a la cocina, Darío no supo cómo reaccionar, comúnmente su hijo le llamaba papá, o papi.

- Darío: Buenos días, hijo... ¿Desayunamos en pijama? - Pregunto al girar y notar como vestía.

- Gaspar: Si... no tiene caso en ducharme y cambiarme, estoy castigado. - Dijo con un puchero.

- Darío: Gaspar, durante las vacaciones tú y Dante estuvieron en un lugar donde no debían estar, así que no pretendas hacerme sentir culpable... recuerda que debí ir por ustedes a una estación de policía y....- Comenzó a regañar, pero fue interrumpido.

- Dante: Buenos días papá, por lo que veo será un desayuno tranquilo y lleno de amor.

- Darío: Buen día.- Le respondió molesto y retiro una silla para que se sentara, Dante sabía que su padre tenía todas las razones del mundo para estar furiosos con ellos, pero eso le dolía. Después de oír el cortante saludo, bajo la cabeza y tomo su lugar con pesar.

El desayuno transcurrió algo normal, Noah fue el último en llegar y solo bajo cuando su padre lo llamo, Darío preparo para los chicos los huevos fritos con jamón, sabía que era su plato favorito.

- Gaspar: ¿Me pasas un pan?- Dijo Gaspar a su hermano menor con voz enojada, estaba cerca ya que Dante la había movido con esa intención, le dolía ver a sus hermanos distanciados.

- Noah: Mm milagro ¿Ya nos hablamos? - Pregunto con ironía, pero le paso el pan que estaba en pequeña canasta. Gaspar lo tomo y lo puso en el centro de la mesa sin mirar si quiera a Noah y menos agradecer.

Darío al ver a sus hijos, tosió fuertemente y aclaro la garganta, luego se levantó de la mesa en completo silencio, sus movimientos fueron lentos para que los chicos lo vieran.

- Dante: Papá... ¿Dónde vas?

- Darío: A mi habitación, cuando tus hermanos vuelvan a comportarse como hermanos y se respeten como les he enseñado desde el día que murió su madre me avisas hijo.- Respondió con dolor y se retiró sin decir más, ver a sus hijos en esa actitud lo quebraba y le dolía ver el trato que llevaban desde que regresaron de sus vacaciones.

Noah, Gaspar y Dante se quedaron estupefactos frente a la reacción de su padre, pero también la comprendían. Darío estaba colapsado con Gaspar... Intento hablar con este al respecto y hasta lo había castigado dándoles unas palmadas por empujar a Noah y casi tirarlo por la escalera. Si no hubiese sido por Dante que subía en ese momento Noah hubiese terminado con más de un hueso roto.

- Dante: ¿Se dan cuenta lo que provocaron? ¿Vieron a papá ?... no puedo creer que lo hicieran llorar.

- Gaspar: No estaba llorando.- Aseguro rodando el ojo y luego continuo cuando Dante lo observo seriamente.- Solo molesto y por eso se fue.- Dijo mientras escuchaba como su padre entraba a su habitación.

- Dante: Lloraba Gaspar ¿Crees que no le duele ver como se la llevan desde que llegamos de vacaciones?... porque entérate a mí me duele, así que imagino como se está siendo nuestro papá.

- Noah: No le expliques Dante, no quiere entender... se cierra a escuchar, en especial a mi... él no me quiere hablar y menos escuchar.

- Dante: Pues ¡se jode! En esta casa vivimos juntos, dormimos juntos... te tendrá que hablar en algún momento.- Gaspar al escuchar las palabras de Dante exploto como nunca y no controlo su boca, ataco con todo a Noah

- Gaspar: ¡¡NOOO!!!.- Medio grito.- Luego bajo la voz cuando Dante se acercó intimidante le había advertido que no quería oírle gritar.- No te volveré a hablar jamás... eres un puto ¡mentiroso! sapo... traidor, no confío en ti ¡¡Noah Aldunate!!, por tú culpa estamos castigados y metidos en esto.

- Noah: ¡¡MI CULPA!! .- Repitió ofendido mirando a Dante.- Yo no fui a quien se fue a ver carreras clandestina, tampoco fue a mí a quien Papá busco desesperados por las Calles de Arica para luego recibir una llamada dando aviso que estaban detenidos en cuartel policial.... Estoy cansado de que me culpes, golpees o ignores.., te odio ojala nunca hubieses nacido......

- Dante: ¡¡CALLATE NOAH!! ...te lo advierto ¡No termines esa frase!

- Gaspar: ¿Si? ...Pues yo nací primero aquí, tú nunca debiste nacer... ¡maldito monstruo!.. luego que naciste nuestra madre murió te dice eso algo ¡¡IDIOTA!!- Grito cegado por el coraje y se detuvo cuando Dante dio un manotazo en la mesa.

- Dante: YA BASTA ¡¡LOS DOS!!.- Les grito. - No quiero escuchar una sola palabra más, comen y se callan o ¡SE VAN A SUS HABITACIONES!

- Gaspar: Empezó él.... .- Murmuro dolido por lo que su hermano.

- Noah: Snifff Te odio Gaspar... ¡¡YO NO MATE A MAMAAA!!... buaaaaaa. - Dijo angustiado para luego correr desesperado a su cuarto llorando.

- Dante: Noah hermanito ven, Gaspar no quiso decir...- Trato de consolar mientras subía por las escalera hasta que se topó de frente con su padre.

Darío paso por su lado y camino directo a donde estaba Gaspar, le dio la vuelta y le dio varias nalgadas.

PLAFFFF .... PLAFFFF .... PLAFFFF....

- Darío: Ve a tu habitación, ¡¡ahora!! - Le ordeno, Gaspar se sobo con rapidez su trasero y salió corriendo a la habitación. - Hijo, continua con tú desayuno.- Le dijo a Dante quien lo miraba expectante, cuando Darío giro y comenzó a subir las escalera Dante comenzó a seguirle.

- Dante: Papi, los chicos esta peleados y Noah en un comienzo no respondió, pero la actitud de Gaspar hacia él lo termino cansando... y Gaspar por otro lado se siente traicionado y Noah le dijo algo que no debió, esté se defendió malamente papito y pues yo trate de calmarlos... pero ellos no me escuchan y yo....- Hablo rápidamente hasta que su padre lo abrazo

- Darío: Tranquilo, no es tu culpa... Prometo solucionar esto. - Dante asintió tristemente.- No llores hijo, me haces un favor ¿Si?- Dante solo respondió con su cabeza.- Ve con Gaspar hasta que vaya a su habitación, se debe sentir terrible.

- Dante: Sniff ...Si papito, pero ¿estás bien? ¿ A dónde vas?

- Dante: Con Noah, sé que ambos me necesitan en este momento, pero tengo miedo que tú hermano haga una locura.

Dante obedeció a su padre y entro a la habitación de Gaspar, este estaba llorando y apenas verlo entrar, se levantó de la cama y corrió al baño, pero Dante lo abrazo.

- Gaspar: Sueltameeeee Dante buuaaaaa.

- Dante: Cálmate hermanito, saca eso de ti.

Darío con el corazón en mil pedazos entro a la habitación de su hijo menor, esta estaba hecha un desastre... toda la ropa estaba en el suelo, la cama y la ropa de esta se encontraba tirada por todos lados en la habitación, parecía que por ese lugar hubiera pasado un huracán... Luego de observar los rastro llego al balcón de la habitación y en él se encontraba Noah quien estaba sentado en el borde llorando. Darío se aterro al ver a su hijo sentado y con los pies colgando y pese a todo pronóstico como hubiera reaccionado un padre al ver a su hijo sentado y a punto de caer, se quitó el cinturón.

- Darío: Noah Aldunate Drago ¡¡Baja inmediatamente de ese lugar, antes que te baje yo a correazos!!

Noah al verle acercarse con cinturón en mano bajo rápidamente abrazándolo e inmovilizando, él chico odiaba el cinturón de su padre, Darío lo había castigado muy pocas veces... pero para el esas ocasiones habían sido más que fueron suficientes, Luego de unos minutos Noah comenzó a respirar agitadamente por el gran estrés vivido, Darío a su vez trataba de ayudar hablando y guiando con ejercicios que le había enseñado la psicóloga de su hijo cuando se presentara una crisis con ejercicios de respiración, pero el chico no podía y pese a los intentos de Darío, Noah se desvaneció en los brazos de su padre.