Páginas Amigas

domingo, 12 de abril de 2020

¡Una broma muy pesada!





Había pasado unos días desde que los chicos comenzaran las clases. Y Max estaba fastidiado ya que odiaba las clases de Filosofía, aquel lunes a primera hora se encontraba junto a sus compañeros hablando de la "Felicidad"... el tema lo aburría enormemente y para él era complicado.
- Profesora: Chicos... ¿Cómo define la felicidad Aristóteles?
- Sebastián: Profe, para Aristóteles "La felicidad" se consigue al alcanzar un fin propio, al ser la sabiduría su fin en lugar de bienes materiales, que vienen y van...
- Profesora: Así es Sebastián, ¿Qué opinan de eso?
- Máximo: Yo no estoy de acuerdo, me gusta la definición de Sócrates, es la mejor que he escuchado y es según mi opinión la que más se acerca a la verdad.- dijo con seguridad frente a la atenta mirada de sus compañeros.
- Profesora: ok... entonces ¿Cómo define Sócrates la felicidad?
- Sócrates dice que "El hombre no puede alcanzar la felicidad perfecta en la vida presente, aunque sí puede conseguir una felicidad y esta seria imperfecta y relativa".- Cito la definición que la tenía escrita en sus mente
- ¿Estás de acuerdo con eso?- Máximo respondió con la cabeza y al ver la profesora que su respuesta era positiva pregunto.- ¿Por qué piensas eso?
- Bueno considero que la felicidad son estados muy cortos y él que diga yo soy feliz con mi vida ¡¡es mentira!!- Aseguro al creer que era dueño de la verdad absoluta.- Existe muchas personas que tienen distintas formas de ocultar las penas, las tristezas, ejemplo algunos la ocultan a través de la rabia, otros la ocultan bajo capas de estrés y seriedad... y otros simplemente con las risas y las alegrías.... y según yo esa ¡es la mejor forma!
- Profesora: Muy buen análisis.... ¿Porque crees que la alegría es la mejor forma? Máximo, ¿No consideras que vaya en relación con la felicidad?
- ¡No!.. Una persona alegre no tiene por qué ser feliz, pero si con alegrías se puede hacer felices a los demás, como es mi caso.... yo al ver la sonrisas de los demás puedo sonreír a través de ellos.
El curso se quedó en silencio expectante, él chico no hablaba nunca y cuando lo hacía provocaba eso.... mutismo ante el resto, pero Max decía la verdad y sus amigos lo sabían, la alegría para él era hacer feliz al resto,
Máximo era una persona muy triste que disfrazaba todo con bromas y humor, en la casa del árbol muchas veces hablaba con Gonzalo de eso y fue su amigo quien lo analizo un día cualquiera; la conversación nació con una pregunta mientras compartían un cigarro.
- ¿No te cansas de usar esa mascara?- Pregunto Gonzalo y exhalo el humo.
- coff cofff.- Comenzó a toser ante la sorpresa.- ¿Cuál mascara?- Respondió inteligente mente Max.
- La que usas frente a los demás...
- Pues amigo... mi vida tiene distintas pinceladas viéndola como una paleta de colores, la mayoría de las veces vemos en negros, grises y tonos oscuros, pero poco a poco eso ha desaparecido... ¿sabes?
- ¿Qué?- Pregunto ya que Max se había quedado en silencio.- ¡Max! ¿Qué si sé qué?
- Desde que conocí a Leo, Cris, seba y a ti, en mi vida aparecieron los colores vivos... gracias a ustedes mi vida es más fácil de vivir; y además a la persona más importante en mi vida...mi madre la cual se sacrifica día a día por mí para darme lo mejor.
Los pensamientos de Max se disiparon cuando escucho el timbre y el ensordecedor silencio desapareció. Max observo caminar a Sebastián cuando se dirigía al casino del colegio.
- Seba, ¿Pasa algo?- Luego de observarme por unos segundos, negó con la cabeza.- ¿Estás seguro?... ya me fije y estas incomodo....- No dejó terminar la frase
- No me pasa nada ¡¡Max!! No menciones el tema ¿sí?
- Es verdad Sebastián... también lo note ¿No será que tu papá te dio una paliza?- Pregunto Leo esta vez frunciendo el ceño.
- No, bueno sí, pero no pregunten, no tengo nada que decir... solo diré que me la merecía.- Respondió Sebastián rápidamente, sabía que sus amigos continuarían con las preguntas hasta sacarle la verdad, así que confeso par que lo dejaran en paz con el tema.
- ¿Te la merecías?- Escucho y esta vez era Gonzalo quien alucinaba.- ¡¡Estás loco Sebastián! ...nadie se merece que le calienten el trasero.
- yo sí...chicos... el viernes desaparecí todo el día, no respondí los mensajes ni llamadas, además llegue a casa después de la media noche.- Explico Sebastián a los chicos.
- ¡Después de medianoche! ...wooooow...si hacemos eso con Gonzalo papá nos mata y luego nos castiga un mes... ¡¡a todo!!- Dijo Cristóbal
- Pues, eso es lo que me paso y no creerán quien me castigo ¡a eso!- Aseguro Sebastián lamentimeramente observando a sus amigos.
- leo/ cris/ gonza/ Max: ¿QUIEN?
- Mi mamá.- dijo derrotado.
Sebastián era muy apegado a su mamá, ella siempre lo apoyaba y defendía, Cristóbal al observarle pensó que sin duda debió ser fuerte para él.
- uffff esos castigos no se rebajan y tendrás que cumplirlo al pie de la letra mira que una mamá enojada es de temer, te lo digo yo con máxima experiencia del hecho.
Los chicos observaron a Max sabían de la compleja relación que tenía con su madre,
- Sebastián: sí...lo sé, este fin de semana no me habló, ella está molesta y además celosa.- Aseguró triste.
- Leo: celosa mi seba pero... ¿porque? No será por Ana.- Sebastián solo hizo un gesto afirmativo con la cabeza, no necesitábamos más palabras.
- Max: ok... eso te deprime ¿verdad?- Repitió en gesto anterior, pero ahora suspiro muy tristemente.- Chicos nuestro seba tiene penita, creo que debemos hacer algo para alegrar ese corazón ¡¡no creen!- Luego sonrió maliciosamente y Gonzalo regreso la sonrisa y sacó su celular del bolsillo.
- Gonzalo: Cuéntanos el plan, ya sabes todo quedará registrado.- Dijo mostrado su celular al resto.
- Maximo: Las víctimas serán las chicas y el lugar será su baño...
Cuando escucharon eso se giraron y me miraron ninguno entendía de qué iba la cosa, pero sabían que era de temer... después de explicarles la idea increíble comenzaron las preguntas.
- Leo: ¿Estás seguro Max?
- Máximo: ¡Más que seguro!... bien chicos, para mañana necesitamos dos cosas, lo primero es que traigan plástico para envolver, de ese que utilizan sus madres para los sándwich y laxante en gotas, y además alguien que pueda distraer a las chicas...necesito que el lugar esté vacío unos minutos solamente.
- Gonzalo: Ayayay pero Max, ¿Olvidaste que mañana tenemos educación física?
- Max: Perfecto, solo traigan esos únicos 2 materiales, lo demás corre por mi cuenta.
Al día siguiente los chicos llegaron con lo acordado, luego Seba y leo se acercaron al profesor de deportes diciendo que Sebastián se había doblado el pie y no podía caminar... eso era mentira tan solo había sido una pequeña excusa para que el profesor no se diera cuenta y Max se escapara junto a Gonzalo al lugar donde estaban las botellas de agua de las chicas y a cada una les pusieron 5 gotas de laxante.... las chicas al terminar la clase de gimnasia regresaron a los baños se comenzaron a sentir mal, unas primeras y las otras después, sentían un sonido extraño en el estómago, luego comenzaron las puntadas que aumentaban la intensidad lentamente, las chicas corrieron al baño encontrándose con una horrible sorpresa, claro después de hacer lo que tenían que hacer, se dieron cuenta comenzó el griterío y el escándalo descomunal.
los chicos quienes observaban desde lejos estaba muy sorprendidos, Max y Leo en cambio reían a carcajadas, bueno eso fue hasta que llegaron los gritos a inspectoría y fue la inspectora a observar qué era lo que pasaba en interior, al salir del lugar la pobre salió verde y al mirar al resto se dio cuenta de 2 sospechosos, los tomó del brazo a cada uno y los llevó a la oficina, al revisar las cámara de seguridad del patio se podía ver a Max entrando al baño de las chicas y colocando el laxante en las botellas, mientras Gonzalo estaba de punto fijo vigilando que nadie se acercara a los baños, después de ver el video el director no dijo nada, solo tomo el teléfono y llamó a los padres de los acusados; Quiénes más tarde rendiría cuentas después de exigir una explicación con mano firme a sus hijos quienes a su vez estarían con muchas lágrimas en sus ojos y un gran dolor, no en su corazón claro está.

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