CAPÍTULO 3

CAPÍTULO 3

Ángel salió de su habitación ya bañado y cambiado y fue a la habitación de su madre tocó antes de entrar era algo que había aprendido,  cuando estaba Leo debía tocar, aunque él estaba acostumbrado a entrar así como así no quería volver a ver a su madre siendo manoseada y besada por Leo, agradecía que solo vio eso y no a su madre teniendo sexo.

-pasa

-mamá a ti también?- preguntó preocupado al ver los ojos rojos de su madre, luego se sintió estúpido como se le ocurría pensar que a ella también la habían zurrado!  

-ven cielo, ven con mami- abría sus brazos para que su bebé entrara en ellos- no amor a mi no je je pero escucharte llorar me pone triste

-me dejaste mamá- le dijo pero ya no estaba enojado con ella

-cielo fuiste muy irrespetuoso con Leo y con todos, Leo me contó lo que dijiste e hiciste y creo que era lo que te merecías hijo

-no me retes mas, no me quieres

-como que no, te amo cielo más que a mi vida

-no , no me quieres, me dolió mucho y tu dejaste que me pegara- vio en la cara de su madre que sus palabras hacían efecto el quería que se sintiese culpable asi la próxima vez si lo salvaría

-amor Leo jamás lo hará sin motivos, si lo dejé fue porque estás comportándote muy mal- lo abrazó muy fuerte y Ángel solo se dejó abrazar dejó sus brazos caer a los lados, después de todo era un adolescente, era lo máximo que podía hacer se decía a si mismo aunque moría por corresponder

-están listos?- preguntó Leo al entrar

-no, no pienso ir, no tengo ganas- salió bruscamente de la habitación, bueno había durado unos diez minutos la tregua,

-  ja ja ja y yo creí que ya eramos amigos… que iluso!!- luego se acercó a Dolores y la besó- uff cariño porque no faltas mañana te prometo que no voy a despedirte

- si que chistoso, no voy a faltar porque me gusta mi trabajo y mi jefe es muy cambiante un día te dice una cosa y al otro ya ni se acuerda

-eso no es cierto!! Como sea falta mañana y pasamos el día juntos si?

-no, pasaremos la tarde…

-Ángel ya es hora vamos quiero que lleguemos antes de que se pierda totalmente el sol- le dijo Leo desde el marco de la puerta a un Ángel que estaba jugando a la play, era uno de sus pocos caprichos concedidos por su madre  y sus tios, lo que para Ángel era la gloria misma, poder tener en su propia habitación un tele y el juego era tocar el cielo con las manos.

-ya te dije que no voy a ir que eres sordo?!-dijo sin mirarlo y concentrado en el juego

-vas a ir aunque te tenga que llevar alzando y no eres tan pesado, vamos Ángel quiero que la pasemos bien si?- la verdad era que Ángel se moría de ganas por ir, pero no pretendía demostrarlo

-no me vas a dejar en paz verdad?- dijo con el mayor fastidio que pudo y tomó su mochila que estaba lista y salió. Leo sonrió por ese detalle.

-cielo abróchate el cinturón- pidió su madre al ver al chico acostado a lo largo en el asiento de atrás. Ángel puso los ojos en blanco y seguía tonteando con el celular- Ángel que te abroches el cinturón

-ya está que no ves?!- dijo fastidiado mostrando a su madre que si efectivamente lo tenía abrochado, había alargado al tope el cinturón del medio ese que no se cruza y se envolvió

-asi no sirve, siéntate y colócatelo bien

-diablos! No me puedes dejar un poquito en paz?! Uff el tío Valentín tiene razón eres hartante!!

-Ángeeel-dijo Leo mirándolo por el retrovisor, pero Ángel se quedó callado y ni se movió, y aunque Dolores le seguía diciendo que se sentara bien él ya estaba en modo ausente

-ya  llegamos- anunció Leo y solo recién Ángel se sentó para ver por la ventanilla, vio la entrada hecha de troncos y al ir entrando todo era puro césped perfectamente cuidado y flores y arboles,

-vaya que vives en un camping?- dijo Ángel al ver todo. Eran un par de hectáreas pero no para cultivar la tierra ni criar animales, sino para pasarla bien, Leo no tenía interés en ello. Las tierras eran fértiles y todo pero él solo quería tener algo asi como un jardín gigante y que ni siquiera cuidaba. Era un caserón en medio de mucho césped y árboles plantados porque ni siquiera dejó eso al azar o a la naturaleza. Encima como ya estaba anocheciendo los reflectores se encendieron y quedaba aun mejor la vista

-vamos Ángel no me vas a decir que no te gusta, si siempre me pides ir a acampar en lugares como este

-no dije que no me gustaba, dije que parece un camping- respondió molesto Ángel, era cierto que siempre hinchaba a su madre y a sus tios para que lo llevaran a acampar le encantaba eso, era lo único que hacían en vacaciones, porque su mamá casi nunca las tenía y solo contaban con los fines de semana, además de la cuestión monetaria claro. Como no podían darse el lujo de viajar como la mayoría de las familias, ellos acampaban un par de días, en el campo campo o en un camping y a Ángel le fascinaba. Sus tios le enseñaban a pescar, nadar, hacer fuego, etc y él lo disfrutaba un montón. Así que cuando vio el lugar se le iluminaron los ojos pero intentó disimularlo rápidamente y volvió a acostarse aunque moría de ganas por seguir mirando.

-voy a decirle a Augusto que guarde el coche ustedes vayan yendo a ese galponcito de allá al fondo- dijo Leo indicándoles hacía donde debían caminar porque no se veía ningún galponcito. Después de caminar un rato lo vieron y Leo les dio alcance

-bueno les presento a Dulce de leche- decía abriendo el galpón y mostrándoles dos hermosas yeguas, señalo la primera que era blanca como la leche pero  no como el dulce de leche- y a Copito de nieve- acariciaba la segunda que de nieve no tenía nada, era color canela

-ja ja ja ja ja ja ja ja que patético! Que nombres más patéticos- se desternillaba de la risa Ángel Lola también reía pero no tan exageradamente y en realidad más por el contagio de Ángel que otra cosa. Leo sonreía- como puedes!! Ja ja ja ja dulce de leche!! Ja ja ja ja copito!! Ja ja de nieve! Ja ja ja que estupidez ja ja ja

-bueno si es un poco cursi como han sido bautizadas pero…

-ja jaja ja ja ni siquiera es marron  y aquella es canela

-como decía mis sobrinos solo tenían unos cinco años cuando se las regalé y mi princesa le puso copito de nieve, aunque su idea era tener una yegua color princesa asi que yo creo que la pobre copito la sacó barata je je y dulce de leche llegó después para Lauti.

-igual son nombres pedorros- dijo pero ya no tan divertido él no sabía que habían mas chicos

-ya veremos si tu sabes escoger mejor un nombre…-y dejó en el aire esa promesa disfrazada a Ángel le brillaron los ojos pero no dijo nada al respecto.

-puedo montar?- preguntó con voz de niño emocionado al ver un caballo, había  tenido muy pocas oportunidades y siempre era con alguien mas ahora que era un poco mayor tal vez lo dejaran solo

-mañana hoy ya es tarde, además dicen que anda por aquí un perro que te persigue y que si lo miras es solo un perro a la mitad. Yo no tuve oportunidad pero la mayoría de los que trabajan a la noche lo han visto. No creo que sea buena idea

-bah! Eso no es cierto! Solo son historias- dijo Ángel sin creer ni un ápice pero terminó de decirlo y un profundo aullido se escuchó muy cerca- aaaaaaah- gritó no pudo evitarlo era demasiada coincidencia, de hecho los tres se asustaron

-mejor vamos adentro, no me gustan esas cosas- dijo Lola

-claro- dijo Leo cerrando el galpón- no quiero parecer cobarde pero yo me voy- y salió corriendo mientras reía

-leooo!- llamó Dolores y le siguió en la carrera

-ey!  No pueden dejarme no conozco nada!- y asustado miró hacia atrás con todo el miedo del mundo esperando encontrar un perro cercenado pero de pie. No vio nada pero eso no significaba que el miedo haya desaparecido. Empezó a correr con la adrenalina y el pulso a mil. A lo lejos volvió a escucharse un aullido lastimero.

-no es gracioso! Mamá no me divierte que me dejes solo!

-ay ay-decía recuperando la respiración- lo siento creí que venías junto a mi.

-bueno entremos, no quieres saber que otras historias se cuentan por aquí… dicen que hay una niña..

-no, ni se te ocurra! No me gustan esas cosas, menos si me tengo que quedar a la noche. Asi que por favor guárdate tus historias de horror caseras para cuando el sol esté en lo alto- le cortó Dolores que odiaba hasta las películas de terror sus hermanos solían hacerla asustar con la llorona, chucky, freddy, saw etc. Algunas veces la habían hecho asustar tanto que no quería entrar a su casa y se quedaba en el jardín llorando. Sus hermanos le rogaban que se callase y que entrase pero no había caso, se quedaba hasta que llegaba alguno de sus padres, lo que hacía que los mellis se llevaran un buen reto y una que otra nalgada.

-insisto todo eso debe ser mentira

-como quieras, pero debes saber que mis perros están adelante no atrás ni sueltos…

Leo le mostró la casa a Ángel y su habitación, aunque Ángel pensó que era la de invitados. Dejaron que nadara y jugara en el gym y tonteara hasta la hora que quisiese que fue tipo tres de la madrugada.

La mañana siguiente Dolores se fue al trabajo y Leo se levantó junto con ella, pero se quedó leyendo. Ángel se levantó y fue a la cocina. La sirvienta, una señora que Leo apreciaba mucho, le sirvió el desayuno. Mientras desayunaba escuchó voces

 -hola tío de mi corazón- una chica de no mas de quince años abrazaba a Leo

-mi princesa, como amaneciste?

-tío, hola- dijo un chico cercano a los catorce pero aun no cumplidos. Leo lo besó en la cabeza

-ey zoquete! Como andas- le saludaba un hombre un poco mayor que él

-uf! Un día que me llames por mi nombre para variar

-no le hagas caso tío, tu eres el mejor- dijo sin dejar de abrazarlo

-ey! Que yo te di la vida!

-tiene razón mi princesa, porque tu mi amarrete hermano jamás le harías un regalo como este a mi sobrinita preferida- decía mientras sacaba de su bolsillo una reluciente tarjeta de crédito

-aaaaaaaaaaaaahhhhh- dio un gritito Pía, mientras le arrebataba la tarjeta de las manos a su tío y le regalaba a cambio  dos besos, uno en cada mejilla- te amo, te amo, te amo

-a mi o la tarjeta?

- a los dos!!

-genial!! Ahora habrá que aguantarla con sus delirios compulsivos!- dijo Lautaro llevando las manos al cielo dramáticamente y dejándose caer el sillón

-leo podemos hablar a solas un minuto- dijo su hermano mayor con la desaprobación en los ojos

-papaaaaa!- se quejó Pía que sabía que hablarían de su flamante tarjeta, ya le picaban las manos por ir a estrenarla. Leo le sonrió a su sobrina y salió junto a Fabricio,

-oye no puedes regalarle una tarjeta de crédito a mi hija sin antes como mínimo consultarnos a nosotros sus padres, para algo existimos

-bah no te preocupes, es mi regalo yo correré con los gastos que ocasione, es mi sobrina

-no se trata de eso Leo, ya me canse de explicártelo, eres su tío perfecto, pero no puedes consentirlos hasta la hartancia. Debiste decírmelo o a su madre y nosotros decidir si se lo permitíamos

-los tios están para consentir, para ogros ustedes- dijo sonriendo Leo

-bbfff- resopló Fabricio- no entiendes! Son mis hijos Leo, mios yo debo saber qué pasa con ellos y que permitir y que no. Tu no haces mas que apañarlos y está bien eres su tío pero no puedes hacerlo siempre, no lo entenderás hasta que tengas hijos. Pero te digo esa tarjeta pasará a una mejor vida, si esa chiquilla no se comporta y espero Leo que si Pia viene  a llorarte cuando eso pase respetes nuestra decisión y más vale que la dichosa tarjeta tenga un límite Leo que no se te haya ocurrido que sea ilimitada

-eres tan tan aburrido!

-contigo no se puede hablar, sabes que a veces Lorena y yo nos preguntamos si eres lo suficientemente maduro para dejarte a los niños

-ey! Que no se te ocurra pensarlo! Yo los amó y jamás dejaría que les pase algo malo

-demuéstralo zoquete, demuéstralo. Me voy tengo media hora para llegar, cuidalos si?

-obvvio!

Fabricio saludó a sus hijos les recomendó comportarse y se fue.

-desayunaron?

-si tío

-y para mi? Cual es mi regalo?- preguntó Lautaro extendiendo sus palmas para recibir su supuesto regalo

-para ti cuchuflino saldremos el lunes por la tarde y elijes lo que quieres

-no es justo yo también quiero una tarjeta

-eres un niño, no puedes tener una tarjeta- dijo Pía mirando la suya y pasando su dedo por el grabado de su nombre

-soy solo un año y medio menor que tu!

-puede ser pero de aquí- se indicaba la cabeza- eres un mocoso

-angeeel!- llamó Leo para parar lo que iba a hacer la primera pelea del día

-quien es Ángel?!- preguntaron al unisono los hermanos. Ángel asomo sin muchas ganas

-este es Ángel el hijo de mi novia y estos son mis sobrinos Pia y Lautaro- los tres hicieron lo mismo, solo levantaron las cejas a manera de saludo. Uf pensó Leo justo hoy tenía que hacer de niñera de tres adolescentes

-cuchuflo podrías..-Pia y Ángel se rieron bajito burlándose de Lautaro

-tío no me digas así- dijo Lauti colorado, aunque minutos atrás no le había importado

-perdón perdón Lauti porque no le muestras a Ángel la laguna todavía no la vio. Ángel suspiró molesto pero siguió a Lautaro- cielo que quieres hacer tu?

-mmm…. Voy a jugar un poco con la wii y…nose ya veré tal vez la piscina

-me llamas si me necesitas si?

…..

-no habias venido antes?

-no

- te gusta?

-algo

-no eres muy hablador no?

-no te conozco- dijo encogiéndose de hombros, y sacó su celular

-no hay buena señal aca, solo en la casa

-si ya veo. Lautaro de verdad quería hacerse amigo de ese chico, asi que hizo algo que sabía que no debía hacer

-oye te gustaría ver unos cuatriciclos espectaculares?!

-los tienen?- preguntó emocionado- pero Lauti ya había cambiado el rumbo y llegaron a un garaje grande y allí estaban tres cuatriciclos de llamativos colores

-son lindos n0?! Yo siempre me subo a este- le indicaba un verde manzana con negro

-wow! Me gusta este-mientras pasaba la mano por uno naranja brillante- tienes las llaves?

-estan ahí arriba pero no nos dejan montarlas si no hay alguien mayor

-bah! Son cuatriciclos no son peligrosos, subamos, una carrera hasta allá, hasta aquel sauce llorón del fondo, ida y vuelta el que gane es el mejor- no era EL PREMIO pero para un parcito de adolescentes ser declarado el mejor por su par era algo que valía la pena-

-nosssseee, mi papá no quiere que  los usemos si no están ellos o mi tio- decía indeciso Lautaro que tenía bien grabado en su chip que debía obedecer

-vamos tienes ventaja, yo nunca me subí a uno, seguro ganas- y con eso lo convenció, sacó las llaves y le mostró mas o menos como manejarla y las sacaron

-brrrrrrrrrrruuuuuuuuuuuummmmmmmmm- salieron pitando ambos cuatriciclos, no era tan fácil de manejar la velocidad Ángel pisaba el acelerador pero no podía lograr una velocidad estable. A Lautaro no le iba mejor en el afán de ganar  pisaba demasiado. Sumado a la poca práctica de manejo ambos chocaron y salieron volando, por suerte fue cuando ambos habían sincronizado el frenar y acelerar, por lo que volaron si y cayeron y rodaron en el césped pero no fue más que unos moretones y raspaduras y mucho susto. Menos mal que tuvieron la decencia de ponerse un casco. Los ruidos y los gritos alertaron al jardinero que viendo que los chicos estaban completos fue a avisar a Leo

Aaauuuuuuu ayyyy maldición me dueleeeee!! Ssssssss – se quejaban y siseaban de dolor ambos- rayos porque te metiste?- le decía Ángel a Lautaro

-aaaaaayyyyyaaaaaa déjame en paz fue tu culpa! – decía abrazando sus rodillas y medio girando de lado a lado- me duele todooooo! Snif snif

-estan bien?!- llegaba corriendo Leo con el botiquín en la mano y  Pía venía detrás

-idiota!! Como se te ocurre!! Estúpido!! Mira lo que te has hecho!!- reñía a su hermano Pía

-ambos están en muchos problemas, era la laguna no los cuatriciclos y eso tu lo sabías bien- le decía a Lauti mientras le limpiaba las rodillas con agua oxigenada

-yo le insistí- dijo Ángel mientras se sentaba en el césped y esperaba su turno

-si ya hablaremos también- terminó de limpiar y curar algunas heridas y les dio un par de analgésicos- vamos adentro, voy a llamar a tu papá

-que! Tío no! Tu nunca snif snif tu nunca me delatas!- decía Lautaro sin poder evitar sollozar

-no hay mucho que yo pueda cubrir Lauti, en cuanto te vea tu papá me va a preguntar y me reclamará no haberle llamado. No es como si no hubieses tomado la sopa, te pudiste hacer mucho daño, mucho, y eso yo no podría perdonármelo

-tío por favor, por favor

Entraron a la casa y leo salió para llamar a su hermano. La verdad estaba asustado, podría haber pasado cualquier cosa y él no estaba con su sobrino, encima lo que le había dicho su hermano lo afectó un poco. Él era bastante capaz de cuidar de sus sobrinos. Y entendió lo que su hermano le dijo si algo asi le pasaba a Ángel en otro lugar él lo querría saber al instante por su madre y por el mismo. Asi que lo llamó.

-eres tan tonto ahora por tu culpa nos iremos- le dijo Pía a su hermanito cruzada de brazos y fulminándolo con la mirada

-estoy muy decepcionado contigo Lautaro muy decepcionado y Ángel sencillamente nose que decirte

-entonces no digas nada-

-llamé a tu madre dijo que fueras a tu habitación hasta que vuelva ella

-no es mi habitación y no pienso ir a ningún lado no fue mi culpa-

-fue tu culpa!! Tu no tenias idea de como manejarla!!

-como sea- decía ignorándolo. En eso entró Lorena muy preocupada lo saludo con un beso a Leo

-gracias por avisarnos, Fabri no podía venir- le explicaba a Leo. Leo se la llevó aparte y le pidió disculpas, sentidas disculpas, la verdad se sentía fatal. Lore lo tranquilizó, cosas que pasan le dijo y volvieron al salón de juegos donde estaban los chicos, una vez mas ambos chicos fueron revisados por Lorena, Ángel se sorprendió un poco pero no dijo nada. Lore sabía de la existencia de Ángel y estaba contenta de que al fin Leo se decidiera a formar una familia con Lola.

-Lautaro tu sabías perfectamente que no podías usarlas sin la supervisión de un adulto y no te importó te podrías haber matado o a Ángel!

-mamá no pasó nada… yo no quería

-silencio Lautaro! Y Ángel  tu también tienes culpa, apuesto a que mi hijo te dijo que no podían utilizarlas lo hizo?

-si

-si que? No soy tu amiga ni tu hermana, es mas soy una desconocida para ti, pero soy mayor asi que si que?

-si señora

-Leo espero que hables con su madre, si tu todavía no te haces cargo de él, no puede ser que teniendo la edad que tienen se comporten como niños gusteros que hacen lo que se les viene en gana sin medir las consecuencias. En cuanto a ti jovencito tendrás una seria charla con tu papá pero antes te voy a dejar claro que es lo que yo pienso de la desobediencia

-no, no mami- rogaba Lautaro al ver que su mamá se acercaba a el y lo levantaba del brazo- por favor mamaaaa noooo lo sientoooo lo sientoooo no voy a volver a sacarlaaaas mamiiiiiii noooo- pero era arrastrado al baño mas cercano

-Lore por favor fue solo una chiquillada- rogaba Leo por su sobrino

-estas muy mal si piensas que fue solo una chiquillada Leo. Deja de empacarte Lautaro no haces mas que empeorar tu situación- automáticamente Lautaro dejó oponerse y siguió a su madre. Ángel se sintió mal por Lauti, no tenía ganas de estar en su lugar

En el baño Lautaro lloraba abiertamente

-mamaaa perdóname no me pegues si? Lo sien- siento

-no señorito no lo siente todavía, vamos deja de alargar esto, abajo el pantalón y el slip

-no quieroooo, tuve un accidente y tu quieres pegarmeeee snif snif

-tuviste un accidente por desobediente y negligente- decía mientras le bajaba el pantalón junto al slip- no hubiese pasado si hacías caso,- lo abrazó y le besó los cachettitos para tranquilizarlo un poco. Lo puso sobre las rodillas

-maamaaaa se buenaaa no lo hagasss

-plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass pñass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass-auuuuuuuuuuuuuuuu ayyyyyyyy noooooooooo dueeeeleeeeeee

-la obediencia es importante plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass crei  que eso ya estaba claro pero lo reforzaremos de esta manera cuantas veces sea necesario plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass plass

-ayyyyyyy mamiiii yaaaa por favoooooor

-shhhhhh ya está cielo ya está, subamos esto sí?- le decía y le subía la ropa

-papá va a querer pegarme tambieeeen snif snif

-mirate como estas, todo raspado, vamos a casa otro día vienes si?

-me quiero quedar mamá por favor, quiero jugar con Ángel- se limpiaba los ojos con las manos- es decir a la pelota y a los juegos- aclaraba porque había sonado de cinco añitos con su pedido

-esta bien cielo te vas a quedar si tu tío te da permiso ya hablaré con tu papá igual él es capaz de venir a mostrarte lo que piensa también

-noooo mamiii dile que ya me castigasteeee no seas malaaaaa

-vamos límpiate la cara