Capítulo 9 Promesas

Capítulo 9 Promesas

En capítulos anteriores

-¡Royer Daniel Harper ven aquí en este instante!

-Equipo a la cueva necesitamos refuerzos ¡Zatara cuidado! rápido no soportaremos mucho.

-Por ahora te salvaste Roy pero cuando regrese tu y yo tendremos una charla muy sería- Oliver dejo que la amenaza flotara en el aire un momento y después besó la frente del arquerito

Capítulo 9 Promesas

Star City

12 de enero 2:32 pm

Flecha verde mejor conocido como Oliver Queen, el play boy mayor de Star City, entro a la mansión Queen cargando en sus brazos a su pequeño sobrino, en realidad Roy Harper no era su sobrino biológico era el hijo de su mejor amigo Tommy Merlyn*, pero para el eso no tenía importancia Tommy fue mucho más que un amigo para él, crecieron juntos, como hermanos eran inseparables y cuando se enteraron de la existencia de Roy sabían que sus vidas cambiarían

Flashback

Tommy y él se habían enterado de la existencia de Roy hasta que llego un abogado con una demanda de poción alimenticia a la casa de Tommy, donde la mujer llamada Merry Harper exigía que Tommy pagara los gastos de cinco años de un niño que ni siquiera conocía, Tommy estaba furioso le grito al tipo y le dijo que organizara una cita con la señora Harper y quería una prueba de ADN para comprobar que ese niño si era suyo, y no una de tantas veces que ya habían tratado de meterles hijos hasta de tres años menores que ellos. El día de la reunión Oliver acompaño a Tommy para evitar que golpeara al abogado de la mujer y metiera una contra demanda por perjurio, al entrar en el restaurante no solo estaba el abogado y la señora Harper también había un pequeño niño que si no fuera por el pelo rojo seria la viva imagen de Tommy, y a lado de el un adolecente de quince o dieciséis con cara de pocos amigos “¿Sigues dudando que es tu hijo?” susurro Oliver en el oído de su amigo “A mí solo me avisaron de uno no de dos” le devolvió el susurro con algo de terror en la voz, eso no pintaba bien.

-Buenas tardes Señor Merlyn, Señor Queen, yo soy Demian Wilson y ella es mi cliente Merry Harper.

-Mucho gusto Señora Harper- dijo Oliver cortésmente –veo que trae guardaespaldas- dijo volteándose a los niños y dedicándoles una enorme sonrisa, a la que el pequeño respondió con una igual de encantadora que la de su padre pero la de aquel niño tenía un espacio donde en algún momento debió haber un diente blanco y perfecto como todos los demás, Tommy vio toda la escena y de repente todas sus dudas desaparecieron, definitivamente ese pequeño pícaro era su hijo.

-Hola Merry cuanto tiempo sin verte- Tommy extendió la mano con una sonrisa sarcástica.

-Cinco años y cuatro meses, también cuenta el embarazo Tommy- respondo Merry con una voz no muy amable.

- ¡Hey! niños que les parece su vamos por unos helados, vi una heladería en la esquina- intervino Oliver tratando de sacar a los niños del ambiente tenso.

-Mami no nos deja comer el postre antes de la cena- respondió Roy algo triste porque el si quería un helado.

-Ven Roy te diré un secreto- y el chico mayor se acercó a su hermanito y le susurro en el oído -los niños ricos poden comer el postre antes de la cena y sus papás no los regañan- al niño más joven se le ilumino la cara de alegría porque su papá era rico así que él era rico tambien y ahora podría comer helado y su mami no lo regañaría.

-Entonces si vamos por el helado- dijo el niño brincando emocionado en la mesa, Oliver savia que no era cierto, a él y a Tommy jamás les dejaron comer postre si no se comían las verduras pero eso no lo tendría que saber el niño por ahora.

-Yo insisto en que no salgan del restaurante- dijo Marry, quería usar al niño para sacarle lo más posible a Tommy, quería exprimirlo lo más posible.

-Correcto chicos vamos al área de juegos del restaurante y allí le diré a alguien que nos lleve helado- Oliver no permitiría que usaran a un niño de esa forma.

En eso un mesero de mediana edad se acercó a la mesa para pedir la orden -Buenas tardes, ya decidieron lo que van a ordenar- dijo cortes mente el hombre.

-Por el momento solo serán tres helados, ¿de qué quieren niños?- Oliver volteo a ver a los niños -¡CHOCOLATE!- grito el más pequeño emocionado –no grites Royer- reprendió la madre muy molesta por todas las miradas que atrajo el niño con sus gritos.

“Por cada niño feliz siempre hay una mamá aguafiestas” pensó divertido Oliver y decidio fastidiar un poco a la mujer -¡SI EL CHOCOLATE ES GENEAL!- Oliver grito con el mismo tono emocionado que el niño, la mujer hiso una mueca pero el hombre decidió ignorarla –y tu compañero ¿de qué sabor quieres tu helado?- el chico dudo un poco y volteo a ver receloso a su madre, al final ignoro las miradas acecinas de la mujer y respondió con un pequeño brillo en los ojos pero aun dudoso –¿Fresa?

-Claro que si colega, mesero ¿podrían hacernos favor de llevarlo al área infantil?

-Lo siento señor pero en este restaurante no hay área infantil- la cara del pequeño Roy empezó a desanimarse a sí que Oliver intervino rápido

-A quien se le ocurre ir a un restaurante sin área infantil, ¡Por dios es tan aburrido!- Oliver planeaba alejar a los chicos de allí y nada lo detendría -¿Tiene algún patio o jardín?

-Sí señor, está el área de fumadores- respondió el mesero algo confundido

-Entonces muevan todo lo que estorbe de allí y que envíen los helados allá, yo me inventare mi propia área de juegos- eso definitivamente no le gustaría a los encargados del restaurante pero prometía pagar por todos los daños y molestias.

Los niños estaban fascinados, debía ser tan cool ser rico pueden hacer lo que se les da la gana y nadie les dice nada, el chico mayor estaba algo celoso de su hermanito, si todo iba en contra de los planes de su madre y el señor Merlyn si querría a Roy tal vez hasta se llevara a su hermanito a vivir con él en su mansión y entonces él se quedaría solo con su madre.

-De acuerdo señor Queen así se hará- al pobre mesero ya no le quedo de otra más que acceder

-Vengan niños vamos a jugar en lo que los adultos hablan- Oliver se voltio hacia su amigo y le giño el ojo en signo de camaradería –ay que hacer una carrera niños y quien llegue primero obtiene otro helado, en sus marcas…listos…¡Fuera!- Oliver y los niños se echaron a corres hacia el patio del restaurante casi tirando a un mesero en el camino, Tommy solo se rio de las ocurrencias de su amigo pero savia lo que Oliver intentaba hacer y se lo agradecía en el alma, no dejaría que usaran a un niño en algo tan bajo como obtener dinero, los niños no eran un negocio y menos su hijo.

-Aquí tengo la prueba de ADN señor Merlyn- el abogado saco de sus pensamientos a Tommy mientras le extendía un folder –el niño definitivamente es su hijo ¿desea revisar los resultados?

-No es necesario, les creo- dijo Tommy con una sonrisa cansada –lamento haber dudado pero deben comprender que esto ya me ha pasado otras veces

-Si mantuvieras tus pantalones en su lugar no tendrías tantos problemas

-Tú tampoco te resististe esa noche mi querida Merry

-Necesitaba el dinero

-¡OH! Eso explica porque al despertarme no encontré ni mi reloj ni mi cartera

-Y tu chaqueta- susurro bajito Merry

-Cierto, ¿Y para que querías mi chaqueta?

- Era invierno, hacia frio y yo llevaba un diminuto vestido, ¿Recuerdas?

-¿Todavía tienes la chaqueta? la quiero de regreso

-No ya se la regale a Jim

-¿Quién es Jim?- Tommy no podía creer que le allá regalado una chaqueta tan cara a cualquiera

-Mi hijo- dijo Marry como si fuera lo más obvio

-Creí que se llamaba Roy

-Mi otro hijo, si no lo notaste tengo dos

-Perdóname pero esa noche me dijiste que eras soltera y sin compromisos y ahora me sales con que tenías un hijo y estabas casada

-No tienes derecho a juzgarme, estaba desesperada

Merry y Tommy iban a iniciar una pelea verbal pero el abogado ya se estaba hartando de ellos y quería ir a su casa y pasar una tranquila velada con su bella esposa y su pequeña princesa –Señores si me disculpan me gustaría seguir con el tema del acuerdo con lo que respecta al niño.

-Lo lamento abogado, ¿Cuáles son las demandas de la señora Heper?

-Mi clienta demanda…

En otro lado del restaurante

-Ok chicos les gane así que les compartiré el premio, dos helados para cada quien

-Tanto dulce arruinara el apetito de Roy- intervino Jim con una mirada de horror al imaginar toda esa cantidad de azúcar en pequeño cuerpo de su hermanito

-Jimmy por favor, mami nunca nos da helado

-No enano quiero que comas algo más que dulces

-Por fis- el pequeño dedico una hermosa cara de cachorro a su hermano mayor, los ojos de Oliver era el chico quien se hacía cargo del niño y no la madre.

-Roy ya dije que no y es no

-¡Ya no te quiero, eres malo y tonto!

-Ya para esto Royer Daniel- un segundo nombre eso nunca es bueno

-¡No, déjame!- y el niño empezó a lanzar sus pequeños puños al estómago de su hermano

Y en contra de todo lo que esperaba Oliver el chico mayor le dio vuelta al niño y planto tres sonoras palmadas en el pequeño culito y por cada palmada en niño soltó un gritito

PLASS PLASS PLASS

OWW AYY NO MANITO

-Ya te vas a estar quieto Royer

El niño más pequeño solo asintió sollozando un poquito

Así que Oliver decidió intervenir para quitar un poco de peso de los hombros del muchacho

-Ágamos un trato Roy después de la cena te daré el segundo helado ¿echo?

-¿Y si mi mami se enoja o me quedo dormido?

-Pues se los compro luego- Oliver resalto el plural para que el otro niño no se sintiera apartado.

-Y si mami tiene razón y mi papi no me quiere- dijo el pequeño agachando la cabeza y limpiando sus ojitos de donde empezaban a salir lágrimas.

Oliver se incoó para estar a la altura de los ojos del niño y le hablo con una voz firme y clara -Escúchame Roy y escúchame bien, que tu padre no haya estado contigo todos estos años no es porque no te quisiera- Jimmy estaba feliz porque su hermano tendría un nuevo papá que lo quería y viviría con él en una enorme mansión rodeada de lujos e iría a buenas escuelas, pero también le tenía algo de envidia a su hermanito “Al enano siempre le toca lo mejor”

-¿Entonces porque nunca fue a verme? ¿Y porque mama dijo que no creía que fuera su hijo?

-Roy esas son cosas de grandes que entenderás en su debido momento, pero en este momento solo tienes que estar seguro de algo, tu padre te quiere y no te dejara solo nunca más y yo tampoco los dejare solos- en la última parte Oliver volteo a ver al otro chico que le devolvió la mirada con una mescla de añoranza y desconfianza –miren chicos allí vienen los helados

En la mesa siete de aquel elegante restaurante el escenario era menos cautivador

-¡Definitivamente no!- grito Tom al abogado que tenía frente a él, su furia fue creciendo conforme leía las absurdas condiciones que ponía la madre de su hijo –¡No are esto mi hijo no es una mercancía!- no le importaba pagar el dinero que ella quisiera pero el mencionar las palabras “pago por discreción” ya sonaba a chantaje por no revelar la existencia de su hijo, pero lo que no savia la señora Harper es que a él no le importaba mostrarle al mundo que tenía un primogénito –te daré todo el dinero que me pidas más un pasaporte universal para que te pierdas en algún lugar del mundo pero yo tengo una sola condición tus hijos se quedan conmigo ambos, ¿lo aceptas?

-¿Y qué quieres con el otro niño? ¿Una niñera permanente?

-No todos somos como tu Merry, yo lo único que quiero hacer es darle a los niños es lo que tú nunca podrás.

- Y qué es eso Merlyn ¿Dinero? ¿Una vida de lujos y personas superficiales?

-No, una familia... ¿Conoces el concepto de esa palabra Merry?

-No te permito...

-Señores por favor otra vez nos estamos desviando del tema- el abogado tuvo que intervenir de nuevo o esto se convertiría en otra discusión sin sentido –Señor Merlyn mi cliente está dispuesta a ser accesible ¿Cuál es su propuesta?

-Ya lo dije quiero a los dos niños conmigo, custodia total no compartida

-Señor no está siendo razonable...

-Acepto

-¿Qué?- los dos hombres preguntaron al mismo tiempo

-Quiero una visa mundial y depositaras mensualmente medio millón de dólares en mi cuenta

-Señora Harper ¿Esta consiente de que estaría renunciado totalmente a la tutela de sus dos hijos?- el abogado hiso énfasis al decir dos hijos porque también estaba renunciando a james

-Sí, espero mi dinero en esta cuenta- dijo entregándole un papel a Tommy –lo demás lo arreglas con mi abogado- Merry se paró de la mesa y se dirigió a la salida sin mirar atrás con un caminar que resaltaba la mujer fría y orgullosa que era

Cuando Merry estaba saliendo del restaurante sus hijos se dirigían a la mesa donde debía estar su madre, pero lo único que alcanzaron a ver fue la última onda que hizo el vestido al salir por la impecable puerta de cristal. Roy con su cara y sus manitas cubiertas de helado de chocolate quiso correr hacia ella pero su padre se lo impidió y entonces grito por ella con desesperación

-¡Mammii! ¡Mammii!

-Ya tranquilo bebé papi te tiene, estas con papi- Tommy cargaba a su tequeño en brazos y trataba de tranquilizarlo sin importar que su lujoso y muy caro traje se ensuciara de helado de chocolate

Mientras Tommy consolaba a Roy, Oliver abrazo al otro chico porque aunque fuera un llanto escandaloso como el del niño más pequeño, el chico también lloraba por el abandono de su madre.

Fin del Flash back

Oliver salió de su de sus recuerdos al sentir que su sobrino se empezaba a despertar de su sueño

-Hola pequeño dormilón

-Hola tío Oli- el niño no recordaba cómo había llegado a la casa de su tío –¿Porque estamos en tu casa?

-No esperabas que nos quedáramos en la cueva todo e día ¿o sí?

-No

De repente a Oliver se le ocurrió algo, no habían comido nada desde el desayuno

-Roy ¿tienes hambre?

-Sí, ¿podemos comer pizza?

-Más al rato, ¿ahora qué te parece un emparedado con un poco de jugo de naranja?

-Aggh, que asco eso es para bebés yo quiero pizza y unas cervezas

-Lo lamento jovencito pero si mal no recuerdo la última vez que revise la ley dice que la edad mínima para tomar son dieciocho

-Pero yo ya soy un adulto en el estúpido cuerpo de un niño, puedo hacer exactamente las mismas cosas que hacia hace dos semanas

-En eso te equivocas pequeño- dijo Oliver poniendo un tono más serio a su voz –quería dejar esta discusión para después pero ya que tu tocaste el tema vamos a discutirlo en este instante- Oliver levanto al niño de su regazo y lo paro frente a él tomándolo por los hombros -¿Sabes que es lo que hiciste hoy?

-Salve a los rehenes de aquel banco

-No Roy lo que hiciste hoy es casi causarme un infarto, ¿sabes lo asustado que estaba al saber que estabas dentro de ese Banco solo y con esos malditos y sus armas?

-Pero no estaba solo, los chocos estaban conmigo- empezó a quejarse Roy

-Cierto estabas con un bebé de tres años, dos niños de seis y otro chico de ocho que quince minutos más fuera del agua y moría asfixiado, Roy no solo te pusiste en peligro a ti también a tus amigos

-Superboy no es mi amigo

-Ese es otro tema que quería hablar contigo, que Conner no te caiga bien no significa que puedes ser grosero con él, es una persona y merece respeto

-No es una persona es sola la copia barata de Superman

PLASS PLASS PLASS

Oliver dio tres palmadas rápidas a su sobrino

-No voy a permitir que te expreses de esa forma Royer, no sé de dónde has sacado esas ideas pero no me gustan nada, tu padre no te educo así

-Lo siento- dijo Roy y de repente sus zapatos parecían lo más interesante del mundo, se sentía triste al recordar a su padre, lo extrañaba mucho. La verdad no savia porque no quería a Conner, pero es que al verlo con sus amigos se sentía substituido, olvidado.

-Lo se campeón pero no puedes hacer ninguna de las cosas que hacías antes, sabes que lo que nunca te eh permitido es que te pongas en peligro, no sabes lo impotente que me sentí al saber que estabas dentro, ahora que eres tan pequeño de nuevo tengo que tener más cuidado contigo

-Entonces va a ser igual que cuando tenía ocho

-Si mi cielo eres un niño y te tratare como tal, ¿y no es negociable?- se apresuró a decir Oliver al ver que Roy iba a protestar

-Odio esto de ser pequeño- dijo cruzándose de brazos y haciendo un puchero

-Tu decidiste ir se día a la misión y esto fue lo que conseguiste, así ahora afronta las consecuencias- dijo Oliver volviendo a sentar a Roy en sus piernas –y hablando de consecuencias- y con un movimiento fluido Oliver cambio la posición de Roy en su regazo

-Noooo, por favor- grito Roy al descubrir las intenciones de su tío

-Si Roy, ya sabias que esto iba a suceder desde el momento en que decidiste a hacerlo, así que ahora te toca pegar por tu decisión- y sin más Oliver empezó a descargar su palma poderosa en el pequeño trasero en perfecta posición

No puedes insultar a las personas solo porque no te agraden

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

Después de las primeras nalgadas Oliver bajo el pequeño pantalón con los calzoncitos que cubrían el pequeño culito de su sobrino

No puedes ir a una misión sin un adulto en estas condiciones

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

Hasta que no vuelvas a la normalidad no puedes ir a ningún lugar sin mí

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

Y definitivamente no puedes ponerte en peligro

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

PLASS PLASS PLASS PLASS PLASS

Luego tomo un el cepillo para el pelo que era de su madre y era el mismo que él y Tommy habían sentido en sus traseros desnudos barias veces a lo largo su infancia y ahora él estaba haciendo lo mismo con su sobrinito

CRACK CRACK CRACK CRACK CRACK

CRACK CRACK CRACK CRACK CRACK

AUUU YAAA OWWWW YA NOOOO MAAASS

-Ya, ya paso mi cielo, ya está, tranquilo tesoro ya te tengo estás conmigo- Oliver acomodo a su sobrino de modo que su traserito lastimado descansara entre sus piernas y que la cabecita pelirroja descansara en su pecho junto a su corazón para tranquilizar más al niño

-Lo lo sien-siento- dijo Roy agarrando la camisa su tío entre sus pequeñas manitas como si su vida dependiera de ello

-Lo se mi amor pero ya está ya paso todo- Oliver frotaba tranquilizadoramente la espalda del niño alterado

-NOOO todavía me duelee- dijo Roy sobando su colita mallugada con una sola manita

Oliver solo lleno a Roy de besos y abrazos hasta que se calmó y su pansita hablo por el haciendo un sonido gracioso que provoco la carcajada de ambos a la cual siguieron otras cuando el estómago de Oliver también protesto por falta de comida.

-¿Que dices tesoro quieres ese sándwich y el jugo?

-Mejor con soda

Oliver lo miro con los ojos entre cerrados pero al final sonrió, abecés tenía que dejarse ganar algunas batallas –Ok pequeño con soda será

0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0o0

Hola chicas me tarde más de lo esperado pero aquí esta, el próximo es Kid Flash se aceptan ideas y críticas constructivas.