GUERRA DE PODERES

Capitulo 10

Guerra de poderes

Para Peter y Elizabeth, este día había sido tan…wooow…no sé cómo describirlo porque siento que cualquier adjetivo que use se quedará corto, así que simplemente diré que para Peter y Elizabeth este día había sido muy, muy, muy, muuuuuuuuuuuy agotador.

La cena, porque aunque ninguno de los mayores tuviese mucha hambre era obligatorio cenar, transcurrió en total silencio…bueno, con excepción de la risilla picaresca de cierto chiquitín que estaba más feliz que un cachorro en día de paseo.

Los Burke tenían tanto que preguntar y el joven sentado frente a ellos tenía tanto que ocultar que al final, los únicos seres inocentes y felices que terminaron con la barriga llena fueron Nelito que repitió postre tres veces y satchmo white collar que se comió las sobras de todos.

“…Creo que es mi hermano”…esas palabras, dichas por aquél desgarbado jovencito, resonaban en el cerebro de Peter una y otra vez como si fuesen un eco interminable. El agente sabía que mentía…por Dios, si hasta yo sabía que mentía!!...pero…ese era un tema que definitivamente no debía hablarse delante del pequeño Neal.

Cuando se levantaron de la mesa, El llevó los platos a la cocina y miró a Peter con insistencia para que la siguiera. Tantos años de matrimonio habían enseñado a ese par, a comunicarse casi telepáticamente y pues dado que yo no entiendo mucho de ese “lenguaje marital” me conformo con escribir lo que “creo” se dijeron en su inusual conversación:

-¿Su hermano?¿Tú le creíste eso? (Elizabeth ladeó la cabeza apuntando a su nuevo invitado)

-Claro que no!!...(Peter hizo una señal negativa y luego apuntó en dirección al chiquitín que correteaba por la sala persiguiendo al perro)…Estoy seguro que es este muchacho es el padre de Nelito!!

-Ohhh Peter y qué haremos ahora?!!...(mirada de pánico puro)…él es solo un niño también!!!

-Realmente no lo sé cariño, quizá debamos hablar, que nos cuente su historia y luego…pues…luego ya veremos qué pasa...(media sonrisa, pero mirada de duda e inseguridad)

-Esta bien pero y que haremos con…(Elizabeth apuntó con sus labios al niñito)

-Yo me encargo del pequeño monstruo, él y yo tenemos asuntos pendientes todavía…(Mirada aterradora)

-Ufff!!...(media lagrimita)…no seas tan duro con él, no me gusta cuando lo castigas!!...

-¿Y crees que a mí sí me gusta? (ojos de resignación)

-Owww cariño, yo sé que no…(Mirada dulce y comprensiva) solo intenta ir suave con él, un par de nalgaditas y ya…(Gesto de azote suave con la mano)…¿De acuerdo?

-Bieeeen…(Ojos en blanco y mirada de: “Ese diablillo te tiene comprada”)…lo intentaré…

(Elizabeth sonrió sabiendo que el silencioso reproche era totalmente cierto)…Es que es tan dulce, tan inocente, tan…

-¡Travieso!.

-Neal!!... Peter corrió hacia la sala cuando vio a su niñito saltando de esquina a esquina un como conejo… No brinques en los muebles que te puedes caer!!.

-Weeeep!!! Tengo un hermano mayor!!...El pequeñín gritaba corriendo por toda la sala y es que para nuestro  inteligente niño, el nuevo miembro de la familia era como una ecuación matemática: Hermano mayor = mimos extras + compañero de juegos + regalos y - regaños...ahhh porque a los ojos de Nelito, éste joven era su escudo protector contra los castigos de sus papis y la idea sonaba bien, lástima que Peter no fuera muy bueno en eso de las matemáticas como su pequeño hijo.

-Neal sube a tu cuarto y comienza a ponerte el pijama, yo subiré en seguida…El detective habló en una voz muy dulce, o al menos a mí me lo pareció, pero al chiquitín esas palabras le dieron mala espina y fue como si alguien le gritara: “Estalló la guerra!!.. Todos a sus puestos de combate!!”

-Nmmm…nmmmm…Negó con su cabecita varias veces…Es muy temprano todavía…

-Ni tanto…Peter respondió mirando su reloj…Además hemos tenido un día muy…ehh…inusual, así que es mejor que subas ya y…

-Nmmm…nmmmm…Nelito volvió a negar interrumpiendo las palabras de Peter…Shamo no tiene sueño y yo tampoco…

-¿Vaya hablas con los animales peque?!!...El muchacho que desde la cena había pasado por mudo, no pudo evitar meterse en la conversación y burlarse al escuchar tales ocurrencias.

-Sip!!!...Mira esto!!...El niño corrió hasta la cocina tomó una galleta y se sentó en frente del perro…¿quieres ir a la cama Shamo?..Preguntó al mismo tiempo que agitaba la galleta de izquierda a derecha justo en las narices del animal.

Los agudos sentidos del perro se activaron y su cabeza se movió de lado a lado tratando de comerse la dichosa galletita.

-Lo ves!!...dijo que no, igual que yo!!!

-jajajaja…El muchacho no podía parar de reír, incluso Peter sonrió disimuladamente…si ya veo que eres todo un experto!!..

-También puedo hablar con los leones!!...

-Caray has visto un león???...

-No pero en cualquier momento me busco uno!!

-Pues me gustaría que lo buscaras en tu habitación…Peter dijo muy serio…Vamos, sube.

Pero ni Neal grande, ni Neal chico le hacían mucho caso y continuaban hablando entre ellos…¿Será que la cena lo volvió invisible?

-¿Y para qué quieres un león peque?¿No te basta con tu papi para que te defienda?

-Yo me sé defender solito!!!...El niñito respondió muy seguro de sí mismo, como si fuese un experto  soldado sobreviviente a la segunda guerra mundial.

-¿En serio?...Neal casi se echa a reír de nuevo…¿Y qué harías si de pronto te aparece un grandulón queriendo secuestrarte?

- Ahhhh esa es fácil, le suelto una patada en los huev……

- ¡¡¡NEAL!!!...Peter, que hasta ese momento estaba muy interesado en las habilidades de autodefensa de su niñito, decidió intervenir…¿Pero qué barbaridades dices?

-Pero funciona papi!!...en el orfanato, cuando los más grandes me querían golpear, me defendía metiéndoles un patadón en los…

-Si, si, ya entendimos, no tienes que ser tan…ehh…detallista hijo.

-Además tu plan tiene una falla, enano…El jovenzuelo picó con su dedo el pecho del niño...y también su  orgullo.

-¿Eh?...¿Cuál?

-Bueeeeno…El muchacho dijo con una sonrisa maligna…la misma sonrisa maligna que Peter había visto muchas veces en la versión miniatura de Neal… ¿Qué pasa si el secuestrador es una mujer?

- Duhhhhhhh…Pues hago lo mismo!!

-jajajaja…no, no puedes porque las mujeres no tienen…Hasta ese instante el joven se dio cuenta de lo difícil que sería explicarle a un niño ese detalle…este…no…las mujeres no tienen…

Neal comenzó a balbucear y quiso detener su inoportuno comentario, pero ya era tarde…muy tarde…

El niñito ensanchó sus ojos ante esa nueva información…esto era imposible de creer!!... -¡¿Quieres decir que las mujeres no tienen hue…

- ¡¡NEAL!!...ya basta, deja de hablar tonterías!!..Peter volvió a gritar interrumpiendo a su hijo pero mirando con coraje a su invitado...

-¡Si el que está diciendo tonterías es mi hermano!...El chiquillo se defendió, además necesitaba corroborar si la información era válida, así que sin dudarlo gritó: Mamáaaaaaaaa!!!...

La hermosa dama asomó su cabeza desde la puerta de la cocina…-¿Qué pasa tesoro?

-Este chico dice que tú no tienes hue…

-¡¡HUESOS!!...Neal interrumpió el grito y luego agarró al chiquitín de la oreja…Shhhhhhhhhhhh ya cállate enano que me vas a meter en líos!!

-¡Suéltame!...El niño se soltó del agarre, estaba tan molesto con su hermano que decidió probar su “técnica” patentada de defensa personal en su versión adolescente y le soltó a Neal una buena patada directo en la entrepierna.

-ARGGGGGGGGGGGGGGGGGG!!!

El grito no se hizo esperar, fue un aullido tan desgarrador que Elizabeth tiró los platos y salió corriendo hacia la sala…¿Qué pasa aquí?...exclamó viendo al adolescente rugir de dolor tirado en el piso…

En dos segundos Peter estaba al lado del herido intentando ayudarlo…-Neal!!!...¿Estás bien?...gritó al mismo tiempo que su esposa gritaba: ¡Neal!...¿Qué le hiciste?...viendo al niño a los ojos.

-Já te dije que me sabía defender!!.. El pequeño demonio se burlaba en la cara del pobre Neal...lástima no estaba prestando atención a la cara de su madre...no sé porqué pero presiento que muy pronto tendremos a alguien más llorando en la misma habitación.

Elizabeth se volvió hacia su esposo que parecía tener contralada la situación con su ¡oven invitado, además no había mucho que ella pudiera hacer dado que Neal no la dejaba ni cercársele…-Peter cuídalo, yo me encargo de tu hijo!!...le dijo y pescó al niño de la oreja antes de pudiera huir…

-Nooooooo…augggg…Nelito gritó, pero su madre no se conmovió y comenzó a soltarle palmadas impulsándolo a caminar hacia la planta alta.

-Deja…PLAST!!… el berrinche…PLASTT!!...y camina a tu cuarto… PLASTT!!...si no quieres que te castigue PLASTT!!...aquí mismo PLASTT!!...

Por más que el chiquillo no deseara caminar, con semejante incentivo no le quedó otra que obedecer y así con Elizabeth soltando palmazo tras palmazo y con Nealito queriendo evitarlos, llegaron a la habitación.

En cuanto la mujer le soltó la oreja, Neal corrió a esconderse, en el mejor lugar que se le pudo ocurrir…debajo de la cama.

-Ahhh, no!!...de eso nada, sal de ahí señorito que ya estás en bastantes problemas!!

-No!!...de aquí no salgo!!... la vocecita respondió desde su cuartel general...tú me dista muchas nalgadas!!...

-Y después de lo que hiciste, te faltan muchas más!!!...La dama le respondió medio inclinada intentando ver por lo menos un pie de su hijo para jalarlo…Sal de ahí y bájate los pantaloncitos!!...Le ordenó al ver que no podría sacarlo sin lastimarlo.

Obviamente a Neal no le gustó nada esa orden, así que no iba a obedecerla…-Pues no salgo!!...

-Neal Caffrey Burke…ohh..ohhh…la voz de Elizabeth sonó como la de un militar…un militar muy enojado…ya tienes ganada una paliza con el poto  desnudo, así que si no quieres que vaya por la paleta de tu padre, vas a salir de ahí antes de que cuente hasta tres…UNO…

-Por mí puedes contar hasta cien!!...yo no salgo, no salgo y no salgoooooo!!!... Neal sentía que esta guerra la ganaba a como diera lugar!!

A estas alturas, la Sargento Burke ya estaba de rodillas frente a la cama…Bien si eso es lo que quieres, iré por la paleta entonces… se puso en pie y comenzó a caminar hacia la puerta, pero en realidad daba pasitos lentos como esperando que el niño se retractara, de por sí no deseaba castigarlo y menos con esa cosa!!

Cuando casi salía de la habitación quiso darle a su terco soldadito una oportunidad de negociar…Neal, si sales ahora y te disculpas con todos, solo voy a darte 20 nalgadas, 10 por tus travesuras de la tarde y 10 por patear a…iba a decir a tu hermano pero se contuvo…a nuestro invitado.

Pienso que después de tantos desastres que el niño había provocado, mínimo se merecía que llevaran su traserito al paredón, así que a mí en lo personal, eso  me sonó como un buen trato…pero quizá Neal pensaba lo contrario porque se quedó sin decir nada.

 Pasaron unos segundos y El esperó con paciencia, pero el chiquillo no decía ni pío y menos asomaba la mollera, así que la dama suspiró derrotada y preguntó con resignación…Entonces, ¿No tienes nada más que decir Neal? 

- Si tengo algo más que decirte!!...El colchón…o mejor dicho, el niño bajo el colchón respondió y Elizabeth se volteó con una sonrisa…una sonrisa que se borró de su cara en cuanto escuchó las palabras de su hijo:

-Eres mala, te odio y ya no quiero que seas mi mamáaaaaaaaaaaa!!!!...Neal le gritó con toda la sinceridad e indignación que un niño a punto de ser castigado puede tener, obviamente no lo hizo con la intención de herirla, sino más bien, de persuadirla para que no le pegara.

Pero las estrategias militares de Nelito no estaban muy bien afinadas porque para Elizabeth, eso fue como si la bomba atómica le estallara dentro del cuerpo e hiciera pedazos su corazón.

Esas palabras dolieron…y vaya que dolieron!!... fueron un golpe de muerte para una madre primeriza cuya mente estaba llena de inseguridades y que constantemente se debatía pensando “¿Seré lo suficientemente buena para Neal?”…así que como lo dije al principio, esas palabras dolieron, porque le lastimaron el alma.

Para Elizabeth, su hijo acaba de corroborar sus miedos, no había dudas: era un fracaso como madre.

-Si es lo que piensas… le respondió limpiándose la solitaria lágrima que escurrió en su mejilla derecha…yo…te dejaré solo….dijo cerrando la puerta tras de sí y sintiéndose completamente derrotada.

Nuestro experto militar de tres años podía proclamarse ganador de esta batalla...pero no se sentía feliz por su triunfo, al contrario, cuando supo que en verdad su madre se había ido, se sintió solo…tan solo y triste como no recordaba estar  desde que conoció a sus padres.

Al soldado Neal Caffrey Burke, esta victoria le supo a derrota y comenzó a llorar hasta quedarse dormido.