Andrea Karliee te escribió una historia

Hola, bueno Andrea espero que te guste, no sé si sea la serie que yo creó pero bueno, esto es lo que querías a Dick, a Bruce y a Alfred, en una historia, espero no me salga tan mal, ya que bueno jamás he escrito sobre superhéroes 

¡FELIZ NAVIDAD!

Karliee

-¡LO TENIA TODO BAJO CONTROL! –La voz de Dick sonó por toda la baticueva.

-Claro que no, Dick, no tenias nada bajo control.-Dijo serenamente el caballero de la noche.-Huir con la motocicleta en medio de la noche, a capturar a unos maleantes sin mí, no es tenerlo bajo control.

-Claro que sí, es que ¿Sabes cuál es el problema? Que tu no confías en mi, ese es mi problema, que tu y yo no somos un equipo, yo soy tu simple estúpido ayudante…

-Dick, basta ¿de acuerdo? Sabes que no debiste salirte, y que está mal, porque cuando te di la moto, quedamos que solo la usarías bajo mi supervisión

-No tengo tres años.

-Teníamos un trato, Richard.

-Al diablo tus tratos, yo no soy tu compañero, soy tu burla, ¡Estoy harto!

-Mejor fíjate como me estás hablando.-Le reprocho Bruce.

Dick estaba a punto de contestar y entro Alfred con un largo estuche, que todos sabemos que tenía dentro, Dick enseguida abrió como platos los ojos, pero no iba a ceder esta vez.

-Aquí esta, señor.-La coloco.

-Llévatela Alfred, no la necesita.-Dijo Richard muy valiente.

-Oh no, déjala, ¿O tu qué opinas, Alfred? ¿Crees que merezca un castigo?

-Pero… ¿Un castigo por qué?

-Por desobedeceré, tomar la moto sin mi permiso y veamos, por arriesgar tu vida sin razón Dick.

-Eso no es justo.

-Yo digo que si, Joven Grayson, creó que todos debemos a cuidar de nuestra integridad, no solo por usted sino por su familia, que no nos gustaría verlo mal.-Dijo Alfred con seriedad

-Pero es que… es su culpa.-Señala a Bruce molesto.-Siempre quiere que se haga todo como él quiere.

-Porque se preocupa por usted, Joven Grayson.

-Ush…-Dick puso los ojos en blanco.-Ustedes jamás entienden nada, tú te pones de su lado, pero da igual, me largo a dormir.-Se acerco a la puerta pero una mano enseguida lo detuvo.

-Falta la parte del castigo, Dick, ni creas que te salvaras.-Dijo Bruce algo serio.

-¿Castigo, por qué? Sigo pensando que es injusto.

-No te lo pregunte.

-Vamos, Bruce, aparte tu castigo aparte de humillante es para niños de tres años, yo no soy un niño ya…

-Pues demuéstramelo, alguien maduro y adulto no hubiera hecho lo que tú, no has aprendido a trabajar en equipo ni a obedecer órdenes, que son por tu BIEN.

-Como digas Bruce, eres injusto…solo buscas razones para castigarme porque sabes que yo tengo razón.

-Si me disculpan caballero, me retiro.-Y así salió Alfred de la habitación.

-Inclínate sobre el escritorio.-le ordeno.

-No…-Se negó Dick.

-Te estoy esperando.

-Pues sigue esperando…-Se envalento Dick.

-Si te tengo que ayudar a inclinarte, te daré diez veces con la vara durante una semana.-Dick trago saliva.

-Es que…-Sus ojos se inundaron.-Yo… yo…

-¿Tu qué?-Dijo Bruce Wayne perdiendo la paciencia.

-No… no quiero que me pegues.-Los colores se le subieron enseguida a Dick, había sonado tan infantil.

-Te tienes que atener a las consecuencias de tus actos, Richard, ahora haz lo que te digo.

-No lo haré.-Bruce no sabía a que jugaba Dick pero su juego lo había cansado así que sin decir más se saco el cinto y le regalo tres cintazos en el centro del trasero y uno por los muslos, lo hizo inclinarse en el escritorio.

-NOO; ¡AUUUCH! Me duele…-Se quejo enseguida.

-Te lo advertí.-Y ZAS, ZAS, ZAS, ZAS. Otros cintazos caían con fuerza.-Te di una orden la cumples.-ZAS, ZAS, ZAS.

-AUUU, ya. Ya…-Las lágrimas lo traicionaron.

ZAS ZAS ZAS ZAS

ZAS ZAS ZAS ZAS

ZAS ZAS ZAS ZAS

ZAS ZAS ZAS ZAS

-Cuando yo doy una orden se cumple, sin rechistar, jovencito.-ZAS ZAS

-BUUAAAA, auuu. Ya por favor…-Lloro más fuerte. ZAS ZAS

-Ahora, ya que tengo tu atención, te quedaras en el escritorio, y recibirás cinco con la vara, por desobedecerme, y sacar la moto sin mi permiso.

-NOOO; por favor… BUAA ya me duele mucho… No lo volveré a hacer.-ZAS ZAS.

-Ya te dije.-Y camino hacia donde Alfred había dejado el estuche de tan temida cosa, la saco, puso la mano encima de la espalda de Dick y…

ZWAAAAS sonó el primero. ZWAAAAS ZWAAAAS ZWAAAAS

-YAAA por favor, BUUAA no lo haré de nuevo, nunca más, papá-

ZWAAAAS sono el ultimo Dick se quedo llorando ahí unos segundos hasta que sintió como fue guiado al pecho de Bruce que le sobaba con delicadeza la espalda.

-Ya, ya tranquilo… no pasa absolutamente nada, solo espero que no me desobedezcas ya, porque te lo digo por tu bien, porque te amo hijo, y moriría si te pasara algo.

-Perdon, perdón… yo no quería yo pensé que podía ayudar.-Lloro más fuerte en el pecho de su mentor.

-Vamos, ya te perdono, boorron y cuenta nueva, ¿Vale?-Le beso la frente.