Páginas Amigas

lunes, 14 de abril de 2014

Capítulo 14 Vale, el dolor no está en la mente

 
Feliz cumpleaños Marambra aunque un poco atrasado, espero que hayas tenido un buen día. Igual dos semanas no es mucho tiempo cierto? Y fueron dos capítulos, ojala te gusten 

Capítulo 14
Vale, el dolor no está en la mente


El profesor de educación física negó con la cabeza y nos señaló la puerta, sin duda mi mano tendría que esperar, pero la pregunta era como hacerlo, sentía que no podía más, me dolía demasiado. Cuando los tres salimos del gimnasio Santiago empezó a maldecir, bueno de hecho todos lo hacíamos pero él con una voz mucho más alta.

Al entrar al teatro todos nos estaban mirando, con una mirada de… en qué putas estaban pensado, Edgar, Talia y los que supongo que son los papás de Jean estaban junto al coordinador, nosotros nos limitamos a entrar mirando al suelo. Cuando estuvimos al frente del coordinador entro el rector del colegio y se veía realmente enojado. Pero de todas formas seguía tratando de pensar que el dolor está en la mente

Dialogo en francés:

-cómo pudieron robar todos los móviles que estaban decomisados, que se creen ustedes tres, dijo el rector mientras tomaba el micrófono, no sé qué le dio a Santiago pero le respondió fuerte y claro

-estudiantes, nada más y no creo que hayamos hecho algo realmente malo, todos empezaron a murmurar y eso que son los padres no?

-que dijiste, dijo el rector muy serio, pero Santiago se limitó a reírse


-jajajaja lo que escucho, nada más, el rector se puso rojo


-¿de quién fue la maravillosa idea?, pregunto, no entendía muy bien porque estábamos “hablando” delante de todos, deberíamos ser solo nosotros tres y el director

-mía, dijo Santiago dando un paso al frente, pero no me pareció justo en absoluto así que yo también di un paso al frente y dije

-fuimos los tres no solo él, pero como Santiago dijo antes no me parece que hayamos hecho un daño al devolver los móviles, cuando dije eso Jean me empezó a mirar asustado, por eso cambie un poco las palabras. –ehh la verdad solo fuimos los dos, a Jean lo convencimos de que nos ayudara… pero solo lo hizo por dinero, fue una de las cosas más estúpidas que pude decir, normalmente al decir mentiras nunca meto más de la cuenta para que sean creíbles, no sé qué me paso esta vez, Santiago me miro impactado y luego se pasó las manos por la cara con desesperación     

-así que también obligaron y le pagaron a su compañero por hacer algo tan…repudiable, dijo el coordinador. Santiago y yo esperamos hasta que Jean hablara, pero nunca lo hizo, sé que estaba asustado pero igual debió ayudar un poco, cualquier cosa que dijéramos Santiago o yo sería usada en nuestra contra y nadie nos creería 

-bueno antes de dar por terminada la reunión de padres necesito que los tres den una sincera disculpa por lo ocurrido y luego los espero en rectoría, dijo el coordinador hablando por el micrófono, pero yo no quería hacerlo, no pensaba en pedir disculpas por algo tan… tan estúpido

Jean empezó a “toser” tratando de hacer que Santiago o yo empezáramos con la disculpa pero cuando ambos nos negamos moviendo simplemente la cabeza, él fue el primero en hacerlo, me sentí algo traicionado por eso… pero era algo que no podía evitar.

-yo realmente lo lamento… digo… los tres lo lamentamos, sé que no lo pensamos bien pero estamos arrepentidos (nos miró pidiendo apoyo) verdad?

-no exactamente, la verdad yo me arrepiento de haber venido a este país, de querer ser un buen compañero y terminar aquí delante de todos ”pidiendo” disculpas por algo que no creo necesario, de haber elegido la salir por la ventana antes que la puerta, de no ahorrarles tiempo a ustedes y no haberles dicho ayer que fue mi culpa y que era yo el responsable. Ah y de no decir antes que Camilo se partió la mano derecha por los estúpidos móviles de sus hijos, porque ni siquiera eran nuestros, dijo Santiago y todos quedaron atónitos, el primero en reaccionar fue Edgar y lo hizo solo para comprobar si lo de mi mano era cierto y para mi tristeza lo era y al tocarme pegué un grito, qué ninguno se daba cuenta de que dolía

-AHHH au no me toques por favor, dije quitando bruscamente mi mano de su agarre

-hace cuanto la tienes así, me pregunto Edgar. -Está muy inflamada, en realidad eso ya lo sabía y por eso mismo me molestan esos comentarios, no es necesario que la gente haga comentarios obvios 

-ayer?, dije, trataba de calmarme, apenas me toco revivió el dolor en mí, toda mi calma había desaparecido, tenía ganas de desmayarme incluso de llorar pero no paso ninguna de las dos

-sí lo prefieren pueden salir e ir a un hospital, el lunes arreglamos este inconveniente. Pero Santiago se debe quedar.-dijo el coordinador al notar que era cierto lo que había dicho

-gracias, dijo Edgar antes de hacerle una seña a Talia para que se quedara con Santiago. –vamos Camilo

Salí del teatro con la cabeza agachada, estaba a punto de llorar y todo por un dolor, si es que el dolor está en la mente no sé cómo controlarlo pensar que todo está en la mente no me ayuda para nada

-¿te duele mucho?, pregunto Edgar. -¿Por qué no me dijiste antes?, me molesto su pregunta, no le iba a decir lo que había ocurrido por dos razones la primera porque la idea era que nunca se supiera la segunda porque entre él y yo no había algo llamado confianza que me hiciera contarle

Durante el camino hacia el hospital sentía como me caían lágrimas y me mojaban toda la cara. Me daba vergüenza no poder soportar el dolor en la mano, estaba cansado, no quería hablar y mucho menos quería que me revisaran pero fue lo primero que hicieron cuando llegué.

- Qu'est-ce que vous avez besoin? (¿qué necesitan?), dijo un medico

- Je pense qu'il a cassé la main droite (creo que tiene la mano derecha rota), dijo Edgar mientras yo asentía

- laissez-moi voir (bien, déjame ver), dijo el médico mientras trataba de revisar mi mano pero yo no quería, cada vez que alguien me tocaba me hacía doler peor

-noo, dije colocando mi mano detrás de la espalda

-por favor Camilo no seas irresponsable, si desde ayer estás así deja que te mire la mano que se te puede poner peor, dijo Edgar. Solo cerré los ojos y extendí mi brazo hacía el medico

-Quelle heure est-il arrivé? (¿a qué hora ocurrió?), pregunto el médico y Edgar le respondió que todo había pasado ayer

-N'avez-vous pas blessé avant, comment il a enduré pendant si longtemps? (¿no te dolió antes?, ¿cómo lo soportaste por tanto tiempo?), preguntó el doctor como si fuese algo interesante  

- Je sais, on peut obtenir un effet calmant ou quelque chose (no sé, puede ponerme un calmante o algo), dije algo desesperado, no quería alargar la charla, sentía mucho dolor casi quería tirarme al piso y revolcarme ahí 

- cours (por supuesto), dijo y nos llevó hasta una sala. – besoin d'une autorisation pour prendre des radiographies (necesito la autorización para tomar unas radiografías)  

La verdad el calmante dolió más de lo esperado fue horrible, me inyectaron el líquido que más he sentido en mi vida. Desde ese momento supe que el dolor no está en la mente. Cuando los resultados de las radiografías salieron supimos que tenía fracturada la mano y el dedo índice, tendría que usar yeso por 20 días pero al menos no era un mes.

Al salir del hospital me sentía alegre porque no me dolía nada, estaba tan tranquilo por eso. Después de un tiempo empecé a pensar en lo que habría pasado en el colegio, en lo que le habrán dicho a Jean y a Santiago, en que había una posibilidad de que nos expulsaran.

-¿por qué hicieron eso?, pregunto Edgar cuando estábamos por bajar del carro

-hacer que… ah lo del colegio, no sé creo que fue algo justo, dije con la mayor sinceridad posible

-te parece bien haber sacado los celulares de todos sin permiso?, dijo Edgar antes de entrar a la casa

-de hecho sí, no tienen el derecho de quitarnos nuestras cosas podríamos necesitarlos para algo importante, dije 

-pero también deben atender a la clase, si se la pasan chateando me parece justo que se los quiten, además está prohibido usar celulares en los salones de clase, dijo Edgar

-bueno pero igual los deberían devolver al final de la clase, no al final del día, dije caminando hacia la sala

-de hecho los devuelven al final de la semana, dijo Edgar y me impresione mucho

-ese colegio tiene huevo, dije impactado, eso no podía ser enserio, yo de ellos me hubiera quejado hace mucho tiempo

-no, ese colegio no tiene huevo como dices, esa norma es muy justa al igual que el resto. Todas las sociedades tienen normas que no a todos nos parecen pero que sirven para lograr un bien común, dijo Edgar, lo empecé a mirar mal desde que menciono lo de las normas justas, ¿por qué carajos menciono el puto bien común?, en realidad eso no existe, nunca habrá una sociedad perfecta con todos felices

-¿BIEN COMÚN?, de que hablas, estamos hablando de un colegio no de un país además si no prestas atención en clase es tu problema no el de los demás a nadie le afecta que estés chateando en clase, dije con fastidio

-bueno entonces respóndeme en que estaban pensando ¿eres consciente de que ese colegio cree que eres un problema? (de hecho si lo sabía), no llevas ni tres meses y te has metido en más problemas que Patrick en toda su vida, dijo Edgar

-eso es porque Patrick es un nerd y un conformista… sin ofender. Y lo de los problemas no lo hago de aposta, siempre he sido así, mi papá decía que mientras me fuera bien académicamente no importaba la convivencia, dije aunque no era muy cierto pero igual no podía comprobarlo

-qué mal que eso pensara tu papá pero igual estás viviendo conmigo y a mí me interesa demasiado la parte de cumplir las normas porque se necesita ser integral en la vida, dijo Edgar.-así que esfuérzate por serlo porque si te llegan a expulsar te vas a meter en serios problemas conmigo

-no me amenaces, además si uno no está de acuerdo con algo tiene derecho a reclamar, dije furioso por su amenaza

-si, a reclamar si pero no a hacer desorden e incumplir las normas del colegio, por algo se hicieron, dijo Edgar

-no sé, algunas normas son tontas. Por ejemplo en algunos colegios prohíben que los estudiantes se pinten el cabello, se hagan pearcings, tatuajes o expansiones y hasta en algunos no dejan que protesten por algo que no les parezca pero eso va contra de los derechos, siempre puedes dar tu opinión y puedes desarrollar tu personalidad como quieras, dije ese era un argumento que siempre funcionaba con todos

-pero no hablamos de eso, hablamos de las normas que incumplieron, dijo Edgar. -Camilo en verdad trato de entenderte pero no lo logro, me parece el colmo que todavía no aprendas y sigas metiéndote en problemas en el colegio, hasta de lo de los retos lo llegue a entender pero lo de los celulares no tiene sentido, no eran de ninguno de los tres, no tenían por qué estar en ese pasillo y mucho menos tener la irresponsabilidad de bajar por una ventana de cuatro metros, mira que hasta te partiste la mano, dijo Edgar

-si tienes razón fue algo estúpido, irresponsable y sin sentido pero aun así no me arrepiento porque no le hicimos daño a nadie

-pero si rompieron las normas y fueron muy irresponsables, eso es algo que no tolero te pase lo de la fiesta esa, que fue algo en lo que se pasaron de todos los limites posibles pero esto del colegio no y sabes es lo que más me molesta, que les valió un carajo hacer eso sabiendo que hace menos de una semana estuvieron en una estación de policía por una pelea y tomar, dijo Edgar, puede que le parezca que dejo pasar lo de la fiesta sin problemas pero tanto a mí como a Santiago nos marcaron las palabras de ese policía

-¿Y QUE VAS A HACER?, le pregunte retándolo lo máximo posible estaba ardido por sus palabras

-esto, dijo mientras se sacaba el cinturón. –lo que debí haber hecho desde que me empezaste a faltar el respeto y hacer lo que se te dé la gana, porque está bien que estés triste y aun superando lo del incendio pero tienes que aprender que hay límites y cosas que uno no debe hacer, me quede mirándolo como un estúpido mientras me tomaba del brazo y recostaba en el sofá

Zas zas mmgg zas zas zas zas zas mmgg zas zas zas
Zas zas zas noo zas zas zas zas zas noo zas zas
Zas zas zas auu zas zas zas zas zas para zas zas
Zas noo zas zas zas yaa zas zas zas zas auu zas auu zas

Me puse a llorar, me sentía tonto por eso pero no podía parar de hacerlo, había dolido y mucho pero además me hacía desear que lo del incendio no hubiera ocurrido jamás, me alteraba más del hecho de que no me calmaba y hasta Edgar se dio cuenta

-buaa buaa ¿por qué? Debí haber sido solo yo buaa buaa fue injusto buaa buaa y si hay que cumplir las normas buaa buaa, no sé por qué dije eso

-yaa yaa calma cálmate Camilo ya paso… todo está bien, dijo Edgar, en ese momento quise salir corriendo pero por alguna razón no lo hice, tal vez quería decirle pero sentía que no podía hacerlo

-no, eso no es cierto nada está bien… el ell incendio to todo fue horrible, dije

-Camilo tienes que calmarte, el incendio no fue tu culpa, nadie planeo que eso pasara, todo está bien enserio, solo quiero que respetes más los limites nada más, dijo, dijo mientras me abrazaba

-pero es.. ess que tu no entiendes… mejor olvídalo, dije y al poco tiempo logré calmarme y note que Edgar quería decirme algo pero no lo hacía

-sé que nunca te lo he peguntado antes pero hasta ahora nunca lo he entendido, ¿qué paso el día del incendio?, quede helado con la pregunta, yo y mi bocota, nunca debí hacer referencia al incendio

 -mira en realidad fue un día bastante extraño pero no lo recuerdo mucho. Recuerdo que ese día quería ir a una fiesta a la nunca pude ir…también algo de una, olvídalo, dije, no era un tema que me gustara además creía que había dicho demasiado de eso

-mira no voy a presionarte para que me cuentes, sé que algún día llegara el momento en que lo hagas, mira sé no nos conocíamos y que todo esto ha sido muy raro pero no quiero que me veas como un completo desconocido, mírame como un tío, que es lo que soy, dijo Edgar, me impresiono un poco, en el fondo quería verlo así pero era muy fácil que digamos

-está bien lo tratare, dije tratando de sonar amable, Edgar me volvió a abrazar y me dijo que no estaba solo. Me pareció un poco gay pero no pude evitar sonreír. En ese momento Santiago llego, lo había dejado Talia en la entrada porque creo que debía ir al trabajo

-hola, dijo se notaba que tenía humor de perros

-hola, respondí queriendo preguntar qué había pasado en el colegio

-hola Santi, dijo Edgar, Santiago el escuchar llamarlo así abrió mucho los ojos y tratando estar calmado le dijo

-por favor no me digas así, detesto todos los apodos solo dime Santiago, dijo con fastidio

-jajajaja, no pude evitar la risa, era demasiado para mí

-¡no te burles idiota!, dijo y con eso comprobé que les fue una mierda en el colegio

-ya cálmate, más bien ven que quiero hablar con ambos acerca de lo de los celulares, dijo Edgar y Santiago respiro hondo antes de hacerle caso

-está bien, dijo Santiago casi gruñendo   

-primero quiero que me digan la verdadera razón por la que hicieron eso, dijo Edgar

-no hubo una razón, fue más bien un impulso, dije casi relajado

-mmm si hubo una razón, si la profesora de química no hubiera decomisado en primer lugar los móviles nada habría pasado…así que fue por ella que los tomamos, todos están hartos de esa profesora es pésima y aparte se desquita con uno, dijo Santiago. –además creo que no te los pueden quitar de esa manera… casi escondiéndolos en una coordinación

-bueno pero pudieron haber hecho otra cosa, dijo Edgar, creí que iba a volver a empezar con lo de su bien común pero Santiago no lo dejo

-bien dicho PUDIMOS pero no lo hicimos y lo hecho, hecho está. No podemos cambiar las cosas, supongo que lo sabes, dijo Santiago. A veces me impresionaba la facilidad que tenía para cambiar el rumbo de las conversaciones 

-bueno entonces dime que termino de pasar en el colegio, dijo Edgar, yo también quería saber

-mmm pues fue una mierda pero si te alegra no nos expulsaron… pero ahora tenemos hacer una exposición a todo el colegio acerca de la importancia de las normas… para la próxima semana, dijo Santiago, la verdad odie eso pero pensé que sería algo peor

-bueno… pero no nos expulsaron, dije levantando los hombros. –pero no tenemos que disculparnos verdad, dije, Edgar me lanzo una mirada con veneno puro, pero no lo quería hacer, no lo veía como algo necesario

-bueno aparte de eso ambos están castigados por dos semanas, deben aprender a respetar las normas, dijo Edgar

-¿ambos?, eso suena a multitud, lo siento pero tú no tienes ningún derecho sobre mí, dijo Santiago. Me di cuenta que Edgar tuvo que contar hasta diez para responderle       

-pero vives aquí y con mis reglas así que vas a cumplir el castigo, tienen que entender ambos que no pueden pisotear las normas, que existen por algo y que es su deber cumplirlas, dijo Edgar, esas mismas palabras las dijo mi papá al poco tiempo de que me despertara en ese hospital, eso me hizo recordar que todos los problemas que tengo en mi vida empezaron desde esa fiesta en la que me porte de forma muy tonta…

Me acuerdo que para ese momento las prioridades de mi vida estaban sencillamente en ir a la fiesta del año, la fiesta en la que habría cocteles de todo tipo, cosas de neón y hasta droga, todos los invitados eran conscientes de eso y eso mismo era lo que lo hacía genial. Mis papás nunca me prohibieron ir a una fiesta pero en está me dieron un montón de consejos y recomendaciones, lo único malo que vi hasta ese momento fue que mis papás no me dejaron llevar el carro pero eso era fácil de solucionar, cualquiera me podía llevar o dejar en la casa.

Cuando llegué con mi novia me recibieron entregándome una cerveza, me la tomé rápido y luego comencé a bailar, recuerdo que cerca de la una, había tomado mucho y estaba comenzando a atontarme, me reía por todo y hablaba de cosas sin sentido, decidí hablar un rato con mi novia pero antes de hacerlo un chico me preguntó si ya había probado todo, en ese momento recordé las drogas y a decir verdad casi salí corriendo hasta la mesa en donde estaban, yo no fumaba nada pero si las aspiraba era diferente, tome un pitillo (popote) y me acerque hasta la cocaína no sé cuánto aspire pero lo hice hasta que vi éxtasis, el color de esas pastillas me atraía demasiado, nunca antes me había sentido tan… en otro planeta hasta veía colores, me senté en una silla  y algunos me empezaron a preguntar que tenía, yo les dije que quería tomar agua  y me pasaron un vaso que aparentemente era de agua pero cuando lo probé era aguardiente, creo que casi les escupí en la cara, el sabor que tenía en la boca era horrible. Cuando se dieron cuenta del error que habían cometido Esteban corrió a preguntar por agua, pase un largo tiempo sentado tomándome el agua, supongo que lo último que paso fue que vi una especie de coctel naranja fosforescente que según yo me llamaba para que lo tomara, cuando le di el primer sorbo alguien grito que lo dejara pero en ese momento yo ya estaba casi inconsciente, nunca supe que era eso que tomé pero aún tengo la duda. Por lo que me dijeron, luego de que me desmayara llego la policía y fue así como termine en el hospital por dos días.       


-ya está bien, gritó Santiago haciéndome regresar a la actualidad. –QUITATE, termino de gritar antes de empujarme y salir corriendo hasta la habitación para dar un señor portazo


Simplemente encogí los hombros y subí las escaleras, tampoco es que disfrutara que me castigaran pero Edgar tenía razón en mucho de lo que decía por algo existen las normas puede que sean una mierda pero para algo están. No sé por qué pero con lo que me dijo hoy empecé a sentir algo de aprecio por él, es como si hubiésemos creado un lazo que en cierto sentido se parecía al que tenía con mi familia. Cuando entré a la habitación encontré a un Santiago sentado en su cama maldiciendo a lo lindo.

-tu tío es un puto maricon de mierda, dijo Santiago apenas me vio entrar

-si pero tiene razón, dije y Santiago me miro con ira

-no jodas, ya te uniste con él, te hizo tanto daño partirte la mano?, dijo

-sabes yo creo que no está tan mal son dos semanas no un mes, dije y hasta yo mismo me cuestione ¿por qué estoy defendiendo a Edgar?

Santiago de miro terrible y luego me lanzó un cuaderno

-¿qué? Pero si es verdad, solo cumple el maldito castigo y deja de complicarte la vida… más bien hagamos una cartelera para la exposición de las normas, dije, quería terminar rápido eso ya estoy cansado de estar en problemas en ese colegio

-pues las harás tu porque yo no pienso mover un dedo solo para complacer a un tipo idiota, dijo Santiago

-entonces que?, quieres que nos expulsen, dije sentándome en el piso

-no estaría tan mal, dijo Santiago sentándose al lado mío.-pero si tanto lo deseas (tono con mucho fastidio) te ayudare, sabes en ese colegio juran que eres un criminal juvenil, dijo en tono de burla

-lo sé, dije antes de respirar hondo. –entonces de que se trataba el vídeo que quieres hacer, dije cambiando el tema

-mmm está bien hagámoslo ya, solo tienes que seguirme la corriente, dijo Santiago y yo asentí algo inseguro


4 comentarios:

  1. Practique tae kwon do, y mi sensei siempre decía: El dolor no existe...no existe el dolor... y cuando tenia kumite (combates) a veces me preguntaba entonces que coño... era lo que sentía entonces jajjaja así que entiendo a Camilo jajaja esito.. excelente Thor como siempre amigo.

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    1. jajaja hola Sanha, yo tambien practique ese deporte, te entiendo perfectamente

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  2. Muy lindo Thror, me encanta saber de Camilo, me da ternura ese chico

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  3. sabes me encantaria q escribieras d la perspectiva d Edgar... te quedo super me gusta la personalidad del chico

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