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lunes, 22 de mayo de 2017

Capítulo 5….. “Corazón roto”


Capítulo 5….. “Corazón roto”
Mis amigos siempre me dijeron que una de las situaciones más duras en la vida, es una  ruptura de pareja. Si bien, con Luna no éramos novios…entre nosotros existía una relación de amigos especiales.
Al principio, esta relación había sido 100% maravillosa,  pero un día se complicó ya que entraron al juego Tete y Simón, además del maldito matrimonio. El día que Luna me confidencio lo del compromiso me di cuenta que la perdería y en ese momento sentí que mi corazón se aceleró a mil latidos por segundo sin entender el porqué, al pasar de los meses y al mismo tiempo en que mi corazón comenzó a latir más rápido cuando estaba con Luna,  una vocecita comenzó a susurrar en mi oído noche tras noche y decía  “piensa en cómo ayudar a Luna a resolver el compromiso”, pero hasta el día de hoy no había llegado a tener una miserable idea… bueno eso fue hasta que llegue a casa y deje a Luna con el idiota de Simón, luego de realizar los deberes del colegio descanse en mi cama hasta que soñé con la gran idea que terminaría con ese compromiso que canjeaba a Luna como moneda de cambio, al tener la respuesta tome el ramo de rosas que seguramente mi papá tendría para alguna de su cita de turno, escribí una carta con mi corazón y exprese en cada letra la declaración de amor más importante que hice en mi vida, pero cuando llegue a casa de Luna los vi  besándose y cuando la observe  a los ojos… pude ver el brillo que se tiene cuando amas a alguien.
Con el dolor más intenso que se puede sentir al ver al amor de mi vida besarse con otro, Subí las escaleras con mi corazón roto y  sin pensar destruí  la carta y las rosas para luego,  lanzarlas sobre la cama donde cada noche nos amábamos completamente. Al llegar a casa e  ingresar a mi cuarto busque las llave de mi auto y salí sin avisar, una vez dentro conduje hasta que llegue a un lugar inesperado y esta era la casa de Tete, al llegar al pude observar que  para variar había una pool party como todos los fines de semana desde que murió su padre. Las fiestas en casa de María Teresa eran famosas ya que se realizaban  sin motivo alguno y en ella había de todo tipo de alcohol, sumado a todos los tipos de drogas que conozcan o se puedan imaginar  y bueno a  las que no conocen también.
Al llegar y apenas al bajar de mi auto me abordaron compañeros del colegio ofreciendo de todo, el primer vaso fue de algo azul y sin importar nada me lo tome de un trago.
¡WOW!... Mi amor, tranquilo que este trago se toma lentamente.- dijo metiendo su mano en mi entre pierna.
- No fastidies Tete, solo quiero emborracharme…
- ¡Oh! ¿Penita en el corazón?.- dijo empujándome y sentándose en mi pelvis.- yo tengo una forma increíble para que deje de doler.- al terminar de decir eso introdujo su mano en mi bóxer haciendo contacto piel con piel.
- Pufff… no todo se resuelve con sexo Maria Teresa.- asegure observándola molesto.
- ¿No?.-  Pregunto molesta.- Bueno entonces ¡¡emborrachémonos!!.- fue al bar de su padre y tomo una botella de ron, luego nos fuimos a la piscina y bebimos hasta quedar inconscientes.
Al despertar  algunas horas después recuerdo que al Abrir los ojos lentamente comencé a sentir un gran dolor de cabeza, desorientado  observe  mi entorno asustándome  al darme cuenta que el árbol que estaba frente a mi era parte de mi auto, al  tratar de recordar  lo  sucedió, descendí y lentamente  observe bajo el auto asustado y rezando para luego respirar al darme cuenta que mis plegarias se hicieron realidad…al no arrollar a nadie. Luego de unos minuto y al reaccionar completamente logre con dificultad  retirar mi auto destrozado por el choque…conduje a casa  preguntándome  con ira, rabia, dolor y tristeza ¿Desde cuándo Luna estaba con Simón? seguramente desde que Luna lo dijo, ¡maldición! me detuve en un semáforo y mi mente no paraba, una voz decía que seguramente a esta hora despertaron y otra pregunta llega a mi cabeza  ¿Qué es lo que estarán haciendo? Seguramente teniendo sexo matutino…mis ojos se llenaron de lágrimas y me cerebro pregunta ¿Porque Luna?…  Por qué me haces esto… mi amor ¡yo te amo!
Al llegar a casa muerto por dentro, me dirigí al bar de mi padre y prepare un trago de whisky, camine a mi cuarto abrí la puerta con cuidado y ¡sorpresa!  Otra vez mi padre no estaba en casa,  el día en que más lo necesito él no está… con un gran sentimiento de soledad en mi corazón bebí  el whisky de una vez antes de entrar a mi cuarto.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                          
- ¿Dónde estabas Jared?.-  Pregunto Papá sentado en mi cama, mientras ingresaba a mi cuarto escondiendo el vaso en mi espalda.
-  Es jueves papá, tenía práctica de béisbol después de la escuela.
- ¡¡No me mientas!! No olvides que soy el director del colegio.
- Papá, no hice nada malo.
- Estas castigado hijo  ¿Dónde estabas?.- pregunto levantándose de la cama y poniendo sus manos en su cintura.
- Papá, yo fui a casa de María Teresa… luego dormí, entonces yo papi…
   Plasfff       plasff      plasfff .- El padre de Jared lo agarró del brazo y le dio tres  fuertes palmadas a su pequeño.
- ¡Basta de mentiras Jared!
- No estoy mintiendo a papá.
 Plasfff       plasff      plasfff .- Repitió lo anterior con más fuerza y lo dejo mirando la pared .
- Te quedas  en la esquina hasta que me digas la verdad.
GRR esto es una broma…pensé al no creer en la posición que me dejo mi padre, lejos es lo más humillante de la vida, al respirar y contar hasta diez respire y no dije nada… sabía lo que sucedería luego, así que preferí guardar mis lágrimas para cuando en realidad hicieran falta.
- Hijo, ¿algo que decir? .- negué con mi cabeza y le pedí que me acompañara.
Al llegar al garaje me observo un minuto sorprendido, luego  al observar el auto se acercó y me abrazo por varios minutos hasta que comenzó a revisar mis brazos, luego mi cabeza y el resto de mi cuerpo desesperándose cada vez más.
- Papaaa estoy bien, te prometo que no tengo nada.- luego de asegurarse que estaba bien, su rostro cambio de preocupado a furioso y tomando mí brazo subimos la escalera hasta su cuarto… en un silencio desesperante, al llegar  a mi cuarto fue cuando por fin hablo.
- ¿Recuerdas lo que hablamos la última vez hijo?.- pregunto dejándome en medio del cuarto.
- Si, señor… dijiste que no podía conducir el auto de mamá hasta tener el permiso y la edad.
- Entonces ¿porque haces que te castigue?.- pregunto con un dejo de dolor en la voz.
- No se… me volví loco y solo actué sin pensar.- respondí sincero.
- ¿Qué fue lo que te dije que pasaría si me desobedecías Jared?
- Papitooo.- rogué
- Jared Bustamante… responde lo que pregunte.
 - Dijiste que me darías una paliza con tu cinturón y luego dijiste papito que si chocaba el auto me pegarías todos los días hasta que lo tuviéramos de regreso en casa.
Su Padre lo observo por un minuto sin moverse, Jared estaba nervioso y no sabía que hacer… de un minuto a otro  se llevó las manos a la cintura y se escuchó el clic para luego sacar su cinturón lentamente por cada pasador hasta que lo tuvo completamente en su mano, lo doblo en dos tomando la hebilla en su mano para no lastimar a Jared.
- Este castigado hijo.- le dijo besando la frente, mientras que Jared lo abrazaba.
- Papito escúchame y  deja que te explique, yo lo que hice porque vi a…- comenzó a explicar, pero su padre también comenzó con el castigo.
ZAaaaas    
- No, papi noooo.- suplico con los nervios en el estómago.
Zas….aaaa.…zaaaas….aggg….zzzaaaasss….uufffff….zzzzzaaaassss…….auuuu.
Al  terminar  su padre  le dijo lo decepcionado que estaba con la actitud que estaba tomando este último tiempo, le aseguro que no permitiría comenzar con vicios, el padre de Jared espero unos minutos para que su hijo le explicara el motivo  que lo impulso a conducir en ese estado, al no obtener respuesta  continuo con su cinturón.
Zaaasss….. aaaaaayyy.- de la nada un quejido salió al recibir la fuerza del golpe.
- Explícame porque lo hiciste….- pero al no obtener respuesta apretó más el castigo
 zaaasss….aauuu…….- se quejó Jared sin aflojar palabras molesto, porque en el momento que pretendió explicar su padre no lo escucho.
- Podemos seguir así por mucho tiempo hijo, yo no me cansare.
zzzaaaaaaasss….Ayyyyyyy  ZZZZAAAAAAASSS….buaaaaaa
- Habla de una vez hijo por favor.- suplico su padre.
- Lo hice porque no lo pensé y estaba borracho… estaba tan borracho papito que no se en que momento choque con el árbol.
El padre de Jared soltó el cinturón y abrazo a su hijo hasta que dejo de llorar, una vez tranquilo.
- No volverás a conducir el auto de tu mamá en ese estado… no se conduce bajo los efectos del alcohol y menos sin tener el carnet de conducir. Hijo un conductor borracho se cruzó y tu mamá por esquivarle choco contra un muro llevándose por delante a un inocente.- recordó con los ojos cerrados.
- Lo se, mi madre dejo sin su padre a María Teresa y es por eso que debemos estar con ella y no dejarla solita ¿verdad papi?
- Así es hijo … se lo debemos.- aseguro abrazando a su hijo sintiendo paz al tenerlo sano y salvo en sus brazos.- Te amo mi amor, nunca lo olvides.
- Jamás Papá, ¿sabes? me gusta estar así contigo.- le dijo Jared, extrañaba a su padre cariños de antes.
- ¿Cómo mi amor?
- Así abrazados y sintiéndote como mi padre ¿porque en el colegio eres tan implacable y duro conmigo?.- eso era cierto, en el colegio al ser el director a su hijo  no le dejaba pasar una. Más de una vez fue tachado de injusto al ser blando con su hijo por algún compañero o algún chico de algún curso distinto al de Jared.
- Porque soy el director...es mi rol y aunque nos duela,  seguiré así o peor, así que hijo… te aconsejo que lo mejor  para ti y tu trasero es que te portes bien.


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