Páginas Amigas

domingo, 8 de julio de 2018

VACACIONES




VACACIONES

Neal estaba que daba saltitos de felicidad, su primer viaje a Europa no era para menos iba por fin conocer todos esos lugares de cuales tanto había leído y visto en sus libros.
Él había buscado la agencia de viajes y personalmente había elegido los lugares de interés que incluían muchos museos, galerías de arte en fin todo lo que había soñado conocer.

Para comenzar París, Neal casi flotaba de felicidad en el Louvre y el museo de Orsay, claro seguirle los pasos a un muy excitado adolescente no eran precisamente las vacaciones soñadas por Peter y El, pero como buenos padres se divertían con las ocurrencias de su pequeño.

Si París fue un sueño, Italia no se quedó atrás, claro que el entusiasmo de Neal seguía pero ya le molestaban algunas cosas como compartir la habitación, en París no hubo problema porque la habitación fue una suit dos camas una matrimonial y otra más pequeña pero en un cómodo apartamento separado.

En Roma tuvieron que compartir una habitación, las reservas se habían hecho a nombre de Peter Burke y familia, pensando en que era un matrimonio y su pequeño hijo y no un adolescente.

A Peter y El no les molestaba tanto como a Neal que casi hace un berrinche en plena recepción, solo se calmó cuando Peter lo miró con esa expresión que hacía que Neal siempre re considere su postura.


-Pero Papá, no podemos estar los tres en esa habitación - dijo pateando el suelo.
- Cariño es que no hay más habitaciones - dijo El tranquilamente.
- Neal ya escuchaste la reserva se hizo de esa manera, además solo estaremos por cuatro días.

Neal hizo un puchero - está bien - dijo frustrado al ver la pequeña cama al lado de la gran cama matrimonial.

En Venecia pasó lo mismo, la ciudad estaba llena de turistas porque se acercaba el carnaval y eso alborotaba aún más todo. Por lo que fue imposible cambiar nada.

Para que Neal no se frustrara más, le dieron al niño un poco más de libertad y dejaron que Neal deambulara solo mientras ellos paseaban en una Góndola.

Neal paseaba por la famosa Plaza de San Marcos vistiendo un elegante traje mirando los restaurantes que  eran amenizados con músicos decidiendo donde tomar un café, claro que a esos precios veía difícil poder sentarse si quiera.
Hasta que una mujer se acercó a él algo enojada –Te están esperando, vamos- dijo la mujer con voz grave.

El primer instinto de Neal fue decir a la mujer que estaba cometiendo un error pero la curiosidad pudo más y Neal siguió los pasos de la bella mujer hacia lo que parecía una oficina.

Pronto se dio cuenta que esa era una agencia de modelos, otra mujer elegantemente vestida se acercó a Neal para mirarlo detenidamente sin dirigirle la palabra y luego se acercó a otros chicos que estaban cerca.

Se alejó para hablar con lo que parecía ser su asistente, luego de un rato dijo – Tu, tú y ustedes dos- señalando a Neal entre ellos.

-Los espero a los cuatro en Lido a las 20:00 hrs sean puntuales.

La asistenta le paso a Neal una tarjeta –Con esto pueden recoger su credencial y no se olviden de dejar sus datos para ingresar los registros.

Neal todavía no entendía muy bien lo que pasaba pero ya tenía ganas de ir al Lido uno de los balnearios más exclusivos de Venecia.

Luego Neal pudo hablar con los otros chico y así pudo enterarse que había sido seleccionado para ser parte de la presentación de un perfume, la diseñadora era una mujer muy excéntrica buscaba modelos clásicos, nada de piercing ni de tatuajes, solo sobriedad y belleza, ese año había contactado a una agencia Norteamericana para buscar modelos, pero todo había sido un caos porque nunca llegaron las credenciales por lo que todo se estaba haciendo sobre el camino y a toda velocidad.

Neal salió del lugar para volver a caminar por las calles de Venecia, con una sonrisa en la cara, tramando un plan para escapar de la vigilancia de sus padres, sabía que esto tendría consecuencias seguro que Peter lo mataría pero esa fiesta, era un buen precio a pagar o por lo menos eso creía Neal.

La familia Burke paseaba feliz por la hermosa Venecia hasta que Neal comenzó a quejarse, El fue la primera que reaccionó a las quejas de su niño y casi instintivamente puso su mano en la frente.

-No es nada, mamá creo que la comida me cayó mal.

-Entonces vamos a volver al hotel- dijo El.

-No, no tienen que volver al hotel, estamos cerca yo puedo ir.

Pero nada de lo que pudo decir Neal hizo que El dejara a su hijo irse solo al Hotel, Nela sabía que su madre no era fácil de convencer, pero Neal era Neal así que uso toda su persuasión para que sus padres lo dejaran en el Hotel y ellos se fueran a dar una vuelta en Rialto para realizar las últimas compras.

Peter le dejo una llave tarjeta y se aseguró de que el celular de su hijo estuviera prendido y cargado.

Neal dejo la habitación del Hotel y salió por la puerta trasera para dirigirse a la estación de vaporetos con destino al Lido, ni siquiera encubrió sus pasos sabía que no tenía excusa y sabía además que solo tenía horas de diversión, Peter seguro que lo encontraría pero vamos era una fiesta en un exclusivo balneario en Venecia.

El lugar era sensacional todo era mucho lujo, las modelos caminaban por la pasarela las luces los invitados Neal quedo como los gatos encandilados por las luces de los autos.

Neal pasó hacia el camarín de los modelos, le pasaron un smoking que le quedo como si fuera hecho para él, era el trabajo soñado solo parase sonreír y ser admirado.

Pero eso de estar tan expuesto hizo que Peter lograra localizar a Neal muy fácilmente, solo debió usar su placa de policía y un poco de persuasión para entrar en la exclusiva fiesta de lanzamiento y quedarse con la boca abierta al ver a Neal posando junto con otros chicos sonriente.

El primer impulso de Peter fue sacarlo de una oreja pero logro controlar su temperamento, debido a años de entrenamiento de ser el padre de Neal, no pudo evitar recordar cada una de las travesuras de su hijo, claro que consideraba que estas travesuras habían aumentado de magnitud mientras aumentaba la edad de Neal.

Pero no podía negar que su niño era muy guapo y en traje parecía un modelo, no pudo evitar sentir un poco de orgullo, así que se quedó hasta que la presentación termino, vio a los modelos salir por la puerta trasera para dar comienzo a la fiesta.

Peter camino hacia los camarines y espero tranquilamente en la puerta de salida, no sin antes asegurarse que esa era la única puerta de salida, Neal era un experto escapista eso ya lo sabía perfectamente Peter.

Mientras los modelos salían Peter se fue impacientando, así que se decidió a entrar al camerino, ya quedaba muy poca gente dentro por lo que nadie pregunto a Peter que hacía ahí, finalmente pudo ver a Neal que hablaba con una mujer muy hermosa.

-Neal realmente te luciste, me gustó mucho tu trabajo – decía la mujer coqueteando abiertamente – te quedas en Venecia esta semana?

-Bueno no lo sé? – dijo Neal – Debo ver mi agenda, mi memoria es fatal.

-La próxima semana hay un lanzamiento de una línea de trajes de baño y…..

-Él no va a estar disponible – dijo una voz grave.

-Disculpe, usted quién es?

Neal trago saliva y bajo la vista.

-Soy el representante de Neal y lamento decirle que tiene compromisos pendientes.

-Que lastima – dijo la mujer haciendo un mohín resignado – Adiós cariño, llama cuando vuelvas a Italia, seguro que siempre será interesante verte – y la mujer salió de prisa todavía había una fiesta afuera.

Peter quedo mirando a Neal fijamente mientras que el chico terminaba de sacarse el Smoking y ponerse su ropa.

-Gracias – dijo Neal.

-No deberías agradecerme todavía estas en graves problemas, jovencito.

-Papá yo estaba…..

-Ahora no hijo, tu madre está muy preocupada así que termina de vestirte y volver al Hotel.

-No podríamos quedarnos en la fiesta, solo media hora – mirando con cara de súplica de esas tan típicas de Neal.

Peter miro a cada lado para ver que no hubiera nadie cerca de ellos, solo para lanzarle una palmada a Neal, que solo pudo gemir pero entendió inmediatamente y salió detrás de su padre sin mirar hacia atrás las luces y hacer sonidos sordos a las risas de la gente que seguramente la estaba pasando muy bien en la fiesta.

Otro tipo de  fiesta estaba esperando a Neal en el cuarto de Hotel, su madre siempre más conciliadora primero le dio un beso en la mejilla para luego darle solo una palmada de regaño para que supiera que estaba enojada y que no le iba a ser fácil volver a perdonarlo por esa noche de desvelo.

Para Peter una palmada no era un castigo justo para tamaña travesura, él tenía muy claro lo que necesitaba su hijo para que el resto de su viaje no tuviera más sobresaltos, lamentablemente Neal no terminaba de entender si es que no recibía un castigo de acuerdo a su travesura.
Así que se sacó su chaqueta y se remango las mangas de su camisa, Neal lo miraba horrorizado –Papá por favor aquí no, todos van a saber que tu…..

-Tenías que haber pensado en eso antes de salir sin permiso en un lugar que no conoces en un país que no conoces.

-Papá soy culpable y no estoy pidiendo que no me castigues pero podrías esperar hasta llegar a casa? Por favor? – Neal miraba suplicante.

Peter se quedó en silencio un par de minutos sabía que esto no sería fácil y si dejaba que Neal siguiera hablando era muy capaz de convencer hasta el mismo Hitler de no conquistar Rusia.

Como Peter era un hombre de acción no dejo que Neal ni siquiera diera un suspiro más, tomó a su hijo para ponerlo sobre sus rodillas y sin aviso comenzó a darle nalgadas.

Neal que se vio sorprendido ante la arremetida de su padre, se concentró en no emitir ningún gemido aunque la mano de Peter era muy pesada.

Plaz Plaz Plaz caían las nalgadas mientras Neal se mordía la lengua para no decir nada – Espero hijo que entiendas – Plaz Plaz Plaz – que no puedes salir sin permiso – Plaz Plaz Plaz

Pero llega un momento en que Neal no puede quedarse callado – Lo siento Papá

Peter mantenía el ritmo Plaz Plaz Plaz Plaz – Sé que lo sientes hijo, y sé muy bien que de ahora en adelante te portaras bien – Plaz Plaz Plaz Plaz.

-Si Papito me voy a comportar, lo prometo.

Cuantas veces había escuchado esa promesa? Cuantas más la escucharía? Peter sonrío y dejo de dar de nalgadas a su travieso hijo, dejo que se pusiera de pie le dio un beso en la frente –Ponte pijama, estas castigado.

Neal hizo una mueca mientras se pasaba la mano por su adolorido trasero –Por cuánto tiempo?

Peter lo miró serio –Por el resto de tu vida Neal George –dijo mientras salía de la habitación para escuchar un gemido.

-Pero Papá eso es…… Pero Peter no tenía ganas de seguir discutiendo con Neal.


Fin


2 comentarios:

  1. Que malo, por el resto de su vida jajaja

    ResponderBorrar
  2. Jajajaja pobre Neal eso no es justo es muchísimo tiempo de castigo...
    Pero que descuidado ese niño que le pudo pasar algo por irse sin avisar!!
    Aunque ya estando allá se hubieran quedado en la fiesta un ratito!!
    Me gustó mucho Gloria

    ResponderBorrar