Capítulo 19 “El trozo de tela”

Capítulo 19 “El trozo de tela”

PHILL
primer día de clases luego de las vacaciones... y cómicamente nadie iría a clases.
Virus estomacal había dicho Ryan, y todos habían caído, inclusive Keith. Yo era el único afortunado por el momento. Aunque de afortunado no tenía nada si tenía que cuidar a 11 chicos y sí, incluía a Keith como un chico e inclusive como un niño por su comportamiento al estar enfermo.

Keith: estoy muriendo Phill- acababa de salir del baño- ayayayay- y ahí entro de nuevo.

Yo entre detrás de él para asegurarme de que había alcanzado a llegar.
Le encontré allí, reclinado sobre el escusado devolviendo las tripas en el.

Phill: mi vida- le sostuve por la frente- estás hirviendo, lo mejor será llevarte a urgencias, no puedes seguir así, eres el único que está así de mal.

Keith: no amor, urgencias no, dame 2 horas y estaré como nuevo- dijo eso previo a otra descarga mas fuerte que la anterior.

Phill: como quieras, pero le pediré a tu hermano que se pase por la tarde para que te revise a ti y a los niños- cuando supe que ya no vomitaría más por el momento, le ayude a llegar a la cama y le arropé flojo- trata de dormir un poco mientras voy y preparo una sola para el almuerzo- le bese la frente, le deje una bolsa por precaución y salí a chequearme a los niños.
Ya casi todos estaban recuperados, pero Joe y Sam habían salido calcaditos a su padre al estar enfermo.
Llegue a la habitación de Joe, en donde ambos hermanos estaban acampando.
Llegué justo cuando Sam salía del baño.

Phill: enano ¿por que lloras? ¿Te duele la barriga?- le ayudé a llegar a la cama y le arropé

Sam: paaa, me duele mucho- gimoteaba mientras se había un ovillo en la cama.

Sam estaba igual de mal que Keith, al parecer el estar enfermo le caía peor que la mayoría.

Phill: mi vida, ya va a pasar- decidí no esperar más salí de la habitación y llamé a Ryan.

Llamada telefónica

Ryan: será mejor que no suba a ayudarte James, te lo advierto- cielos, eso no sonaba bien- disculpa, hola Phill- se le escuchaba agotado.

Phill: hola Ryan, vaya te escuchas atareado, recuerda que puedes pedirnos ayuda, ser padre no es fácil.

Ryan: gracias Phill, pero siento que lo estoy llevando bastante bien, y ni te creas que estoy atareado, de vacaciones estoy, las primeras de toda mi vida.

Phill: la ayuda siempre estará cuando lo necesites. Lamento tener que molestarte en tus vacaciones, los chicos siguen con el virus, pero Sam y Keith lo llevan muy mal y me gustaría que vinieses a verlos para descartar cualquier cosa peor.

Ryan: no debes ni pedirlo, estaré allí en 20 minutos, nos vemos- colgué el móvil y justo salió Nicole de su habitación.

Fin de llamada

Phill: hey mi Vida, ¿qué tal te encuentras?- tenia mejor aspecto que hace algunos días- ¿quieres acompañarme a cocinar?

Nicole: estoy mucho mejor papi ¿que cocinarás?

Phill: un rico caldo de pollo ¿te apetece?- su cara me lo dijo todo- no puedo darte otra cosa, puede caerte pesado.

Nicole: mmm... está bien, hey pa, necesito tu tarjeta- le miré extrañado- es por una buena causa papi lo prometo.

Phill: ¿a si? Y ¿Cuál es esa buena causa? Aunque desde ya te digo que estás castigada por lo que no estás en condiciones de pedirnos la tarjeta.

Nicole: paaa, juro que es híper mega súper necesario.

Phill: ¿que quieres?
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KEITH
ya me encontraba mejor, por lo menos por ahora lo estaba.
Había dejado de devolver por lo que aproveché tal oportunidad para levantarme de la cama e ir acompañar a Phill a la cocina.
Iba por el pasillo cuando Nicole me interceptó.

Nicole: papa que bueno que te encuentro dile a papi que es un exagerado- le miré serio por cómo había hablado- lo siento, pero ¡papá!

Keith: ¿que sucede cielo?- Phill estaba detrás de ella con gesto divertido.

Nicole: es que papá, no quiso comprarme una falda solo por ser muy corta, debes decirle algo.

Phill: no mientas Nicole, dile a tu padre cuánto costaba ese trozo de tela.- al parecer aquella declaración fue un insulto de gran calibre para Nicole ya que al escuchar a Phill sus ojos se abrieron de gran manera y le dio una mirada molesta.

Nicole: no seas sin respeto papá, que a ti no te guste la moda no significa que puedas llamarle cómo quieras a tales obras de arte- en ese momento estuve a un pelo de soltar una carcajada, pero supe mantenerla dentro de mi.

Phill: lo lamento, dile a tu padre cuánto cuesta aquel tan exclusivo y glamoroso pedazo de tela- ahí estaba de nuevo la carcajada. Tu puedes Keith, no lo hagas, no provoques una 3ra guerra mundial.

Nicole iba a responderle pero intervine oportunamente.

Keith: anda princesa, dime el precio y veremos cómo buscar una solución a todo esto- Nicole dijo tan bajo el precio que ni lo llegué a escuchar- más alto mi vida que no pude escucharte, tu padre se está haciendo viejo.

Nicole: cuesta 590 dólares- Ella sabía perfectamente que ese precio era excesivo. Es por eso que trato de pasar desapercibido antes con el calor de aquella falda.

Keith: yo no pagaré esa cantidad de dinero por un trapo- iba a replicar pero sabía perfectamente que a mi no podía responderme de esa manera.

Nicole: papá, es que la necesito- a pesar de que se mostraba más bien pasiva, debía elegir muy bien mis palabras si no quería que se enfadara.

Keith: no es cierto cariño, no la necesitas, solo te encaprichaste con ella.

Nicole: no comprendes nada- solo se dio la vuelta y entró a la habitación nuevamente, dejándonos solo a Phill y a mi.

Phill: ¿es muy malo para nuestros bolsillos comprarle aquella falda?- tenía más fé en él.

Keith: tiene 14 años, en 10 minutos le gustará otra cosa y así sucesivamente. No puedes sucumbir ante sus encantos tan fácilmente.

Phill: es difícil cuando te mira con esos ojos- en eso Phill tenía un punto- pero bueno ¿que tal te sientes?- cariñosamente colocó su mano en mi frente- aún tienes fiebre.

Keith: mi estómago está mejor, pero ahora me comenzó a doler la cabeza.

Phill: Ryan está de camino, quizás pueda recetarte algo para el dolor- le miré horrorizado y me di la vuelta había la puerta de entrada- hey pero ¿dónde vas?

Keith: a Canadá, o algún lugar muy lejos de mi hermano- el de río- cómo se te ocurre llamarle, ya te lo dije es un tirano, además estoy enojado con él.

Phill: no es un tirano y tú solo estás enojado por que aún no te ha contado lo que sucedió el otro día, debes dejarle, cuando este listo te contará.

Keith: soy su hermano, debería tenerme confianza.

Phill: pareces un crío Keith, tu hermano hablará cuando quiera hacerlo.

Ryan: no te esfuerces Phill, de seguro hará un berrinche si no le cuento, así que aquí estamos, vamos a tu habitación a qué te revise y ahí te contaré todo lo que quieras- una gran sonrisa se plantó en mi rostro- sigues siendo un crío Keith, James quédate aquí mientras examino a tus primos y tío.

James: no son mis primos- le crío al parecer estaba de mal humor.

Ryan: no empieces James, mejor comienza a estudiar que te haré preguntas luego.

Dejamos a los chicos y subimos a la habitación principal.
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PHILL
fuimos con James a la cocina y el se sentó en el mesón a jugar con su celular mientras yo preparaba la sopa.

Phill: ¿quieres algo para comer?- el negó sin siquiera mirarme a los ojos- ¿Ryan no te había dicho que estudiaras?

James: no me da la gana- ahí si que me miró- y no puedes obligarme.

Phill: no te obligaré fierecilla, ya te las arreglarás con Ryan luego, yo no me meto.

James: exacto, no te metas.

Phill: hey, hey, está bien que no quieras que intervenga, pero bájale a tu impertinencia que yo no te he hecho nada- ya me había cabreado.

James: lo siento tío Phill, es solo que esto me tiene fastidiado- se desmoronó sobre el libro que tenía a un lado en el mesón.

Phill: ¿de que se trata? Venga dime- deje la sopa de lado y me centré en él.

James: es solo que el tío Ryan me exige mucho por los estudios, entiendo que el haya sido un cerebrito, pero a mi esto simplemente no se me da- según lo que yo sabía, Ryan era de todo menos cerebrito en su infancia.

Phill: ¿no será que eres un poco flojito y por eso no se te da?- le miré divertido mientras ojeaba el libro, eran todo fórmulas de química y algunos apuntes.

James: te juro que no es eso tío, lo intento solo que formulas y eso no se me da- se le escuchaba sincero.

Phill: ¿y en que eres bueno?- él me miró extrañado- tiene que haber algo, ¿qué disfrutas hacer?- se dio un minuto para pensarlo.

James: me gusta dibujar, papá me decía que era bueno en eso.

Phill: y ¿por que no te dedicas a eso?

James: no creo que el tío Ryan me lo permita, de seguro quiere que sea médico como él o abogado como papá- se notaba a leguas que el chico solo quería agradar.

Phill: tu debes ser lo que quieras ser, Ryan te apoyará en todo tenlo por seguro- no se miraba muy convencido- si quieres puedo ayudarte a buscar clases o talleres que te puedan interesar.

James: ¿de verdad haría eso por mi?

Phill: y ¿por que no lo haría?

Ryan: claro que para poder ir a esos talleres más te vale jovencito no bajar tus calificaciones o más bien debería decir que debes subir tus calificaciones para eso- al escuchar aquello la cara de James se entristeció.

Phill: no te preocupes por eso, le ayudaré con eso, los números jamás han sido un problema para mi.

Ryan: más les vale- nos miró a ambos mientras James me miraba sonriente.

¿Que tan difícil pueden ser las matemáticas de secundaria?