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domingo, 30 de agosto de 2020

Capítulo 5 “El dilema del puré”





Capítulo 5  “El dilema del puré”

CHRIS
Diane me miraba seria mientras por cuenta propia cerraba la puerta de entrada y se invitaba a entrar. Como la detestaba, se creia con el poder de pedirme explicaciones por sobre todo lo que ocurría en mi vida, como si fuera mi novia.

Diane: estoy esperando una explicación Chris, ¿Quiénes son esos mocosos?- me estaba enfadando, quien se creía que era ella para venir a pedirme explicaciones a mi casa, mi propia casa a la cual no le había invitado.

Chris: pues eso no es de tu incunvencia Diane, yo no voy a tu casa a preguntarte con quien te acuestas o quien tienes de visita- sabía que había sido un poco insolente, pero esta chica llevaba dos días sacandome de quicio.

Diane: no seas grosero cariño, solo quiero lo mejor para ti, lo sabes- que asco me dababa, sobre todo por que dentro de su postura de buena por la vida había una mujer fria y mala, rayos como es que alguien puede ser así.

Chris: no me vengas con mierdas Diane que tú y yo nos conocemos muy bien- vamos que debo admitir que durante nuesta adolescencia si fuimos novios, pero de eso hace años.

La mirada de Diane fue de dolor, pero la verdad es que no me importó en lo absoluto y luego de eso, ella sin decir ni pio se fue de mi departamento.
No me cuadraba algo, pero decidí no preocuparme por ella y volver con los niños.

Era una rutina extraña, no, era más que eso, el ambiente que se respiraba en mi apartamento era extraño, mas no malo, si no todo lo contrario. Por algún motivo sentía aún más cerca a mi madre que nunca antes.

Fue una tarde increíble, vimos películas, jugamos con los nuevos juguetes que les había comprado y además había ayudado a Jay a entender unas cosas en la laptop y en el móvil.
Fue tanto el agrado que incluso había olvidado la desagradable visita que tuvimos más temprano por la tarde y por sobre todo había olvidado que seguramente si no es hoy, quizás mañana temprano tendría a mi padre plantado aquí para gritarme unas cuantas cosas.
A eso de las 7:30 nos dispusimos a cenar, y es que aparte de jugar, hoy por la tarde me dediqué a leerme todo el libro de actitudes parentales y una de las cosas en la que les ponía más énfasis, era que debíamos instaurar una rutina, por lo que había decidido que las 9 de la noche era una hora correcta para que todos los niños se fueran a la cama y por consecuencia, a las 7:30 sería la cena.

Seguramente a las 12 de la noche que es cuando yo me voy a dormir estaré hambriento, de seguro engordaré unos kilos con esta rutina nueva, pero lo valía, además solo debía estar más tiempo en el GYM y se solucionaba el asunto.

La cena de hoy era bastante diferente a lo habíamos comido los últimos días, y es que Penélope se había empecinado con que debíamos comer más verduras por lo que el pescado con verduras y puré de papas había hecho aparición.

Fue sentarnos todos a la mesa cuando comencé a ver caras de disgusto en Archie y Jayden, Alice por el contrario se le iluminó al rostro al ver el plato que tenía en su plato.

Chris: chicos comiencen a comer que se nos hará tarde y luego deben darse un baño.- Alice estaba a mi lado y ya había comenzado a comer, pero los otros dos chicos ni siquiera se habían molestado en tomar el cubierto que tenían a un lado.- Archie cariño come ¿si? Que el pescado esta muy bueno y con el puré mejor todavía.

Archie: es que no me gustan las verduras ni el pescado, solo el puré- primera vez que le había escuchado una oración tan larga salir de su boca y me emocionaba, ya que podr`ía significar que tenía un poquito más de confianza hacia mi.

Chris: peque mira, toma un poquito de verdura y pescado y bañalo en el puré, te aseguro que te encantará- le mostré como hacerlo con mi propia comida, el repitió y al parecer le encantó, ya que de inmediato comenzó a comerse el resto de la comida.- Jayden es que tengo que ir uno por uno, comienza a comer ya, haz como tu hermano y mezcla la comida- el nombrado me miró pero no como lo había hecho anteriormente, ya que sus ojos mostraban desafío y enojo, al parecer no sería muy fácil hacerle comer a él.

Jayden: pero es que a mi ni el puré me gusta, no quiero comer, no tengo hambre- ya me había hecho la idea de que sería complicado hacerle comer, pero no podía desistir ahora, que si le cambiaba el plato ahora luego se acostumbraría y sería un malcriado. Diablos, desde cuando mi padre me había poseido para pensar todo esto. Desde cuando yo sabía como criar a un niño, o en este caso un casi adolescente.

Chris: claro que tienes hambre a mi no me engañas, la merienda fue hace más de 3 horas, anda Jay comete la cena para que después podamos comer el postre.- al nombrar el postre los más pequeños comenzaron a comer con más ganas aún, pero Jayden por el contrario apenas si se movió.- Jayden…

Jayden: tengo 14 años, no puedes chantajearme con un postre, no quiero comer y no lo haré- ahora entiendo a mis padres cuando se quejaban de Connor y de mi. Con respecto a Jayden, sentía que estaba ganando confianza y por eso se permitió aflojar un poco su postura de “adulto” y comenzar a comportarse por lo que era, un niño, aunque eso no significaba que le dejaría hacer lo que él quisiese, eso se supone que hacen los padres al final de cuentas.

Chris: no quiero enfadarme Jayden, por favor haz lo que te he dicho y comienza a comer ¿si?- aunque el que comience a comportarme como padre no significaba que me iba a comportar como mi padre, quien hubiera actuado de manera totalmente distinta si hubiese sido Connor o yo el que le estuvieramos haciendo esta pequeña escena.

Alice: anda hermanito, está riquisimo- podíamos notar lo que disfrutaba Alice su cena ya que tenía la salsa del pescado desperdigada por toda la cara, yo me sonreí y le limpié con una servilleta.

Jayden: ¡QUE NO! No quiero- dijo esto acompañado de un golpe en la mesa que además tiró el plato de comida de la misma, luego se levantó de su puesto y se fue a su habitación, y yo no sabía como reaccionar.

Mi primer impulso fue ir tras él, pero pensandolo bien no sabía que hacer una vez le alcanzara. Por lo que decidí quedarme hasta que los peques terminaran su cena y a la vez el tiempo me ayudó a decidir como lidiar con aquello.

¿qué habría hecho mi madre?...

Alice: quedó muy rico el pescado Chrissi, de veras- le sonreí a la pequeña con sinceridad, ya sentía que la quería y era más que todo por que ella se dejaba querer. Es increíble lo rápido que me habían cambiado la vida estos niños, ni siquiera yo me lo podía creer.

Chris: que bueno que les gustó la cena peques, Archie, peque por que no vas a darte un baño ahora ¿sí? ¿Puedes tú sólo?- el peque asintió y se fue hacia el baño de las habitaciones- tú y yo pequeña irémos a por Penélope para que te de un baño mientras yo hablo con tu hermano ¿vale?- tomé de la mano a Alice y nos fuimos en busca de Penélope.

Alice: ¿JayJay está en problemas?- esa era una buena pregunta ¿qué debía hacer? Entendía que si le regañaba podía tomarselo mal ya que apenas nos conocíamos, pero al final yo sería el padre de estas 3 criaturas y debía marcar un límite. Por lo menos eso pensaba que me hubiera dicho mi madre.

Chris: un poquito mi vida, dime, ¿qué habría hecho su madre si alguno de ustedes se hubiera comportado como Jayden?- eso era una buena idea, quizás si sabía un poco como era la madre de los chicos me ayudaría a saber como tratarles.

Alice: mamá le hubiera hecho pam pam, ¿tú nos harás pam pam también si nos portamos mal?- esta era sin duda la niña más tierna de toda la galaxia, ¿cómo podría yo llegarle a tocar un pelo a ella?

Chris: aún no lo sé princesa, seguramente si…- de esa manera me habían criado, ¿Qué otra cosa podría hacer?

Dejé a Alice con Penélope quien le prometió a la pequeña un baño de burbujas completo y me fui en dirección a la habitación que compartirian Archie y Jayden.
Él ambiente dentro de la habitación era extraño, de cierta manera Jay no se veia enfadado, pero tampoco mostraba estar arrepentido, aunque claro, no le conocía del todo, tampoco conocía su personalidad, el tiempo ayudaría a eso.

Me acerqué a su lado y me senté sobre su cama sin hacer ningun ruido, él estaba callado pero atento a todo movimiento que yo estaba haciendo.

Chris: ¿quieres explicarme que sucedió hace un rato?- el chico me miró con sus intensos ojos azules a los mios del mismo color y por un momento creí ver arrepentimiento y un poquito de vergüenza, pero me estaba equivocando.

Jayden: ¡NO! No quiero explicarte una mierda, te dije que no me gustaba la comida, es tú culpa.- quedé perplejo, inclusive teniendo que reprimir una carcajada por la sinverguensura del crio que tenía delante.

Chris: a ver, pongamonos de acuerdo en algo ¿te parece?- el no respondió nada, solo me dedicó una gélida mirada- no puedes hablarme de esa manera jovencito…- anda ya, quien era yo y que había pasado conmigo.- tampoco puedes tirar la comida al piso, tienes 14 años, sé que sabes como comportarte.

Jayden: pues no fíjate, no lo sé y la verdad es que no me interesa en lo absoluto lo que pienses- se notaba que rápidamente Jayden había ganado confianza, pero realmente esperaba que demostrara aquella confianza de otra manera.

Chris: chico me estás enfadando no quiero perder los papeles contigo, quiero que tengamos una conversación civilizada para llegar a un consenso.- realmente esperaba que Jayden entendiera y se comportaba, pero debía suponer lo que ocurriría vamos que solo tiene 14 años, es normal que se ponga un poco caprichoso de vez en cuando. Pero solo un poco.

Jayden: no quiero tener ninguna conversación civilizada de mierda contigo- en ese momento me empujó y yo ya me había enfadado del todo.

Chris: se acabó, tuve mucha paciencia contigo, pero todo tiene un límite- al decir aquello el enfado de Jayden se esfumó y puso una cara de espanto total- se que nos conocemos hace muy poco, bastante poco en realidad, pero pienso convertirme en tu padre con todas las de la ley muy pronto y la verdad no voy a permitir que te comportes como un malcriado, por que sé que seguramente tu madre no te crió como un malcriado.- se que nombrar a su madre puede ser un golpe algo bajo, pero debía hacerle tocar tierra.

El chico se veía asustado y de alguna manera triste, por lo que decidí terminar aquella situación rapidamente para poder consolarle.

Chris: ven aquí enano- le esperé pero Jay no se movió y negó con la cabeza- Anda Jayden ven aquí.

Jay: no por favor, señor, no me eche de aquí no haré nada malo nunca más, o por lo menos solo echeme a mi pero quédese con mis hermanos por favor- al escuchar aquello mi corazón se estrujó, y me golpeé mentalmente por hacerle creer esa crueldad a ese niño.

Chris: peque, no digas tonterias cariño- me acerqué suavemente y le abracé dejandole sentado sobre mi regazo.- jamás te echaré de mi lado enano, ya eres parte de mi familia, todos somos una familia ahora, no debes preocuparte de aquello, ustedes no volverán a estar solos jamás, siento haberte hecho pensar aquello.- le consolé unos minutos ya que el llanto que había soltado era bastante sentido.

Jay: lo siento, es solo que pensé que le había cansado ya, no quería molestarle, es solo que no me gustó la comida- las lágrimas seguían cayendo por los ojos del pequeño y yo hacía lo imposible para poder contenerle.

Chris: jamás me cansaré de ustedes Jayden, así botes mil platos de comida más, aunque no creo que tu trasero quiera pasar por aquello- tiré la bomba de una esperando alguna reacción negativa de parte de él, pero solamente me miró e hizo un puchero.- tu y tus hermanos son mis hijos ahora y yo seré su padre durante toda la vida, eso es una promesa y créeme yo no rompo mis promesas, menos una tan importante.- los ojos azules del niño me miraron intensamente y finalmente me abrazó.

Jay: dijiste que mi trasero resentiría el botar la comida, ¿me castigarás?- uy que dificil era aquello, pero tenía que hacerlo y darle estabilidad a estos 3 pequeños.

Chris: sí, Jayden voy a castigarte ahora y lo haré cuando te metas en muchos problemas, no te maltrataré y te haré daño, o por lo menos no un daño permanente, pero debes entender que no lo hago por venganza ni para desahogar mi enojo en ti.

Jay: lo entiendo, mamá nos castigaba así y ella nos quería demasiado.- fue una mirada de él la que me dio a entender que estaba listo. Por lo que le manobrié dejándole boca abajo en mi regazo para comenzar con el castigo.

Chris: solo serán 10, pero quiero que entiendas que no puedes hacer un berrinche como el de antes solo por que no te gusta un plato de comida, penélope y yo jamás te daremos a ti o a tus hermanos algo que les haga daño o les enferme, si no que les daremos una dieta balanceada y debes entender que tienes que comerte la comida y por sobre todo no puedes botarla al suelo, ¿Qué fue eso?- ¿Qué diablos sucedía conmigo ahora? ¿de donde salí? ¿de donde salió todo este conocimiento de dietas y cosas balanceada? Mamá ¿me acabas de poseer?- te quiero enano, de verdad te lo digo.- dejé de hablar y comencé a aplicar el castigo.

Fue dificil y es que jamás había hehco algo parecido y no quería causarle daño, debía controlar mi fuerza.

PLAS PLAS mmmm Chris… PLAS PLAS PLAS PLAS yaaa por favor, lo siento PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS buaaaww no más… PLAS

Las últimas 3 palmadas las di con más fuerza para reforzar la lección y di por terminado el castigo.
Le levanté y volví a sentar en mi regazo para poder consolarle en condiciones.

Chris: yaaa mi vida, ya está, ya pasó el mal rato- le estaba hablando como un niño pequeño, pero al parecer no le molestó en lo absoluto, solo se comportó mimoso abrazado a mi. 

Jayden: lo siento mucho, de verdad, no volveré a botar comida jamás, eso dolió mucho- que exagerado era este crio, pero me encantaba, era un tierno.

Chris: más te vale muchachito, anda, vamós a que te ponga otro plato de comida para que cenes- no iba a dejarle sin cenar, no señor, yo ganaba siempre. 

Jayden: nooo Chris- solo fue un murmullo pero lo oí perfectamente.

Chris: como que no, andando- le di un abrazo y le empujé suavemente hacia la salida de la habitación.

Iba a acompañarle pero justo en ese momento comenzó a sonar mi movil, con la imagen de mi padre en la pantalla. Algo me dio mala espina.
Dejé que Jayden saliera de la habitación y contesté.

David: ¡ME PUEDES DECIR DE QUE MIERDA ME ACABO DE ENTERAR CHRISTOPHER SMITH!- maldita Diane y la puta madre que le dio su envenenada vida. Esto iba a estar intenso.


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