Capítulo 12 ¡Robert Lewandowski aparece en escena!

 Capítulo 12

¡Robert Lewandowski aparece en escena!

ADVERTENCIA: Capítulo extra-largo, la siguiente narración puede herir la sensibilidad del lector, se recomienda discreción.

Pitazo final… Alemania se medirá ante la peligrosa selección española que dirige Vicente del Bosque…

_ ¡Rayos, nos tocó un rival complicado! _ comentó Mats un tanto preocupado porque sabía que La Furia Roja, como también era conocida la selección española, no era fácil de enfrentar.

El jugador del Dortmund, no menospreciaba para nada a los portugueses, eran igual un equipo aguerrido, y más todavía liderados por su comandante Cristiano Ronaldo, él era quien les metía a todos en la cabeza esa ambición y deseos de superación, fue él quien remontó el partido. Sí, su equipo había caído ante los españoles, que posiblemente tenían uno más completo; jugador por jugador, pero eso no demeritaba el gran trabajo que habían hecho como equipo los lusitanos,  aunque el principal protagonista había sido CR7, como siempre demostrando porque era considerado el mejor del mundo, callando bocas a sus críticos en cada partido con su esfuerzo, talento y determinación que estaban adheridos a su ADN, y hoy como en tantos muchos juegos, se había lucido, pero lamentablemente la tanda de penaltis, siempre era una lotería, según algunos expertos en el tema o quizás a Bruno Alves, le ganaron los nervios al momento de cobrar su penalti.

Hummels, entendía que sí enfrentaban a los portugueses, solo tendrían que estar pendientes de Ronaldo, sin subestimar a los otros en sus respectivas posiciones, pero de nada valía ejecutar excelentes contragolpes en el campo, sí nadie era tan preciso para meterla hasta el fondo como Cristiano, y es que la realidad, es que en el futbol se ganaba con goles, no con deslumbrantes jugadas por muy atractivas o entretenidas que estas pudieran ser. ¡Quedarse en ocasiones de gol, no servía para hacerse con el trofeo! Mats al igual que sus compañeros lo tenían muy claro porque había equipos con poco futbol, pero tenían gol, y también había aquellos que realizaban un juego sorprendente, pero cero o muy poca definición, siendo lo último lo más relevante.

España tenía al frente unos atacantes espectaculares, además de un excelente control del esférico excediéndose en el toque del mismo,  desde la defensa hasta la delantera, pero ellos; los teutones eran favoritos y no solo eso, también contaban con un equipazo, no solo el titular, de igual manera la suplencia estaba plagada de talento; cualquiera de ellos podía jugar y hacer lo suyo, como los elegidos desde el inicio o incluso mejor,  lo que le permitía a Alemania, la no dependencia a una sola alineación o estilo de juego para ganar un partido.

Cada uno en su posición, dejaban al público boquiabierto, desde la última línea; comprendida principalmente por los dos recios y altísimos centrales llamados Per Mertersacker y Holger Felix Badstuber, mientras en el extremo derecho la presencia de Benedikt Höwedes y por el izquierdo el pequeño, versátil, entregado e intachable capitán Phillip Lahm. Entre todos eran como el muro de Berlín, junto a ellos,  los guardametas, quienes cumplían  con  su  labor  de forma esplendida, desde el indiscutible titular Manuel Neuer, hasta el veterano Tim Wiese que participó en los partidos de la primera ronda por grupo, demostrando su experiencia en el oficio. Además contaban con Ron-Robert Zieler; el más joven de los tres arqueros, quien también podía realizar un buen trabajo, sin embargo había tenido menos participación que Tim.

Toda el área defensiva era fuerte y comprometida, y en caso que alguno de los titulares tuvieran alguna situación que no les permitiera jugar, tenían a los últimos dos porteros antes mencionados con  los defensores Marcel Schmelzer, Mats Hummels y Jérôme Agyenim Boateng, para cubrir sus espacios; que era más que seguro, que estarían a la altura de las circunstancias.

Sobre el centro del campo, era otra pasada;  ahí hacían su aparición en primer lugar Bastian Schweinsteiger, considerado uno de los mejores en su posición, gran lectura y visión de juego, es versátil pues puede ir tanto por derecha como por izquierda, posee un potente disparo a larga y media distancia, regateo, surte a los delanteros de balones de forma precisa, y en la recuperación de los mismos es agresivo.

En cuanto a Mesut Özil, el chico cuenta con una gran habilidad técnica, buena imaginación heredada de sus raíces turcas y la disciplina de los alemanes. Funciona como media punta o bien extremo, siempre preciso en el último pase, no por gusto es llamado por los especialistas en el tema, El Mago de Oz. ¡Porque hace magia en el terreno de juego!

Con respecto a Thomas Müller muchos lo consideraban centro delantero por su excelente olfato goleador, pero lo cierto era que podía desempeñarse en cualquier área de la ofensiva y a la vez participar en la media.

Los germanos también contaban con la presencia de “El Francotirador” como era apodado Toni Kroos, su juego se caracteriza no tanto por la velocidad física, sino más bien mental y sobre todo técnica, mostrando su profesionalismo dentro del terreno y fuera de este, destacando principalmente por su lectura veloz del juego; anticipándose a la jugada, agregado a todo eso, su magnífico golpeo del balón y calidad de su control. Toni con frecuencia cambia las direcciones, cada que recibe el esférico, no es el que regatea, pues prefiere combinar los pases con sus compañeros, tiene además excelente pase corto y largo, lo mismo es un experto en el balón parado y su tiro a puerta es peculiar y difícil de parar para los porteros, ya que Kroos coloca la pelota pegada al palo.

Otro medio que también pelea la titularidad junto a él, es Sami Khedira de ascendencia tunecina, que prefiere jugar con pases cortos y al contragolpe, no es el más refinado, pero siempre su estilo va a depender de lo que Joachim le proponga.

En la suplencia de la media cancha, están tres del Borussia Dortmund:

En primer lugar  İlkay Gündoğan; quien como Mes, es de ascendencia turca, con muchos puntos fuertes tales como: la concentración y pases claves, y lo mejor es que no simula faltas, en segundo lugar está,  Lars Bender, volante central, notable por su dinamismo, obstruyendo la mayor parte del tiempo todos los espacios. A él, le sigue Marco Reus, quien sobresale por su versatilidad, es ágil, veloz y posee un arsenal de habilidades técnicas, inteligente con un prodigioso disparo, entendiéndose muy bien con su colega y mejor amigo Mario Götze, cada vez que están juntos en el campo, los arqueros rivales tiemblan del miedo, y es que hacen un dúo único y letal.

Reus es preciso tanto a balón parado como en oportunidad de gol, crea ocasiones para sus compañeros y para el mismo, marca goles,  tiene visión de juego.  Ser versátil le permite jugar de mediocampista ofensivo, tipo un número 10, o bien jugar cualquier posición en la delantera. Por último en el área tenemos a  Mario Götze; quien como su amigo “El pájaro loco”, también puede jugar en cualquier posición en el centro del campo y en la ofensiva, le encanta entrar al balón y  aguantarlo,  jugando al espacio; ejecutando pases claves que terminan en gol la mayor parte del tiempo, es un buen asistente, pero si tiene oportunidad de perforar las redes, no la desaprovecha, realiza disparos lejanos e incluso de cabeza, además contribuye al juego defensivo.

Y no podemos olvidar a los tres principales atacantes de la plantilla, empezando por el veterano Miroslav Klose, de origen polaco, quien es un especialista en el juego aéreo, además de ser un oportunista; aprovecha los balones sueltos y rebotes de los porteros y defensas, dominio excelente en el remate de cabeza, un luchador incansable y sabe trabajar en equipo.

El otro polaco Łukasz Józef Podolski Luis, llamado por sus colegas Lukas o simplemente Poldi, no era el más disciplinado en su juego, ni le gustaba bajar a apoyar en las tareas defensivas, pero poseía un gran tiro de larga distancia, y al igual que Ílkay, tampoco era de simular faltas y ejecutaba finas asistencias a sus colegas, sin olvidar que era muy bueno en los tiros libres directos. En punta tenían a Mario Gómez García, de origen español, es versátil en su posición, ambidiestro, considerado una amenaza en el juego aéreo, se anticipa a los pases y siempre está en el lugar correcto para definir la jugada.

Finalmente estaba en la suplencia el joven talento André Horst Schürrle, quien cuenta con una gran velocidad a larga distancia, jugando siempre a la contra, siendo esto eficiente la mayor parte del tiempo. Él normalmente juega como lateral, pudiendo posesionarse como segundo delantero, tiene además una excelente condición física y buen ritmo de trabajo, le gusta disparar desde lejos y él mismo se considera un buen finalizador.

Todos ellos junto a su entrenador Joachim Löw, quien no solo estaba  enfocado en los planteamientos tácticos, sino que además en su mente estaba siempre, el querer sacar lo mejor de cada uno, darle su oportunidad a todos de brillar en el equipo aunque siendo sincero con él mismo, la llevaba durísima pues todos ellos; hombre por hombre eran muy talentosos.

De manera, que el rival que enfrentaran no tendría por qué ponerles nerviosos, entendían tanto él como técnico y ellos como jugadores que llevaban muchas más ventajas sobre el resto a nivel colectivo e individualmente.

Mats seguía reflexionando todo lo anterior hasta que Marcel lo sacó de sus pensamientos…

_ Relájate amigo, estamos preparados tanto física como mentalmente para hacerles frente a los españoles _ decía mientras le colocaba una mano en el hombro a su colega, como dándole un voto de confianza, Hummels suspiro y le dio la razón.

_ ¡Me la suda, que nos haya tocado con los pupilos del Vicente! Yo solo quiero, que llegue el día del partido final  _ comentó entusiasmado Gómez.

_ Yo igual quiero que pasen estos cuatro días rápido para enfrentarlos porque sé que vamos a ganar _ dijo Holger convencido y sus colegas asintieron de igual manera.

_ Bueno, yo iré a descansar un rato, mañana empezamos a entrenar nuevamente y necesito recuperar fuerzas _ habló Benedikt, y se retiró a su habitación, la verdad estar tanto tiempo pegado al televisor le había causado fatiga visual, tenía que echarse una siestecita.

Mientras tanto en la cocina…

_ ¡Ya está listo! _ Exclamó sonriendo Miroslav, sacando el pastel de manzana del horno y colocándolo en una mesita que tenía al lado, Ilkay que había dejado de chatear instantáneamente, se acercó al bizcocho con claras intenciones de meterle los dedos, pero fue detenido…

_ ¡No señor, nos ha costado mucho prepararlo! _ Expresó Tim con orgullo, él había colaborado desde principio a fin.

_ Eso es notable _ Intervino Per, que hacía solo un par de minutos que se había unido a ellos.

_ Pero solo quería una probadita, vamos no sean malos conmigo _ decía en lo que hacía morritos con la boca.

_ Ahora más tarde te daremos un trozo, antes quiero mostrar está obra de arte al resto de la plantilla, principalmente a Poldi; quiero que sea él, el primero en apreciar nuestra creación. _ habló nuevamente Klose, en lo que salía al salón principal, seguido de Wiese, Mertesacker y Gündoğan, quien se había retrasado unos cuantos segundos.

Los chicos colocaron el dulce en otra mesa que estaba cerca del salón principal, dónde todavía estaban Schmelzer, Hummels, Höwedes y Gómez;  quienes no demoraron en acercarse al mismo, admirando la belleza que tenían frente a su vista.

_ Vaya no sabía que ustedes tenían dotes de repostería _ se adelantó a hablar Benedikt muy sorprendido, había regresado a reunirse con sus colegas porque no podía conciliar el sueño y se aburrió de dar vueltas en su cama.

_ ¡Realmente se han lucido! _ mencionó Marcel.

_ Yo también lo creo _ Ahora el que hablaba era Hummels.

_ ¡Qué buena pinta tiene eh! Os habéis lucido mogollón _ Halagó el trabajo de sus colegas, pero estos no entendieron ni jota, pues se los dijo en castellano.

_ Hombre, que no entendemos lo que nos has dicho _ Le reclamaron todos al unísono.

_ Qué digo, que me quito el sombrero, el pastel les ha quedado genial _ repitió en alemán, lo que sus compañeros agradecieron.

_ Bueno… la verdad es sencillo de hacer _ intervino Gündoğan dándose todos los créditos o al menos eso fue lo que entendieron los presentes.

_ ¡¿Qué?! ¡¿Qué demonios estás tratando de insinuar?! ¡Embustero! _  Protestaron Tim y Miro  mirándolo con severidad  por mentiroso, en lo que Per solo podía encogerse de hombros, no sabiendo de que iba la cosa, pues había llegado tarde a la cocina.

_ Yo este… _ Ilkai se puso nervioso porque todos lo miraban solo a él, los dos pares de ojos de forma fulminante y el resto de ellos con perplejidad, aquello le hizo sentir muy incómodo y acabó confesando la verdad.

_ Está bien, no ayude absolutamente en nada, pero dejen ya de mirarme así, que no me gusta.

_ Que era coña tío _ Le dijo “El Minero” como también era conocido Mario Gómez _ ya sabemos, que lo tuyo es solo con el balón eh? _ Se burló de él y ante eso todos menos Gündoğan se carcajearon con ganas.

En otro lado del hotel de concentración…

_ Voy a ver un poco de televisión, en lo que espero que llegue Robert _ anunció Marco en lo que se acercaba a la puerta del cuarto dónde estaba encerrado con su colega.

_ Yo te acompaño _ se apresuró Mario.

_ No, no es conveniente amigo, eso solo levantaría  sospechas _ le aclaró Reus, cerrándole el paso.

_ Bueno está bien, mejor  voy a comer algo, me acaba de entrar un apetito desesperante, y no creo que pueda aguantarme hasta el almuerzo _ se sinceró Götze sobándose la barriga.

_ Bien, voy a lo mío, y nos vemos más tarde _ chocaron las manos los compinches.

Marco salió de esa habitación hacia el salón principal, que  ahora estaba sin nadie alrededor, que raro, pensaba “Woody”, como también era apodado Reus, pero no se hizo líos y encendió el televisor para ver si encontraba algo interesante en que entretenerse mientras esperaba a Lewandowski, que le avisó que llegaba en media hora.

Götze por su parte había salido en dirección a la cocina con la intención de asaltar la nevera y comerse todo lo que había ahí dentro, tenía una hambre terrible; que daba miedo, así que llegando a su destino comenzó a sacar algunas cosas tales como: queso, jamón, aceitunas, mostaza, mayonesa y cogió un molde de pan que ahí había, y se dispuso a prepararse algunos emparedados, y mientras eso pasaba, Joachim seguía a lo suyo; ejercitando su cuerpo, quien lo veía, podría jurar que era pariente de Ronaldo, no había parado, pero de repente alguien lo sacó de su enfoque.

_ ¡Hasta que te encuentro, mi querido Jogi! _ Dijo Ballack, entrando sin anunciarse, aprovechando que las puertas del gimnasio siempre estaban abiertas, y hacía minutos que  “ Kleine Kaiser “ como también era apodado el exfutbolista de la escuadra germana, había llegado al hotel  y  los chicos que estaban anteriormente en la sala principal, le habían informado dónde estaba  Löw pues este así les había comunicado con anterioridad.

_ ¡Y yo tendría que decir, hasta que te apareces!

_ Ya extrañaba tus sarcasmos… _ sonrió Michael.

_ ¡¿Dónde andabas metido?! _ cortó Joachim y añadió _ Tenemos que preparar el entrenamiento de mañana.

_ Relájate hombre, recibí una llamada de mi mujer _ Explicó él _ ¡Cuéntame mejor! ¿Cómo te ha ido a ti? ¿Cómo se están portando los indisciplinados de tus jugadores? Considerando que en general, tienes una plantilla sumamente joven,  imagino los dolores de cabeza que te deben estar causando porque…

_ ¡Estoy bien! _ Lo cortó Jogi _ Y los chicos ahora están descansando, distraídos en sus actividades,  pero saben que mañana tienen que volver a enfocarse en el partido final _ decía serio, al momento de salir de una máquina para el fortalecimiento de las piernas.

_ Entiendo… que bueno que los muchachos hayan aprendido la lección. _ comentó aquello haciendo referencia al castigo que Löw les había dado a tres de sus jugadores, los cuales habían incumplido las reglas, queriendo seguir con ese tema, y eso que no estaba enterado de la tunda que Joachim le había dado al menor de sus pupilos, sino quien lo aguantaba de lo preguntón que se ponía.

_ Así es, gracias a Dios que solo fueron ellos tres y estoy seguro que no lo volverán a repetir _ decía con seguridad el señor Löw, añadiendo seguidamente _ porque, si yo estuviera en el pellejo de ellos, no pensaría siquiera en hacer otra barrabasada de tal calibre, no después de semejante escarmiento, por lo menos el resto se han comportado como es debido.

_ Bueno sí tú lo dices… ¡genial entonces! Que solo piensen en trabajar porque si te contará yo lo que he escuchado de jugadores de otras selecciones, te daba un infarto _ aseguró Ballack que conocía algunas historias.

_ No gracias, no quiero enterarme…

_ Como quieras de cualquier forma es extraño…

En lo que el auxiliar técnico y Jogi conversaban en la sala principal, Reus miraba su reloj de pulso, mientras golpeaba con uno de sus zapatos deportivos el suelo, estaba empezando a impacientarse porque Lewandowski su compañero y amigo de club no llegaba y el tiempo corría, hacía más de veinte minutos que había apagado el televisor porque no podía concentrarse en nada, solo podía pensar en Robert y el frasco con laxante.

_ Entonces… ¿Cómo está mi socio favorito? _ apareció de repente Robert, tocando a Marco por la parte de atrás del cuello, cosa que lo sobresaltó un poco, y sintió en carne propia cómo la pasaba Mario cada vez que él, se revelaba cual fantasma para sacarle cualquier tipo de información y no lo dejaba en paz hasta que conseguía lo que quería.

_ ¡Demonios, avisa por lo menos! _ Exclamó Woody, poniéndose de pie, dándose la vuelta, con la mano puesta en el corazón y Lewa sonrió divertido, porque tenía el presentimiento que ese condenado haría de las suyas, e iba a averiguar que tramaba, y quien sería la víctima, es decir todos los detalles, pensando en quedarse un rato a molestar, total no tenía más compromisos.

_ ¡¿Y esos nervios a que se debe mi amigo?! _ Cuestionó ahora muy serio, en lo que se aproximaba al muchacho, sin dejar de mirarlo fijamente. Reus solo tragó saliva, diciéndose para sí, que rayos inventarse para despistar al curioso visitante.

_ ¿De… que… que estás hablando? _ Un titubeante Marco, no sabía que cuento chino meterle a su amigo, para cortarlo _ Yo… no estoy nervioso.

_ No... Para nada _ dijo con sarcasmo en lo que tomaba asiento, acomodándose bien en aquel sillón  _ Y bien, mi querido Woody, ¿A quién vas a hacerle el daño en está ocasión?

_ No… no sé a qué te refieres amigo, te llame porque… _ ¡Mierda, tengo la mente en blanco!, exclamaba internamente Reus.

_ Ay Marco, conmigo no te hagas el tonto, que te conozco bien, y sé que no me has llamado por gusto, así que deja de dar tantas vueltas con la lengua y confiesa que vas a hacer con el laxante que me estás pidiendo prestado… _ Robert, no se retiraría de ahí hasta dar con la verdad del asunto en cuestión y Reus tuvo que buscarse una excusa, más bien una falacia convincente.

_ Me da mucha pena comentarte esto, Mario va a matarme, _ finalmente las ideas estaban llegando a su mente _ resulta que el enano, tiene veintiún días sin defecar y se la pasa todo el tiempo con jaquecas y dolor de estómago, y la verdad estoy muy preocupado _ terminó Marco, que intentó sonar lo más persuasivo posible, pero no parecía que aquello iba a resultar tan fácil, no cuándo se trataba de Robert.

_ Enserio… mira tú, no sabía que Sunny, tenía problemas de estreñimiento, _ dudo un momento y luego agregó _ pero lo que más me sorprende son tus dotes de medicina.

_ Bueno yo solo creí que…

_ No Marco, no puedes andar recomendando remedios así porque sí _ interrumpió Lewa _ ¡¿Qué tal sí el pobre de Mario toma este laxante, _ decía mientras sacaba el purgante del bolsillo trasero de sus pantalones e inmediatamente lo guardaba _ y en lugar de ayudarle lo empeoras?! Creo que fue un error que viniera, mejor busca ayuda con un profesional, ¡porque ni tú ni yo, estamos en ese campo! _ declaró el polaco mientras se paraba del asiento e iba en dirección a la salida, poniendo en tres y dos a Reus, que no sabía que hacer o decir, sí confesaba, iba a incumplir su palabra, que le dio a Götze, pero sí no buscaba un argumento fuerte y creíble, Robert se marcharía, sabía que todo era manipulación y claro chantaje, disfrazado de pretextos para enterarse del tema. Lo conocía muy bien.

_ Espera un momento… _ se apresuró Reus, siempre tenía un as bajo la manga, Lewandowski se dio la vuelta para mirarlo de frente.

_ Olvidaba decirte, que Mario está enfermo, el médico vino ayer, y sugirió un laxante natural, yo junto con Marcel y Mats, _ Y metió en el baile, al parcito de compinches que jugaban con él en el Dormutd _ hemos preparado varios de ellos, pero ninguno ha destapado ese colon, es decir ninguno de los remedios ha puesto a trabajar los intestinos del pobrecito de Mario, por lo que creo que tenemos que agotar todos los recursos ¡¿No lo crees así?! _ Y Marco puso su mejor cara de mártir, terminado de echarle flores a Lewandowski. _ Además todo lo que tu traes contigo siempre nos ha funcionado, eres un genio mi amigo…

_ Bueno está bien, voy a creerte solo porque se trata de ti, y sé que no jugarías con la salud de un amigo, _ Cayó redondito, pensó Reus internamente divertido _ pero te advierto algo, este líquido es demasiado fuerte, no se puede abusar de él _ explicaba Lewa volviendo a sacar el tarrito y guardándolo en su sitio enseguida. _ Por favor solo agrega dos cucharadas a la sopa o al jugo que él vaya a tomar, solo dos _ enfatizó Robert en lo último y añadió _ porque sí se te va la mano, te aseguró que Mario se va en mierda _  Aquello sorprendió en sobremanera a Marco, pero ya le advertiría a Götze más tarde.

_ Comprendo _ fue lo único que dijo y Robert sacó el frasquito pequeño por tercera vez del bolsillo de sus bermudas y finalmente se lo entregó, calmando la ansiedad de Reus, que anteriormente se quedó esperando como un gatito cuando está velando la comida de sus dueños. Marco no tardó en guárdalo bien, igual como Lewa en el bolsillo de sus pantalones.

_ Bueno amigo dame un abrazo antes de irme _ pidió Lewa

_ Claro, no hace falta que lo pidas _ dijo Marco y ambos se dieron un fuerte abrazo.

_ Ah, lo olvidaba, antes de retirarme, iré a saludar a los chicos _ anunció, pero antes que diera un paso Reus lo detuvo…

_ Espera un momento…

_ ¡¿Qué sucede?! _ preguntó perplejo el polaco.

_ Por favor, no menciones delante de los muchachos, que Mario está estreñido, créeme que está situación le resulta muy vergonzosa al pobre.

_ Sí, sí, sí, no te preocupes, se cómo es de delicado el chiquillo _ le dio la razón _ No tengas cuidado, solo voy a saludar y me marcho, pretendía quedarme sí, ibas a hacer alguna de tus acostumbradas bromitas, pero como se trata de otro asunto, que además no es de mi agrado, no tengo nada que hacer aquí _ Y Reus pensó, gracias Dios, que me hiciste el milagrito, y este se va por la buena.

_ Una lástima que te tengas que retirar _ Una mentirita piadosa _ Te acompaño a dónde están los chicos _ dijo Reus y ambos se encaminaron hacia dónde el resto de los colegas.

Y en el baño de los del personal de servicio con la puerta abierta, se encontraba hablando Bastian, que había dejado hace rato a sus colegas Manuel, Mes, Poldi, Philipp y Toni que estaban viendo una maratón de películas en la habitación del último mencionado, pero como la mayoría le parecieron aburridas, anteriormente había decidido retirarse a su habitación, aparte de haber recibido un mensaje en su teléfono de una chica interesada en pasarla bien con él y sus colegas, cosa que no podía dejar pasar Schweinsteiger, que quería tomar en cuenta a todos, pero sabía que aquello era imposible; dentro de la plantilla había de todo, desde los rumberos, hasta los enemigos de las fiestas, los extremadamente religiosos, los adictos al trabajo, los dormilones, así que él sabía perfectamente a cual o cuales tomar en cuenta y tenía la lista hecha, solo faltaba que les comunicara, pero sería más luego, ahora lo que había hecho fue correr a llamarle a la atractiva muchacha; la misma con la que había estado hablando hasta que el inoportuno de Mertesacker lo interrumpió en lo mejor de la conversación; dándole razones, que Thomas lo buscaba urgente, quien estaba de primero en su lista, pero tal vez se lo pensaba mejor y lo dejaba por fuera, cargaba un humor de los demonios. Bastian lo había atendido, terminando de dejarlo con la palabra en la boca porque, que pereza tener que aguantarlo cada vez que se ponía iracundo, o al menos era el recurso que usaba Müller para intimidar al resto, pensaba “Basti” como también era conocido el centro campista por sus fans.

Bastian conocía muy bien a Thomas, y siempre prefería no hacerle mucho caso cuando se ponía en esos planes, mejor dedicarle ese tiempo a la hermosa pelirroja con la quien estaba intercambiando palabras.

_ Te llamó más tarde belleza… _ se despidió, y salió del baño, afuera lo esperaba Kroos, lo cual le pareció muy extraño.

_ ¿Qué estás haciendo tu… tu aquí? _ cuestionó nervioso Bastian.

_ Solo quiero ir al baño… _ dijo como si nada con su típico semblante impasible.

_ ¿Y no tienes un baño arriba en tu habitación? _ volvió a interrogar el siete de la selección alemana, y Toni se le quedó viendo serio, Schweinsteiger lo notó y cambió el tono _ Bueno… me refiero que puedes estar perdiéndote la mejor parte de la película por bajar a este baño, que además lo usan los del servicio y…

_ Arriba está ocupado. _ contestó el chico.

_ ¿Y los cuartos de al lado? _ insistió Bastian.

_ No sé, no me gusta meterme en las habitaciones ajenas, no me confundas por favor…

_ Vamos no te molestes amigo, solo era una pregunta, parece que todos hubieran comido picante, están que se queman. _ dijo Bastian y le abrió más la puerta, de aquel reservado para que entrara de una vez _ Adelante, no vaya a ser que te ocurra un accidente _ la última frase la pensó, no quería que el muchacho se incomodara.

_ Con permiso. _ Lo miro de pies a cabeza, luego entró, y se encerró. Bastian se fue en dirección a la recámara que compartía con Mesut.

Mientras tanto en la habitación de Lars Bender…

_ ¡Eres un tramposo André! _ le reclamó el mismo Bender al delantero.

_ Por favor, estoy jugando limpio, no seas tan llorón. _ se burló Schürrle.

_ Oigan chicos ¿Cuándo nos toca a Ron-Robert y a mí, una partida? _ intervino Boateng, que estaba cansado solo de observar, ya se había tomado un par de cervezas junto al portero,  pero estaba cayendo en aburrimiento.

_ Jugamos esté ultimo y luego siguen ustedes. _ informó Lars, añadiendo luego _ Primero tengo que vencer a esté tramposo, escogeré a Liu Kang y te daré una paliza.

_ Escoge al mismo Shao Khan sí te da la gana, que igual no podrás ganarme. _ replicó André que hasta el momento se había mantenido con el mismo peleador del juego, llamado Scorpio y con él,  había vapuleado hasta el cansancio a Bender, mientras el portero y el defensor solo se limitaron a  rodar  los ojos, esperando por su turno hasta que entró precipitado Thomas, ya había importunado antes  a los que estaban viendo el juego de semis y ahora entraba como un completo  loco a aquella habitación a molestar a los presentes…

_ ¡¿Dónde mierda está Götze?! _ volvió a la carga, alterando los ánimos del resto, es que vamos llegar así de repente y de esa manera, era para eso.  Schürrle se desconcentró y acabó perdiendo por primera vez ante su colega, que sonreía con sorna por haber conseguido su cometido.

_ ¡Te vencí idiota! _ se puso de pie y gritó alzando el puño en señal de victoria, agradeciendo mentalmente a Thomas por su intromisión.

_ Y todo esto es por tu maldita culpa… ¡Imbécil! _ También se levantó, reclamando y para rematar empujó a Müller.

_ ¡¿Qué mierda te pasa?! ¡A mí nadie me habla así! _ Y le regresó el empujón.

_ Ahora sí, te la parto… _ Iba a caerle a golpes, pero Ron-Robert Zieler y Jérôme se pusieron en medio.

_ No se peleen chicos por favor. _ pidieron ambos al mismo tiempo.

_ Él empezó… _ protestó André.

_ Pero él, no tenía que empujarme _ Habló Thomas.

_ Bueno, pero están empatados, él te empujo y tú te lo cobraste, ya no tienen que seguir peleando. _ Le aclaró el único portero que había en esa recámara.

_ Tienes razón, no voy a perder el tiempo con este niñato _ no pudo evitar decirlo, André quiso reclamar, pero hizo oídos sordos; a los necios era mejor evitarlos, reflexionó y  Müller  continuó hablando _  A mí solo me interesa saber, ¡¿dónde está metido el descarado de Götze?! _ Los muchachos pensaron: Mario debió haberle hecho algo muy grave a Thomas para que él estuviera así, pero ninguno de ellos preguntó o  hizo algún comentario al respecto.

_ Bueno, no lo hemos visto desde hace rato… ¿Verdad chicos? _ Zieler lanzó esa interrogante a André, Jérôme y Lars, quienes asintieron _ ¿Por qué no le preguntas a Marco? Recuerda ellos siempre andan juntos, igual puedes ir con Marcel y Mats, los cuatro siempre están juntos…

_ A Marco no lo he visto, y ya fui con Marcel y Mats, que estaban con Holger, el otro Mario y Benedikt y no saben nada, estaban viendo el dichoso partido ese de semifinales de Portugal-España _ Les explicó Müller

_ ¿Y quien ganó? _ preguntaron todos al mismo tiempo.

_ Ni sé, ni me interesa _ dijo tajante _ En fin, me retiro de aquí…

Thomas salió del cuarto y una vez más, reanudó su búsqueda mientras Mario ya había comido varios emparedados, pero necesitaba algo dulce, tal vez una paleta de helado, pero no encontraba ninguna en la nevera, sin embargo sabía que Marcel siempre tenía en la habitación que compartía con Hummels, dentro de una mini-nevera, algunas de esas rellenas de crema de vainilla y caramelo, con cubierta de chocolate y maní, que tanto a él le gustaban; así que se fue en esa dirección, pensando en el camino, que tal vez Schmelzer no se molestaría porque cogiera solo una…

Y en el cuarto que compartían “Miro” y “Poldi”  apodos que utilizaban los más  cercanos a ambos para llamar  a Miroslav y a Lukas. 

En esa recámara estaban ahora con el pastel, los defensores del Borussia; el hombre del FC Schalke 04, el central del Arsenal FC, el del Bayern, el único con raíces españolas de los teutones, un arquero, y Gündoğan, pues Klose quería enseñárselo a su compatriota, la verdad es que desde el principio, el de la idea había sido él; contando con la ayuda de Tim y finalmente se unieron Ílkay y Per, funcionando solo como espectadores. Pero el propio Miro estaba muy orgulloso de su creación, desesperando cada vez más a los chicos, que lo único que querían era que dividieran el mismo en partes iguales para probarlo, las cosas para comer se hacían con ese propósito; comer, pensaba el de orígenes turcos, que prácticamente deseaba lanzarse sobre el tan alabado bizcocho y terminar con el show que había montado el polaco.

_ ¡Vamos, parte ese dulce de una vez! _ dijo con impaciencia Gündoğan pasándole inmediatamente un cuchillo, que tenía en el bolsillo trasero de su pantalón, el cual había sacado sigilosamente de la cocina _ Toma.

_ No, no es momento todavía, quiero mostrárselo a Poldi antes _ replicó Miro.

_ Pero, sí ni siquiera está aquí. _ se metió Per y el resto le dio la razón.

_ No importa, lo esperaremos. _ se mantuvo firme Klose.

_ Eres un… _ la frase de Badstuber quedó en el aire.

_ Hola chicos, ¿cómo están? _ ingresó como Juan por su casa Sami, que había estado en la piscina refrescándose al lado del cuerpo técnico, pero se había cansado de estar allá, decidiendo mejor enterarse en que andaban sus colegas _ Oigan… ¡¿quién lo hizo?! _ Agregó sorprendido acercándose a la mesa dónde ahora tenían el pastel colocado  _ Él que fue le doy un diez de calificación, está genial.

_ Ha sido Miro tío junto a Tim…, y la verdad se han pasado… _ comentó en castellano y Khedira comprendió enseguida, no así el resto, quienes no tardaron en reclamar.

_ Que he dicho, que han sido Miro y Tim los responsables  ¡Joder! ¡¿Es que os tengo que traducir todo siempre?! _ suspiró Gómez dramatizando un poco y siguió _ Venga, que hacerse con unos cursillos de castellano, no le viene mal a nadie. 

_ Ni siquiera Mesut, que está viviendo en Madrid lo domina, es más solo sabe decir por favor, gracias, buenos días y nada más, así que no esperes que con un cursillo de esos que imparten por ahí  seamos como Miguel de Cervantes en poco tiempo _ comentó Marcel.

_ Cierto, mi socio tiene razón porque…

_ ¡Hola muchachos, miren quien llegó a visitarlos! _ Entró con entusiasmo Reus junto a Lewa que sonreía de oreja a oreja, ninguno de los dos notó el dulce pues Miro se había colocado delante del mismo, tapándolo.

_ ¿En que andan viejos? _ preguntó Robert saludando, chocando los puños, haciendo el típico saludo entre los amigos, cada vez que se encontraban,  primero con Hummels y luego Schmelzer, sus colegas favoritos después de Marco claro está.

_ Viejo tu padre. _ reclamó Badstuber al momento que Lewa se acercó para repetir el saludo.  Holger lo evadió  pues  tomó  mal  aquella  forma de referirse a ellos, por lo menos, él no era ningún viejo, ya que solo tenía 23 años.

_ Oye, andamos sensibles por aquí, viejo es una manera de llamarle a los amigos. _ Explico Lewandowski _ Nunca lo dije para ofenderte.

_ No me interesa, a mi llámame por mi nombre, que para eso me lo han puesto desde que nací.

_ Está bien, está bien, no te enojes _ Le decía colocando un brazo alrededor del cuello del defensor como si fueran compadres _ Entonces muchachitos, ¿qué me cuentan? _ interrogó Robert, ahora tomando asiento en la cama de Poldi y Reus lo imitó.

_ Aquí esperando que el señor Klose, se digne en compartir el pastel que cocinó con la ayuda de Tim _ Habló Höwedes y Gündoğan sonrió con satisfacción por ese comentario, por lo menos alguien aparte de él, le insistía a Miro quien no quería dar su brazo a torcer.

_ ¡¿Enserio Miro?! ¡¿Tú también le metes a la repostería?! _ se levantó Lewandowski como un resorte _ ¡¿Dónde está el pastel?! Me tienes que dar un pedacito a mi primero, recuerda que los invitados somos primero además somos paisanos. Anda vamos, di que sí _ mientras le hablaba lo codeaba y luego lo jalaba de la manga de la camiseta.

_ Contrólate Robert, pareces retrasado _ lo regañó su compatriota, y Lewa solo pudo poner un mohín sintiéndose triste porque Miroslav lo había retado, pero bajo su euforia.

_ Genial, yo también quiero, _ No tardó mucho en ponerse de pie Reus, ubicándose cerca de Lewa, e iba a pecar de impulsivo, pero al ver la mirada de severidad en el rostro de Klose, paró en seco, pero sin poder evitar murmurar. _ le llevaré a Mario…

_ No porque sí le das el laxan… AUCHH _ Marco le metió un codazo bastante fuerte a Robert, ante las miradas de confusión del resto, por lo que ambos trataron de arreglar sus comentarios.

_ Quería llevarle un trozo a Mario porque a él, le gustan mucho las cosas dulces, pero todo dependerá de ti Miro, sí tú quieres compartirlo con nosotros.

_ Para todos habrá, pero tienen que esperar primero quiero mostrárselo a Poldi.

_ Bueno déjanos darle nuestro punto de vista… _ habló de nuevo Reus, como diciéndole que se apartara para apreciar el bizcocho detenidamente.

_ Espera un momento Marco… _ interrumpió Mats

_ ¡¿Qué sucede?! _ Ahora… ¿qué lío le iban a contar?, se preguntaba para sí el pájaro loco, porque  el  día  había  estado  muy  lleno  de  sorpresas, primero Mario contándole sobre la azotaina, que le había dado Joachim, luego la venganza que tramaba contra su verdugo, después Robert con su fastidioso interrogatorio, que para su suerte no se alargó como pensaba y ahora sus compañeros, que rayos le irían a informar; esperaba que nada de lo que le dijeran, estuviera relacionado con su mejor amigo, pero Marco se dio cuenta, que está vez no llevaba razón.

_ Es que bueno cuando estábamos viendo el partido de semis entre Portugal y España, Thomas llegó todo alterado buscando a Mario, que le iba a dar su merecido, que era un maldito atrevido, sinvergüenza,  y no sé qué más, porque según él, Mario tomo una crema de afeitar del propio Müller sin su permiso. _ Reus se hizo el desentendido aunque quizás Hummels podría estar en lo cierto o mejor dicho Thomas, porque Götze había creado mala fama en el equipo

_ ¿Eh?...

_ Sí colega, como lo oyes y quita esa cara, que Mario tiene un historial, y tu más que nadie lo conoces muy bien. Y sí,  es nuestro amigo, hermano y todo lo que quieras, pero las cosas como son _ apoyó Marcel el argumento de Mats.

_ De esto, sí que no me había enterado. _ se hizo el loco _ ¿Mario tu que tienes que decir al respecto sobre estas acusaciones? _ Se refirió a Gómez el tocayo de Götze en plan de broma, pero eso enfureció a “El Torero” como también era conocido el delantero.

_ ¡¿Qué cojones estás diciendo eh?! _ lo cogió por el cuello de la camiseta y lo zarandeaba _ Yo jamás haría tal cosa _ Meterse a las habitaciones y tomar lo que no es suyo sin permiso, de eso hablaba.

_ Suéltame, era una broma _ se liberó _ Bien dices Lewa, estos no aguantan nada.

_ Pues haberlo dicho antes, los muchachos estaban hablando de Mario Götze _ se defendió Gómez.

_ Ya lo sabía, pero como te dije, te estaba vacilando, y a Mario no lo he visto en todo lo que va del día _ mintió la última frase y antes de retirarse de ahí añadió _ Voy a buscarlo, nos vemos más tarde, chao Lewa, cuídate.

_ Vale hermano, nos vemos y recuerda lo que te dije en la sala principal   _ hicieron su típico saludo de despedida y volviendo a abrazarse por segunda vez

Marco tenía que hablar con Mario lo antes posible, las cosas se estaban complicando. ¡¿Qué rayos tenía ese enano en la cabeza?! ¡¿Para qué meterse con Müller?! Sabiendo lo inaguantable que se portaba la mayor parte del tiempo por nimiedades.

En fin, Götze nunca escarmentaba con los consejos, y ahí iba Reus caminando por los alrededores del área de concentración, había bajado a la planta baja dónde se encontraba la cocina, el comedor y demás para ver, sí pillaba a su compinche y advertirle de su situación y para suerte de él  lo pillo, llevaba las manos llenas de paletas de helado. Reus contó en total cuatro; dos en cada mano. Movió la cabeza de un lado a otro dejando escapar su pícara sonrisa, le había causado mucha gracia las ocurrencias de su amigo del alma, seguramente las había sacado del cuarto que Schmelzer compartía con Hummels. Sí, no encontraba otra explicación, reflexionaba el muchacho en su lugar en lo que observaba detenidamente a Götze, quien  iba más que dispuesto  a tomar asiento en el salón para empezar a degustarlas con todas las ganas, cuando sin saber de dónde salió, quien no debía. Sí, el jefe del organigrama había hecho su aparición sin que Sunny se diera cuenta, y aunque Reus no quería estar en su pellejo, deseaba enterarse de lo que seguiría a continuación, de manera que tal como un experto shinobi, caminó sigiloso hasta alcanzar el primer  escondite; detrás de media pared de mármol que allí había. Definitivamente,  el interés  por saber cómo trataba Joachim en privado a su mejor amigo, lo estaba matando. Quizás sería testigo de algo  parecido a lo que le había compartido Götze en la mañana bien temprano,  sobre aquella buena cuera que recibió de parte de Löw, y de la segunda tanda de recios  azotes con el zapato aquel,  que se llevó por necio,  contestón y grosero, y es que Mario le había contado todo con lujo de detalles, cuando se decidió, fue desahogarse, quien más que Marco para escucharlo; era incondicional, siempre estaba ahí para él aunque a veces se pasara tomándole el pelo, se entendían de maravillas, eran similares en muchos aspectos, eran uña y carne, y ahí permanecía Marco expectante; tendría la oportunidad de saciar su curiosidad en vivo y a todo color, dando rienda suelta a su imaginación que no paraba en su cabecita loca.

_ ¡¿Qué carajos, pretendes mocoso?! _ interrogó serió Joachim a un metro de distancia de su pupilo, quien se encontraba de espaldas.

_ ¿Qué estás… estás haciendo tu aquí? _ Götze sonó nervioso, pero se giró, la presencia del señor Löw lo ponían en aprietos, Marco no podía quitarles la vista de encima a ninguno de los dos.

_ Tengo hambre, solo voy a comerme una paleta ¿Tiene algo de malo eso acaso? _ Y ahí iba el chico otra vez con ese tono insolente, que a Jogi no le gustaba para nada.

_ ¿Una…, estás seguro de eso? _ Löw utilizó su típico tono irónico y añadió _ No  querrás  decir  cuatro ¿o me equivocó? _ Mario como un niño pequeño bajo la mirada hacia la evidencia que sostenían sus manos, tragó saliva e inventó otro argumento para intentar persuadir a Joachim.

_ Bueno te prometo que solo me como una._ Jogi lo miró de manera más severa _ Esta bien, la mitad de una…  menos de eso, si está de acuerdo señor _ quien lo viera al “Super Mario” como era apodado por muchos, ahí prácticamente suplicando, reflexionaba Reus en su lugar, siguiendo todo detenidamente.

_ ¡Qué mitad, ni que ocho cuartos! _ dijo Joachim tajante en lo que extendía la mano en dirección al muchacho _ Dámelas inmediatamente.

_ ¡¿Pero por qué?! ¡No es justo! _ azotó un pie contra el suelo, haciendo un puchero que hasta lindo le quedó, apretando a su vez los helados, que ya se estaban aguando, pero no dejaría que Jogi se los quitará, primero muerto o al menos eso fue lo primero que cruzó su mente _ Yo quiero comerme una, déjame. _ Se enfurruñó el niño, esa reacción Löw la venía llegar, pero se mantuvo firme porque no iba a permitir que ninguno de  sus jugadores se llenaran de azúcar, mucho menos Mario, que eso no le hacía bien y menos aún, a falta de solo unos cuantos días para la gran final, sin embargo sabía lo complicado que iba a ser convencerlo de lo que le convenía pues además de gustarle mucho ese tipo de cosas, ese mocoso era demasiado testarudo, pero lo que no comprendía y no paraba de preguntarse en su mente era: ¡¿Dé dónde había sacado Götze las condenadas paletas esas?! Porque él pidió a todo el personal que se desasieran de esas porquerías, ya averiguaría quien o quienes no siguieron sus órdenes al pie de la letra, por el momento solo trataría con el chiquillo que tenía frente a él, mientras Marco oprimía la mandíbula para no partirse de la risa, lo que estaba presenciando era más divertido que ver el partido de Alemania goleando a Argentina en la pasada Copa Mundial con Maradona al mando y Messi en el campo incluido.

_ Te hable, obedece por favor _ volvió a hablar el técnico, pero Mario estaba empecinado como la mayor parte del tiempo y se salió por la tangente.

_ ¡¿Para qué?! Sí igual no me has dicho todavía, sí jugaré de titular en la final... _ ¡Pero que rayos tenía que ver eso con lo que estaban discutiendo!, pensaba Joachim, ¡ese muchachito era imposible, en serio!

_ No estamos hablando de eso Mario, y ya basta de caprichitos y  dame lo que te pedí por la buena, que no estoy para perder el tiempo _ insistió el señor Löw estirando su paciencia.

_ ¡No quiero! _ exclamó y negó con la cabeza tal como un niño cuando su padre le prohíbe las golosinas, Marco no se lo creía, a la hora de hacer pataletas, Mario se lucia y Joachim suspiro, llevándose una mano a la cabeza; definitivamente ese muchachito era más terco que una mula y un verdadero dolor de cabeza cuando quería, así que no le quedó de otra que hacer las cosas a la manera de él, parecía que así era que le gustaba a Mario, por la mala, de modo que sin pensárselo dos veces se acercó a él y le arrebato las cuatro.

_ Ey no,  devuélveme eso. ¡Me pertenece! _ Y Götze no demoró en protestar siguiéndole el paso al míster, que se fue directo al basurero más cercano y ahí las tiró, Mario se quedó choqueado con esa acción de su actual jefe y no pudo evitarlo, en un momento de impulso acabó empujándolo y lo llamó estúpido. Marco en su posición, no sabía que hacer iba a escapársele una sonora carcajada, pero antes que eso pasara, había inspirado y exhalado rápidamente cinco veces seguidas.

_ Con que soy un estúpido eh?! _ interrogó con esa ironía, que pocos podían tolerar, en lo que lo cogía por la oreja derecha y se la jalaba con ganas, haciendo que Mario se doblara en su propio cuerpo poniéndose muy rojo _ ¡¿Y tú que eres entonces?! ¡¿Serás acaso un niñato malcriado, al que no le han enseñado a hacer caso cuando un superior le habla?! O tal vez me equivoque… ¡A ver contesta a mis preguntas muchachito insolente! _ seguía tirando de su oreja cada vez más fuerte y aunque el chico no quería gritar, le empezaba a arder y no pudo evitar quejarse.

_ Ya, ya, ya entendí señor, suélteme por favor… _ Mario se retorcía en su sitio.

_ ¿Qué entendiste? A ver, explícame, que quiero enterarme. _ volvió a insistir Joachim sin soltarlo.

_ Que usted es… quien manda señor Löw, y… que debo…, que debo  obedecerlo siempre… _ fue suficiente para que Jogi se compadeciera  de  él y finalmente lo liberó, Marco tuvo que aumentar sus respiraciones y después se mordía la mano derecha, deseando que Löw se largará para poder expresarse al máximo.

_ Como vuelvas a faltarme el respeto, vamos a tener una conversación muy larga en mi habitación. _ amenazó y luego agregó _ ¿Te quedó claro niñito? _ Götze se quedó callado, Joachim pensó que su actitud era de rebeldía por lo que repitió lo mismo.

_ ¡He dicho, si te quedo claro!

_ Sí señor, me quedo claro. _ lo dijo entre dientes.

_ No entendí lo que dijiste, repítelo otra vez, alto y claro.  _ No podía faltar un último reto de  parte de  Löw, pues siempre tenía que asegurarse que ese jovencito aprendiera su lección.

_ Sí señor, me ha quedado claro, no volveré a faltarle el respeto nunca más. _ fue lo más preciso, claro y conciso que pudo y está vez su jefe quedó satisfecho.

_ Bien, voy a ver cómo están el resto, sí tienes hambre en la nevera debe haber frutas y vegetales, que puedes comer como entrada antes del almuerzo, que es en dos horas. _ fue lo último que le dijo y se retiró dejando a un Mario muy molesto, que empezó a zapatear y a patear los sillones que ahí había, una vez Joachim se había alejado lo suficiente.

_ No lo puedo creer, esto es más divertido que todas las películas de American Pie juntas. _ Marco había salido de su escondite y sin importarle la reacción que pudiera tener su mejor amigo, simplemente se descojonó.

_ ¡¿Qué diablos haces tú aquí?! _ lo miró de mala manera _ No estoy para tus chistecitos _ añadió, pero a Reus le valió un pepino sus palabras, seguía burlándose de su socio, ahora tirado en uno de los confortables muebles, seguía risa tras risa…

_ ¡¿Estuviste escuchando todo verdad?! _ cuestionó Götze rechinando los dientes, cada vez más furioso.

_ Sí… no pude evitarlo, _ las frases iban acompañadas de grandes carcajadas, ya hasta lloraba de la felicidad _ pero sin mala… intención, yo solo… _ No podía ni hablar y como siempre cada que le daba un ataque de risa, no podía parar o más bien no tenía intención de hacerlo. Quería mucho a Mario, pero lo cierto era que amaba mofarse de él, es que era muy entretenido verlo como se le trasformaba la cara cuando se enfadaba seriamente, lo cual se estaba volviendo algo habitual.

_ ¡Eres un perfecto idiota! _ Se alejó Mario, enserio que no estaba para soportar las payasadas de nadie, ni siquiera las de Marco, suficiente tenía con las imposiciones y regaños de Joachim.

Después que Reus se cansó de reírse a diestra y siniestra de su colega, compañero, mejor amigo, hermano, compinche y demás calificativos que explicaban su unida y fraternal relación, se fue a buscarlo por segunda vez para explicarle lo que le había dicho Lewandowski, así que más temprano que tarde abandonó la planta baja, una vez puso pie fuera del lugar, ingresaron al mismo por segunda ocasión los chicos con su pastel, está vez acompañados de Sami y Robert.

Mario bajó de nuevo a la última planta porque de verdad necesitaba comerse algo dulce, no eran caprichitos  como  su entrenador pensaba, así que estando otra vez cerca del comedor, iba dispuesto a alcanzar la cocina por tercera ocasión en el día, pretendiendo volver a revisar cada parte de la misma, pero al momento de avanzar un par de pasos, se topó con la presencia de once de sus colegas, incluyendo a Lewandowski en paquete,  y aunque Götze, quiso evitarlos, principalmente a Robert,  no le quedó de otra que detenerse a saludarlo, cuando Lewa gritó su nombre completo a los cuatro vientos, saludando con mucha efusividad para su gusto pues el pequeño no andaba con el mejor de los genios, pero consiguió controlarse.

_ ¡Mi querido amigazo Mario Götze, alias Super Mario! ¡Qué bueno volver a verte!

_ Ah… hola Robert _ levanto su mano en señal de saludo _ Hola chicos… ¿Eh… qué hacen?

_ Estamos apreciando la maravillosa creación, que han hecho Miro y Tim  ¡¿No te parece sorprendente?! _ Le preguntó Mats mostrándole el pastel, se había quitado él, que estaba delante del mismo y  a  algunos de sus colegas les había dicho, que se hicieran a un lado, que estaban estorbando porque quería que  Götze pudiera verlo bien, una vez el área quedo despejada, el muchacho lo observó y  se quedó muy asombrado.

_ Venga tío, no te quedes mudo, di algo por lo menos _ su tocayo lo sacudió para que reaccionara.

_ Está muy… muy bien hecho… _ dijo Mario y pensó: justo lo que necesito para calmar mis ganas por algo dulce.

_ Estamos esperando que Miro lo parta de una buena vez, pero se está haciendo el loco desde la mañana, y ya me está colmando _ se expresó Ílkay y varios de sus colegas que ahí estaban lo apoyaron, en lo que Lewa se acercaba a Götze y le susurró al oído.

_ Ya hablé con Marco, solo tomas dos cucharadas con la sopa o el jugo, no puedes abusar de eso… ¿entendido? _ Y Götze arqueo levemente una ceja, torciendo la boca de la misma manera, sin entender de lo que hablaba ese loco.

_ Bueno chicos, como no llegó Poldi anteriormente, y me entró pereza buscar al resto de los chicos, _ hablaba Miroslav mirándolos a todos detenidamente  _  he decidido que en lugar de eso,  se lo vamos a mostrar al míster y luego les prometo que lo partimos solamente entre Joachim y los que estamos aquí… Ah, lo olvidaba, tú también estás incluido Mario.

_ ¡No! _ gritó Tim _ Jogi es enemigo de los dulces, no va a querer siquiera que lo probemos.

_ No es cierto, es solo cuando estamos en medio de partidos importantes _ le aclaró Holger.

_ Todos los partidos son importantes, así que significa que no estará de acuerdo _ se metió Khedira.

_ Este es un postre muy sano porque es con relleno de manzana y el bizcocho ha sido hecho con harina de garbanzos especial _ Explicó Miro, que fue quien había traído consigo todos los materiales para la elaboración del mismo, pero los había colocado en tarros de vidrio dónde no indicaba lo que acaba de informar.

_ Bueno como quieras después que… Por cierto Götze, tenemos que decirte algo… _ Marcel se apresuró a informarle, pero su frase volvió a quedar en el aire.

_ ¡Hasta que al fin te encuentro maldito sinvergüenza! _ espetó Thomas mientras se aproximaba al más joven de toda la plantilla, quien no sabía sí eso iba dirigido a él, pero fue la impresión que se llevó, ya que Müller le clavó una mirada de odio, que sí la misma tuviera el poder de matar el jugador del Borussia estaría en la otra vida, Marcel y Mats trataron de intervenir poniéndose en el medio.

_ ¡Tranquilízate Thomas!

_ Fuera de aquí, que voy a darle una paliza a este atrevido _ aseguró el muchacho, que iba dispuesto a todo por hacerse respetar.

_ ¡¿Qué demonios quieres conmigo?! ¡¿Acaso estás loco?! _ preguntó Mario porque no entendía el arrebato de su colega.

_ ¿Y todavía lo preguntas? Está más que claro, que te metiste a mi cuarto y tomaste mi crema de afeitar sin mi permiso _ gritaba y lo apuntaba con el dedo índice _ Y ahora mismo te voy a enseñar a respetar lo ajeno.

_ ¡Cálmate Müller por Dios! ¡Pareces desquiciado! _ intervinieron Batdstuber y Benedikt.

_ Ustedes no se metan en lo que no les importa, esté tiene que pagar por su atrevimiento _ insistió Thomas _ ¿Por qué demonios cogiste mi crema de afeitar? ¡Maldito idiota, contesta!

_ ¿Qué yo qué? ¡¿Pero tú eres tonto o te haces?! _ habló Mario cansado de la actitud de ese chico, además no le temía a sus amenazas por más que armara un gran escándalo, perro que ladra no muerde, pensaba Götze  _ Yo para que quiero usar tus porquerías, me pagan muy bien en mi club y puedo comprar la mejor crema de afeitar, una mucho mejor que la tuya seguramente.

_ Yo lo mato a este imbécil… _ amagó con pegarle, pero los amigos de Mario no se lo permitieron.

_ Que se quiten… o no me digan que también están en la lista de amantes de esta sabandija _ Thomas estaba muy fuera de control, que hablaba sin sentido. Mats y Marcel iban a caerle a golpes, pero se contuvieron, no querían meterse en problemas, pero los comentarios de Müller, estaban muy fuera de lugar _ Claro…, era de esperarse, como no está su marido oficial, ahora usa los de turno para que lo vengan a defender.

_ ¡¿Qué mierda te pasa?! Metete tus calumnias por dónde mejor de quepa _ Mario iba con claras intenciones de reventarle la boca de un solo puñete a ese difamador, ¡¿cómo se atrevía a poner en duda su virilidad?!, encima todo lo que había dicho era una vil mentira, solo porque estaba molesto lo atacaba así, pero  eso  Mario no  lo  iba  a  tolerar  y  ahí  iba  a  golpear a ese estúpido que tenía por compañero de selección, cuando lo detuvieron.

_ ¡No Mario, no le hagas caso a este pendejo de mierda! ¡Que hable todo lo que quiera! _ Había aparecido Reus.

_ Y llegó el que faltaba, el que te hace los favores, eh Götze? _ siguió hiriéndolo con ese tono de burla clásico en él.

_ Este bastardo ya me colmó _ amagó otra vez, pero Reus lo agarró con más fuerza _ Suéltame Marco, que lo voy a dejar de hospital _ decía Mario cada vez más encolerizado.

_ Tranquilos muchachos, las cosas no se resuelven peleando _ se metió Per Mertesacker.

_ Yo también lo creo _ apoyaron los dos polacos al mismo tiempo.

_ Ven, a ver quién pierde, enano marica _ Lo retaba Müller, llamándolo con ambas manos, pero delante de él, estaban los defensores del Borussia, también amigos de Götze.

_ Marica tú y todos los hombres de tu familia _ contratacó Mario _ Te digo, que me sueltes  Marco, repitió haciendo otro esfuerzo por liberarse, pero Reus no daría su brazo a torcer.

_ ¡Ya basta chicos! _ gritaron Schmelzer y Hummels al unísono hartos de la actitud de sus colegas.

Pero lo que querían evitar, no pudo ser pues la guerra de insultos entre aquellos dos persistió en demasía y de maneras, cada vez  más agresivas. Los dos defensores del Dortmund siguieron forcejeando con Müller, quienes  no supieron en qué momento se les escabulló el del Bayern y se abalanzó sobre Götze, quien estaba preparado para recibirlo, pues había conseguido soltarse del agarre de Reus, los otros chicos decidieron no meterse, pensando que algunas veces era bueno para en este caso ellos,  arreglar las cosas con un buen par de golpes. A ver sí así, calmaban sus revoluciones. Y ahí estaban los dos, dándose puño limpio en el suelo, cuando ambos consiguieron ponerse de pie,  respirando de forma acelerada, sin pensarlo dos veces Thomas se aprovechó la oportunidad y   empujó a Mario directo a la mesa dónde estaba el tan mencionado pastel, haciendo que cayera sobre el mismo,  arruinándolo por completo… La cara de Miro al ver su creación hecha trizas era para enmarcar y antes de dejar muy en claro su punto de vista, hizo lo que creyó prudente.

_ No lo soportó más, hablaré con Löw sobre este espectáculo tan deplorable, dónde el más perjudicado he sido yo. No hay derecho para esto, y  todo el tiempo que me costó hacerlo. _ Decía sumamente molesto Miro, tirándose los méritos él solo, olvidándose de Tim y continuó _  Espero que el míster tome cartas serias en este asunto y los sancione como es debido. _ Los peleoneros al escuchar que iban a llamar al jefe temblaron en su sitio, ya tenían buenas experiencias con el nombrado.

_ Espera hombre, no te pongas así _ se metió Tim, no había necesidad de informarle al técnico del presente altercado que tuvieron sus compañeros, pero resultó imposible,  Miro no hizo caso y fue por Joachim.

_ Todo esto es tu culpa _ dijo Mario sentando en una silla,  sobándose el cachete izquierdo, que lucía hinchado.

_ Cierra la boca, nadie te manda a tomar mis pertenencias  sin mi permiso _ replicó Müller de pie con el ojo morado producto de un buen derechazo que le había lanzado Mario.

_ ¡Que, no tome nada estúpido! _ Ya no sabía en qué idioma decirle lo mismo _ Además…

_ ¡¿Qué rayos tienen ustedes dos en la cabeza?! ¡¿Son personas o animales de monte?! _ interrumpió casi gritando Joachim, quien había regresado junto a  Klose, que  le había contado todo a la perfección, todos los  jugadores que estaban ahí presentes y Lewa, alrededor de los perequeros, tragaron saliva, sin atreverse siquiera a moverse, Löw ante tal cuadro, solo podía mover la cabeza en señal de desaprobación en lo que continuaba hablando _ Miren yo ya no sé qué hacer, ni que pensar, cada día que pasa están peor. Estas cosas en mis tiempos no se veían. En fin, hablaremos muy seriamente sobre este problema en privado y será ahora. Mario Götze y Thomas Müller, acompáñenme, que vamos a mi habitación _ anunció el míster, pero antes de dar un paso, posó la mirada en dirección a Lewandowski, y le dijo lo que tenía que decirle antes que se le olvidara, el hombre tenía muchas cosas en la cabeza _ ¡¿Y tú, que diablos haces aquí?!

_ Ante tal cuestionamiento inesperado, Robert solo pudo tragar saliva por segunda ocasión y contestó medio titubeante, algo poco usual en él, pero por alguna razón, ese entrenador también lo ponía nervioso _ Bueno yo… yo solo vine a saludar a los muchachos…

_ ¡¿Saludar…?! Sí como no… ¡¿Y esperas que me crea ese cuento?! No  me creas tonto por favor._ Este cree que yo me chupo los dedos de las manos, pensó Jogi _ Desde ya te digo, no quiero que me los vengas a sonsacar con fiestas y esas cosas, que para lo único que sirven es para arruinar la carrera de los grandes jugadores. _ Joachim era muy estricto con sus pupilos cuando de trabajo se trataba y lo mejor es que cuando él hablaba ninguno rechistaba, solo se dedicaban a escucharlo.  _ Ellos tienen que entrenar desde mañana temprano porque van a jugar la final dentro de poco,  no un amistoso, así que hazme el favor de retirarte a tu casa con tu novia, mujer, familia o lo que sea, pero aquí no puedes estar.

_ Pero señor yo…

_ Te hable, no quisiera tener inconvenientes contigo, sé qué harás caso y te irás por la buena ¿Verdad? _ Vaya que maneras, y eso que había cambiado de opinión y quería compartir un poco más con los muchachos, pensó Robert.

_ Está bien señor Löw, será como usted dice _ dijo todo respetuoso.

_ Bien, tomate tu tiempo para despedirte y luego con calma puedes marcharte _ Joachim trató de ser lo más cortés que pudo, después de todo el chiquillo no tenía por qué pagar por su reciente enojo _ Ahora sí, vengan conmigo _ Volvió con Mario y Thomas, pero antes que los tres fueran en dirección a la recámara de Jogi, Marco intervino.

_ Löw, ¡¿Qué le vas a hacer a Mario?!

_ No es de tu incumbencia _ fue la respuesta cortante del jefe, mientras caminaba con sus jugadores siguiéndole el paso, pero Marco era Marco y buscaría la manera de enterarse de las intenciones de su técnico.

_ ¡Madre de Dios, que ha sucedido aquí! _ Exclamó Philipp Lahm, el capitán del equipo,  llegando de repente por el área, es  que había dejado las películas porque le entraron ganas de tomarse un jugo natural y lo que menos esperaba encontrarse fue un dulce hecho pedacitos, las caras de circunstancia de sus colegas y uno invitado para variar. 

_ ¡Él es el responsable! _ Lo señalaron Marcel y Sami a la vez.

_ ¿Yo, responsable de qué? no entiendo nada… _ Eso sí que no se lo esperaba, lo acusaban sin pruebas, esto era el colmo, pensaba Lahm frunciendo el ceño, incómodo.

N/A: Hola chicas y chicos, espero que se encuentren muy bien y que hayan disfrutado de este capi tanto como yo lo hice al escribirlo, me quedó larguísimo, a pesar que la laptop se pone terca, creo que tuve un momento de full inspiración y agradezco a mi musa por ello, y como ven le di participación a toda la plantilla (es que creo que todos son relevantes y es lo justo ¿no? aunque obvio que manejar muchos personajes a la vez, no es fácil así lo parezca, pero a mí me sigue gustando aunque los nombres de los chiquillos son un lio XD…) y por su puesto a Lewangolski, que no podía faltar y que quería dedicarle un capi je, je, je,  y sí que está loquillo el chiquillo.

Escopio y Liu Kang son los personajes del juego de Mortal Kombat por sí, no los conocen, me gusta mucho ese video-juego por eso lo mencioné, además estaría trillado si se ponen a jugar fut con la play lol.

El acento español, es de Mario Gómez, en ese tiempo el pertenecía a la sele alemana, y pues me pareció gracioso que hable así, más o menos creo que me salió y sí no me corrigen. Me encanta como hablan los hermanos españoles, bueno aunque hay variedad de idiomas, dialectos y acentos dentro de España en general me encanta como hablan.

Estrella querida, espero que hayas quedado satisfecha con la abundancia de diálogos y que no te hayas indigestado con los mismos porque está vez creo que me pase.

El próximo lo tengo en la cabeza y tengo que pensar en el que le sigue, ya que antes de los entrenamientos y el final sucederán varios acontecimientos. Les agradecería a los que me leen, que dejen sus comentarios para saber si les gusta el curso que ha tomado la historia, y  sin más que decir, nos leemos muy pronto…