Páginas Amigas

domingo, 8 de agosto de 2021

Capítulo 40 “Un pajarito…”

Capítulo 40 “Un pajarito…”

 

JOE

 

Aquel sábado había despertado con un mal presentimiento, como si algo estuviera olvidando pero aún no sabía el que.

Eran las 10 am cuando dejé el móvil de lado y me dispuse a levantarme, se escuchaban pasos fuera de la habitación, pero no quería levantarme aún, pero se estaba muy a gusto en la cama.

 

Se acercaba la entrega de las calificaciones de fin de trimestre y no podía estar más nervioso, estaba noventa por ciento seguro que me había llevado 2 materias, incluso se podría decir que 3, papá iba a matarme.

 

Iba a pegarme otra cabeceada cuando Nathan entró como torbellino a mi habitación.

 

Nathan: Joe tienes que ayudarme- el enano venía asustadísimo, pero que carajos podía pasar a las 10 de la mañana.- Joeee…- el crio prácticamente se metió en mi cama sin darme tiempo de asimilar todo.

 

Joe: hey Nate, ¿qué sucede? ¿de quién corres?

 

Nathan: de Nicole, tienes que defenderme de ella, te prometo que fue un accidente, lo juro- diablos… de buena mañana debía de enfrentarme a la fiera que es Nicole, sobre todo cuando se enfadaba.

 

Nicole: ¡NATHAN! Voy a matarte- aich, yo que quería relajarme unos minutos más y salen con esto.

 

Nathan: joee- me levanté de golpe de la cama cuando Nicole entró azotando la puerta, se veía furiosísima.

 

Nicole: mejor que te quites Joe, que si no me desquito contigo- anda, que cariñosa había despertado hoy.

 

Joe: yo que tu me lo pienso Nicky, Nathan es 6 años menor que tú, por lo que no creo que sea buena idea hacer cualquier cosa que estuvieras pensando.

 

Nicole: primero, no me digas “Nicky”- sabía que odiaba ese apodo y precisamente por eso lo usaba- y segundo, arruinó mi trabajo de plástica Joe, pasó corriendo a mi lado y derramó el jugo que tenía en la mesa sobre el, llevaba 2 semanas haciéndolo y ahora está arruinado- anda, que pensándolo bien y escuchando la situación yo igual me habría enfadado, no la hubiera tomado con el enano, pero seguramente estaría furioso.

 

Nathan: fue un accidente, lo juro- el enano se veía asustado y con justa razón, Nicole casi hasta echaba humo por el coraje.

 

Joe: por como lo dices yo igual pienso que fue un accidente.- me estaba condenando yo también al decir aquello, pero era la verdad.

 

Nicole: son unos idiotas, le diré al abuelo- dijo eso y se salió rápidamente de mi habitación con Nathan pisándole los talones.

 

Nathan: nooo.- ese ya no era mi problema.

 

Hice la cama, me puse mi ropa para andar por casa y bajé para desayunar.

Al parecer todos se habían parado antes que yo, ya que al entrar a la cocina solo me encontré con la abuela y Maya, quien aún desayunaba.

 

Eve: buenos días, cielo, ¿Qué tal dormiste anoche? ¿pasaste frio?- mi abuela era un encanto y agradecía al cielo que mis padres nos hubieran dejado con ellos que con mis bisabuelos, por que sinceramente no creo que la bisabuela Jenna sea tan amable de buena mañana.

 

Joe: buenos días abue, hola peque- le acaricié la cabeza a Maya y me senté a su lado.- dormí perfecto, inclusive diría que pasé un poquito de calor así que estuvo muy bien la verdad.

 

Eve: me alegro cariño, ¿Qué quieres para desayunar? ¿te preparo unos huevos?- ush, la verdad es que no era muy bueno para comer en la mañana, casi como si mi estómago siguiera durmiendo unas horas más.

 

Joe: comeré un poco de cereal con leche abue, no te preocupes- le sonreí mientras ella me pasaba el cuenco ya con los cereales y la leche.

 

Eve: hoy será un día de relajo, tu abuelo planeó ciertas actividades para tus hermanos pequeños en el jardín, tú puedes participar si quieres o también meterte a la piscina, James y Chris lo harán.

 

Joe: y ¿qué harás tu abue?- no me convencía nada de lo que me había dicho, yo solo deseaba un sábado de relajo.

 

Eve: yo prepararé galletas con Elliot, Noah y Julie, si quieres puedes acompañarnos.- eso sonaba perfecto, además, de esa manera podré comer más galletas que mis hermanos.

 

Joe: yo también te ayudaré abue, seré el mejor ayudante de pastelería del mundo entero.

 

Eve: me parece estupendo escuchar aquello, pero solo podrás ayudarme si es que tienes todos tus deberes hechos- mmm… según mi vasta memoria, no tenía ningún deber en lo absoluto.

 

Joe: estoy libre abue, si quieres empezamos ahora mismo y también podrías hacer tu tarta especial- le miré sonriendo y esperando en el fondo que dijera que si.

 

Eve: mira tú, goloso, ve a cepillarte los dientes y a arreglar esa cara de dormido, yo mientras buscaré a tus hermanitos y prepararé las cosas.- de más está decir que volé escaleras arriba a hacer todo lo que me había dicho.

 

Esta pintaba ser una tarde increíble.

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SAM

Luego de ir al supermercado con el abuelo, esperé un tiempo prudente, tomé un segundo desayuno y les avisé que me iría. Quería aprovechar al máximo el día con Marie.

 

Conducir no estuvo para nada fácil, pero logré llevarnos a ambos a mi casa sanos y salvos, y más que dispuestos a pasarla increíble.

Bajé rápidamente del asiento del chofer y corrí a abrirle la puerta a Marie para ayudarla a bajar. Quería sobretodo impresionarla.

 

Marie: gracias caballero- me sonrió pícaramente y de inmediato sentí un tirón en el bajo vientre- tu casa es muy bonita…

 

Sam: gracias, mis padres la diseñaron y construyeron antes de irnos a vivir todos juntos.

 

Marie: pues hicieron un buen trabajo, ¿no crees que se molesten si saben que estamos aquí?.- sonaba un poco preocupada, pero logré desconcentrarla al tomarla por la cintura y acercarla a mi.

 

Sam: no tienen por que enterarse- le miré deseoso y le di un beso bastante apasionado.

 

Marie: mmm… esto me está gustando cada vez más, ¿que te parece si hacemos algo antes de meternos a la piscina?- escuchar eso fue como si quitara el pie del freno completamente, no perdí el tiempo y la tomé en brazos para llevarla a la habitación de mis padres, ya que era la única con una cama tamaño King en la casa, además si había que pecar, pecaré de manera completa.

 

Esta pintaba ser una tarde increíble.

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RYAN

 

Que tarde o mejor dicho día más agotador estaba teniendo hoy.

Urgencias estaba colapsada y por unos segundos fugases desee estar en mi consultorio haciendo citas de rutina, solo por unos segundos y luego ya volví a la realidad. Estaba resucitando a un paciente que por suerte luego de unos minutos logré estabilizarlo, me hubiera amargado aún más el día si hubiera perdido a un paciente.

 

Estuve de un lugar a otro por toda la mañana y parte de la tarde hasta que por fin tuve unos minutos para comer mi almuerzo, debía recargar fuerzas para lo que quedaba de turno.

Estaba bastante animado charlando con uno de mis colegas, cuando recordé algo importantísimo.

 

Ryan: hey Johnson, ¿puedes decirme que hora es?- con las prisas no me había colocado mi reloj en la mañana.

 

Dr. Johnson: casi las 3 pm, ¿Por qué? ¿Tienes algo que hacer a esta hora?- la sonrisa maliciosa que se cruzó por mi rostro le hizo carcajear- ¿querré enterarme de lo que estás a punto de hacer?

 

Ryan: solamente haré una llamada y le arruinaré la tarde a mi sobrino- vi como negaba con la cabeza mientras reía mientras sacaba el móvil para llamar a mi padre.

 

“llamada telefónica”

 

Allan: ¿bueno?- además de la voz de mi padre, de lejos se escuchaba risas y gritos de mis sobrinos menores, seguramente se lo estaban pasando bomba con el abuelo, hasta me sentí un poco culpable de interrumpirles.

 

Ryan: hola, papá, ¿Qué tal todo por casa?- ¿debía hacerlo? O simplemente dejaba que el mentiroso de mi sobrino se salga con la suya, mmm… que difícil decisión.

 

Allan: ¡Ryan! Todo bien, aquí divirtiéndonos con los peques, ¿ocurrió algo? Tú nunca llamas durante un turno ¿estás bien?- ¡ya decídete Ryan! Es ahora o nunca. Sam iba a lamentar quererse pasar de listo conmigo y el haberme mentido a la cara, era en parte venganza y a la vez preocupación por lo que estuviera haciendo ese crío en este momento, pero por sobretodo venganza.

 

Ryan: papá, no tengo mucho tiempo y la verdad creo que hay algo que tienes que saber…

 

Allan: Ryan me estás asustando, puedes hablar claro y decirme que sucede.

 

Ryan: mmm… puede que ayer cuando volvía de dejar a Keith y Phill en el aeropuerto, escuchara cierta conversación privada que tenía Sam en la puerta de la casa, en la cual le decía a una cierta chica la cual no recuerdo el nombre en este momento, que pasarían un día genial en la piscina en la casa donde sus padres no se encontrarían- paré mi discurso y esperé respuesta, pero todo estaba en silencio- ¿papá?

 

Allan: ese crío va a saber lo que es bueno, iré a casa de Keith de inmediato- anda ya, todo había resultado perfecto- y tú ¿por qué no me dijiste aquello ayer? Nos habríamos ahorrado un millón de cosas que sucederán si hubieras hablado de inmediato.- aich, el plan se había vuelto en mi contra, papá prácticamente me estaba regañando por teléfono y justo tenía en frente a uno de mis compañeros de trabajo, el más bromista y chismoso de los doctores de este hospital.

 

Ryan: solo quería vengarme del crío por haber pensado que yo sería tan estúpido para caer en su mentira.- como pudo darse vuelta todo en mi contra, yo y mis venganzas estúpidas.

 

Allan: eres un irresponsable Ryan, ve tu a saber que cosas estará haciendo ese crio- me ganaré el premio al más estúpido- ya hablaremos tú y yo cuando llegues- y así, sin despedirse mi padre me colgó el móvil. No pensará castigarme ¿no? Después de todo, tengo 36 años… ¡ay! incluso me agarró el nervio.

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Dr. Johnson: ¿estás bien? Parece como si hubieras visto un fantasma, ¿es que acaso te bajó la tensión?

 

Ryan: solo soy un estúpido, no te preocupes- guardé el resto de mi almuerzo, hasta se me había ido el hambre- iré a urgencia, nos vemos allí…

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SHAUN

Acababa de salir de la oficina del rector de la universidad en donde le había entregado oficialmente mi renuncia.

Claramente él entendió completamente, incluso diciéndome que si llegase a volver a trabajar como profesor le buscara. No creo que eso iba a suceder pronto, así que mejor lo olvido.

 

Iba a subirme a mi coche cuando recibí una llamada. Era de la escuela de los chicos.

 

“llamada telefónica”

 

Secretaria: buenas tardes, ¿hablo con el padre de Kyle Adams?- se me heló el cuerpo entero, ¿le habrá ocurrido algo?

 

Shaun: sí, soy su padre, ¿se encuentra él bien? ¿le sucedió algo?- la señorita se demoraba en responderme, y es que por el teléfono se oían varias voces mezcladas, como si hubiera una discusión en ese mismo momento.

 

Secretaria: él se encuentra perfectamente señor Adams, no debe alarmarse.- cuando dijo aquello solté un gran suspiro, sin darme cuenta había aguantado la respiración desde que había hecho la pregunta.- le llamo en nombre del director, ocurrió un incidente con su hijo y uno de sus compañeros y es necesaria su presencia- en ese momento se escuchó un grito bastante claro y conocido a través del móvil.

 

“Kyle: ERES UN MALDITO HIJO DE PUTA KINGLY”- iba a matar a ese chico.

 

Shaun: estaré allí en 15 minutos, gracias por la llamada.

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Me había cabreado, lo que más odiaba en el mundo era que los críos dijeran palabrotas, sobre todo si son mis críos los que las dicen.

 

Llegué a la escuela en tiempo record, diez minutos solo me había tardado. Entré a la oficina principal y de inmediato me topé con algo inesperado. Había dos profesores luchando por separar a mi hijo de su compañero que igualmente se veía luchando por seguir peleando.

 

Shaun: ¡KYLE ALEXANDER ADAMS!- al escuchar mi voz Kyle se paró en seco y su compañero aprovechó esa ventaja para darle un último derechazo en la cara de mi hijo.

 

Kyle: aich… imbécil- conocía lo suficiente a mi hijo para saber que si no fuera por que estábamos en la escuela, su hubiera puesto a llorar por ese golpe y podría afirmar que se hubiera aferrado a mi para llorar a gusto.

 

Me acerqué rápidamente a Kyle para revisarle. No había sido en el ojo por lo que no haría más daño que un poco de hinchazón.

 

Kyle se dejó examinar por mi, pero no pasó desapercibida mi cara de furia, ya le tendría en mis rodillas si hubiéramos estado a solas.

 

Kyle: papi…- fue apenas un murmullo, pero le oí perfectamente y sabia que intentaba hacer, medir mi enfado.

 

Shaun: vas a cobrar de lo lindo cuando lleguemos a casa- también fue un murmullo ya que no quería avergonzarle ni nada, solo advertirle.- ahora quiero que te sientes ahí y no te muevas ni un milímetro, que si no cobras aquí.- Kyle se paró de golpe y fue a sentarse donde le había indicado. Yo por mi parte me levanté y me enfrenté a los maestros que me miraban con asombro.

 

Profesor A: buenas tardes, señor Adams, que bueno que llegó, no habíamos podido mantener a ninguno de los chicos quietos desde hace más de un cuarto de hora.

 

Profesor B: sí, impresiona la verdad- ¿es que acaso este par no era padre? Aunque por su apariencia, parecía que apenas pasaban los 25 años así que seguramente o tenían un bebe o no tenían un hijo en lo absoluto.

 

Shaun: se hablar con mi hijo, lamento su comportamiento y tengan por seguro que cuando termine mi conversación con el director Kyle les dará sus disculpas igualmente.- los profesores se habían intimidado igualmente con mi presencia y es que además del enfado, les sacaba por lo menos cabeza y media de estatura, por lo que si intimidaba bastante.- si me disculpan, entraré ahora mismo.

 

Dejé a los profesores afuera y entré de inmediato en la oficina del director en donde se encontraba hablando con el que supongo es el padre del otro chico.

 

Director: Señor Adams que bueno que llegó, tomé asiento por favor- me senté rápidamente y el director comenzó con la charla.- les he citado de urgencia hoy debido a que tuvimos un grave problema con sus hijos a la hora del receso.- no me diga…- por razones que desconocemos y la verdad es que los chicos tampoco han estado muy colaborativos al respecto, se formó una gran pelea entre los dos llegando incluso a ser necesario 4 profesores para separarles. Demás está decir que esta estrictamente prohibido esa clase de comportamiento en nuestra institución y es por esa misma razón que he tenido que tomar ciertas decisiones al respecto- si ese crio había logrado que le expulsen a esta altura del año escolar iba a saber lo que es bueno.- Señor Adams, Kyle mantiene un registro intachable de conducta, es por eso por lo que por esta vez solo le suspenderé por 4 días- mi enojo se encontraba por las nubes.- no así su hijo Señor Kingly, debido a reincidencia en ciertos comportamientos en su hijo no tengo más remedio que expulsarle definitivamente de este centro, ya que no cumple con los parámetros establecidos.

 

Sr. Kingly: entonces además de ser atacado por el salvaje de su hijo, es mi hijo el que es expulsado, no lo veo para nada justo.- ¿había escuchado bien? ¿acaso le había dicho salvaje a mi hijo?

 

Shaun: pues tengo varios testigos de que su hijo acaba de soltarle un derechazo al mío incluso cuando este estaba tranquilo y sin provocarle, por lo que el salvaje me parece que es otro, y si sumamos que su hijo se ve bastante más mayor que el mío… ¿Cuánto tiene? ¿16, 17?

 

Sr. Kingly: acaba de cumplir 18- maldito mocoso.

 

Shaun: pues el mío tiene apenas 15 años, por lo que bien podría ir a poner una denuncia en su contra- al decirle aquello el hombre se empalideció- pero no lo haré, solo por que sé que esto son cosas de críos, pero no permitiré que vuelva a llamar a mi hijo salvaje.

 

Sr. Kingly: le pido me disculpe, ¿dónde tengo que firmar director?- ambos firmamos nuestros correspondientes documentos y por fin pude llevarme a Kyle.

 

Justo coincidió nuestra salida con la salida de todo el instituto, por lo que nos topamos de inmediato con Sam en la entrada de la institución.

 

Sammy: uff que bien que estás aquí papá, no tenía ganas de caminar a casa hoy- me dio un medio abrazo, pero de inmediato se fijó en la cara maltratada de Kyle- ¿Qué sucedió contigo? ¿Quién te usó de saco de boxeo hermanito?

 

Kyle: él quedó peor que lo sepas- la mirada que le di a Kyle fue suficiente incentivo para quedarse callado.

 

Shaun: tu hermano se metió en problemas, por cierto, tendrás que venir sola a clases los próximos 4 días, por lo que quizás te deje el coche y así me siento más seguro de que nada te pasará en el camino por la mañana.

 

Sammy: está bien papá…- Samantha entendió de inmediato que no estaba de buen humor, por lo que solo calló y ambos chicos se subieron al coche.

 

Íbamos de camino a casa, casi llegando a nuestra urbanización cuando volví a hablar. Todo se había mantenido en silencio hasta ese momento.

 

Shaun: Kyle quiero que apenas lleguemos a casa subas a tu habitación y me esperes allí- pude observar por el retrovisor que la cara de mi hijo se contrajo al escuchar aquello.- y ya que estarás allí aprovecha de desconectar la PlayStation y dejarla sobre tu escritorio junto a tu móvil, laptop y también la tableta.- en ese momento la cara de tristeza de Kyle se convirtió en horror.

 

Kyle: ¿Qué? eso no es justo papá, no fue culpa mía la pelea sino de ese imbécil, ¿por qué quieres quitarme mis cosas?- había subido la voz y pude apreciar como ahora era la cara de Sammy la que se contraía, ella sabía muy bien que no le convenía en lo absoluto ponerse irrespetuoso conmigo.

 

Shaun: ¿no es justo? Mejor te mantienes en silencio Kyle Alexander Adams y haces lo que acabo de ordenarte si no quieres que tu castigo se convierta de 2 semanas a un mes completo.- ya no replicó más, pero pude ver que se mantenía molesto en la parte de atrás.

 

Estaba apenas estacionando el coche frente al garaje cuando Kyle salió de el azotando la puerta en el camino para entrar furioso a casa.

 

Shaun: tu hermano se busca el que me enfade.

 

Sammy: no seas muy duro con el papi, recuerda que es tu pequeño…- el intento de suavizarme de mi hija me sacó una sonrisa.- papi, ¿puedo ir al parque de aquí en frente? La verdad es que no quiero estar allí cuando le castigues.- eso era súper entendible, sobre todo por el hecho que Sammy protegía bastante a su hermano menor desde siempre.

 

Shaun: está bien princesa, pero llega antes de las 7 ¿vale?- ella asintió y salió del coche, seguramente se juntaría con las amigas que tenía en la urbanización y eso me tranquilizaba.

 

Tardé unos minutos en salir del coche, pero finalmente me di la valentía que necesitaba y entré a casa para dirigirme a la habitación de Kyle.

Por suerte Lydia aún no estaba en casa ya que había decidido hacer horas extras para aportar en el pago de los exámenes médicos que debíamos hacerle a Kyle, a pesar de que le había dicho que no era necesario.

 

Subí a la habitación de Kyle y encontré exactamente lo que me esperaba, un crio emberrinchado y sin indicios de haberme obedecido con respecto a la orden que le había dado en el coche.

 

Shaun: te gusta la mala vida a ti me parece ¿no?- la cara del crio me dejó claro que estaba haciendo esfuerzos sobre humanos para no matarme- abajo te di una orden, hazlo.- esperé, pero no hubo indicios de que el crio se moviera- ¿es que acaso quieres un incentivo? Por que no tengo problema alguno tomarme un tiempo para dejarte claro que a papá se le obedece- dije todo aquello mientras me quitaba el cinto. Los ojos de Kyle se agrandaron y por unos segundos vi su duda en si obedecer o no a la orden, pero escogió quedarse quieto y yo ya había perdido la paciencia.- me parece perfecto- con rapidez le tomé del brazo para acercarlo a mi y le estampé el cinturón en su retaguardia. No había sido fuerte, solo quería darle una advertencia y la verdad esperaba que ahora si obedeciera, ya que me estaba costando bastante ser tan duro con mi pequeño.

 

Kyle: auuu- se revolvió en mis brazos tratando de liberarse, pero mi agarre era fuerte y él todavía era un crío.- te haré caso papá, lo juro snif…- había empezado a llorar y prácticamente se me rompió el corazón.

 

Shaun: haz lo que te ordené ahora mismo- le solté el brazo y mientras esperaba que recolectara todas las cosas que le había pedido, me acomodé en su cama y dejé el cinturón a mi lado, le iba a necesitar más adelante.

 

Kyle se demoró 5 minutos en dejar todo aparato tecnológico en la mesita al lado de la puerta. Al hacerlo, se volvió con pesar hacía a mi y esperó mi orden.

 

Shaun: ven aquí Kyle- fui conciso, así era la mayoría del tiempo.

 

Kyle: papii, lo siento mucho enserio, por favor no me pegues snif- mi pequeño se deshacía en llanto y yo estaba a una lágrima más de cambiar de decisión.

 

Shaun: ¿explícame que diablos pasó?- quizás con su versión de la historia podría rebajar un poco su condena.- el castigo te lo llevarás igual, pero quizás me piense un poco la cantidad si es que suena razonable algo de lo que ocurrió hoy.

 

Esperé a que hablara. Se tardó lo suyo ya que luchaba con los hipidos provocados por el llanto, pero finalmente logró comenzar a relatarme la historia.

 

Kyle: es que snif… Kingly y yo siempre nos hemos tenido sangre en el ojo snif…- le vi tan indefenso frente a mi por lo que calmadamente, para evitar que se alterara, le tomé y le senté en mi regazo.- la verdad es que no sé por que es así… y hoy simplemente nos estábamos picando entre nosotros como siempre, pero se me salió hablar mal de su madre y él comenzó a hablar mal de Sammy, por lo que me piqué y me lancé a golpearlo.- no había escuchado absolutamente nada que pudiera salvarle mínimamente del castigo. El crío se había echo suspender por una pila de estupideces.

 

Shaun: Kyle, llevaste demasiado lejos una rivalidad estúpida con otro crío y ¿Qué conseguiste con eso?- le miré serio mientras le paraba frente a mi.- absolutamente nada bueno, te expulsaron- comencé a enumerar las cosas, mientras le bajaba el pantalón y finalmente le recostaba en mi regazo.- seguramente te marcarán la hoja de vida y sabes ¿qué lo peor de todo lo que ocurrió hoy?- dije aquello al mismo tiempo que le bajaba el bóxer y mi pequeño se soltaba en llanto.- conseguiste que papá se enfadara contigo y además te ganaste el castigo más duro de tu vida; y todo esto se pudo evitar si no hubieras caído en las estúpidas provocaciones del tonto ese- ahí ya callé y comencé el castigo.

 

PLAS PLAS PLAS auuu papi noo por favor PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS buaaaa yaaa PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS lo siento snif… PLAS PLAS buaaa PLAS

 

No solía hablar mucho durante los castigos, más bien antes y después de ellos era cuando me soltaba a hablar, además si hubiera hablado de seguro se me habría cortado la voz por la lástima que me da hacer esto con mi pequeño, o con cualquiera de mis hijos. 

 

Kyle: papaaa por favor buaaa ya no más, lo siento mucho de veras sniff, no volveré a hacer nada parecido, pero no me des más sniff.- maldito mocoso, me hacía muy difícil todo esto.

 

Hice oídos sordos y continué.

 

PLAS PLAS PLAS buaaaa PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS buaaa lo si… siento sniff…. PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS

 

Paré las palmadas y levanté a mi pequeño de mi regazo, aún no había terminado, pero creía que debía darle un momento para que se tranquilice.

 

Kyle al levantarse iba directo a subirse los pantalones pero le detuvo en el acto.

 

Shaun: eso se queda ahí campeón, aún no acabamos, pero quiero que te pongas de cara a la pared y reflexiones lo que ocurrió el día de hoy, yo volveré en 15 minutos- mi peque me vio con los ojos más tristes del mundo entero, pero fui fuerte y le envíe a donde le había dicho.

Una vez asegurado de que estaba allí, salí de su habitación y me dirigí a la cocina, necesitaba un vaso lleno de agua fría.

Estaba llenando el vaso y en ese momento llegó Lydia del trabajo.

 

Lydia: cariño, no sabes el día tan agotador que tuve hoy- si supiera ella el mío. Dejó su bolso en la encimera de la cocina y me abrazó de espaldas. Podía sentir su barriga chocándome la espalda baja, estaba creciendo mucho y muy rápido.- te extrañe mucho hoy- Lydia comenzó a besarme la espalma mientras movía sus manos suavemente por todo mi torso. Debía detenerla antes de que todo esto se convirtiera en algo más. Benditas hormonas del embarazo.

 

Shaun: Ly, cariño no ahora, debo contarte algo…- me di vuelta y le di un casto beso en sus suaves labios. Rayos como desearía que nada de lo de hoy hubiera ocurrido.

 

Ella me puso atención y yo comencé a relatarle todo lo que había ocurrido.

 

Shaun: y pues… le han suspendido de la escuela por 4 días…- al terminar no podía descifrar que estaba sintiendo mi esposa, su rostro se mantenía apacible.

 

Lydia: ¿fuiste muy duro con mi bebe?- mi linda esposa como siempre en vez de enfadarse con el crío, se compadeció de él.

 

Shaun: lo suficiente y aún lo seré más ya que pensaba darle unos cuantos con el cinturón para que no se le ocurriera en la vida volver a pelearse con alguien.- al nombrar el cinturón Lydia se espantó. Sabía que no le agradaría y es que era la primera vez que lo usaba con mis hijos. 

 

Lydia: Kyle está muy pequeño para que uses eso con él.- aich, la había enfadado. Malditas hormonas del embarazo.- ni lo pienses, ya fue suficiente con lo que me acabas de relatar, tiene 15 años Shaun por dios.- vamos que a mis 15 años mis padres no se pensaban 2 veces en utilizar algo más que su mano para enderezarme. Aunque claro, yo era 100 veces peor que mi pequeño.- ahora irás a perdonarle y a consolarle, debe estar tristísimo por haberle dejado mirando la pared, sabes como es Kyle- básicamente era un pan de dios si es que no le daba el cuarto de hora rebelde o estaba con algún amigo o primo.

 

Shaun: al parecer no tengo otra opción ¿no?- su mirada me lo dijo todo- ya, mamá osa, no torturaré más a su pequeño, lo prometo.- me agaché a darle un pequeño beso y volví a la habitación de Kyle.

 

Dentro me pude percatar que aún no podía calmarse y dejar de llorar… era un monstruo.

Me acerqué rápidamente a él y le subí toda su ropa para poder cargarle a gusto y consolarle.

 

Shaun: yaaa mi pequeño, no llores más- aprovechando mi estatura y fuerza, le cargué en brazos y me paseé por toda la habitación esperando que finalmente se lograra calmar.

 

Kyle: lo… lo… lo siento sniff… papi… te ju.… juro que no… volveré… snif… a pelear… con… absolutamente nadie snif… ¿me perdonas snif…?

 

Shaun: estás perdonadísimo mi vida, te creo, anda ya no llores más que si no papá llorará también, por que me duele en el alma verte llorar de esta manera pequeño.

 

Kyle: pues bien… que me diste duro… y no te dolió tanto… papi- me peque había vuelto, y por suerte no sonaba enfadado.

 

Shaun: pues bien que te lo merecías hijito- le miré sonriente y le di un peso en la mejilla.- anda ya, sin lágrimas.

 

Kyle: ¿papi? ¿De verdad me quitarás todas mis cosas?- le miré pensativo, pero finalmente me dije que era lo justo.

 

Shaun: dos semanas Kyle y no está a discusión- hizo un puchero gracioso, pero no insistió.- anda vamos a ver que podemos preparar de almuerzo hoy, un pajarito me dijo que si te comes todo quizás haya helado de postre- era un poco infantil, pero ese era mi pequeño.

 

Kyle: tengo quince años papá… pero si quiero helado, anda vamos…

 

Como le conocía…

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