lunes, 24 de diciembre de 2018

Somos del mismo mundo capitulo 2




Capítulo 2

Estaba muy cansado cuando sonó el despertador pero tenía que despertarme, no es como si pudiera darme el lujo de faltar al trabajo y esperar a que me despidieran. Recordé la charla de anoche con mi hermano, tenía que darle dinero para que le sacara copia al libro de ciencias, en otro país hacer eso era ilegal pero acá es una buena alternativa cuando no puedes darte el lujo.

Busqué en mi billetera, tenía poco dinero pero el viernes me iban a pagar así que lo desperté y le pasé lo que costaban las fotocopias.

-GRACIAS GRACIAS GRACIAS -Gritó, él era mi hermanito y si podía ayudarlo lo iba a hacer. Le sonreí y nos fuimos a desayunar de nuevo café con pan.

Ese día mi papá tenía turno tarde así que podía hacernos el almuerzo, yo llevé a mis hermanos al colegio para luego llegar al trabajo.

-Buenos días Martiza, le dije a mi jefe -Ella me saludó, al parecer hoy todos tenían mejor humor. Fue en general un buen día, no podía quejarme, incluso me compartieron almuerzo, tuve tiempo para ir por mis hermanos y como ya había comido y a ellos mi papá les iba a servir pude ir temprano al colegio, iba a estudiar un poco para mi examen de español.

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Me despertó la luz del sol, miré pronto mi celular y me cuenta que eran las 10 AM, había faltado al colegio. Maldije en voz alta y después bajé las escaleras bastante molesto.

-¿POR QUÉ NADIE ME DESPERTÓ? -Grité, en verdad estaba enojado.

-Usted nos pidió que no lo hicieramos joven -Dijo con calma una de las señoras. -¿Desea desayunar ya?

-Ok -Dije -Quiero solo fruta ¿si? -Las señoras asintieron y corrí a mi cuarto a ducharme antes de pensar qué hacer, mis papás me matan donde sepan que no fui al colegio por quedarme dormido… aunque si lo pensaba con más lógica, no tenían porqué darse cuenta.

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El examen estuvo fácil, pensé. A veces pensaba que en este colegio no nos exigían nada... era como si no les importara realmente si aprendemos, aunque tenía sentido, no importa mucho que los pobres aprendan.

A la hora del descanso el profesor nos llamó a mi y al equipo de baloncesto, nos dijo que pronto empezaría la copa así que debíamos practicar un poco luego de las clases.

Nuestro primer entrenamiento fue genial, empezaba a pensar que tenía talento jajaja si lograbamos avanzar hasta  final de la copa incluso podríamos conseguir un buen futuro, mis compañeros solo querían perder clase pero igual se esforzarían… tengo que aprender a dejar de hacerme ilusiones falsas.
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Decidí solo ir al colegio para el entrenamiento, el día anterior no había ido y yo era el capitán, este año teníamos que ganar porque era mi último año. Todo el entrenamiento di lo mejor que tenía, al final me quedé tratando de hacer cestas.

-Federico buen entrenamiento -Dijo el entrenador -Pero no faltes más, necesitamos llegar con toda al campeonato, nuestro primer juego es en una semana.

-Sí señor, no se preocupe, en este momento lo que más me importa es ganar. -Dije muy serio, no es que del basketball dependiera mi vida pero tener un trofeo en tu cuarto nunca está de más.

-Esa es la actitud, mentalízate, van a ganar el campeonato -Dijo el entrenador antes de irse, yo me quedaría un rato más practicando.

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Cuando llegué a la casa todo estaba tranquilo, pude hacer las tareas y dormir. Necesitaba descansar y tener suerte si queríamos avanzar en el campeonato….

Ese fue un gran día porque todos estaban de buenas y mi mamá trajo comida china para cenar, lo cual era bastante especial porque siempre comíamos pan con café rendido.

-Mamá estuvo delicioso, en serio gracias -Dijo Hernán, mientras mi hermana y yo asentíamos.

-Me alegra que les gustara -Dijo mi mamá Alegre. -¿Gabriel me puedes colaborar lavando los platos? -No tenía que pedirme que lo hiciera porque de todas formas lo tenía que hacer, sin embargo asentí.
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Luego del entrenamiento llegué a bañarme, estuve viendo jugando en línea hasta las 3 am, cuando escuché que mis papás llegaron.

-Buenas noches, digo días jaja -Escuché decir a mi papá, se dirigía creo que a alguna de las señoras que ayudan con el aseo.

-Buenas noches señor, buenas noches señora -Respondió ella, me acerqué un poco a las escaleras, esperaba que ninguna de ellas le dijera a mis padres lo que pasó hoy.

-¿Qué tal ha estado todo? -Preguntó mi mamá, ella siempre hacía ese tipo de preguntas.

-Bueno, los muchachos se portaron bien, ya sabe, ellos son muy educados -Dijo y yo sonreí, ellas nunca me defraudan.

-¿Segura? ellos tres no son peras en miel -Dijo mi mamá y yo rodé los ojos.

-Si, muy segura. -Respondió y decidí ir a mi cuarto a dormir, mañana los saludaba.
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Anoche fue un gran día y por fin era sábado, solo tenía que ir al trabajo y después tenía tiempo libre para jugar futbol un rato.

-Buenos días -Llegué sonriente al trabajo, era difícil que hoy fuera un mal día para mí e incluso Maritza estaba de buenas porque me contestó amable, cosa extraña en ella.

-Gabe hoy necesito que laven la tela, si acaban pronto pueden salir temprano -Asentí y tratando de concentrarme mucho empecé a trabajar, salimos a las 11 am. El resto de la tarde me la pasé jugando futbol.

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Baje a las 8 am a desayunar, solo que apenas llegué al primer piso de la casa mi papá estaba muy serio en la mesa mirando a mis hermanos, algo había pasado. De inmediato me asusté, creyendo que se habían dado cuenta que ayer falte al colegio.

-Hola -Dije bastante tímido.

-Hola hijo, ¿Qué tal estuviste estos días? -Dijo mi papá poniéndose de pie y abrazándome.

-Super, ¿pasó algo? -Pregunté sonando algo nervioso.

-Hablamos después del desayuno -Dijo mi mamá, no sabía si algo tenía que ver conmigo.

El desayuno fue bastante silencioso teniendo en cuenta que hacía días no veíamos a nuestros padres. Cuando terminamos caminamos en silencio hasta la sala y ahí explotó todo.

-Bueno, quiero que me digan AHORA quien de ustedes cogió sin permiso la tarjeta de crédito de su mamá e hizo una compra de 2000 dólares en una “mistery box” de amazon. -Respiré tranquilo, yo no había hecho eso y no tenía nada que ver con faltar al colegio.

-Por favor niños, digan quién fue… eso no estuvo para nada bien, ustedes saben que es importante que nos pidan permiso para usar tarjetas. -Dijo mi mamá mucho más calmada que mi padre.

-Yo no fui -Dijo Isaac -Solo que sonó bastante falso, seguro había sido él… David me había prestado 1500 dólares en estos días, no tenía ningún sentido que alguno de los dos fuéramos.

-Pues yo tampoco fui -Dije con fastidio -Igual yo mi propia tarjeta de crédito, no tiene sentido que use la de mi mamá.

-Ni yo -Dijo David, con las miradas de mis padres puestas en él. -Ehh yo también tengo una tarjeta y estoy seguro que usaría esa antes de coger la de alguno de ustedes dos.

Mis papás se miraron algo disgustados así que mi papá se puso de pie en frente de nosotros y volvió a preguntar subiendo ya un poco la voz.

-Segundo intento, ¿quién cogió la tarjeta de su mamá? no me hagan llegar al tercero.

Hubo un silencio y eso ya me estaba molestando, si me llegaban a regañar por algo que no hice me iba a enojar demasiado. Vi como mi papá se quitó el cinturón, era claramente una amenaza que seguro no cumpliría, jamás nos había pegado con eso y además David y yo ya éramos bastante grandes para eso.

-No me jodas papá, yo en verdad no fui -Dijo David poniéndose de pie dispuesto a irse, pero antes mi papá lo cogió del brazo y le soltó un correazo, jamás lo había visto tan molesto.

ZAS

-AU -Medio se quejó mi hermano bastante sorprendido, los tres estábamos atónitos y pude notar que Isaac estaba muy nervioso, era obvio que él era el culpable.

-No me hables así David, ve a tu habitación ahora -Dijo mi papá y antes de terminar la frase mi hermano ya había salido corriendo, era muy gallina.

-Fui yo papá, perdón -Dijo Isaac en un tono bajo y todo lo demás fue muy rápido.

Mi papá lo cogió del brazo, lo puso sobre sus rodillas, le bajó el pantalón y comenzó a darle nalgadas. No estaba usando el cinturón pero si se notaba que lo hacía con más fuerza que algunas veces anteriores.

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-Auu auu yaa -Gritaba mi hermano, yo estaba en shock, quería salir corriendo pero no podía. Estuve así hasta que mi papá se detuvo y puso de pie a un Isacc con la cara roja y llena de mocos.

-Perdón buaa

-No quiero que vuelvas a coger nunca las tarjetas sin pedir permiso, si lo vuelves a hacer te doy la paliza de tu vida -Woow que bienvenida a casa nos habían dado, me enojó la actitud tan tosca de mi padre por lo que me levanté y me fui a mi habitación. Escuché que mi mamá me estaba siguiendo por lo que apuré el paso, pero igual no alcancé a cerrar la puerta antes de que entrara.

-Federico hijo, lamento que hayas visto eso. -Empezó mi mamá.

-Humm chevere la llegada de ustedes, ¿no? -Dije con ironía.

-Mira, tu hermano no tuvo porque coger mi tarjeta… con esas cosas no se juega -Siguió mi mamá tratando de explicarse.

-Grr -Dije mientras rodaba los ojos.

-Está bien, cuéntame mejor como te fue en estos días -Preguntó mi mamá.

-He estado practicando mucho, quiero ganar el torneo de basketball -Dije, era cierto.

-Claro que lo harás hijo, ustedes son los mejores… no dudes eso nunca. -Dijo y eso me dio bastante ánimo -Si quieres yo podría ir a verte a alguno de tus partidos.

-Jajaja no gracias mamá, eso es muy freak -Dije pero en fondo si quería que fuera.

-Como prefieras Fede ¿Quieres helado? -Dijo mi mamá, yo asentí y ella salió de mi habitación.
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Pasaron tres semanas y logramos avanzar hasta la semifinal, nos sentíamos imparables, ya veía el trofeo cerca y entonces el profesor nos dio la noticia, no sabía si era buena o mala.

-Muchachos, solo nos quedan dos partidos y ustedes han logrado lo que nunca hizo nadie de este colegio… son el mejor equipo que he entrenado y deben creer en sus capacidades, no se dejen de nadie, nuestro próximo rival es

-¿QUÉ?  -Ese era el mejor colegio de la ciudad, ahí solo estudiaban niños ricos hijos de mami y papi y para colmo de males tendríamos que ir hasta allá, a su territorio.

-Yo no quiero jugar contra riquillos -Dijo Kevin molesto -Ya perdimos, no creo que nos dejen ni cruzar la puerta de su super colegio.

-Yo tampoco -Me sorprendí por lo que dije pero nosotros éramos de mundos distintos, no podíamos jugar contra ellos.

-Dejen esa mentalidad derrotista chicos, ustedes pueden ganarles a esos chicos jugando limpio, son buenos.

Después nos dio un discurso tan bueno que nos terminó convenciendo e incluso logró que el colegio accediera a darnos transporte para ir ese día, aunque no podía negar que si estoy asustado.

Cuando llegué a la casa le conté a mis papás, ellos me dijeron algo parecido al profesor, que nosotros podíamos ganar y que no tuviéramos miedo, yo jamás había ido a esa zona de la ciudad, o bueno sí, pero solamente al trabajo de mi papá que era en una empresa, quedaba a dos horas de distancia.

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Por fin había llegado el día de la semifinal, era en el colegio, me puse el uniforme con la sudadera del equipo y fui a hablar un rato con mis compañeros, estaban hablando sobre el rumor de que íbamos a jugar contra un colegio público pero no les creía, nosotros siempre jugabamos contra colegios privados.

-Vale, la verdad yo no creo que traigan a esa gente hasta acá -Dijo Mariana, yo estaba completamente de acuerdo.

-Yo tampoco, ellos tienen otros torneos -Dije bastante seguro. Y entonces Velasquez nos comentó que el bus del otro colegio estaba en la puerta, fuimos corriendo a conocer a nuestros rivales porque el entrenador había dicho que era una sorpresa.

-¿QUÉ?-Gritamos al tiempo… era un colegio público.

-Parecen tontos, ellos no muerden ni nada -Dijo el entrenador, algunos de mis compañeros del equipo le dieron la razón pero yo no.

-YO NO VOY A JUGAR CONTRA ESA GENTE -Grité, claro que ellos se dieron cuenta, nosotros no íbamos a jugar contra ellos.
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Fueron más de dos horas de camino hasta llegar al colegio, estábamos ansiosos, teníamos puesta la sudadera del colegio con la pantaloneta y una camiseta blanca, no había dinero para comprar uniformes así que con esto nos conformabamos.

Apenas nos íbamos a bajar un chico empezó a gritar que no iba a jugar contra nosotros, lo cual me enojó bastante, apenas se abrió la puerta del bus fui a encararlo.

-¿Mucho miedo de jugar con nosotros? -Dije, el chico me miró de arriba a abajo para después contestar.

-Por supuesto que no, solo que no es una competencia justa… claramente estamos por encima de ustedes -Contestó y algunos de sus amigos idiotas se rieron, pero quién rie de ultimo rie mejor, ya verá.

4 comentarios:

  1. Bueno ya quisiera ver cómo les va a estos chicos ricachones. Buen capi.
    Síguelo pronto. Besos a todos los que siguen el blog y feliz año nuevo.
    Grace

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  2. Wow,estoy leyendo los capítulos de una vez y es muy buena esta historia 🙂😉
    Odio a la gente que se cree más por tener un poco más de dinero. Ojalá los chicos les ganen a los "riquillos"

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  3. Ok te voy a tener que ir a confesar que no había leído este capítulo!!
    Jajajaja lo siento y te acababa de decir hace pocos días que si jajajaja
    Bueno pero me gustó mucho y ahora sí ya puedo leer el 3 y ya le voy a entender!!
    Pobre chico que lo castigaran enfrente de su hermano aunque si se pasó con esa compra que hizo!!
    Y pues no es justo que juzguen a los chicos por ser de escuela pública!!
    Me cayó muy mal que les dijeran que no estaban a su nivel de los ricachones 😒😒

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