Capítulo 40
Nostalgias y pasado desde una perspectiva diferente
Vi como Camilo se ponía de pie y salía corriendo
seguramente huyendo gracias a la reacción de mi hijo. Me quedé quieto unos
minutos analizando todo, el incendio había sido “provocado” de forma indirecta
por Camilo, sus primos querían ayudarlo pero lo hicieron de la peor forma. Si
bien la cosa había empezado por un capricho suyo no era su culpa, esa no era su
intención… pero aun así noté que él se culpaba de todo, la depresión que tiene
es tal vez más grave de lo que imaginé.
Cuando al fin reaccioné, salí corriendo lo más
rápido que pude tratando de alcanzarlo pero, tardé demasiado ni quiera había
visto la dirección en que se había dirigido. Respiré profundo, tenía que
encontrar a Camilo antes de que se le ocurriera una locura solo que primero
debía hablar con Patrick, quería que todo le quedara claro antes.
Entré a la casa y lo vi quieto, aún tenía cerrado el
puño y en su cara se veía ira, ira que no entendía muy bien porque se trataba
de gente que no conocía, de la que incluso tenía formada una idea diferente. No
quería tomar una mala decisión así que lo mire fijo a los ojos y le ordené algo
serio que se quedara dentro de la casa mientras yo iba a caminar un rato.
Salí y empecé a mirar con detalle el lugar, todo era
tan Gloria… mi hermana, la extrañaba en demasía, extrañaba el ambiente,
extrañaba a mis padres y otros hermanos, quisiera que mis hijos hubieran
conocido a sus primos y a Camilo en otras circunstancias, incluso llegué a
sentir que mis ojos estaban llenos de lágrimas. Pero al mismo tiempo tenía
claro que si el incendio no hubiera pasado yo seguiría con mi vida, alejado de
acá, lo mismo que mis hijos.
¿Por qué había sido esa la reacción de Patrick?
Fácil, era mi culpa, nunca fui claro con ellos a la hora de explicar la llegada
de Camilo y mi pasado, seguro ellos pensaban que en dado caso de que no hubiese
sucedido el incendio ellos conocerían a mi familia y serían aceptados como lo
era Camilo por ejemplo, porque eso fue lo que les di a entender cuando les
expliqué de dónde soy realmente. Pero no era verdad, mis padres jamás los
hubieran mirado con buenos ojos, ellos odiaban a Talia, mis hermanos tal vez
los habrían tratado mejor pero los chicos, los verían como sus extraños primos porque
como noté desde el día que vi a Camilo, él tenía mucha influencia de mis
padres.
No es que mis padres fueran malas personas, solo que
no soportaban la gente que los traicionara y para ellos, yo había hecho eso al
elegir a mi esposa sobre ellos y la vida que me ofrecían. La realidad era que
ellos no querían nada conmigo y mucho menos con mis hijos, yo los había
traicionado al elegir tener a Emma y no me lo iban a perdonar… mis hijos nunca
entenderían la seriedad de la promesa de mi padre cuando me fui, en serio jamás
iba a poder volver a ser nada como antes y ellos no iban a ser vistos como mis
hijos legítimos.
Siempre había sido complicado pensar en esto, era
difícil aceptar como mis padres veían a mi familia, y lo era más difícil cuando
mis hijos siendo niños me preguntaban por sus abuelos, yo no podía decirles que
no los querían. Recuerdo una vez que los tres preguntaron, cuando Noah tenía 5
años, Emma 9 y Patrick apenas estaba empezando a pronunciar bien…
(Trece años atrás)
-Papa m'a laissé
comme devoir à faire un arbre généalogique (Papá me han dejado de tarea hacer
un árbol familiar) -Llegó corriendo Emma
con unas cartulinas hasta mi asiento. – Noah
me aide mais aucun d'entre nous se souviennent nos grands-parents (Noah me
estaba ayudando pero ninguno de los dos recordamos a nuestros abuelos).
Mire a mis hijos sin saber bien que decirles así que
cambie rápido de tema, tratando de pensar rápido.
-Ces dessins sont très beaux mes enfants (Que lindos dibujos mis niños)–Dije ante
la mirada confundida de mis tres hijos, habían dibujado a “sus primos” y “sus
abuelos”.
-Papa comment
est-ce sont mes grand-papis? (¿Cómo son mis abuelitos?) –Recuerdo que su forma de preguntar me
enterneció por dos motivos; el primero Patrick había usado de forma correcta el
“est-ce” y segundo, había inventado una palabra sonaba en español, sabía que no
había sido un intento de hablar en mi idioma nativo porque no conocían el
idioma, pero aun así me generó algo de nostalgia su frase, incluso me imagine a
mis hijos hablándome en mi idioma, solo que él lo decía porque a sus abuelos
solía llamarlos “mamie” y “papi” algo que al inicio me confundía, pero que con
el tiempo entendí, esa es la forma que los niños belgas y creo que también
franceses usan para referirse con amor a sus abuelos, no a sus padres.
-Bwaaa Noah m'a
frappé (Bwaaa Noah me pegó) –El llanto de Patrick me
sacó de mis pensamientos, noté en seguida que lo había hecho porque ellos
creían que mis padres habían muerto y que me iba a poner triste si me hablaban
de ellos, lo cual sinceramente me enternecía y llenaba de emociones.
-Noah faire
c'est trop mauvais (Noah hacer eso está muy mal) –Noah
asintió, pensé en decirle algo más pero el teléfono sonó, era un número de
Colombia, en ese entonces mis hermanos a veces me llamaban a invitarme o a
intentar conocer a mis hijos, en esa ocasión fue Gustavo.
Llamada
telefónica:
-Bonjour –Dije
haciéndome el desentendido.
-¿Edgar? hermano
hablas con Gustavo –Le hice señas a mis hijos para que se alejaran, necesitaba
que creyeran que era una conversación de negocios.
-Hola Gustavo,
¿Cómo le ha ido? –Me trabé un poco al hablarle, no porque no recordara el idioma
sino porque Noah no se había ido y me miraba impactado, estaba hablando un
idioma que él no entendía.
-Excelente, veo
que ya se te olvida el español… quería preguntarte ¿Qué es de tu vida? y
contarte un poco de cómo son las cosas acá. –Una parte de mi moría por saber de
mi familia y mis sobrinos, pero otra no podía aceptarlo, yo tenía que olvidar
mi pasado para que mis hijos pudieran tener una buena vida sin rechazos de
nadie.
-Mis hijos están
bien Emma ya cumplió 9 años, Noah tiene 5 y Patrick 3 –Noah se veía confundido,
como si yo estuviera diciendo mal la edad de su hermano, me dijo unas tres
veces que Patrick tenía 3 años y no 131 él sabía los números hasta
el 200 porque Emma se los había enseñado.
-PATRICK A TROIS NON TRECE!
-Que tierno es
tu hijo, deberías enseñarle los números en español para que no entienda mal
jajaja –Se rio un poco mi hermano. –La hija de Gloria ya tiene 4 años, es tan
tremenda como ella, mis hijos ya tienen 3 y 1 y el hijo, Camilo, de tu
hermanita ya cumplió 2 años es muy avispado, se parece a usted a esa edad. –Me
surgía mucha curiosidad conocer a esos niños, eran mis sobrinos de todas formas
y podían ser amigos de mis hijos… pero por mis padres nada era posible.
-Me alegra que
los niños estén creciendo, mándele saludes a mis hermanos, debo irme, mis hijos
me están llamando –Mentí y colgué tan rápido como pude.
-Papa quelle langue
tu etais parlant? (Papi en ¿Qué idioma hablabas?) –Noah me miro con sus intensos ojos
azules lleno de emoción, le parecía algo innovador. –Il était l'anglais, non? (Era
inglés ¿Verdad?). Quise aprovechar su error a mi favor para que mis hijos
empezaran a tener más claro “mi pasado” pero tergiversado, para que nunca
pudieran llegar a saber mi origen real y buscaran a mis padres, que seguramente
los rechazarían.
-Comment saviez-vous? C'est une langue que vos
grands-parents et moi parlons très bien (¿Cómo
supiste? Ese
es un idioma que tus abuelos y yo hablamos muy bien) –Mi
comentario iba dirigido a que pensara que yo era de un país anglosajón, igual
tampoco era mentira que mis padres manejaran ese idioma.
-Emma, Patrick mes grands-parents parlaient l´anglais
(Emma, Patrick mis abuelos hablaban
inglés) –Les dijo a mis otros dos hijos y Emma salió corriendo por un
mapamundi, me sentía un fracaso mintiéndole a los niños, pero solo quería
protegerlos, ellos podrían tener una buena vida sin conocer a mis padres, no
les faltaba amor ni nada material además tenían unos abuelos que si los
querían.
-Où ils ont été? Parce que vous n'êtes pas d'ici (¿De donde eran? Porque tú no eres de
aquí) –Mi acento siempre fue diferente al de
ellos y eso a veces les parecía inquietante, ellos no conocían muy bien los
acentos latinoamericanos, ni siquiera distinguían el español así que por mi
apellido ellos decidieron que yo sería inglés.
-Ici? (¿De
aquí?) –Preguntó Noah señalado a Inglaterra, yo asentí para acabar pronto
con la mentira. Me impresionaba un poco que ellos siempre hablaran de mis
padres en pasado, como si estuvieran muertos y como si yo fuera hijo único, era
una idea que ellos mismos se habían creado para solucionar sus preguntas, su
idea era algo así como: “mi papá es
extranjero pero es de Inglaterra, era hijo único porque no tenemos primos ni
tíos y los abuelos están muertos pero mi papá no nos cuenta que les pasó porque
se pone triste”. Ahora, pienso que no debí seguir alimentando esa idea sino
aclarar la verdad, pero no quise hacerlo porque no pensé que un incendio
cambiaría todo.
-Comment imaginez-vous vos grands-parents? (¿Cómo imaginan a sus abuelos?) –Les
pregunté y con sus ideas dibujamos a “los abuelos ingleses” para la tarea de mi
hija, con eso callé bastante sus preguntas y me ayudó a mí a crearme la idea de
que Colombia ya no era mi país, y que ni
siquiera era un lugar al que yo pertenecía.
Desde ese momento yo empecé a actuar mal, mis hijos
crecieron pensando en que sus abuelos los hubieran querido si estuvieran vivos,
porque yo no era capaz de contarles bien la historia, creo que incluso pasaron
años para que vieran a Colombia como un país muy muy lejano del que no sabían
nada.
A medida que pasó el tiempo ellos crecieron y se
quedaron con la idea que formaron de niños, ya no les importaba mucho mi pasado
y a mi cada vez me afectaba menos, había dejado de hablar con todos mis
hermanos hasta que me llegó la carta de mi padre donde decía que no quería nada
de mi o de mis hijos. Ese año tal vez más que nunca estuve muchas veces a punto
de viajar, volver a conocer a mi familia y mostrarles la mía solo para tratar
de arreglar algo con mis padres porque dudaba que ellos pudieran ser crueles
con mis tres hijos, pero el miedo me pudo, yo no podía aceptar el rechazo hacía
ellos y logré olvidarme de la idea hasta que un día me hicieron la llamada que
cambiaría mi vida y la de mis hijos.
La llamada ha sido una de las más frías que he
escuchado en mi vida, me lo dijeron todo sin anestesia y al final me decían que
uno de mis sobrinos estaba vivo, pero solo me dijeron su nombre, Camilo. En ese
momento yo estaba en el estudio, creo que contesté que tomaría lo antes posible
un vuelo hacia Colombia y después lloré como un niño pequeño… no podía creer
que jamás volvería a hablar con mis padres o hermanos, me aterraba la idea de
contarles a mis hijos la verdad, no era para nada sencillo pero tampoco podía
dejar de lado a mi sobrino, era un niño de 16 años que acaba de perder a toda
su familia, debía actuar como adulto y por mis hermanos cuidarlo.
No sabía cómo iba a ordenar todo, tenía que
contarles a mis hijos la verdad y esperar a que aceptaran a su primo, Camilo
probablemente no hablaría francés y también estaría muy desconfiado, yo sabía
que no podía llegar y decirle “hola amigo, soy tu tío perdido vámonos a
Bélgica” pero fue algo que al final hice porque no sabía cómo hablar con un adolescente
desconocido.
Cuando al fin me calmé, decidí hablar primero con
Talia porque sabía que ella me ayudaría y daría un buen consejo. Ella me dijo
que debía traer a Camilo a la casa y ambos pensamos una manera no tan brusca de
decirle a mis hijos que traeríamos a su primo colombiano a vivir con nosotros.
Llamamos a Emma y cuando todos estuvimos reunidos les conté, los tres me
aturdieron con preguntas… ninguno de ellos podía creer que tuvieran origen
latinoamericano, Noah fue el peor se lo tomó, incluso tuve que darle una paliza
para que se calmara y dejara que le explicara, mi viaje se pospuso unos días
mientras les contaba a mis hijos la situación y estuviera seguro de que
tratarían con calma a Camilo.
Les conté solo una parte de la historia, les dije
que su madre y yo nos habíamos conocido en Colombia cuando yo era universitario
y disfrutaba un poco de la fiestas, les comenté que su mamá estaba de
intercambio por unos meses y que me había parecido muy interesante, en ambos
había nacido el amor y poco antes de que ella volviera a Bélgica me contó que
estaba embarazada. Decidí decirles que a mis padres no les gustó la idea de que
tuviera un romance con una chica belga entonces sin hablar nada de que ellos
querían que Talia abortara, les explique que yo hui con ella a Bélgica y deje
de hablar con ellos.
No les dije que al principio aún tenía relación con
mis hermanos ni tampoco que mis padres no querían saber nada de mi o de ellos
porque no quería que se sintieran mal o rechazados, les expliqué que comenzaríamos
a vivir con su primo, un chico colombiano de 16 años (del que ni quiera sabía
de quien era hijo) que probablemente estaría triste por lo que había pasado y
no sabría francés, por lo que necesitaba que ellos fueran lo más comprensivos
posible.
Cuando al fin fui al aeropuerto mis hijos me habían
prometido ser pacientes y amables, cosa que no cumplieron al inicio e igualmente,
yo trate de comprometerme a hacer sentir a Camilo en casa, cosa que
tampoco hice mucho porque muchas de las reglas de la casa para él eran extrañas
lo mismo que los castigos, a veces trataba de ser comprensivo pero no quería
que sobretodo Patrick copiara la rebeldía de Camilo.
Cuando llegué a Colombia estaba impactado de lo
mucho que todo había cambiado… se veía más moderno y tranquilo. El hospital
donde estaba Camilo estaba custodiado porque al principio se pensaba que había
sido un atentado contra ellos. Todo me parecía muy eficaz, solo fue que me
presentara para que un policía me contara todo… en ese momento Camilo no había
despertado aun pero el ICBF ya estaba haciendo los papeles para que pudiera
estar con él, supongo que no querían que se quedara solo por ahí teniendo en
cuenta que cuando cumpliera 18 años podría heredar un montón de cosas, no era
un chico muy común.
Una trabajadora social se me acercó luego de que el
policía me explicara todo a grandes rasgos y me preguntó si estaba dispuesto a
vivir con Camilo, yo asentí aunque me costara un poco entenderle porque ya se
me estaba olvidando el español y sin saber bien quien era Camilo. La señora me
llevó hasta unas oficinas y me pasó todo lo que tenían de Camilo; notas,
historia clínica, reportes e incluso sus amigos y la herencia.
A medida que leía me asustaba más y más… parecía que
iba a tratar con un chico completamente fuera de control, había estado incluso
hospitalizado porque se había intoxicado por mezclar drogas con alcohol, tenía
buenas notas pero también muchas notas por indisciplina. Sabía que Camilo era
menor que mis hijos pero con lo que leía no podía dejar de pensar que sería una
mala influencia para ellos.
Hablé con Talia de todo lo que había leído y de la
joya que era Camilo pero aun así ella me dijo que lo llevara a la casa, que no
podía ser tan malo. Al final gracias a ella firmé los papeles y terminé
volviéndome el tutor de Camilo, aunque él no me conociera.
Considero que el momento más extraño para ambos fue
cuando nos conocimos, vi en sus ojos tristeza, miedo e inocencia… incluso por
un momento creí que él pensaba que yo le haría daño. Hablamos un poco en
español y le dije que nos iríamos a vivir a Bélgica, noté el shock que eso le
causó pero tampoco podía decirle que nos quedaríamos más días en Colombia
porque tenía que volver a trabajar.
Durante todo el trayecto él tenía una cara de miedo
que me causaba mucha ternura pero no sabía cómo hablarle, tampoco podía
tratarlo como un bebé, no quería que reaccionara mal si lo abrazaba o era muy
cariñoso con él así que lo deje pensar tranquilo hasta que conoció a mis hijos,
creo que él pensó que serían menores que él pero no fue así por lo que se
sintió tal vez muy niño cuando llegó.
Ahora, por fin sentía que estaba mejorando mi
relación con Camilo no sabía si era por el cambio de país o porque ya se estaba
acostumbrando a nosotros, incluso creo que Santiago fue una muy buena idea a
pesar de que se aliaran para hacer locuras. Pero, después de la reacción de
Patrick supe que todo había retrocedido, Camilo estaba dolido y se estaba
culpando de algo no había hecho propiamente, la reacción que el necesitaba por
parte nuestra era de compresión no de ira como la que mostró mi hijo… yo iba a
ser lo más comprensivo posible cuando lo viera, porque lo que necesita es un
abrazo.
Miré mi reloj, ya se estaba haciendo muy tarde…
debía hablar con Patrick antes de que se oscureciera y fuera más difícil
encontrar a Camilo. Entré a la casa y vi a mi hijo aun enojado sentado en el
piso, me acerqué a él luego de respirar profundo y le dije:
Diálogo en francés:
-Patrick ¿Por qué le pegaste a Camilo? –Pregunté,
poniéndole una mano en el hombro derecho.
-Porque es un idiota papá, él fue el culpable de
todo. –Dijo Patrick volviendo a cerrar el puño.
-No Patrick, él no lo hizo de aposta… ni siquiera
sabía que eso iba a pasar. –Dije serio.
-Seguro estaba mintiendo… es su culpa que ahora yo
nunca pueda llegar a conocer a mi familia, porque él tiene razón, no merece su
apellido. –Patrick estaba bastante enojado, enojo que sinceramente yo no podía
entender muy bien.
-Patrick… si existiera una máquina del tiempo todos
quisiéramos que nunca pasara el incendio empezando por Camilo, recuerda que él
los conoció a todos… -Empecé diciendo.
-Pues sí, pero por su egoísmo idiota ya no nos vamos
a conocer todos –Patrick seguía con lo mismo.
-Hijo, de verdad quisiera que entiendas que no es fácil
para Camilo lo que pasó, si bien es verdad que todo comenzó por su capricho, su
idea no era de que todos murieran… ponte en sus zapatos, imagina que el
incendio pasó en la casa y fuiste tú él que bajó y escuchó las súplicas de
todos –Intentaba que con eso Patrick se calmara un poco.
-SI… es algo horrible, pero igual él fue el que
empezó NI SIQUIERA ENTIENDO POR QUÉ TU LO DEFIENDES… NO ES TU HIJO Y POR SU
“CAPRICHO” TUS PAPÁS Y HERMANOS ESTÁN MUERTOS… NO SÉ POR QUÉ ACCEDISTE SI
QUIERA A LLEVARLO A LA CASA –Gritó
Patrick.
-Patrick yo no iba a dejar tirado a tu primo en ese
momento –Dije tratando que calmarlo otra vez.
-Pues debiste… y no digas que es mi primo… yo tengo
otros primos verdaderos –Siguió enojado y decidí cortarlo.
-Ya Patrick, ¡escucha por favor! Camilo no tiene la
culpa de lo que pasó, nosotros tenemos que ser comprensivos y actuar como
personas maduras –Ya me estaba cansando de esa actitud.
-AHHH DICES QUE ACTUEMOS COMO PERSONAS CON EL QUE NO
FUE UNA PERSONA CON SU PROPIA FAMILIA –Siguió gritando Patrick, lo tomé del
brazo esperando a que se calmara.
-Patrick ¡Ya! Camilo cometió un error pero no fue el
culpable del incendio, estoy seguro de que él jamás quiso que su familia
sufriera. A él realmente si le dolió todo lo que pasó… su vida fue la que tuvo
un cambio radical, no la tuya Patrick –Mis palabras lo dejaron un momento sin
palabras.
-Ahora tratas de hacer que me sienta mal… no te
entiendo papá, en serio –Dijo Patrick algo fastidiado pero al menos ya no
gritaba.
-No hijo, el que no me entiende eres tu… pero ya te
voy a explicar –Dije sentándome en el suelo obligándolo a sentarse a mi lado.
-Está bien –Dijo mirándome fijamente, cuando mis
hijos me veían como lo estaba haciendo Patrick en ese momento me daban ganas de
mentir y seguirlos protegiendo, pero no podía hacerlo yo tenía que hacer que
ellos entendieran a Camilo, además Patrick ya no era un niño y mis padres ya no
podían llegar a decirles nada.
-Hijo como ya te dije si el incendio no hubiera
pasado ustedes no sabrían nada de acá, ni de Camilo o mi origen. Yo sé que no
actué bien al crear en ustedes expectativas falsas de sus abuelos, tíos y
primos sé que escuchar esto a ser difícil pero te pido que me entiendas, yo no
quería que los juzgaran a ustedes no les conté porque mi intención era
protegerlos, claramente yo no soy inglés ni tus abuelos tampoco lo eran, yo
nací acá al igual que tu primo… tus abuelos eran personas muy conservadoras y
ellos esperaban que nos juntáramos con familias respetadas de acá, yo conocí a
tu mamá cuando ella vino de intercambio y realmente me enamoré de ella,
realmente no sé cómo pasó pero ella quedó embarazada de tu hermana, yo les
conté a mis papás algo preocupado y ellos de inmediato me dijeron que ella
debía abortar, que tener un hijo era un error pero yo nunca pensé eso,
discutimos y al final decidí irme con tu mamá a Bélgica, formar una nueva vida
y despedirme de todo lo que conocía precisamente para que a ustedes no los
juzgaran ni les dijeran cosas hirientes… yo conocí a mis padres y créeme era
muy difícil que los aceptaran, sé que es duro escuchar eso pero Patrick
necesito que entiendas a tu primo y trates de ser realista, si hubieras
conocido a mis padres creo que odiarías todo de este país. Por el contrario
para Camilo si fue un golpe fuerte… él se enteró el día que me vio que tenía
familia en un país tan lejano, a él le costó entender la situación y más aún
por la imagen que tenía de todos, le expliqué todo muy por encima y poco a poco
ha tratado de adaptarse, el cometió un error pero no podemos culparlo por eso
hijo, en este momento lo que él necesita es nuestro apoyo para logre superar lo
máximo posible su pasado… no puedes culparlo por algo que no hizo realmente.
–Respiré hondo, realmente había hablado bastante rápido.
-Entonces mis abuelos eran una mierda de personas
–Dijo Patrick algo dolido, yo jamás hubiera imaginado que le doliera el hecho
de que mis papás no los aceptaran porque precisamente ellos no los conocieron…
nunca permití que sufrieran por eso.
-No hijo, puedes preguntarle a Camilo si quieres y
verás que eran muy amables... solo que ellos cumplían su palabra al pie de la
letra y cuando me fui me dejaron claro que nunca contraría con su apoyo. –Dije
recordando lo mucho que me dolió ese desplante.
-Igual es cruel que por ser extranjeros no nos
fueran a querer –Dijo Patrick mucho más calmado.
-Lo sé hijo, aunque fue más porque ellos querían que
yo tuviera otro tipo de vida… la vida en la que creció tu primo, tu mamá no era
precisamente la chica europea con dinero. –Escuché un suspiro de Patrick.
-Voy a intentar ser compresivo con Camilo, sé que no
la ha pasado bien y que para él fue difícil tener que aprender otro idioma en
tan poco tiempo –Dijo sonando maduro.
-Gracias hijo en verdad te lo agradezco –Dije
sintiendo un peso menos encima.
-Aunque creo que no hemos terminado de hablar, aún
hay muchas cosas que necesito que me explique y no solo a mi sino también a mis
hermanos –Dijo Patrick y yo asentí.
-Claro, prometo que en Bélgica vamos a hablar
seriamente y les voy a quitar todas las dudas a los tres, será una charla entre
ustedes y yo. –Dije rodeándole con el brazo el cuello a mi hijo.
-Está bien… Papá la verdad no sé qué me pasó, creo
que no debí darle ese puño a Camilo pero es que sentí mucha rabia… sentí que
había sido un envidioso al privarnos a mis hermanos y a mí de conocer a la
familia, sé que esa no fue su intención pero es que las acciones traen
consecuencias y él no debió incitar a los primos a hacer ese corto… pero estoy
algo arrepentido de eso –Dijo y yo aproveché para recordarle algo que él ya
sabía.
-Debes estar muy arrepentido Patrick, Camilo es
menor que tú y le diste un puño con toda la fuerza que tienes, lo tiraste al
piso y hasta tenía sangre –Dije y por la mirada que me hizo supe que ya había
entendido a que iba mi regaño. –Además hijo, le dijiste cosas horribles, debió
sentirse terrible.
-Pero es que… -Quería continuar pero yo lo frené.
-Patrick lo que hiciste no tiene justificación, tu
muy bien sabes que a los puños no se resuelve nada y que usar palabras
hirientes de las situaciones familiares de los otros es cruel –Dije poniéndome
de pie y sacándome la correa.
-Lo lamento un poco –Dijo y supe que era lo máximo
que iba a sacar de él, esquivando su mirada lo tomé del brazo y recostándolo
sobre la barra de la cocina comencé…
Zas zas mmgg zas zas auu zas zas auuu zas yaa zas
zas zas yaa zas zas
Zas auu zas zas auuu zas zas zas auu zas auu papá
para zas zas zas zas
Zas zas ayy zas zas yaa zas auuu zas zas sniff zas
zas sniff zas auu zas
Zas Bua zas zas zas Buaa zas zas snif zas zas snif
zas zas au zas Buaa
-Ya pasó –Dije tratando de calmarlo un poco.
-Snif snif no quería hacerlo sentir tan mal snif
snif tampoco creí que fuera a escaparse snif –Siguió llorando Patrick por lo
que traté de calmarlo.
-Yo sé hijo… no llores más –Dije abrazando, nos
quedamos así un rato.
-Sabes, agradezco que me dijeras la verdad –Dijo
Patrick aun con los ojos algo llorosos pero me alegró bastante tu actitud.
-Bueno hijo, era lo justo para empezar yo jamás debí
ocultarles nada –Dije siendo sincero.
-Pero lo hecho hecho está papá… ahora lo importante
es buscar a Camilo –Dijo Patrick y yo volví a la realidad, había que encontrar
a mi sobrino antes de que haga alguna locura.
Asentí y ambos comenzamos a buscar a Camilo, cada
uno salió en una dirección distinta, lo busqué muy exhaustivamente y a medida
que pasaban las horas me iba preocupando más y más… yo ya no reconocía la
ciudad y Patrick menos, no podíamos competir con Camilo ni tampoco sabíamos
nada de sus sitios preferidos.
A las 9 pm comenzó a llover bastante fuerte, las
calles estaban enlodadas y resbalosas, yo no quería dejar de buscar a Camilo
pero tampoco podía permitir que Patrick y yo nos enfermáramos. Además, siendo
realista los dos solos no lo íbamos a encontrar, necesitaba preguntarle a sus
amigos por los lugares que frecuentaba por lo que volví con Patrick a la casa y
tratamos de dormir pero al menos yo no pude, era imposible si quiera cerrar los
ojos teniendo en cuenta que estaba lloviendo y Camilo no aparecía, mi sobrino
con depresión y culpa había huido de la casa, podía hacer cualquier cosa y para
colmo de males, a pesar de que pasen las horas no tengo idea de donde pueda
estar ni tampoco de lo que haya podido hacer.
Hola me alegra que siguieras ls historia me tiene enganchada la seguía pero no sabía que era tuya ya sabemos un poco mas lo que pasó espero no tardes mucho en publicar el siguiente se que estás ocupado pero trata de seguir más continuo
ResponderBorrarWaaao un capítulo de esta historia q me encanta...espero Camilo no se capaz de hacerse daño. Espero con ansias q su tío sea capaz de ganarselo creo q ambos necesitan ese abrazo.
ResponderBorrarUn xapi revelador como el anterior. Genial que hayas acualizado. Me enxanra como se reveló la historia del tio desdesu punto de vista y como, tal como en la vida real, no hay buenos y malos sino errores y aciertos de gente normal.
ResponderBorrarHola, gracias por escribir de nuevo, esta historia en verdad me interesa mucho y me sorprendio volver su continuacion, espero con ansiedad tu regreso con proximo capitulo, este capitulo fue muy reflexivo y hermoso.
ResponderBorrarSaludos, soy Sia
U.u pobre Patrick su papá se pasó pero es que si fue cruel con lo que hizo!!
ResponderBorrarAunque para mí el culpable es Edgar por no aclarar las cosas antes con sus hijos!!
Espero que Camilo aparezca pronto y no le pase nada malo que ya con sus remordimientos basta!! Pero con lluvia se puede mojar!!
No sabes mm bueno no, si sabes lo ansiosa que estoy por leer lo que sigue!!
Me encantó el capítulo pero ya quiero leer más!!
Ya no seas cruel conmigo!!
Wow!! Que capitulo más revelador, me gusta esta historia y me sentí un poco de nervios por Patrick... Al leer se sacó la correa fue ��, pensé que no le haría nada.
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