Jin estaba sentado con la mirada
perdida, había vuelto de visitar a sus padres, nuevamente había escuchado a su
madre presumir lo grandioso que era su hermano, y de él no decía nada, lo
entendía… no había hecho nada digno de presumir, era el peor del grupo en los ensayos, aún no
lograban debutar y estaba seguro que el retraso el debut se debía a sus
falencias.
Tantos años y no había logrado
nada, pero no podía quedarse pegado en eso, debía preparar las colaciones para
los maknaes, con lo poco que tenían debía hacerlo rendir, era mejor picarles la
manzana en la mañana para que no se oxidara. De pronto recordó que había traído
unas gelatinas para preparar, era mejor dejarla lista en la noche le agregaría
cuadritos de la manzana que les quedaba.
“Suga ¿tenemos potes herméticos?”
“creo que había por ahí, déjeme
buscar” pero se volteó preocupado, “esta semana no llegamos”
“traje unos Ramyeon de mi casa,
mañana les hacemos eso de cenar, y de colación les prepararé jalea con
cuadritos de manzana”
Suga buscaba en la alacena, “de
desayuno queda leche con plátano para Kookie, el resto tomaremos te”
Jin se apretaba la cabeza, sentía
que estaba fallando en todo.
“no te preocupes, mañana
conseguiremos algo de dinero, tengo unas canciones que pretendo vender, con
J-Hope puedo ir a bailar a la calle, con eso tendremos para un o dos días,
mientras nos reponen la mercadería en la empresa”
“si, con eso estamos, haré la
jalea y luego le revisare los cuadernos a los maknaes”
“Kookie debe subir sus
calificaciones o estaremos en problemas” dijo Suga comenzando a pelar la
manzana.
Jin se reía con desesperanza,
cuando Suga le dio la mitad de la cascara, y un trozo de la coronta ya que eso
era lo único que comerían de la manzana.
“creo que nunca nos habíamos
quedado tan cortos”
“hemos estado peores, al menos
los maknaes ya no se nos desmayan de hambre”
“menos mal que eso no paso en el
colegio, si no el tremendo lio en que nos hubiésemos metido, capaz que nos los
quitaban”
“Hyung, arriba el ánimo, lo estás
haciendo genial, solo que hay días más difíciles”
“no logró apréndeme la
coreografía, cuando termine con la cosas de casa volveré a la sala de ensayo, ¿puedes
quédate a cargo de la casa?”
Suga saco un chocolate y lo
partió en 8 pedacitos, sin que Jin se diera cuenta, eran para el desayuno de
mañana pero Jin necesitaba energía ahora. “toma” dijo dándole un trocito en la
boca “ve a entrenar yo me encargo de todo”
No era muy tarde pero no tenían
que darles de cenar a los chicos, el Ramyeon debían dejarlo para el día
siguiente, ya que, las practicas serían más intensas, por lo que decidió enviarlos
a todos a dormir.
“Kookie, Taehyung y Jimin apaguen
el juego es hora de dormir”
“¿Suga Hyung podemos terminar
esta partida?” preguntó Tae, ellos sabían lo que significaba ir a dormir
temprano, no cuestionaban esa orden, no querían hacer sentir mal a los Hyung.
“claro, ¿quieren un tomar un té?”
“no gracias, estamos bien, me
está dando un poco de sueño” dijo Jungkook.
“me lave los dientes recién, no
puedo pero gracias”
“buenas noches”
“buenas noches Hyung” dijeron a
coro.
Suga fue al encuentro de RM y
J-Hope.
“sin rodeos, estamos en números
rojos chicos, mañana tendremos que conseguir algo de dinero, no nos queda
comida, Jin Hyung trajo un poco de su casa
y con eso tendremos para mañana”
“mañana puedo salir a bailar en
la calle” dijo J-Hope
“yo también, vamos a diferentes
puntos y podremos conseguir más dinero” se sumó RM
“tratare de vender unas canciones
y tendremos para unas semanas pero no sé cómo me vaya, la otra vez no me
pagaron bien”
“lo resolveremos” dijo RM
“J-Hope, Jin está practicando,
tiene problemas con la coreografía, crees que puedas ir a darle una mano sin
que sepa que te lo pedí”
“yo me encargo”
Así pasaban las semanas viviendo
el día a día, y Jin exigiéndose al máximo, no solo debía ensayar, cuidar a los
chicos, si no que debía rendir en la universidad, y el único motivo para no
rendirse eran los 6 chicos que tenía a su cargo.
Pero todos tenemos un punto de
quiebre y él de Jin llegó cuando por décima cuarta vez no le salía el paso.
Tuvo una especie de colapso dejo
todo botado y se fue a casa de sus padres, necesitaba un abrazo y saber que
todos estaría bien, pero al llegar, ve a su madre junto a sus amigas presumiendo
de su hijos y como de costumbre ella hablaba maravillas de su hermano y cuando
las amigas preguntaron por él, ella dice rápido Jin, está en una banda de
música, sin dar ningún detalle.
Por lo que decidió irse, pero se
encontró con su padre a la salida.
“tesoro, no sabía que estaban en
casa”
“no, importa no debí venir” dijo
frustrado tratando de apartar a su padre, él no estaba bien, necesitaba salir
de ahí, ya no soportaba ser la decepción de todos. “me tengo que ir” dijo con
la mirada perdida.
“hijo a ti te pasa algo” dijo
tomándolo del brazo y guiándolo a casa.
“NO” dijo tratando de soltarse
bruscamente. “dije que me voy” esa reacción le sorprendió a su padre, su hijo
jamás le había hablado así y menos con esa brusquedad, que lo descoloco, pero reacciono
rápido, le dio dos palmadas para lograr que su hijo bajara la guardia.
“hijo, entremos, vamos a
conversar y arreglaremos lo que te esta atormentando”
Jin solo dejo caer las lágrimas,
estaba tan sobre pasado que no sabía que más hacer
“Jin” sonrió la mamá al verlo. El
padre de Jin le hizo una señal para que despachara a sus amigas, Jin no estaba
bien y debían averiguar que pasaba.
Jin hizo una reverencia a las
amigas de su madre y fue junto a su padre a su recamara.
Su padre lo vio tan derrotado que
lo sentó en su regazo como cuando era pequeño.
“¿qué está pasando hijo?”
“yo no sirvo para nada, no hago
nada bien” dijo conteniendo las lágrimas “tengo 20 años y que he logrado, nada.
Mi grupo ni siquiera puede debutar y seguro que es por mi culpa, los
productores me tienen solo por ser guapo”
El papá de Jin lo escucho tranquilo y comenzó a hablar.
“te eligieron por ser guapo eso
no lo podemos negar y tú trabajo consistía en ser guapo” dijo tomando el rostro
de su hijo con delicadeza “pero ser guapo nunca será suficiente para ti, tú
eres mucho más que eso” dijo “aprendiste a bailar y cantar desde cero, y lo
haces muy bien, pero es efectivo que te es más difícil que a tus compañeros de
grupo, ellos llevan años practicando ese arte, tú comenzaste hace poco, además,
no solo te dedicas a ensayar” lo miro a los ojos “de un momento a otro te convertiste
en padre de 6 de adolecentes extremadamente talentosos y revoltosos en la misma
proporción, esa responsabilidad no la elegiste, pero la asumiste”
“pero lo hago todo mal” lloraba
con tanta pena “ustedes no están orgullosos de mí y lo entiendo no he logrado
nada destacable”
“nosotros con tú madre estamos
muy orgullosos del hombre en que te convertiste, pero hijo, mientras tú no
estés orgullos de ti, de nada sirve”
“no es cierto, mamá no tiene nada
que presumir de mi”
“tú madre, pasa horas aprendiendo
nuevas recetas para que le puedas preparar para los chicos, fue hasta a clases
de cocina, para que su hijo les prepare los mejores platos a sus niños, pero
hijo nosotros vemos más allá del presente” dijo dándole un beso en la frente.
“nosotros creemos en ti y en tus chicos,
sabemos que serán estrellas mundiales y debemos cuidar cada cosa que digamos,
porque hijo nunca sabes a quien tienes al lado y debemos protégete”
“pero mi mamá mira a mi hermano
con orgullo” y su padre lo interrumpió “y a ti te mira con amor, tú madre lo
que hace por ti no lo hace por nadie más, los padres a veces nos equivocamos al
no decir esas cosas delante de los hijos, tal vez, por crianza, por vergüenza o
porque damos por sentado que nuestros hijos lo saben. Pero sabes cuál es la
mejor hora del día de tú mamá”
“no” dijo Jin sollozando por las
palabras de su papá.
“La que habla contigo, ella se
prepara todo el día para esa llamada, a mí me prohíbe interrumpirla en su
tiempo contigo, porque le cuentas tú día a día, cómo les va a tus maknaes, cómo
se portan” Jin comenzó a sonreír “tú mamá se refiere a los chicos como sus
nietos” se rio el papá, “un día me dijo no se en que momento nuestro niño llego
a la casa con 6 bebes, en que momento los pario y me hizo abuela tan joven”
“pero ves papá, esas son cosas
domésticas, profesionalmente no he logrado nada”
“y tú crees que a los padres nos
importa eso, si lo único que a nosotros nos importa tú felicidad, como sociedad
nos hemos equivocado tanto, haciéndoles creer a los jóvenes que lo único que importa
es el dinero y el éxito profesional, sin importar el costo en los jóvenes, yo
quiero un hijo feliz exitoso como persona, el resto no importa. Además yo confió en ti y en tus chicos. Tengo la
certeza que llegaran lejos y cuando mires a tras lo único que recordaras es la
sonrisa de tus niños”
“me siento tan frustrado, no
logro llegar al nivel de los chicos”
“practica más”
“no me alcanzan las horas”
“congela este año al universidad,
lo retomas al que sigue”
La cara de espanto de Jin al
escuchar a su padre, no tenía precio, pero eso le ayudo a comprender la
confianza que le tenían sus papás.
“no será necesario, debo ser un
ejemplo para los maknaes, si yo congeló como logró llevar a Kookie al colegio”
Vio sonreír a su padre con
orgullo.
“me alegro saber que tienes tan
claras las prioridades, eres un buen hijo, un buen hombre y un mejor padre que
yo, mira que yo apenas pude con 2 y tú lo haces genial con 6 adolescente y con
menos recursos”.
“ya vendrán tiempos mejores” dijo
Seojin
“en que momento dejaste de ser un
niño y te convertiste en un hombre”
“¡siempre seré tu niño!” dijo ya
de mejor ánimo.
En eso la madre de Jin entra a la
habitación
“cariño, ¿cómo estás?”
“bien, mamá ¿y tú?”
“bien, aprendí hacer un postre,
para que le lleves a los niños”
“gracias, no debiste molestaste”
“no es molestia, son mis nietos”
dijo sin pensar “hijo compre este libro para Kookie, estuve viendo que era más
didáctico para enseñar las matemáticas, le da un enfoque diferente, creo que le
puede ayudar a que le gusten un poco más”
Jin sonrió feliz, en la última
conversación, le había comentado que a Jungkook se le estaban haciendo difícil
las matemáticas, no porque no las entendiera si no porque le aburría.
Su madre había notado que cosas
de la despensa siempre faltaban después de las visitas Jin, así que había
decidido hacerle una despensa a los chicos, y guardar un par de dulces que sabía
que estaban prohibidos pero eran chicos necesitaban un poco de energía.
“mamá ¿quieres que te ayude con
la cena?”
“Por supuesto, te parece que la
preparemos ahora para que les lleves a los chicos”
En eso suena el celular de Jin.
“Hyung ¿dónde estás?” dijo Jimin
“estoy en casa de mis papás”
“Tae y Kookie se están peleando”
los acuso.
“¿qué paso?” dijo preocupado. Y haciéndoles
una señal a sus padres de que se tendría que ir.
“Tae le trataba de enseñar a
resolver un problema de matemáticas a Kookie y no resulto bien, ven pronto
porque Jungkook se molestó mucho y se encerró en baño a llorar y lleva media
hora que no nos abre la puerta”
“voy en camino, déjenlo tranquilo
yo lo saco cuando llegue” dijo cortando. “me tengo que ir, los maknaes se
pelearon y Kookie se encerró en baño”
“te llevaremos” dijo su madre.
Cuando llegaron casa, Tae lo
estaba esperando para reclamarle.
“¿dónde te fuiste Hyung?, nos
dejaste solos y Kookie se puso de burro, yo solo quería ayudarle” dijo con un
puchero.
“yo voy a hablar con él” miro a
sus padres con cara de disculpa.
“Ve con Jungkookie, yo preparare
la cena” dijo su madre, de esa forma podían acomodar las cosas en la alacena
sin que se dieran cuenta.
Mientras los padres de Jin
cocinaban, Jin se encargaba de Jungkook
“Abre la puerta Kookie” pero no
obtuvo respuesta.
Por lo que fue por un
desatornillador y saco la traba de las bisagras, cuando abrió la puerta
encontró a Jungkook haciendo picadillos el cuaderno de matemáticas, había
pedacitos de hojas por todo el suelo del baño.
“No se destruyen las cosas Jeon
Jungkook”
¡ZAS!
¡ZAS! ¡ZAS!
“buaaa”
“vas a limpiar este desastre en
este momento y luego vas a pedirle a un compañero que te envíe fotos del
cuaderno, y vas a trascribirlo”
“¡no!”
¡ZAS! ¡ZAS!
“no, te estoy preguntando
caramba”
“buaaa, eres malo”
“te di una orden” le hablo serio.
Kookie le escribió a un compañero
para pedirle las fotografías y le entrego en teléfono a Jin al verlo estirar la
mano.
“¿cuánto tiempo?” dijo con un
gran puchero.
“dos semanas” los ojos de Kookie
casi se salieron, los castigos por lo general no duraban más de dos días. “no
hay video juegos tampoco”
Kookie solo lloraba.
“yo no entiendo, las matemáticas,
no puedes castigarme por eso”
“no te castigue por eso, te castigue por esto”
dijo mostrándole el desastre que había dejado.
Jin había leído el libro que su
mamá le había regalado.
“sabes mi mamá te compro un
libro, enseña las matemáticas, relacionadas con la música, ¿crees que podemos
darle una oportunidad?”
Kookie sonrió “¿me vas a enseñar
tú?”
“Por supuesto Jungkookie” le dijo
sonriendo, sabía que eso significaría noches sin dormir porque tendría que
retrasar los ensayos pero no le importaba.
Cuando terminaron de ordenar,
fueron a cenar, y pudo entender a lo que se refería su padre, la mirada de
orgullo de su madre, cuando lo vio llegar abrazando a su maknae.
Kookie se soltó de Jin y corrió a
los brazos de la madre de Jin
“Jin Hyung me castigo” lo acusó.
Y ella le dio un abrazo gigante y
un caramelo.
“dile que no me castigueee” le
dijo descarado.
“Jin no castigue a mi niño”
“mamá” dijo incrédulo de lo que
escuchaba.
“es mi trabajo defender a mis
nietos”.
“tres días tómalo o déjalo” le
dijo a Kookie.
La cena estuvo maravillosa, luego
de las despedidas, Kookie junto a Jin estudiaron del libro que le había regalado.
“¿y eso era?” dijo al comprender
el ejercicio “si era muy fácil, porque no me lo enseñaron así en el colegio” se
quejó.
“siempre se encuentra la forma”
dijo mientras pensaba, en paso que no le salía, se le ocurrió algo y lo puso en
práctica.
“J-Hope, mira” dijo emocionado.
Si bien no era exactamente el
mismo paso, con una pequeña variación, había logrado que le saliera perfecto.
“excelente Jin Hyung, Owww ¿cómo
no se nos ocurrió antes?, quedo mucho mejor que el otro, se ve mucho más
elegante” lo elogio.
Al poco tiempo llegó el tan
esperado debut de los chicos, pero eso queda para otra historia.
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