LA FIESTA

LA FIESTA

- Vamos Dickie, acaso no la pasaste bien, hasta donde yo pude ver bueno tu……

- Cállate Roy – dijo Dick alejándose de oídos curiosos – Te lo concedo la fiesta de la semana pasada fue algo único nunca había estado en algo así.

- No me digas con Bruce sobre tu hombro me asombra que puedas cruzar la calle solo.

- Jajajaja muy chistoso.

- Entonces que dices hoy es jueves, la fiesta es de disfraces con máscaras!!

- Estas loco Roy, quieres que use mi traje de Robin para ir a una fiesta, Bruce me despelleja vivo si se entera.

- Por eso te estoy llamando para que nos pongamos de acuerdo, a qué hora te paso a buscar?

Dick se quedó pensativo, pero es que ya tenía 18 años, era mayor de edad así que tenía que pedir permiso a papá? Y por otro lado se llevó su mano a su trasero aún recordaba la última charla que había tenido con Bruce y lo claro que había dejado el punto de no salir sin decirle a donde iba, eso fue justamente el jueves pasado, estaba vivo solamente porque Bruce no se enteró que la salida había sido a una fiesta que incluía chicas con minifaldas y chicos en traje de Adán.

- Ven a cenar y hablamos – dijo Dick mirando de reojo y viendo una figura familiar asomarse sigilosamente.

- Así que vas a salir hoy Dickie – Jason sonreía maliciosamente – Y con Roy – movió la cabeza de un lado a otro – Y sabe Papá que su pajarito quiere volar – dicho eso salió corriendo porque su hermano mayor seguro intentaba matarlo.

- Niños que les he dicho de correr en casa – dijo Bruce serio.

Dickie hizo una mueca, niños para Bruce siempre sería un niño.

- Nos dijiste que no lo hiciéramos – dijo Jason con rostro angelical

Bruce levanto una ceja y ambos niños dijeron – Lo siento Papá – y salieron del salón antes que Bruce hiciera más preguntas.

- Así que hay fiesta hoy?.

- Eso no es e tu incumbencia Jason, y deja de escuchar tras las puertas.

- Claro que es de mi incumbencia hermanito en especial si te estoy acompañando a esa fiesta – Dick casi se atoró.

- Que me estas acompañando a dónde? Claro que no vas a ningún lado conmigo.

- Entonces creo que tendré una charla con Papá, Como crees que se tome la noticia que vas a salir a una fiesta sabe dios donde y con Roy Harper Queen.

Dick palideció estaba seguro que Jason no sabía nada de la fiesta de la semana pasada sino ya lo habría chantajeado pero si llegaba a hablar con papá y solo sembrar la duda razonable en él podría olvidarse de salir esa noche y ese fin de semana.

- Vamos Jason se realista crees que Papá te dejara salir hoy, mañana tienes escuela y aún eres menor de edad – dijo Dick y con una mano desordeno el pelo de su hermanito menor.

- Deja que yo me encargo de Papá, además no pensaba pedirle permiso, tu solo me esperas en la entrada.

Dick se lo quedó mirando asombrado de la desfachatez del adolescente, él jamás habría hecho algo así nunca desafío a Bruce de esa manera.

La cena como siempre en la Mansión Weyne fue todo menos tranquila con 4 niños y un invitado podría decirse que movidas es solo un decir.

Mientras Tim y Damien se peleaban por debajo de la mesa, Jason solo sonreía y bromeaba con Roy como si nada pasara, mientras Dick intentaba llevar una conversación de adultos con su padre que no miraba con buenos ojos la visita de Roy a su casa, todavía desconfiaba del hijo problemático de Oliver Queen y solo lo dejaba entrar a casa porque era amigo de sus hijos.

Terminada la cena Tim y Damien se fueron a la cama en contra de sus deseos claro está, pero Bruce sabía cómo convencerlos.

Mientras Roy y Jason  planeaban la huida entre sonrisas y murmullos, Bruce que sabía muy bien cómo se comportaban los adolescentes  y no por nada era el mejor detective del Gotham supo que sus queridos hijos estaban tramando algo.

- Papá, Roy y yo vamos a salir a dar una vuelta – dijo Dick casi de salida pero Bruce no se lo iba a hacer tan fácil.

- Dick podríamos hablar en mi despacho, por favor.

Dick solo siguió a su padre.

- Sabes que no me gusta que salgas con Roy, el todavía no está bien y lo sabes.

- Papá por favor, ya hablamos sobre esto y dijiste que no había problema en que Roy siguiera siendo mi amigo.

- Una cosa es que sean amigos y otra totalmente diferente es que salgas con él.

- Ni que fuera alguna fiesta o bar o algo así papá.

Bruce lo miró de cerca como si quisiera escanear su alma, su hijo era un libro abierto para él y vio claramente que Dick estaba ocultándole algo.

- Esta bien pero te quiero en casa temprano – dijo mientras Dick salía antes que su padre cambiara de opinión.

Bruce dejó que los niños hicieran sus planes pero internamente se propuso seguir a los chicos para ver a donde pensaban ir.

Jason esperaba parado detrás de la puerta más alejada de la Mansión, para mala suerte el mundo había decidido que no era buena idea salir esa noche, el aguacero que caía en Gotham era casi un diluvió, esta era la segunda vez que se mojaba ya que por la mañana se había escapado de la academia para fumar y relajarse con unos chicos que había conocido.

Roy puso en marcha su coche último modelo, regalo de Oliver por sus 18 años para alivio de Dick el deportivo era muy silencioso, cuando se pararon a esperar que Jason saliera de su escondite.

- Jason estas empapado – dijo Roy molesto cuando vio que el adolescente se sentó en su deportivo mojando el tapiz de los asientos.

- Ah vamos Roy, deja de gruñir – dijo Jason molesto

- Cuando ya pensaban que salían del radio de visión de las cámaras que vigilaban la Mansión, hasta que Roy tuvo que frenar porque alguien se interpuso en el camino.

- Diablos, estamos muertos – dijo Dick

Jason estornudó un par de veces e inmediatamente palideció, sí que estaban muertos.

Bruce estaba indignado miró a sus hijo y a Roy no gritó ni siquiera hizo un gesto, cosa que hizo que Dick y Jason se sintieran más perdidos conocían bien las caras de su padre y esa era la peor.

- Richard, Jason vuelvan a casa ahora – No fue un grito pero si una orden que no debía ser desobedecida.

Mientras Roy se quedó en su deportivo – Roy creo que Oliver lo está esperando, ten cuidado el camino esté muy resbaladizo.

Roy salió rápidamente no podía hacer nada por sus amigos ahora tendría que preocuparse de que decirle a Oliver.

En casa de los Wayne un Bruce muy enojado miraba a sus hijos mayores sin dar crédito a su comportamiento – Jason ve a darte una ducha caliente antes de que te de una gripe, Richard te espero en mi despacho – fue todo lo que dijo y salió intentando calmarse  antes de hablar con su hijo mayor.

- Bueno Richard espero una explicación – Bruce cuando quería podía ser muy intimidante a pesar de que Dick estaba muy decidido a que esta vez no miraría el suelo aceptando todo lo que su padre decía.

- No hay mucho que explicar Papá solo que Roy y yo íbamos a salir y Jason también quería ir con nosotros.

- Y se puede saber a dónde iban, que Jason quería ir con ustedes a pesar de que no me pidió permiso.

- Solo a dar una vuelta.

- La verdad Dick, es mejor que me digas la verdad.

- Quieres la verdad, está bien íbamos a una fiesta con Roy ni siquiera invitamos a Jason él solo me chantajeo para ir con nosotros.

Bruce miró a su hijo peligrosamente – No recuerdo haberte dado permiso para ir a una fiesta Richard.

- Porque no te lo pedí, papá.

- Sabes las reglas de esta casa, jovencito.

- Las sé papá, pero parece que tú olvidaste que ya cumplí 18 años y soy mayor de edad por lo que puedo irme de esta casa cuando quiera.

- En serio eso piensas Dickie – Bruce recalco el sobre nombre de su hijo – que lastima que estés tan equivocado, aún sigues siendo mi hijo eso no cambiara ni cuando cumplas 40 años.

Dick retrocedió – No es que lo piense es la ley, ya soy responsable de mis actos.

- Así que eres responsable de tus actos y por eso prefieres salir sin decir dónde vas y llevar a tu hermano menor de edad contigo a una fiesta – Bruce entrecerró los ojos – que tipo de fiesta era esa a la que Jason quería ir con tanta insistencia? Dime hijo.

- Una fiesta tú sabes chicas y chicos que bailan

- Que beben alcohol y a veces se drogan también, a ese tipo de fiestas llevabas a tu hermano!

- Claro que no, además él quiso ir.

- Y tú como hombre responsable no pudiste decirle que no, porque entonces Jason me vendría con el chisme a mí y tenías miedo de que no te dejara salir porque no me gusta que mis hijos estén en ese tipo de fiestas.

Porque su padre tenía esa habilidad de hacerlo sentir siempre culpable y arrepentido – Lo siento, no debí permitir que Jason se saliera con la suya.

- No, no debiste y tampoco debiste ocultarme información, si quieres que te trate como un adulto  entonces compórtate como uno, Dick.

Dick miró el piso se sentía igual como cuando tenía 10 años y había salido a dar una vuelta en su bicicleta nueva sin decirle a nadie.

- Estas castigado 2 semanas.

- Oh vamos papá, no puedes….

- Esta bien cómo eres adulto te doy a elegir, dos semanas sin salir o la vara.

Dick se puso pálido de solo escuchar la palabra vara – Me quedo con las 2 semanas.

Bruce le dio un beso en la frente a su hijo – Sabia decisión pajarito – y dio por terminada la charla con el mayor de sus hijos.

Ahora solo le quedaba Jason, su niño más rebelde fue a la habitación, pero Jason estaba durmiendo como siempre lo hacía con todos sus hijos, lo arropo el niño comenzó a toser y al tocar su frente la sintió un poco caliente, tenía fiebre.

Por la mañana antes de que nadie se levantara todavía, Bruce fue a ver a Jason que seguía dormido pero esta vez se notaba algo sudoroso y parecía que la fiebre no había cedido.

Comenzaba el día y la mansión Wayne se ponía en movimiento Tim era el primero en despertar y alistarse para la escuela, Damien era más bien dormilón y le costaba un poco levantarse hasta que Bruce lo regañaba.

Alfred tenía el desayuno listo como siempre – Jason no va a bajar a desayunar, Alfred creo que tiene fiebre.

- Voy a preparar una bandeja para subirle el desayuno.

Los niños llegaban al comedor Tim y Damien fueron los primeros en sentarse a la mesa y Dick los siguió – Y Jason? - Preguntó Tim.

- Se va a quedar en casa, Tim creo que tiene gripe – dijo Bruce.

- Dick lleva a tus hermanos a la Academia, me voy a quedar con Jason.

- Claro papá –dijo Dick sonriente por lo menos podría salir.

- Te devuelves inmediatamente – dijo Bruce y Dick solo suspiro resignado, mientras Tim y Damien sonreían otra vez Dick estaba castigado es era ya la segunda vez esta semana.

Bruce se despidió de sus hijos para luego dirigirse a la habitación de Jason.

- Ah papá me quedé dormido – dijo Jason desperezándose y tosiendo.

- No te desperté porque tienes fiebre hijo, es mejor que te quedes en cama.

- No estoy enfermo papá debe ser solo una gripe, ya se me va a pasar – Jason odiaba enfermarse.

- Y yo te digo que te quedes en cama.

Jason puso mala cara, mientras la puerta se abría y Alfred entraba con una bandeja – Aquí tiene Señor - dijo el amable mayordomo.

- Gracias, Alfred.

Antes de que Jason alcanzara a protestar ya tenía un termómetro en su boca.

- No pongas mala cara, jovencito si estás enfermo es por tu culpa y recuerda que todavía tenemos una conversación pendiente los dos.

Jason dejo de gruñir y se quedó quietecito – Tienes fiebre – dijo Bruce con el termómetro en la mano – te quedas en cama sin rechistar – dijo en tono de advertencia y te comportas voy un rato a la oficina y vuelvo temprano.

Alfred le paso la bandeja a Jason y se lo quedo mirando, no se pensaba mover de ahí hasta que el niño se comiera todo y se tomara un medicamento para bajar la fiebre.

Bruce solo pudo trabajar un par de horas no le gustaba estar lejos cuando uno de sus hijos enfermaba en especial Jason que era quien peor lo llevaba, así que llamo a casa para saber el estado de su pajarillo enfermo.

- Señor, el Señorito Jason sigue con fiebre y con tos, creo que es pertinente que llame a la Dra. Thompkins.

Bruce suspiro – Llámala Alfred, voy saliendo para allá, Dick esta en casa?

- Si Señor, el Señorito Richard está en su habitación.

Por lo menos uno de sus hijos le hacía caso.

Jason estaba aburrido y de muy mal humor, si había algo que no le gustaba en esta vida era estar enfermo, Bruce y Alfred eran un verdadero dolor de cabeza cuando él se enfermaba no lo dejaban ni levantarse de la cama, así que decidió dar por terminado su día de enfermo y vestirse para salir a la sala, quizás si Bruce lo ve levantado creería que está mejor.

Pero antes que pudiera si quiera salir de la habitación Alfred entraba – Que piensa que está haciendo Señorito Jason, vuelva inmediatamente a su cama – Alfred podía ser más intimidante que Bruce cuando se lo proponía.

- Oh vamos Alfred ya me siento mejor – pero para mala suerte de Jason otro acceso de tos vino a contradecirlo, Alfred levantó una ceja.

- Puedo escuchar claramente lo bien que se siente, ahora a la cama.

Jason sabía que podía argumentar eternamente con Alfred pero que él no cambiaría de opinión y que enojar a Alfred era algo muy pero muy estúpido. De muy mala gana volvió a la cama.

En cuanto Bruce llego a la mansión se dirigió a la habitación de Jason – Hey pequeño cómo te sientes.

- Papá ya estoy bien solo es una gripe, dile a Alfred que me deje salir de aquí, juro que me voy a volver loco si sigo acostado sin hacer nada – Jason puso ojos de cachorro era su última arma para conseguir lo que quería.

Bruce se acercó a la cama y toco la frente de su hijo - aún tienes fiebre y Alfred dice que no has dejado de toser, creo que es mejor que……

- NO!! Papá por favor no llames a Leslie!!! – dijo Jason suplicando pero ya era tarde, Alfred entraba para anunciar que la Dra. Thompkins estaba en la recepción.

Bruce pidió a Alfred que acompañara a Leslie a la habitación de Jason y Jason se tapó con las mantas lo más que pudo.

No eran necesarias las formalidades la Dra. Leslie Thompkins era la doctora de cabecera de la familia Wayne conocía a los chicos desde que Bruce había decidido adoptar a cada uno de ellos, es más era el médico de Bruce y de Batman cuando las lesiones que le ocasionaba ser un vigilante eran más de los que Alfred podía manejar.

Por lo que no tuvo inconvenientes en revisar a Jason aunque su paciente era muy poco colaborador.

- Muy bien - dijo Leslie guardando sus instrumentos de trabajo o de tortura como les llamaban los chicos Wayne – Jason tiene el principio de una neumonía los pulmones se escuchan congestionados pero nada que no se quite con el tratamiento adecuado y mucho descanso.

Jason hizo una mueca de fastidio.

- Jovencito, esto no es por una noche bajo la lluvia, esto son varias noches sin cuidarse, Bruce que te he dicho de sacar a patrullar a los chicos cuando no están al 100%.

- Leslie, Jason no ha salido a patrullar esta semana ni Tim ni Damien con lo de agua que ha caído.

Ambos  miraron a Jason esperando una explicación – No me miren así, todos están con gripe en el cole.

Leslie solo suspiro y comenzó a preparar una jeringa – No Leslie, por favor es realmente necesario? – Jason miraba la aguja sin poder quitarle la vista de encima.

- Cariño crees que hago esto por gusto, ahora solo será un pinchazo no es que sea la primera vez.

Bruce lo miró serio y Jason de mala gana se dio vuelta odiaba las agujas en su trasero pero no podía hacer nada solo soportar el dolor.

Bruce se colocó frente la cara de su hijo, sabía que ha ninguno de sus hijos les gustaba recibir inyecciones y a él tampoco pero él era el padre y debía dar el ejemplo – Vamos Jay Jay es solo una pequeña agujita.

- Papá no me digas Jay Jay y que yo sepa a ti tampoco te hace mucha gracias las pequeñas agujitas – Ouch maldición como arde esa cosa – grito el adolescente.

- Ya está, ahora solo debes descansar dejo las instrucciones con Alfred – dijo Leslie saliendo de la habitación, dejando a Padre e hijo.

Jason se quedó boca abajo – Duele mucho hijo?

- Lo normal supongo – dijo Jason mientras subía su pijama pero antes de que pudiera terminar de cubrir su trasero sintió un swat y otro más.

- Ouch Ouch papá que me duele!

- Todavía tenemos una conversación pendiente hijo, que no se te olvide tienes muchas cosas que explicar pero las dejaremos para cuando estés totalmente recuperado.

Jason solo espero que su gripe durara una semana por lo menos, prefería mil inyecciones en el trasero que el cinturón de Bruce.

Dick siempre tenía un celular de emergencia, aún lo guardaba por si su padre lo castigaba sin comunicación, pensaba en que ya no lo iba a necesitar y se alegró de haberlo conservado.

- Roy como te fue con Oliver?

- Como siempre grito un poco pero ya se le va a pasar, lástima que nos perdimos la fiesta pero sabes hay otra la próxima semana.

Dick rodo los ojos es que acaso Roy nunca entendía o era que Oliver era muy diferente a Bruce con sus métodos de enseñanza.

- Muy gracioso Roy, pues yo quedo fuera estoy prisionero por dos semanas.

Roy gruño - acaso Bruce no estaba en tu cumpleaños? No se ha enterado que tienes 18 años Dickie.

- Créeme lo sabe – dijo Dick triste –así que no cuentes conmigo para la próxima.

- Dick vamos no es que fuera la primera vez que rompes un castigo y sales sin permiso.

- Y después pague las consecuencias, no gracias.

- Eres un aguafiestas y si te secuestraran?

- Que estás diciendo Roy? Te volviste loco!!

- Puede ser, pero ya veremos deja todo en mis manos conozco a un escuadrón expertas en secuestrar chicos y te cuento el plan más adelante.

Dick colgó sin entender nada.

Mientras que Roy ponía en marcha un plan que no era del todo idea suya, claro que todo esto lo hacía de pie, aunque no lo admitiera a Dick, Oliver le había dado una paliza que dudaba podría sentarse en una semana pero de todas maneras quien va a una fiesta a sentarse.