Problemas de alcohol en la familia
Capitulo dos
Nando cerró la puerta con llave y
sacó de su escondite su arsenal. Una botella nueva de vodka, la cual fue
descubierta apenas tras dos sorbos por Mario, quien tumbó la puerta, tras darse
cuenta que le había pasado la llave. Claro, que Mario pensó en otra cosa, que Nando
intentaría fugarse o hacerse daño, tal vez le había metido esa idea a su hijo,
si él lo había pensado porque no su hijo, y se aterro tras decirle que abriera
la puerta y no hacerlo. La empujo con los hombros… y lo que encontró fue a
Nando, con una botella en la mano, dispuesto a quizás dormir inconscientemente
para olvidar ese mal día.
Mario: ¡FERNANDO ENRIQUE HOFFMAN! Rugió en nivel máximo de arrechera al
ver a su hijo con aquello en la mano, una cosa era haber escuchado a su esposa
decir que el chico bebía, pero otra muy diferente verlo con la botella en mano.
Fernando: no te preocupes... tu
familia no se enterara es vodka podremos seguir guardando las apariencias. Le
dijo frio
Mario: ¿APARIENCIAS? crees que me
preocupa las apariencias, lo que me preocupa es tu salud carajito, eres muy un
niño para beber, aaaa pero ya mismo me voy a encargar que MÁS NUNCA SE TE
OCURRA AGARRAR UNA BOTELLA, es que hasta tomar una de refresco lo vas a pensar
dos veces. Dijo quitándose la correa, doblándola en dos, con la mano libre le
arrancó la botella y la puso encima de la mesa de noche, y lo tomó del brazo,
como pudo lo arrastró a la cama, colocándolo sobre sus rodillas, bajándole
pantalón y calzoncillo, Fernando iba a recibir una buena paliza, cuando no
tenía ni media hora de haber recibido buena tunda.
Fernando: noooo papá nooo. Le gritó
asustado. ME JURASTE QUE JAMÁS ME
PEGARÍAS CON ESO.
Mario: Si tu rompes tus promesas yo puedo romper las mías, tú prometiste no
beber, y comportarte.
Fernando: QUIERO VOLVERME A ITALIA
Mario: ACA O EN ITALIA, recibirás el mismo castigo, el PAPÁ permisivo, el que
se hacía la vista gorda se acabó. Mario, tenía a su hijo con el traserito
al aire, y con la correa en la mano, sin embargo no se atrevía a soltar el
primer correazo.
Fernando no se atrevía a decir nada,
pero como su padre pretendía que él dejara de tomar si desde los doce años
pasaba más tiempo borracho que sobrio. Y Mario, se dio cuenta que su hijo tenía
un problema mayor entre manos que unas simples cervezas como Beatriz pensaba.
Mario: ¿No puedes dejar de beber? Ni
siquiera lo has intentado ¿verdad Fernando Enrique? Dijo subiendo las rodillas,
dejando en alto aquel trasero aun colorado.
Fernando estaba mudo cualquier cosa
que dijera sería peor, sólo quería que su padre desapareciera de una vez para
emborracharse hasta perder la conciencia, total el vodka y el whisky no le dan
resaca... y mientras mantuviera las excelentes calificaciones nadie se daba cuenta.
Mario: No piensas decir nada. ¿OK?
pues hablaré yo. Dejó la correa encima de la cama, y se inclinó para tomar una
zapatilla que estaba en el suelo.
PLAAS… AUAUAU…
Sonó cruel en el trasero de Nando igual que su grito de dolor.
Mario: MAÑANA te llevaré a la
clínica, para que te examinen y si es de dejarte internado, así será pero tu
sales de esta como yo estoy saliendo de mi depresión como llamo MARIO ENRIQUE
HOFFMAN, porque no me voy a permitir perder un hijo, por un vicio… y más cuando
es por mi culpa, como bien me hiciste ver.
PLAAS, PLAAS, PLASS, No voy a perderte hijito PLAAS, PLAAS, PLASS, PLAAS,
Eres muuuuy importante PLAAS, PLASS, Te falle pero ya no mas mi cielo PLAAS,
PLAAS, PLASS, Recuperaremos en tiempo corazón. PLAAS, PLAAS, PLASS, Prometí que
no me perderás PLAAS, PLAAS, Fernando se mordía el brazo para no darle el gusto de oírlo
gritar, pero el chico había sacado la lengua de su padre. Y cumplo mis promesas PLASS, PLAAS, PLAAS, PLASS.
Fernando: Pues mejor que tiren la
llave... En cuatro años no te diste cuenta, hiciste un trabajo envidiable papá.
PLASS,
Mario: SI fui un estúpido ciego, pero ya no mas PLAAS, PLAAS, PLASS
Fernando: tendrás otro hijo trata de
no cagarla con ese también... de mi no te preocupes yo ya no te necesito.
Mario: ¡PAPAAAAA tráeme la regla por favor!. Cumpliré mi promesa de no
castigarte con la correa Fernando, te demostrare que seré un mejor padre de lo
que he sido, todos estos años.
Nando: no nooo papito no quería decir
eso papi buaa.
Samuel, entró algo preocupado con la
regla, el chico tenía el trasero bastante rojo ya. ¿Hijo? Murmuró como
preguntando qué pasa.
Mario: Bebe papá y no unas cervezas
como algo casual, le dijo enseñando con la mirada en dirección a la botella de
vodka. Samuel, frunció el ceño, negó con la cabeza, y no dijo nada, solo se
limitó a llevarse aquello.
Mario: Papá puedes revisar el closet,
las gavetas, debajo de la cama, las maletas, mientras le doy un respiro a
Fernando.
Fernando se desespero. Noooo abuelito
nooo deja abue nooo. Trató de sujetarlo. TATA
NOOOOO. No quería que su abuelo supiera de su problema ese había sido un
grito de auxilio para su padre... solo para él.
Samuel, lo tomo por el brazo
quitándoselo del regazo, y aun con los pantalones abajo le hablo a Mario, sin
mirar a Nando, solo decidió sostenerlo por el antebrazo, parecía que no quiera
verlo, se moría por abrazarlo por decirle que todo estaría bien, pero eso
vendría después, ahora debía ser fuerte en sus convicciones y fuerte para
Nando.
Samuel: ¡Mario, requisa TU!, yo lo
sostengo. Fernando ¿prefieres decirle a tu padre donde tienes escondidas las
demás?. Pregunto frío.
Fernando interpretó mal a su abuelo y
se cerró en banda en pocos días cumplían los 17 luego esperar solo un año para
no tener que volver a verles la cara. En
último caso podría fingir la sobriedad por un año.
Mario, volteo el contenido de las
maletas, gavetas, closet, y todo hueco que podía ver en el cuarto.
Samuel, se sentó en la cama, y se
sentó a Nando sobre sus piernas, por un momento el chico intentó subirse la
ropa, pero el abuelo no lo permitió, siendo duro en el comentario.
Samuel: ¡No, la ropa se queda abajo!,
es una pérdida de tiempo subirla para tener que bajarla de nuevo.
Mario, solo había encontrado otra
botellita mediana por la mitad Ya se había dado por vencido, cuando Samuel.
Samuel: ¡Mario levanta la tapa del
tanque de la poceta!. Y eso fue suficiente para Nando se quebrará, pero aparte
de las lágrimas no decía nada.
Mario dejó caer más lágrimas que su
hijo al encontrar varias botellas llenas y otras vacías.
Mario: Jesús ¿también bebé? Le
preguntó llorando debían ser los dos por la cantidad, pensó.
Fernando: es lo único que te
importa... quédate tranquilo tu adorado Chucho no es un alcohólico como yo.
Mario: Ayyy hijo como pude ser tan
ciego, perdóname todo es mi culpa, mi culpa. Dijo tirándose al suelo a los pies
de Nando.
Fernando: Si lo es. Pero en 370 días ya no seré tu problema puedes internarme
todo este año no me interesa y a ti tampoco no te hagas el que sufres para
hacerle el numerito de padre preocupado a tu papá. Mario, lo miró, respiró
profundo y se levantó decidido.
Mario: Papá déjame solo con mi hijo
por favor.
Y tras irse, volvió a colocar a Nando
sobre su regazo ahora armado de una regla familiar, regla de la cual él mismo
recibió no una sino muchas zurras de parte de su padre.
Mario: 370 días dices, bueno
suficiente para quitarte la adicción que tienes a la bebida y luego seas un
hombre de bien, y si me importas tanto que por eso es que estoy tomando las
riendas de tu vida, nunca es tarde dicen.
PLACK, PLACK, PLACK, PLACK, PLACK
Nando quería gritar del dolor pero no
le daría el gusto, solo 370 días se repetía
Mario: Se acabó la bebida para ti
BEBE, SI ESCUCHA BIEN NANDITO, TE AMO... Y COMENZAREMOS DE CERO.
PLACK, PLACK, PLACK, PLACK, PLACK
ERES MI BEBE, Y NO IMPORTA SI TENGO
50 HIJOS MAS… TÚ ERES IMPORTANTE PARA MÍ
PLACK, PLACK, PLACK, PLACK, PLACK
Fernando tenía la necesidad imperiosa
que su padre sufriera tanto como él. Puedo
estar sin tomar 370 días pero luego de eso voy a disfrutar verte verme destruir
mi vida papá.
Mario: Ya veremos hijo… tal vez los
dos lo hagamos. Dijo frustrado y agotado mentalmente. Le termino de quitar el
pantalón que ya estaba en los tobillos, y comenzó sacarle el calzoncillo
también. Lo levantó y lo llevó a la esquina del cuarto, sin decir nada solo lo
dejó parado ahí, y se sentó en la orilla de la cama a llorar su desdicha en
silencio, pensando en todo lo que había hecho mal con sus hijos, parecía que
toda la vida eso lo perseguiría, y así pensaba tener otro hijo, para
desgraciarle la vida también.
Fernando: te puedes ir a llorar a otro lado tu hipocresía me agota. La verdad
era que él se moría de ganas de aferrarse a su padre y llorar hasta dormirse
pero por la actitud de su abuelo y padre entendió que él no tenía derecho a
eso.
Mario: ¿Preferirías que estuviese
muerto, hijo? Pregunto en automático.
Nando casi se muere del dolor en ese
instante... pero se mantuvo fuerte en lo que él creía era su verdad. No trates de culparme por tus decisiones. Pero para el caso tú llevas
muerto muchos años para mí... como yo para ti.
Mario: Nunca seria tu culpa hijo,
sino mía. Si de eso no me queda ninguna duda, moría en vida, y ahora solo estoy
penando. Chao, no hace falta que te ahogues en alcohol para evitar verme, lo
haré fácil para ti mi cielo, no olvides nunca que te amo. Mario, se levantó y
sin decir una sola abrió y cerró la puerta, haciendo creer a Nando, que salía
de la habitación.
Fernando se dejó caer al piso y lloro
grito del dolor su padre había renunciado a él como siempre supo que pasaría
porque siempre había sido el problemático que tenía excelentes calificaciones y
que si no estaba metido en algún lío no existía, Sammy era la princesa y Chucho
el que tenía problemas de notas y Nando el que metía en problemas al pobre
Chucho.
Mario, despacio se acercó a su hijo y
sentó a su lado, lo abrazó con infinito amor, se parecían tanto tan inseguros
de sí mismos, le beso la frente le acarició la espalda sin decirle ni una sola
palabra.
Fernando cerró los ojos y volvió a
subir las corazas y repetía como un mantra 370 días esa sería la cantidad de
días que lo internaría su padre para deshacerse de él y de esa forma poder
volver a ser una familia perfecta... Así se quedó esperando que su padre le
dijera que se levantara para ir a internarlo en la clínica, pero nada paso. Por
lo que rompió el silencio. 370 días.
Dijo levantándose para vestirse y hacer su maleta. Que te quede claro que en cuanto me dejes ahí será la última vez que me
veas. Ante la inactividad de su padre después de vestirse y echar unas
pocas ropas en su mochila y tomó una de las botellas la destapo.
Nando: A tu salud Mario.
Mario: Pero Fernando Enrique, crees que me quedare viendo semejante cosa.
Y de un manotón la botella, salió disparada cayendo al suelo para que se
rompiera en mil pedazos.
Lo sacudió por sus hombros algo
brusco a fin de llamar su atención.
Mario: No se qué quieres oír o en qué idioma, TE AMO…. y si debo zurrarte otra
vez, e implique que no puedas sentarte por unos días, que así sea. Pero no voy
a dejar que te hagas daño de esa manera…. NO SEÑOR.
Y lo arrastró nuevamente a la cama,
colocándolo en su regazo…. le daría una buena zurra de nalgadas, no muy fuertes
porque ya el pobre estaba al límite pero si bastantes.
Mario: Prepárate porque vamos
amanecer tu y yo en esta posición. Dijo
más que serio, y comenzó con la faena.
PLAS, PLAS, PLAS, PLAS, PLAS…
Nando: NOOOOOOOOo NOOOOOOOO déjame yo no te importo... tu quieres deshacerte
de mí ashhh ashh DEJAMEEEEEEEE BUAAAAaaa comenzó tener arcadas de tanto
llorar. TU RENUNCIASTE A MI… no me
pegues… solo enciérrame de una vez… buaaaaaaa ya no te quiero ni a ti ni a
nadieeeeeee PLAS, PLAS, PLAS
Mario: Nandito nunca renunciare a ti, NUNCA
buscaremos ayuda no implica internarte y olvidarte de ti hijito. Mario a
estas alturas lloraba con su hijo pero sabía que debía ser fuerte no había
retorno PLAS, PLAS, PLAS las nalgadas no paraban era de intensidad moderadas
pero sin pausa
Nando: no papá no me peguesss me dueleee aaschh no
porque me haces daño.
Mario: No más daño del que tú te estás haciendo a
ti mismo. Beber puede dejarte secuelas de por vida yo castigándote a lo sumo no
podrás sentarte por unos días. PLAS, PLAS, PLAS
Nando: no masss solo deshazte de mí de una vez
buaaa, si yo entiendo que sobro aquí buaaa
Mario: PLAS NO PLAS SOBRAS PLAS FERNANDO PLAS,
PLAS, PLAS vuelve a decir eso y me
vas a ver enojado de verdad. No volverás a beber eres demasiado importante,
vamos hijo eres inteligente no te hagas eso a ti mismo PLAS, PLAS, PLAS
Nando: Pero el chucho me odia buaaaa
Mario: Nadie te odia mi niño hermoso eso es
imposible. Chucho teme lo mismo.
Nando: Tu lo escuchaste
papá lo escuchaste ya no me quiere buaaa
Mario: Eso lo
resolveremos mi niño ahora lo importante es que tu no bebas más. Y lo acomodo
en su regazo y aunque Nando quiso levantarse por el dolorcito Mario no lo dejo.
Quería hablarle viéndolo a los ojos.
Nando: duele papito auch me duele mucho.
Nando: duele papito auch me duele mucho.
Mario: shhh shhh lo sé
Nandito y dolerá unos días pero es preferible a que pierdas el hígado o esa
mente brillante que tienes. le decía besándole la cabecita. Sabes porque yo salí adelante que me dio
fuerzas TÚ y TUS HERMANOS sin ti yo me muero.
Nando: no es cierto
papito siempre me pegas a mí... siempre te molesto... siempre me culpas por
todo lo malo que pasa.
Mario: Naaaando lo
dices como si a Chucho jamás lo haya castigado. Tu hermano se ha llevado unas
buenas zurras también. Le decía haciéndole mimos. Te amo mi gatico loco
Nando: Él te importa
más, no mientas papá... si el sólo pensar que Chucho tomara te destruye y yo no
importo buaaaa porque papito… porque yo soy sólo un problema… el abuelo me
desprecia... mamá está cansada de mi, tu estas cansado de mi… y ni Samantha ni
Jesús me quieren, porque porque soy yo soy la oveja negra de la familia buaaaa.
Fernando estaba destruido pero no pudo evitar acicalarse cuando su papá le decía gatico y eso Mario lo sabía conocía
tanto a su hijito.
Mario: Mi gatico, mal
entendiste ver tantas botellas vacías me angustio no quería creer que pudieses
haber bebido tu solito todo eso y yo ciego. Por eso pregunte si tu hermano
bebía también.
Nando: pero papito si
no me paso nada si nadie se daba cuenta... mis neuronas están intactas... sigo
teniendo las mejores calificaciones… no te asustes papito yo estoy bien.
Mario: Y así quiero que
sigas, y no estás bien tienes una adicción que debemos erradicar.
Nando: pero ya no más
papito te prometo que no vuelvo a tomar pero no necesito ayuda paaa yo de
verdad...
Mario: Alto ahí mi
gatico mira que no tienes 7 vidas, necesitas ayuda y mi mano estará siempre ahí. No sabes lo feliz
que me haces escucharte decir que no volverás a tomar.
Nando: No quiero que me
dejes internado papito te lo ruego, seré bueno no me meteré en más problemas…
seré como tú quieras ya no molestaré a nadie te juro que ni sabrás que existo.
Mario shh shh mi gatico
primero que te examinen si no es necesario no lo haremos te lo prometo.
Nando: pero papi yo no
quiero ver a nadie nunca más, todos saben que me pegaste y cuando sepan
porque... Nando se atraganto de las arcadas… se moría de vergüenza que alguien
supiera de su problema.
Mario: Nando shhh
respira campeón, respira eso es, tú no eres una oveja tu eres mi gatico loco,
escúchame bien, la vergüenza dentro de la familia no existe, aparte de que
nuestra familia no conoce el significado de la palabra secreto, y si alguien
necesita ayuda todos se abocan a ayudar. Tu tatarabuelo Enrique se encargó de
enseñarnos que la familia es primero. Le dijo besándole la frente, y el abuelo
no te desprecia mi amor, te ama muchísimo, él sólo está preocupado. Ahora vamos
a darte un baño y a la cama para que descanses, es tarde y has llorado mucho
debes estar agotado mi gatico.
Nando: Te… tenías mucho
tiempo que no me decías así. Dijo algo avergonzado.
Mario: Porque tú me dijiste
que no querías.
Nando: No delante de
los demás, pero solos me gusta. Dijo pasando su cabeza por el pecho de su
padre, como un gatito mimoso.
Mario sonrió… y lo
abrazó muy fuerte, por eso le decía así… porque de chiquitico tenía esa manía
de pasar su cabecita en el pecho de papá buscando cariñito.
Chicas ... estas historias que se desprenden de la original me han gustado mucho ... son excelentes escritoras ... con tantos en la familia, las historias son interminables ...!!!
ResponderBorrarMe encanto pobre de Nando pero el se lo gano ojala logre salir adelante de esa enfermedad.
ResponderBorrarContinuenla pronto por favor.
Wow, que bonito detalle, muchas gracias chicas, esta historia esta espectacular.
ResponderBorrarNando: A tu salud Mario..... @ .@
ResponderBorrarFernando esta muy mal emocionalmente, acumulo muchos sentimientos y esta en una catarsis y eso no es malo... es mas creo que es necesario y gritar a aquellos que no quieren mirar, oír y escuchar....pero debe salir de ese estado y es su papá quien lo tiene que ayudar,contener y tranquilizar...no mas zas zas a nandito el solo necesita amor y compresión.
Lady and Sanha.... esta increíble espero Mario reaccione y no sea débil.... su hijo pide a gritos su atención, es increíble que nadie se diera cuenta que bebía desde tan joven u.u.u pobre nandito <3