CAPITULO
8: EN CASA
-Falta
mucho para llegar?
Era
la millonésima vez que el muchacho preguntaba desde el asiento trasero del auto
pero no preguntaba con molestia sino más bien cargado de curiosidad, con
emoción, salir del hospital era grandioso sobre todo porque ya no le
molestarían las enfermeras de turno en las madrugadas para tomarle los signos
vitales, tal cual protocolo se realiza a cualquier paciente, pero eso no le
gustaba, ni los aburridos exámenes diarios con los doctores para intentar
hacerle recuerdo sus acciones pasadas o más al punto a lo que había pasado para
que quede en ese estado y tampoco los soporíferos estudios médicos después de
su coma.
Todo
eso molestaba al muchacho que según su humilde opinión no necesitaba de todo
ese esfuerzo extra para recordar qué era de su vida pasada, él lograría
recordar y a diferencia de la mayoría de
los pacientes que quedaban aturdidos por perder la memoria y aflicción natural
por no poder recordar Neal se encontraba dichoso como renovado a una nueva
vida, obviamente porque no tenía ningún signo de destrozo por la horrible
explosión del avión.
En
un principio a Peter y Elizabeth les había costado asimilar el estado de salud
de Neal, pero conforme pasaron los días en el hospital no pudieron más que
aceptarlo, de hecho, este nuevo Neal parecía un vistazo claro del chico que
habría sido sin tener que haber experimentado las malas decisiones que había
tomado, los delitos y su constante deseo por llevar una vida estrafalaria a
costa de estafas que habían hecho que sea un hombre al que no podías confiar
nada.
Pero
ahora era distinto, un Neal no corrompido lo hacía un chico libre, libre de ser
quien era realmente.
-Ya
quiero ver mi habitación.
-No
falta casi nada Neal.
-Lo
mismo dijiste hace 20 minutos o eres muy lento o no sabes por donde ir y nos
perdimos y ya seríamos dos quienes estamos mal de la cabeza.
-No
bromees con eso, cariño, tu situación no es para burlarse y no falta ni dos
minutos para llegar.
-Entonces
papá es muy lento, esa es la explicación.
El
humor no se perdía de la esencia de su carácter y eso para sorpresa del mismo
Peter ya no le disgustaba o sacaba de quicio.
-Jajajaja no
soy lento, esperemos esta luz roja y a la vuelta llegamos.
-No
hay ni un auto a la vista, puedes pasarte la luz roja sería divertido.
Pero
lo que sí le disgustaba es que de alguna manera el muchacho tenía la tendencia
intacta a torcer las reglas.
-Eso
no es correcto y lo sabes perfectamente.
-Sólo
bromeaba…
Peter
no dudo en voltearse para mirar levantando una ceja al muchacho, afirmando con
su expresión que no creía lo que había dicho y como de costumbre Neal se
defendió.
-Es
cierto, no hablaba en serio.
Dijo
de lo más fresco hasta había levantado los hombros para no darle importancia a
la amonestación y con esos minutos distraídos la luz del semáforo se puso en verde,
Neal aprovechó de que su papá estaba
concentrado conduciendo para decir de lo más animoso:
-Pero
hubiera sido brutal pasar la luz roja a toda velocidad, no creen?
-Uno!
Peter
ya había optado por frenar a su hijo con una advertencia de conteo, era
muy infantil pero durante su estancia en el hospital era lo suficiente para que
el chico se dejara tomar las muestras de sangre para sus análisis, sin entender
por qué esa llamada de atención hacía que se retracte rápido de su mal
accionar.
-Eres
muy aburrido.
Neal
se recostó de golpe en su asiento, cruzando los brazos enojado por el conteo-regaño.
-Ya
llegamos.
Elizabeth
dijo para alegrar al chico enfurruñado del asiento trasero y lo logró.
-Genial!!!
Neal
bajó apresuradamente del vehículo y se paró en seco mirando la casa de los
Burke, observando cada detalle de la casa esperaba poder recordar algo.
Pero
no pudo recordar nada y eso era lógico no había estado en esa casa más que unas
cuantas horas al día.
-Qué
pasa Neal?
-Oh,
nada, es sólo que pensé…pensé que podría recordar algo.
El
muchacho se sentó en el pequeño jardín de los Burke, sosteniendo su rostro con
sus manos mientras tenía los codos apoyados en las piernas cruzadas, con
expresión frustrada, era la primera vez que se mostraba afligido por su estado,
no había dicho a la pareja pero él tenía muchas de sus esperanzas en recordar
su pasado cuando fuera a casa.
-Está
bien cariño estas yendo paso a paso, qué te parece si ahora entramos y damos un
recorrido por tu habitación.
-Si,
eso estaría bien mamá.
-Vamos,
arriba vaquero…
En
cuanto Peter había terminado de decir la frase Neal tuvo imágenes dispersas de
un lugar extraño, sucio y de cero comodidad con Peter en él diciéndole la misma
frase… arriba vaquero…pero las imágenes eran extrañas para él pues su
papá parecía estar en todo su modo de
agente, extraño en verdad, porque en una de las imágenes que le vino Peter
decía que debía quedarse en ese lugar y él estaba rehúso a ello.
‘Por qué papá querría que me quedara
en ese lugar espantoso?, Debería contarles, a papá y a mamá, sobre estos
recuerdos?’
‘No
deberías ni dudar en hacerlo, después de todo las recomendaciones que te dieron
los médicos fueron claras: DECIR Y PREGUNTAR CUALQUIER RECUERDO QUE VUELVA A TU
MENTE!’
‘Ahora escuchó voces? Me volví loco de
verdad!’
‘Claro que no,
niño, soy la voz que nunca escuchas y exilias a tu gusto’
‘Es decir que si quisiera, ahora mismo, si
quisiera no oírte ya no te escuchare?’
‘Exacto’
‘Entonces ya no quiero oírte’
‘Pero
yo puedo ayudarte a recordar lo que olvidaste!’
‘Cómo harías eso?’
‘No
puedo decirte textualmente sólo puedo guiarte a recordar, es lo que hago al ser
tu conciencia…y ya deberías saber eso… me cansó de explicártelo tantas veces!’
‘Uhmmm entonces necesito una prueba de que
puedes ayudarme’
‘Grrrrr
para haber perdido la memoria sigues siendo el mismo Neal de siempre, obstinado
y convenenciero al obtener lo que quiere’
‘Me da igual, puedes o no puedes darme una
prueba real?’
‘Impaciente
como siempre, bueno, sólo por esta vez te diré algo textual pero no esperes a
que lo haga siempre’
‘Dime’
‘Busca las
fotografías’
Mientras
Neal tenía nuevamente una lucha interna en hacer caso o no a su conciencia
Peter y Elizabeth lo observaban sentado en el jardín y como los doctores les
habían recomendado ser pacientes con el avance de recordar, sólo lo observaron.
‘Cuáles?’
‘Cualquiera’
‘No eres clara conmigo, qué
fotografías?’
‘Aggg Niño, te
digo que cualquiera!’
‘Esa no es ninguna prueba real!’
‘Sólo
pide cualquier fotografía tuya!’
‘Uhmmmm’
Como
el tiempo pasaba y la pareja estaba dubitativa sobre lo que estaría pensando,
Peter decidió empujarlo un poco a que vuelva a la realidad’
-Neal,
vamos adentro, no tienes hambre?
Neal
salió de su trance y miró a Peter a los ojos, confundido de lo que acababa de
pasar por su mente.
-Mucha.
-ok,
vamos hijo, vamos.
Peter
ayudó a Neal ponerse de pie sujetándolo por el brazo izquierdo lo acompañó
dentro junto a Elizabeth que estaba a su lado derecho.
Y
en cuanto entró pudo sentir tranquilidad y también un aire acogedor, era mejor
de lo que había imaginado y eso lo puso feliz, para su buena sorpresa el
animalito peludo le alegró mucho más.
-Satchmo
te extrañaba mucho.
Elizabeth
dijo contenta incapaz de esconder su risa al ver como el perro estaba mimoso
con Neal, desesperado para que le rasque la panza.
-Hola
Satchi…
Neal
no defraudó al cachorro y se puso a jugar con él.
-ok,
Neal a lavarte las manos la comida ya está lista y es mejor servirla antes que se
enfríe.- dijo Peter.
-Es
cierto cariño, déjame mostrarte el baño y de paso tu habitación luego te
ayudaré a acomodar todo.-
dijo Elizabeth.
-Está
bien.
Mientras
subía las escaleras con Elizabeth al lado Neal no dijo palabra alguna, en lo
único que podía pensar era en si hacer caso o no a su conciencia.
Puso
mucha atención a cada detalle de su alrededor y en efecto lo que resaltaba en
el hogar Burke era la falta de una fotografía de él, de hecho le extrañó
muchísimo que no hubiera ninguna.
Estaba
muy concentrado en ver las fotografías pero de pronto una pintura llamó su
atención, estaba en un espacio de su habitación, era muy bella y no dudó en
pasar sus dedos por el relieve del paisaje como si intentara descubrir algo
oculto, hipnotizado por el cuadro se auto-obligó a olvidarse de las
fotografías, como si de un sexto sentido se tratara decidió no decir nada al
respecto, algo en su interior intuía que era mejor quedarse callado respecto a
las fotos, al menos por este momento.
Elizabeth
lo observaba atenta con una mini sonrisa, sabía que el colocar las pinturas de
Neal harían clik en su memoria para su beneficio.
-Todo
bien?
-Si,
me gusta este cuadro, es hermoso.
-Es
uno de los más bellos que has hecho.
-Yo
lo hice?
-Si,
tienes mucho talento como puedes ver.
-Me
encanta…mamá…
Neal
estaba dubitativo.
-Dime
cariño.
-…Yo…soy
pintor profesional? es que me parece que tiene un acabado artístico.
Elizabeth
sonrío, aunque por dentro se encontraba nerviosa, no debía mentirle pero no
quería decirle de golpe que era el mejor falsificador del mundo, así que como
le dijeron los especialistas sólo afirmó la verdad, sobre su presente
delincuencial se encargarían ellos de hacérselo saber.
-No
tienes un título que diga que eres profesional pero tu técnica es de las
mejores que he visto y soy especialista en arte.
Neal
sonrío y pensó:
‘Soy un hombre talentoso y con un pasatiempo
que puedo sentir me apasiona y mucho, me siento feliz de estar en casa’
-Te
espero abajo?
-Enseguida
voy.
Respondió
con una sincera sonrisa haciendo que Elizabeth saliera tranquila y muy feliz de
ver lo bien que le hizo a su hijo ver
una de sus pinturas.
Neal
dio un repaso por toda la habitación con la mirada y, nuevamente, se percató de
no encontrar ni una fotografía de él, respiró profundo y se dirigió al baño
para lavarse las manos, en el proceso veía
su reflejo por el espejo ovalado y tratando de encontrarse así mismo se quedó
pensativo.
‘Por qué no hay ninguna foto mía en
casa?...no hay ni una sola…ni siquiera de cuando era pequeño…no entiendo porque
papá y mamá no tienen ni una fotografía…por qué, debería hacer caso a la
sugerencia?’
Cerrando
los ojos fuertemente obligó a su mente traer los recuerdos que lo impulsaron a
despertar mientras estaba en coma, sintiendo tranquilidad por esas imágenes
decidió, sin pensarlo más, ignorar por completo a la voz de su conciencia que
hace unos momentos le había sugerido pedir una fotografía suya.
Poniendo
su mejor rostro y actitud bajó para almorzar con sus padres sin darse cuenta que estaba estafándose así mismo por actuar
de esa manera.
Ufffff, volvió el murmullo inoportuno!! =P Mencioné que no me cae bien? ejej! Metiche!
ResponderBorrarEstuvo muy lindo el capítulo, Carli!! ;-D Espero que Neal no recuerde nada y siga adelante con su nueva vida! Uhmmm supongo que ésa no es tu idea, pero en fin! :D Muy lindo
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
BorrarMe encanta que Neal se sienta parte de una familia... tampoco me gusta el murmullo inoportuno, solo me incomoda a Neal y me lo hace sentir inseguro ... !!!
ResponderBorrarMe encanta que Neal se sienta parte de una familia... tampoco me gusta el murmullo inoportuno, solo me incomoda a Neal y me lo hace sentir inseguro ... !!!
ResponderBorrarlindo y muy interesante no tardes en actualizar por fa
ResponderBorrarPor fin en casita.... ojala no recupere tan pronto la memoria y el tiempo le ayude a crear nuevos recuerdos y lazos con sus padres ejejej
ResponderBorrarUn abrazo Carla, lindo tu relato
Marambra
Qui buena historia me encantan todas sus versiones tube que volver en el tiempo pero ya me puse al día :)
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