Capítulo
11
Andrés
Al principio
pensé en llamar a mi papá, pero, cambié de idea al recordar la promesa que le
había hecho al traerme y en pensar en el problema que causaría si se llega a
enterar que el esposo de mi mamá me pegó. Sé que antes quería denunciarlo,
pero, la vida no es tan sencilla, me da miedo arruinarle la vida a mi mamá y
mis hermanos y que después me odien, de por si mi relación con ellos no es la
mejor, no puedo dañarla más.
Siempre
he querido tener una mamá normal, como todos, no entiendo por qué la mía me odia
y tuvo otros hijos, no puedo irme en su contra con mi papá… es posible que me
prohíba verla o que ella no quiera verme más. Lo que si tengo claro es que no
quiero estar aquí. Me levanté, empaqué todas mis cosas en la maleta y salí
caminando, no dejé notas, no me despedí ni le avisé a nadie.
Estuve
unos 45 minutos caminando hasta llegar a un terminal de buses, pedí un tiquete
y esperé hasta que nos fuéramos. Nadie me llamó, nadie se preocupó por lo que
podía pasarme al salir en la noche, a veces no entiendo como mis amigos se
quejan de que sus padres se preocupen por ellos, si yo fuera ellos lo
valoraría.
Llegué
a la ciudad en la madrugada, tomé un taxi y por fin pude dormir en mi cama, aun
me dolía en donde me pegó el papá de mis hermanos. Mi papá no se dio cuenta que
llegué, creo que ni siquiera me escuchó, cuando me desperté horas después y fui
hasta su cuarto él se impactó y me preguntó cómo llegué.
-Andy
¿Qué haces aquí? -Dijo muy sorprendido.
-Ya
llegué, ¡Sorpresa! -Dije medio irónico. Realmente lo fui a despertar porque
tengo hambre y no estoy de ánimo para servirme algo.
-Eso
me doy cuenta, pero, ¿cómo llegaste? -Me dijo por fin sentándose en la cama,
empezando con un tono de “quiero explicaciones”.
-Cogí
un bus -Dije levantando los hombros y restándole importancia. Quisiera contarle
lo que realmente pasó, pero algo me dice que es mejor quedarme callado, estoy
seguro que tengo marcas pero sé que voy a poder ocultarlas.
-¿Y
tu mamá permitió eso? -Dijo ya un poco molesto, creo que no le gusto mucho la
idea, pero es que tampoco podía inventarme otra cosa o decir que ella me había
traído.
-Pues
aquí estoy -Dije un poco desesperado, quería que dejara de interrogarme así que
probé sonar odioso, cosa que le molesta bastante y hace que deje de tener
interés en hablar conmigo.
-Tu
mamá es el colmo, por eso no me gusta que vayas con ella -Rodé los ojos, ambos
siempre le echan la culpa al otro de todo lo malo que pase… aunque normalmente
es mi culpa.
-Tengo
que hacer un trabajo importante para el colegio, y las cosas solo las tengo
acá… por eso tuve que regresar -Seguí hablando con fastidio y funcionó, mi papá cortó el drama
y cambió el tema.
-Está
bien, ya lo harás… ¿quieres desayunar fuera? -Asentí.
Como
ni él ni yo queríamos pelear y era lo que seguramente pasaría si continuamos
con esta conversación, además prefiero no dar muchos detalles sobre la visita a
la casa de mi mamá, igual él tampoco me preguntó mucho y se esforzó por cambiar
el tema y hacerse el divertido, el padre que hace los mejores con su hijo
jajaja. Mi papá no me pidió más explicaciones y me dijo que si quería podíamos
ir a cine, lo cual finalmente acepté… mi mamá no me llamó así que yo tampoco la
llamé a ella.
Alejandro
Ver
a mi hermana así había sido demasiado, por primera vez en la vida, tuve miedo,
miedo real de que mi hermana muriera. A veces la gente habla sin conocer mucho
de los desórdenes alimenticios, pero, la anorexia en verdad está matando a mi
hermana.
Empecé
a tener muchos sentimientos al tiempo; aún tenía algo de celos con ella por la
atención que le prestan mis padres, odio porque no entiendo por qué pasó,
desesperación de que no pueda hacer nada y miedo, miedo de que pueda pasar algo
realmente malo con ella.
Le
agradecí mucho a Juan su compañía, él es el que mejor puede entenderme… vivió
algo similar, con otras enfermedades y situaciones familiares distintas pero al
fin y al cabo, sabe lo que estoy sintiendo en este momento.
Lo
de Santiago, es un tema secundario para mi… es una cuestión de orgullo por
meterse con mi familia, y quizás es cruel, pero, el no pensó en el daño que
podía causar haciendo público mi problema familiar. Tampoco espero que se mate,
solo molestarlo un poco para que no lo vuelva a hacer.
David
me dijo que le harán una peor broma, no voy a participar directamente porque no
tengo mucho ánimo, pero, si me alegra contar con amigos que me apoyan y son
capaces de meterse en problemas por mí. Nunca obligaría a Juan a hacer nada
contra Santiago si no está de acuerdo… así que decidí no contarle y esperar a
que el plan se haga realidad.
Esteban
El
plan de David parece de película, es la clase de broma por la que todos
montarían un show en Youtube. La idea es hacerle creer que es nuestro amigo,
pero al final hacer un careo con él al estilo Big Bother. Estuvimos planeando
cerca de una semana, empezaría el plan el lunes y acabaría 15 días después.
Pero
antes, tengo que soportar este aburrido
fin de semana, mi papá hizo que viajáramos con él a tomarnos fotos idiotas de
la familia ideal, algo así como las pre campañas políticas. El problema es que yo
odio tener que estar en la costa porque el clima es muy caliente y hace que
sude, y además de todo, es donde vas a encontrar más gente pobre e idiota que
vende su voto.
A
los 3 nos da asco estar aquí, es algo que jamás diría en voz alta pero este
tipo de actividades son las que me motivan a hacer otra carrera, por nada del
mundo voy a ser político. A mi hermano es el que más se le nota fastidio, ha
mirado mal a todos y se la ha pasado con gestos irónicos, yo entiendo su
actitud, pero, solo va conseguir problemas con mi padre ya que la política es
muy aburrida y de solo apariencias, eso es lo que he aprendido con mi papá
Todo
habría salido bien si mi hermano le hubiese dado la mano a ese niño, en
palabras callejeras dirían que “le hizo el feo”, si alguien recapacitara
seriamente en eso, es algo completamente entendible, no somos monos de circo y
a nadie le parece divertido tocar gente con olores extraños y a parte
desconocidos. Lo malo para él es que las noticias jamás lo van a entender y
dirán que es un maleducado por no haber sonreído hipócritamente, lógicamente,
mi papá lo matará, porque sabe muy bien que esos pequeños gestos pueden dañar
tu imagen y la imagen es todo.
Cuando
nos subimos al carro mi papá pegó un grito muy fuerte, que claro, no escuchó la
prensa ni nadie más que nosotros y los escoltas, con un grito así cualquiera se
pondría a llorar, pero no, mi hermano estaba molesto. Por mi parte yo no dije
nada, me sentía tranquilo de no ser yo el que estaba en problemas, incluso
quería ser chupamedias y fingir que estudiaría mandarín. Al llegar al hotel mi
papá cerro la puerta de nuestra habitación de un portazo, se quito el cinturón
y fue corriendo hasta donde estaba mi hermano.
Ahí
cambié de idea, ¿mi papá siempre se veía tan violento? Me quedé casi paralizado
rogando en mi mente que mi papá no fuera muy duro con mi hermano. Sé que es
estar en su posición y no es para nada divertido.
-Papá
no -Dije casi en susurro, pero, me arrepentí apenas vi que venía hacia mí y me
cruzaba la cara.
PLAF
-Sonó, mis ojos se llenaron de lágrimas porque me había dado duro, antes no me
tiro al piso.
-NO
SE META ESTEBAN, ODIO QUE INTENTEN IMPEDIR UN CASTIGO -Gritó mi papá y yo
asentí poniéndome la mano en el cachete, seguramente tenía la mano marcada, además
me sorprendió que me usteara.
ZAS
ZAS ZAS ZAS auu ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS auu ZAS ZAS ZAS perdón ZAS ZAS ZAS ZAS
perdón ZAS ZAS ZAS auu ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS papá ya ZAS ZAS ZAS ZAS au ZAS ZAS
ZAS ZAS AUU ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS YAA ZAS ZAS ZAS AUU ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS YA ZAS
ZAS YA ZAS ZAS PARA ZAS ZAS ZAS PAPÁ ZAS ZAS ZAS YAA ZAS AU ZAS ZAS ZAS ZAS
Estuve
todo el tiempo de pie, viendo cómo le pegaban a mi hermano. Fue horrible, juré
que si llegaba a tener hijos jamás les pegaría, los gritos de mi hermano daban
miedo. Tampoco lo dejó inconsciente o con sangre, pero detesto sus métodos y
que le haya pegado por algo tan tonto. Cuando mi papá terminó lo dejó ahí
llorando, pensé que iba a salir y me iba a dejar ahí, pensé en consolar a mi
hermano, pero, antes de salir me cogió el brazo y me sacó de la habitación.
-¿Te
pegué muy duro? -Fue una pregunta algo extraña, iba a responder pero mi papá se
contestó solo -Lo siento, pero tú sabes que no me gusta que se metan en los
castigos que decido.
Al
decir eso yo lo miré con odio y el me pasó la mano por el cachete. Estaba algo
molesto, sentía que mi papá estaba siendo muy agresivo y que estaba sobre
reaccionando por cosas tontas. Lo de mi hermano era una estupidez y a mi me
había dado una cachetada de mierda solo por perdirle que se detuviera, me metí
al cuarto de mis padres, ignorándolo, y me puse a contestar los mensajes de
WhatsApp, esperando a que pronto se acabe el fin de semana.
Santiago
Mi
vida estaba siendo cada vez peor, sé que no soy la clase de persona a la que la
gente normal suele llamarla amigo, pero, tampoco merezco que todos me odien.
Detesto las miradas de asco de mis compañeros, todo es culpa de Alejandro,
organizó una campaña de odio contra mi y fácilmente lo logró, la vida para él
es una estupidez, es un niño consentido, tan ciego que ni siquiera es capaz de
ver más allá de sus ojos y que a los demás también les afecta lo que hace o
deja de hacer. Cuando lo vi tan afectado por lo de su hermana, quise ser
amable, ayudarle a entenderla, se veía frágil y algo desesperado así que
realmente no me dio la impresión de que fuera tan mala gente, pero, las
apariencias engañan.
El
mundo está lleno de gente egoísta y egocéntrica, me incluyo entre ellos pero,
aunque yo esté loco, aun siento algo de empatía y si Alejandro hubiera hecho
algo parecido conmigo, yo no hubiera reaccionado tan mal, ni tampoco estaría
poniendo a todos en su contra. Ya no tengo ganas de ir al colegio, yo intento
que no me afecte, pero cómo no te vas a sentir afectado cuando una chica linda
te dice de frente que le das asco y además, todos los demás le dan razón.
Mi
mamá ya notó que algo pasa, y que me haga preguntas todo el tiempo solo hace
que me enoje más, lo cual me asusta. Intento hacer ejercicios de relajación que
me enseñaron los psiquiatras, pero cada vez más difícil, ni siquiera el
medicamento ese, que hace que me sienta un poco más feliz o al menos me baja la
ira, me está calmando lo suficiente. Odio con mi vida estar loco, quisiera que
apareciera un genio de los deseos al frente mío y poder desear ser alguien
normal.
Desde
que me desperté tengo ansiedad, se mezcla de una forma impresionante con el
TOC, quiero contar cada paso que doy e incluso seguir mis rutinas, pero el
miedo que siento de lo que puede pasar no me lo permite, y eso me está
volviendo loco. Estar luchando contra mi propia mente todo el tiempo me está
agotando de una forma impresionante.
Mi
mamá, como siempre, me dejó en el colegio, fui hasta el baño, me lavé las
manos, saqué un libro de mi casillero y entré al salón. Hoy si estaban todos,
Andrés estaba hablando muy serio con Juan y Alejandro mientras que, Esteban y
David estaban revisando algo en un portátil. Verlos tan tranquilos, como si no
estuvieran dañando la vida de alguien me ponía muy enojado, en especial con
Alejandro.
Cuando
entré algunos chicos me miraron con asco y se alejaron un poco, me senté en mi
pupitre y pronto llegó Gustavo hasta donde yo estaba, me alegraba tener un
amigo, pero sentía que estaba siendo un mal amigo para él, en realidad pésimo,
a él también lo estaban evitando solo por intentar ayudarme.
-Santi,
ya te viste la nueva temporada de “13 reasons why”? -Me preguntó y yo negué con
la cabeza, ni siquiera tengo Netflix.
-No
me gusta esa serie, siento que es tonto culpar a los demás por tu suicidio,
quizás sus acciones hayan tenido algo de influencia en lo que pasó pero, que
ese sea el argumento de una serie completa es patético y más grabarlo en
cassetes de los 80s. -Si sé de qué trata la serie, me la ha recomendado mil
veces youtube.
-Puede
ser, pero toca temas interesantes -Dijo Gustavo, iba a seguir, pero de la nada
llegaron Esteban y David a mi lado y dijeron:
-¿Hacemos
las pases? -Dijo David extendiendo su mano, al decirlo todo el salón se quedó
callado, Alejandro había salido lo cual se me hizo extrañísimo, en sí la
situación lo era, ¿qué pasó?
Me
sorprendió bastante, lo mismo que a todo el curso, me miraban con ojos
expectantes… sentí mucha presión, algo me decía que no era buena idea, esas
reaccionen no tienen mucho sentido y menos preciso el día en el que todos
volvieron, pero, me ganó la presión social, yo quería que me dejaran en paz
todos así que asentí y le di la mano a David.
Ambos
sonrieron como si tuvieran algo entre manos por lo que sentí un escalofrío que
me recorrió todo el cuerpo.
Enserio que Andrés también necesita atención porque como es que su mamá no se preocupó por saber si llegó bien o si de verdad había llegado a casa de su papá.. y su papá que ni dijo nada 🤨..
ResponderBorrarAlejandro debería reflexionar en lo que están haciendo pero no lo hace y pues si está bien afectado por lo que está viviendo su hermana..
Y lo de Esteban que fastidioso es su padre que por quedar bien con los demás maltrata a sus propios hijos!! 🤦🏼♀️..
Pobre Santiago la que le espera.. no debió confiar en los chicos 😕..