lunes, 8 de junio de 2015

LEY DE LA FAMILIA ALVIZO: DONDE HAY CELOS… HAY ZAS! ZAS!



LEY DE LA FAMILIA ALVIZO: DONDE HAY CELOS… HAY ZAS! ZAS!
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Capítulo 5
Me levanté antes que todos en casa. Estaba tan emocionada… Hoy sería un día muy especial para mi familia…había un anuncio muy importante que hacer y aunque tenía tooodo un día de trabajo para dejar las cosas listas para la tarde, no podía ocultar mi emoción.
- Buenos días, mamá! - Dijo mi Tomatito, apareciéndose por detrás mío en la cocina, regalándome un beso en la mejilla. Hoy se levantó de buen humor mi bebito.
- Buenos días, mi niño!! - Le respondí, besándole la frente.-Tomy no se te olvide que hoy tenemos una reunión aquí... Así que, saliendo de tu clase, te vienes que necesito ayuda para arreglar la casa! Esto es un chiquero!!
- Ayy maa!! Pero para qué celebramos que Santi ya va al baño solo!! - Le di un pequeño zape en la cabeza.
- No es por eso, Tom, hay una noticia que les tenemos que anunciar...
- Dimee!! Qué es?!
- No, hasta en la noche. Anda, desayuna algo y te llevo a la escuela.
-Sabes?! Yo puedo manejar... No te tendrías que levantar tan temprano...
- Mmmm… la oferta es tentadora... pero estás castigado, así que apura...
- DAVID, te quedas con Santi!!
-Sí, mamáaaa!- Contestó mi marido, en tono de broma desde la habitación de arriba. Estaba despertando a mi otro bebé.
-Y ya que hoy vas a quedarte en casa, por qué no pones la ropa sucia a lavar?!- Le dije, guardándome la satisfacción de oírle refunfuñar. :D

Tomy.
Subí al carro muy a mi pesar. Casi nunca voy en el carro de mamá, pero estos días no tenía de otra. Grrr! Cómo odio cuando se ponen pesados con los castigos.
Estaba por de encender la radio para distraerme un poco mientras mamá venía, pero algo me llamó mucho la atención; había en el piso una bolsita de bebé con un biberón y un pañal. Pensé que a lo mejor podía ser de Santiago, pero él ya no usa eso...
En ese momento, mi mamá subió al carro, pero rápido se salió y vi que se encerró en el baño y que papá fue tras de ella.
Me cayó el veinte...
No. Puede. Ser!!! Noooo!! La noticia es otro bebé!!! Yo no quiero otro hermano!!!
Por qué?! Por qué?! Por qué?! Por quéeeee?!!! Mi vida está bien como estaaaá... Bueno, estaba mejor hace cinco años, cuando tenía a mis papis para mi solito, pero igual ya me acostumbré al enano...
Nooo!!! Otra.. snif snif...otra vez m..me van a reemplazar…Grrrr… Todo es culpa de papá… seguro que..snif.. que si él no la llevaba a la playa.. buaaaa….Ahora ya no es suficiente ni con Santi ni conmigo.. por eso tienen otro bebéee… yo no fui su..suficiente en primer lu-lugarrr!! Buaaa!!!
Snif snif...no puedo evitar que se me escapen las lágrimas. Quiero llorar. Quiero gritar. Estoy tan enojado! Para qué quieren otro hijo?!! Si ya están viejos para tener niños!

Loreta

Uhggg… sabía que no debía haberle puesto esa mayonesa al pollo. Lo sabía. Pero la deseaba tanto. Uhhh, mi cabeza! No puedo enfermarme justo hoy!
David me alcanzó un pañuelito y se puso a mi lado, preocupado por verme tan indispuesta.
-Gracias, amor. Creo que ya estoy bien.-Le dije, con una tenue sonrisa.
-Estás segura, cariño?! Si quieres yo puedo ir a dejar a Tomy a la facultad. Tú mejor te quedas a descansar…
-No, amor. Estoy bien, no te preocupes. Ya estoy mejor… fue ese tonto aderezo.. sabía que me iba a hacer mal… pero en fin… ya me siento bien. Mejor llevo al niño a su clase. Ya se hace tarde. -Me enjuagué la boca con mucho líquido y me lavé los dientes, antes de salir volando a la universidad. No quería que Tomás llegara tarde, pero creo que ya es un hecho.
-Cuídate, Cielo. Te amo.- Me dijo David dándome un beso rápido.
-Tú también.
- Listo, Tomy? Ey! Por qué lloras, mi cielo?
- Nada! Llegamos tarde! - Me gritó muy cortante. Decidí dejarlo pasar porque no me quería estresar más hoy. Tenía mucho que hacer...
Cuando pasamos por una pastelería, no pude evitar notar el pastel favorito de todos.. era un manjar!.
- De regreso compraré ese delicioso pastel... - Pensé en voz alta. Tomy me miró raro pero no me dijo nada.
Cuando llegamos a la facultad, sólo se bajó.
- Adios, mi amor... Te recojo a las 11 en punto!!! -Pero Tomás ni chau me dijo, se limitó a echarme la puerta en la cara y casi corrió a la facultad. Qué niño.

Dan

Vi a Tomy entrando y me dirigí a hablar con el.
- Tomás? Por qué tan tarde, hijo?-
- Mamá se sintió mal... Puedo pasar?
- No creo que te dejen... Pero te haré un pase... Anda ve... Y no llegues tarde a la siguiente...
Tomy estaba muy distante, pero no tenía tiempo de adivinar qué le pasaba; tengo clase.
-Ok. -Me respondió y me siguió de mala gana. Habrá discutido en casa?! La verdad, espero que no. Hoy tenemos una reunión en casa de mi hermana… hay una gran noticia para dar… y espero que mi niño no esté de mal humor, quiero que disfrute de éste día.
Arrimé mi mano a la mejilla de Tomy, había visto un rastro de lágrima. Seguro se llevó unas palmadas y por eso anda odiosito, mi mocosito berrinchudo.
- Ve a clases, mi chiquito. Vas a mi oficina cuando salgas.
Así, viendo que entrara al aula, yo me fui a dar clase.
Después de dos horas me fui a mi oficina a esperar a Tomy, pero nunca llego. Iba a pasar por el salón para echarle un ojo para ver como estaba.
Si de estar bien, está bien metido en su celular en lugar de en la clase!
- Profesor Salmeron, me permite al alumno Tomás Alvizo. Sólo será un momento...
- Qué pasa, tío?!! Estoy en clase!!
Le agarré del brazo y lo saqué del salón.- Pasa que no estás prestando atención, jovencito, y yo ya te había advertido lo que pasaría si te volvía a encontrar mandando mensajes en lugar de estar atento a tu clase. Así que dame ese teléfono ahora mismo, Tomás.
Tomy abrió enormes sus ojos y apretó el celular en su mano- No, tío. Es mío. No puedes quitármelo- Replicó, haciendo que me molestara más.
Me pasé la mano por la cara sintiendo un cansancio repentino.
 -Escucha, jovencito, vas a entregarme ese celular en éste instante si no quieres que te de unos buenos azotes aquí mismo!!
- Siempre con amenazas!!! Ya estoy harto!!!- Se quejó cruzando los brazos.
- Cuida ese tono, joven, y cuento tres para que me lo des... 1... - nada - 2... - Peor cruzó los brazos ... 2.1 2.2 2.3... - Tomás? - Se dio la vuelta para entrar al salón y antes de que pudiera hacerlo, le agarré del pantalón. - bien... Tres!
PLAS PLAS PLAS
En ese instante me olvidé que era un profesor, que estaba en la universidad, que estábamos en pleno pasillo y que habían cámaras de seguridad filmando precisamente aquella escena, pero la desvergüenza de éste mocoso había superado mi paciencia.
Tomás se dio la vuelta a mirarme con los ojos cargados de lágrimas y también odio. Suspiré ruidosamente- Tom…- Quise pedirle disculpas o al menos explicarle por qué había reaccionado así, pero Tomás estaba muy lejos de querer escuchar cualquier cosa.
-Métete el celular por donde te plazca!- Me gritó aventando el aparato a mis manos al tiempo que salía corriendo, como cuando era chiquito y tenía ese tipo de berrinches donde salía corriendo; yo no corrí tras él, sino él comenzaría a irse por otros lados que no debería... Así que sólo lo seguí con la mirada hasta que vi que se metió al baño. Fui tras él.
Por suerte no había nadie en el baño así que lo cerré con llave -que por ser maestro y asesor tenía-. Tomás se había metido a uno de los cubículos.
-Tomás, sal de ahí... Vamos
- VETE!! Déjame solo!!
- Nunca! Anda, sal. Hablemos, sí?!- Traté de ser conciliador, de hablarle calmadamente y hacerlo reaccionar, pero no obtuve respuesta. Ya me había cansado de tanta insolencia, así que con el truco de mis años en la escuela... Abrí la puerta de donde estaba Tomás enojado, arriba del inodoro.
-Qué rayos sucede contigo, niño?! Baja ya mismo de ahí, Tomás, que se me acabó la paciencia hace rato.
-Lárgate!!!- Gritó, empujándome a un lado para salir del baño. Lo alcancé antes de que tocara la perilla de la puerta de salida y lo hice inclinar bajo mi brazo.
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS
- Auuuuu!!
- au nada! Si aún ni hemos empezado! Desde la mañana llevas una cara que sólo tú te aguantas. PLAS... Teníamos un trato, Tomás... PLAS...  Ahora... PLAS.. PLAS… Ya dejaste de hacer tu berrinche? Porque sólo alargas más el castigo...
-Buaaaaa… ya, tío, yaaaa!! Lo sientooo.. buaaaa… t..tú me has.. snif snif.. me has pegado en..en frente de ellosss… buaaaaa… se van a reír de..de miiii… mis co.. mis compañeros… buaaaa…- Tomás lloraba tanto por apenas unas cuantas nalgadas?? Eso me hizo poner en alerta. Mi sobrino era un verdadero dramático pero no a tal extremo.
Con cuidado, le ayudé a incorporarse y lo abracé.
-Shhh.. shhh… Hey, Tom. Ya está, cariño, shhhh… Ya está. Vamos, mi nene, que no te pegué tan fuerte… shhhhhh… Vamos, mi niño, no llores, si?!- Le decía suavemente tratando de consolarlo y limpiarle las lágrimas con mi pañuelo.
Terminé sentado en el inodoro, con el niño sentado en mi regazo.
Tomy se acomodó en mis brazos y se dejó mecer hasta que pudo controlar sus sollozos.
- Me vas a decir qué pasó? - Tomy negó con la cabeza. Suspiró profundamente y unos segundos después me dijo:
- Me pegaste frente a todos!!
- Tú me desobedeciste... Te lo advertí... A parte, todos estaban en clase. Apuesto a que nadie vio nada!
- Bueno... Perooo... no es justo!!! Todos tienen sus celulares y no les dices nada!! - Sonó tanto como Santi...
- Ellos no son mis niñitos... Sólo tú... - Le di un toquecito en la nariz- Vamos, levántate.
- No, tío. Ya no más!!
- No, Tomy, pero tienes que ir a clase...
- Estás seguro que nadie vio naditaa?!
- Seguro!!
- Buenoo. Me devuelves mi celu??
- jajajaja!! No. Habíamos quedado que no más celular. Yo te lo daré- En eso se oye la campana... Ya se acabaron las clases... - ahora... Pero el lunes antes de clases me lo tienes que dar, si no quieres que le diga a Lore que te lo quite ya.
- grr!!! Ya estoy grandeee!! -Me reclamó.
-Sí, ya estás grande y pesado -Me burlé, jugando con el puchero que hizo- pero eso no quita que sigas siendo nuestro niño.-Le di un besito en la mejilla y me dispuse a abandonar el baño, consciente que algún alumno podría necesitarlo y saqué a Tomás de ahí. Nos fuimos un rato a mi despacho donde traté de hablar un poco con él para saber por qué se había comportado como lo hizo.
Hoy era un día muy especial para todos y yo no quería verlo triste ni enojado.
-No pasa nada, tío.-Me respondió esquivando la mirada.
-Sabes que puedes confiar en mí, verdad, hijo?!-
Tomy asintió con la cabeza, pero luego continuó mirando sus manitos.
Qué estará pasando por esa cabecita?!
En eso entra Loreta como loca al despacho.
- Tomás!! Te dije que a las 11 afuera!!
Lo levantó y le dio una palmada en su colita.
- auu! Mami... Lo siento! No me acordé! No me acordé!! - dijo cubriéndose con sus manitas y caminando lejos de Loreta.
- Loreta, lo siento. Fue mi culpa. Yo le hablé después de clases.
- ay, Dan! No puedes esperar hasta la tarde?! Y tú, Tomy, a ver si recuerdas todo lo que te digo! Anda, mi amor, te compré un helado de tu favorito y se está derritiendo en el carro.
- Te perdono porque me trajiste helado...
- jajaja! Anda, mi vidita. - Loreta salió pero no sin antes sacarme la lengua a mí.

Loreta
- Mami, ya está muy derretido!!! - Se quejó mi bebote, tratando de agarrar un poco de helado con la cucharita.
- Si hubieras llegado antes no estaría así. -Le respondí.
- Me compras otro? - Me pidió con pucherito y todo. Sabe que no me puedo resistir a eso.
- Mañana, sí? Hoy tenemos muchas cosas que hacer...
-Y qué es eso tan importante que te tiene tan ocupada?! -Gritó mi Tomatito muy enfadado, haciéndome desviar la vista de la calle por unos segundos.
-No me grites, jovencito.- Le reprendí- Y ya lo sabrás más tarde. No seas tan ansioso!
Tomy se cruzó de brazos y se enfurruñó en el asiento. Uffff!!! No sé qué le pasa a mi hijo. Había estado tan risueño en la mañana.... Si no fuera porque tiene 20 años ya, diría que es la adolescencia.
Pero mi bebé es más inestable que un adolescente.
- BUSH! - Tomy se volteó y no me dijo nada en lo que quedaba del camino. Fui a hacer unos mandados pero él no se quiso bajar, y cuando llegamos a la casa se fue directamente a su cuarto. Decidí no llamarle la atención, esperando que el mal humor se le fuera solo, y fui a ver qué hacía mi otro niño.
Santi estaba jugando con sus monitos en toda la sala, y esa parte ya la había limpiado!
- Santiago!! Qué te dije de jugar en la sala?
- Mamitaa!! Es que en mi cuarto me aburría!!! - Caminé hacia él, lo levanté del piso y le di una palmadita, pero él comenzó a moquear, así que le di un beso en su cabecita.
- sniff buaa... lo sientooo
- Ya, mi cielo. Anda mi amor, recoge tus cosas y te vas con los abuelitos.
- Noo, mami! Yo quielo estar contigoo!
- Mi amor, mamita tiene que limpiar, te vas a aburrir mucho; papi te va a llevar con los abuelitos un ratito. Hace mucho que no los ves, y el abuelo dijo que te tenía una sorpresa!! -Bastó decir sorpresa para que se le iluminaran los ojos.
- Buenoo... Voy a recoger mis cosas!
Subí a la planta de arriba y fui a mi habitación. David me estaba ayudando con nuestro cuarto.
- Mi amor, puedes llevar a Santi con tus papás?
- Bueno. Y a Tomy?
- No, a Tomy no.
- A mí no qué? - preguntó Tomy entrando al cuarto.
- Que tu vas a ayudar aquí, y no vas a ir con los abuelos.
- Pero yo no te quiero ayudar a limpiar!!! Quiero ir con los abuelos!
-Tomás. - Advertí, pero mi hijo estaba malhumorado nuevamente.
- Tomás qué?! Eh?! Claro!! Me quieres como tu esclavo, verdad?! - Me gritó, provocando que David se enfadara.
Mi esposo es más tolerante que yo en muchas cosas, pero que mis hijos me levanten la voz o me falten el respeto es algo que nunca deja pasar y Tom lo sabía, pero cuando se pone caprichoso ni eso lo detiene de demostrar su enojo.
-Vas a disculparte con tu mamá ya mismo, señorito. -Le dijo agitando el dedo índice frente a su carita- y después vas a ir a tu habitación y me esperarás con el pantalón bajado...
-No, David. Déjalo por ésta vez, sí, amor?! Además, tienes que llevar a Santiago, no lo olvides....
David respiró por la nariz haciendo un ruido fuerte, parecido al bramido de un toro.- Está bien, Lore. Sólo por ésta vez.-Me dio un beso en los labios y yo le sonreí. - Ahorita vuelvo.
- no tardes...
- Yo voy! - dijo Tomás. Parecía que no sabía cuándo parar.
- No! Tú vas a recoger tu cuarto, que parece un chiquero!! -Le ordené.
- Noo!
David -que ya se iba- se regresó, volteó a Tomy y le estampó tres azotes.
- AU AUUU AY!
- Basta, Tomás!! No quiero tener que castigarte más!- Regañó mi marido.
Tomy se soltó del agarre de David y se fue enojado a su cuarto, azotando la puerta; yo cerré los ojos agarrando paciencia de donde no tenía. Sólo sentí un beso en mi frente.
- Ahora vuelvo... - Susurró.
- Sí. Ve.
Me fui a lavar los platos, a hacer la comida y recoger el comedor, todo al mismo tiempo.
Al rato llegó David y siguió ayudándome con la sala y los demás cuartos.
A eso de las 2 de la tarde subí a decirle a Tomy que ya era hora de comer. Pero me llevé una sorpresa... Estaba dormido!! Sin haber hecho nada!!!
Cuándo no, éste Tomy desobedeciéndonos…. Y después se queja cuando uno lo castiga…. No, si es un crío de lo más sinvergüenza mi hijo. Desde pequeño lo fue… a veces cuando lo miro, puedo ver a ese niñito risueño, con pecas en su naricita, que se colgaba de mis piernas para que le comprara dulces o un juguete…. Lo adoro tanto. Por eso me duele darle un escarmiento, pero a  veces es justo lo que él se busca… como ahora!
Estuve tentada de bajarle el pantalón y ya mismo darle unos cuantos cepillazos, pero cuando vi que había estado llorando no pude hacerlo. Me senté en la cama, muy cerca suyo y le acaricié la espalda.
Qué andaría rondando esos pensamientos?!
Le pasé mi mano por sus rulos y antes de irme me incliné para darle un beso.
Ya almorzaría más tarde.
-No va a comer?!- Preguntó David, frunciendo el ceño.
-Está dormido...-Le respondí- 
-Y me imagino que no limpió nada, verdad?!
-No, amor. Nada. Pero no te preocupes, ya lo pondré a limpiar más tarde.
-No, Loreta. Ya se lo dejé pasar hace rato... -Dijo sacándose el cinturón.
- Guarda eso, David, y siéntate a comer!!
- No, Loreta! A ese niño lo tienes muy malcriado!! Y ya fue suficiente!!
- David, estaba llorando... Algo le preocupa... Mi niño no es así...

Tomás
Había sentido el besito de mamá en mi mejilla y decidí que además de un beso quería un abrazo. Me sentía muy miserable con todo esto y necesitaba algunos mimos para que la  sensación de soledad no me ahogara tanto, así que bajé a buscar a mi mamita al comedor. Estaba con papá hablando de algo en la mesa, así que me quedé en la escalera y me puse a escuchar lo que decían.
-Se porta peor que Santiago- Decía mi papá, quejándose de mí… como siempre-  y eso que Santi es un niño.
-Lo sé, cariño. Pero espero que se anime con la noticia y se vuelva un poco más maduro..- Dijo mamá, sonriéndole a papá.
-Cómo crees que reaccione?!- Preguntó él, agarrándola de la mano para darle un beso.
-Ayy! Estará fascinado, ya lo verás- Mamá se sentó en el regazo de papá y le dio un beso... Wacala...
-Crees que sea niño o niña?!- Ohh!  Ahora ya no me caben dudas… mamá está embarazada… buaaaa!
-Una niña… ya tenemos a Santiaguito y a Tomás, pienso que una nena le vendría muy bien a la familia.
-Jajaja! Tienes razón! Además esos dos niños nuestros valen por doce! Pero me gustaría otro varoncito.
-Nena...  - Mamá le dio otro beso a papá. >.<
-Varón..
-Nena…
No pude más! Me senté en las escaleras tratando de calmar mi respiración y mi llanto, que no me dejaban ver ni respirar. Me estaba ahogando con mis sollozos. Mi corazón estaba destrozado.
Desde siempre había sido sólo yo, hasta que tenía 15 y mamá ya no pudo ocultar más la panza de embarazada. Al principio todo era para mí, pero cuando mi hermano nació todos querían venir a conocerlo, le traían regalos cada vez que venían y a mi? Para lo único que se acordaban de que existía era para las fotos de "hermanos" y que le calentara la leche! Y peor fue cuando hacía sus gracias de niño pequeño. Yo quiero a Santi... Es mi hermanito, pero extraño ser hijo unico.
Salí corriendo a mi habitación cuando escuché que papá volvía a reclamarle de mí a mamá.
- ...tiene una hora para limpiar su cuarto, si no va a ver!!
- ay David! Después de comer me ayudas con el baño y vas por Santi. La familia llega a las seis.
- Lore... Que yo no me porté mal!!!
- Calla y come!

Loreta
Con David nos quedamos fantaseando en el nombre y el pequeño rostro de la princesita que pronto llegaría a nuestras vidas… porque yo esperaba que fuera una nena! aún cuando adoro con mi alma a mis tres mocosos! Comimos y luego seguí lavando los platos de la comida y lavando la ropa. David fue a despertar a Tomy para que fuera a comer y a advertirle. Grr.
- Te odio!!- Gritó mi niño y bajó las escaleras, corriendo.
- Tomy... Tomás... Ven acá!!! - Grité cuando lo vi irse ciego hasta la puerta de entrada..
- Me voy!!
- No vas a salir de aquí, Tomás Alvizo!!- Le dije agarrándolo del brazo- Recuerda que prometiste que no lo volverías a hacer!
- Pero para qué me quieres aquiiii... Ya tienes a tu bebé... Yo soy un estorbo. -Eso nos dejó sin habla a David y a mí. De dónde habían venido esos arrebatos de celos ahora?! Sólo porque no lo dejé ir con sus abuelos?! No lo creo.
-Hijo, qué dices?! Tú jamás serás un estorbo, bebé. Nunca, mi amor... Por qué estás así, hijito? Qué pasa, mi bebé?!- No podía ser estricta cuando mi niño se siente tan frágil e inseguro.
- Nadaa!!
- Pues si no es nada deja el berrinche y los celos!! - dijo David entrando por atrás.
- Déjame en paz!!!
- Suficiente. - Susurró David agarrándolo del brazo y le propinó dos cinturonazos.
- Ve a comer y después vas a terminar tu cuarto! ZAS vamos!!! Que no nos puedas apoyar en algo tan simple!!! - Vi en los ojos de Tomy que se le aguadaron. Algo tenía mi niño, yo lo sentía. Por eso no lo quería castigar, o no todavía...
- Ven, mi amor. Te he preparado la comida que te gusta. Anda, mi bebé.
Sentí que Tomy necesitaba un abrazo o un mimito. Quise tocarlo, pero me apartó la mano y caminó más rápido hacia la cocina. Suspiré cansada, pero no le dije nada y le serví para que comiera. David se fue por Santiago y yo me quedé ultimando unos detalles.
Cuando Tomy terminó de comer se levantó, lavó su plato y se fue a su cuarto.
- Tomy, a recogerlo sino no bajas a la cena!
- Pues no bajo!! Al cabo que no me necesitan!! Me vas a volver a reemplazar! -Dijo con un hilito de voz, limpiándose unas lágrimas con el puño de su remera.
-No puedo creer que sigas con eso, hijo. Ahora de qué vienen tus celos, eh?! Te aseguro que no tienes de qué estar celoso, Tomás, pero si sigues por ese camino lo único que logras es que nos enfademos contigo. Haz caso, mi cielo. Vamos! Yo te ayudo a levantar las cosas y tú tiendes tu cama, sí?!

Tomás
Mamá estaba siendo todo lo considerada que podía. Yo lo sabía, pero no por eso dejaba de sentirme traicionado por ella. Iba a tener otro bebé. Otra vez. Como si con Santiago no hubiera tenido suficiente.
Yo no dormí bien casi dos años por causa de mi hermano y cuando mis notas bajaron -por culpa de los desvelos- mis papás me bajaron el calzón y me castigaron injustamente.
Ni siquiera me preguntaron si quería un hermano... Nada más lo tuvieron y lo metieron a mi cuarto!!!! Espero que al menos ahora no hagan eso y lo pongan en el cuarto de Santi que sino...
Mientras mi mamá me ayudaba a recoger unas cosas que estaban en el suelo, yo tendí mi cama. No hablamos de nada aunque ella estaba tratando de que se me pasara.
- Tomy, tengo que terminar abajo, mi cielo. Ya casi acabas aquí, a ver si tu papá ya se le pasa un poquito... Cuando termines te das un baño y bajas. Quiero que me ayudes a acomodar las cosas.
- Bufff!
- Tomás deja de bufar y ponte a trabajar! Anda!
Yo sabía que estaba estirando de la goma demasiado... Normalmente ni eso me hubieran dejado con una advertencia... O bueno... Tal vez sí... Depende de cómo de hartos ya los haya tenido.
Ya estaba cansado de recoger mi cuarto; decidí prender la tele mientras lo pongo en orden.
Terminé de recogerlo, y en eso pusieron una buena película y me la quedé viendo. No supe el tiempo que pasó hasta que papá entró pegando un grito.
- TOMÁS!!!
-Papaaaaá! No puedes tocar la puerta?! -Le reclamé. Ahora ni privacidad tengo.
Iba a decirle algo más pero papá ni tiempo me dio; se vino hecho una fiera hasta donde yo estaba, recogió una de mis zapatillas y aprovechando que yo estaba boca abajo en la cama, me empezó a dar palmadas con eso en la cola.
-Ayyyyyyyy... Papá.. Papaaaaaá... Dueleeee.... Noooooo....Buaaaaaaa...BUAAAAA!!!!
-Por Dios, qué escandaloso eres, Tomás! Fueron tres chirlos nada más, pero si no estás listo en 15 minutos vendré a darte la versión completa... PLACK... PLACK...
-Auuuuu.... Buaaa... buaaaa... No quiero bajar... Buaaaa....- le dije sobando mi nalguita dolorida.
-Hijo, estoy pensando seriamente en bajarte el pantalón y darte una buena tunda a menos que me digas qué te pasa y por qué estás tan odioso el día de hoy.
- No! Yo no te digo nada!!- Dije parándome y yéndome hacia la pared para proteger mis pompitas de futuros ataques ya prometidos. - yo no te importo! Para qué quieres saber?!!
- Claro que me importas, Tomás! Por eso mismo te pregunto!  No digas tonterías, hijo!
Dime qué te pasa. -  Me quedé callado viéndolo, hasta que no pude y bajé la mirada. Sentía que me estaba comportando como un niño malcriado pero no me importaba. Mi papá se cansó de esperar respuesta y resopló.
- Tienes 10 minutos para bajar, Tomás. Si no ahora sí que me saco el cinturón!!- Me quedé en el lugar donde estaba esperando a que papá se fuera, pero parecía que eso no iba a pasar. - MUÉVETE! - Papá dio un paso adelante y yo corrí al baño. Sentí cuando me dio otra palmada cuando pasé por donde estaba el.
Me bañé rápido pero no tenía ganas de bajar. Al ratito, Santiago golpeaba la puerta de mi cuarto.
-  Tomyyy!!! Dice mami que bajes yaa!!!! Y dice papi que te va a hacer ZAS ZAS si no haces caso. Sal Tomyyy, no me gusta que llolesss!!!
- Déjame Santiagoo!!- Oí los paso inconfundibles de papá.
- Dejalo Santi, ve con la abuela. Te trajo unos chocolates!!
- Tomás cuento hasta 3 para que abras la puerta y te aviso que te acabas de quedar sin ella. Sabes que la privacidad se gana. -No es justo! No es la primera vez que me la quita! Y odio cuando me castiga con eso!! Luego me pega y todos pueden verme mi colita roja y pegada a la pared! - 1.... 2....
Snif snif... Lo odio. Lo odiooo... Y no lo perdonaré... No los voy a perdonar jamás. Van a tener otro hijo y quieren anunciarlo a todos como si fuera la mayor alegría, mientras que a mí se me estaba cayendo el mundo una segunda vez... OTRO NIÑO… o niña... Y si fuera una niña?! Yo sería su hermano mayor... La tendría que defender porque sería mi hermanita y es mi deber de hermano mayor... Y...
-3... - oh oh. Papa entró hecho un león hambriento a mi cuarto; me tomó de la oreja y me puso sobre sus rodillas. Me quitó toda la ropa dejando mi colita al aire y me empezó a azotar. Yo trataba de no llorar porque había dejado la puerta abierta y no sabía quién más estaba abajo.
-Estabas buscándote esto desde muy temprano, jovencito. Y no digas que no te dimos muchas oportunidades ya, pero has llegado al fondo de mi paciencia. Y esto es lo mínimo que te mereces.
Dicho eso, mi papá me calcó sin remordimientos su enorme manota en mi indefensa retaguardia.... Ayyyyy.... dueleeee.... Buaaaa....
- Ya paapaaaá - Ya no me importa quién oiga!! Esto duele- BUAAAA
- Bajas ya! O sigo con la correa?
- bajoo buuaaaa
En eso entra mamá, supongo que atraída por los quejidos.
- David! Te dije que tuvieras más paciencia!!!- Le reprochó mientras subía de mi pantalón.
- Y la tuvee!! Pero no abría ni la puerta! - En eso siento una palmada de mi mamá.
- No te pases, jovencito! Baja ahorita mismo.- que paso con la paciencia? - la cena se acaba a las 9;30 para ti, ni un minuto más!! 
-Buaaaaa.... No quiero comer nada..  No quiero bajar...váyanse al diablo los dos y el bebé también!! - Grité con todas mis fuerzas. Me sentía herido y traicionado... No había nadie que me entendiera y me diera un abrazo, mis padres sólo me daban palmadas y retos... Ahora sí, me largo de la casa... A vivir bajo un puente si es necesario, pero sin nalgadas!! Aún cuando me falten los besos y los mimos, y..y...y papá no esté para arroparme en las noches, prefiero estar solito que tener que quedar en tercer lugar en el corazón de mis padres.
Papá adivinó mis intenciones y me agarró del brazo, me puso en la cama y me dio diez correazos que me hicieron llorar con más fuerza. Y seguro que iba a ser peor con su otro bebé, todos los mimos se los repartirían entre Santi y el otro!!
- Tomy te hemos dado muchas oportunidades para que nos digas qué es lo que te pasa, pero tú no nos dices! Dime qué hacemos? Nosotros no tenemos la culpa de...
- Que ustedes no tienen la culpa?!  snif snif… Pero si son los más culpables?!!
- Por qué dices eso? qué hicimos?
- Van a tener otro bebé!! Y me van a dejar por segunda vez!! Los odio!! -Mamá y papá me miraron como si yo estuviese loco.
- Por qué dices? Jajaja Tomy! Nosotros no tendremos a ningún hijo- o no aún-
- Me estás mintiendo!
-Claro que no, hijo.
- ...pero... tuviste náuseas en la mañana! Y antojoss!!  Y.. y los escuché hablar de lo que querían que fuera… Y la sorpresa de ésta fiesta!!!
- no Tomy... ayer comí esa mayonesa que me hizo mal! Y los antojos... son normales no? Que a ti no se te antoja nada?!
- y la sorpresa? Y el bebé?!
- no te diremos hasta que bajes... Pero ya que no quieres pizza ni tu pastel favorito... Aquí te quedas.
-No, mamita. Yo quiero mi tortita, por fis..
-Niño bobito... Te has hecho castigar tanto por nada... PLASSS..
-Ayyy..  Papito ya no! Mis nalguitas ya no me van a servir..  Snif snif...
Papá me levantó para sentarme en su regazo. Me abrazó muy fuerte y me dio un beso en la mejilla - Te amamos, tontito precioso, con tus celos y rabietas... y aún cuando tengamos diez hijos más, nuestro amor por ti jamás cambiará, tu vas a ser el primerito y te querremos igualito o más que el primer día. - Me besó mis ojitos- Nunca te dejaremos bonito.
Mamá me quitó del regazo de papá y me abrazó.
- Ya puedes bajar, Tomy?
- Sii, mamá! :)
Cuando bajamos, mis tíos y mis abuelos me estaban esperando preocupados, pero ninguno hizo comentarios sobre mi aspecto y mis ojos llorosos; comimos mucho y después el tío Dan habló.
- Tenemos una noticia que darles... - Dijo con una sonrisa, mirando amorosamente a mi tía y dándole un beso rápido en los labios. Todos nos le quedamos viendo hasta que la tía terminó de decir.
- Decidimos adoptar a un niño! -QUÉ???? No salgo de uno y ya estamos en el otroo??
-Un bebé?!- Preguntó Santi ilusionado.
-No, mi cielo. Gabriel tiene cuatro años ya....-Explicó mi tío alzando a mi hermanito en brazos. Quién rayos era ese Gabriel?!
-Que biennn...y puedo jugar con él?!
-jajajaja... Claro que podrás, mi ángel, pero sin pelear, eh?!
-Lo plomero tío!
-Yo no quiero…-Dije y salí corriendo a refugiarme en mi cuarto, antes que las lágrimas me traicionaran nuevamente.
-Fuuuu…. Qué fue eso?! -Dijo mi abuelo, mirando hacia las escaleras donde yo había desaparecido.
-Son celos, papá.
-Celos de qué, Lore?- Preguntó tío Dan.
-De qué más?! Del bebé. Bueno.. yo pensé que sería un bebé…
-No puede ser!... Pero cómo si yo…
-No preguntes, hermanito. Ya sabes cómo es mi hijo. Iré a hablar con el.
- Voy contigo. - Dijo el tío Dan
Escuché que cada vez se acercaban más a mi cuarto hasta que entraron sin preguntarlo.
- Tomy... Qué pasa, mi cielo? Otro ataque de celos, mi rey? - Preguntó mamá.
- Déjame en paz!
- Tomás! Habla bien!
- Y tú sal de mi casa!!! Ya no te quiero volver a ver!- Grité.
- Tomás! Has estado todo el día asi. Ya habíamos aclarado este punto un millón de veces y ya me harté! Así que te lo calcaré con fuego esta vez! Dan, tráeme el cepillo!- Dijo mi mamá, muy enfadada.
- No!- Gimoteé.
- Pero Loreta... - Dijo mi tío, sin mover un músculo.
- Nada!! Todo el dia ha estado así. Ya hemos hablado muchas veces de que no tiene nada de qué estar celoso! A ver... Tu te vas a olvidar que es tu primer sobrino?
- Noo! Claro que no! Si hasta es mi primer hijo también!!
-Mentiraaaa!!! Tú te vas a olvidar de miiii… Buaaaa!!!... Ahora tendrás a tu propio hi..hijo..Y te vas a o..olvidar..s nif… de que yo existoo... Ya no me quieres porque ya estoy viejo… snif snif… mamá y papá tampoco, por eso tuvieron a Santiago… snif snif… se cansaron de miiiii… Ya no quiero vivirrr… Buaaaaa….-
Me abracé fuerte a mi almohada. Era lo único que me quedaba. Mamá me miraba muy seria y mi tío no dijo nada… seguramente porque todo lo que dije es verdad. Ya no soy un niño tierno y se cansaron de mí, soy descartable y por eso tienen más bebés.

Daniel
No podía creer las inseguridades que invadían a mi sobrino. Si sabe que es mi bebé… se lo digo todo el tiempo… cómo puede dudarlo?!! Tomás ha sido y será en mi vida y en mi corazón el amor más grande que he sentido por alguien… incluso mi mujer. Se lo digo siempre y si no lo ataco a besos como hacía hasta sus 15 años es porque él decidió que ya era muy mayor para eso.
Hoy era un día importante para mí… Estaba anunciándole a mi familia que me convertiría en papá.. adoptivo, sí. Sería papá del corazón, y la personita que más me interesaba que se alegrara por mí estaba llorando, hecho un bollito en su cama, diciendo que yo no lo quería.

Estaba tan tentado de ir yo mismo por el cepillo para calentarle bien calentito ese trasero desobediente de mi sobrino, pero no quería causarle más llanto… Adoro a este mocoso, llorón y malcriado y todo… por él es que decidí ser papá al fin… El tenerlo a Tomy y a Santi en mi casa durante las mini vacaciones de mi hermana, me hizo darme cuenta del gran vacío que había en mi vida… cuando mis niños no estaban conmigo, Vanessa y yo nos sentíamos muy solos... Y ya que no pudimos tener hijos... Adoptamos.

Decidí hablarle primero... Ya después le dejaríamos claros unos asuntitos.
Me senté en la cama, a un lado de mi niño y puse mi mano sobre su espalda.
- Tomás?!... No sé qué he hecho o dicho para que pienses que ya no te queremos, pero no es así. Eres nuestro bebote... Cierto que ya no eres más un bebé... que ya has crecido y eres un hombre, pero aunque tuvieras 100 años y lo único que hicieras fuera repelar, nosotros te querríamos igual, porque más mi pequeño Tomy no se puede. Eres nuestro ángel que -aunque llegaste muy temprano a nuestras vidas- te recibimos con los brazos abiertos y dispuestos a protegerte de cualquier cosa y nuestras manos dispuestas a llevarte por el mejor camino que creamos. Tomás Alvizo, no tienes idea de lo mucho que significas para nosotros, y lo triste que estoy porque tú no lo creas. - Se me salieron unas lágrimas, Tomy no dejaba de llorar- Qué quieres que hagamos para que ya no estés celoso? -En ese instante, mis brazos se vieron colmados de mi adorado sobrino… mi hijito del alma, que se aferró a mí como hacía mucho tiempo no lo hacía.
- BUAA! No estés tristee!! Buaaa... sí..sí te creoo, si te creoo…-Balbuceaba desde mi cuello.
Yo lo acomodé en mis brazos y le besé la cabecita- Y me vas a creer mucho más después de las palmadas que te ganaste, mi rey! -Afirmé seriamente- Lore, me traes ese famoso cepillo, por favor?!- Le pedí a Loreta, sin soltar de mis brazos a Tomi. Le daría una buena paliza con esa cosa para que mi niño recordara por unos días cuánto lo quería yo a él.
Mi bebé empezó a hacer muchos pucheros, pero yo no me dejé convencer y le fui bajando de a poco el pantalón y el calzoncillo. Tenía las nalguitas rosadas de tanto que se hace castigar.

-Noooooo.... Tiito, por favorrrr.... Te creeeeo! Te..sniff.. snifff.. te creooo... Buaaaa.... No me pegueeesss... Buaaaa!!!- Decía sujetando con fuerzas de su calzoncillo.
Rápidamente lo puse sobre mi regazo, le aparté la manito y empecé a azotarlo con mi mano. Mi niño -que ya lloraba desconsolado- lloró y gritó como si le estuviese quemando el trasero.
Estuve un buen rato bajando mi mano por todo el traserito, dejando cada rinconcito de un rojo oscuro. Lore me miraba con pena.
- Mamiiitaaaa... te juro que ya entendii!!! Sí me quieren!! Con el cepillo no!!
Paré un momento, me ardía un poco la mano y Tomy volteó a ver a Lore; ella me estaba dando el cepillo.
- Mamiita... Sniff
- A ver si así entiendes también que no debes hacer berrinches como el de hace rato. - Le dijo Lore, frunciendo el ceño. Yo sé que eso le costó mucho porque odia ver a su bebé así, pero sabe que es lo correcto.
- No, mamita, nooo! Juro...juro que entendí. Snifff sniff.
Le bajé un poco más el calzoncillo que lo traía un poquito más abajo de donde comienzan las piernas y subí mi pierna unos centímetros para tener mejor acceso a esa área y comencé a castigarlo, ahora con el cepillo.
CRACK… AUUUU…. CRACK… BUAAAAAAA….. CRACK… BUAAAAA… CRACK… YAAAA!! YAAAAAA…!! BUAAAAA!!….
-NO MÁS BERRINCHES, TOMÁS!!... CRACK.. CRACK… SOMOS TU FAMILIA… CRACK… TE AMO… CRACK… CRACK… TE AMAMOS… CRACK… TE ADORAMOS… CRACK… CRACK… NADA VA A CAMBIAR ESO… CRACK… CRACK… NI EN UN MILLÓN DE AÑOS… CRACKKKKK- Ese último fue dado con un poco más de fuerza que los demás. Esperaba dejar bien grabado el mensaje ésta vez.
-AUUUUUUU… AHAAHAHAHAHHHH… BUAAAAAAAAAAAAAA- Sollozó con todas sus ganas mi angelito, dejándome sin valor para seguir castigándolo. En eso, mi hermana decidió interceder por el niño.
- Daniel! Ya basta. - Me dijo Lore mientras se le caían unas lágrimas. Igualmente, yo había decidido que con ese último había sido suficiente.
- Ya, mi niñito bonito... Ya bebé...
- Buaaa buu me duelee
-Lo sé. Sé que duele, mi dulce… así duele nuestro corazón cuando tú dudas del lugar que ocupas en él.- Le dije, subiéndole el calzoncito con mucho cuidado.
Lore levantó con cuidado a su bebé quitándomelo de los brazos para abrazarlo.
- Mi bebito bonito... No llores, mi corazón. Shhhhh... Tomy necesito que me digas lo que aprendiste, bebé... Porque ya fue mucho de hacerte castigar por celosín, mi rey.
- sniff, que... Que... Buaaa
- Tomy... Necesitas otra ayudadita para que te quede claro?
- noo! Sniff, Si entendí, mamita. Me quieren. No soy reemplazable.
-Nunca, amor. Nunca podrás ser reemplazado. Así que ya no más esas ideas en tu cabecita sino tu colita sufre serias consecuencias! -Le dijo Loreta con voz mimosa.
-Snif… snif… duele, mami… el tío fue muy malo conmigo!
- No, bebé. Papá iba a tener que ser muy malo contigo...
- Buaaa…. Mami? ...
- Qué pasó, mi bobito hermoso?
- Papá me quiere igual?
- Cada segundo más, campeón! - dijo David entrando a la habitación.
Al verlo,   Tomás abandonó los brazos de Lore para pasar a llorar en los de su papá.
No sé de dónde sacó fuerzas mi cuñado para alzar a su hijo en brazos como si tuviese cinco añitos otra vez, pero así lo llevó hasta la cama, se sentó y acomodó al niño sobre sus piernas.
- Shhhh!! Ya no llores, que se te harán los ojos de sapo!!
- Papá snif te quiero...
- Y yo te amo, bonito.
- Snifff… Y como me amas tanto no me vas a castigar más, verdad? - Mi diablillo puso esos ojos manipuladores... Esos que te hacen sentir fatal cuando le niegas su petición...
- mmm.. no más por hoy. Ya tu colita ha pagado con intereses lo que esa cabecita formuló mal.- Mi cuñado le dio un beso en la frente.
David lo arrulló poco a poco hasta que lo acostó. Los abuelos habían subido a acostar a Santi, que se había quedado dormido coloreando. De repente, todos nos encontrábamos en el cuarto de Tomy, viéndolo dormir tal y como lo hacíamos cuando era un recién nacido. Seguro que Lore tiene alguna foto.... El primer niño...
Tomy suspiró en sueños, se despertó poquito y me buscó.
- Tío?... También te quiero. Y ya quiero ver a mi primito :)

Y se volvió a dormir…. Pronto lo conocería...

3 comentarios:

  1. Me encantó pobrecito de mi Tomatito pero por fin aprendió la lección espero la continues pronto.

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  2. Auuuuuuu que hermoso yo también quiero conocer a su primito...

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    1. :3 yo tambien 😂😂 me estoy volviendo sentimental!! :O

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