Capítulo 31 “sacrificio de la infancia”
RYAN
Luego de que papá y el enano Chris volvieran desde dentro de la casa y
que el chico se disculpara con el gruñón del tío Shaun por fin pudimos seguir
la fiesta en paz, aunque no todos, ya que Keith se había quedado dormido en una
hamaca del jardín.
Ryan: yo opino que hay que hacerle alguna broma, no puede quedarse
dormido y salir bien librado.- estaba junto a mi padre, Phill, Shaun y Dean charlando
mientras cuidábamos a los niños y mi madre y tías charlaban sentadas cerca de
la piscina que se encontraba bastante lejos.
Dean: jajaja, con lo gruñón que es de seguro que no nos habla hasta el
día final- en eso Dean tenía razón, Keith no era conocido por su buen humor
pero me tentaba demasiado hacerle una buena broma, es que me dio el regalo de
la vida al dormirse así.
Shaun: yo apoyo la broma, necesito vengarme de alguna manera de ese
crio.
Allan: yo no diré nada ni participaré, pero si tu madre me viene a
darme la cantaleta a mi por hacer desastre no los defenderé.
Dean: ay que cobarde eres Allan, debes disfrutar la vida de vez en
cuando sobre todo si se trata de hacerle una broma a tu hijo, que dicho sea de
paso te hizo salir todas esas canas que adornan tu cabellera en estos momentos.
Shaun: bueno aunque yo diría que esas canas se las sacó más Ryan que Keith,
que vamos si que era un desastre, pero Ryan les ganaba a todos los críos de la
familia juntos- con lo de Keith me reí, pero cuando escuché aquello me enfadé
de inmediato, aunque no muy en serio.
Ryan ¡oye! Bueno, si quieren participan si no, ahí ustedes- me iba a ir
enfadado pero Dean me tomó de un brazo para evitarlo.
Dean: no seas crio que bien puestos tienes los 36 años como para que te
enfades por una tontería- le daba la razón, pero con mis tíos me permitía ser
un poco crio a pesar de que no me pasaban por muchos años.
Ryan: está bien, pero que haremos con ese dormilón de ahí- justo
llegaba Phill a nuestro lado y de inmediato quise incluirlo en la broma.- Phill
tu participarás de esto, ¿que te parece tirar a tu querido novio a la piscina?- Phill se rio mientras tomaba una cerveza de
la mesa que teníamos a un lado- aunque no sé si tirarle a la piscina sea una
buena idea, se despertaría antes de llegar y con lo fuerte que está ese
condenado de seguro nos tiraría.
Dean: yo digo que llenemos un cooler de hielos y agua y se lo lancemos-
vaya que la vejez si traía buenas ideas después de todo, aunque no le digan a
Dean que dije eso ya que me mataría.
Shaun: ¡eso! Listo yo iré a desocupar un cooler, Dean trae los hielos y
ustedes dos busquen la manguera, hay que hacer esto antes de que despierte.-
nos íbamos a separar a buscar todo pero mi padre nos detuvo.
Allan: estamos aún en invierno chicos, se puede resfriar- que
aguafiestas era el viejo, pero en el fondo sabía que tenía razón.
Shaun: ¡Allan calla! Chicos ya saben, hagámoslo antes de que anochezca,
ya son las 6 de la tarde, Allan ya que no quieres participar por que no llevas
a los niños adentro de la casa, para que no se resfríen- Shaun fue sarcástico
al hablar, pero mi padre estaba curado de espanto con sus hermanos, por lo que
rodó los ojos solamente y se marchó en busca de mamá y los niños.
En menos de 5 minutos todo estaba listo y nos acercábamos a nuestra
victima que seguía plácidamente dormido sin imaginarse lo que ocurriría en los
próximos 5 segundos.
Yo y Shaun los fuimos los encargados de cargar el cooler y vaciárselo a
Keith mientras que Dean grababa y Phill se reía a su lado.
¡SPLASH!
Keith: auuu ¿Qué demonios?- Keith desorientado se levantó de la hamaca
y pudo ver desde donde vino toda esa agua que lo despertó- ¡son unos malditos!-
sin tiempo de reacción Keith corrió hacia nosotros, pero no pude escapar de él
como Shaun, y Keith fácilmente me alzó en brazos y me lanzó a la piscina de la
casa de mis padres, en pleno invierno, por ende el agua estaba congelada.
Ryan: que malas pulgas eres Keith, solo era una bromita de nada- Keith
a pesar de que se mostró enfadado en un principio, cuando me lanzó a la piscina
esbozó una sonrisa y se largó a reír junto a mis tíos y Phill.
Keith: para que aprendas lo que puede resultar de tus “bromitas”- luego
de ese incidente todos entramos a la casa, en donde se encontraba la familia
esperando un chocolate caliente que preparaba mi madre en la cocina.
Todos entramos, pero al momento en que Keith y yo pisamos el suelo de
la sala mi madre puso el grito en el cielo.
Evelyn: ¡pero que creen que hacen ustedes dos jovencitos! Keith Alexander y Ryan
Christopher Adams ni se les ocurra dar un paso más, estan empapados arruinaran
el piso, ¿Qué les ocurrió?.- iba a hablar pero el cobarde de mi hermano menor
habló primero que yo.
Keith: mami, fue Ryan, él me lanzó agua y hielos ¿te
lo puedes creer?- méndigo mocoso, con 34 años y aún delatandome con mamá.
La familia se estaba deleitando con el espectáculo que
estabamos dando. Sobre todo los hijos mayores de Keith, ya que supongo les
resultaba cómico que regañaran a su padre.
Evelyn: estás en problemas Ryan, que lo sepas. Vayan a
secarse ustedes dos que si no se resfriaran, que no saben el frio que hace- yo
ya lo estaba sintiendo, no creo que fue una buena idea jugar con agua con los
10 grados que habían afuera.
KEITH
Me estaba helando y no podía entrar en calor por mi
cuenta.
Delatar a Ryan fue una manera de vengarme por la
bromita que me jugaron en la hamaca aparte de haberlo lanzado a la piscina.
Iba a ir a secarme pero justo me intersectó Maddie y
con su sonrisa tierna y sus ojos azules me cautivaron de inmediato.
Maddie: ¿por qué estas tan mojado papi?- podría
comermela y es que era 100% ternura todo el tiempo.
Keith: tu tío Ryan fue un chico malo y me mojó.- ella
miró a Ryan que también se había quedado a escuchar a Maddie y se acercó a él.
Maddie: tío malo, no se moja a papá- ella cómicamente
tomó la mano de Ryan mientras le regañaba y le dio palmaditas pequeñas en ella.
La risa bulliciosa de Ryan no se hizo esperar y al
mismo tiempo él cogió a Maddie, asegurandose de no mojarla y le dio un beso en
la mejilla.
Ryan: que te como princesa, lo siento, prometo no
volver a mojar a papi ¿si?- ella asintió y se revolvió en los brazos de mi
hermano para volver a jugar con Elliott, Maya y los demás niños.- si no te
cuidas Keith me la robaré y la haré hija mia- lo dijo con tono de broma, pero
James lo escuchó y se notó desde lejos que se había enfadado y además se había
entristecido, por lo que no me sorprendió que se fuera de la habitación.
Keith: yo que tu hermanito arreglo el problema que
acabas de provocar, al parecer alguién se puso celosito.- Ryan puso cara de
circunstancia y salió disparado detrás de James.
Por fin pude retirarme a mi antigua habitación en
donde aún tenía un poco de ropa que me valía y me cambié.
Phill me había acompañado, pero no quería hablar con
él, me había enfadado, aunque de broma, por no haber hecho nada para impedir
que me lanzaran agua.
Phill: anda cariño, no te enfades solo fue una bromita
pequeñita- para contentarme me comenzó a dar besos en el cuello mientras me
abrazaba por detrás. Claro que me contentaba, pero debía ser fuerte.
Keith: Phill, Phill, Phill, estamos en la casa de mis
padres comportate- si no se detenía tendríamos que hacer una parada tecnica
importante que en realidad no podíamos hacer ya que los niños podrían entrar en
cualquier momento o alguno de mis tíos o padres.
Phill: nadie se dará cuenta cariño, anda- él seguía
con sus besos y caricias y estaba a punto de caer en la tentación, pero ocurrió
lo que se veia venir.
TOC TOC
Sam: ¡papá! La abuela dice que te apures que ya
terminó de preparar los chocolates.- iba a matar a Sam, o a mi madre, quizás a
ambos.
Phill: definitivamente tenemos que irnos de viaje,
urgentemente- Phill con un puchero marcado en el rostro me lanzó mi camiseta
que era lo único que faltaba para estar listo y salió de la habitación.
SHAUN
Ya se me estaba quitando un poco el enfado con Chris,
sobre todo despues de que se disculpara conmigo frente a todos.
Los hijos de Allan siempre me habían sacado de quicio,
el único que se salvaba era Elliott, pero solo tenía 4 años por lo que no creo
que sea momento de cantar victoria.
Estabamos todos juntos en el salón de la casa de mi
hermano mayor con un chocolate en la mano frente a la chimenea, los grandes
sentados en los sofás junto con algunos de los chicos más grandes y los más
pequeños corrian jugando por ahí o estaban sentados en el piso absorbiendo todo
el calor posible.
Eve: ¿y ya comenzaron los síntomas, o aún disfrutas de
la tranquilidad Ly?- mi esposa se sonrió y comenzó a contestar calmadamente, si
supieran que solo esta mañana vomitó 4 veces antes de poder desayunar.
Lydia: he estado un poco descompuesta, pero nada tan
terrible aún, con Kyle si que la sufrí así que espero que esta vez no sea
igual- uy, si que recordaba cuando estabamos a la espera de Kyle. Lydia se pasó
los 6 primeros meses postrada en cama sin poder siquiera abrir los ojos y si a
eso le agregamos una niña de 2 años demandante fue unos 6 meses del terror.
Allan: aún recuerdo cuando el enano venía llorando
cada 2 por 3 a casa por que no podía dormir por las noches- como detestaba a mi
hermano mayor, siempre queriendo meterse conmigo y a la vez haciendome ver como
si aún tuviera 6 años.
Shaun: pues si hablamos de gente llorando por crios
que yo recuerde tu si que llorabas cuando Ryan estaba de malas de bebe sobre
todo llorabas cuando papá te castigaba por descuidar al niño.- las mejillas de
mi hermano se encendieron al instante, si que le había tocado la fibra de la
vergüenza.
Ryan: anda, que yo quiero oir aquello, ¿cómo que me
descuidabas papá?- ¡eso! Había desencadenado justo lo que quería, una buena
anécdota.
Allan: no es que te haya descuidado, pero solo tenia
14 años, cometí muchos errores hasta que por fin pude verme como un padre
responsable.
Sam: ¿abue fuiste padre a los 14?- no me podía creer
que ese crio era un haz de las matemáticas y no había podido sacar un simple
calculo con la edad de su tío y abuelo.
Joe: eso es obvio tonto, si no como podría tener 50
años y el tío 36 ¿eh?- por lo menos ese si que iba bien encaminado.
Keith: Joe no le digas tonto a tu hermano- la mirada
que le dio Keith a Joe me hizo recordar la misma miraba pero en su padre muchos
años atrás, si que le había salido calcadito a Allan por lo menos este crio,
que con Ryan si que dudaba que fuera del estirado de All, más bien diría que le
hicieron el cambiazo en el hospital.
Allan: bueno, bueno, me dejarán contar la historia ¿o
no?- ahí fue cuando todos los presentes, inclusive algunos pequeños que se
habían acercado intrigados con el tema, le pusimos atención.
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ALLAN
Me cago en mi padre y en sus estupidas reglas de
mierda, quien se creia el para no dejarme ir al campeonato de la escuela,
vamos, que era un evento escolar, no es como si me fuera de juerga con mis
amigos, era una responsabilidad y ahora por su culpa tendré que calarme a los
imbéciles de mi equipo de futbol que de seguro me echaran la culpa si es que
llegan a perder la competencia.
Debía encontrar la manera de escaparme e ir, debía
haber alguna solución.
Ryan: ¡buaaaaa!- y más encima justo hoy a Elizabeth se
le ocurrió la idea de salir con su madre de compras, y según que no podían
llevarse al crio con ellas.
Cogí a Ryan en brazos y comencé a pasearme con el por
alrededor de mi habitación para calmarle. Habia estado ultimamente con unos
cólicos que apenas le dejaban dormir, por lo que no podía culparle por llorar.
Allan: anda peque no estes más triste, se que duele
pero a papá también le duele que llores shuuu- le limpiaba las lágrimas
mientras le seguía meciendo.
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Ryan: que tierno eres papi, por que ya no me haces
eso- me dieron unas ganas de dejarle calcado mi enfado al crio por
interrumpirme y por burlarse de mi, pero había mucho público y no podría
matarle a gusto.
Allan: mejor te callas hijito si no quieres un golpe-
él me miró ofendido, pero de inmediato se largó a reir contagiando al resto de
los presentes.- ya dejen de interrumpirme que si no, no sigo.
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A Ryan le tomó unos 20 minutos calmarse y para ese
entonces yo ya tenía los brazos entumecidos de tenerlo cogido, más que mal es crio
ya tenía 8 meses y estaba bastante grandecito.
Una vez calmado, salí de mi habitación en busca de mi
madre a ver si ella podía cuidarme al niño unos minutos mientras yo buscaba la
forma de poder ir al partido de hoy. Claro que con lo jodida que era mi madre
de seguro me mandaba de paseo de inmediato con la cantaleta de que era mi
responsabilidad cuidar de él.
Bajé las escaleras y casi cuando llegaba a los pies de
estas tuve que moverme rapidamente para no chocar con un Dean que venía apurado
y con lágrimas en los ojos a subir las escaleras.
Allan: eh enano ten cuidado, hey ¿qué pasó?- él se
detuvo cuando le pregunté que sucedía y sin esperar mucho tiempo se lanzó a
abrazarme mientras lloraba un poco más.- ¿qué pasa Dede? ¿por qué lloras?
Dean: snif.. lo… que… pasa…- el enano apenas podía
hablar con el llanto y ya me estaba dando hasta lástima.- mamá me pegó, buaaaa-
así que eso era, diablos, ahora que estaba enojada sería más difícil que
cuidara a Ryan.
Allan: y ¿que hiciste para que mamá se enfadara?-
bueno tampoco era muy dificil hacer enfadar a mamá, vamos que la condenada era
muy irascible y por la nada saltaba con nosotros.
Dean: es que Shaun me estaba fastidiando y sin querer
le he dado un golpe para que se quitara de encima y quizás se me haya pasado un
poco la mano.- bueno el enano si que tenía culpa en todo esto.
Allan: demonios enano sabes que no puedes golpear a
Shaun, que tiene 7 años menos que tú, no es justo, anda ve a tu habitación
antes de que mamá se enoje más contigo- Dean asintió y desapareció escaleras
arriba en un segundo. Yo por mi parte me armé de valor y fui a la sala en donde
se encontraba mamá tejiendo como siempre mientras miraba su telenovela de la
tarde y junto a ella estaba Shaun dibujando.
Me acerqué suavemente a ella y dejé a Ryan en su silla
de juegos que había allí para tener más libertad a la hora de hablar con ella.
Una vez que me aseguré que Ryan quedara bien seguro en
su silla, me di a la tarea de comenzar a suplicar piedad a mi madre.
Allan: ¿Qué tejes ahora mami?- me senté a su lado y
fingí interés por su tejido.
Jenna: tu tía dará a luz pronto por lo que le estoy
tejiendo una manta a su nuevo bebe como obsequio- que trabajo se daba mamá,
como si no pudiera comprarle una manta en el mercado a ese bebe.
Allan: te está quedando muy bonita…- yo sabía que mi
madre no era ninguna tonta, debía olerse que no estaba tan interesado en ella
por nada.
Jenna: si crees que por estar tan servicial conmigo te
daré permiso para ir a aque juego al que tu padre no te dejó ir estás muy
equivocado jovencito- ahí estaba, claro que lo sabía. Tuve el impulso de
quejarme como un crio de lo injusto que era mi padre pero eso no me ayudaría
para nada, sobre todo con mi madre. Tenía que pensar en una mejor estrategia.
Allan: no venía a eso mamá, como crees, solo quería
saber si podías cuidar a Ryan una media hora, es que quería darme una ducha
rápida, tengo un poco de calor- vamos que eso debía de funcionar…
Jenna: Ryan es tu responsabilidad Allan, no quisiste
jugar como un adulto tan pronto ahora tienes que calarte esto- ahí estaba el
reproche de siempre- debes compensar tus actividades diarias con ser padre y
cuidar de tu hijo, llevate esta sillita si quieres al cuarto de baño para que
le tengas entretenido mientras te duchas, pero yo no te ayudaré- que tirana era
mamá, ahora que iba a hacer.
Tomé enojado a Ryan de vuelta y subí a mi habitación,
ya me había decidido, me saldría por la ventana e iría con el bebe al partido.
Estaría de vuelta en 4 horas, de seguro nadie lo
notaría.
Preparé rapidamente mi mochila con mis implementos de
deportes y aparte le preparé una mochila a Ryan con pañales y leche que podría
necesitar. Dejé el estereo de mi habitación sonando para despitar a mi madre
haciendole creer que estaba dentro de casa y me dispuse a saltar por la
ventana.
Cosa que no fue para nada fácil ya que mi habitación
se encontraba en una segunda planta, por suerte había justo un arbol frente a
mi ventana y me ayudó a llegar a piso firme en un santiamén.
Iba a comenzar mi camino hacia la escuela cuando sentí
como me jalaban de una oreja fuertemente.
Tal fue mi sorpresa que tuve que sostener con más
fuerza a Ryan para que no se me cayera.
Daniel: Allan Joseph Adams, en que carajos pensabas al
salir por esa ventana con tu hijo caramba- ouch papá sonaba molesto, y eso era
bastante poco usual en él, casi siempre mamá era la enojada y papá era el que
solucionaba pacificamente las cosas.
Allan: papi…- sin darme tiempo a reaccionar me quitó
suavemente al bebe de los brazos y me dio una fiera palmada.
Daniel: vete a tu habitación inmediatamente Allan antes
de que aquí mismo me quite el cinto. No puedo creer lo irresponsable que fuiste
al exponer a tal peligro a tu propio hijo- aquello me caló profundo, no quería
que Ryan resultara lastimado, solo quería ir a mi juego.
No esperé un segundo aviso y corrí, al igual que había
hecho Dean minutos atrás, a mi habitación sin pararme a nada y solo escuchando
a lo lejos a papá explicandole a mi madre lo que había sucedido.
Daniel: saltó por la ventana con Ryan, seguramente
para ir a ese famosito juego- escuché el espanto de mi madre y nada más, ya
había llegado a mi habitación, por lo que apagué la música y solo me dediqué a
esperar mi muerte.
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Ryan: ¡saltaste por una ventana conmigo en brazos!
¿Mamá como pudiste permitir aquello?- que exagerado era el crio este, como si
no estuviera aquí sano y salvo a sus 36 años.
Eve: pues me enteré de aquello años después cariño, lo
siento- eso era cierto, a pesar de la cagada que me había mandado y lo furiosos
que estaban mis padres lo logré convencer que no le dijeran nada a Evelyn.
Temía que me dejará y me alejara de Ryan para siempre por haberlo puesto en
peligro.
Laura: que peligroso todo, ¿cómo es que el suegrito te
dejó vivo después de eso All?
Lydia: yo también quiero escuchar aquello, ni me
imagino el susto que le debió dar al verte bajar por ese árbol, vamos que el
árbol ni siquiera es muy amigable- cierto, como olvidé que todos los presentes
conocian bien la casa de mis padres y por consecuencia conocían el árbol del
que hablaba en mi historia.
Keith: ¿conmigo no hiciste algo parecido no pa?- ahora
mis hijos utilizarian esto para fastidiarme estaba seguro, pero ya había
comenzado por lo que debía de todas maneras terminar la historia.
Allan: contigo hice algo peor…- la cara de Keith fue
un poema, pero luego de unos segundos de satisfacción por asustarle me lancé a
reir para que supiera que estaba fastidiandole- contigo no hice nada malo,
quizás te caiste una o dos veces durante mi cuidado, pero saliste bastante
bien, anda dejenme terminar.- todos asintieron y pude proseguir.
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Sabía que la había cagado, pero en parte era culpa de
mi padre, el me había orillado a tomar tal decisión. Si me hubiera dejado ir al
partido desde un principio no me habría lanzado por la ventana y si mi madre
hubiera accedido a cuidar unos minutos a Ryan, no hubiera tenido que saltar
junto con él.
Estaba nervioso, y me puse aún más nervioso al
escuchar los pasos de mi padre subir las escaleras y luego acercarse a mi
habitación, hasta que finalmente ingresó.
Se paseó un poco por la habitación que por suerte
estaba impecable y luego tomó la silla que tenía en mi escritorio y se sentó
frente a mi.
Daniel: Allan hijo, ¿en que pensabas? Te das cuenta
que pudo ocurrir una desgracia.- claro que lo sabía, pero nada había sucedido
al final.
Allan: esto es culpa tuya papá- al decir aquello me
crucé de brazos y me senté en mi cama, de la cual me había levantado al entrar
mi padre a la habitación.
Daniel: ¿qué cosa?- la cara de mi padre fue de
película al escuchar aquello, sabía que me arriesgaba al tener esta actitud,
pero quien puede culparme, solo tengo 14 años.- es que además tienes la
desfachatez de culparme a mi de tu irresponsabilidad, es el colmo hijo, el
colmo- a pesar de estar enfadado mi padre jamás gritaba o se ofuscaba, no como
mi madre y a pesar de que agradecía que mi madre no estuviera aquí, sabía que
si estiraba mucho la liga de paciencia de papá no me iba a ir para nada bien.
Allan: tú no me dejaste ir al partido, era muy
importante para mi papá, sé que ahora tengo a Ryan y que tengo que hacerme
responsable de él, pero sigo siendo el mismo…- por fin me había desahogado e
incluso algunas lágrimas se me salieron por la tensión que tenía. Mi padre al
escuchar aquello se ablandó y se levantó de su silla para venir a consolarme.
Daniel: mi pequeño…- papá con gran habilidad me alzó
en brazos y me sentó en su regazo.- se que es mucho lo que se te vino encima, y
de verdad lamento que tengas que sacrificar ciertas cosas de tu niñez por eso,
pero es lo que hay que hacer campeón- al hablar mi padre me acariciaba la
espalda y de vez en cuando me besaba la coronilla.- pero debes saber que
durante todo este proceso no estas solo, tienes a mamá y a papá para que te
ayuden, a ti y a Eve, lo sabes.
Allan: mamá no piensa lo mismo, siempre dice que fue
culpa mia y que no merezco que me ayuden con el bebe.
Daniel: sabes que mamá es un poco dura, pero eso no
significa que no te quiera o que no quiera a Ryan, ella los ama, solo que a
veces intenta que te hagas más responsable- le miré incrédulo, vamos que yo no
era un tiro perdido, desde el minuto uno me hice cargo del bebe junto a Eve-
hablaré con tu madre para que intente ser más calmada contigo ¿bueno?- yo
asentí y resentí el término de nuestra conversación, eso significaba que venía
la peor parte.- a pesar de todo esto lo que hiciste no tiene justificación
alguna Allan, te castigaré por que quiero que la próxima vez que se te pase por
la cabeza hacer algo que ponga en peligro tu vida o la de alguien más te lo
pienses muy bien.- con una rapidez increíble me manobrió y dejó mirando el
suelo sobre su regazo.
Allan: papi…- debía intentar tocas su fibra sensible
para ver si le convencía.
Daniel: nada de papi que eso no te salvará de nada.-
ni modo, no pude convencer nada, solo comenzó con la tortura.
PLAS PLAS PLAS auu paaa PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS aich
no más por favor… PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS buaaaa PLAS PLAS PLAS PLAS
PLAS- si que ardía y solo era su mano y sobre el pantalón, de que estaba hecha
la mano de mi padre.
Pensé que había terminado, pero estaba equivocado del
todo.
Allan: papá, por favor no más, te juro que nunca jamás
haré algo parecido, seré un mejor padre para Ryan lo juro.- en ese momento
rogar me parecía una buena idea y lo de parecer mayor no estaba presente, si
hasta lágrimas me caían y todo. Que vergüenza, pero bueno era mi padre, tampoco
es como si fuera un extraño.
Daniel: lo siento hijo, pero te lanzaste de una
ventana con tu hijo de 8 meses en brazos, unas palmaditas no son suficientes-
claro, como a él no le dolía para nada.- recuestate sobre la cama, anda que
solo serán 8- lo más temido se hacía realidad.
A penas pude obedecerle y me recosté sobre la cama
como me había dicho.
Daniel: solo 8 y ya está hijo.- dejaré el equipo
después de esto, lo prometo.
ZAS ZAS auuu papi… ZAS ZAS ZAS ZAS buaaa ya no más…
ZAS ZAS
Y de pronto, todo acabó.
Daniel: ya está pequeño, ya está- papá me alzó y me
acunó en sus brazos para consolarme.- no vuelvas a hacer algo parecido pequeño,
que si te pasa algo a ti me muero, eres mi bebe…
Allan: lo siento…
.
.
.
ALLAN
Al terminar la historia todos estaban atentos y
callados, pero como siempre fue Ryan el que interrumpió todo y se lanzó a
abrazarme.
Ryan: ay papá, yo sabía que me querías, pero no
vuelvas a hacerme eso ¿vale?
Shaun: no creo que con los kilos que tienes demás
ahora pueda saltar contigo por la ventana- mi hijo le miró a mi hermano con el
ceño fruncido pero como siempre se tomó la broma con relajo.- bueno, ya es hora
de que nos vayamos, son las 9 de la noche ya y de seguro hay ciertos pequeños
que se les pasará la hora de dormir, dejemos descansar a Allan y Eve.- le
sonreí a mi hermano y la verdad es que si estaba cansado y la hora de dormir de
Elliott se habia pasado hace media hora.
Laura: Shaun tiene razón, yo iré a lavar las tazas
mientras se preparan ¿vale?- en menos de 20 minutos ya todos se habían ido y
por fin me di el lujo de descansar.
Había sido un día increíble, debíamos repetirlo más
seguido.
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