Padrelotti
Capítulo 2
Era mejor ir a la casa
de Vini.
Finalmente
el bus había llegado a Madrid, los jugadores fueron bajando uno a uno, muy
contentos todos, algunos cantando, otros contando chistes, otros con los cascos
puestos, enfocados en la música que escuchaban, Rodrygo se levantó con cuidado
de su asiento, vaya que el viaje había sido largo al menos para él, que tenía
las nalgas bien cocinadas y todavía con ese blue jean puesto, es qué como se le
pudo haber ocurrido ponérselo en esas condiciones. Vini seguía notando algo
raro a su amigo, pero como así era él, pensó que mejor en lugar de preguntarle
algo, bajaban rápido que quería ir a su casa o a la de él a jugar el FIFA.
Rodrygo
que estaba feliz de llegar, nada más salir del bus, el gentío pidiendo
autógrafos y fotos, y ahora sí que no tenía ganas de firmar nada, y no es que
no le gustara complacer a sus fans, pero definitivamente hoy no era el momento,
sin embargo no le quedó de otra, si hacía un desplante alguno de ellos, al día
siguiente como podría aguantar la prensa, con lo pesados que se ponían algunos,
solo porque él era jugador del mejor Club del mundo, así se dispuso a hacer lo
que le correspondía, se había tomado un montón de fotos y firmado muchas cosas,
desde camisetas, gorras e incluso tacos con suma paciencia y buenas ganas,
recordando todos los consejos que le daba el míster y su presidente el señor
Florentino Pérez, las veces que se comunicaban. Vini que lo estaba esperando,
seguía atendiendo a los suyos, la mayoría no se sabe cómo hicieron, pero
terminaron tan pronto como empezaron.
Rodrygo
suspiró y mencionó un: por fin, gracias a
Dios, una vez hubo terminado con el
último fan o bueno eso era lo que creía que era el último, pero no contó con
una señora de mediana edad que venía con su niña cogida de la mano, ambas
llegaron agitadas, de la corrida que les tomó coger para alcanzar al jugador
del Real Madrid, y es que le admiraban muchísimo y no sabían cuando lo
volverían a ver, ya que se iban fuera del país por varios meses y aun cuando
volvieran sabían lo complicado que era encontrarse con él, debía tener mucha
gente detrás de él.
Ya
Rodrygo no tenía ánimos de seguir atendiendo a nadie, por lo que intentó salir de
la situación, quizás no en el mejor de los términos, pero estaba muy abrumado
con tanta gente alrededor. Sí, al ver que la mujer y la cría se acercaron más
gente llegó, así que dijo: no quiero
firmar a nadie más lo siento, la próxima vez prometo que los atiendo como se
merecen, pero ahora pido comprensión, frase que no le sirvió de mucho, pues
la señora insistió.
_
Venga Rodry, la última por favor, que mi hija te ama como no tienes idea _ La señora
puso cara suplicante y la niña le lanzó una amplia sonrisa al brasileño.
_
No, he dicho que termine y estoy muy apurado _ contestó tajante dejando a la
mujer con su hija atónitas, el muchacho se giró para irse con Vini, quien lo
estaba esperando paciente, pero no iba ni por dos pasos cuando Luka lo detuvo.
_
¡¿A dónde crees que vas hijo?! _ El croata lo cogió del brazo mientras le
lanzaba esa mirada, una seria, tanto, que lo hizo tragar saliva, pero aun así
tuvo el valor de defenderse.
_ Me
tengo que ir… tengo cosas que hacer _ dijo eso queriendo hacerse el valiente
frente al mediocampista, sin embargo no le ayudó mucho, Luka notó en su tono de
voz baja, que estaba completamente nervioso, Vinicius en su lugar puso cara de
no entender nada, definitivamente a Rodry le pasaba algo y lo iba a averiguar,
tenía que ayudar a su amigo _ y ya expliqué mis razones, por favor papá
comprende _ agregó.
_
Está bien hijo, te comprendo, pero primero cumple con la señora y su niña, no
seas descortés _ Y Modric no pudo sonar más estricto, Rodry lo entendió como un
regaño, así que suspiró, rodó lo ojos y fue a hacer lo que su papá como él lo
llamaba, le había indicado _ Y no pongas esos ojos eh _ le retó de nuevo y casi
le dice que se disculpara con ellas, por sus modos, pero decidió dejarlo así,
ya estaba bastante rojo el chico como para avergonzarlo más, Vini no paraba de
reír a carcajadas por la escenita de su hermano y más por la carita que traía
hasta que paró de hacerlo cuando Karim Benzema que apareció de pronto cual
fantasma se le acercó al oído y le llamó la atención.
_
Tranquilo hermano mayor, Rodrygo sabe que estoy siempre de broma y él también
se ríe de mi cuando tú o el míster me retan por ejemplo y yo nunca me molesto,
creo que él tampoco le da importancia a eso y sí lo hace dos trabajos tiene.
_
Vini hazme caso vale, yo sé por qué te digo algo cuando te lo digo. _ insistió
Benzema, Vini no estaba convencido, ya que Karim algunas veces no le decía las
cosas de forma directa, sino que luego por la debida consecuencia se daba
cuenta de sus enseñanzas y lecciones, así era él y lo había aprendido a conocer
con el paso de los casi cinco años que llevaba en el equipo, y como lo admiraba
y quería muchísimo y se trataba del capi, su capi, decidió seguir su sugerencia
obedientemente como solía ser él la mayor parte del tiempo aunque pareciera ser
lo contrario o al menos eso pensaban sus detractores, tomando como base su
personalidad alegre, extrovertida y considerando que solía ser un tanto impulsivo.
_
Está bien, lo que tú digas hermano mayor _ dijo ahora Vini con voz serena.
_
Hermanito _ mencionó cariñosamente Benzema y le revolvió el cabello, algo que
al chico no le gustaba, pero que dejaba que Karim le hiciera y ocasionalmente a
Rudiger que había cogido mucha confianza con él. Una vez se fue el francés,
sacó un espejo de su mochila y se apuró a acomodarse el peinado.
_
Ahora si nos vamos Vini _ Habló Rodrygo con voz cansada.
Hoy
definitivamente no había sido el día del chico y eso se notaba y mucho, y a
pesar de eso, el croata sintió la
necesidad de hacer lo correcto, él lo apreciaba mucho, pero la gente que más lo
admiraba y pagaban por verlo, tenían derecho al menos a eso, un poco de
acercamiento, además no es como si le hubiese tomado una hora, entonces a
Modric se le vino una idea a su cabeza, que tenía que estar todavía más cerca
del niño, que se encargaría de seguirle enseñando más cosas, y no estaba de
broma y lo que le había dicho al crío cuando llegó al Madrid: Respétame porque soy tan mayor para ser tu
padre, ahora cobraba más sentido. Siempre es bueno tener un mentor, alguien
que te guie por la senda del bien y Lukita se lo iba a tomar más enserio,
reflexionó mientras se despedía de los dos brasileños.
_ Se
cuidan y van con mucho juicio, nada de correr eh Vini
_
Tranquilo Luka, no pasa nada _ contestó el chico sonriendo mientras Modric le
hacía un gesto de aprobación.
Ya
Vini y Rodry cerca del auto del primero…
_ ¿A
dónde vamos siempre, a tu casa o a la mía? _ preguntó Vinicius, dejando que
Rodrygo elija.
_ Mi
casa, si no te molesta…
_ Me
da igual dónde sea, solo quiero volver a ganarte _ se empezó a reír.
_
¡Madre mía, que presumido! _ arqueó las cejas y luego sonrió muy divertido, al
lado de Vini todo era buen rollo, le relajaba la mente _ Bueno yo voy en el
copiloto y tú conduces.
_
No, ya tú fuiste ahí la última vez _ refutó el más alto.
_
Pero es tu carro, se supone que tienes que conducir tú, eres mi chofer. _ Lo
último lo dijo todo sobrado y riéndose.
_
Pero yo no quiero manejar hoy _ hizo un mohín, haciéndose el enojado.
_
Bueno hagamos algo, vamos a definir esto con piedra, papel o tijeras y el que
gane ese va en el copiloto. ¿Te parece?
_
Está bien _ aceptó Vinicius la propuesta de su amigo.
Tres
minutos más tarde…
_
Sabía que ganaría _ dijo un sonriente Rodrygo.
_ No
se vale, yo casi te gano, tienes mucha suerte _ mencionó quitándole el seguro
al automóvil.
_ El
casi no sirve _ dijo ocupando su asiento en el copiloto y tratando de no
moverse tanto para no levantar sospechas, pero vaya que le dolía el trasero,
que mano tan pesada tenía el míster, pensaba en su lugar, queriendo llegar rápido a ponerse un poco de
hielo o alguna crema.
Ya
dentro Vini, pisó el acelerador, puso música brasileña a todo volumen, y con buena velocidad, eso sí, sin abusar,
siguiendo los consejos de uno de sus hermanos mayores en la plantilla se dirigió
a la residencia de su amigo.
Llegaron,
Vinicius estacionó el carro, se bajó, luego Rodry, y le puso el seguro.
Una
vez dentro de la casa…
_
Vini espérame un rato, voy a la cocina, ponte cómodo en lo que vuelvo _ El
chico solo frunció el ceño.
Rodrygo
estaba muy misterioso para su gusto, sintió la tentación de seguirlo, pero
luego se lo pensó mejor, quizás era algo privado y no quería pecar de impertinente,
así que se tiró en uno de los sillones blanco y cómodo que ahí había y se
dispuso a esperarlo mientras su amigo sacaba una bolsa de hielo del frigorífico,
salió de la cocina con aquello en la mano y se dirigió a su habitación,
creyendo que no era observado.
_ ¿A
dónde vas con eso? _ preguntó Vini, levantándose muy preocupado haciendo que a
Rodry se le cayera la bolsita de hielo al suelo _ ¿Por qué no le dijiste al
míster que no estabas en condiciones de jugar? _ Ya cerca del él, le recogió su
remedio y se lo pasó
Aquello
lo tomó por sorpresa a Rodry y con el corazón acelerado, le dijo lo primero que
se le vino a la cabeza, que solo le incomodaba un poco el muslo, que no era
nada grave y que no se preocupara, Vini amable como solía ser, más sí se
trataba de su hermanito, se ofreció para ayudarlo en la sala.
_ No,
no, es que voy a quitarme este pantalón que me tiene mal desde que me lo puse.
_ soltó sin querer, ya no encontraba que decir, sí seguía así de nervioso, Vini
iba a acabar descubriéndolo, que vergüenza, enrojeció de nuevo de imaginarse a
su hermano reírse de él.
_ ¿Y
que con eso? ¿Te da pena que te vea en calzoncillos, desde cuándo eh? _ Que
excusa tan mala, pensó Rodry en su lugar, como se le ocurrió decir eso, ellos
se bañaron juntos ya muchas veces, tanto en su Club como en la Canariha, era
algo muy normal y no solo ellos dos, con muchos otros compañeros de profesión,
por eso no entendía que estaba pasándole a su hermano, estaba muy extraño.
_
Bueno es que yo… _ con la vista clavada
en el piso, no podía controlar lo caliente que tenía la cara, que momento tan
más incómodo, trágame tierra, pensó._
No quiero que me sigas y punto _ decidió decir eso y se fue corriendo hasta su
habitación.
_ Después dicen que el loco soy yo, pero a ti
Rodrygo te faltan tres tornillos, sí es que tenías a tu chica escondida en tu
pieza, me hubieses dicho y otro día nos vemos, pero deja tu misterio, que nos
conocemos desde que somos niños _ se puso a gritar como un completo desquiciado,
al tiempo que aventaba al suelo los cojines de los sillones de su amigo, definitivamente
cuando Vinicius se enojaba se le iba la olla, y es que no soportaba que su
mejor amigo en la plantilla se portara con suspicacia por cuestiones tan
básicas y triviales como tener intimidad con tu chica, encima que lo invita a
pasar el rato, porque la invitación fue de él para sacarlo del ensimismamiento
absurdo en el que había estado desde que se terminó el partido y todavía lo
deja elegir su casa y accede a manejar y el otro se pone con esas tonterías, no
sí es para darle una buena piña para que deje la gilipollez, pensaba Vini
tirándose en sofá bruscamente y encendió la tele, para intentar calmarse, dio
un largo bostezo, miró su reloj de pulso, vaya, ya iban a dar las dos de la
mañana, el tiempo voló, tenía algo de sueño, así que sacó de su mochila una
botella con agua, y se tiró un poco en los ojos, tenía que mantenerse alerta
sino el sueño se lo iba a comer.
Mientras
tanto Rodrygo que ya estaba en su cuarto, con la bolsa de hielo en el mero
centro del culete para aliviar el escozor, después se la ponía en una nalga y
luego en la otra, vaya que le incomodaba, nunca pensó que Carlo lo zurrara tan
fuerte y solo fue mano, ni quisiera pensar si se le ocurría usar otra cosa en
su lugar, cuando terminó de refrescar la zona, espero a que secara y cogió un
poco de ungüento que siempre él y sus compañeros usaban en la nariz y en el
torso para respirar mejor en los partidos, esta vez lo aplicó en todo el culo y
se sentía bastante bien la sensación de aquello.
_Listo,
creo que en unos minutos estaré como nuevo _ dijo el chico, poniendo sus
calzoncillos en su sitio, luego fue por una pantaloneta corta y cómoda y se la
puso rápidamente, colgó los blue jean en un gancho, lo metió dentro del armario
y cogió sus chancletas favoritas _ Ahora sí espero que Vini no se haya ido
enojado conmigo por mis problemas, definitivamente era mejor ir a su casa _
agregó cerrando la puerta.
Ya
en la sala, Rodrygo llegó, se alegró de ver a Vini todavía sentado en el
sillón, así que se sentó justo a su lado, pero el chico no hablaba, estaba muy
entretenido viendo un juego de baloncesto de la NBA o al menos era lo que
parecía, el silencio era muy incómodo, normalmente cuando existía alguna
diferencia o situación en el cual cualquiera de los dos se sentía enojado por
lo que hubiera hecho alguno, siempre era Vinicius el que rompía el hielo, y
luego hablaba mucho y después no paraba de hablar, y fuera cual fuera la
situación, le buscaba el lado divertido a todo, se reía todo el tiempo y de
forma ruidosa y eso era algo que le gustaba mucho a Rodrygo y que admiraba de
su amigo y compañero de equipo y selección, Vini era tan simple y sencillo con
todo, no pensaba, ni se preocupaba tanto como él, pero ahora estaba demasiado
callado para su gusto, así que por una vez decidió él decir algo.
_
Vini yo lo siento, pero hoy, mejor dicho ayer, _ se percató recién de la hora _
me paso algo serio y no quiero hablar de ello, así que por favor no insistas
más, somos hermanos, pero yo también tengo derecho a tener guardados mis
secretos bajo llave, tampoco te ando preguntando tus cosas y a veces aunque
externamente no lo parezca, eres más reservado que yo, por eso evito meterme en
tus asuntos, yo te conozco mejor que nadie _ terminó Rodrygo y su amigo
simplemente seguía en silencio _ ¿Y es que no piensas decir nada? ¿Pretendes
seguir ignorándome? ¿Entonces para que viniste? ¡Habla de una buena vez! _ lo cogió del brazo y empezó a sacudirlo, el
más alto se zafó violentamente y se puso de pie.
_ Me
largo, ya me cansé _ iba camino a la puerta cuando la alcanzó y la abrió, para
su sorpresa se topó con el señor Eric padre de Rodrygo y Ana Julia, su hija más
pequeña _ Ambos tenían insomnio, producto de haber dormido prácticamente toda
la mañana y parte de la tarde del día de ayer, por lo que habían decidido dar
un largo paseo y los cogió la madrugada sin percatarse.
_
Hola Vini, ¡qué bueno que has venido a visitarnos! _ Saludo sonriente la niña
ya dentro y de inmediato le hizo un gesto para que Vinicius la cargara, quien
no lo dudó ni un segundo, la chiquilla contentísima le echó las manos en el
cuello y le plantó un beso en la mejilla, Rodrygo rápidamente se acercó con la
intención de quitarla de los brazos de su amigo, de repente se había enojado
por su falta de consideración, según él, pero aquello parecía más celo que otra
cosa.
_
Que grande y guapa estás Ana _ la apretó más a él, Rodrygo en su sitio solo
pudo fruncir el ceño mientras pensaba en lo pesado que se ponía Vini cuando
quería, lo sacaba de quicio_ Ah hola señor Eric, vine a visitar a Rodrygo, pero
ya me tengo que ir _ mencionó, la nena puso carita triste y a Rodrygo le dio
igual, sí se quería ir, que se marchara de una vez porque ya él estaba cansado y
solo quería echarse a dormir, que ya era más de las dos de la madrugada.
_
Una pena que acabamos de llegar y te tengas que ir, quédate un rato, te
invitamos a comer algo ¿Te parece? _ propuso el señor de Goes muy amable como
solía ser, Rodry solo rodó los ojos y botó el aire.
_ Siiiii
Vini quédate con nosotros por favoooor, además eres más divertido que mi
hermano _ dijo ella y chico le guiñó el ojo cómplice mientras se partían de la
risa ambos y Rodrygo cada vez más enojado.
Preguntándose
cómo era posible que de un momento a otro al Vini le cambiara el humor para
bien, como podía ser siempre tan positivo con la mayoría de las cosas, todo se
lo tomaba a broma, era algo que él debía aprender de su mejor amigo en el
equipo, él vivía de preocupación en preocupación, desearía ser tan simple y
práctico como Vinicius, para quien todo
era una alegría constante.
Vini
había decidido quedarse un rato más con ellos, total tenían el día libre y el convivir y distraerse le
vendría bien, además amaba compartir con la gente, sobre todo con aquellos que
quería y apreciaba mucho, el padre de Rodrygo una vez que terminaron de comer
lo que él les preparó y amablemente les sirvió, de una y sin titubeos le pidió
explicaciones a su hijo por su comportamiento al momento de su sustitución y por su puesto de sus gestos y malas maneras en
el banquillo, y claro, cómo no se iba a dar cuenta, si vio toda la escena por
la televisión, había estado muy pendiente de ese partido y de la competición en
general, deseando que los chicos se hicieran con ese título, era el único que
les faltaba de la colección que ya tenían y se alegró muchísimo al ver que
consiguieron remontar una vez más, pero
le molesto mucho los modales de su niño, Rodry enseguida se puso rojo hasta las
orejas mientras el corazón le latía rápido, no esperaba que su padre se atreviera
a reclamarle eso y menos con Vinicius ahí, que si bien era como de la familia, era
muy vergonzosa la situación para él. Era
mejor ir a la casa de Vini, pensó otra vez en medio de sus preocupaciones. Su amigo por
su parte solo abrió los ojos sorprendido, su padre era bastante parecido, y
también le llamaba la atención cuando actuaba de forma equivocada, pero era él,
quien se conocía muy bien y sabía que solía ser muy impulsivo y competitivo con
todo, y no es como si Rodrygo no fuera igual, sin embargo el grado de
intensidad de Vini podía ser desesperante, tanto así que el mismo lo reconocía,
su amigo Felipe ya lo había dicho en alguna ocasión estando de visita en su
casa, se pone todo loco y no soporta perder ni en los vídeo juegos, a diferencia
de Rodrygo quien es demasiado tranquilo para ser retado de la manera como el
señor Eric estaba haciendo, con firmeza y total seriedad.
_ Que
no se vuelva a repetir ese tipo de actitudes, los malos modales no están bien
en un muchacho como usted, serio, organizado y excelente jugador, su madre y yo lo hemos educado
mejor, no quiero enterarme que vuelve a faltar al respeto a su entrenador o se
porta malcriado otra vez porque entonces usted y yo vamos a tener una larga
conversación en privado, ¿he sido claro?
_ Ya
yo sé, ya Carlo y yo conversamos y todo quedó resuelto, el señor no se tiene
que entrometer en eso _ contestó gallito poniéndose de pie, su hermanita que
ahora estaba a su lado, no se contuvo y le dio un manotazo con toda la fuerza
que puede tener una niña pequeña en el mero centro del culo.
_ ¡Tonta,
no hagas eso! _ por primera vez le había gritado a la niña, a la pequeña se le
aguaron los ojos, Vini fue dónde estaba y la abrazó mientras la consolaba. _ Si
claro, ve a hacerte la víctima ahora y vete con el fastidioso de Vinicius que
ya debió haberse ido hace rato.
_
Basta ya Rodrygo, su hermana y Vini no tienen la culpa de sus errores y los
líos en los que se mete, hágame el favor y se controla.
_
Bueno, creo que es hora de que me vaya _ dijo Vini intentando salir del paso,
no quería que su presencia en un tema familiar avergonzara más a Rodry de lo
que ya estaba.
_
Tranquilo Vini, no le hagas caso a este muchacho desubicado _ dijo Eric
invitando a Vinicius a sentarse una vez más, que incomodo se estaba sintiendo
en su posición, pero no quería ser descortés con el señor.
_
Ahora yo soy el desubicado, y ya te dije que no te metas padre que no es tu
asunto, me tienen hasta los cojones los tres y pueden irse… _ no terminó la
frase porque Eric le dio una fuerte palmada en la boca, acto seguido le dio
vueltita y le arreó diez palmadas rápidas en ambas nalgas acompañado de la
pregunta: ¿Va a comportarse y a enderezar
esa actitud ahora mismo o quiere la versión completa?
Aquello
lo dejó fuera de juego o mejor dicho sin capacidad de reacción en el momento,
sin embargo enrojeció de nuevo, bajó la mirada apenado con los ojos aguados,
más por humillación que por dolor, así que no se le dio la gana de responder
nada, no les daría el gusto a los presentes de que lo vieran hacer lo que su papá
quería solo por su capricho; se encasillo en que el necio era su padre no él,
por tanto no le iba a dar la razón, pero su progenitor era insistente con los
modales, de manera que volvió a repetir la misma pregunta para darle
oportunidad a su hijo de reflexionar y que todo terminara ahí.
_ ¿Va
a comportarse y a enderezar esa actitud ahora mismo o quiere la versión
completa? _ Vini no sabía ni para dónde mirar, que sensación más incómoda
realmente, lo positivo de todo era que Ana Julia estaba ya más calmada, luego
Vinicius pidió mentalmente a Dios que Rodrygo dejara el orgullo de lado,
hiciera caso y contestara de buena manera, aceptando que se iba a comportar,
tal como su padre le pedía, ya que Vini estaba seguro, que el señor Eric lo iba
a zurrar bien fuerte, si seguía de irrespetuoso y él no quería ser testigo de
eso.
_ Yo
ya sé cómo comportarme, no eres quien para decirme… _ y la frase volvió a
quedar en el aire.
Vini
se pasó la mano por la cara, ni él siendo tan obstinado para la mayoría de las cosas
que hacía se atrevía a contestarle así a su padre, vaya atrevimiento de ese
niño, pensaba sorprendido en su lugar, pero estaba claro aquello le saldría
caro al número 21 del equipo blanco. Eric volvió a ponerlo en la misma posición
aunque esta vez el chiquillo estaba más preparado e intentó forcejear con él,
pero su esfuerzo no sirvió de mucho, así que otra vez recibió diez nalgadas más,
ahora pausadas, pero más recias, Rodrygo apretó los labios mientras su padre le
decía que era su última advertencia, pero el muchachito estaba completamente
cerrado.
_
Rodrygo hermano obedece a tu padre, a veces no nos gusta lo que nos dicen, pero
solo te está aconsejando por tu bien, mira… _ intervino Vini poniendo un brazo
en su hombro con el propósito de hacerle entrar en razón y bueno también de
salvarle la retaguardia a su amigo, pero aquello fue como hablarle a la pared.
_ Tú
no te metas imbécil _ le apartó el brazo bruscamente _ y no me llames hermano,
que no eres nada mío, _ ya no sabía lo que decía producto de su enojo, y eso lo
hirió a Vini, sin embargo al instante comprendió que Rodry solo hablaba así
debido a lo enfadado que se sentía con todo lo que le estaba pasando y que
quizás él en su lugar hubiera actuado igual o quizás con más arrebato _ no
comprendes nada y ya lárgate de una buena vez.
_
Hasta acá llegó mi paciencia _ dijo el señor Eric y cogió a su hijo del brazo y
a rastras lo llevaba camino a su habitación al mismo tiempo que le daba duros
azotes a cada paso que daba, Rodrygo intentó escabullirse, pero le era
prácticamente imposible, estaba muy cansado, así que viendo que las había
metido hasta el fondo, sino recobraba fuerzas o se inventaba algo, le tocaría
aceptar el castigo que le iba a dar su padre, que no sería otra cosa que una
buena azotaina con el culo al aire _ Voy a tener que volver a enseñarle a
comportarse como la gente decente.
Una
vez alcanzaron la habitación del chico, Eric trancó la puerta, sin soltar a su
hijo caminó hasta la cama con él. Rodrygo que sabía lo que venía a continuación
y no estaba para nada de acuerdo con eso, no demoró en reclamar.
_ No
te atrevas a pegarme así, yo ya no soy un niño, suéltame…
_ Quieto
ahí, te has portado como un verdadero mocoso desde que llegué, ahora vas asumir
el castigo que te mereces, a ver si así aprendes a comportarte como es debido _
dicho aquello tomo asiento en la cama de su muchacho mientras sin esfuerzo le
bajó la pantaloneta, luego tiró del elástico de los calzoncillos y en un santiamén
lo tenía dónde quería y como lo quería, sobre sus rodillas, con el culete
completamente al aire y posición idónea para recibir su merecido.
_
Noooo, no lo hagas…, así no por favor noooo _ gritó a todo pulmón.
_
Silencio señorito, que una tunda bien dada siempre es con las nalgas peladas,
es la única forma que aprendas la lección _
Habiendo dicho eso para mayor vergüenza del chiquillo, que volvió a
sentir el calor subirle a la cara, levantó la mano y empezó con la azotaina,
una buena dosis de mano dura, de abajo hacia arriba, en ambas mejillas y en
reiteradas veces al centro sin hacer daño, pero sí de forma enérgica, luego
volvía y lo repasaba en el pegue de los muslos y el culo, Rodrygo lloraba a
moco tendido, revolviéndose mucho, aunque se había aliviado un poco de la zurra
recibida por Carlo, su padre le estaba azotando con ganas, tenía la mano
bastante pesada, enserio ahora sí que se arrepentía de haber sido grosero en la sala
con su padre, su hermanita y Vinicius, su padre tenía razón, ellos no tenían la
culpa de sus líos y ahora estaba pagando las consecuencias de sus acciones, y
la verdad cada vez se convencía más, era
mejor ir a la casa de Vini.
_
Papá por favor, me portaré bien, seré bueno, pero ya no me pegues más _ dijo
suplicante con la carita llena de lágrimas.
_ No
jovencito, todavía no termino con usted _ dijo y continuó con los azotes un
rato más, los dos cachetes vibraban con cada nuevo manotazo recibido, sus ropas
estaban ya en las rodillas, Rodry tiraba sus caderas de un lado a otro,
intentando escapar, también levantaba la parte superior de su cuerpo e incluso
quiso lanzarse al piso, recordando como lo hacía cuando tenía once años, su
padre notó aquello y como el mocoso no quería cooperar, de nuevo lo reprendió
severamente, terminando de sacarle toda la ropa, que por el momento no iba a
necesitar, lo acomodó mejor, sosteniéndolo con más fuerza mientras seguía con
las palmadas una detrás de la otra.
_ No
más por Dios, no más, me estas pegando muy duro _ metió el dorso de la mano
izquierda.
_
Rodrygo Silva de Goes, saca esa mano de ahí inmediatamente o me voy a quitar la
correa y te voy a dar una cuera que te va a dejar sin poder sentarte bien por
una buena temporada, así que más te vale que colabores y asumas tu castigo como
corresponde.
_ Me
duele mucho papá… _ ni su llanto, ni la miradita que le lanzó todo acongojado
puchero incluido, lo ablandó, papá no iba a dar su brazo a torcer, el chico
tenía que aprender a respetar a la gente, tanto su mujer como él, eran muy
serios con el comportamiento, así le habían enseñado desde peque, así tenía que
continuar.
_ Y
más te va a doler, así que vete preparando _ A Rodrygo no le quedó de otra que
apartar la mano y volver a mirar el suelo, hoy su padre no estaba para
complacencias y encima lo había llamado por su nombre completo, lo cual
significaba que la amenaza no sería en vano.
Eric le dio veinte azotes más, repartidos por todo
el culo, el niño reanudó el llanto, pero sin chillar, que pena todo lo que
había pasado durante ayer y hoy, todo seguido, dos buenas azotainas y encima con Vini seguramente escuchando la
que su papá le estaba dando, temía que enojado con él, lo delatara frente a sus
compañeros de Club y selección, vamos que él sabía que Vinicius era todo menos
rencoroso o mala persona, sin embargo su temperamento explosivo en ocasiones lo
dejaban pensando y hoy con más razón, sobre todo por como lo acabó de tratar en la sala, así
que era consciente que podía esperar cualquier cosa de su amigo.
Papá
lo dejó levantarse, el muchacho aprovechó para darse una buena sobada en el
culete, mientras daba los típicos brinquitos, polla en ristre y con los
testículos al aire, que bueno que no era su madre que lo veía así, le hubiera
dado el doble de vergüenza, ojalá que no venga ella a querer corregirlo así
también, ya había tenido suficiente. Eric le indicó que se diera la vuelta y se
colocara cara a la pared por quince largos minutos mientras volvía a regañarlo.
_
Este castigo no termina aquí, _ Y con esa declaración Rodry abrió los ojos como
plato, ¿cómo que el castigo no terminaba aquí? ¿Enserio iba a cumplir su
amenaza y le iba a incendiar las nalgas a punta de correa?, se puso a pensar
muy preocupado _ te has portado muy mal tanto en el Club como en casa y has
faltado al respeto no solo a mí, también a tu hermana y a Vinicius, tu hermano,
amigo, colega y compañero no solo profesional y de entrenamientos, además para
la mayoría de las actividades que realizan juntos, él que siempre te apoya, _
el muchacho bajó la mirada apenado con su mal proceder _ te he dado una zurra
solo con mi mano, pero considero que no es suficiente para lo que has hecho,
así que te daré otra, pero será con la regla, _ Rodry botó el aire, al menos no
sería con el cinturón, sin embargo se acordó de algo, que lo hizo tragar
saliva, la bendita regla de metal era bastante dura y cuidado la paliza se
alargaba más, ojalá que su padre tenga piedad de su pobre trasero que entre
ayer y hoy ya había recibido lo suyo y estaba bastante escarmentado _ cuando
cumplas los quince minutos de reflexión y después vas a ofrecer una disculpa a
tu hermanita y a Vinicius. ¿He sido claro?_ Rodrygo no quería contestar, pero
no le quedaba de otra.
_
Sí…
_
¿Sí qué? _ no le gustó para nada el tono con el que dijo ese sí.
_
Sí, lo voy a hacer, me disculparé _ La cara se le volvió a teñir de rojo, solo
de imaginarse la escena.
_ Se
contesta sí señor, voy a disculparme, se
demora más, pero se expone menos _ Rodrygo rodó los ojos.
_ No
me tuerza los ojos carajo, respete, respete, respete _ tres azotes sonaron al
son de la repetición de la última palabra.
_
AUUU mierda me duele _ se sobó la zona desesperado.
_
Sin groserías y manos en la nuca _ le apartó la mano y volvió a nalguearlo
fuerte.
Rodrygo
quería comentar un: ya estuvo bueno,
pero esta vez amarró bien la lengua, no quería regresar a las rodillas de su
padre tan pronto y saber que aún faltaba la condenada regla, lo mortificó más
todavía, esa cosa picaba y dolía como los demonios y sumado a que traía el culo
ya enrojecido con solo un par de reglazos bien dados de canto a canto, tendría
para ponérselo bien a tono y se repitió para sí mismo en voz baja, era mejor ir a la casa de Vini.
_
¿Qué dijiste? _ preguntó su padre arqueando una ceja.
_ Ah
nada, que seguro Vini se quiere ir a su casa.
_ Se
irá cuando te disculpes con él, _ le hizo saber serio y agregó _ ve preparando
el trasero, voy a por la regla y vuelvo enseguida.
Y
dicho aquello salió por la puerta de la habitación de su hijo, dejándolo igual
de nervioso tal como cuando Vini fue
testigo de la regañina y los azotes que le dio su padre, porque más no se
podía.
_ Esto
es lo que me gano por cabeza dura, era mejor ir a la casa de Vini, era mejor ir
a la casa de Vini, era mejor ir a la casa de Vini… _ dijo varias veces y
aprovechando que su papá salió para sobarse las nalgas con ganas.
Notas: Espero que hayan disfrutado
de este capítulo tanto como yo al escribirlo, tuve que reeditarlo muchas veces,
ya que no recordaba que ellos jugaron en la noche, están en Europa y lo normal
es que estuvieran de amanecida, así que tuve que arreglar ese detalle.
Por
otra parte, no he tenido mucho lugar para escribir, tengo muchísimas ideas,
pero como saben me suelo ocupar mucho en el diario vivir, bueno acá les traigo
la continuación de esta historia, si bien no suelo escribir castigos de los
padres a sus hijos futbolistas, (soy más de relación entrenador corrige a x o
y jugador o un veterano corrigiendo a
uno más joven, algo que me apetecería volver a escribir más adelante en alguna
otra historia, en esta solo Carlo va a corregir el trasero de los necios xd)
pero con Rodry si aplica, él es muy unido a su padre, de hecho es su consejero
y quien lo orienta en su carrera, y pasan mucho tiempo juntos, así que este
episodio encaja a la perfección y bueno, Rodrygo solito se buscó el castigo,
espero seguir pronto con el siguiente, me hacen saber en los comentarios que
les pareció. Sin más, téngame mucha paciencia con las actualizaciones, los
quiero mucho un abrazo y nos leemos ;-)
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