viernes, 4 de noviembre de 2022

ღ..Regreso a casa..ღ

 

Después de que Isis fuera golpeada tan brutalmente por Ámbar y su grupo tuvo que permanecer hospitalizada más de lo que ella quería, según había investigado la lesión que ella tenía se curaba en tres semanas, pero ella ya estaba resentida, había tenido una lesión con anterioridad debido al accidente un año antes en cual había fallecido su hermana Lya.

Ana Lucia al llegar a la clínica aquel día ayudo a preparar a su sobrina ya que al fin se podría ir a casa, una vez lista y mientras esperaban el alta. Isis se encontraba sentada en su silla de ruedas viendo a su Padre moverse por la habitación empacando cosas, este al notar como la chica temblaba de ansiedad la distrajo.

- ¿Cómo te sientes cariño?- Pregunto e Isis parpadeo un par de veces pensando en cómo se sentía.

- No tan bien, es raro... pero creo que estaré mejor y mucho más feliz cuando nos vayamos de aquí y finalmente puedas dormir en una cama de verdad esta noche.- Aseguro mientras esbozo una pequeña sonrisa observando a su tía quien en respuesta se abrazó a su sobrina y luego comenzó a peinar su cabello mientras decía.

- Así es mi vida, Pronto nos iremos a casa y todo estará bien..- Aseguro besando la parte superior de su cabeza al mismo tiempo que entraba la enfermera.

- ¿Estamos listos?- Pregunto al ver que en la habitación estaba "desocupada"

Los meses en los que estuvo Isis se encontraban llena de peluches, globos, flores y otras cosas que enviaban familiares y en especial amigos de la chica para motivarla por su recuperación.

- Si listos...- Dijo Víctor que también quería salir de la clínica y no porque se encontraba molesto por la atención y el desempeño de la clínica; muy por el contrario estaba enormemente agradecido con los fisiatras, terapeutas y enfermeras del lugar, lo que a él sucedía; es que estaba ansioso por lo que pasaba en casa de su cuñada.

Los amigos de su hija, habían preparado una pequeña fiesta de bienvenida organizada por Pablo y Tamara

Los amigos de su hija, habían preparado una pequeña fiesta de bienvenida organizada por Pablo y Tamara... ellos quería que todo estuviera perfecto, y anteriormente los chicos le habían enviado un mensaje, avisándoles que aún no estaban listo y necesitaban una hora más.

Al salir de la habitación y mientras Isis era conducida por su tía, todos los médicos y enfermeras que habían trabajado con Isis se despidieron cariñosamente y luego subieron al ascensor para bajar al subterráneo, el auto se encontraba en ese lugar junto a Paola, enfermera de Isis quien ya la conocía desde el accidente con Lya. Isis al verla en su rostro se dibujó una amplia sonrisa.

- ¡Buenos días Paola!- Se esforzó por subir su voz

- Buenos días hermosa.- Saludo contenta y luego al ver a Isis cambio su semblante a preocupada, la chica estaba muy pálida y tenía  demasiada marcada las ojeras. Se notaba que estaba aún delicada - No te preguntare como estas porque no veo... así que Isis, ¿Tuvimos problemas para dormir y descansar?

- SI, Pero ya sabes cómo me afectan los hospitales, solo necesito mi casa, mi habitación y en especial mi ducha.... ¡Urgentemente! Así que no te acerque mucho a mí. - Bromeo cuando vio a su enfermera acercarse para ayudarla, Paola ayudo a Isis a levantarse mientras Ana lucia sostenía a su sobrina con mucho cuidado ya que aún le dolía demasiado su cuerpo.

Una vez en el auto Ana lucia guardo la silla de ruedas atrás; mientras su cuñado revisaba su celular al sentir la vibración y luego leyó el mensaje de Tamara avisando que en tenía todo listo.

Isis al escuchar el motor encender y ver como el auto avanzaba alejándose de la cínica dijo con voz cansada,

- Adiós hospital, y esperemos ¡¡ Que nunca tenga que regresar....!!- Medio rogo con todas sus fuerzas.

Víctor antes de dirigirse a casa de su cuñada hizo una pequeña parada en la pastelería cercana, los chicos le había encargado retirar una torta que habían encargado por la mañana, pero no alcanzaban a retirarla, cuando Isis vio a su padre llegar con eso se sorprendió, pero no dijo nada. Pensó que festejarían su salida de la clínica y luego todos se irían a la cama, habían pasado unos meses terribles y todos en el auto se notaban cansados, Cuando finalmente llegaron a casa, Isis noto algunos autos en el camino de entrada.

- Papá, ¡Qué está pasando aquí!.- Y fue en ese momento que sintieron varias micro explosiones alrededor del auto, eran algunos compañeros del colegio que aparecieron de pronto con cañones de papelitos, de pronto Isis observo a Tamara aparecer con un cartel de bienvenida, mientras que a su alrededor habían chicos festejando con botellas de champagne y bailando, en la entrada de la casa.

Isis no sabía cómo reaccionar ya que pensaba que sus compañeros la odiaban y aborrecían por ser la nueva, al inicio no había tenido días fáciles, su corazón había sufrido mucho aquellos días, pero en ese momento todo dejo de importar al ver el cariño de los chicos que la animaban a bajar del auto, Víctor estaba anonadado y algo molesto por la cantidad de gente así que rápidamente se quitó el cinturón y bajo al momento que Pablo se acercó para saludar a Isis.

- ¡Te dijimos que no fuera una fiesta!, Pablo simplemente se trataba de una pequeña bienvenida.

- Isis al fin esta mejor y con nosotros, ella venció a la muerte ¡Eso se celebra en grande!- Aseguro mientras esperaba a la chica que saliera del auto sonriendo.

Pablo estaba con un ramo de rosas rojas en una mano y un oso de peluche en la otra sonriendo; al ver el rosto de confusion e incomodidad de su amiga cambio su sonrisa por expresión de preocupación,  Isis estaba un poco asustada, y al borde de las lágrimas, Ana Lucia al interior tomo la mano de su sobrina y la apretó con cariño cuando noto que esta comenzó a temblar.

- shh, está bien, cariño.- La tranquilizo.

Víctor en ese momento junto a la enfermera, ayudaron a la chica bajar del auto, pero con los nervios no pudo sostener su cuerpo así que su padre la cargo hasta la entrada y acomodo en la silla de ruedas, Tan pronto como llego a la puerta, los chicos comenzaron saludarle cariñosamente y animarla, Isis sonreía feliz al sentir el cariño por primera vez en muchos años, las lágrimas de ella, su padre y tía brotaban sin control, pero esta vez era de alegría y no de angustia y dolor.

Cuando ingresaron a casa Isis se encontraba a un costado de Tamara tratando de hablarle pero con el ruido ambiente la chica no la oía, así que la jaloneo de la manga.

- ¿Qué pasa?

- Necesito desaparecer sin que lo noten.

Pablo te espera, aun no puede saludarte, ¡No le puedes hacer esto!- Dijo entre dientes.

El chico espero pacientemente mientras ella saludara a todos los presentes quienes a su vez le dieron palabras de cariño y apoyo.

- No puedo hablar así con él, me daré una ducha rápida y vuelvo enseguida.

Una vez en el baño, Isis bloqueo la puerta y se metió en la ducha, el vapor y el agua humeante ayudaron a que sus músculos se relajaran y de pronto comenzó a llorar mientras era asistida por Paola

- Llora mi niña, saca toda esta tristeza de ti y ya estás en casa con la gente que te ama.

Luego y después de la ducha la chica , se vistió sin muchas ganas de asistir a una fiesta y se quedó en el dormitorio de visitas del primer piso por un rato, estaba avergonzada y tenía una revolución de sentimientos, se sentía agobiada por el gentío y que todos la observaran y principalmente estuvieran pendiente de ella.

En su vida nunca había sido el punto de atención, más bien siempre fue Lya su hermana gemela, Así que si bien estaba feliz por esto, también estaba profundamente estresada y le afectaba enormemente que la  vieran en silla de ruedas, porque desde el primer momento que se sentó en ella la odio;  Sin saber que hacer y lamentándose intentaba decidir si salir o encerrarse todo el dia; pero antes que lograra tomar una decisión de pronto escucho que golpean la puerta

.

Toc - toc- toc

- ¡Qué!...grrrr. – Gruño al responder molesta pensó que era su tia, pero su rostro cambio al ver a Pablo ingresar a la habitación.

- ¿Estás bien?- Pregunto

- Sí... bien.- Mintió, con tono molesto en su voz

- Mmm... pues no me parece que lo estés.- Aseguro con una sonrisa incomoda entregándole el oso de peluche. Isis lo abrazo, comenzó a llorar y negó con la cabeza.

Pablo se sentó a su lado y la atrajo hacia él, levantándola de la cama y sentándola sobre sus piernas frente a él, Isis en ese momento lo abrazo con todas sus fuerza y escondió su cabeza en el cuello aun sosteniendo al osito que quedo en medio y comenzó a llorar desconsoladamente.

- Oye, shh, ven aquí.- Dijo Pablo acercándola más hacia él .- Ya es hora de sacar todo esos de ti.- Isis intento hablar pero no lo logro, las lágrimas salían sin control y se ahogaba de pena, era un llanto tan lastimero que Pablo entendió que en ese momento debía contenerla, él también lloraba y con voz quebrada trato de tranquilizarla.- Lo sé, Isis lo sé.- Dijo con dulzura mientras la apretaba contra él con fuerza y acariciaba su espalda hasta que la chica se calmó y dejo de llorar.

- ¿Estas mejor?- Ella no respondió vocalmente, pero Pablo pudo notar un movimiento de cabezas en su pecho.

- Ok - Dijo frotando su espalda.- ¿Qué tal si bajo y te preparo un plato de comida y te lo traigo? - Pero Isis negó con su cabeza

- Tienes que comer algo ¿sí?

- Bueno, te espero aquí....- Pablo al ponerse de pie la acostó y ella inmediatamente se abrazó al osito y cerró los ojos, en ese estado no podía bajar así que trato de tranquilizarse.


...En la fiesta de bienvenida, en el salón...


- Oye, Pablo, ¿Isis está bien? ¿Dónde está?- pregunto Jaime.

- En la Habitación le llevare algo de comida.- y fue en ese momento que Jaime le entrego su plato que se había preparado anteriormente.

Pablo al ingresar a la habitación, Isis estaba mejor y al ver lo que su amigo traía consigo se devoro los dulces y cosas ricas. Luego se sentó en la silla de ruedas e intento maquillarse, pero no lo lograba le dolían sus muñecas al estar tanto tiempo con una vía intravenosa. Así que fue Pablo quien lo hizo o intento hacerlo mientras,

Una vez lista y antes de salir de la habitación, Isis agradeció sonriendo al fin y el chico sintió al fin tranquilidad.

Gracias Pablo por todo, y en especial por la comida.

- Ok, no pasa nada, pero lo que yo quiero saber ahora si estas ¿Lista para el espectáculo?

- Siiiiii.- Dijo animadamente y salieron de la habitación, al llegar a la sala estaba Ana lucia esperándola y le dio un pequeño abrazo

- Hola cariño....- Dijo en voz baja.- ¿Estas bien?- Pregunta y acariciando suavemente su cabello solo estando cerca de ella preocupándose por ella

- Si, todo bien tía...

Y así fue como Isis al fin disfruto su fiesta de bienvenida, la tarde y parte de la noche fue mágica, sus compañeros y amigos contaron anécdotas y recuerdos de años anteriores haciéndola parte al fin, ella estaba sentada en el sofá con Tamara a un lado y Pablo al otro, feliz y sonrientes, sin notarlo el reloj dio las 11 la noche y el padre de Isis junto a su cuñada comenzaron a repartir a los chicos que sus padres aun no iban por ellos, mientras Pablo acompañaba en casa a Isis en su habitación comenzaron a conversar.

- ¿Quieres un café o algo?- Pregunto Pablo mientras bebía el suyo

- No, ya esa tarde y luego no puedo dormir.... Deberías considerarlo, ¡Es el tercero que te tomas!

- No me hace nada, es más... me siento relajado, además es descafeinado.- Aseguro subiendo y bajando los hombros en señal que no le importaba.

- Pablo... es tarde, ¿No tendrás problemas en casa? ...Yo puedo esperar a mi tía y papá, no sería la primera vez y no quiero que tú padre se moleste contigo por llegar tarde.

- No te preocupes, hable con ambos y está todo bien.- Dijo sentándose al lado de Isis y tomo su mano.

- Seguro, es que me preocupa que tú padre después te pegu ...... ya sabes por mi culpa.

- ¿Por qué te preocupa?- Pregunto mirándola a los ojos.

- YO... pues... porque estás conmigo y tal vez tienes hora de llegada y yo.... Entonces tú, no la cumplirás y se molestara y luego no quiero oír que te castigan porque yo... porque yooo.- Dijo nerviosa al ver a Pablo a los ojos, el chico tenía una mirada que la intimidaba, esta era tierna en su mayoría y con un poco de picardía.... Pero a la vez era intensa y calidad.

- ¿Por qué tú que?... ¿Por qué te angustia tanto Isis?

- Porque yoo... yo... Pablo, te quiero mucho.- Aseguro y fue en ese momento donde ambos se besaron, el mundo dejo de existir, solo fueron ellos y sus corazones latiendo fuertemente.

Su beso fue tierno y fue escalando pero no grotescamente a pasional... Isis acaricio el cabello de Pablo tiernamente y no se dio cuenta cuando se habían levantado y este la sostenía por la cintura. El momento fue creciendo y cuando se separaron sonrieron.

- Yo también te quiero Isis, es más creo que estoy enamorado de ti y...Pensaba, continuar pero de pronto se escucharon gritos desde la habitación de junto en la casa de Pablo

- ¡Ven y limpia eso!

Al oír esta orden los chicos se miraron sorprendidos y se dirigieron a observar por la ventana, la voz era de su madre y seguramente pensó Isis estaba regañando a Julián, el hermano mayor de Pablo.

- ¡TÚ LIMPIALO! ¡ES TÚ CASA! ¡ NO! – Luego hubo un silencio algo incómodo y se escuchó que rompían más cosas.

El sonido era extraño porque no era de como cuando se te cae algo, era más bien cuando estrellaba algo contra la pared, Isis sin entender se giró dónde estaba Pablo sorprendiéndose cuando noto que este estaba sacando medio cuerpo por la ventana para intentar ver lo que sucedía en su casa, cuando Isis llego el chico está en el balcón de su casa observando el interior y entro a la habitación, una vez que salió le informo.

- AYYYY Noooo ¡Acababa de destrozar media cocina!- Dijo Pablo

- ¿Por qué? Para hacer eso tu hermano debe estar ¡furioso!... ¡Cuidado te vas a caer! De pronto dijo Isis al ver que el chico se brincaba de vuelta el balcón de su habitación en el mismo momento que llegaba el padre a casa.

En el interior de la casa de Isis, Pablo se dirigío a la cocina para poder ver lo que pasaba en su casa por la ventana de la suya y se detuvo al escuchar a Baltazar.

- ¿Por qué?- Reclamo, pero Isis no logro entender la respuesta, la voz que contestaba era muy baja.

- Mírame cuando te hablo.- Dijo. ¿Por qué destrozaste la cocina?- preguntó simplemente.

- Porque estaba enojado...- De pronto la chica logro oír a través de la pared y era una voz asustada.

- ¿Sobre qué?

- No sé...

Y fue en ese momento que escucharon los ZAAAAAS  -  ZAAAAAS - ZAAAAS, Pablo en ese momento se puso rojo y se sintió avergonzado que Isis oyera como castigaban a su hermano, tan bien le dio pesar al enterarse que las paredes eran más delegadas de lo que creía y se dirigió a su casa.

- Pablo, Pablooooo.- Susurro Isis. – No vayas ven, espera un momento.- El chico se detuvo.

- Debo ir a casa Isis. – Dijo, para luego besarla más apasionadamente que la vez anterior

- Ok, ve con cuidado, te quiero.

- Yo mucho más.- Aseguro feliz y entro a la casa.

Isis hizo lo mismo, su padre y tía estaba llegando así que junto ingresaron, mientras Pablo corría a toda prisa para ver qué era lo que sucedía encontrándose con una horrible escena en la cocina de su casa. 


No hay comentarios.:

Publicar un comentario