Capítulo 9
Aprendiendo la
lección por segunda vez.
Joachim volvió a su habitación y encontró a Mario
durmiendo bocabajo envuelto en sábanas y
su ropa e interiores regados en el piso. Löw se quedó observándolo un rato y
luego dijo:
__ Todo, esto se pudo haber evitado ¿Por
qué tuviste que comportarte así? __ Dijo
mientras colocaba la ropa del chico en un sillón que había en el cuarto__ Bueno
al menos nadie se ha enterado de este incidente __ Seguía hablando mientras se
metía al baño a tomar una ducha.
Tan pronto salió del baño se puso un pantalón
de dormir y se acostó al lado de su pupilo, quien roncaba sin cesar. Pasaron
horas y el míster no podía conciliar el sueño por lo que a las ocho y media
decidió levantarse, colocarse una camiseta y un par de alpargatas, mientras
leía un buen libro, luego de terminar de leer, decidió llamar para que trajeran el desayuno a la
habitación para él y su invitado.
__ Muchas gracias señorita, puede retirarse __
Dijo Löw a la joven
__ Buen provecho señor __ Respondió ella.
El señor Löw le dio nuevamente las gracias a la chica,
cerró la puerta y después fue a despertar a su pupilo.
__ Mario… Mario despierta __ lo zarandeaba un
poco, pero el muchacho no quería abrir los ojos.
__ Mmmhm no quiero. ¡Déjame en paz! __ Dijo el
joven mientras se volteaba y le daba la espalda a su entrenador.
__ Ufff
volvemos a lo mismo. Mario por última vez párate de mi cama, pero ya __
Ahora lo sacudía mucho más fuerte, sin embargo el chico no tenía la mínima
intención de ponerse de pie, por lo que Joachim se hartó y le tiro una copa de
agua fría en la cara.
__ ¡Pero qué coño! __ Exclamo el chico__ ¿Qué
te ocurre? ¿Estás loco?
__ Era la única forma, que despertaras.
¡Holgazán! ¿Hasta qué horas pensabas
dormir?
__ Hasta la hora, que el cuerpo me pida. Estoy
muy cansado y todo es por tu culpa.
__ ¿Así? De modo, que ahora soy el responsable, que
seas un perezoso.
__ No, me refiero a eso. Sabes de lo, que
hablo. No se cómo te paso por la cabeza pegarme de esa forma tan… tan… tan
humillante.
__ ¿Y todavía lo preguntas? Tú sabes muy bien
porque lo hice. Y te advierto si tengo, que hacerlo de nuevo, lo haré. Aunque, no estés de acuerdo.
__ ¿Qué? No puedes porque…
__ Sí, sé, que dirás que no soy tu padre, que
no te gusta, que no te dejarás la
próxima vez, pero déjame informarte, que con todas esas escusas que me darás lo hare; si vuelves a pasarte de la raya, así que será
mejor que te mantengas al margen ¿Te quedo claro?
__ Arrg ¡No me puedes tratar como a un maldito
crio!__ Se quejó Götze.
__ Entonces no te comportes como uno __
Respondió el entrenador.
__ Grrr eres un…
__ Soy un ¿Qué? A ver dime. Vamos desahógate __
El técnico lo animaba a hablar.
__ Eres de lo peor. Te detesto __ Dijo Mario
aventándole un almohadón, que el míster agarró con facilidad.
__ ¿Enserio? Pues mira que tú a mí me caes muy
bien. Te tengo mucho aprecio.
__ No te creo nada y no quiero tu lástima__
Replicó Mario.
__ Yo dije aprecio, no lástima, pero bueno no
perdamos el tiempo discutiendo, mejor come tu desayuno, que se enfría__ Añadió Löw.
__ ¡No me importa! No comeré.
__ Mario Götze deja ya de actuar como un mocoso
malcriado y comete el maldito desayuno.
__ No quiero,
no tengo hambre y no me puedes obligar.
__ ¿Ah no? ¡Perfecto! Llamare para que lo
vengan a retirar__ Dijo Joachim en lo que se paraba de su asiento e iba por el
teléfono.
Al rato llego una de las mucamas del hotel y
recogió el desayuno y salió por la puerta. No habían pasado ni dos minutos y el
estómago de Mario, ya estaba pidiendo comida. Al ver que su entrenador comía
con tal paciencia, que desesperaría hasta al más hambriento, se acercó envuelto
en una sábana de tela delgada y miró a su jefe para captar su atención, este
lo noto y le dijo:
__ ¿Qué rayos te pasa ahora?
__ Es que yo… Yo tengo mucha hambre.
__ Ajá verdad,
ahora sí, pero antes te pusiste de caprichoso y no te dio la gana de
comer. Pues ahora te aguantas. No pienso darte
nada, de lo que hay aquí.
__ Me vale… llamaré para que me traigan algo de
comer__ Fue por el teléfono y marco, pero nadie contestaba, cansado de esperar
colgó, luego se dirigió por segunda vez, donde estaba el míster y trato de agarrar un
pedazo de pan pero…
__ No toque, que no oyó__ El míster había
azotado la mano del chico, haciendo que este se irritara. Mario observo
detenidamente a su entrenador y
cogió la taza de café, que había en la
bandeja y se la tiro en la camiseta, luego agarro un
plato con comida y lo aventó al piso con enojó. Löw perplejo al ver la reacción tan tonta de
su jugador; parpadeo varias veces, luego
miro al muchacho, después su atuendo y seguidamente los huevos cocidos juntos
con trozos de panecillos, embutidos y por supuesto restos de
vidrio que ahora adornaban la alfombra de la habitación, Joachim, siguió mirando un par de segundos más
(su atuendo, la comida, el plato hecho pedazos y a Mario) mientras Götze se
encontraba paralizado sin poder mover las piernas, cuando de pronto vio al
míster pararse de la silla e inmediatamente
lo cogió del brazo derecho
(El muchacho en
medio del forcejeo trato de huir, pero lo único que
consiguió fue desprender la sábana de su cuerpo, quedando como Dios lo trajo al
mundo)
__ Parece que no has aprendido bien tu lección,
tendré que volver a enseñarte __ Dijo el míster mientras lo empujaba y lo hacía
inclinarse en una mesa doblándole uno de sus
brazos y colocándoselos a la espalda, luego con su pie derecho le hizo
una llave consiguiendo enredarles las piernas para evitar que escapara.
__ ¡Déjame, no me toques! ¡Suéltame! ¡PUTO, Sádico
de mierda! __ Mario luchaba para liberarse, y a pesar que tenía un brazo libre
le fue inútil, Joachim era más fuerte que él y lo
tenía bien controlado.
__ Cierra el pico, te lo advertí, pero no haces
caso __ Dijo Löw, quien rápidamente se
quitó la zapatilla de esparto y con la mano que tenía libre, comenzó a
propinarle una buena serie de zapatillazos al centro y a los lados del trasero;
El muchacho apretó los labios tratando de aguantar, pero aquello no le sirvió
de mucho; pues con solo los cinco primeros, empezó a gritar
de dolor mientras sacudía todo su cuerpo tratando de escapar, pero lo único que
conseguía era que Joachim le diera más duro. Pasaron veinte minutos más, recibiendo fortísimos golpes en
tandas de diez, veinte y treinta, Mario empezó a berrear como una magdalena,
suplicando y rogando a su entrenador que
parara, pero este continuo azotándolo
aumentando el número de azotes y por supuesto la intensidad de los mismos,
mientras continuaba retándolo. Hasta, que se dignó a escuchar los lamentos del
chico y finalmente lo soltó haciendo,
que cayera de rodillas en el piso. Löw lo ayudo a incorporase y lo acostó nuevamente en la
cama, mientras le caían unos lagrimones enormes por toda la cara.
Al rato tocaron la puerta y el entrenador fue a
abrir
__ Sí, dígame. Se le ofrece algo.
__ Señor verá es que escuche ruidos y como que
alguien gritaba y lloraba desesperadamente
y pensé que tal vez…
__ No señorita, se equivoca todo está
perfectamente. No tiene de que preocuparse.
__ No pero
es que estoy segura que…
__ Creo, que son ideas suyas. No pasa nada. Lo
siento pero tengo cosas, que hacer. Sería tan amable de retirarse.
__ Señor espere yo…
__ Lo siento tanto, pero no le puedo atender __
Dijo mientras le cerraba la puerta en las narices.
__ ¿Quién era? Pregunto Mario aun gimoteando.
__ Alguien del servicio. ¿Tienes hambre aun?__
El míster trato de cambiarle el tema
__ Sí un poco. Oye, acaso, no es esa
la
chica de la
recepción. ¡Oh no! Seguro escuchó todo y tiene cara de chismosa. ¿Qué
coño voy a hacer ahora?__ Hablaba desesperado parándose de la cama y
colocándose una sábana de la cintura para abajo para tapar sus partes íntimas.
__ ¡Ya tranquilízate! No sé cuál de todas es,
pero no creo que se ponga en la tontería de contar algo, si es que oyó.
Además todos están dormidos, te aseguro,
que nadie se ha dado cuenta. Mejor
olvida eso, yo mientras voy a volver a marcar para que te traigan el desayuno y
espero que esta vez sí, te lo comas
¿Estamos?
Mario no contesto
__ ¿Estamos?
Seguía en silencio
__ Mario Götze. Te hice una pregunta.
__ Ah perdón, si, si estamos. Lo prometo.
Bien, eso espero porque no quiero volver a castigarte. No me gusta en lo más mínimo.
__ Pues para no gustarte, lo haces muy bien__
Respondió el chico sobándose el trasero, pero dejo de hacerlo ya que,
con eso lo único que,
conseguía era acrecentar el escozor y dolor.
Tardaron poco en llegar con otro desayuno la
misma chica, que lo retiro anteriormente, algo confundida por la indecisión del
muchacho, pero no le tomo mucha importancia, lo dejo y se fue a atender sus
asuntos. El míster observo detenidamente a su pupilo mientras comía y este por
supuesto se ponía cada vez más incómodo.
__ ¿Le ocurre algo al señor?__ Interrogó el
chico.
__ No nada, solo me percato, que no dejes nada
en ese plato.
__ Ya te dije que me lo comeré todo.
__ Más te vale, y no olvides los vegetales y
las frutas
__ ¡Oye! que no soy ningún bebe.
__No te enojes solo bromeaba, pero siéntate, no
te vayan a salir várices por estar tanto de pie__ Añadió Joachim mientras se
quitaba la camisa manchada y se metía al baño para ducharse por segunda vez,
dejando a un Mario molesto por el último comentario.
Y otra vez le pegaron. Vaya que este chaval no aprende. Joder! esta muy buena la historia, esperaré la continuación. Ojala esos jugadores se metan en muchos problemas.
ResponderBorrarSaludos
Giovanni
Nicoleeee!!!
ResponderBorrarSabes que me súper divierto con tus historias, pero... puede ser que te la agarraste con el pobre de Mario?!!! jejejejej Sé que él se buscó cada una de esas palmadas, pero...20 minutos recibiendo golpes con esa cosa de esparto?!!! buaaaa!!! Pobrecitoooo!!! jajaj
Espero pronto por más de tus lindas historias!!! Sí?!!
Camila
Pobre Mario! Dos zurras en menos de 24 horas, este niño no aprende nunca! jajajaja Me divierto mucho con tus jugadores, porfis actualiza pronto!
ResponderBorrarAdemas quiero saber mas sobre Marco, al pobre ya le gritaron :( jejejeje
Chu
Ave María pues! este Mario como que se las busca. Como es que en tan poco tiempo se lo hayan sonado dos veces jeje. Genial los capis de esta semana. Siempre te luces como siempre y me haces reír un montón con tus escritos. Eres una genio! Actualiza pronto por fa.
ResponderBorrarSaludos
Kevin el de siempre =P
precioso, pobre niñoooo, ha estado muy lindo tu relato, corto pero sustancial cmo diria mi abuelita, jajajajja
ResponderBorrarUn abrazo Nicole me alegra que sigas en el ruedo, y que nos hagas divertir con tus historias, a veces no puedo dejar nada proque el sistema deinternet esta un lio total, a veces no me avanza nada ono me publica nada un fiasco
Un besote guapa, sigue si? ycuando mi niño Torrez ya pienso que me lo discriminas, jajajajja
malvado, cruel, inhumano, injusto , in...in...in... bueno que le pasa a Joachim para lanzarle agua para despertarlo? y lo otro pues si se lo gano por bocon , gracioso como siempre Nicole ;)
ResponderBorrarGenial Nicole gracias por actualizar, siempre me divierto con tus historias, pero pobre Mario dos veces que se lo suena Low, bueno él tuvo la culpa por provocar al míster. Te quedo muy gracioso el capi, Yo estoy esperando que va a pasar, me dejas con ganas de la actualización y espero, que sea pronto y sin presiones. jajaja Casi se da cuenta la señorita de las condiciones del muchacho más vale que Low no lo permitió.
ResponderBorrarSaludos
Bastian.