NI ZARCILLOS, NI TATUAJES… ¿QUE TE PASA? Feliz cumple Carlita…

NI ZARCILLOS, NI TATUAJES… ¿QUE TE PASA?

Feliz cumple Carlita…

14 años en el futuro….

Leo: Siempre jodiéndome papá. Dijo haciendo un mal gesto retirándose.

Max: Leonardo Enriqueeee grrrrrr… regresa carajito es que piensas dejarme con la palabra en la boca. Y al parecer sip, porque los pasos se escuchaban alejándose cada vez más.

Leo: Psss… bla bla bla… Hacía el adolescente con la mano como si fuese marioneta, burlándose de su padre, claro, que sin que fuera visto por él. Que su padre tenía una santa paciencia con él pero que tampoco era para tanto.

Max: Leonardo Enrique Hoffman, abre la puerta. Dijo cuando llegó al cuarto de su hijo y la encontró con llave al girar la perilla.

Leo: NOO… no tengo nada que hablar contigo papá, hasta que me lleves a perforarme las orejas.

Max: Que te dije que nooo, eso no va a pasar ni en sueños muchachito.

Leo: Entonces para qué carajo voy abrir la puerta. Dijo lanzándose a la cama.

Max: Leonardo estás estirando demasiado la liga señorito, y esa puede abarcar la de tu calzoncillo. Amenazó Max, pero Leo solo rodó los ojos.

Max: Leonardo que abras la puerta caramba…

Leo: Dije que noooo. No entiendo porque no puedo a Dany si la dejaste.

Max: Tu hermana es niña, hijo es normal que usen zarcillos.

Leo: Mañana voy y me perforo las orejas y de paso me voy tatuar te guste o nooo.. esa es mi última palabra Max.

Max, se le volaron los tapones al escuchar que su hijo lo llamaba sin respeto alguno, que ese era su nombre pero ese mocoso era su hijo no un amigote. Así que se encaminó a su cuarto a buscar el juego de llaves del cuarto de Leo, que guardaba en su mesita de noche. Pero la sorpresa la tuvo él cuando por más que la busco no la encontró. Era que el pillo de Leo, las había tomado para un momento como este, sobre todo desde que tenía algunas revistillas picantes propias de la edad. Max, golpeó la mesita al darse cuenta que Leo iba un paso delante de él, y más cuando escuchaba reír a su hijo, y escuchar gritarle.

Leo: Se te perdieron las llaves Max jajaja.

Max, cerró los ojos buscando una calma interna, fue al estudio y busco la regla, se la metió en el bolsillo de atrás, y subió por la cornisa pasando del cuarto de su hija a la de Leo, el mocoso siempre tenía la ventana abierta así que Max, le fue fácil entrar por ahí sin ser visto. Leo tenía la oreja pegada a la puerta esperando que su padre regresara seguro a pegarle gritos y golpear su puerta pero ni de broma se la iba a abrir.

PLAS AUAUAU..papaaa. Giro sobándose la colita tras ese palmazo en su trasero que recibió fuerte.

Max: Aahh ahora si soy tu padre, hace segundos era Max al que amenazabas y le decías que solo te jodo porque no dejo que te perfores las orejas y no te dejo ponerte un tatuaje, y a quien le cierras la puerta en la cara, le dejas con la palabra en la boca y de paso no le obedeces cuando te dice que abras la puerta.

Leo: papaaaaaaaaa es muy peligroso lo que hiciste te pudiste romper el cuello. Sobándose el trasero e intentando abrir la puerta para salir corriendo, total siempre podía refugiarse en casa de alguno de sus primos que le dieran asilo uno días hasta que a su padre se le pasara el coraje y lo llamar rogando que volviera a casa como le había contado Javier que había hecho en con su papá dos semanas fuera de casa y su papá lloraba por la televisión que regresara que no lo castigaría por reprobar el curso pero que volviera a casa.

Max: Ni se te ocurra Leonardo Enrique Hoffman, que soy capaz de quitarme la correa y darte el castigo que has estado pidiendo toda la semana. Le dijo pescándolo por la orejita y arrastrándolo a la cama al tiempo que saca la regla de su bolsillo y se la enseñaba a su adorado hijito.

Leo: noooo papito la regla del abuelito noooo. Dijo tratando de sacar su teléfono para llamar a su hermanito, seguro que entre él y Bell convencían a su papá de salvarle el traserito.

Max: O si la regla si, estuvo buena la majadería que te has mandado señorito. Soy tu padre no un amigote, te he dejado pasar muchas cosas pero ya estuvo bueno, te di un dedo y te cogiste la mano entera. Suelta ese telefono YAAA… ¿A quien llamas?

Leo: Te voy a acusar a tu papá, para que a ti te pegue pero con la correa, le mintió.

Max: Me parece muy bien Leonardo, y para que tengas buenos motivos y evidencia en mi contra, te voy a dejar biiiiiiien marcada la regla en ese traserito malcriado que tienes. Se sentó en la cama y lo halo enfrente de él. Intentaba desabrocharle el pantalón que tenía puesto.

Leo:NO PAPAAAAAAAAAAAAAAa mi pantalón noo buaaa.

Max: Pantalón y calzoncillo también, hoy vas a aprender que a mi no me das un ultimátum, que es eso… Le dijo mientras lo colocaba sobre sus rodillas a pesar de que Leo pataleaba con todas sus fuerzas.

Leo: NO te voy a querer más nuncaaa papito… si estrenas al señora regla conmigo no te voy a querer papito.

Max: Segurito eso me va a doler horrores pero ante la sola idea de que el día de mañana puedas convertirte en un delincuente juvenil insufrible que pueda perderte igual o de peor forma, dañando tu futuro, pues me arriesgo.

Leo: me dijiste delincuenteeee yo no soy un delincuente buaaa.

Max, rodó los ojos su hijo quería torcer todo lo que decía… como él hizo tantas veces con su padre para salvarse de una buena tunda, así que respiro profundo porque no quería hacer lo que tenía que hacer, pero bueno a que padre podría gustarle castigar a su hijo.

PLACK, Soy tu papá Leo PLACK, Si te dijo NO es NO PLACK, Cuando seas mayor de edad podrás tomar algunas decisiones pero mientras tanto papá decide por ti PLACK, A papá no se le amenaza PLACK NO se le ignora, se obedece. PLACK Las cosas de mi mesita de noche no se toman sin permiso.

Leo: y toda la mierda de lo tuyo es mio en que quedo… Le dijo con rabia, pues se sentía muy culpable de haber tomado las copias de la llaves para que su papá no pudiera castigarlo…

Max soltó un momento la regla y le dio una tanda de diez fuertecitas sin parar. PLAS, PLAS, PLAS, PLAS, PLAS, PLAS, PLAS,PLAS, PLAS, PLAS Sin groserías Leonardo o es que no quieres sentarte por más tiempo.

Leo: no me importa total ya me rompiste mi potico.

Max: No exageres hijo, realmente no creo eso que no te importa. Todo lo mío es tuyo mi angelito esas llaves están en mi mesita por tu seguridad, imagina que te pase algo encerrado ahí, y yo no pueda entrar ¿huuum?. Las tomaste para escaparte de un castigo… ¿dime te sirvio de algo?

Leo: no pensé eso papito sniff solo pensé en que no quería palmadas.

Max: No pensaste.. pero si pensaste burlarte de mí desde tu cuarto encerrado, gritándome que harías y dejarías de hacer. Le hablo con algo de severidad pero era que el chico tenía días con esa actitud.

Leo: Claro si de aquí estaba seguro mi traserito.

Max: Ya veo campeón. Le dijo levantándole pero antes le quitó completo el pantalón. Y lo encaminó a una esquina de su cuarto. Leonardo te vas a quedar ahí 16 minutos pensando en tu comportamiento de todaaaaa la semana por no decir del mes entero. Y luego papá te va colocar de nuevo sobre las rodillas y te va a terminar de castigar, pero antes quiero oír una buena disculpa...y de esa dependerá el resto de la zurra.

Leo se hizo el valiente: No me importa total la regla ni duele. Mintió  

Max: Ahh pues entonces sera que debo aplicar algo más de fuerza entonces. Al rincón PLAS...Lo impulsó con una nalgada y Leo del tiro obedeció temeroso aunque no se lo demostraba a Max.

30 segundos se demoró Leo el terrible en volver a ser Leito malditas hormonas adolescentes.

Leo: Buaaa papito no te enojes conmigo buaa no lo decía en serio me dolió mucho buaaa no me castigues más.

Max, sonrió ese era su mocosito, y no el altanero ese que no le gustaba.

Max: ¿Vas a ir mañana a perforarte y tatuarte Leo? Dijo con cariño ya no molesto.

Leo: Me darás permiso papi.

Max: No Leonardo no tienes el permiso de papá, no aun.

Leo: entonces no iré papá. Dijo cruzando los dedos.

Max: Muy bien campeón, eso espero pero para que ni te la pienses. Le dijo colocándolo de nuevo sobre sus rodillas. Le descargo la regla en el bello traserito de su pequeño 16 veces, uno por cada añito que tenía. Leito lloro a moco suelto, juro por todos los santos que nunca se portaría mal.

Leo: Sniff para qué quiero un tatuaje si ya me tatuaste a la señora regla en mi culito. Lloro con pesar, nada ni nadie valía otra zurra como aquella.

Max: Y dejame decirte que hice un trabajo excelente peque. Le dijo con malicia y antes de que su pequeño se quejara. Le subió la ropa, y lo acuno con ternura, tocaba consentirlo muchisiiiiiimo, lo que más le encantaba a Max.

Leo: no me portare más mal, nunca más. Le dijo antes de dormirse. Max le beso la frente con cariño, por más que quería que esa afirmación fuera verdad sabía que no lo era. ¿Por que? pues por la sencilla razón de que ese carricito que tenía acunado en sus brazos era su hijo, nada más que hijo de MAXWELL ENRIQUE HOFFMAN ALIAS TERRI EL TERRIBLE ;P

FELIZ CUMPLE ATRASADO AMIGUITAAAA… ENTIÉNDASE CARLITA