Capítulo 3 “Llamando a los servicios infantiles”

Capítulo 3 “Llamando a los servicios infantiles”

CHRIS

Llegamos rápidamente a mi departamento y por suerte aún se encontraba despierta Penélope, quien al verme llegar con 3 niños se sorprendió y me miró con curiosidad.

Penélope: ¿señor?- no sabía como explicarlo en realidad, pero por el momento necesitaba mucho de su ayuda, por lo que debía encontrar las palabras correctas.

Chris: pen, necesito de tu ayuda, ellos son Jayden, Alice y Archie, ¿podrías mostrarles donde se encuentra el lavabo para que se den un baño caliente y le lavas su ropa por favor? Luego te lo explicaré todo lo prometo- Penélope ha estado conmigo desde que me independicé hace aproximadamente 20 años, por lo que la confianza existente entre nosotros es tremenda, incluso llegándola a considerar una madre para mi, sobre todo desde que mi padre había fallecido.

Penélope: no te preocupes cariño, niños vengan conmigo les pondré un baño de burbujas bien calentito para ustedes…- se fue con los niños y yo exhalé fuertemente, en que me había metido realmente.

No me reconocía, no entendía mis acciones desde hace más de dos horas; era como si mi cuerpo actuará por si solo sin llegarlo a pensar bien del todo.

Necesitaba hablar con alguien que me ayude pero no tenía muy claro de quien podría hacerlo, todo mi entorno me diría que era una locura lo que había y estoy haciendo, no le encontrarían la lógica… ¡ay, mamá, por que no estás aquí ahora!

Luego de analizarlo a profundidad decidí que mi mejor opción en esos momentos era llamar a Connor, mi hermano mayor, quien era una de las personas más parecida a mi madre de las que conocía y confiaba… no me podía decepcionar.

Tomé el móvil y a pesar de que ya eran las 10 de la noche coloqué marcar al número de mi hermano.

Llamada telefónica.

Connor: pero a quien debo agradecer esta sorpresa, hace siglos que no me marcas hermanito, ¿te encuentras bien?- con el pasar de los años la comunicación entre nosotros a pesar de que no cambio en su manera de ser y de nuestra relación, si que se había disminuido considerablemente.

Chris: pues es que yo esperaba tu llamada- siempre nos echábamos la culpa mutuamente de absolutamente todo- necesito tu ayuda Conn, o tus consejos o todo, ¿será posible que vengas a mi casa ahora? Sé que es inesperado y además es tardísimo, pero de verdad te necesito.

Connor: para eso están los hermanos mayores Chris, estaré en tu casa en 45 minutos ¿vale?- por eso era el mejor hermano mayor del mundo.

Chris: eres el mejor Conn, no le vayas a decir nada a papá ¿vale?- me tenía de asegurar de eso, si mi padre se enteraba de lo que estaba haciendo era capaz de presentarse ahora mismo en mi casa para gritarme lo equivocado que estaba y estaba segurísimo de que era capaz de correrme a mi junto a los niños de mi propia casa, lo mejor es que no supiera absolutamente nada.

Connor: ¡uy! Eso suena interesante, quizás me tarde menos en llegar, no te preocupes no le diré nada al viejo, sabes que no soy chismoso- eso era algo bueno, aunque igualmente se tardaría alrededor de 45 minutos en llegar, su casa estaba bastante lejos de la mía.

Chris: gracias…- le corté.

Fin de llamada.

Caminé hasta la cocina y me serví un gran vaso con agua súper fría… la necesitaba para espabilarme y calmarme un poco, aún faltaba que le contará a Penélope, aunque quizás esperaría a que llegara Connor y así no tenía que contar la historia dos veces.

Los 45 minutos pasaron volando, Penélope me había ayudado a cambiar a los niños y ahora ellos estaban completamente dormidos en mi cama que era del tamaño suficiente para que los 3 niños durmieran sin problemas juntos.

Connor llegó a tiempo y ya estábamos los tres sentados con un café en la mano y ellos dos esperando que yo comenzara a hablar.

Connor: me preocupas Chris, ¿en qué problema te metiste ahora?- como si yo no fuera capaz de salir de mis propios problemas solo, esto era algo más importante que ir una o dos veces a la cárcel por pelear en un bar.

Chris: no es un problema, bueno… esto ocurrió- conté absolutamente todo, desde que me levanté luego de mi súper siesta hasta que llegué a la casa de Kara y me trataron de asaltar.

Connor: ¿ósea que el crio te asaltó y tu lo trajiste a tu casa?- no lo decía de mala manera, solo que intentaba comprender todo lo que había ocurrido.

Chris: finalmente no logró quitarme nada, tiene 14 años, es un crio y solo lo hizo para poder alimentar a sus hermanos más pequeños…

Connor: ¿entonces trajiste más de un niño a tu casa?- que difícil es todo esto.

Chris: son tres, Jayden de 14, Archie de 9 y Alice de 6, Conn estaban en un callejón viviendo en unas cajas, no habían comido desde hace 2 días, no podía dejarles ahí, mamá no me lo hubiese perdonado jamás.- eso le caló fuerte a Connor, él sabía bien como era nuestra madre y sinceramente no creíamos que ahora que ya había muerto no fuese capaz de bajar un momento a gritarnos por cualquier error que cometiéramos.

Connor: hiciste bien hermanito, no te lo cuestiono, pero ahora hay que ir a lo serio, ¿Qué quieres hacer con ellos?- no lo había pensado, o más bien si que lo había pensado pero no quería decidir nada aún.

Chris: me creerán loco, pero siento que me encariñé con esos críos y no me veo con la capacidad de abandonarles, no me lo perdonaría, aunque sé que con mi historial no va a ser muy fácil ganar su tutela, además trabajo todo el día- en teoría debería trabajar todo el día- quiero quedarme con ellos, darles una mejor vida, cuidarles, pero no sé que tan posible es cumplir aquello.

Penélope: no es tan complicado cariño, el dinero lamentablemente maneja todo el mundo y tu y tu familia tienen mucho de eso, con un buen abogado podrás solucionar aquello y eso también lo tienes, además me tienes a mi, vivo contigo y puedo ayudarte en todo lo que necesites con respecto a los niños…- era un sol, sabía que recibiría una respuesta como esa de Penélope.

Connor: además tienes mi apoyo, si esos niños robaron tu corazón de alguna manera entonces ya les considero mis sobrinos, te ayudaré en todo lo que necesites enano, por eso soy tu hermano mayor- el tener el apoyo de parte de mi familia me relajaba bastante, era quizás todo lo que necesitaba para poder tomar la decisión correcta.

Chris: papá se volverá loco si se entera sobre esto…- ese era el único problema que quedaba para poder decidir, mi padre era un hueso duro de roer y esto definitivamente no le gustaría en lo absoluto.

Connor: tienes 39 años Christopher, la opinión de papá no tiene que influir en nada en tu decisión, puedes escucharle y no tomarle en cuenta y ya está, él seguirá siendo tu padre y si el elige bien podrá ser el abuelo de esos niños.- pensar en eso era un sueño, mi padre no era malo, pero no tenía buenos pensamientos o por lo menos no concuerdan con los de nosotros y los de muchas personas.

Penélope: de tu padre no debes preocuparte ahora cielo, debes verificar si eres apto para optar por la tutela de esos niños si es que eso deseas, ¿quieres hacerlo?- esa era una pregunta con una respuesta concreta que ya tenía en mi cabeza desde hace bastantes horas.

Chris: con todo el corazón…- sí que quería hacerlo, en parte por mi madre y por otra parte de verdad quería que esos niños tuvieran una buena vida, quería yo ser quien les diera esa buena vida.

Connor: pues nada más que decir hermanito, mañana vendré temprano con mi abogado, tú llama al tuyo, dicen que varias cabezas piensan mejor que solo una, así agilizamos el trabajo, ahora debes dormir y no te preocupes, mañana despertarás temprano pero no te asustes, es solo por que hoy no saliste de fiesta- maldito, él solo se carcajeó y se fue de mi casa despidiéndose de Penélope antes, siempre tratando de dejarme mal en algo.

Penélope: bueno cariño que descanses, yo me iré a dormir.- nos deseamos buenas noches mutuamente y ella se fue a su habitación y yo me lancé en el sofá de la sala.

Había más habitaciones, pero quería estar cerca por si alguno de los niños despertaba a mitad de la noche o para que no se asustaran si no me veían por la mañana.

No pude dormir… mi cabeza daba una y mil vueltas, nunca arrepintiéndome, si no que pensando en todo el trabajo que se me venía encima, ya tenía 39 años pero debía madurar un poco más ahora que tendría a mi cargo a 3 niños… dios, como se supone que es ser padre.

No tenía un buen ejemplo de parte de mi padre, no fue un mal padre, pero tampoco estaba muy presente que digamos, ni en fiestas de cumpleaños, navidades ni nada, el trabajo lo era todo para él. Tampoco se lo resiento, era cariñoso cuando estaba en casa y siempre nos compraba cosas, pero no me enseñó a como ser un padre en un futuro; a pesar de que siempre insistió que debía sentar cabeza y formar una familia, con que cara me decía aquello si él nunca estuvo para su familia, no presencialmente al menos.

Dieron las 1 de la madrugada y por fin pude cerrar los ojos y sucumbir ante los brazos de Morfeo, primera vez en mucho tiempo que me dormía tan temprano… o más bien que pasaba la noche en mi casa.

Eran alrededor de las 6 de la mañana cuando una carcajada me hizo abrir los ojos. Por suerte aún estaba oscuro, que si no la claridad de aquella sala en pleno día me habría dejado ciego.

Alice estaba frente a mi con los ojos hinchados y el cabello desordenado, pero con una gran sonrisa de oreja a oreja plantada en su rostro.

Alice: roncas…- dato curioso, no tenía idea de que roncara, nunca nadie me lo había dicho antes. Aunque bueno, nunca logró dormir con las chicas con las que me acuesto, solo acabo la velada y me retiro hasta mi casa nuevamente.

Chris: ¿a si? ¿Cuánto llevas ahí pequeñaja?- sabía relacionarme con niños, la mayoría de mis primos tienen hijos por lo que en alguna que otra cena familiar he tenido que cuidarles o jugar con alguno de ellos. No me molestaba en lo absoluto, los niños son geniales… o por lo menos lo son hasta cierta edad.

Alice: desperté hace un momento, Archie me dio un manotazo mientras dormía- hablaba muy fluidamente y eso me sorprendía, los niños de 6 años que conozco aún les cuesta ciertas palabras o se traban al hablar, ella no.

Chris: pues que mal, ¿quieres seguir durmiendo?- ¿cabía la posibilidad de que me digiera que si y podamos dormir aunque sea una hora más? Aún no me sentía del todo descansado.

Alice: no, ya no tengo sueño, tengo hambre- benditos niños y su energía interminable, aunque a decir verdad yo también tenía un poco de hambre, al parecer la hamburguesa de ayer se había vuelto nada durante la noche.

Chris: pues ahora iremos a desayunar tu y yo, ¿qué te parece?- ella asintió y se lanzó a mis brazos para que la llevara cargando- eres muy comodita tu ¿eh? Que tienes piernas enana, yo no soy tu vehículo personal.

Alice: eres mi corcel personal, ¿sii?- no pude negarme ante esos ojos llenos de emoción, por lo que la tomé y la subí a mis hombros para que tuviera un mejor paseo- ¡yay!

Llegamos a la cocina rápidamente y la dejé sentada en el taburete de la isla que había allí, no era asiduo de la cocina, por lo que me costó un poco averiguar en donde se encontraban guardadas las cosas.

Chris: ¿que te apetece hoy peque? Hay cereal y… cereal- demonios, aunque tampoco es que sepa cocinar mucho, y era muy temprano como para despertar a Penélope.

Alice: me gusta el cereal- esa niña era un sol, y ella era una de las mayores razones por la cual quería adoptarles, las otras dos grandes razones eran sus hermanos.

Chris: pues va en camino dos bowls de cereal con leche- serví los platos y me senté junto a ella a comer. Estaban deliciosos, otra cosa que no comía hacer mucho tiempo casi nunca desayunaba en mi día diario.

Alice: yummie- ninguno de los dos dijo nada en todo el desayuno, quizás estábamos tan hambrientos que no podíamos pensar en otra cosa que comer, aunque claro ella solo tenía 6 años, tampoco como que estuviera muy interesada en entablar una conversación con un señor como yo.

Chris: ¿te parece que después del desayuno te ponga una película en la habitación de video?- ella asintió emocionada- perfecto, yo tengo que reunirme con unos caballeros ahora por la mañana, pero cuando termine desayunaremos con tus hermanos y luego iremos de compras ¿vale?- terminamos de comer, la dejé con la película y me fui a mi despacho a enviarle un mensaje a Joshua, mi abogado, le medio expliqué la situación y él se comprometió en estar en mi casa a las 7:15 de la mañana. Connor ya me había mensajeado que venía en camino junto a su propio abogado.

Me cambié la ropa para estar un poco más presentable y esperé paciente a que todos llegaran al departamento.

Cuando ya nos encontrábamos todos comenzamos con la conversación que apremiaba.

Kenneth (abogado de Connor): Conn me explicó anoche lo que ocurría y me dediqué a recolectar la información necesaria con respecto a los niños. No hay mucho que decir la verdad, no tienen parientes vivos ni cercanos aparte de su difunta madre, por lo que la posibilidad de una adopción se hace más fácil.

Joshua: además para apurar el proceso y que te permitan quedarte con ellos mientras se realizan los trámites podemos acusar de negligente al orfanato a donde los llevaron en un principio al no haber dado aún el aviso de desaparición de los tres niños- eso me había enfurecido, los chicos llevaban 1 semana viviendo en aquel callejón y nadie aún les estaba buscando, que mal paridos.

Kenneth: eso es perfecto, hablaré ahora con servicios del niño y les presentaré el caso y les daré tus antecedentes que por suerte están limpios.- eso si era una sorpresa.

Joshua: eso es gracias a mi, que de no ser por mi diligencia este hombre estaría hasta el cuello de demandas y multas- me sentía avergonzado, los dos abogados y mi hermano se estaban burlando de mi a costa de mis malas decisiones en el pasado… aunque debo admitir que disfruté cada fiesta que llegó a terminar mal en esas ocasiones.

Chris: bueno, bueno, dejemos de atacarme ¿vale?- unas carcajadas más y luego todo volvió a tomar la seriedad de un principio- Kenneth ¿Cuándo tendrás una respuesta de si se pueden quedar conmigo o no?- él me observó, sacó su móvil, realizó una llamada que no duró más de 10 minutos y me contestó.

Kenneth: las investigación durará 2 semanas y luego tomarán una decisión, acordamos que los niños estarían más seguros contigo que enviándolos a otro orfanato, por lo que se pueden quedar contigo durante estas dos semanas- eso me aliviaba bastante, por lo menos los tendría cerca y me cercioraría que estuvieran bien- Joshua ¿puedes enviarle los datos completos de Christopher al mail que te enviaré a tu móvil?- esa era una ventaja de que nuestros abogados fueran amigos, podían perfectamente trabajar en equipo.

Joshua: sin problemas, estarán a más tardar a las 2 de la tarde enviados- hablamos unos minutos más y luego ambos abogados se fueron, solo Connor se quedó unos minutos más conmigo.

Penélope acababa de traernos un café por lo que nos sentamos en el sofá de mi estudio y comenzamos a charlar.

Chris: ¿como está Sarah? Tiene 6 meses de embarazo ¿no?- hace muy poco tiempo nos habían dado la noticia de que estaban a la espera de un bebe, el primer bebe de la familia.

Connor: está gigante, aunque si la ves no le vayas a decir algo parecido que la noche pasada me lanzó una lámpara cuando se lo insinué- mi hermano era un idiota, pero había que quererlo, no comprenderlo.

Chris: anotado, ¿ya tienen todo listo?- él iba a responderme pero justo en ese momento Alice se asomó por la puerta, quizás me había encontrado por el sonido de mi voz a través de la puerta.- hey peque ven aquí, ¿se acabó la película?- ella asintió acercándose lentamente hasta llegar a sentarse en mis piernas, pero en todo el proceso sin quitarle la mirada de encima a Connor- este es mi hermano Connor.

Connor: hey bebe, ¿Qué tal? ¿Cuál es el nombre de esta linda bebe?- mi hermano era un padrazo, estaba destinado a ser un buen padre a pesar de haber tenido el mismo ejemplo que yo. Su conexión con los niños era increíble, aunque quizás tenía que ver con el hecho de que él era un niño a veces.

Alice: mi nombre es Alice y no soy un bebe, soy una princesa- mi hermano no pudo ocultar la enorme carcajada que salió de su garganta, lo que hizo enojar a Alice, quien le miró con el ceño fruncido y se abrazó a mi.

Connor: no te enojes princesa, no me estaba burlando de ti.- hermano se levantó y se acercó a mi para poder hacerle cosquillas a Alice para que le perdonase; que ciertamente le resultó ya que la pequeña se sonrió y se lanzó a abrazarle.

Conn me miró con sus ojos muy abiertos, quizás sorprendido por la ternura que irradiaba Alice.

Chris: princesa, por que no vas y despiertas a los holgazanes de tus hermanos para que podamos desayunar todos juntos ¿vale?- no tuve que preguntarle nuevamente cuando Alice ya había salido corriendo en busca de sus hermanos.

Connor: puedo notar por que estás tomando la decisión de adoptarles, esa niña es una preciosidad.- le miré dándole la razón y sonreí como bobo pensando en los niños.- no puedo creer que hayan logrado cambiarte en solo una noche, es increíble, me alegro mucho por ti hermanito.

Chris: yo tampoco me lo creo, ¿te quedas a desayunar?

Connor: no me perdería un desayuno de Penélope jamás…

Ambos salimos de mi estudio en dirección a la cocina. Hoy les diría a los chicos sobre mis planes, por lo menos esperaba que estuvieran de acuerdo.