miércoles, 19 de junio de 2013

Evan el desertor Steve el traidor Sean el castigador

Capítulo veinticinco

Evan el desertor Steve el traidor Sean el castigador

Steve no lo podía creer, esta era la tercera vez se encontraba a Evan en casa de la K en hora de clases tercera vez.
“Evan otra de lo mismo” lo regaño.
“Tivi no te enfades” Steve sabía que se estaba haciendo la victima siempre lo hace.
“última vez, Evan o le diré a papá”
“tú no serías una rata, eres un tigre”
“no Evan” no siguieron con la discusión porque en realidad a quien le interesa discutir con su hermano cuando puede enrollarse con su novia.

Al día siguiente Steve estaba feliz de no encontrarse con Evan en casa de las gemelas, no porque no quisiera a su hermano ahí, de echo disfrutaba mucho que Ev saliera con su cuñadita, pero lo que no le gustaba era que su hermanito falta a clases sobretodo sabiendo lo que su papá pensaba de eso.
Pero le extraño que Evan no llegar después de clases, pero lo dejo pasar, porque mamá no estaba y papá estaba comenzado una nueva empresa en Londres, así que no iban a tener justificarlo, también estaba feliz porque había creído que le costaría soltar las riendas de las compañías en América pero no, Sean se veía cada vez más feliz pero para entretenerse se estaba metiendo en el negocio de la moda tomando las riendas de las compañías de Steve que era el únicas que Kirk no podía quitarles por que los dos seguían castigados.
Así que se fue directo a casa de las gemelas y no le gusto lo que encontró, su hermanito estaba en el sillón llorando a mares.
“Evancito que paso” dijo abrazándolo asustado, Evan no contestaba “tigrecito que paso. Alguien te hizo algo”
Evan negó y le mostro la nota que le habían enviado.
Steve la leyó era la típica que le habían enviado a él mil veces, así que hizo lo mismo hacía todo el tiempo simplemente firmó, nadie jamás notaria la diferencia, le seco las lágrimas y le calentó comida.
Evan se dejó mimar por su hermano cuando llego el papá los dos estaban ya acostaditos Evan dormido y Steve haciéndose le dormido para que Sean no lo regañara.
Sean los vio y sonrió adoraba a sus hijos, aún se castigaba por los errores cometidos con ambos no sabía con cual se equivocó más.

A la mañana siguiente Evan fue al colegio y entrego la nota, y al ver que no había pasado a mayores implicancias decidió que podía hacerlo cuando quisiera total Steve lo cubriría.
Steve por su parte pasaba todo el día haciendo NADA, o nada útil al menos, desde que dejo el colegio solo se dedicaba a divertirse. No salía a carretear como estaba acostumbrado porque ahora tenía aun ridículo toque de queda, pero salía todo el día antes que llegara a correr, volar, comprar ahora le sumaba estar entre las piernas la de su novia.
En la tarde Ev fue directo a la casa de las gemelas pasaron un buen rato todos juntos incluso cuando papá fue a buscarlos se quedaron a tomar once y se rieron un poco a costa de Sean porque parecía un alma en pena por la lejanía de Ángela, Steve le insistió que fuera a verla y aunque en un principio se resistió pero finalmente dejo a los chicos en manos de las hermanitas Paintbrush al fin y al cabo era algo que no podía impedir.
Al día siguiente Evan meditaba entre entrar a clases o faltar e irse a la playa con Made y luego de practicar la firma de papá problema resuelto, Sean se iba por tres días sí que firmo un justificativo indicando que Evan viajara esos días con su padre.
Todo para Evan fue maravilloso se fue a una cabaña con Made ambos sin decirle a nadie, Made solo le dijo a la Kathya que se iría unos días de vacaciones.
Steve estaba muy asustado porque el parcito no contestaba el teléfono pero eso era normal en Made quien acostumbraba a hacer eso decía que necesitaba espacio y se iba a la montaña, pero Evan no y menos no llegar a casa por dos días así que Steve desesperado llamo a su padre.
“papi” dijo asustado el pobre realmente estaba preocupado por su hermanito, si bien no le habían dicho que estaba a cargo del pequeño él se sentía a cargo de su hermanito.
“Steve cachorrito que pasa”
“papi papito”
“tigrecito que pasa” dijo Sean asustado.
“papi, papi lo siento papito”
“Steve hijito que pasa bebe, Stevecito estas bien” pero Steve no contestaba “bebito le paso algo a Evancito”
“papi lo siento papito perdí a Evan”
“Que” Sean se calmó un poco Evan estaba bastante grandecito para que su hermano pudiera perderlo.
“es que lo perdí ayer no llego a casa”
‘y me llamas ahora’ pensó Sean pero no era eso lo que necesitaba Steve.
“mi tigrecito no te preocupes, voy a casa tesorito”
“papi lo siento mucho”
“no mi tesoro no has hecho nada mi chiquito” le decía mientras buscaba en el paradero de su hijo menor a través del GPS del celular y lo encontró en la playa.
“cachorrito hermoso tranquilito, ya sé dónde está tu hermanito ya mi niñito ya te voy a llevar a casa a tu hermanito”
“papi, lo siento no debí perderlo”
“tigrecito mío no lo perdiste a Evan, Evancito se fue de pinta”
“¿Qué? ¿Dónde?” dijo Steve molesto.
“eso no importa, te llevo a tu hermano y lo matamos juntos”
“no papi, no te molestes con él”
“descansa hijito te amo mucho y no salgas de casa” le dijo antes de cortar.

Sean no comprendía porque del colegio no lo llamaron para avisar la inasistencia así que llamo al director, se sorprendió al enterarse que él le había firmado los justificativos, le pidió que se los mandaran por mail porque no se había dejado registro y le gustaba tener registro de los días que faltaba su hijo. La sorpresa fue tres de faltas justificadas por Ángela, cuatro por él, una de Steve porque él reconocería la firma que le plagiaba Steve, también había una de Evan que se parecía pero le faltaba práctica y definitivamente no tendrá oportunidad de aprenderla.
Llegue a la playita la misma a la que habíamos ido en familia, así que cuando divise a mi hijo grite.
“Evan Hyuga al auto en este instante” gruñí y Evancito trago en seco y se fue corriendo al auto pero lo más lejos mío porque sabía que el daría una buenas nalgadas “Madeleine te quedas o te vas”
“Sean me voy a casa pero en el auto” me dijo tímida.
“Nos vemos Made no salgas muy tardes y me llamas cuando llegues”
“Si papá” se rio.
“pórtate bien” le di un beso en la frente.
“no me mates a mi novio”
“no lo voy a matar pero a tu novio no le quedaran ganas de volverse a sentar” dije molesto, ella me hizo un puchero.
En la auto Evan no dijo nada cabeza gacha yo estaba demasiado molesto para decir nada, la suerte es que la payita quedaba solo a una hora casa, Evancito se durmió a los cinco minutos yo le revolví el cabello, yo tuve tiempo para meditar al llegar a casa mi Steve me abrió la puerta estaba asustado esperando por su hermanito.
“Evancito despierta” le dije mientras le llenaba la carita de besos.
“ya llegamos papi” me dijo adormilado mi tigrillo.
“Vamos papito hermoso” dije desabrochándole el cinturón del auto.
Evancito se metió rapidito a la casa y se abrazó a Steve.
“el papi está muy enojado”
ZAS Steve le dio una palmada muy fuerte a Evan
“no vuelvas a hacerme eso”
“Steve” grite junto a mi hijo.
“que creí que lo perdí y si después no lo vuelvo a ver” se quejó.
“eso no se hace” le dije dándole una palmadita en la mano.
“Niños están en muchos problemas” les dije, Evan que pretendida reclamar se quedó calladito.
“y yo porque, dijiste que no lo había perdido yo”
“no es por eso, es por esto” dije mostrándole mi celular con las notificaciones firmadas por él.
“Ups” me dijo mi crio.
“Si ups al rincón” le dijo serio.
“Evan por el cepillo”
“no papá” me dijo aterrado, pero esto era lejos lo peor que había hecho mi niño, tanto así que Ángela estaba dando las instrucciones a un remplazo para volver a casa, al verles las caritas de puchero a mis tigrillos entiendo porque no volvió enseguida definitivamente no quería el cepillo en el trasero de los chicos.
“uno” y como era de suponer Evancito salió corriendo batiendo todos los record de velocidad, me sorprende porque con él jamás tengo que llegar más allá del uno.
“papito no me pegues con el cepillo” me pidió con su perita tiritona y las lagrimitas de cocodrilo corriendo por sus mejillas mi Drama Queen chiquitito, como lo voy a castigar si ya está llorando, pero en eso siento el sollozo de mi otro dramaturgo y recuerdo el susto que vivimos al no saber dónde se había metido mi mocoso y si a Steve en otra época se lo habría aguantado pero estábamos mal y es de las cosas que sé que debo mejorar así que de tripas corazón le indique un punto del suelo, cuando se acercó.
“pantalones a bajo”
“nooooooooo buaaaaaaaaaaaa no quiero” Evan se descoloco por lo general soy yo el que se los bajo.
“Evancito tranquilito bebe”
“no quiero que me pegues buaaaaaaaa” ya sabía que no lograría ninguna cooperación con él, así que lo tome con cuidado y le baje el pantalón, fue fácil ya que andaba con buzo y lo deje sobre mi rodilla, Steve ya lloraba con hipo porque castigaría a su hermanito.
“No papi no le pegues” me dijo mi mocosito.
“Steve naricita al frente y calladito mientras estás en tiempo en la esquina”
“gruuuuuuu”
“a papá no se le gruñe tigrecito” pero no pude evitar sonreír amo a mis hijos.
Yo volví a mi penosa tarea de castigar a mis hijos, sin ni una palmada previa le baje el calzoncillo a mi niñito.
“Evan esto es solo por falsificar mi firma porque te daré unas nalgadas en las mañanas por cada día que faltaste y los días que te escapaste de casa una en la mañana y en la noche” debía cortar esas malas costumbres de raíz.
“NOoooooooooooo” gritaron los dos yo me arrepentí desde que lo dije pero es lo acordado con Angi, es más, ella llevara a cabo el castigo, pero eso no se lo diré a mis bebes creo que le temen más a las nalgadas de mi mujer que a las mías.
Pero falsificar la firma de papá es un gran no NO así que seguí el ejemplo de Ángela.
¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! Le di Cinco nalgadas en el mismo sitio luego cinco más ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! en el otro cachete ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! cinco más donde termina el poto y comienza la pierna repetí lo mismo ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! ¡ZAS! al otro lado luego volví a comenzar mi Evancito lloraba a moco tendido Steve parecía ser el que recibía le castigo.
“papi papito no más es mi culpa es mi culpa” me lloraba mis tigrecito mayor.
“no Steve, Evan es grande y sabe que falsificar la firma de papá es muy malo” dije tomando el cepillo le di 15 cepillazos creo que han sido los más fuertes que le he dado, mi cachorrito lloraba y lloraba no decía nada, cuando se calmó lo deje en la esquina con su potito al aire, sé que duele así que no intente subirse la ropa, tome a Steve, que fue otro cuento mi hijo no quería que yo me acercara, me miraba con rabia y sé que es por Evan y sobre todo que se siente culpable de haberme llamado y de haberle enseñado a falsificar mi firma de haberlo cubierto.
“no tenías que pegarle” me regaño.
“dijo el que lo recibió con una nalgada”
“estaba asuntado” se quejó.
“lo sé y te lo agradezco eres un gran hermano Steve Hyuga estoy orgulloso de ti”
“entonces no estoy en problemas” me dijo pícaro.
“eso ni pensarlo ya hemos pasado por esto y a mi caballerito parece entrarle por un oído y salirle por el otro”
“pero papá”
“pero papá nada vamos” le dije bajándole la ropa y dejándolo sobre mis piernas. Tome el cepillo y sin calentamiento previo le di el trasero.
¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! Le di tres cepillazos en un mismo punto antes de pasar a otro ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! y a otro ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK!
“nooooooo buaaaaaa papá me pegas muy fuerte” se quejó entre lágrimas mi niñito.
¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! le di en la parte donde el trasero y los muslos se juntan y ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK!.
“será porque mi hijo ya estaba advertido lo que pasaría si volvía hacer falsificarme le firma”
¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK!
“BUaaaaaaaaaa” lloraba y Evan lloraba a la par.
¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK!
“NOoooooooooo papito no le pegues más lo hizo por mí, papito lo hizo para protegerme”
¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK!
“tu hermano no necesita protección de sus padres” ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! “nosotros jamás deñaremos a ninguno de ustedes dos” ¡CRACK! ¡CRACK! ¡CRACK! y una mierda acaso le estaban acariciando el poto al crio pero no era a eso lo que me refería.
“BUaaaaaaaaaaa” lloraba Steve, deje el cepillo y consolé a mi hijo cuando se calmó un poco lo deje de cara a la pared nuevamente.
“Steve los días que castigue a Evan que correspondan a los que firmaste también te castigare a ti” sentencie.
Mis nenes lloraban no les gustaba estar así menos con los bóxer a la altura de los muslos y los pantalones a los tobillos.
No paso mucho tiempo en lo que llegó Angi, les subimos la ropita a nuestros niños y los metimos en nuestra cama Steve se abrazó a su madre poco a poco dejo su cabecita en el vientre de mi mujer mientras ella le hacía cariño mi niñito se durmió al igual que mi Evancito que hizo de mi estómago un nidito, tan grandotes y tan chiquitos a la vez, éramos felices sin importar el castigo vivido
Y si digo éramos porque la pesadilla acababa de comenzar
Steve despierta agitado llorando y gritando incoherencias al menos en un principio luego era alto y claro

“la olvide, la olvide por ti” le grito apuntando a Ángela “te odio me hiciste olvidar a mamá” no sé que quien iba dirigido ese te odio pero estoy seguro que era a mí, eso fue lo último en ver y escuchar de mi hijo porque salió huyendo despavorido mientras yo miraba sin reaccionar. 

3 comentarios:

  1. Wooooa se las llevó bien merecidas Evan (LittleHoshi)

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  2. Ohhhhhhhhhhhhh!!!! Lady, cómo lo dejas así??!!! Por fis, por fisss, tienes que actualizar lo más pronto, siii??!!!! Quiero saber qué pasa con mi Tigrecito adorado!!!!!! No me tengas en suspenso por mucho tiempo, por favoooor!!! ;-)

    Camila

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  3. Justo y bien merecido, bravo por Sean!!!! hay que felicitarlo, no sucumbio como antes y para cuando una actualizacion de los Hyuga? no me digas que van otra vez a la cola por que lo dejaste en la pesadilla viviente.

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