ESTA VEZ SERE YO Capitulo Cincuenta y dos

ESTA VEZ SERE YO Capitulo Cincuenta y dos

Gus se había levantado de la cama he ido al cuarto de sus padres para verificar que su hermanito estuviera bien, esa imagen en su mente cayendo en sus brazos lo superaba, luego ver a su padre hiperventilado lo angustiaba.

Mark: Gus hijito mío, qué ocurre, ven aquí con los papitos.

Gus: Solo quería ver que los dos estaban bien… bueno los cuatro porque mamá y seguro que el bebé adentro también se asustaron… no puedo dormir papi lo veo caer en mis brazos cada segundo Ish ish. Al decir eso último las lágrimas comenzaron a caer incesantemente.

Mark: van aquí mi príncipe, fue muy doloroso vivir eso, pero mi amor salvaste a tu hermanito. No vamos a dejar que unos delincuentes nos roben la poca paz que nos dejaron. Dijo conteniendo las lágrimas.

Gus: Hice lo que mamá y tú me enseñaron y funcionó. Dijo con una pequeña sonrisa de orgullo. Papaa sé que no debí decirle a Kyle que hicieran ellos el trabajo de vengarse, peroo no pude contenerme, el abuelo y tío Ed estaban muy molestos y yo tal vez fuí el más culpable, porque aunque no participe los inste.

Mark sabía que su hijo no podría dormir con esa culpa en el corazón así que decidió que debía ayudarlo, así que lo tomó con cuidado le bajo el pijama le dio cuatro fuertes nalgadas dos en cada nalguita, la última fue en la derecha y le quedó la mano marcadita.

Mark: La venganza nunca va a regir tu vida ni de los demás, y si el papá dice no, es no caramba.

Gus: Auauau AAAyy.. No más venganza papi, lo sientooo, lo que tú digas papiii pero no más, muy duroooo.

Mark: Ese es mi hijito maravilloso, ahora a la camita con los papás y el hermanito.

Gus: Con los hermanitos porque el que está en la pancita de mamá necesita saber que ya lo amamos, y segurito que si se entera que me castigaste como lo hiciste se enoja mucho contigo. Dijo colocando un bello puchero en su boca y unos ojitos manipuladores.

….

Mario y sus hijos llegaron tarde a casa cargados de bolsas y aunque en su mayoría eran cosas que iba a necesitar Chucho en su Academia de Arte, traían unos regalitos extras, para Samy, Dilia, ropita y peluches para los futuros gemelitos y un regalito para Matt. Apesar de entrar sigilosos a la casa fueron sorprendidos por Samuel quien venía de regreso de la cocina de dejar los vasos y el tarro sucio de helado, era una forma secreta de estar pendiente de que su hijo no había llegado con sus nietos.

Samuel: Ajaaaa al fin llegan ¿NO? Es que sencillamente no pueden hacer una llamadita de que llegaran después de la cena. Dijo cruzando los brazos levantando una ceja en tono amenazador, pero todo era una broma del abuelo.

Nando: Nonnito nos asustaste… te cuento Chuchito se nos cambia de colegio, te das cuenta mi hermanito por fin va a hacer feliz, así que fuimos a comprar todo para mañana… alguna queja nonnito al papá. Dijo cerrándole un ojo. Mira que nosotros tenemos permiso del papá y él es tu hijito, yo que tú me lo arreglo enseguida. Agregó conteniendo la risa ante la cara de indignación de su padre..

Samuel: La labor más importante de tu papá es hacer a mis nietecitos los chicos más felices del mundo, felicitaciones mi Chuchito en tu cuarto encontrarás una bata nueva con tu nombre bordado para que uses en la Academia. Le dijo abrazando a sus nietos y dándole un beso en sus cabecitas. Suban mientras yo arreglo cuentas con mi hijo a quien le enseñare que una llamada no dura ni un segundo pero que quita la angustia a un padre. Dijo mientras hacía una señal de azote y se reía cómplice con sus nietos…

Mario: papá papito me equivoqué tanto en mi vida, porque no cambié a mi príncipe antes viste lo feliz que esta, ves lo distinta que está su carita.

Samuel: Si el príncipe está que camina en las nubes, él está feliz y tu lo estas y por ende yo, hijo ahora no importa cuánto se tardó ni lamentarse no haberlo hecho antes, pues a lo mejor ahora era el momento. Lo que debemos hacer es disfrutar el momento y seguir adelante. Samuel abrazo a Mario, y le dio un beso en la mejilla, para luego colocarle la mano en la misma y hablarle mirándolo a los ojos.

Samuel: Cada día que pasa me haces sentir más orgulloso hijo.

Mario: cada sonrisa de mis hijos me hace que esa bruma negra que me envuelve se difumina y puedo comenzar a ver luz.

Samuel: Dentro de poco sentirás que nunca existió porque tus hijos son felices y todo se lo deben a su padre.

Matt: ¿Papi? Nos dejastes solitos. Dijo frotándose los ojos. Al parecer el pequeño Hoffman Boulton había despertado y tras no ver a su padre decidió buscarlo.

Samuel: Nunca mi príncipe, solo estaba mandando a tu hermano a la cama. Ya Mario es tarde a dormir.

Mario: pero papaaaa.

Samuel: Uno. Y salieron sus dos hijos corriendo.

Samuel: Vaya hay días más efectivos que otros jajaja.

….

Bea: ¿Mario por qué entras como si alguien viniera persiguiéndote? Dijo mirándolo divertida mientras se sobaba la barriguita.

Mario: tu suegro mi amor, escóndeme mi vida que me agarra. Dijo sonriendo y metiéndose bajo el vestido de Bea, hacía años que Mario no jugaba. Al rato salió de su escondite. Te amo Beatriz. Te prometo que voy a salir de esta, voy a ser el marido y padre que siempre debí ser.

Bea: jajaa Marioooo. Ya lo eres amor, ya lo eres…. te amo tanto, mi gordito. Y lo beso apasionadamente, lo que hizo que Mario la cargara para llevarla a la cama.

Francisco: Te juro que lo intento.

Ring Ring

Mark: Disculpa es mi esposa. Alooo, hola Sofi

Sofia: Maaark en el colegio no encuentran a Alirio, dicen que pidió permiso para ir al baño y no regresó más a clase, yo estoy en emergencia y no puedo ir al cole.

Mark: voy. Dijo cortando. Me tengo que ir.

Francisco: Te acompaño, Cristy se queda con los niños. Dijo tomándolo del brazo y salió con él. No sabía bien qué pasaba pero Mark no estaba en condiciones de manejar.

Mark: Necesito ir al colegio de los niños, han llamado a mi esposa para decirle que Alirio no aparece. ¡Pero cómo rayos se les pierde un alumno grrrrrrrr!

Francisco: Mark tiene que estar en alguna dependencia del colegio. Pero a la vez llamó al perfecto de la Policía para que comenzaran las búsquedas del pequeño, por si había dejado el colegio.

Mark llegó al colegio hecho una fiera aunque lo disimulaba muy bien, pidió conversar con el director del plantel, y con él estaba la profesora bastante nerviosa.

Mark: Por sus caras aun no aparece ¿cierto?. Le paso algo horas ¿antes? Mi hijo no pudo desaparecer así como así.

Profesora: nada que se nos haya informado, lo hemos buscado por todos lados las cámaras no muestran nada, no ha salido del colegio.

Mark: Bien.. y ¿que hacemos?.

Por los parlantes se llamaba a Alirio repetidamente, profesores y personal del cole estaban buscando al chico por todos lados, entre lo que lo buscaba incansablemente era Gus con sus compañeros de clase, y el clan Hoffman.

Mark: dónde está mi hijo. Se  quebró Mark en mil pedazos habían pasado más de dos horas sin noticias.

….

Alirio: humm grrr.. Grrr. El pobre chico se movía como una culebra, pero nada. Unos chicos de último año solo por maldad lo había interceptado saliendo del baño, le taparon la cara con un capuchón, lo amarraron, lo amordazaron y lo metieron en un locker. El pobre escuchaba que lo buscaban pero nada podía hacer, ya estaba agotado, había pateado, llorado, y demás ya estaba a punto de desmayo por el agotamiento y el calor de estar encerrado, los chicos inicialmente pensaron en dejarlo solo media hora pero tras ver el galeo y a todo el mundo buscando prefirieron hacerse los locos, para no ser descubiertos.

La policía hizo presencia y hasta perros trajeron, pidieron una prenda del niño, y Gus le dio el suéter del chico que estaba dentro de su mochila, y al ver que unos de los perro comenzó a correr el chico se pegó detrás, del perro y del agente.

Gustavo corrió más rápido, porque por la dirección que llevaba el perrito supo lo que pasó, con una fuerza que le dio la adrenalina abrió el casillero de donde escucho el sollozo de su hermanito, al abrir la puerta del locker Alí cayó encapuchado y desmayado a sus brazos.

Gus: PAPAAAA. El grito fue tan desgarrador que se escuchó por todo el colegio y Mark supo para donde correr. Gustavo le había sacado la capucha y vio que su hermanito no era capaz de abrir los ojitos. PAPAAA PAPAAAA VEN PAPITO. gritó partiéndole el corazón a los policías, mientras le daba los primeros auxilios tal como sus padres le habían enseñado.

Gus: 1,2,3 (aire) Vamos Aliiii… 1,2,3 (aire) hermanito please..

Alirio: Cof cof buaaaaa

Mark: Excelente hijo, ahora permite revisar a tu hermanito. Le dijo sentándose en el suelo, abrazándolo posesivamente, sacó de su bolsillo una linterna y comenzó a chequearlo sin dejar de darle besos en el ínterin con una calma que solo su profesión le brindaba

Mark: Ali sigue la luz campeón… eso es. Respira mi niño respira acá está papá. La enfermera del colegio le pasó un vaso de agua, la cual Mark se encargó de que bebiera pausadamente.

Gus: Ali, mi vida quien te hizo esto, mi hermanito bello dime quien fue porque va a pagar caro. Le exigió saber la verdad, él no permitiría que nada malo le pasara y castigaría a quien lo metió en ese maldito casillero. Gustavo Hoffman haría temblar el mismo infierno pero el vengaría a su hermano.

Mark: Gustavo Enrique deja de decir tonterías. Dijo serio el pensaba lo mismo pero no podía estar soltando amenazas delante de la gente, eso podía terminar mal.

Ali: No los vi ish ish Gus.. pero por la voz creo que fue Gianluigi ese compañero tuyo.

Gus: Los voy a reventar. Dijo parándose bruscamente. Para ir por ellos, pero fue detenido por Francisco quien sostenía a Ann. PLAFF PLAFF.

Francisco: tú no irás a ninguna parte, los abogados de la familia están a cargo de todo,  esto no se queda así pero se arregla por la vía legal.

Gus: Auuu grrrrrrr Y ¿tú por qué coño me golpeas?, no tienes ningún derecho me oíste ninguno tu no eres mi padre, no eres nada mio ve y golpea a tu hijo. Papaa me golpeó delante de la genteee grrrrr.. Se lo dire a mi tío Luis para que te demande.

Francisco: Basta. Le dijo firme. Ahora vamos por Ann y llevaremos a Alí a la clínica para que le hagan un chequeo. Francisco con sólo mirar a Mark comprendió lo destruido que estaba, y sabía que no podría sólo, él mismo lo vivió cuando su hijo estuvo interno y no podía estar con él, los periodos de desintoxicación  ver a su hijo en ese estado, él siempre tuvo a alguien que le impidió derrumbarse,  ahora era su turno. Abraza a tu papá. Dijo tomando a Alirio, en sus brazos. Mark arriba, vamos a la clínica.

Gus: Tú no me mandas. Murmuró con desprecio pero al ver a Mark entendió que su padre lo necesitaba, y su hermanito necesitaba atención, ya luego se vengaría.

Mark: Por favor Gustavo, no puedo lidiar con los dos, no ahora campeón no ahora, mi bebé pudo mo… Y se le cortó la voz no puedo terminar la frase.

Gus: no lo digas papá, eso no papá ni va a pasar. Dijo parándole del suelo.