domingo, 31 de diciembre de 2017

ESTA VEZ SERE YO Capitulo Cincuenta




ESTA VEZ SERE YO Capitulo Cincuenta

Matt: Mamitaaaa papaaaa me quiere pegar salvameeeeeeeeeeee. Dijo apenas llegó a la casa.
Sara: ¿Qué pasa pequeñito? ¿qué son esos gritos?.
Samuel: Vamos hijito cuéntale a mamá que hicieron los angelitos.
Matt: Mamita nosotros solo defendimos a mi sobrinito, y papá quiere darme una tunda que no podré sentarme en días, por eso, veeees es muy injusto deberían es premiarnos por lo que hicimos, dile mami por fa… no lo dejes, no lo dejes.
Sara: y que hicieron hijito. Los conocía bien a sus pitufos.
Matt: Mami ya te dije defender a Ali, porque al parecer ningún adulto quería hacer algo. Dijo con un tono un poco irrespetuoso.
Sara: Porque los conozco, y no me hables en ese tonito.
Matt: Lo siento, no hicimos nada del otro mundo mami solo rayamos el carro de ese estúpido, comparado con lo que le hicieron a Ali, la sacó barata.
Sara: ¿Que le hicieron a Alí?. Dijo alarmada que no sabía nada.
Matt: Papi, no le contaste a la mami Pues los dejo solo para que le cuentes con lujo de detalles yo voy a ponerme la pijama e ir a la camita, mira lo tarde que es. He iba dispuesto a salir corriendo.
Samuel: En 10 minutos en mi oficina Mathew.
Matt: Pero papiiiii. No hace falta no volveré a desobedecer nunca más te lo juro. Dijo con zapateo y demás.
Samuel: Te quedan 9.
Matt: Grrrr no se puede contigo mejor me voy de la casa en el albergue como que estaba mejor. Cuando terminó de decirlo se arrepintió no supo porque dijo aquello pero echo a correr a su cuarto.
A Samuel le dolió escuchar eso pero comprendía porque lo había dicho su hijo, así que respiró profundo para no saltarle al trasero y demostrarle lo mucho que lo amaba. Cuando estuvo listo fue al encuentro de su pequeño.
Samuel: Sabes eso el papá podría tomarlo como un intento de fuga. Le cerró un  ojo. Al momento que lo abrazaba con torpeza.
Matt: Yooo lo siento tanto papá no sé porque lo dije, yo jamás me fugaría de casa, no me regreses por favooooor, amo estar contigo con mi familia.
Samuel: hijo está es tu casa, y nunca vas a salir de aquí mi amor.
Matt: Me gusta escuchar eso, supongo que ahora recibiré doble castigo por lo que dije, y mi pobre colita quedará magulladita. Dijo mirando a su padre con esos ojitos manipuladores sin soltar el abrazo que tenía con Samuel.
Samuel: Ven aquí. Dijo tomando al pequeño con maestría única le bajó la ropa y lo dejó sobre sus rodillas.
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS.
Matt: Papiiiiiii nooooo sin ropa noooooo. Trato de meter las manos para taparse su traserito pero imposible. Mamaaaaaaaaaaaa…. Auxiliooooooo.
Samuel: ya no más mi principito bello de papá, nunca más tomar la justicia en su propia mano, así el papá no tiene que usar su mano.
Matt: Ouch.. nunca más, y si tengo que defender a un sobrino ¿qué hago? Preguntó mientras se subía la ropa.
Samuel: Hablas con el papá.
Matt: Y si como hoy no estas, a veces uno no puede esperar y mis hermanos no me manda. Dijo cruzando los brazos.
Samuel: Me llamas o a mamá, hijo tus hermanos han vivido más pueden ayudarte.
Matt torció los ojos en son de fastidio. Ya veremos. Se limitó a responder por decir algo.
Samuel: Portate bien hijito. Dijo alzando una ceja.
Matt: ¿Y ahora que hice? Ya veo mis hermanos mayores son los perfectos ¿nooo?
Samuel: JAJAJA ese es el mejor chiste de la historia, le revolvió el cabello.
Matt: Y entonces no dices que ellos pueden ayudarme porque han vivido más, el otro día me dijiste que les hiciera caso a Luis, por eso me porto mal tú me confundes papaaa.
Samuel: Porque ya la han cagado a lo grande y habrán aprendido algo no crees.
Matt: Realmente lo crees, Ed no se ve muy inteligente.. Y mamá siempre la escucho decir que Max nunca cambiara, Mario vive en la casa porque al parecer necesita a los papás cerca. ¿sigooo?
Samuel: Estás pisando la delgada línea del castigo.
Matt reto a Samuel con la mirada levanto hasta una ceja con cierta malicia, el chico de seguro tenia las hormonas de la pubertad alborotados o era suicida. Y se supone que eso debe significar algo. Murmuro finalmente.
Samuel: Que se están rifando reglazos y parece que te compraste todas las papeletas.
Matt: De seguro habrá quedado un numerito sin comprar y me quedo a mi papi. Dijo tragando grueso, con una vocecita de arrepentido, estaba tirando la goma y como que la había roto.
Samuel le sonrió con amor y le dijo mientras le revolvía el cabello. Tienes razón, segurito quedó algún numerito por ahí y mi principito se puede salvar.
Matt: Te amo mucho papiiiiii. Le dijo abrazándolo fuerte y respirando aliviado. ¿Crees que mis sobrinos la hayan sacado barata, Edy se veía muy molesto? Ahora cree que amo más a Luis que a él pero ya bastante difícil es parecerme a él, y superarlo. Dijo haciendo una mueca con el labio.
Samuel: Así que la sacaste barata, entonces tendré que remediarlo. Dijo sonriendo. Tu hermano es justo, igual que tu padre, también es listo, y sabe que a todos los quieres por igual.
Matt: Papiii noo. Dijo mimoso. Siempre quise hermanos, siempre me pregunte que se sentiría y si podría manejar el compartir el amor de mamá. Jamas jamas imagine que se puede sentir tan bien es una amor diferente, ya no podría vivir sin tenerlos en mi vida como a ti papi, no fue justo tantos años sin ustedes .Dijo poniendo un puchero.
Samuel: no lo fue mi niñito. Te amo tanto hijito, tanto que no existe una medida que lo pueda representar.
Matt: Entonces nunca me vas a castigar ¿verdad papi? Dijo con una sonrisa pícara.
Samuel: Jajaja, solo si no te vuelves a portar mal.
Matt: No puedo prometer imposibles, tu solo debes recordar que soy tu niñito.
Samuel: Ni yo, mi niñito
Matt: Hagamos un pacto… no mejor un contrato. Yo Mathew Enrique Hoffman Somarria-Boulton TRATARE de no portarme mal y tu Samuel Enrique Hoffman NUNCA azotare el traserito de tu niñito.
Samuel: mientras se porte bien el otro contratante.
Matt Psss a quien trato de engañar. Dijo rodando los ojos. Mejor me consientes antes de ir a la cama.
Samuel: siempre mi príncipe, ¿vamos a contarle a mamá lo que pasó? Luego a la camita con los papás.
Plas, plas, plas Auuuu pero mamiiiiiii. Chillo sobándose vigorosamente su colita nunca se imagino que Sara le soltara tres azotes después de ponerla al tanto.
Sara: ahora a la camita.
Matt: Si mami, pero no estés enojada con tu niñito por fis.
Sara: No estoy enojada con mi hijito maravilloso.
Matt: Entonces podemos hacer algo antes de ir a la camita, es no tengo sueño. Dijo haciéndole ojitos a Samuel, que parecía que hoy lo complacería en todo.
Samuel: claro pequeñito, ¿qué quieres hacer?
Matt: Ver una peli y comer torta con helado de tres sabores con sirope de choco y dulce de leche.
Sara: Elige la peli, con el papá buscamos los bocadillos.
Matt: Yeeeeees, mis papas son los mejores del mundo. Salió corriendo descalzo a la sala a buscar una peli, y como no se decidía trajo 4.
Sara: Como en los viejos tiempo, gracias a Dios por regalarnos esta nueva oportunidad. Dijo besando a Samuel.
Samuel: Así es amor, aunque me preocupa que no seamos tan jóvenes como antes, y este carricito puede que si nos manipule como desee precisamente porque es nuestro peque. Dijo sonriendo feliz
Sara: Por lo mismo ya no somos tan inexpertos.
Matt: Mamaaa Papaaa apurenseeeee. Gritaba colocando la peli.
Samuel/Sara: Vamos.
Matt: Jooo que tardones. Uyyy eso se ve rico mamiiiiiiiii. Le brillaron los ojitos a Matt cuando vio el super postre que traía su mamá para compartir los tres.
Samuel: Que divertido se ve esto.  
Matt se sentó en medio de sus padres en la cama, los miro feliz por unos segundos para luego colocarse un poco triste.
Samuel: ¿Que paso… por que esa carita?
Matt: Es que recordé a mi mamita, y creo que ser tan feliz sin ella me hace sentir un poquito mal hace rato recrimine que esta debió ser mi vida de siempre, y no fue justo ese pensamiento para ella, soy un mal hijo solo pensando en mí.
Samuel: Eso jamás mi vida, tu mamita siempre está en tus recuerdos, acompañándote, hijito, daría todo por haberlos conocido antes y haber podido compartir nuestras vidas, tu mamita tiene que estar muy feliz que tu familia se haya hecho más grande y puedas convivir con el papá la mamá, los hermanos, cuñis, sobrinos y sobrinas.
Matt: Peque cada vez que preguntaba por ti me decía que solo ella bastaba, que su amor era taaan grande que cumplía por mamá y papá, y le creí ...pero me dejo y aunque aún sentía su amor en el aire no bastó buaaa. Dijo soltándose a llorar.
Sara: Cuando tu mamita se fue al cielo, nos buscaste, porque en ese momento dejó de ser suficiente, y tu mamita desde ahí te guio hasta nosotros, así que no hay que sentirse triste, solo darle las infinitas gracias como lo hacemos siempre por traernos a nuestro lado.
Matt: ish ish pues al inicio no debo haber entendido bien las instrucciones porque tarde un poquito en llegar. Dijo tratando de ser gracioso colocando un puchero.
Sara le sonrió, es que tú sabes las numeraciones de las casas son de locos. Dijo acariciándole el puchero.
Matt: Si de locos, de paso los números no se me dan nada bien. Dijo sonriendo también para luego lanzarse a abrazarlo a los dos con fuerza, parecía que nunca se cansaría de hacerlo.
Samuel: Uyy pero que abrazos tan ricos, nuestro peque está de un cariñoso que me encanta.

Sara puso la película y regalonearon viendo pelis y comiendo ricos hasta que uno a uno fue cayendo a los brazos de Morfeo.

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