sábado, 19 de abril de 2014

700.000 razones por las que no debo fumar!!!!



700.000 razones por las que no debo fumar!!!!



-Ooohh, amigo... estamos muertoss!! Y no me mires así, que tú me ayudaste!! Estamos juntos en esto, y a ti te sale mejor la mirada de cachorro que a mí; así que, amigo Nerón, venga esa pata y a dar la cara a papá ahora que venga a "hablar"!! 
El animalito emitió un quejido y le lamió la mano a su compañero de travesuras. -No seas así, no me puedes dejar solito... sabes que papá me.... bueno, tú sabes qué hará... Y yo no quiero...!! -Nicolás se quedó acariciando a su perrito mientras recordaba los acontecimientos, que lo habían llevado a estar ahora en su cuarto esperando a que papá viniera, para ajustar cuentas... con su trasero!!
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Tan sólo dos días antes....
Roberto y Nico estaban en medio de la sala, teniendo una calurosa "conversación" sobre los peligros del tabaco para la salud del muchacho.
-....y escúchame bien, jovencito... la próxima vez que vuelva a descubrirte fumando, estarás en serios problemas!!!- Dijo un furioso Roberto, sujetando con algo más de fuerza el bracito de su hijo, Nicolás.
Había sido una advertencia a no tomar a la ligera. Aquella fue la primera vez que le habían sorprendido con un cigarro, y diciendo una mentira había conseguido que papá sólo le diera un señor sermón y unas cuantas palmadas. Pero él había seguido con la manía de fumar... y ahora le habían descubierto. Y eso no era nada bueno. No, señor!!  
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Hoy, más temprano en la tarde...
-Qué es esto?!!- Murmuró Roberto, apenas ingresó a la casa. Al parecer, el señor tenía el olfato más desarrollado que un can, porque apenas entró a la casa, percibió el particular olorcito a cigarrillo y olfateó por toda la casa hasta que dio con una colilla -NICOLAAAAAAASSSS!!!!
-Sí, señor!! Ya voy!! - Gritó Nico, desde otra habitación. Le había escuchado llegar  y corrió al baño a lavarse los dientes y a comer pasta dental para que no le delatara su aliento a tabaco. Pero a pesar de sus esfuerzos, una colilla estaba en el piso y ahora en manos de papá fue todo lo que bastó para que papá pusiera el grito en el cielo.
-Qué pasa, papito?!!!
-Explícame esto!!! - Dijo mostrando a su hijo la colilla del cigarro - pero ya!!
-Ehhhh, papiii.... yo.... qu-qué es eso, papito?!
-Qué pasa, Nicolás?!! Se te olvidó cómo hablar, eeh?? Has estado fumando?! Creo que fui muy claro cuando dije lo que pasaría si seguías haciendo eso!! 
-Pero yo no fumé, papá. Te lo juro.... de veras!!!... Eso no es mío!!!
-Nicolás Bustamante!! Aquí estás sólo tú!! Qué me vas a decir?!! Qué a la colilla le salieron patas y se vino caminando hasta la sala?!!  A ver, si tú no has sido, entonces quien?!
-No sé, papi... tal vez fue mi mami!!- Se defendía como podía. Grrrr... Encima eran ellos tres nada más en casa!! A quién echarle la culpa?!!!...
-Mira Nico...  en cuanto vuelva, voy a revisar ese cuarto tuyo, y espero no encontrarme con nada que no apruebe. Así que si tiene algo que decir o entregar, hazlo ahora!!! Yo no me voy a tardar, y tu madre ya viene.... 
Pero el muchacho se limitó a relamerse los labios que, de los nervios, los sentía más secos que un desierto.
-Nada que decir?! Bien. Entonces vete a tu cuarto y no salgas de allí; yo me voy en cuanto tu madre regrese, y pobre de ti si yo encuentro algo entre tus cosas. 
Nico corrió a su habitación, con su fiel amiguito, Nerón, a su lado, y ambos se encerraron a planear una estrategia.
-Qué hago, Nerón?!! Papá fijo me mata donde encuentre esto - Decía mientras le enseñaba una caja nueva de cigarrillos al perrito, que lo miraba atento a cada movimiento - Oh, amigo! Vamos, ayúdame a pensar en una salida... uhmm, si lo tiro a la basura?!.... Noo!! Eso no funcionaría. Papá va a revisar allí también. Ya sabes cómo es cuando hace inspección en la casa... o mejor dicho, en mi cuarto!! Ay amigo, qué hago?!!!
-GuaU!!!!- Ladró el cachorro y a Nicolás se le iluminó el rostro de felicidad, acababa de salvar su pellejo.
-Eso es!!! Nerón, amigo eres un geniooooo!! Toma. Ve y entiérralo!!.... Claro, papá jamás va a buscar en el jardín. Anda, amigo, ve y escóndelo - Su perro tenía una obsesión por enterrar todo cuanto agarrara y Nico aprovechó esa oportunidad para deshacerse de la dichosa cajita.  
El perrito salió corriendo en dirección al patio, y no decepcionó a Nico, fue y enterró la evidencia del crimen... eh... digo, la caja de cigarros en el jardín, junto a las florecitas que la mamá de Nicolás tanto amaba.
Sólo había un pequeñísimo detalle que no tomaron en cuenta: el clima. Sí, señoras y señores... y señoritas, el clima!!! Y es que había estado lloviendo a cántaro, y al enterrar la prueba de su falta, el perro se llenó hasta las pulgas de barro, lo mismo que hizo al entrar a la casa y subir las escaleras, entrar al cuarto de Nico y brincar en su cama. 
Y para males, mamá había salido al jardín a ver cómo la lluvia había dejado a sus amadas plantas y vio al perro en actitud "sospechosa" por lo que fue a investigar.
-Nerón?!- Llamó al cachorrito, que era casi tan travieso como su hijo. Y el perro, como si supiera que hacia una travesura, corrió hacia el cuarto de su amo, dejando aún más extrañada a la mujer, que decidió ir a ver qué había enterrado el perro, temiendo que fuera alguno de sus adornos de porcelana. 
Pero vaya sorpresa se llevó!!!!
-Y esto?!!! Ay, Nicolás!!! Ahora sí que no te defiendo, mococito!!!- Mamá siguió el rastro de lodo del perrito y esto la llevó a confirmar lo que ya sabía. Nerón estaba con su hijo y esté lo felicitaba por la gran hazaña.  
-Muy bien - Pensó mamá- lo dejaré que disfrute unos momentos de su pequeña "victoria"... pero ya verá en cuanto llegue Roberto!- Y se fue a llamar a su marido para contarle lo que había pasado. Total que era su único hijo y sabía que si su marido se enteraba cuando llegara, seguro lo mataba al chico, así que quiso darle tiempo para que se calmara un poquito por lo menos.
-Ya lo imaginaba, Cariño... si hasta encontré una colilla en la sala... nooo, no te preocupes que no lo mataré- Añadió con una sonrisa.- Pero te aseguro que la charla que planeo tener con él, le dejará muy clarito cuán peligroso resulta el tabaco para la salud... de su trasero.
-Ay, Roberto! Qué vamos a hacer si nuestro hijo ya es un adicto al cigarrillo?! 
-No, amor... no creo que llegue a tanto... pero si es así, lo apoyaremos!!
-Eso espero! Bueno, mi vida, te debo colgar.... Gracias a Nerón tengo toda la casa llena de lodo -Suspiró-  No te tardes, por favor!!
-Estaré ahí en 20 minutos más!! Nos vemos!!- Roberto colgó el teléfono y se quedó hojeando unos reportes en su oficina, sin poder quitarse de la mente el problema de su niño.
Sonia empezó a limpiar el piso, pero luego de un momento se detuvo y pensó que esa era una tarea para su hijo ya que fue él el de la idea de mandar al perro al jardín, así que se puso a preparar la cena. 
Pero como el tiempo corre más aprisa cuando estamos en problemas -o muy ocupados- Roberto llegó mucho antes de lo que había dicho. Saludó a su esposa con un beso y subió como una tromba a la habitación del nene.
-Nicolás! Última oportunidad. Algo que decirme o entregarme, hijo?! Por favor, la verdad es lo único que te pido!!
Nicolás miraba con ojos ensanchados a su padre. Sí claro, la verdad!! Esa verdad que seguro lo metería en más problemas de los que ya estaba!! Já, seguro!!! -Uhm... papi ..... yo.... (Mirada al piso) ...no tengo nada que decirte ni darte. Puedes buscar por todo el cuarto... es más, por toda la casa si quieres - Dijo, pero en ningún momento se atrevió a mirar a los ojos a Roberto, que ahora mismo  lucía en su rostro una expresión de enojo y decepción. Su hijo acababa de mentirle a la cara.  
-Muy bien, Nicolás. Ya que estás tan seguro de que no encontraré nada, voy a empezar a buscar.... A ver.... dijiste por toda la casa, cierto? Bien, empecemos por el patio; es parte de la casa, vamos. 
-Qué?!!!!- Eso no se lo esperaba- Al patio?!! Pero... pero... está lloviendo!!
-Estaba, hijo! estaba lloviendo… y en todo caso, tenemos botas y sombrillas. Así que vamos, levántate que me vas a ayudar... y que Nerón venga también.
-Espeeeeera.... papito.... no, por favor!!! 
-Uhmm, qué pasa, Nicolás?! Ahora qué?! No tengo tu tiempo...  habla de una vez que tenemos mucho por revisar....- Roberto hablaba con poca paciencia ya y eso se notaba en su voz y en los gestos de su cuerpo. 
-Pero papáaaaaaa.... te estoy diciendo que no fumooo.... no puedes confiar en mí?!
-La verdad, Nicolás, me duele decirlo pero NO. Me has demostrado que no se puede confiar en ti  y sabes perfectamente de lo que hablo... así que, me dices la verdad ahora mismo, que igual la voy a descubrir. Así que es tú decisión.   
-Perdón...- Susurró el muchacho, fijando sus ojitos por unos segundos en los de su padre.
-Perdón por qué será, Nico?! -Suspiró-  Mira hijo, te voy a dar diez minutos para que pienses qué es lo correcto, luego de eso atente a las consecuencias. Voy a hablar con tu madre, no sales de aquí, Nicolas, me has escuchado?! Diez minutos!! Piensa bien en lo que vas a hacer, hijo, por favor! 
Roberto salió de la habitación y bajó a la cocina donde encontró a su esposa, preparando los alimentos. -Te ha dicho algo, amor?!!! -Preguntó Sofi, sin dejar de revolver la cacerola.
-No, nada. Y la verdad preferí darle algo de tiempo, porque te juro que me dan ganas de..... Bueno, espero que tu hijo sepa pensar bien lo que me dirá... Además, me preocupa ver que se atreva a mentirme en mi propia cara ¿qué le pasa? él no es así - Dijo cansado, enojado y preocupado Roberto.
-No sé qué le sucede, cielo. Lo que sí sé es que no le voy a tolerar que empiece con esas porquerías! 
-Ni yo!! Porque, si le permitimos eso, luego qué sigue?!... alcohol?!! droga?! No!! Esto se acaba hoy!! Y no te preocupes, cariño, que esto lo solucionaremos en familia!!- Afirmó, abrazándose fuerte a Sofía- Bueno, sus diez minutos se han acabado... Voy a ver a nuestro hijo... Dónde dejaste la caja, amor?!
-Aquí está - Respondió, dándole el paquetito a su esposo. 
-Okeeeey... deséame suerte! Voy a tratar con el niño!- Dicho esto, se dirigió a las escaleras y a la habitación de su único hijo.
Sin siquiera tocar, entró y se encontró con su niño, acostado en la cama, boca abajo, conversando con su perrito. -Nicolás? Se acabó el tiempo, hijo. Algo que decir?- 
Nico se puso de pie frente a su padre. Tenía los nervios mordiéndole el estómago... Ay, lo que daría por un cigarrito para aliviar el estrés- Pensaba. -Yo.... papá, no sé cómo decirte... lo siento mucho, papi...
-Puedes empezar contándome cómo terminó ésta caja en el jardín de tu madre!- Dijo Roberto, sacando la caja de uno de los bolsillos del pantalón.
La carita de Nicolás palideció notablemente y Nerón simplemente optó por meterse bajo la cama, considerando ese un lugar más seguro por el momento -Pa...papito....  papi. yo... yo..
-Tú... tú me mentiste, jovencito... y me desobedeciste!!
-Papito, perdón!! Es que me asusté, papi!! Entiende!! Es que... es que... ay papá!! Es que no le veo nada de malo a fumar. Todos lo hacen y tú haces un escándalo por esto!! -Respondió, elevando la voz y cruzándose de brazos. Odiaba que su padre se pusiera tan estricto! Después de todo, él ya no era un niñito!!
-Es que no te das cuenta acaso?! Es peligroso para ti... Fumar puede causarte problemas en los pulmones, niño....- Gritaba y bufaba su padre, caminando de un lado al otro por la habitación del chico, tal como si fuera un león impaciente en su jaula.
-Ay, papá! Qué exagerado eres! Tu amigo y tu socio fuman... o no, don Roberto?! Acaso no es cierto?! - Dijo Nicolás, tratando de defender su punto.
-Me importa un rábano quien fume! A mí quien me importa, eres tú!! Y no voy a permitirte que te arruines así tu futuro... tu salud!
-Tú no me entiendes - Se sentó en la cama y se cruzo de brazo en un claro gesto de "no me importa lo que digas".
-No hijo, tienes razón, NO ENTIENDO!!! No entiendo cómo mierd@...- Sí. Cuando Roberto se enojaba, no medía las palabras que usaba- ...te puede importar tan poco tu salud, Nicolás. Quieres acabar con un cáncer acaso?!
-NO! Pero... pero es que...  Papá,  qué haces?? Papi... noo!!! Te juro que no lo hago más!!! - Roberto se había empezado a quitar la faja para horror de Nicolás. 
-Más te vale que no, hijo. Por el bien de tus pulmones y de tu cerebro, pero por sobre todo... por el bienestar de tu trasero, espero que no lo vuelvas a hacer! Ahora, bájate los pantalones y los calzoncillos. Y Nerón, sal del cuarto! Vamos, afuera!! - Dijo, sacando al perro de la habitación - y tú, Nicolás, qué esperas?! una invitación por escrito?! Haz lo que te ordeno!! 
-Noooooooo.... no papiiii... No puedes!!! Soy grande ya!! -Se quejaba, escondiendo su colita lo mejor que podía, en el colchón.
Pero Roberto lo tomó de un brazo y lo hizo levantar de la cama -Ahora verás cómo sí puedo!! Y qué grande ni que nada... obedezca, le digo!! 
-ZASS!!!... -Aterrizó un solitario cinturonazo en el muslo del crío. 
-Aaaahhh!!! Noooo!!! Papáaaaa!! Duelee snif por... por favor, papi!!! 
-No, hijo! Estabas bien advertido! Ahora, joven, asuma las consecuencias!!
-Pero papito... mira, ahora sí que no lo vuelvo a hacer! Además, fue Nerón quien enterró la caja de cigarros, papá, no fui yo!! De veras! Y yo ni la había abierto... 
-Y de dónde ha sacado el cachorro la caja, eh?!! No pretenderás decirme que los cigarros eran del perro!!
-Pues nooo - Decía mientras se sobaba el fajazo que le había dado su papá -  Nerón no fuma papá, es un perro!! 
-Entonces, déjate de pavadas, Nico. Si he de repetírtelo, mañana en la mañana repasaremos tooooda la lección con el cepillo!!!
-NOOOO papi!! Nooo, por favor! Ya voy.... ya voy!! Sólo... - Y empezó a llorar apenas hizo el intento de desprenderse el pantalón - Pa- papá perdón!! Es que ya no sé cómo dejarlo...me entran ganas de fumar, y no puedo evitarlo! No lo hago a propósito, papá, de veras!! 
-Shhh... lo sé, hijito. Es muy difícil dejarlo. Pero si tú tenías un problema con eso, debiste acudir a mamá o a mí.
-Siií, papá. Es sólo que tenía vergüenza de decirles! Yo lo siento, papá.
-Y yo más, mi niño... porque no debiste ocultárnoslo. Somos tus padres y te amamos, mi bebé.
-Lo sé, papá...Uhmm, papito?! No podemos olvidarnos del castigo y dejarlo en un "no lo vuelvas a hacer"? Por favor?!!!- Suplicó con la miradita más tierna que era capaz.
-No bebé! Ven aquí- Respondió Roberto sentándose en la cama de su hijo y acomodándolo sobre sus piernas.
Nicolás sintió sus lagrimas volver a correr prófugas de sus ojos mientras él se limitaba a esperar que el castigo comenzará. 
Pacientemente, Roberto le bajó los pantalones junto con los boxers negros que traía, dejándolos a medio muslo. Nico temblaba del miedo y del estrés y su padre, odiándose por causarle tanto sufrimiento a su hijo, le dedicó unos momentos a acariciarle la espalda hasta que los temblores disminuyeron., Luego procedió a tomar el cinto con la mano derecha.  -Que sea la última vez, NICOLÁS BUSTAMANTE, que me entero que andas fumando!!!
-Sssí, sí, señor- Dijo Nicolás, apenas conteniendo inútilmente su llanto-
ZASS!!! ZASS!!! ZASS!!  ZASS!!! ZASS!!! ZASS!! -Su padre levantó el brazo y lo dejó caer varias veces contra las nalgas desnudas de su niño.
-Buaaaaaaaaaaaaa.... ayayayayayayayyaaa... Yaaaaaaa... Auuuuuuughhhh.... noooo!!! Duele, duele mu... muchoooooo!!!!
-Me mentiste, desobedeciste, te pusiste en riesgo la salud por ese cochino vicio... aah! y no olvidemos el usar a Nerón para intentar engañarme!!! ZASS!!! ZASS!!!  ZASS!!! ZASS!!! ZASS!!   ZASS!!! ZASS!!! ZASS!!    ZASS!!  No quiero saber que ni siquiera te acercas a un cigarro... 
Nicolás se movía inquietamente intentando liberarse de la prensa que lo tenía firme contra el cuerpo de su papá. El brazo de Roberto descendía pesadamente y sin descanso, haciendo estragos en el trasero de su niño. Y cuando el cinto golpeaba más de una vez la misma zona, los gritos se hacían más fuertes y desgarradores.
-Auauauauauuuu....paaapii... papitooo... yaaa!!!!... Por favor!!! Perdón!! Perdón no lo hago nunca más!!! Aaaahh!!! Aayayaya!!!
-ZASS!!! ZASS!!! ZASS!!! ZASS!!!...porque si llego a sentirte tan sólo el olor a humo, éstas palmadas ZASS!!! ZASS!!! ZASS!!! te van a parecer caricias comparada con la zurra que te daré...ZASS!!! ZASS!!! 
-Noooo!!! Buuaaaa!!! Papitooo!!! Aaahh... ayayayaa!! Maaamáaaaa!! Ayudaaa!!! Papiii... no lo hago más, perdón!! Nunca más!! Buuaaaaa!!!
Roberto añadió cuatro golpetazos más y arrojó el cinturón lo más lejos que pudo. Con mucho cuidado, empezó a consolar a su niño, acariciándole la espalda para que se calmara.
-Ya, hijo!! Shhhh... ya!! Tranquilo! Se terminó y papá está seguro que ésta será la última. Verdad que sí, mi niño?! Eres un muchacho inteligente y con nuestra ayuda nunca volverás a hacerlo... sshh ya, mi hijito. Ya se terminó  
-Buuuuaaaaaaaaa... papiiiito, me duele m-muchooo!!!- Lloriqueaba a moco tendido.
-Lo sé, Nicolás. Pero tú te lo buscaste!! Pero ya pasará, hijo!! Ven, descansa!! - Dijo, dándole un besito en la frente a su hijo- Y Nicolás, dile a Nerón que está castigado sin postre por ser tu cómplice!!! 
-Noo, papito, ya me pegaste a mí... no le puedes perdonar a él?!- Preguntó Nico, poniendo un puchero en su boquita.
-No, hijo. Así aprenderás tú también a no usar a Nerón para hacer travesuras... será sólo por hoy!! -Le respondió con  seriedad.
-Perdón!!... Sigues enojado conmigo, papá?!
Roberto suspiró- No hijo! No estoy enojado, estoy preocupado pero lo vamos a solucionar! No te preocupes por eso, Nicolás. Hiciste algo malo y fuiste castigado y perdonado…Así que empezamos de cero.
-Okey, papito... Te quiero mucho!- Dijo el chico, apoyando la cabecita sobre el hombro de su padre.
-Y yo te amo mucho, mi niño! Vamos, duerme un poco... Yo te llamaré para la cena.- Lo ayudó a acostarse en la cama, boca abajo, y le subió la ropa. 
-Está bien... papi?! Puedes dejar entrar a Nerón?!! Tengo que ofrecerle una disculpa...
-Claro mi niño - Dijo, y abrió la puerta para que el perrito pasara; esté no se había movido de la entrada durante todo ese tiempo, y no esperó otra invitación y corrió hasta donde su amo, su amigo, y le empezó a mostrar cariño.
-Nerón, papá nos castigó a los dos sin postre!! Lo siento, amigo! Te prometo que no te vuelvo a meter en problemas!- Le decía. Roberto los miraba desde la entrada, muy divertido.
Ese par le derretía el corazón a Roberto. Era tan lindo verles juntos!! El perrito le dedicó una mirada de "te dije que no lo hicieras, pero te perdono" a Nicolás y una a Roberto, de ”es enserio?!! No tendré galletitas hoy?!"
Roberto sólo sonrió. -Pórtense bien, niños! En un rato más estará la cena!!!- Y les cerró la puerta. Se fue donde su esposa y le abrazó. Necesitaba tanto saber que ella le comprendía y que entendía que si reprendía al chico era porque quería que no errara el camino y también debía contarle lo que pasaba con Nico, para que ambos le ayudaran.  
Al rato, los niños de la casa bajaron a paso lento, Nerón sin separarse de Nico. -Mami, papi... yo les quería decir algo- Dijo titubeante.
-Claro, hijo. Te escuchamos- Dijo su madre, con voz cariñosa y comprensiva. 
-Siento mucho haberles mentido... Yo sé que no está bien lo que hice, pero no puedo evitarlo... ya no sé cómo dejarlo!- Terminó hablando en un susurro, antes que las lágrimas le volvieran a ganar.
-Oh, mi vida!! Tranquilo, mi hijito. Te vamos a ayudar, mi chiquito lindo - Decía la mujer, al tiempo que avanzaba hacia él y lo abrazaba 
-Sí, hijo. Calma tu conciencia... ya has sido castigado y perdonado; lo demás, lo resolvemos los tres juntos! Confía en nosotros, Nico. -Le afirmó su padre.
Nicolás, al fin suspiró más aliviado y se dejó mimar por sus padres... Sabía que todo estaría bien ya... mamá y papá se encargarían de todo lo demás. Así que sólo restaba recibir mimos y abrazos, de los cuales también Nerón reclamó su parte…… Total que en la familia no eran tres... sino cuatro!!!!




Éste es un pequeño obsequio de nuestra parte, para celebrar las 700 mil visitas del blog!!! Muchísimas felicidades, Lady…. Y a todo@s!!! Que siga el éxito por siempre!!! :D

10 comentarios:

  1. Les quedo genial nenas
    Me rei bastante con el comentario de el perrito pobre se quedo sin galletitas
    Yo por eso tambien estoi encontra de el cigarro

    Estrella

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  2. Uuuuyyyy pobre Nico... la que se llevoooo.... excelente historia chicas... felicitaciones...

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  3. Fumar es uno de los peores hábitos, wacala el olor que te deja y sin mencionar todos los problemas de salud q puede ocasionarte, bien por su papá que le quiere cortar el vicio, chicas muy buena historia porque dentro de todo también hubo humor :D

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  4. Ya decía mi yo que el cigarrillo es peligroso, sobretodo porque te deja sin postre!!! jajajaja...muy buen relato chicas, con el humor, el drama y la perfección que sólo ustedes saben poner.

    Pd. Espero que Nico se robe algunas galletas y se las de a Neron a escondidas, jooo que se las merece!!!

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  5. Auchh! Pobre Nico ahora si le fue mal aunque se lo tenia merecido por que ese vicio es feo ^.^ y luego pobre Nerón se quedo sin postre jeje
    Les quedo genial chicas
    Saludos

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  6. Holaa Chicas que lindo que gustara la historia yo también detesto el cigarro es un vició tan molesto >_<
    jeje y si pobre nerón también termino castigado sin postre.
    Doy a Ariane las gracias por escribir conmigo me divierto mucho al hacerlo

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  7. ANdreita yAriane........ castigado sin postre el pobre Neroono no se vale y por culpa del mocoso travieso, pero claro si era su complice, la larga mano dela justicia hizo su trabajo investigativo yahi esta, ahi esta el ejemplo, no se perdona ni a los complices de tan tamaña treta jajajaja
    me diverti muchisimo......... y casi muero de risa con eso de Neron no fuma papá que descubrimiento jajajajjaja

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  8. OH pobrecito de Nico como lo castigo y culpa de Nico por su travesura ,tambien Nerón esta castigado sin postre pobrebrecitos.Lo son unos traviesos cachorros=D!!!

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  9. Amo a Nicolas... gracias por seguir escribiendo de él

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