Que es un
año nuevo sin pólvora
5...4...3...2...1
¡¡Feliz año nuevo!! -Todos comenzarona abrazarse y desearse un próspero año,
bailaron un rato hasta que a Camilo se le ocurrió la idea de comenzar a lanzar
cohetes.
-Papá
puedes darme algo que no sean chispitas mariposa -Al muchacho le parecía
patético a sus 13 años no le pudieran dar al menos un volcán.
-Camilo
antes te doy algo… la pólvora es ilegal en este país -Le recordó su papá.
-Ahh pero
tío, cuando éramos más pequeños nos daban hasta cohetes y nunca nos quemamos
-Recordó Andrés.
-Y
estuvimos muy mal… la pólvora es peligrosa y simplemente no les vamos a dar
nada de esto a ustedes. -Dijo la tía Gloria alejando la caja de los chicos.
-Bueno pero
yo no entiendo porqué ustedes si pueden usarla si está prohibida en todo el
país -Dijo Thomas logrando que ninguno supiera que responderle.
-Thom
tienes razón, el otro año no vamos ni a comprar chispitas mariposas, las
tenemos guardadas desde hace tiempo y sus papás y yo SI sabemos utilizarlas.
Camilo algo
aburrido de que no lo dejaran coger ni un cohetito pequeño lanzó las chispitas
mariposas que tenía en la mano contra un árbol.
-Primo
tranquilo…. tómate esta cerveza y cuando los tíos se distraigan cogemos unos
cohetes, los lanzamos y nadie se da cuenta. -Camilo asintió, destapó la cerveza
y tomó un sorbo.
-Tienes
razón Miguel… ellos no se darán cuenta, solo hay que esperar un rato, Thomas ve
y busca un encendedor. -Mandó a su primo menor.
-Bueno
pues… pero me das un sorbito -Dijo el niño señalando la cerveza.
-jajajaja
tienes como 10 años… que te pasa -Camilo comenzó a reírse y Thomas se resignó a
ir por el encendedor.
Luego de
media hora, como los chicos habían previsto todos los adultos se distrajeron y
tomaron solo 3 cohetes pequeños de la caja.
-Yo primero
por faa -Gritó Ángela.
-Dale pues
pero cógelo con cuidado -La niña lo lanzó perfectamente y Thomas al verla
exigió ser el segundo, su hermana melliza no podía ser mejor que él.
-Pido el
siguiente -Gritó el niño rapándole el cohete a Miguel.
-Ahggg está
bien -Dijo Camilo algo molesto porque sería culpa de los niños que él no
pudiera lanzar uno de los cohetes.
Thomas
tambíen lo lanzó sin contratiempos y ambos niños se fueron felices a la casa a
tomar gaseosa.
-Yo quiero
lanzar el último -Dijo Andrés.
-Noo fue mi
idea, yo también quiero -Dijo Camilo.
-MMM
ninguno de los dos lo hará porque lo tengo yo -Y en ese momento Miguel prendió
el cohete, pero antes de lanzarlo Camilo y Andrés se tiraron encima de él a
tratar de quitarselo sin darse cuenta que ya estaba prendido.
Para suerte
de los tres Miguel lo alcanzó a lanzar antes de que explotara en las manos de
todos, pero una chispa le cayó a Camilo en el brazo.
-AUUUU -El
chico sintió su piel freír.
-¿Estás
bien? -Andrés trató de cogerle al brazo a Camilo para ver si era muy grave.
-¿Por qué
gritan? -Se les acercó Gustavo preocupado por el grito de Camilo.
-Por nada
-Dijo Camilo tratando de no llorar, le dolía mucho el brazo.
-Deja ver
-Gustavo se dio cuenta de que algo le había pasado en el brazo a Camilo por las
miradas de culpabilidad de sus hijos y que el chico escondiera el brazo tras su
espalda.
-Se pusieron
a lanzar cohetes ¿verdad? -Afirmó molesto el papá de Camilo al ver que su
cuñado miraba preocupado el brazo de su hijo.
-Disculpa
tío -Dijo Andrés.
-Es el
colmo… si se les dice que no cogen los cohetes ninguno de ustedes los coge,
después están ahí llorando porque se quemaron pues -Gustavo comenzó a levantar
la voz, odiaba que sus hijos lo desobedecieran.
-Pero yo no
estoy llorando tío -Se defendió Camilo antes de que su padre interviniera.
-Tu estás
castigado… no vas a ir a ninguna fiesta este fin de semana por no seguir una
simple norma y ya mismo nos vamos al hospital. -Dijo el señor Herrera antes de
empujar a Camilo hacia el carro.
-Y de esta
a ustedes nadie los salva -Dijo Gustavo señalando su cinturón. Si bien a Camilo
sus padres nunca le habían dado una nalgada, la historia de sus primos era muy
diferente.
Camilo
terminó de pasar la primera madrugada del año en urgencias esperando a que
atendieran su quemadura y sus primos terminaron durmiendo boca abajo por no
obedecer la simple instrucción de no coger la pólvora.
Feliz 2016, espero sea un año próspero, alegre y en
familia para tod@s ustedes.
Thror
Pobre los primos!!!! Camilo gozaba de esa suerte, jejeje!
ResponderBorrarYo apoyo a Gustavo con la polvora no se juega
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