jueves, 7 de abril de 2016

Cambio de vida... Nueva familia - CAPITULO 1 –



N/A  Hola a todos yo soy nueva por aquí les quiero decir que me encanta este blog lo descubrí hace algunas semanas y no hay día en que no lea alguna historia me encantan, quiero felicitar a todos sus escritores sus historias son geniales. Esta es el primer fic que escribo acepto comentarios, criticas tanto de lo bueno como de lo malo, cualquier consejo que me quieran dar para mejorar será bien recibido. Así que espero que les guste y la disfruten.   

     

                                Cambio de vida... Nueva familia 

                                         - CAPITULO 1 – 


                                        La historia de mi vida 
                                 

¿Como puede cambiar la vida de alguien tan abruptamente? De un día para otro colocando tu mundo de cabeza. Siempre fui considerado como un chico con suerte, pero  empecé a dudarlo desde hace tres semanas. Mi nombre es Liam tengo 16 años, y les contare como mi vida dio un giro extraordinario, cambiando completamente la forma en la que vivía, pensaba y actuaba. Con algunas tragedias en el camino por desgracia.

Todo comenzó cuando me entere que el hombre con el que había estado viviendo los 16 años de mi vida. No era mi verdadero padre, el me había criado, educado, vestido y muchas otras cosas que hacia que se mereciera ser llamado padre. No se porque el decidió confesarme aquello de tan gran magnitud en los peores momentos de mi vida. Semanas después del fallecimiento de mi madre. Solo tres semanas después. La muerte de mi madre ha sido lo peor que me ha pasado en la vida, ha sido el peor dolor que jamás podría haber sentido, todo por culpa de un inconsciente que iba conduciendo borracho se comió la luz roja impactando contra el coche de mi madre. El golpe fue tan fuerte que ella falleció en el acto. Dejando al culpable de aquel trágico accidente bastante herido. Aunque dos semanas después se recupero muy bien. A veces me preguntaba porque la vida era tan injusta de llevarse a mi madre siendo una buena persona y dejando con vida a aquel infeliz. Pero no tenía la respuesta a eso y sinceramente creo que nunca la tendré. Es en vano esforzarse en dar respuesta a algo en el cual no tenemos control como lo es la muerte. 

Cuando mi padre me contó la verdadera historia de mi vida, no me lo podía creer, pensé que debía ser una broma. ¿Como puede ser que la persona con la que he vivido, con la que he reído, llorado, pasado tan buenos momentos y llamado papá, me diga que no es mi padre? Que no es mi padre biológico. Eso no entraba en mi cabeza. ¿Como podría ser aquello posible? Pero lamentablemente me demostró que era cierto haciéndonos una prueba de ADN, ya que no le creía. Recuerdo esa tarde perfectamente, yacía en aquella clínica esperando ansiosamente los resultados, esperando que todo fuera una confusión, deseando ver que en aquel papel reflejara que ese señor era mi verdadero padre. Pero no fue así, negativa, daba la compatibilidad entre nosotros. No había alelos compatibles.  No éramos familia al menos no genéticamente. 

Ese día al llegar a casa sentía una ira indescriptible estaba molesto con el mundo por haberse llevado a mi madre. Estaba molesto con mi padre por haberme ocultado eso tantos años. Quería despertar de esa pesadilla, no podía creer que todo esto me estuviera pasando de un día para otro pero no fue así, eso no era un sueño, era real. Si  solo hace un mes era un chico normal, que sus únicas preocupaciones eran salir a divertirse con sus amigos, y no parecer un completo idiota cada vez que le hablaba a la chica que me gustaba. Pero ya eso no me importaba. En mi mente solo estaba mi madre y las mentiras de mi padre, en estos momentos no podría permitirme estar enojado con mi mamá por haberme ocultado aquello y nunca habérmelo dicho, simplemente no podía odiarla, era mi madre era mi todo, mi fuerza y mi fortaleza. 

Mi padre ese día me dejo solo un par de horas en mi cuarto con el resultado de la prueba de ADN en mis manos. Esas horas estuve reflexionando un montón de cosas sobre quien era yo, sobre quien era realmente aquel hombre que había estado llamando papá. Asimilando que mi madre ya no estaría mas nunca conmigo. Que debía ser fuerte por ella. Debía salir adelante. Pensando en como iba a sobreponerme a todo eso. Estaba sobrecargado de información, sobrecargado de dolor, mucho dolor y sufrimiento, pero no era un dolor físico que podría pasarse en unos cuantos días, no, aquel era un dolor interno que no sabia exactamente cuanto iba a durar.

Toc toc toc. Escuche que papá tocaba a mi puerta.

- Pasa.

- Hijo tenemos que hablar. Tengo que decirte algo muy importante -dijo mi padre. Sentándose en mi cama. Por el tono que empleo sabia que era serio lo que iba a decirme.

- ¿De que quieres hablar conmigo? Acaso vienes a decirme que me valla de tu casa, me vienes a correr ya que no soy tu HIJO -le dije con mi peor tono de enfado que podría haber empleado en mi vida. Tenia mucha rabia contra el en esos momentos.

- No hijo. Jamás podría correrte, y si. Eres mi hijo. No biológicamente, pero en mi corazón eres y siempre serás mi hijo. Te amo. Que no te quede duda de ello –me dijo acercándose a mí para abrazarme. Pero no lo deje.

No conteste a eso. Tenía ganas de llorar. Quería golpearlo por haberme mentido. Quería salir corriendo de aquella casa donde todo me recordaba a mi madre. O tal vez lo único que quería era que me abrazara y consolara, y me dijera que todo iba a estar bien que siempre contaría con el, que el iba ser mi apoyo.  Si a lo mejor era lo último lo que realmente quería y necesitaba.

- Hijo lo que te voy a decir realmente va ser muy duro para ti, como lo fue enterarte que yo no era tu verdadero padre. No sabes cuanto me duele a mí decirte esto, pero ya no puedo seguir ocultándotelo, necesitas saberlo.

- Habla -le dije fastidiado.

- Hijo -soltó un suspiro-. Hace dos meses me diagnosticaron cáncer terminal en los riñones, lamentablemente cuando lo detectaron era muy tarde ya. El cáncer estaba muy avanzado. Los doctores no podían hacer nada -dijo mi padre haciendo un gran esfuerzo por no llorar, aunque se le empezaron a salir las lágrimas cuando dijo la siguiente parte-: Me dieron tres meses de vida solamente.

En ese momento cuando escuche decir a mi padre que le dieron solo tres meses de vida, mi mundo se vino abajo más de lo de ya estaba. No podía perder a la única persona que me quedaba. A la única persona que realmente le importaba. No aguante más, y rompí en llanto, no podía creer aquellas ultimas palabras que me había dicho. Lo abracé como antes no había abrazado a alguien. Al ver su rostro sabía que todo eso era cierto, aunque me negara a aceptarlo.

- Papito. No. Por favor no me dejes –le suplique entre lágrimas, apenas entendible.

- Liamsito, que más no quisiera yo que quedarme muchísimos años más a tu lado, Pero hay cosas que la vida te pone en tu camino y no puedes hacer  nada contra eso. Y  mi enfermedad es una de ellas. -dijo mi padre sobandome la espalda e intentándome calmarme un poco. No quería soltar aquel abrazo.

- ¿Papá porque me lo dices ahora? -le pregunte entre lágrimas separándome un poco de el-. ¿Mi madre lo sabia? 

Tenía tantas preguntas en mi cabeza en ese momento.

- Si hijo. Tu madre lo sabía. Y si no te habíamos dicho nada era para evitarte ese terrible dolor, esa terrible espera de los tres meses, no me parecía justo. Queríamos que disfrutaras tu vida y cuando llegara el momento se te diría.

- ¡No papá! Tu no te puedes morir. Mi mamá ya me dejo, por favor no lo hagas tu también. Debe de poder hacerse algo con tantos avances médicos. Tienes que ir a ver a otros doctores papá. Te lo ruego por favor no me dejes -le dije un poco mas calmado.

- Hijito eso no es algo en lo que yo pueda tener alguna decisión. Ya he visitado a cinco doctores y todos me han dicho lo mismo, el cáncer ya esta muy avanzado no se puede hacer nada contra el.

No pude seguir conteniendo mis lágrimas y empecé a llorar nuevamente. No podía creer todo esto. Tenia que desahogarme de alguna manera, liberar toda esa tensión que había estado acumulando desde hacia semanas.

- Liam tranquilo. Vas a estar bien -dijo mi padre abrazándome nuevamente.

- Papá sin ti… ¿Que voy a hacer con mi vida? -le pregunte entre sollozos-. ¿Me voy a ir a vivir a un orfanato? Eres la única familia que tengo.

Pensar en esa idea me aterraba. Después de vivir tantos años sintiéndome el chico mas afortunado del planeta por tener a los mejores papas del mundo. Ahora me encontraba solo. Devastado. Faltaba muy poco para terminar de perder a la única persona que realmente me quería. Mi madre al igual que mi padre fueron hijos únicos así que no tenia tíos a quien a acudir. Los abuelos por parte de mi mama estaban muertos. Solo tenía a la abuela por parte de papá pero estaba en una clínica psiquiátrica ya que tiene esquizofrenia. El abuelo había muerto hace muchos años.

- No hijo. Tú vas a salir adelante. Vas a terminar tus estudios de preparatoria e iras a la universidad. Tú óyeme bien Liam. Vas a salir adelante sin nosotros. Tienes que ser fuerte. Hemos criado a un gran chico que sabrá sobreponerse a todo esto. Se que lo harás hijo. Confió en ti.

Ya va ¿Qué? no podría creer lo que mi papá me estaba diciendo “salir adelante” pero ¿Como? Sin ellos a mi lado era imposible. Tendría que irme a un orfanato. Siendo menor de edad no podía trabajar, al menos no sin un permiso de mis padres, Y mantenerme yo mismo.

Habiendo coordinado ya mis ideas le respondí:

- Papá ¿Como  voy a poder hacer eso? Si cuando tú no estés me enviaran a un orfanato. Estando allí no voy a poder hacer nada -le dije derrotado.

- Nadie ha dicho que te enviaran a un orfanato. Y te aseguro que tu jamás vas a ir para ese lugar -dijo mi padre tomando una bocanada de aire para expresar lo siguiente-: Tu te iras a vivir con tu padre biológico.

- ¡QUE! - exclamé pegando un grito-. No eso jamás. Ni siquiera lo conozco.
 
- Lo entiendo Liam pero no tienes mas opciones. Es tu padre biológico o el orfanato.

Dios mío no me lo podía creer que todo eso me estuviera pasando. Me quería morir.

- ¿Lo conoces? -le pregunte un poco curioso-. Ya sabes a mi padre biológico.

- Si Liam. Se quien es y donde vive. Es una buena persona. Date la oportunidad de conocerlo.

¿Darme la oportunidad de conocerlo? Por dios si ellos me lo ocultaron toda mi vida. Nunca le dijeron a mi padre biológico que había tenido un hijo. Mi mama nunca se lo dijo. El porque de aquello me pareció un tanto ridículo, claro yo no soy nadie para cuestionar sus decisiones, pero no estaba de acuerdo siendo yo el primer involucrado. La cuestión es que mi verdadero padre estuvo con mi mama solo para divertirse un rato. Pasar la noche y ya. Mi mama por así decirlo era su amante en ese entonces. El ya tenía su mujer inclusive tenia un hijo casi recién nacido. Esa era una de las cosas que me hubiera gustado preguntarle a mi madre, ¿Porque se involucro con un hombre casado? Mi padre ya me lo había dicho, ella estaba locamente enamorada de el y se dejo llevar por la calentura. No tenia muy claro lo que había pasado con ellos a pesar de que mi papa me lo había contado, bueno medio contado; todavía tenia que oír la otra parte de la historia, oir a la otra cara de la moneda que en este caso era mi padre biológico. Claro jamás pensó que iba a quedar embarazada de aquel hombre. Ellos solo salieron dos meses. Mi mamá al enterarse que yo venia en camino, por el bien de ella y el de la familia de mi verdadero padre, decidió alejarse de el. Ocultándole que esperaba un hijo suyo. ¿Por que mi mama decidió hacer eso? Gran pregunta. La familia de aquel hombre tenia mucho dinero eran de clase alta. Mi madre sabia que ellos jamás la iban aceptar,  y por consiguiente a su hijo igual. Así que lo mejor era alejarse y que el siguiera con su vida, con aquella mujer con la que tenia un hijo, ya que ella si era de su misma clase social. 

Solo dos años después de haber nacido. Mama conoció a mi padre a esa persona que siempre me acompaño en las buenas y en las malas, y en estos momentos estaba sentado junto a mi diciéndome que tenia una sentencia de vida. A ese hombre le debo todo. Se encargo de mí no siendo yo su verdadero hijo. Me cuido y me crío. Para mí el es mi verdadero padre. No existe otro.

- Liam hijo, me encuentro muy mal. La muerte de tu madre fue un golpe muy duro para mí. Es muy probable que en los próximos días caiga en cama, me siento muy débil. Sin fuerza. Por...

- Papá tranquilo yo voy a estar a tu lado cuidándote -le interrumpí.

- Lo se hijo. Por eso mañana mismo vamos a ir a que conozcas a tu padre biológico. Lo último que quiero es morir y dejarte a la deriva.

Sentía tantas emociones a la vez. Seguía procesando todo lo que me había dicho. Lo único que pude decir fue:

- Tengo miedo papá.

- Lo se hijo. Es normal. Pero no te preocupes que todo va a estar bien. 

Mi padre aquella noche me abrazo muy fuerte, llore como nunca había llorado en mi vida. Incluso más que con la muerte de mi madre. Ese día se nos hizo casi la media noche conversando de como cambiaría mi vida, de como seria a partir del momento en que conociera a mi padre biológico. Se venia algo que me daba miedo enfrentar, además  no sabia como hacerlo. ¿Estaba preparado para el drástico cambio que se avecinaba a mi vida? ¿Me iría a vivir con una familia prácticamente de un día para otro, sin conocerla? ¿Ellos me aceptarían en que formara parte de su hogar? Esa eran algunas de mis tantas inquietudes que tenía en mi cabeza aquella noche antes de quedarme dormido.

4 comentarios:

  1. Kate96 primero que Nada bienvenida.... muy buena la historia, bien escrita e interesante. Espero que la continues xq se ve prometedora :)

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    1. Hola chany gracias por leer que bueno que te haya gustado, el tercer capi ya va en camino.

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  2. Kate96 primero que Nada bienvenida.... muy buena la historia, bien escrita e interesante. Espero que la continues xq se ve prometedora :)

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  3. Holaaa y bienvenida al blog!!!
    Que bueno que te animaras a escribir!!!
    Waoo si que es un cambio drástico para este niño!!
    En menos de un mes perder a sus padres!!
    Muy interesante el comienzo!!

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