ESTA VEZ SERE YO Capítulo tres

ESTA VEZ SERE YO

Capítulo  tres

Sofía mientras le preparo la habitación a Adriana, la había invitado a quedarse la chica estaba muy alterada para conducir y ellos tampoco estaban en condiciones para llevarla.

Mark en cuanto cerró la puerta de su habitación se abrazó a Sofía con todas sus fuerzas estaba destruido, como odiaba castigar a su hijo y llevaba dos días castigándolo.

Mark: no puedo Sofí, no puedo vivir así no puedo seguir castigándolo, no sé qué vamos hacer amor.

Sofía: Tranquilo Mark, las cosas saldrán bien ya sabemos por qué Gus estaba tan rebelde ahora podemos manejar la situación, Adriana se comprometió a ayudar a Gustavo a seguir las reglas de la casa, y que cada vez que tenga una fiesta antes de invitarlo hablara primero con nosotros, para evitar que Gus se ponga rebelde e irrespetuoso por querer salir, está claro que eso no solucionara todo, nuestro hijo está creciendo y quiere más libertades y rebelarse a sus intransigentes padres, pero será lo que todo padre debe sufrir de sus hijos adolescentes.

Mark: eso espero Sofí porque tengo el estómago revuelto y creo que vomitare en cualquier momento. Odio ese papel, siempre prometí que no le haría eso a mis hijos y heme aquí ejerciendo ese papel que tanto odie. Dijo dejándose caer en la cama.

Sofía: Pensé que le dirías que Adriana se quedó en casa. Ni siquiera le permitiste que le diera las buenas noches.

Mark: Gustavo está castigado, ya bastante que le permitamos visitas, y la hora de dormir debe mantenerla, mañana lo quiero a las 20:00 acostado y máximo a las 22:00 durmiendo, Gustavo lleva mucho tiempo acostándose tarde y es una guerra levantarlo en las mañanas.

Sofía: Waoo Mark Hoffman, te veo y te oigo y no te reconozco, que serio. Se burló su esposa, dándole un beso en la boca.

Mark: No te rías me duele mucho la guata, creo que me saldrá una úlcera.

Sofía: Ahh cariño, ven que yo te consiento. Y si te pones muy malito resolvemos con un calmante inyectado amor. Dijo sonriendo pues Mark odiaba las inyecciones.

Mark: Ay no Sofía. Dijo agarrando una manta para irse a dormir al sillón. Eres mala conmigo me quieres inyectar y sabes que lo odio.

Sofía: Si sales de este cuarto no solo te voy a inyectar... ¿me oíste? Le dijo invitándolo a la cama con una mirada sexy.

Mark: No inyecciones… pero si me puedes revisar. Dijo metiéndose a la cama, el problema fue que el dolor iba a más y ya no estaba para juegos realmente le dolía, de apoco comenzó a retorcerse de dolor, tratando de hacer memoria lo único extraño que había comido era la tarta que había comido en cuanto llegó Adri para alivianar la tensión. Sofía de verdad me duele. De repente Mark, no aguanto y se levantó para correr al baño a vaciar su estómago y más.

Mark: Me duele Sofía, llévame al hospital. Siempre tan exagerado

Sofía: Deja examinarte amor. ¿Lo único que comiste fue la tarta? ayy Dios nuestra quería nuera creo que quiso deshacernos de nosotros Dijo en son de broma.

Mark después de vaciar su estómago se dejó guiar hasta su cama. Creo que me enveneno mi nuerita. Ay pobre Gus mejor le enseñamos a cocinar.

Cuando Mark llegó a la cama nuevamente devolvió su estómago ya no teniendo más que botar Sofí, se preocupó, porque además estaba muy afiebrado.

Sofía: Amor creo que es mejor inyectarte primperan.

Mark: QUE NO ESTAS LOCA.

Sofía: Mark no te pongas en ese plan, ya botaste la bilis, sabes que es lo mejor, no queremos que te vayas a deshidratar

Mark: No, yo me aguanto. Dijo a la vez que tomaba el basurero para seguir botando bilis

Sofía: Suficiente Mark, te dejas poner el inyectable y no se hable más. Dijo mientras preparaba el mismo. Sinceramente Mark, qué pensarían tus pacientes si te ven en ese plan.

Mark: No que no… Sofía no me hagas eso. Dijo mientras se escapa a gatas a encerrarse en el baño.

Sofía negaba con la cabeza, y cuando trato de abrir la puerta del baño se encontró con que le había pasado llave a la misma.

Mark: no me dejo Sofía, no salgo de aquí hasta que me prometas que no me inyectaras. Le decía mientras se retorcía de dolor.

Sofía: Por Dios Mark Enrique, si no me abres la puerta ya mismo… voy a llamar a Luis, para que tumbe esa puerta y me ayude a poder el inyectable… y tú lo conoces mejor que yo.

Mark: no me importa no voy a salir… Luis no va a venir esta dormido. Le rebatía como un niño.

Sofía: MARK cuento hasta 3 después no te quejes.

Mark: Guarda la inyección, no me la voy a poner, no voy a hacerle caso al Luchito ese.

Sofía suspiró, y le marco a Luis poniendo en speaker para que escuchara todo el relajo armado por su hermanito.

Sofía: Cuña disculpa la hora, pero debo inyectarle un medicamento a tu adorado hermano y se ha encerrado en el baño, como si tuviera 5 años. Y la verdad que estoy preocupada si sigue vomitando puede desmayarse.

Mark: Ayyyyy Sofí me dueleeee.

Luis: Abre la puerta Mark.

Mark: Auaua NOOO ella me quiere clavar esa aguja a traición... deberías estar de mi lado no el de ella… grrrrr

Luis: Mark si tengo que sacarte del baño te voy a dar tres reglazos para dejarte el culo blandito para la inyección.

Mark: Arrr lo que me faltaba… tu hermano soy yo… ya pronto estaré bien, eso no me hace falta.

Luis: eres médico crío malcriado lo que te faltan son unos buenos correazos Mark estoy saliendo para tu casa ya vas a ver si llego y no te has inyectado.

Mark: ¿Luigiii?

Sofía: Ya tranco supongo que viene en camino, para sacarte del baño de una buena vez por todas. Mark por el amor de Dios, SAL YA...

Mark: No Sofíiii para que lo molestaste. Dijo mientras vomitaba.

Sofía: Maaaaark abre cariño, ¿por qué haces todo esto?

Mark: porque que me quieres pinchar y me duele, si Luis me pega será tu culpa. Se sentó en el suelo al lado de la taza del baño.

Luis tomó prestada la moto de su hijo para llegar más rápido a casa de su hermano, y teniendo llave de la misma subió al cuarto de su consentido.

Sofí: no hay caso de sacarlo del baño. Le dijo al verlo entrar a su habitación.

Mark: Andateeeee Luissss Ayyyyyy me dueleeeee Sofí has algo.

Sofía: Pero Mark si hace más de media hora que quiero colocarte esto para que se quite el dolor y dejes de vomitar...grrrrr. Sal ya…

Mark: Pero otra cosa que eso duele mucho, seguro que me quitas un dolor con otro dolor.

Luis: Mark Enrique sal ya mismo o te doy un reglazo por cada año que tienes.

Mark: Luiiiiis, no digas eso que soy un adulto...grrrr.

Luis: Uno.

Mark: Luis no cuentes…

Luis: Dos, Mark sabes que va a pasar al llegar a tres.

Mark: Argrg… ya salgo ya salgo… el colmo vale… Dijo y se tomó un segundo para abrir la puerta.

Luis: A la cama ahora. Dijo dándole una feroz nalgada.

PLAS

Mark: AUAUA Joooooder Luis, ¿quién te crees que eres?

PLAS AHORA. Fue la única respuesta que tuvo.

Sofía: Mark recuéstate ahora. Dijo mientras preparaba otra inyección.

El dolor se estaba volviendo tan insoportable que hizo caso, además que Luis no le quitaba el ojo de encima.

Mark se recostó boca a abajo furioso, y le tiró la mano a Luis para que se la diera mientras lo inyectaba Sofía, Marky seguía siendo un niño cuando habían agujas implicadas.

Sofía le bajó un poco el pantalón y le desinfecto la nalga donde lo inyectaría ZAS una nalgada y la aguja en el trasero de su maridito. Mark al poco rato se durmió enojado, todo había sido muy agotador para él y además Sofí dijo que mañana le repetiría la dosis y Luis le dijo que si tenía que volver lo haría con la regla.

Mark pasó una noche tranquila, pero al despertar el dolor volvió no tan intenso como el de ayer pero sí bastante por lo que se debatía entre hacerse el valiente, pedir la otra dosis o correr a encerrarse en el baño… pero una cosa era clara Mark Enrique Hoffman Boulton estaría de un humor de perros todo el día.

Sofía prefirió atacar a su maridito a traición y aun entre dormido le pelo la nalga y lo inyectó.

Mark: Pero Sofiii coñooo.

Sofí: Coño nada, lo acabo de hacer por tu bien, estas haciéndote el valiente, por voluntad propia no ibas a hacerlo, las gracias es lo que deberías darme.

Mark: Grrrr…

Sofí: jajaja ayy amor deja de rezongar y date un baño para que desayunemos, te prepare algo rico pero liviano mira que no tienes nada en el estómago, recuerda que tenemos visitas.

Mark: Yaa… gracias. Dijo bajito.

Adri tenía rato despierta quería irse de esa casa antes que se levantaran los demás pero la puerta principal estaba bajo llave, y cuando intento buscar otra salida su adorada suegrita, la invitó a la cocina.

Los niños dormirían hasta la hora que quisieran, disfrutarían esos días en familia aunque perdieran unos días de clase, total la familia siempre sería más importante que cualquier otra cosa.

Sofía comenzó a preparar el desayuno con ayuda de Adri, la pobre muchacha no sabía nada de cocina, y se movía torpemente en la misma, sintiendo una verguenza interna.

Sofía: ¿Qué estudias? ¿Porque estas estudiando verdad?

Mientras un Gus, se despertaba con hambre...y con un dolorcito peculiar en su traserito.

Gus: Ouch... la que me he llevado ayer... y de las manos de papá. Auaua… se sobaba y quejaba. Y decidió bajar así mismo, en pijama a quejarse con sus padres, claro la intención era conseguir de estos todos los mimos que fueran posibles, por lo que fue a la cocina y restregándose los ojos

Gus: maaaaa me dueleeee mucho mi culito no me podré sentar en años. Dijo sobándose y echándose a los brazos de su mamá sin notar la presencia de Adriana.  Definitivamente voy a quemar esa regla... mira que es para rayar el papel no mi culito... tan mono que es y papá me lo dejo todo rayado. No, no hay derecho... y dónde está papá que tengo que reclamarle.

Sofía: Ejeeem Se saluda primero mi príncipe, así evitarías algunas penas. Tu papá ya baja a comer, paso mala noche. Le dijo correspondiéndole el abrazo y dándole varios besos en su cabecita, cuando Gus viera que su novia estaba ahí, moriría de la pena.

Adri: Amooor, ¿no que mi suegrito nunca te castigaba de esa forma? Pregunto algo divertida al ver a su novio en ese plan, definitivamente era un niño, al menos para sus padres, y lo otro que comprobó era que los amaba con locura, pues sí tras aquella paliza que al parecer se llevó, estaba en plan de crío caprichoso y consentido.

Gus: gruuuu mamaaaaaaa que pena... y mi papá no creía en esos castigos hasta la escapada con su  auto. Dijo poniendo los ojos en blanco. Mamá que le paso a papá. Dijo preocupado.

Y fue el turno de Adri de ponerse roja de la pena.

Adri: Es que de broma no mato a tu padre, equivoque una esencia cuando estaba preparando la tarta, y a tu padre le ha caído de la patada.

Sofí: No fue tu culpa, hay muchos virus por ahí y nosotros siempre estamos expuestos por nuestra profesión. Se vio muy malito anoche, pero ya le di tratamiento, queda tranquilo hijo, esta por bajar. Y no le reclames nada, que más bien está para mimos.

Gus: LO PINCHASTEEEE mami que papá va estar que muerde todo el día jajajaja. Se rio al menos no sería el único con dolor de poto.

Mark: Gustavo no te rías. Le gruño al llegar. Y Adriana por favor lejos de la cocina… ya le enseñaremos a cocinar a Gus. Dijo en broma y refunfuñando. En eso contesta su celular. No Luis no es necesario… que me deje… si gruuu… que no… Sofía quiere hablar contigo.

Sofía: Hola cuña si… si lo pille desprevenido… si ya está mejor… si tienes razón con un genio que estoy que lo mandó a casa de tus padres. Dijo cerrándole un ojo a su maridito.

Mark: Donde están mis otros hijos. Mark quería mimitos.

Sofí: duermen y que sigan así… ayer fue un día complicado para ellos, Gustavo Adriana siéntense a comer, lo mismo para ti amor. Dijo una vez que ya estaba toda la comida en la mesa.

Gus: Noooo maa que me duele mucho puedo comer de pie.

Mark: no Gus tienes una lesión en tu pie, y no debes estar de pie, así que sentado, que después te cambio las vendas.

Gus: Peroo papi es que realmente me duele. Dijo haciéndole una mueca con la boca y ojitos.

Mark fue a la sala trajo un cojín, y se lo colocó en la silla, y arrimo otra para que fincara el pie. Ya mi corazón, así no te duele. Le dijo besandole la frente.

Mark: Ohh que bien jugo de melón mi favorito. Dijo animado a tomarlo, eso le caiga perfecto para su estomago.

Adri: Realmente… lo siento... se lo juro, que no fue mi intención. Decía roja de pena.

Mark: Son cosas que pasan Adri quien diría que intoxicararias a tu suegrito… será algo para contarle a los nietos… en muchos años más.

Bueno Adri y que nos puedes contar de ti, con Sofía somos médicos, y Gustavito, Alí y Ann están en el colegio.

Adri: yo estoy estudiando medicina acabo de terminar el primer año, perdí uno en la carrera de derecho, mientras me salía el cambio para la carrera que deseaba.

Gus: Como les quedo el ojo. ¿Ahhh? Dijo al mismo tiempo que se metía un bocado de comida a la boca.

Alí, se había despertado con un mal sueño que su papi, se había ido de casa, así que bajo desbocado llamandolo, cosa que hizo que Mark, se parara de la mesa de un brinco, para dar alcance a su pequeño al terminar de bajar las escaleras.

Ali: PAPÁAAAAAAAAAA…. Mamiiii ¿Se fue? Buaaaaaaaaaaa

Mark: que dices mi monstruito, mami te preparo algo rico vamos a comer cosito de papá. Dijo cargándolo, Alí era su pequeño niño grande y aun podía cargarlo sin ofenderlo ni romperse la espalda.

Alí se apretó al cuello de su padre fuerte muy fuerte, pasando su carita en su pecho como un gatico.

Ali: Papi... no te vayas... no lo hagas seremos buenitos todos. ish ihs sollozaba tras aquel mal sueño.

Mark: Y donde me iría yo si mi bella familia está en aquí, mi vida todos mis hijos son siempre buenitos aunque no siempre se porten bien y papi o mami tenga que castigarlos, siempre son y serán lo mejor que nos ha pasado. Dijo llenándolo de besos. Que soñó mi niñito, cuéntale a papi.

Alí: Que nos habíamos portado mal y tú te ibas, cansado de nosotros.

Mark: eso nunca, si se portan mal papi les dará unas palmaditas en el potito, nada más que eso mi bebe. Dijo dándole una nalgadita despacio solo para demostrar su punto.

Alí: Pero tú nunca nos castigas así, siempre es mami. Dijo extrañado ante aquello que le decía su papá. Y es que ni siquiera de amenaza Mark les decía aquello a sus hijos, bueno hasta hace dos días con Gus. Miro serio a su hermano. Gruuu Gustavo estropeaste al papá con tus tonteras… no es justo papi mejor solo le pegas a Gustavo él es el único que se porta mal Ann y yo somos buenitos.

Gus: SIIII sobre todo buenito… mira que no he olvidado que me dañaste mi trabajo de ciencias, a cuenta de que supuestamente necesitabas unas hojas para hacer un dibujo, y ahora debo volver a pasarlo a mano. Grrrr

Alí: Eso fue sin querer… ESTÚPIDO

Mark: Eso no Alí sin insultos ZAS ZAS siéntate a comer antes que te de unas nalgadas a poto pelado.

Alí: Ay Auu papiiii... fue sin querer. Dijo cruzándose de brazos y mirando con ojos de odio a su padre. Y respirando forzosamente.

Mark: fue un accidente estropear el trabajo a tu hermano, no fue un error insultarlo, ahora te relajas bonito mío.

Gus: Ja idiota. Se rio de Alí.

Sofía levantó a  Gus y le dio dos nalgadas. Que dijo tu papá sobre el respeto Gustavo.

Ali: Veess el si es malo. Ya no quiero comer, y que hace esa aquí. Por tu culpa mis papis pelearon nunca lo había hecho… eres un rompe hogares. Y se paró para salir corriendo a su cuarto.

Mark tomó a su hijo en plena huida, lo llevó a la habitación de al lado y le bajó el pantalón de pijama le dio 5 fuertes nalgadas. Más respeto hijito Adri es la novia de tu hermano y la trataras con respeto, porque es una dama, y nadie puede romper nuestro hogar porque nos amamos mi sol hermoso, ahora a vas a disculparte como es debido o te doy unas buenas nalgadas mi niño. Dijo llevándolo de vuelta a la cocina.

Alí se le quedo viendo a Mark como dolió ante lo que acababa de suceder, su papá lo había castigado por culpa de esa mujer y de paso tan severamente, desde su punto de vista. No pudo contener las lágrimas que comenzaron a correr sin emitir ruido como si le hubiese dado la paliza del año. Solo asintió y salió para darles las respectivas disculpas a Adri, casi sin mirarla para luego sentarse a comer en estricto silencio, solo deseaba terminar de comer para irse de ahí.

Gus: Alí perdoname hermanito. A Gus no le gustaba nada ver a su hermanito en esa actitud menos que lo castigaran por su culpa. Yo me porte mal, todo lo que paso ayer fue mi culpa, no de Adri ni de los papás, solo mía.

Alí solo lo miró, y sin decir nada continuó comiendo. ¿Mami, puedo retirarme ya termine?

Sofía: Ve a vestirte mi corazón más tarde iremos a pasear.

Alí: Permiso. Y camino, pero al llegar a las escaleras se escuchó su llanto fuerte y claro, y como corría escaleras arriba.

Mark lo siguió y cargó con dulzura. Te amo mi Alí, te amo mi gatito favorito, que pasa mi sol cuéntale al papá mi vida, papi no puede arreglarlo si no sabe que te ocurre.

Alí: Nada déjame… ya no te quiero… Dijo con sentimiento, como si algo se había roto por dentro, cosa que le dolió a Mark muy adentro.

Mark: No me digas eso mi tesoro, que me duele mi sol hermoso, que hizo el papá para que lo dejaras de querer.

Alí: Me pegaste… a mi también me duele mucho bua buaa. Dejaste de ser especial, ahora eres como cualquier otro papá, que solo le pega a uno. Y yo no hice nada malo solo dije la verdad, nunca habías peleado con mami hasta que llego Adriana, la voy a odiar por siempre y tampoco voy a querer más a Gus, ¿porque tenía que enamorarse de ella? ish ishi... ya no eres mi héroe, ya no quiero ser como tu… bua... bua... déjame… suéltame. Se devanaba por soltarse de los brazos de Mark, aplicando toda la fuerza que tenía. Sin dejar de llorar, las lágrimas corrían sin cesar.

Mark le beso la frente de su hijo y lo abrazo levantándolo del suelo. siempre voy a ser tu papá el que te ama y el que odia hasta las tripas castigarte porque te amo demasiado, porque eres mi hijo lo último que quiero es hacerte llorar y si ahora tengo que tomar un rol más activo en la disciplina familiar es porque no es justo con mami que ella tenga que llevarse sola el mal rato y yo me limite a mimarlos, te amo mucho Alí y lamento haber tenido que castigarte pero mi sol hermoso de papá, estabas siendo insolente con una persona que es muy importante en la vida de tu hermano y todos queremos que Gus sea feliz como queremos que Alí sea feliz, por eso hay que respetar a los demás porque cuando no lo hacemos le causamos un dolor aquí a quienes amamos, y con respecto a la discusión con mami no fue por culpa de nadie, las cosas se salieron un poquito de control pero nadie se iba  a ir porque con mami nos amamos mucho mi sol y papi no sería feliz sin mami y sus tres hijitos, yo te amo mucho Alí espero que vuelvas a querer a papi porque si tú no me quieres yo seré el papá más triste de la historia. Le dijo a Alí con los ojos brillantes. Te amo mi Alí.

Alí: Tienes a Adri que ocupe mi espacio, si quieres hacerme feliz se el de antes, no me gusta el tu nuevo.

Mark: siento si te sientes así, yo solo trato de ser un mejor padre, nadie ocupara tu lugar en mi corazón, eres mi hijo Alí y que triste que solo me quieras mientras hago lo que quieras.

Alí: Y quien dice que ahora eres mejor.

Mark: yo, tu padre… para mí sería más fácil hacerme el loco y continuar dejando que tu madre se encargue de castigarlos, pero hijo ese es mi trabajo tanto como el de tu madre, no entiendo cuál es el problema si igual no quedabas sin castigo.

Alí: Pero no tú… tu nunca me harías daño y lo hiciste.

Mark: no te hice daño Alí te di unas nalgadas por irrespetuoso. Le dijo molestándose un poco. Se había equivocado tanto en educar a sus hijos que lo veían como una especie de títere complace caprichos.

Alí: Pues ya... sigue triste entonces, porque yo ya no más. Dijo lanzándose a su cama a llorar con su almohada.

Mark: te puedes molestar conmigo todo lo que quieras Alí lo entiendo pero hijo no te voy a dejar llorando como lo haces te puede hacer mal. Dijo tomándolo en brazos y meciéndolo. Te amo mucho aunque ahora no lo creas mi sol.

Alí: Quiero a mi mamita, solo quiero a mi mamita... a mi mamita… a mi mamita. Repetía cerrando los ojos fuertemente para no verlo.

Mark: Ya entendí quieres a tu mamá, vamos por ella mi sol. Mark no sabía si echarse a llorar con su hijo o darle una buena nalgada por malcriado.

Alí: Mamiiiii me duele mucho aquí. Le decía enseñándole su corazón. Quedo vacío mami.

Sofía: Que ocurre mi sol, dijo alarmada por los gritos de su hijo. ¿Como que esta vacío mi pequeño Alí?.

Alí: Mi papi salió de mi corazón... estoy tan triste, el ya no me quiere.

A Mark le comenzaron a correr las lágrimas con aquella declaración sintió que su corazón se rompía en mil pedazos.

Mark: yo te amo hijo, pero si sientes que ya no me amas porque te castigue me doy cuenta que he sido una mierda de padre todo este tiempo. Dijo saliendo de la habitación de su hijo, se sentó apoyado en la pared y cerró los ojos.

Sofía: Hijo no vuelvas a decir algo así te haces daño y le haces daño a tu padre, que te ama, y porque te castigue no quiere decir que te ame menos o que tu dejes de amarlo, acaso tú crees que cada vez que los castigue yo no los quería o tu dejabas de quererme, no eres un niño Alí sabes que las palabras hacen daño y tú le hiciste mucho daño a tu padre, que junto a mi es la persona que más te ama en la vida.

Alí: Es que… nunca me había castigado así, y duele duele mucho en mi corazón y todo por ella, ella se robara a mi hermano y nadie parece verlo, a nadie le importa. Lo siento… buaaaaa buaaaaa… yo amo a mi papiii.

Sofía: Adriana no se está robando a tu hermano, ellos se quieren y aunque nos cueste mucho aceptarlo porque a mami le cuesta mucha aceptarlo ella es importante para Gus. Y mi sol yo sé que amas a tu papito por eso vas a ir y se lo dejarás claro, verdad mi campeón.

Alí: y si me dejo de querer por lo que le dije… buaaaa buaaa… me duele la cabeza...muchooooo

Mark: Yo jamás te voy a dejar de querer mi Alirio Enrique Hoffman Halls

Alí: Ni yo papito ish ish.

Mark: ¿a mi bichito le duele la cabecita? dijo meciéndolo con dulzura.

Alí: Sip. Al niño no les salían las palabras quería decir tantas cosas, pero no podía, sentía un nudo en la garganta, solo se limitaba a llorar en silencio y dejarse mimar por su padre, Mark se dio cuenta de aquello y le fue sacando información de a poco.

Mark: te duele mucho la cabeza hijito, dime si o no con la cabecita o con el dedito. Alí frunció el ceño, lo del dedito le pareció muy infantil, así que asintió con la cabeza.

Mark: te duele ¿cómo para una pastilla o para una inyección?

El niño solo hizo un movimiento de hombros, como diciéndole que le daba igual todo, Mark se preocupó, pensando que el dolor de su hijo era muy intenso.

Mark: vamos a mi pieza ya te inyectare algo para que pase el dolor mi niñito. Dijo caminando con él a su dormitorio, después de inyectarlo lo dejaría dormir hasta que se le pasara el malestar.

Alí: papiii

Mark: dime hijito.

Alí: tengo ganas de vomitar, no me siento bien…

Mark: tranquilo mi niñito, dijo llevándolo al baño y ayudándolo a vomitar, sobándole la espalda, una vez listo le lavo la cara y los dientes, siempre tenían cepillos extras en su baño por si los niños necesitaban, luego lo llevó a su cama donde le bajó el pantaloncito de pijama y se dispuso a preparar la inyección de primperan.

Alí: No me pegues papiiii buaaaa… no volveré a decirte que no te amo...te lo juro... buaaaaaaa...

Mark: no mi vida, papi te va a inyectar un medicamento solcito, no más palmadas para mi principito que esta enfermito. Le dijo besándole la nuca.

Tranquilito campeón. Dijo desinfectándole la nalguita.

Alí: cof cof..ish ish me duele mi cabeza… no aguantooo..

Mark: ya va a pasar mi bebe. Dijo inyectando a su hijo. Sofía miraba desde la puerta pensando en el escándalo que había hecho Mark y la tranquilidad de Alí para las inyecciones.

Sofía: Ahora cierra los ojitos Alí. Le dijo mientras le ponía una compresa fría en la frente.

Gus, subió noto que sus padres no volvieron a bajar, y vio la escena.

Gus: Ma ¿que tiene Alí?

Sofía: no se siente bien tal vez tiene lo mismo que tu papá. Claro que Mark no se había quejado de dolor de cabeza, pero tras tanto llorar era natural.

Gus: ¿Alí tú comiste tarta?

Alí movió la cabeza en señal de afirmación, y con sus deditos indicó que un pedacito.

Mark: ve a botar lo que queda por fa Gus… y ve a ver Ann que sigue dormida. Alí sabes si tu hermanita ¿también comió?

Alí: No... Pero le di un poco al perro del vecino. Es que sabía feo, y la tire al jardín de al lado.

Mark trato de mantenerse serio. Chico listo al tirarla pero amor tenemos basureros, las cosas no se tirar donde el vecino… Hay que esperar que al perro no le pase nada o les tocará ir a limpiar el jardín del lado.

Alí: Yo... no guacala, además ese perro siempre molesta al gato de Ann.

Gus: si pa siempre molesta al gato de Ann. Le rogó con las mamitas juntas que no dijeran nada.

Mark: recen para que ese perro no le pase nada. La verdad tampoco le agradaba y por una vez podrían hacerse los locos. Ay permisito… dijo corriendo al baño, y eso que pensaba que se estaba sintiendo mejor. El no saldría más de su lugar seguro.

Sofía: Pues de haber sabido mejor le hubiese dado un pedazo de tarta a Edgardo (el vecino)

Gus: Si mami le puedo decir a Adri que cocine otra. Se acercó a la puerta del baño. ¿Papi estas bien?

Mark: No, es de mis mejores días de eso no hay dudas, pero tranquilo de esta me salvo. Dijo saliendo del baño.

Sofí: Como sigues mi sol, metete a la cama. Y tú mantén a Adriana fuera de la cocina. Le sonrió. Gus puedes ir a ver a Ann y darle desayuno mientras yo cuido a los enfermos.

Gus: Claro mami.

Sofía espero que Gus saliera. Mark parece que estas peor de lo que pensaba, que la dosis te duró la mitad así que media vuelta.

Mark: QUEE Sofii...

Sofía: que te inyectare otra dosis parece que pesas más que antes y la dosis no alcanzó, rapidito siguiendo el ejemplo de Alí. Y ante eso y la mirada fijada de su menor hijo, tuvo que gruñir bajito y voltearse.

Sofía: eso es buen chico. Dijo bajándole el pantalón y desinfectando la nalga. Relaja Mark.

Mark: Estas pidiendo demasiado Sofí.

ZAS AUuuuuuuuu la aguja fue a dar en el culito de Mark.

Sofí: Respira amor. Le estaba poniendo el doble de lo que le había puesto antes para que le durará unas 8 horas y quedaba rezar que se le pasará de aquí a esas horas. Tus hermanos vienen a conocer a nuestra nuerita, así que debes mejorarte amor. Le conversaba para distraerlo.

Alí y Mark en el interín se quedaron dormidos, estaban roncandito.