Thror Tahii te dejo un regalito por aquí

El reto mortal

Eran unas días previos a las festividades navideñas, y cuando la mayoría de las personas en todo el mundo se movían de un lado a otro comprando regalos en atochados centros comerciales, ferias navideñas o donde estimaran conveniente para satisfacer y/o darles un detalle o un gran regalo a un ser querido, en un pequeño pueblo próximo a la capital se encontraban tres amigos tratando de animar a uno de ellos, un par de meses atrás la madre de Joaquín, había fallecido después de un fulminante cáncer y él chico había quedado devastado.

 -¿Te encuentras bien?- Preguntó Eduardo, quien caminaba a la Izquierda de Joaquín al notar la expresión triste de su mejor amigo.

- No se.- Respondió el chico en automático y sin ninguna gota de emoción.

-¿No lo sabes?- Insistió, sabía que Joaquín no hablaba del tema, pero pensaba que si pasaban las penas y tristeza entre dos, está dolería menos.

- Edu, es la primera navidad sin mi mamá.- Respondió tristemente y Sebastián quien estaba a su derecha le dio un abrazo por su espalda y mientras caminaba le pregunto al mismo tiempo

-¿Aun sigues llorando por eso?- Al terminar la pregunta Eduardo le dio un golpe en la nuca.- ¡¡AAAuuuu!!.- Se quejó para luego continuar.- Joaquín, no pienses en eso, es mejor preocupamos por lo sucedera esta tarde.

- ¿Que sucederá esta tarde?- Preguntó Julián quien se había mantenido al margen de la conversación, él chico se encontraba demasiado impresionado por la muerte de la madre de uno de sus amigos, y él era tan apegado a la suya que no sabía que hacer o decir .

 - ¡No me jodas Julián!- Regaño Sebastián de pronto, ofendido por el olvido de este, para luego acercar su dedo a la cabeza de su amigo puntuando cada frase al mismo tiempo que le clavaba el dedo en la sien.- Tenemos 13 años, ¿O ya lo olvidaste?

- No lo olvide...- Aseguró ante el gesto brusco.- Pero aún no nos dices la hora.

- ok, cuatro de la tarde... recuerden llevar ropa adecuada y no peligrosa, ustedes saben a lo que me refiero.- Ordenó mientras corría a su casa.

Sebastián era el mayor de sus hermanos y su padre trabajaba como agricultor, las jornadas eran largas así que él se encargaba de las labores más pesadas al salir del colegio, así que se apresuró para terminar temprano, y asistir pronto a la cita con sus amigo.

Luego que Sebas se despidiera, Eduardo hizo lo mismo motivándolos para que no faltaran. Cuando se quedaron solo Rafael y Joaquín continuaron en silencio hasta que Rafa observó como su amigo se sumía en la tristeza y lloraba en silencio cabizbajo.

- No te pongas así Joaco, de seguro ella está contigo a cada momento - Intentó animarle.   

- Pero no puedo evitar extrañarla tanto - Dijo mientras resbalaba una lágrima por su mejilla derecha. 

- ¿Sabes? Llora si quieres.- Joaquín lo miro desconcertado, sabía que entre todos sus amigos Rafael era el que menos sabía cómo reaccionar con el dolor de otros. 

- ¿Estás seguro? 

- Si, te entiendo... yo también estaría triste si mi mamá estuviera muerta y no pudiera celebrar la navidad conmigo y mi papá - Le dijo Mientras Joaquín se derrumbaba frente a sus ojos, 

Rafael lo acompañó en todo momento sentándose a su lado y mientras su amigo sacaba su dolor, esté lo observaba en silencio y limpiando su rostro cada cierto tiempo, una vez que Joaquín estuvo entero, se levantó y ayudó a Rafael de un tirón por su mano y se dirigieron a casa, los chicos eran vecinos, al llegar se despidieron. 

- Nos veremos más tarde ¿verdad?- Preguntó un asustado Rafael. 

- Si, no podemos hacer nada para evitar esto - Dijo Joaquin e ingreso a su casa 

Rafael se quedó sentado en el frontis unos minutos pensando en cómo podía disculparse con sus amigos, primero pensó en hacerse el enfermo, pero olvidó esa alternativa, los chicos no eran estupidos y desde temprano estuvo con sus amigos y ellos notaron que estaba totalmente sano, Después pensó en invitar a su madre a la ciudad a comprar algunos presentes para navidad e ingreso a la casa, una vez en ella se encontró con su abuela y tia, asi que desecho esa idea ya que con aquellas visitas su madre se negaría a ir, así que una vez que saludo se dirigió a su habitación y busco entre su ropa la más comodo, delgada y ajustada en su clóset. 

Cuando el reloj de la iglesia daba las cuatro de la tarde se encontraban los cuatro amigos junto a otros 10 chicos esperando , una vez en el lugar Bruno quien era el mayor explicó a los participantes frente a las miradas atentas y asustadas de ellos 

- Chicos, mi nombre es Bruno y estoy muy emocionado con la cantidad de participantes para este año, como todos saben "El reto mortal" se trata de desafiar la muerte sobre los rieles del tren, dos años atrás solo uno pasó la prueba y 10 no lo lograron, este año de esos solo dos chicos lo volverán a intentar para probar su valentía y mostrase a todos como unos verdaderos hombres y no unos niños de papi.

Al oir las palabras de Bruno, Rafael sintió curiosidad y miedo, ya que si diez se habían postulado la vez anterior y para este año solo habían regresado dos, pensó que el desafío era demasiado aterrador.

- ¿Listos?- Preguntó Sebastián sacándolo de sus pensamientos; y mientras Joaquín respondía afirmativamente junto a Eduardo, Rafael negó con la cabeza.- Rafa ¿Qué pasa?

- ¡¡No quiero hacer esto!!- Aseguró Aterrado.

- ¿Estás seguro?- Preguntó Eduardo a lo que el chico respondió negándose con su cabeza .- Esta bien, deberás esperar ¡dos años! para intentarlo otra vez.

- No me importa esperar.- Respondió mientras sostenía sus manos para que estas dejaran de temblar, sus amigos al ver su estado de ansiedad no insistieron.

- OK, si no estás seguro no lo hagas... pero serás el encargado de fotografiar el momento del reto, esta cámara es del hermano de Eduardo, recuerda que cuando pase el tren sobre nosotros deberás enfocar bien.

Y así fue como los participantes fueron pasando uno a uno, Eduardo fue el primero del grupo de amigos en esperar el tren, cuando lo tuvo en frente no fue capaz de tirarse sobre los rieles para que este pasara por sobre él, así que saltó al río aterrado y fue rescatado por un bote de los pescadores del lugar.

Sebastián tampoco fue capaz y cuando se encontraba frente al tren salto al rio; el resto de participantes tampoco lo lograron y cuando llegaron al último se toparon con Joaquín.

Una vez que él chico se encontraba en las vías del tren giro y le habló a Rafael quien se encontraba a un costado preparado con la cámara en tierra firme

- ¡Como se demora este tren! - Dijo impaciente y luego de unos minutos vio cómo se acercaba - ¡¡Al fin!! - Aseguró mientras tomaba posición inclinándose y moviendo su cuerpo de un lugar a otro nervioso y asustado a la vez, la adrenalina le recorría por todo su cuerpo y sentía como su corazón latía fuertemente y se subía a su garganta para después llegar a su cabeza mientras el tren se acercaba más, cuando este hacia su característico sonido se lanzó de piquero desapareciendo y al público le dio la impresión que el tren lo había atropellado.

- ¡OH DIOS MIO, MATARON A ESE NIÑO - Grito aterrada una señora, que pasaba por el sector la cual se había detenido minutos antes al ver que había una gran cantidad de jovencitos observando.

Luego de ser atropellado según Joaquín sintió que flotaba, pero no lo sentía corporal, sino más bien su alma, una vez en el cielo recorrió por algunos momento el lugar y encontró a su madre sentada con un hermoso vestido blanco.

- Te extraño tanto mami - Dijo, para luego acercarse y darle un beso en la mejilla.

-Yo también te extraño cariño.- Le dijo feliz mientras le frotaba la espalda y el cabello- ¿y cómo te has portado?- le pregunto, luego de romper el abrazo.

- Muy bien mami - Aseguró sonriente.

- Tú padre cariño no piensa lo mismo, Joaquín mi vida se feliz junto a papá y cuídalo mucho.

Al oír las palabras de su madre él chico abrió los ojos de golpe y sintió como era cogido por el brazo derecho y puesto en pie, la firme mano que lo levantó de pronto comenzó a revisarlo y esté tratando de esquivar comenzó a moverse mientras lograba enfocar el rostro, el sol le daba de frente y le impedía ver de quien se trataba. Cuando logro ver y el sol dejó de segar su mirada, se arrepintió al ver la aterrada mirada de su papá

- ¿Estás bien?- Preguntó Angustiado Alexis.

- Si papá estoy bien... pero cómo, ¿De dónde saliste?... ¿Quién te dijo?

- Sebastián, me contó la estupidez que estuvieron haciendo; ya que luego de que pasara ¡el tren por sobre ti! ... y al ver que no despertaste, me llamó aterrado porque pensaba que estabas muerto ¡HIJO!

- ¡¡ Pinche Traicionero!!- Aseguró entre dientes y observó a su amigo quien le regresó la mirada al mismo tiempo que bajaba la vista.- Estoy bien papá, Sebas solo exagero.- Dijo mientras se sacudía la tierra.- Solo jugábamos y no es nada más que eso.

- Un juego... Hijo, me estás diciendo ¿Que todo esto es por un juego?- Preguntó Alexis mientras señala la ambulancia, bomberos y paramédicos a un costado observándole de una manera no muy feliz.

- Papiiii yo lo sientoooooo.- Comenzó a disculparse  y retroceder al ver la intenciones de Alexis y trató de alejar su trasero, pero su padre fue más rápido cogiéndole y dándoles de palmadas frente a sus amigos y todo el resto.

-PLAF ---- PLAF ----- PLAF

- Papa nooo, ¡Deja que te explique!

- No quiero escuchar nada,  ¡¡Hablaremos en casa!! - Regaño para luego cogerle del brazo y guiándolo para que se disculpara frente a quienes acudieron en su ayuda haciéndoles perder el tiempo.

Una vez que terminaron la ronda de disculpas Alexis, obligó a que los chicos ingresaran al auto y se dirigió a cada casa de los amigos de su hijo explicando a sus padres la travesura de aquel día, Joaquín desde el auto escucho y en algunos casos observo las medidas disciplinarias que cada padre aplicaban con sus respectivos hijo. Derrotado al llegar a la suya se metió rápidamente en ella tratando de escapar de su próximo destino, pero detrás de él entró su padre y sin permitir alguna reacción se quitó el cinturón y comenzaron los fuegos artificiales en su intrépido y valiente traserito.

ZAAAS - ZAAAS -

- Ayayay papá - Lloró desesperado, y quién no... Esos correazos a simple vista se veían que dolían mucho.

ZAAAS - ZAAAS  - ZAAAAS

- No... no papito... para por favor buaaaaa... me dueleeeee AJAAA BUAAAA

ZAAAAAS - ZAAAAAASS

- Nunca vuelvas a hacer una cosa asi...

ZAAAAAS - ZAAAAAASS

¡¡Estuviste a punto de morir!!

ZAAAAAS - ZAAAAAASS

- Buaaaaa ABUELITA ayúdame .....- Rogó a su abuela paterna, quien vivía con ellos desde que su madre se enfermó, está  lo miró con tristeza mientras su papá lo conducía a su habitación.

En ella le quitó la ropa sucia y rota, luego lo metió a la ducha y una vez listo lo intento vestir con pijama, pero Joaquín no se dejaba así que cogió otra vez su cinturón y con solo ese gesto se dejó vestir y conducir a la cama, luego mientras se dormía se abrazó a su padre mientras le contó que cuando estuvo inconsciente visitó a su hablo madre en el cielo.... Definitivamente esta navidad no sería tan mala como él pensaba, había quedado como el único vencedor del reto y eso hacía que su corazón volviera a latir y se sentía más que vivo.

¡Feliz navidad amigo mío! 

Fue una linda sorpresa cuando llego el correo y en él decía que sería tu amiga secreta, sabes que lejos, este año fue el más difícil y también imagino que la navidad será muy distinta,  loca y  extraña que hemos vivido en nuestra vida, pero podemos con esto y con lo que venga!!

Te quiero  mucho y deseo que donde sea que estés y con quien estés, pases un lindo día, besitos, abrazos a la distancia y te envió muchos cariños, tú amiga Tahii.

Pd: Aun estoy leyendo la historia-  regalo que me escribiste esta ¡¡mega maravillosa!! Cuídate mucho por favor!! Te extraño ;)