Mi amiguita Miranda (Feliz Cumpleaños)

Mi amiguita Miranda (Feliz Cumpleaños)

Hace 5 años atrás…                   

Susana ya tenia lista la mesa para que los niños almorzaran, pero faltaba el mas bullicioso de sus niños, y cuando miro a la sala, se percato que no había escuchado los disparates ni las risas normales de Rey, o su “mami tengo hambreeeeee” de siempre.

Susana: Kyle, ¿y tu hermanito Rey?

Kyle: Yo, vi que fue al patio…con la pelota mami.

Susana: ¡Ahh!.. jajaja, nunca para. Murmuro. Mi ángel, puedes llamarlo para almorzar.

Kyle: Si, mami.

Susana: Ray, por favor acerca la sillita de Ricky. Ray: Si, mami.

Susana: Susy ayuda a Rob a sentarse.   Susan: Ven, enano.

Kyle (12 años) Fue buscar a su hermanito, y encontró a Rey (7 años) que estaba sentado en las escaleras del patio, con la cabecita en las rodillas y los brazos cruzados, llorando con mucho sentimiento, seguro le dolía algo porque Rey, no lloraba por tonterías.

Kyle: Rey… que pasa hermanito. ¿Por qué lloras? ¿Qué te duele?

Rey: ¡Nada!…buuuaaa buuaaa… fue sin querer…buuuaa… sin.. Y comenzó a llorar fuerte. Se abrazo de Kyle como si el pudiera solucionar todos los problemas del mundo.

Kyle: ¿Que fue sin querer?  ¿Rey? Comenzó a angustiarse cuando vio que lloraba como trancado, y decidió llamar a su mamá a gritos. MAMAAAA…. MAMIIIII

Susana corrió, y encontró a ese par, Kyle con una mano en el brazo y la otra en la cara de su hermanito, que no dejaba de llorar y que jadeaba muy feo.

Susana: ¿Qué pasó Kyle? ¿Por qué llora Rey, así?

Kyle: No se mami, no me dice.

Susana: ¡Cariño!… respira mi vida… Rey, por favor hijo cálmate, ¿te duele algo?

Rey: Buuuuuaaaaaa Buuaaaaaaaa… ish ish …. Fu….eeee…. sin………. Mamiiiiiiiiiiiiiiiii.

Susana, no entendía nada, pero se preocupo de ver a su príncipe con ese ataque de angustia, así que se sentó en el piso, y lo abrazo fuerte, besándolo tratando de calmarlo a como fuera lugar.

Susana: Kyle, puedes estar pendiente de tus hermanos que coman, por favor… me voy a quedar con Rey. Dijo sin soltar al pequeño, que parecía necesitar todo el amor del mundo en ese momento.

Kyle: ¡Si…mamá!. Respondió casi en automático con un dolor en su corazón al ver a su hermanito en ese estado.

Susana: Ya…pequeño, mami esta aquí… Shhh shhh.. cálmate, mi Rey, shhh shhh.. Cuéntale a mami, que pasa.

El pobre trataba de hablar cuando se medio se calmaba, pero comenzaba a llorar nuevamente al intentar hablar. Así, que Susana comenzó hacerles preguntas para que por lo menos le respondiera con la cabeza si o no.

Susana: ¿Te duele algo? Negó ¿Te hicieron algo alguno de tus hermanos? Negó ¿Paso algo en el Cole? Afirmo ¿Se metieron contigo? Negó ¿Te portaste mal en el Cole? Dudo pero afirmo.. y fue cuando finalmente hablo.

Rey: Fueee sin.. querer.. mami….buuaaaa

Susana: Shhh calma mi amor, si me dices que fue sin querer te creo mi Rey, cuéntame anda. Esas palabras calmaron al niño, Rey, era tremendo eso nadie lo ponía en duda, pero el reconocía sus travesuras, y nunca tenia problemas para decir “fui Yo”. Adicionalmente, Susana sabia que su llanto no era para nada normal.

Rey: Mami..ish ish estábamos jugando en el recreo ish ish tonga.. la maestra no nos deja, así que jugábamos en la parte de atrás… cuando me toco a mi saltar encima… todos caímos al suelo… Miranda… si hizo daño en su pie…buuuuaaaa buuuaaaaa. Se, ish ish la llevo … una ambulancia….buuuaaa…fue mi culpa….buuuaaaa…

Susana: Shh shhh.. Calma pequeño fue sin querer, fue jugando.

Rey: Mami… ella es mi amiguita ish ish yo no quise hacerle daño. La maestra ish ish mando una nota en mi enlace para que vayas.

Susana: ¿Solo me citaron a mi?. Le pregunto limpiándole las lágrimas.

Rey: No… a los 10 que jugábamos.. ish ish.

Susana: ¿Estabas asustado de que mamá o papá se molestaran contigo? Le pregunto preocupada porque su niño lloró muchísimo.

Rey: ¡No! respondió rápidamente. Me siento mal ish ish porque le hice daño a mi amiguita Miranda. Cuando papi, me castigue…… estará… bien.. porque fue.. mi culpa.

Susana: ¡Oye! Si te castigamos, será por desobediente, por jugar algo que no esta permitido, ese juego es muy brusco. Pero no porque le hayas echo algo a Miranda, fue sin querer amor. Fuese diferente, si y le hubieses metido el pie para que se cayera..o la golpearas. ¿Entiendes?  Y Rey, afirmo con la cabeza.

Susana: Ya, mi Rey, vamos a lavarte esa carita, para comer.

Rey: No tengo hambre mami, me voy a mi cuarto, a esperar a papi. Suspiro. Eso requete preocupo a Susana, eso no era más, que culpabilidad con depre.

Susana: Mi Rey, escucha… si te comes todo, después de almorzar llamamos a casa de tu amiguita, para saber como está. Y sí nos permiten la vamos a visitar.

Rey: ¿En serio mami? Y se le ilumino la carita.

Susana: Si, mi amor ¡Vamos!

Tanto Miranda como sus padres, no están molestos con Rey, ni con ninguno de los compañeros, en realidad todos había desobedecido y fue pues, solo mala suerte, que Miranda se desguinzará el tobillo, por el contrario les alegraron la tarde, Rey demostró ser un buen amigo al visitarla preocupado por ella.

La niña se río mucho al ver el simpático globo, que Rey se había empeñado en comprarle, como siempre haciéndola reír, y es que ese pequeño tenia ese efecto.

Al llegar a casa, Edward se encontró el cuaderno de Rey en la mesa de la sala, leyó la nota del incidente, y como era de esperarse se molesto, él que andaba preocupado por su hermano Max, que había huido de la casa de sus padres…. Con esa lectura, pues remato el día, adicionalmente, Nani le dijo que Susana había salido con el niño, dejando a los otros en casa.

El niño se portaba mal en el cole y lo premiaban sacándolo de paseo, el colmo… pensó. En ese momento, Rey, entro a la casa, mientras Susana, se quedo hablando con Iván, por un ruido que escucho en su carro.

Rey: ¡Hola papi!.

Edward: ¿Que significa esto Reynaldo? le dijo muy serio enseñándole el cuaderno. Haciéndole entender que había leído la nota y que no estaba para nada contento.

Rey: Fue un accidente… papi. Mi amiguita Miranda esta bien…sabes..fu..

Edward: UN DESOBEDIENTE eso es lo que eres. Aquí dice que jugaron algo que no esta permitido, y que ahora hay una niña herida. ¿Tu mami te castigo?

Rey: ¡No!. Dijo bajito bajando la cabeza.

Edward: ¡VEN, PARA ACA! Le dijo más que serio, señalando que se parara enfrente de él.

El niño camino despacito, una vez cerca… Edward lo tomo del brazo lo arrastro al sofá, le desabrocho el jean y se los bajo, y lo puso encima de sus rodillas. 

ZAS Ayyy ZAS Ayyy ZAS..auu ZAS…buaaa

Se obedece a la maestra,

ZAS si papiiii ish buuaa. Mañana le pides disculpas a tu compañerita si va al cole.

ZAS Ayyy ZAS…Ay Ya lo hice.. ZAS Auuu.. lo siento buuuaaa.

Susana, entro en ese momento, y vio como Edward, castigaba a su niño, con un semblante de un día difícil, desquitándolo con el enano.

Susana: ¡SUFICIENTE EDWARD! Nuestro niño ya ha sufrido mucho el día de hoy.

Edward, se detuvo iba a discutir con Susana, aun con el niño en su regazo, pero al verla tan molesta, decidió culminar el castigo.

Susana, corrió a donde Rey, a vestirlo y cargarlo.

Susana: Shhh Shh ya mi pequeño…le sobaba la espalda y lo mecía.  

Edward: No, te entiendo Susana.

Susana: Si, me hubieses esperado, preguntado o escuchado el cuento del niño, en vez de solo limitarte a leer la nota. ¡ENTENDIERAS! Comprendo que estés preocupado por Max, pero no los desquites con los niños.

Rey: ¿Qué … le paso ish ish a mi tío Max? Ish ish

Susana: ¡Nada cariño! Nada.. shh shh. Y se lo llevo a su cuarto, el peque se quedo dormido…que día, tan intenso había tenido.

Susana, le contó todo lo vivido con Rey, y Edward se sintió fatal, tenía los nervios de punta, y definitivamente lo había pagado con el enano.

Se acostó a su lado, haciéndole cariñito dormido muy despacio para no despertarlo. Sin embargo a los pocos minutos abrió los ojitos hinchados de tanto llorar.

Rey: ¡Papi! Dijo muy bajito casi… inaudible.

Edward: ¡Si! mi Rey, aquí esta papá…

Rey: Lo.. siento… no sigas enojado conmigo, me duele.

Edward: No cariño… el que lo siente soy yo, debí escucharte.

Rey: Siiii a lo mejor no me doliera tanto mi culito. Suspiro y se sobo.

Vaya… ese comentario golpeo a Edward contra la pared. No puedo dejar de abrazarlo y darle un beso y decirle “Lo siento mi Rey”.

Rey: Te voy a acusar con el abue. Dijo haciendo un puchero encantador.

Edward: Ayyy Dios, soy niño muerto.

Rey: jajaja. ¿El abuelo te castigaría papi? Pregunto abriendo los ojos.

Edward: Uyyyy… me dará una soberana paliza, si sabe que  castigue esa colita, sin escuchar razones. Le dijo haciendo una mueca de dolor, al mismo tiempo que le acariciaba la carita con ternura.

Rey: Ahhh… entonces no le digo nada, porque te quiero mucho…

Edward: y yo, mi peque… yo te amo.