PALABRA EMPEÑADA
Capítulo 5
Bruce apenas durmió un par de
horas, a las seis tenía que estar en las torres Wayne, para una maldita reunión
con las oficinas de Busan y de Kyoto para unificar fuerzas para impulsar un
nuevo proyecto sobre energía térmica que parecía encallado.
Dick se despertó en cuanto
escuchó el automóvil de su padre salir por la puerta del garaje. Quería ir a
ese baile, y necesitaba el permiso de su padre así que debía ganar puntos.
Había decidido que en esa semana se iba a comportar como el hijo que Bruce
siempre soñó tener, o lo que Dick pensaba que Bruce entendía como el hijo
perfecto. Aunque Bruce estaba convencido que ya tenía al hijo perfecto, a los
hijos perfectos en realidad
Dick estuvo charlando por
whatsapp con su amigo Wally, increíblemente (o por descuido) Bruce, pese a
todo, no le había privado de ese privilegio; aunque claro, no era lo mismo unos
whatsapps que reunirse en persona y disfrutar, pero al menos, ese telefonito lo
mantenía comunicado con el resto del mundo, así que no podía quejarse, pero aun
así para justificar su ausencia de aquella tarde, tuvo que inventarse una gran
excusa, así que le explicó rápidamente que no se encontraba muy bien y que ese
sábado no iba a poder quedar con ellos… que la próxima sería… rogando que así
fuese, porque no ir dos sábados seguidos eso sí que sería sospechoso; así
que, aun cuando no le gustaba Dick tuvo que mentir, no le quedaba otra, tenía
15 años y era muy humillante decir que su padre lo había castigado. Ya ni
mencionar lo que vino después de castigarlo.
Wally intentó convencerlo para
que fuera, pero Dick dijo que realmente se encontraba mal con algún tipo de
gripe intestinal. Eso lo había aprendido de Bruce, cuando Bruce quería
ausentarse de algún compromiso social porque tenía trabajo que hacer como
Batman, solía decir o que estaba de resaca (en este caso no hubiera colado) o
que tenía una gripe intestinal, con eso Wally pareció darse por vencido, y le
aseguró que haría prevalecer sus intereses en la reunión que aquella tarde para
acabar de cerrar algunos detalles del baile. Cuando Wally decía “cerrar
detalles” Dick temblaba; Wally era buen chico, pero era un juerguista de
cuidado, y que su tío fuera a Barry Allen, no decía mucho de él. Barry era
igual o peor que Wally, y no era opinión de Dick, también era la opinión de la
tía de Wally, Iris.
Y con eso de la fiesta en mente y
de cerrar detalles, Dick estaba decidido iba a portarse mejor que nunca, esa
fiesta iba a ser un bombazo, y era el primer año que podrían asistir, ya tenía
15 años, ya era de las ligas mayores. Y por nada del mundo iba a quedarse en
casita en pijama bebiendo lechecita calentita con galletitas horneadas por
Alfred (por mucho que adorara dichas galletitas). Tenía que hacer algo, algo
por su situación, sino estaría muerto (socialmente hablando). Ya era demasiado
pesado tener que estar aguantando todos los días, en el cole, la burla de sus
amigos, y no tan amigos, sobre lo brillante y osado que era Jason.
Pero haría las cosas bien,
legalmente, para poder salir con la frente en alto y por la puerta principal.
Sí, señor. Él era Richard John Grayson Wayne y así era él. Y con ese
pensamiento se fue a la biblioteca…
Por otra parte, la reunión en la
oficina se alargó más de lo que Bruce se esperaba, eran casi las doce cuando
entraba por la puerta de la Mansión, nada más verlo entrar Tim saltó sobre él
como si saltara sobre un colchón de plumas. Bruce sonrió feliz, esa felicidad
era doble para él, porque Tim siempre lo recibía como había visto recibir a
Jason en el orfanato. Con verdadero amor en la mirada… si, Tim aún era una niño
inocente y risueño, sin una pizca del maldad dentro suyo. Pero ahora su apuro
por “el abrazo de papá” era para otro…
- PAPÁ,
papá. Sálvame, papá. Protégeme. JASON QUIERE PELARME – chilló en
pánico Tim y justo en ese momento Jason apareció con las tijeras en la mano.
- ¡JASON!
– le chilló enfadado al ver que estaba corriendo con unas tijeras
grandes en la mano.
- ¡OH,
VAAA! – Jason manifestó su descontento al ver a Tim fuera de su
alcance – no pasa nada es solo un juego – le contestó a
su padre olvidándose por un minuto a quien hablaba – solo era una
broma, no iba a pelar al enano jajaja, ya sabes, cosas de hermanos – dijo
poniendo su mejora cara, la más adorable y camino despreocupadamente hacía su
padre y Tim. Pero en cuanto estuvo al alcance de su padre, éste le arrebató las
tijeras de un jalón. Bruce dejó con cuidado a Tim en el suelo, se guardó las
tijeras en el bolsillo de su americana y agarró a Jason por la oreja. Se la
retorció a base de bien, antes de soltar su mano de pleno en su trasero –
PLASS – un solo azote fue necesario, para que Jason diera un bote y
aullara
- Auuuuu,
SOLO ERA BROMA… Pero que amargado que eres, bien parece que nunca jugaste con
nadie – se sobó primero la oreja y luego el trasero. Decidiendo que
éste merecía especial atención
- No
me gustan ese tipo de bromas Jason – ahí estaba la mirada tenebrosa
del caballero oscuro, pero ni eso asustaba a Jason – y tienes 12 años,
no debería de decirte lo peligroso que es correr con unas tijeras en las manos.
- ¡OH!
VENGA – le dio un leve codazo de compadreo a su padre – no soy
un bebé, no iba a caerme y clavármelas… AHHH – hizo una mueca
simulando estar herido y quejumbroso – Anda, que seas paran… paraaan…– decía
sin poder acordarse de la frase – ¿Cómo me dijo Dick que era? – se
preguntó a sí mismo, sacando un pedazo de papel del bolsillo, y leyéndolo en
voz alta – pa ra noi co… si eso es, PA RA NOI CO – protestó
Jason indignado, sin siquiera bajar la voz con el último comentario. Jason era
temerario hasta la pared del frente.
- Eso
no lo sabes, los accidentes ocurren constantemente, si quieres te muestro la
estadística de…
- Ves,
no digo, paranoico – volvió a repetir y su padre esta vez si que
respondió a la provocación
- Plaf
¡Basta, Jason! – y un nuevo azote se sumó a su trasero, parecía que
cierto niñito estaba buscando una canasta de palmadas
- Pero
es queee
- Plaf…
HE DICHO QUE BASTA, JASON – Bruce tuvo que elevar la voz para que
Jason tomase la debida atención – ¿No sabes hacer caso, hijo?
Estás siendo muy impertinente con tus respuestas – y Jason cerró la
boca, porque ya iba a decir algo inadecuado – YO no soy uno de tus
amiguitos para que me respondas de esas maneras – recalcó su padre
- Ya
hombre YA! tu ganas, no correré nunca más, pero deja el sermoncito y esas
aburridas estadísticas en paz – dijo Jason, resoplando con fastidio.
Pero que fastidioso podía llegar a ser Bruce cuando se lo proponía.
- Charlie,
dice que no se debe correr con objetos punzantes o cortantes – dijo
Timmy resabido. Charlie era el profesor de Tim y era de los pocos profesores
que preferían que sus alumnos lo tutearan y lo llamasen por su nombre, y solo
por eso ya era guay.
- Oh,
no ¿Ya vas a empezar de nuevo? – Jason se pellizcó el puente de la
nariz, como hacía su padre cuando le entraba dolor de cabeza porque estaban
siendo muy pesaditos, pero ahora por el fastidio ante el comentario de su
hermano – Deja ya lo que dice Charlie, me cargas. ¿Porque no te vas tú
y tu novio “Charlie” a las Bahamas y nos dejan a los demás tranquilos? – dijo
Jason molesto, porque no solo se había comido la estúpida reprimenda de Bruce,
que encima tenía que escuchar al enano reñirle.
- ¡JASON!
– reprendió de nuevo Bruce, que no se podía creer que ese muchachito
sea tan descarado
- ¿QUEEÉ?
– le contestó de igual manera
- Discúlpate
con tu hermano ahora mismo – le exigió Bruce, clavándole la mirada,
tratando de ignorar el hecho de que Jason acababa de gritarle
- Eres
un bruto, Jason – Le dijo, enfadado, Tim, enseñándole la
lengua – Además Charlie es un chico, y yo también, y los
chicos no pueden ser novios
- Jajajajasi
que pueden – Jason empezó a reírse como un loco, cosa que hizo enfadar
aún más a Tim.
- No,
no pueden – Le gritó rojo de rabia.
- Si,
bobo, que si pueden. Se llaman maricas y – Jason estaba a punto de
escandalizar a su hermanito de 10 años con los pocos detalles que sabía sobre
el sexo entre hombres cuando Bruce rugió su nombre.
- ¡JASON
PETER TODD WAYNE! – ahí iba el nombre completito, Jason
instintivamente tragó saliva y dio un paso atrás. Lo hizo mucho antes de darse
cuenta de porque le estaba amonestando su padre. Vale, decir la palabrea
“marica” a Tim delante de Bruce había sido una pésima idea. Pero es que no fue
una idea, simplemente se le escapó – ¡Ve a tu habitación, ya! Ahora
subo yo. Y Jason, cuando suba, te quiero mirando a una esquina.
- Pero
papá... – empezó a protestar Jason super indignado
- Jason
no me hagas repetírtelo porque puede que te lleves algo más que una enjabonada
– Jason se relajó, su padre acaba de decirle que solo seria eso, un
poco de jabón en la boca… no era gran cosa
- OYEEE,
QUE AMARGADO – sí, efectivamente, Jason ya por eso, se ganó dos
palmadas más en el trasero allí mismo en ese mismo instante – Jooooo
porque estés enfadado con el famoso chico de oro, no la pagues conmigo, no fue
para tanto, fue un accidente, solo se me escapó – Jason le plantó cara
a su padre – como si tú nunca hubieras dicho algo por accidente. ¿Qué
pasa? ¿Acaso no sabes lo que significa la palabra accidente? ¡Jooooo! A
cualquiera le puede pasar – refunfuñó. Olvidando, por completo, que
nunca había ganado una confrontación con Bruce. y sobre todo, olvidando que
siempre que le había plantado cara a Bruce, Bruce había acabado plantándole la
mano en su trasero – ¡No es para tanto, JODER! – no más jooos,
ahí salió el “joder” en su pleno esplendor. Y con ese JODER Jason sentenciaba a
muerte a su trasero. Tim abrió mucho los ojos y se tapó la boca con ambas
manos, como si la palabrota hubiera salido de su propia boca. Bruce dejó con
cuidado en el suelo a Tim y de dos largas zancadas se puso frente a frente con
Jason. Jason, ahora si asustado, cerró los ojos. Segundo más tarde, al
comprobar que su padre no le había arrancado la cabeza y se la había dado a
comer a los caimanes, volvió a abrirlos tímidamente. Bruce se inclinó un poco,
lo justo para decirle algo al oído. Lo que le dijera el cruzado enmascarado a
Jason jamás lo sabremos, pero sea lo que fuese hizo que el chico corriera a su
habitación y plantara su naricita en la primera esquina que encontró, como si
la vida el fuera en ello.
- ¿Está
en un buen lío, verdad? – le preguntó Tim asustado, que estaba seguro
que se hubiera orinado encima si esa mirada hubiera sido para él.
- Sí,
ese hermano tuyo, no aprende. Cuando se dará cuenta que esa boca suya firma
cheques que su trasero no puede pagar – Tim sonrió al oír a su padre
decir trasero, pero disimuló por si era verdad lo que dijo Jason que papá
estaba de malhumor porque Dick ya no era bueno – hablando de hermanos
¿y Dick?
- Con
Alfred, en la biblioteca, lleva toooooda la mañana ahí – dijo Tim para
que viera que Dick volvía a ser bueno.
- ¿Toda
la mañana? ¡Vaya! – respondió realmente sorprendido – Vamos a
ver a tu hermano. Si lleva toda la mañana, como dices, bien se ha ganado un
descanso. A ver si me ayudas a convencerlo de que se dé un chapuzón en la
piscina – y le regaló un guiño de complicidad que fue recibido con
mucha alegría
- Siiiiiii
– gritó casi en éxtasi, porque si Dick iba a la piscina él también
podía ir. Tim tenía prohibido ir a la piscina solo una gran injusticia, porque
tanto Jason como Dick si que podían. Y él solo era dos años más pequeño que
Jason. Tim salió corriendo hacía la biblioteca al grito de – DICK DICK
DICK DICK DICK DICK – irrumpiendo con todo, porque eso fue lo que
hizo, en la biblioteca saltando sobre el cuello de Dick, abrazándolo
fuertemente. Si no fuera porque había anunciado su entrada a bombo y platillo
aquello habría dado un susto de muerte a su hermano – Venga, Dick,
ponte el bañador, papá dice que te tienes que bañar en la piscina conmigo
- ¿Qué?
– dijo sin entender ni una palabra de lo que le niño farfullaba –
cálmate Tim, no te entiendo, habla más despacio y vocaliza. ¿Qué has dicho de
papá? – Tim respiró hondo un par de veces pero las ansias le podían y
volvió a repetir igual de rápido y atropellado que antes
- Que
te pongas el bañador, que papá dice que te tienes que bañar en la piscina
conmigo – dijo tirando de él para que se levantara de la silla.
- Tim,
ya te dije antes, estoy ocupado, estudiando, ya nos bañaremos a la tarde.
- A
la tarde no, que siempre arruinan con el rollo ese de la digestión – dijo
cruzándose de brazos y poniendo morros – Además papá ha dicho AHORA, y
está enfadado contigo así que mejor…
- Ejem
ejem – se aclaró la garganta Bruce para indicarle a sus hijos que
estaba allí mismo – Timmy yo no estoy enfadado con tu hermano, tu
hermano y yo ya hablamos y dejamos las cosas claras – Timmy miró a su
hermano mayor con cara de “sé que papá dice dejar las cosas claras pero se
refiere a que te dejó el trasero más rojo que un tomate”. Dick se sonrojó un
poco – ¿Qué estudias, Dick? – le preguntó mientras cerraba el
libro que estaba estudiando Dick, para leer el título de la cubierta, era
biología
- Bio
– contestó tímidamente, aunque su padre acababa de decir que no estaba
enfadado con él, sabía que tampoco es que ahora estuviera dando saltos de
alegría con él – el jueves que viene probablemente pondrán un examen.
- ¿Probablemente? –
Bruce preguntó intrigado.
- Sí,
el profesor Sans suele poner un examen dos días después de acabar el temario, y
calculó que lo habremos acabado el martes, por lo que el jueves toca examen – dijo
Dick dejando claro su actitudes detectivescas.
- Me
alegra que tomes tus previsiones – sonrió ante la actitud de su hijo –
Tim me ha dicho que llevas aquí encerrado toda la mañana – le comento
cogiendo sus hombros – Dick sabes que solo te he castigado sin salir, y
como ya has hecho esos dos trabajos, no es necesario que te pases el día
encerrado estudiando ¿verdad?
- Lo
sé, papá. Pero llevabas razón, he abandonado un poquito, mis estudios – y
sin querer Bruce inconscientemente elevó una ceja por lo que Dick se apresuro
en agregar – no es que vaya a bajar mis notas o algo por el estilo…
pero sí que hace tiempo que no investigó más allá de las explicaciones que nos
dan los profesores en clase y…
- ¡Empollón!
– dijo Tim disimulando como si estuviera tosiendo.
- Tim
¿Quieres acompañar a Jason o quieres ir a tomar ese baño? – le dijo
muy serio Bruce, que había oído a la perfección lo de “empollón”. Tim negó
efusivamente con la cabeza.
- Lo
siento, Dick – se apuró a decir por si acaso su padre consideraba aún
lo mandarlo a la esquina
- No
pasa nada, enano.
- Riiiichard–
como pretendía que el niño no le llamara nombres si él mismo le llamaba enano.
Pero que Dick sonriera con picardía, le hizo sonreír y olvidarlo todo –
¿Cuánto rato llevas con eso? – pregunto cogiendo el libro de biología
- No
lo sé papá, no miré el reloj, supongo que un rato
- Des
de las ocho – intervino Alfred que estaba colocando unos nuevos libros
en unos estantes arriba de todo de la biblioteca, los tres miraron hacia arriba,
se habían olvidado por completo que Alfred también estaba allí –
señorito Grayson, su padre lleva razón, es hora que se tome un descanso, y nada
mejor que un poco de natación para relajar los músculos y la mente ¿no cree? – le
sonrió des de donde estaba
- Ya
has oído a Alfred – dijo Tim tirando de él – a ponerte el
bañador – Dick se dio por vencido, no iba a ganar esa batalla aunque
quisiera
- ¿Tú
no vienes? – le preguntó Dick a Bruce al verlo abrir la puerta para
salir
- En
cuanto tenga unas palabritas con tu hermano Jason, vayan yendo – les
instó, mientras Dick miraba a su padre con la interrogante en la mirada
- ¿Unas
palabritas? – frunció el ceño – ¿Qué ha hecho ahora? – preguntó
Dick alzando una ceja como hacía Bruce
- Dijo
la palabra que empieza con J – dijo Tim antes que su padre pudiera
decirle que eso no era asunto suyo
- ¿La
palabra con J? – Dick miró con cara de no entender nada. La palabra
con “P” era Puta. Pero la palabra con Jota, esa si que no sabía. Bruce
aprovechando que Tim estaba cotilleando la libreta de Dick, movió los labios
haciéndole saber cuál era la palabra con J – Uffffff – Y Dick
puso una mueca de dolor, Jason estaba muy muerto si había dicho “joder” delante
de su padre y Tim. Y si por algún momento Bruce, Dick e incluso Alfred,
pensaron que Tim estaba en otra, les dio un revés en plena cara.
- Si,
una pena… por eso ahora papá le calentará el trasero, bajándole la ropa como te
la bajo a ti, ayer noche – y se salió saltando como si nada de la
biblioteca totalmente inocente de lo que acababa de hacer. Dick estaba muerto
de vergüenza, mortificado en realidad, su peor pesadilla acababa de hacerse
realidad. Sus hermanos sabían que papá todavía lo castiga… no, no, no,
corrección, que sabían CÓMO lo castiga AÚN papá: ¡IGUAL QUE A ELLOS!, COMO A UN
MOCOSO…e hizo lo que cualquier muchacho de su edad haría en su lugar… huir. Sin
importarle nada, ni su padre, ni Alfred (A quienes la sorpresa también los
golpeó) corrió escaleras arriba. Y por primera vez en su vida, hizo algo que
nunca antes hizo, tirar la puerta con todas sus fuerzas retumbando hasta la
ventanas. Bruce no podía decir que él no hubiera hecho lo mismo de estar en su
lugar.
- DICK,
ESPERA – gritó Bruce, tratando de calmarlo, sin poder ni cogerle la
mano, por la forma tempestiva en que salió de la biblioteca, casi podría jurar
que los ojos se le nublaron. Bruce le entendía, tenía 15 años, a esa edad la
imagen lo es todo., sobre todo ahora que tenía el titulo de hermano MAYOR – ¿Alfred? – murmuró
pidiendo un poco de auxilio – ¿Cómo se enteraron? – preguntó y
Alfred tuvo que contarle lo que paso
- Verá,
Señorito Bruce – ¿No podía simplemente tutearlo en una situación tan
delicada como esta?, se preguntó Bruce, es que a veces Alfred llegaba al
desespero con sus modos parcos – ayer cuando usted ejecutaba el castigo
– jooo, dicho así parecía que estuviera hablando de sacar la cabeza a
alguien, pensó Bruce – el señorito Jason y el señorito Tim estuvieron
espiando por la puerta al señorito Grayson, puesto que al parecer usted olvidó
cerrar – Por Dios y ahora era su culpa. Alfred al ver el
conflicto en el rostro de Bruce simplemente le aconsejó – sería mejor
que vaya a hablar con el señorito Grayson, no es conveniente que se haga un
mundo en la cabeza por nada – claro la vergüenza no era suya, pero
Bruce no tuvo tiempo de hacer nada… Jason lo sacó de sus ensoñaciones
- PAPAAAAAAAAAAAA,
YA ESTOY ABURRIDO DE MIRAR LA PARED…
Me encanto continuala pronto por favor.
ResponderBorrarCada vez se superan, muero con estos chicos adoro a Tim, Jason es tan buen personaje que se pueden escribir libros con todas sus ocurrencias y si a eso le agregamos a Dick, hay diversión para mucho tiempo, pero no sean malas con Dick
ResponderBorrarOh pobre Dick!!
ResponderBorrarYa tiene el permiso ganado para la fiesta no??
Jajaja y el otro no lo dejen en el rincón que se aburre!!