Los años no calman el dolor el amor de un hijo si…

Capítulo treinta y cuarto

Los años no calman el dolor el amor de un hijo si…

Sean se despertó en la mañana más triste de lo normal, le costaba tanto ser feliz sobre todo en esos días. .. Pero tenía que ser fuerte, su tigrecito se lo merecía... aun le dolía recordar cuando se pequeño con sólo tres añitos le había dicho que ese día era un día malo y que había que borrarlo del calendario... y él al preguntarle porque su minimi le había dicho tú siempre tiste... vamos a ver a mamá y tú lloras... y mi no guta que llore.

Esas palabras le calaron profundo a Sean que se propuso hacer del 16 de noviembre un día especial... hoy no habría tristeza… Su pequeño no crecería a la sombra de un fatídico cumpleaños... el nacimiento de su bebe era motivo de celebración no de la más profunda tristeza.

Así que ese día se levantó temprano hizo de tripas corazón… él era un padre debía hacerlo, lloro unas lágrimas por el amor de su vida que le fue arrebatado de la peor manera luego recordó el nacimiento de su hijo y se obligó a sonreír como no hacerlo con su tigrecito… cuando estuvo seguro que no habrían más lagrimas  fue a despertar a su príncipe.

Lo que no se esperaba era que su hijo estuviera de malas... quien podía estar de mañas en su cumpleaños…. Lo que Sean no sabía era que su Tivi se había enterado la noche anterior que su mamita había muerto ese día... no entendió mucho… pues sus cuatro opas hablaban bajito para que ni él ni su papito los escucharán…
Ahora el musito entendía todo… por qué su papito solía estar tan triste... porque le costaba tanto sonreír y porque esa sonrisa jamás llegaba a sus ojos… su padre vivía tristes y el también… ahora sabía porque él era distinto a los otros niños del jardín… y decidió que este y todos los días de su vida el seria miserable, él no merecía ser feliz… no si su papito no podía serlo… por eso no entendió nada cuando vio a su papá entrar sonriendo y saltando de alegría… acaso su papito ya no quería más a su mamita.  Eso lo enfado mucho... no le dio su besito de buenos días y agarro su mantita de Tiger, pues no se separaba de ella, y se fue a la pieza de sus opas, dejando a un joven padre con la boca abierta.

Sus opas no estaban en casa pues estaban afinado los últimos  detalles de la mega fiesta… el cumpleaños de su nietecito merecía la mejor producción, ellos no permitirían que su tigrecito pasara otro cumpleaños sentado frente a un tumba silenciosa donde solo se escuchaban los sollozos de su hijo… lo permitieron por tres años… pero Steve ya comenzaba a darse cuenta y no eran esos los recuerdos que querían para su nieto...

Pero Steve no sabía eso y por primera vez en su vida se sintió abandonado por los suyos y huyo de casa... claro está que a la casa de su princesita... donde llego llorando a mares y le confesó a su Kathya que su papito se había olvidado de mamá y por eso ya no estaba triste y se él moría su papi lo iba a cambiar por otro Tivi como cuando se le rompió su Tiger… y su papá le regalo otro Tiger igual y a su Tigercito lo había querido botar a la basura… le contaba a la K… puedes creerlo le decía… quería botarlo como si a Tiger no le doliera su corazoncito de felpa… y su papito haría lo mismo con él y él no quería que eso pasara... lloraba con tanta amargura que llegaba a ser pecado que el angelito llorara así cuando debía estar celebrando sus 4 añitos de vida.

Lo que Tivicito no sabía era que su papito que había escuchado todo y que por sus mejillas corrían las mismas lagrimas que las del bebito lo tomo con fuerza pero con mucho cuidado y lo envolvió en un cálido y desesperado abrazo, pues a padre e hijo se les iba la vida en ese abrazo...

“Eso jamás mi vidita....” le dijo su padre. “Te preguntas porque no estoy triste.”

“si… tu siempe tiste”

“lo sé y lo siento hijito… pero ya no más porque hoy es un día feliz, un día como hay hace 4 años nació el amor de mi vida.”
Tivi no necesito más y sonrió abrazando y llenado de besos a su padre...

“amo papito” le sonrió por primera vez en el día.

“yo más mi minimi” pero Sean agrego un pequeño detallito antes que su hijito pensara que estaba todo arreglado “jovencito usted sabe que  nunca se huye de casa” dijo dándole 4 fuertes azotitos

“buaaaaaaaaa pegaste papito… pegaste feo”

“eso es para que mi tigrecito no se vuelva a escapar”

“tigecito estaba triste po tu culpa”

“Seguro” le hizo cosquillas en la guata

“jajaja” se rio “seguo” repito

“bueno entonces el papito te tendrá que llevar en bracitos para que no te duela la colita”

“papito… vamo a ve a mi mamita”

“claro mi sol” le dijo feliz.

Sean paso por una tienda y compro todo lo que necesitaban una torita de cumpleaños y  unas cajitas de leche… y se fueron a celebrar con la mamita del tigrecito… no quisieron ir a la fiesta… porque quisieron pasar el día como la familia que eran... nadie podía decirle si tenían que estar felices o tristes ellos solo sabían que debían estar juntos…

 

Esa era la única manera de que ambos tuvieran una sonrisa en el rostro.

Tivi mi príncipe… te amo más de lo que crees, eres parte de mi vida y solo te pido que me acompañes el resto de mi vida… eres mi muso mi inspiración y sabes que yo jamás dejaría de hablarte porque no tengas deseos de soplarle ideas locas a mis dedos como dice la mal hablada de Tahii ¬¬ mi bello loquillo vuela libre que el cielo es el límite.